INTERACCIONES PODEROSAS

Transcripción

1 INTERACCIONES PODEROSAS Julia Negrón EDUC 412 Profesora Digna Rodríguez 15 de octubre de 2012

2 INTERACCIONES PODEROSAS Desde una edad muy temprana, los niños forman un sentido de quienes son y quienes pueden llegar a ser. Interacciones son todas aquellas cosas, palabras y gestos que hacemos diariamente con otros. La mayoría de las ocasiones, estas ocurren con naturalidad. En otras ocasiones, estas pueden ser pensadas o planificadas para provocar una respuesta. Cada interacción con el maestro es una oportunidad para que los niños desarrollen confianza en ellos mismos y una buena auto estima. Las interacciones positivas tienen en común el que son valoradas, respetadas y aceptadas. La interacción que se tiene con los niños es una oportunidad para ayudarlos adquirir conocimientos, retándolos a intentar cosas nuevas y aumentando su vocabulario a través de una rutina diaria de actividades en donde los niños puedan jugar y explorar. Estas, afectan su autoestima y como aprenden. Como maestra, es importante, siempre poder analizar tus desiciones sobre lo que vas a decir o hacer cuando interactúas con los niños. Es muy importante tu sonrisa, sentido del humor, el sonido de tu voz, las palabras que escojas, el interés que muestres y tu curiosidad para aprender, ya que estas características son tuyas, y no las puedes comparar con las de nadie. En otras palabras, tienes que ser tú misma. Las interacciones poderosas juegan un papel muy importante en el crecimiento emocional y de aprendizaje del niño a tal punto que pueden reducir el riesgo al fracaso. A veces, podemos hacer algo sin tenerlo planeado. Otras, cuando estamos concientes de que lo que hacemos puede marcar la diferencia, podemos planificar y tener un propósito. Las interacciones poderosas no son las mismas que usamos todos los días. Interacciones poderosas son aquellas donde tú escoges intencionalmente, haces una conexión con el niño donde al mismo tiempo que dices o haces algo, lo guías a aprender y avanzar. Habrá ocasiones en donde tus interacciones sean entorpecidas cuando tú y un niño no van a un

3 mismo ritmo. Esto puede ocurrir con algunos más que con otros, lo importante, es poder reconocer cuando no estas en sintonía con el niño. Quizás puedan ser tus emociones lo que cause interferencia. La inteligencia emocional te puede ayudar grandemente a identificar cuáles emociones son las que realmente te ayudan a decidir cuál es el mayor apoyo que le puedes dar al niño. Mientras más concientes estemos de la individualidad de cada niño, su personalidad y de sus necesidades, mas efectiva será la conexión y por ende habrá una relación más efectiva y fuerte. Las interacciones entre maestro y niño comienzan desde que se conocen. Estas, dependen de tu inteligencia emocional, te ayudan en la conexión con el niño y promueven su crecimiento intelectual y emocional. Un maestro será efectivo siempre y cuando tenga una actitud positiva y esté siempre decidido a hacer la diferencia en la vida de los niños y sus familias. En interacciones poderosas se describen tres pasos para transformar la interacción cotidiana en una interacción poderosa. Aunque se describe cada uno por separado, en realidad se superponen y se puede repetir muchas veces durante una interacción: Paso uno: Estar presente. Es esta una pausa para preparar lo que hace una potente interacción con propósito en vez de automático. El paso de estar presente da el permiso del maestro a tomar un momento para pensar como aprovechar esta experiencia al máximo. Segundo paso: Conectar. Deje que el niño sepa que usted lo ve, está interesado en lo que está haciendo, diciendo y pensando, y quiere pasar tiempo con él. Paso tres: Extender el aprendizaje. Se hace uso de su fuerte conexión con el niño para estirar su conocimiento, las habilidades, el pensamiento o el lenguaje y añadir vocabulario.

4 Los niños tienen la habilidad y el sentido de conocer qué te sucede con tan solo escuchar tu voz, ver tu mirada y tus expresiones; en resumen, con solo mirarte. Así que como maestros debemos tener presente lo siguiente a la hora de pararnos frente a un niño: hablar con un tono normal de voz y no hablar demasiado, disfrutar lo que haces, de vez en cuando, compartir con tus alumnos fotos tuyas con familiares y de tu vida fuera de clases. Nosotros, los educadores, podemos hacer que las experiencias de enseñanza y aprendizaje que les proveemos a nuestros niños sean más divertidas y significativas para ellos. Como lo logramos? Permitiendo una participación activa de los niños en donde ellos puedan explorar, experimentar, predecir y guiarlos a la solución de problemas con éxito. Otra cosa muy importante lo es el evaluarnos continuamente, para mejorar y enriquecer nuestros propios conocimientos, ya que siempre podemos aprender cosas nuevas. Pregúntate: Qué es lo que quiero transmitir a los niños? Qué he hecho? Por qué tuve que hacerlo de esa manera? Cómo responde el niño? Qué puedo hacer para que mi interacción más efectiva la próxima vez? Prueba y evalúa diferentes estrategias. Si una cosa no te funciona, prueba otra, pero no te rindas. A la hora de presentar actividades o temas, no lo hagas siempre de la misma forma. De ser necesario, busca ayuda de algún colega e integra recursos de tu comunidad para ampliar el ambiente de aprendizaje de los niños. Como maestra, pienso que en la medida en que nosotros logremos establecer relaciones poderosas y enriquecedoras en nuestros niños, habremos subido un pequeño escalón con ellos. Tendremos la satisfacción de que estamos hacienda bien nuestro trabajo, sembrando la semilla del conocimiento pero a la vez ayudando a formar personas con buenos valores que harán una diferencia en sus vidas ahora y en la sociedad del futuro.

5 Bibliografía: Jablon, J., Dombro, A.L. y Stetson, C. (2011). Powerful Interactions: NAEYC