SIGNOS DE PUNTUACIÓN: SEÑALES DE TRÁNSITO DEL DISCURSO

Transcripción

1 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DEL ZULIA FACULTAD EXPERIMENTAL DE CIENCIAS DEPARTAMENTO DE CIENCIAS HUMANAS SIGNOS DE PUNTUACIÓN: SEÑALES DE TRÁNSITO DEL DISCURSO Prof. Alexander Mosquera Maracaibo, Junio de 2005

2 SIGNOS DE PUNTUACIÓN: SEÑALES DE TRÁNSITO DEL DISCURSO Los signos de puntuación representan una especie de señales de tránsito, que le indican al lector cómo debe realizar el recorrido a través de algún texto determinado. Semejante función también debe ser tomada en cuenta por el autor de ese escrito, ya que la puntuación le ayudará a darle cohesión y coherencia a su discurso, de manera que éste pueda ser fácilmente comprendido por el receptor del mismo. Entre esos signos figuran principalmente el punto (seguido, aparte y final), el punto y coma, la coma, los dos puntos y los puntos suspensivos (que son sólo tres seguidos y no más de esta cantidad, como suelen utilizarlos muchas personas, con la errada idea de que así le están imprimiendo mayor suspenso a lo que dicen). En cuanto al punto, en líneas generales indica una pausa mayor dentro del texto escrito, en el cual puede desempeñar la función de punto y seguido, punto y aparte, y punto final. Cuando aparece como punto y seguido, significa que la idea del párrafo todavía no ha terminado, aunque sí la de la oración en cuestión. Pero si es un punto y aparte, entonces sí quiere decir que se ha completado la idea de dicho párrafo, en tanto que el punto final -como lo deja ver su nombre- señala la conclusión del texto escrito. Por su parte, el punto y coma encierra una pausa más moderada que la mencionada anteriormente y su función consiste en separar aquellas proposiciones que llevan frases explicativas entre comas. Por ejemplo: El señor Jiménez, quien ha tenido un día agotador, está descansando; por ende, la reunión con usted ha sido suspendida hasta mañana. El punto y coma también se utiliza para separar oraciones que tienen un predicado compuesto muy extenso o cuando están presentes otras oraciones o 2

3 cláusulas subordinadas: El estudiante de la universidad sabía la respuesta; pero, como quería ayudar al del tecnológico, prefirió quedarse callado. Respecto a la coma, indica una pausa aún más breve que la anterior y su papel es separar elementos de la oración que desempeñan similar función sintáctica (Un carro azul, una motocicleta roja, un tranvía de colores, se distinguían fácilmente desde el puente dorado). Igualmente, señala interrupciones momentáneas del discurso, para introducir elementos aclaratorios o explicaciones y acotaciones (La canción, que estaba llena de mucho sentimiento, conquistó a la audiencia). Otra función es delimitar los vocativos; es decir, aquellas palabras que sirven para invocar, llamar o nombrar a una persona o cosa personificada: Preste atención, bachiller; Miren, compañeros, esa enorme ballena!; Buenas tardes, Julia; Amigo mío, estás en un error. Aparte de eso, la coma señala la ausencia de un verbo dentro de una proposición: En la calle, los gritos de los buhoneros (por no decir: En la calle se escuchaban los gritos de los buhoneros). Por otro lado, se emplea cuando se rompe el orden sintáctico normal de una oración (En Venezuela, los flamencos cuentan con protección, en vez de la estructura regular Los flamencos cuentan con protección en Venezuela); para indicar construcciones distributivas (Algunos lo escucharon, otros le dieron la espalda) y si hay conjunciones adversativas e ilativas (Adriano corrió velozmente para anotar el gol, pero Casillas ya había atrapado el balón; Pienso, luego existo). Cuando de los dos puntos se trata, estos significan que el lector debe hacer una pausa mayor que la del punto y coma. Ellos ayudan a desenvolver o resumir algo ya dicho (En su álbum tenía barajitas de puros jugadores grandes ligas: Vizquel, Galarraga, Guillén, Cairo, etc.) o, simplemente, señalan que lo que viene a continuación es resultado de lo expuesto con anterioridad (No temas nunca hablar en público: a final de cuentas, terminarás disfrutándolo). 3

4 Se utilizan también cuando en el escrito se introduce una cita textual (Sócrates acostumbraba a decir: conócete a ti mismo ) y después del encabezamiento de una carta o discurso. Por ejemplo: Estimado profesor: Tengo el agrado de dirigirme a usted para invitarle... Por su parte, los puntos suspensivos (que, es preciso insistir, son sólo tres puntos seguidos) indican la interrupción de un discurso, bien sea por vacilación, porque se desea sorprender con lo que continuará o para dar por entendido lo que viene luego. Colocados entre paréntesis o corchetes, los puntos suspensivos notifican que en una cita textual se ha suprimido algún pasaje. SIGNOS DE PUNTUACIÓN AUXILIARES Si bien los hasta ahora mencionados son los principales signos de puntuación, existen otros que sirven como auxiliares en esto de orientar y darle cohesión y coherencia a un discurso. Entre ellos figuran: Los paréntesis ( ), que sirven para intercalar frases en una oración, que no tienen relación gramatical con esta; cuando se desea agregar algún dato o si se quieren hacer acotaciones en los casos de las obras teatrales (en los libretos). Los corchetes ([ ]): su uso es similar al de los paréntesis, pero se emplean cuando se intercalan datos en una oración que ya está entre paréntesis. En las citas textuales, completan alguna letra o palabra que falte en el original. Las llaves ( { ) se utilizan para elaborar cuadros sinópticos o si se quieren agrupar diferentes cosas, mientras que las comillas ( ) sirven para indicar citas textuales, la intervención de un personaje en un diálogo y para encerrar los títulos de libros o artículos de diarios y revistas. 4

5 Las comillas simples ( ) se emplean para agrupar palabras o frases dentro de una oración que ya está entre comillas, en tanto que el guion ( - ) se usa para dividir un vocablo que continúa en otra línea o para unir palabras compuestas. En cambio la raya ( _ ) indica un diálogo o algo que se intercala dentro de una oración, como una frase explicativa, por ejemplo. La diéresis o crema ( ) le advierte al lector que debe pronunciar la u, en algunas combinaciones como güe o güi (cigüeña, pingüino). En poesía, sirve para dar al verso una sílaba más, al separar la vocal cerrada o débil de un diptongo. Otro signo auxiliar es el apóstrofo ( ), que se usa especialmente en poesía y demás escritos literarios, con el fin de señalar la omisión de una vocal o la elisión de ésta; es decir, la supresión de la misma porque la próxima palabra también comienza en vocal. Finalmente, aunque no es el último signo de puntuación, está el asterisco ( * ), entre cuyos usos se menciona el de llamar la atención del lector hacia una cita hecha al pie de página o servir como viñeta. SIGNOS DE ENTONACIÓN No se puede dejar de mencionar estos dos signos que ayudan a darle cohesión y coherencia al discurso, representados por los interrogativos y los exclamativos (también llamados de admiración). Los mismos se conocen con el nombre de signos de entonación, ya que -precisamente- le indican al lector la manera como debe pronunciar ciertas oraciones, expresiones, frases o interjecciones. Los interrogativos (? ) permiten formular preguntas directas, expresar una duda o señalar la incertidumbre acerca de un dato que alguien esté proporcionando. Por ejemplo: Quién se llevó mi queso?; Vendrá Carlos el 5

6 viernes?; Marie nació en París (?). En este último caso, se estila colocar sólo el de cierre. En cuanto a los exclamativos o de admiración (! ), se utilizan para expresar estados de ánimo y sentimientos, así como para dar la idea de ironía: Qué feliz me siento esta noche!, No cabe duda de que tu corazón es resistente (!); por eso es que vives en la consulta del cardiólogo. Es preciso recalcar que tanto los signos interrogativos como los exclamativos se colocan al principio y al final de la oración o frase (?,! ), pero si se quiere construir una que sea al mismo tiempo exclamativa e interrogativa, es necesario que ésta lleve al comienzo el de admiración y el de interrogación al concluir ( Dijo eso de mí?); o al revés ( Dijo eso de mí! ). FUENTES CONSULTADAS Cardona, Bertha L La lengua como sistema de sistemas. Editorial de la Universidad del Zulia. Maracaibo, Venezuela. Franco, Antonio Curso de Morfosintaxis para estudiantes de Comunicación Social. Primera edición. LUZ. Maracaibo, Venezuela. Niño Rojas, Víctor Miguel Los procesos de la comunicación y del lenguaje. Fundamentación y práctica. 2da. edición. ECOE ediciones. Santafé de Bogotá, Colombia. RAE Signos ortográficos. Disponible en: 17/11/2004. Consultado: 6