Resumen de la visita martes 4 de septiembre

Transcripción

1 Resumen de la visita martes 4 de septiembre Programa del itinerario 09:15 Salida de la UIB hacia el Mirador de ses Barquespor le túnel de Sóller 10:15 Parada en el Mirador de ses Barques. Paseo guiado por el Camí Vell de Bàlitx (1h30 de caminata propiamente) 12:45 Parada en el área recreativa del embalse del Gorg Blau 14:00 Parada en Lluc. Picnic y visita del centro de interpretación de Ca s Amitger 16:00 Regreso a Palma La Serra de Tramuntana Geomorfologia. La sierra de Tramuntana es el sistema montañoso más importante de la isla de Mallorca. Situado en paralelo en la franja litoral noroccidental, sigue una orientación SW-NE y se puede diferenciar la vertiente marítima, estrecha y abrupta, y la vertiente interior, con un relieve más suave. Un gran número de cumbres superan los metros, especialmente en la parte central, donde se sitúan las principales elevaciones: el Puig Major de m y el Puig de Massannella de 1348 m. Desde el punto de vista litológico, la cordillera está constituida mayoritariamente por rocas calcáreas que dan lugar a interesantes morfologías kársticas, sobre todo, en el sector central. Clima. El clima mediterráneo de la Serra está caracterizado por la elevada pluviometría, con más de 600 mm anuales a la mayor parte del territorio y que superan los 1200 mm en Lluc (a 490 m de altitud) y los mm en Son Torrella (a 830 m) cerca del Puig Major. El verano está marcado por la escasez de precipitaciones. Los meses de octubre y de noviembre son los más lluviosos. La irregularidad de las lluvias es acusada, y a menudo se concentran en episodios torrenciales, sobre todo al final del verano y en otoño, que a veces pueden superar los 300 mm en 24 horas. El 22 de octubre de 1959 se registraron en Son Torrella un total de 537 mm en 24h. Debido a la irregularidad de las precipitaciones y de la elevada permeabilidad de los materiales calcáreos, no hay cursos permanentes y la red hidrográfica está constituida por cursos de agua intermitentes, caracterizados por la gran pendiente y la elevada torrencialidad, que revienen con fuerza durante los episodios de lluvias intensas. Flora La sierra de Tramuntana destaca por tener una gran riqueza florística y naturalística. Las principales comunidades vegetales que cubren esta cordillera son el encinar (alzinar) (Ass. Cyclamini balearici-quercetum ilicis), el acebuche (ullastrar) (Ass. Cneoro tricocci-ceratonietum siliquae), la garriga de montaña (Ass. Hypericion

2 balearici), la garriga de albada y xiprell (Ass. Anthyllido cytisoidis-teucrietum majoricis) o los extensos carcerales (carritxars) (Ass. Smilaco balearicae- Ampelodesmetum mauritanicae). El pinar ocupa también una gran parte del territorio en estas comunidades. Debido a las condiciones ambientales, se refugian muchas especies características de la montaña europea (árbol de vivo, manzano borde, rotaboc, tejo, etc.) y abundan las plantas exclusivas, con 32 de las 57 especies endémicas de Mallorca, algunas de las cuales muy raras y localizadas: Enarenaría bolosii, Euphorbia fonqueriana, Ligusticum huteri, Naufraga balearica, etc. En conjunto, la sierra de Tramuntana es un espacio natural de un gran interés científico y paisajístico, con gran diversidad de ecosistemas y un importante patrimonio etnológico. 1ª parada Mirador de ses Barques El valle de Sóller y Fornalutx y el patrimonio de marjades Los muros de piedra en seco que sostienen los bancales constituyen el elemento antrópico más característico del paisaje de la sierra de Tramuntana. Las marjades ocupan un 20 % de la sierra (más de 210 km 2 ), y algunos municipios como Sóller o Alaró tienen más de la mitad de su superficie transformada en terrazas. Las primeras referencias documentadas de la existencia de marges en el valle de Sóller son del s. XIII, con un crecimiento continuo y ligado a varios factores entre los cuales destaca la importancia del aceite como producto de exportación. Al final del siglo XVIII, a pesar de que continuaba la reconversión de tierras para crear nuevos olivares y transformar los que ya había, se inició la disminución del rendimiento de la producción, debido a la ocupación de terrenos marginales poco productivos, las dificultades del cultivo y el estancamiento de los métodos de cultivo Otros cultivos propiciaron también la construcción de terrazas: - la viña, favorecido en algunas épocas por políticas de exención fiscal - los naranjos, ligado a la abundancia de surgencias y fuentes en el valle de Sóller, cuyo cultivo supuso la transformación profunda de las zonas bajas del valle que hasta entonces eran de olivar. Es en el siglo XIX cuando la exportación de la naranja, principalmente hacia Francia y también Cataluña, adquiere notable relevancia. Este hecho comportó la transformación de muchos olivares con la siembra de naranjos y la expansión de la red de regadío. En el caso del valle de Sóller, la transformación de laderas en campos de bancales se prolongó hasta bien entrado la década de Paradas a lo largo del camí vell de Bàlitx Possessió de Bàlitx d Amunt Después de una breve caminata llegamos a la possessió de Bàlitx d Amunt. Es una de las tres grandes fincas que tienen su origen en la antigua alquería de Baalichi, documentada en 1232 en el Llibre del Repartiment. El edificio principal constituye una excelente muestra de la arquitectura de estas construcciones, con almazara, capilla y una fachada con tejas pintadas en el voladizo.

3 Con la denominación de possessió se hace referencia en Mallorca a una gran propiedad o finca de características rurales y agrícolas, de una extensión más o menos importante, que incluye un pequeño núcleo edificado - las casas de posesión - que ejerce de centro de explotación y producción agrícola y ganadera. En la Mallorca preturística (anterior al primer desarrollo turístico en masas producido en la década de 1950), el territorio entero se organizaba y dividía en posesiones. El sistema de marjades El paseo se realiza a través de terrazas de olivo sostenidas por marges. Los marges o muros de sostenimiento de piedra en seco constituyen un elemento patrimonial de primer orden, tanto por la riqueza de las técnicas utilizadas para construirlos cómo por la gran cantidad de elementos integrados en el muro, ya sea para reforzarlos o para facilitar el acceso. La técnica de piedra en seco se caracteriza por utilizar la piedra como único material de construcción, sin ningún tipo de material aglutinante. Es una técnica respetuosa con el medio ambiente. Es una técnica universal, propia del mundo rural, ideal para hace frente a condiciones ambientales exigentes, que en Mallorca alcanzó un grado de evolución muy elevado. Resulta una solución práctica y sencilla para responder a las necesidades de les actividades agrícolas, ganaderas y forestales, ya que no hay necesidad de buscar la materia prima y a la hora de reconstruir el derrumbe de un muro se vuelven a colocar las piedras. Las marjades, es decir las terrazas sostenidas con muros de piedra seca, concebidas para permitir la agricultura a las vertientes, disponen de estructuras asociadas con el fin de controlar y minimizar los efectos de la escorrentía y reducir la pérdida de suelo. Torrentes canalizados y canales de evacuación del agua conforman un sistema complejo en que se ha buscado la solución más adecuada en función de las características de la ladera donde cada elemento contribuye al funcionamiento eficaz del conjunto. La conservación de los campos de bancales pasa pues no sólo por el mantenimiento de los muros, sino por la del sistema hidráulico. Esta técnica ha permitido construir también paredes, casetas, fuentes, pozos, etc. Estos muros tienen, además, un interesante valor naturalístico, porque son el hábitat de numerosas especies vegetales y animales, y contribuyen a conservar la diversidad del medio natural. Al mismo tiempo, destaca el interés paisajístico de estos conjuntos construidos, como es el caso de las marjades de Estellencs, Banyalbufar, Sóller o Caimari. Los caminos El recorrido transcurre por un antiguo camino de herradura, que hasta principios del siglo XX era la principal vía de comunicación del valle de Sóller con las posesiones de Tuent y Sa Calobra, con ramales hacia el Port de Sóller y Fornalutx. Como camino

4 de herradura, está concebido para el paso de personas y animales, donde se pueden ver distintos elementos constructivos: empedrado, escalones, evacuación del agua. Los caminos eran las vías de comunicación entre pueblos, posesiones, campos de cultivo, de trashumancia etc. En el Valle de Sóller la situación era diferente al resto de la isla, ya que hasta 1850 no había caminos de carro y todo el transporte de carga se hacia con mulas por caminos de herradura. La red de caminos del Valle de sóller y de Mallorca en general parte de unos trazados que ya existían durante la Mallorca islámica. Después de la conquista (1299) el rey Jaume I el Conquistador se queda con la red de caminos principales de la isla. Seran caminos donde se invierte mucho dinero para asegurar su mantenimiento, y se estipula entre otras cosas que su anchura debe de permitir el paso de dos mulas cargadas. Algunos tramos del recorrido que realizamos tenían la denominación de camino real, es decir que estuvieron bajo jurisdicción real. Utilización actual de los caminos Hoy en día estos caminos han perdido en general la función para la que fueron construidos. Sin embargo, desde el Consell de Mallorca hace más de 20 años se trabaja para recuperar la red de antiguos caminos de montaña para fomentar el senderismo. El proyecto más importante es la creación de la Ruta de la Piedra en Seco, un itinerario senderista GR 221 que propone descubrir los paisajes culturales y naturales que ofrece la Serra de Tramuntana, recorriéndola de sur a norte. Una vez acabado tendrá 287 km de caminos habilitados para el senderismo. Actualmente son 167 km los que estan abiertos y señalizados. El senderista dispone de una serie de refugios abiertos para descansar al final de cada etapa. Con este proyecto se consigue la preservación de un patrimonio cultural de primer orden, no sólo de los caminos, sino también de elementos que se encuentran a su alrededor. 3ª Parada : El embalse del Gorg Blau El Gorg Blau es un embalse artificial de agua que se encuentra entre las faldas del Puig Major y del Puig de Massanella, y que se encuentra situado en el valle de Almallutx y cerca de las casas del mismo nombre. Este valle fértil ha sido ocupado por el hombre ya desde los primeros pobladores. Durante la época musulmana llegó a haber 11 molinos de agua para moler la harina. De hecho se han encontrado restos de cerámica correspondiente a asentamientos islámicos, donde podría haber una mezquita. Aquí resistieron durante unos años los últimos árabes. Fue también una importante zona de trashumancia, que albergaba los rebaños de ovejas procedentes de posesiones del sur y sureste de la isla durante el verano que iban y venían por caminos de trashumancia. La ganadería ovina tuvo mucha importancia para la producción de lana y de queso. Hasta 1971, se llamaba Gorg Blau al lugar más estrecho del torrente que recibía el nombre, en el lugar por el que atravesaba el camino de Sóller, con un puente.

5 El embalse que vemos se construye inicialmente para producir electricidad, pero al ver que no iba a ser viable se reconvierte el proyecto para almacenar y suministrar agua potable a la ciudad de Palma. Fue inaugurado en El agua del embalse del Gorg Blau, situado en una cota inferior, es elevada por bombeo, y luego circula por gravedad a través de un conducto abierto de más de 5 km de longitud hasta el embalse de Cúber. De ahí es conducida a Palma. Antes de la construcción del embalse el lugar se hizo famoso por la conjunción de la elevación de las paredes del torrente, el color del agua y el puente, que inspiró poemas, fue pintado, fotografiado, se convirtió en objeto de visitas turísticas y de reproducción en tarjetas postales. El torrente que parte del embalse, llamado torrente del Gorg Blau o sa Fosca, desemboca en el torrente de Pareis, que fue declarado Monumento en 2003.