La Canción y los Juegos Infantiles Mexicanos como Elementos para Desarrollar la. Identidad del Niño en el Valle de Texas

Transcripción

1 La Canción y los Juegos Infantiles Mexicanos como Elementos para Desarrollar la Identidad del Niño en el Valle de Texas Conferencia por Raúl W. Capistrán, DMA El proceso migratorio entre México y los Estados Unidos de Norteamérica probablemente tendría su origen en 1820, cuando las autoridades virreinales españolas promovieron el establecimiento de colonos norteamericanos en Texas para que poblarán las vastas regiones de ese estado. Este proceso se invertiría tiempo después. En 1836, los colonos lograron la independencia de Texas y diez años después, en 1846, se anexaron a los Estados Unidos de Norteamérica. Así, las familias mexicanas que decidieron permanecer en tierras Texanas se convirtieron de pronto en extranjeros o minoría mientras que los antes colonos, se volvieron dueños y señores del estado. Lo mismo pasaría cuando en 1847, casi la mitad de nuestro territorio norte fuera arrebatado por los Estados Unidos después de la guerra México Estados Unidos. En las últimas décadas, un éxodo constante de mexicanos en busca de mejores condiciones de trabajo ha aumentado la población hispana en el vecino país. Actualmente, muchas ciudades de Estados Unidos, principalmente las ciudades fronterizas de Texas y California tienen una población predominantemente mexicana. Así, estas ciudades fronterizas se han ido desarrollando poco a poco como sociedades complejas, resultado de la mezcla de por lo menos dos culturas: 1 la anglosajona y la mexicana. 1 Conjunto de rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos, que caracterizan a una sociedad o grupo social en un periodo determinado. 1

2 Como consecuencia, la vida de muchos de residentes de la frontera México Estados Unidos fluctúa entre ambos países. Las largas filas de autos y gente a pie que día con día se forman para cruzar la frontera, reflejan la pertenencia a ambos mundos que muchos vivimos. Por un lado, está el mundo del mexicano, con sus bellas tradiciones y cultura, pero también con sus dramáticos contrastes sociales y ahora con su violenta guerra de carteles. Por el otro lado, está la búsqueda del American Style Life con su vida cómoda y desahogada. Con excepción, quizá, de los habitantes de la frontera sur, la vida del residente de la frontera norte está llena de situaciones que podrían considerarse como fuera de lo común para los residentes del resto del país. Así, por ejemplo, muchos residentes de Matamoros tienen parientes en el otro lado como llamamos a la vecina ciudad de Brownsville, o bien, nacieron en el otro lado pero viven y estudian aquí. Al mismo tiempo, muchos mexicanos estudian y/o trabajamos allá, mientras que otros tantos norteamericanos cruzan la frontera a diario para venir a trabajar acá. Esta dualidad ha desarrollado una cultura en la que los idiomas, las costumbres, las tradiciones, la comida y la música, se adoptan o combinan de maneras muchas veces pintorescas. Así, muchas familias en el lado Mexicano hemos asimilado fiestas norteamericanas, tales como el Día de la Coneja, y el Día de Acción de Gracias, y nuestra juventud escucha música norteamericana. Por otra parte, nuestros vecinos del norte se aficionan cada día más a nuestra rica cocina mexicana, nuestra música, y nuestra arquitectura tradicional. 2

3 El vocabulario de muchos residentes fronterizos mexicanos también ha sido afectado por esa trasculturación, y esta tristemente salpicado de palabras deformadas, resultado de adoptar, muchas veces de manera involuntaria, términos anglosajones para nuestro uso diario. Expresiones tales como: el carro no starea, la llanta esta flat, o dame un ride al otro lado, son algunas de las muchas frases que utilizamos para comunicarnos y que deterioran de manera ridícula nuestro bello idioma. Como todos sabemos, el proceso migratorio en nuestro país es predominantemente de mexicanos que buscan una mejor calidad de vida en el país vecino. La situación de los migrantes al tratar de ser asimilados por la nueva cultura suele ser largo, algunas veces doloroso y por lo general involucra el rechazo, el prejuicio e incluso el abuso de la cultura que va a ser asimilada. A pesar de todo lo que se ha hecho en lo referente a los derechos humanos, los migrantes han padecido diversos tipos de discriminación y vivido experiencias injustas en el proceso de ser asimilados por la cultura americana. Si bien, el sistema educativo norteamericano ha mejorado notablemente en los últimos años y ahora fomenta la variedad de culturas en el salón de clase, hubo tiempos en los cuales, el mero hecho de hablar español representaba la posibilidad de ser discriminado y maltratado. Así, miles de niños debían tomar sus clases en inglés, sin entender lo que en ellas se explicaba. Como consecuencia, las autoridades educativas de los Estados Unidos clasificaron a una gran cantidad de niños mexicanos como, con problemas de aprendizaje debido a su bajo desempeño académico. La situación duró hasta que activistas latinos lograron que se identificara la verdadera raíz del problema, y se instituyera la educación bilingüe. 3

4 Durante el difícil proceso de tratar de ser asimilados en el melting pot, de la cultura norteamericana, surgió la sub cultura del chicano, o pocho, que está constituida por los descendientes de mexicanos nacidos en los Estados Unidos y conocidos de manera general por muchos como la raza. La compleja cultura de muchos chicanos está llena de paradojas. El chicano se sabe americano, pues nació en los Estados Unidos, pero al mismo tiempo, se siente ajeno a la cultura anglosajona, que lo tolera pero difícilmente lo acepta. El chicano habla fluidamente el spanglish combinando de manera arbitraria el inglés con el español, pero siente vergüenza de hablar el español y responde: I don t speak Spanish, a pesar de haberlo estado hablando cinco minutos antes de que un mexicano se dirigiera a ellos en ese idioma. El chicano escucha música mexicana, come comida mexicana y celebra festividades mexicanas como una quinceañera o el 5 de Mayo, pero se siente superior al mexicano al venir de visita. La emigración de mexicanos hacia los Estados Unidos ha crecido tanto que, en la actualidad, muchas escuelas del sistema público en la frontera sur de Texas tienen una población estudiantil mayoritariamente mexicana. Apellidos hispanos tales como: Hernández, Pérez, García, López y otros por el estilo llenan las listas de asistencia, mientras que la representación sajona es en muchos casos apenas del 2%. Así, hay mexicanos que recién emigraron a los Estados Unidos, así como México- Americanos de primera generación, segunda generación, tercera generación y demás, dependiendo de cuando llegaron al país sus ancestros. La música, como elemento que transciende al tiempo y al espacio ha demostrado desempeñar un papel de vital importancia en el desarrollo de la identidad del hombre. 4

5 Cuando hablamos de mexicanos en los Estados Unidos, esto no es la excepción convirtiéndose en uno de los lazos más fuertes que lo unen a sus orígenes. Los bailes organizados por el distrito escolar de San Benito, TX (distrito para el cual trabajo), suelen ser un éxito cuando el DJ toca huapangos y demás piezas mexicanas propias de los bailes, y los adolescentes saltan de sus asientos para ponerse a bailar. Cualquier observador que asista a estos bailes se daría cuenta de la tremenda influencia que este tipo de música ejerce en los niños y adolescentes México-americanos. Después de presenciar esta experiencia varias veces, surgió la idea de saber que tanta influencia ejercía otro tipo de música en el niño México americano. Así, se llevó a cabo un pequeño estudio en 70 niños de la escuela secundaria Riverside en San Benito, TX. El estudio consistió en enseñar algunas canciones infantiles y juegos tradicionales a los niños de la clase de coro de la escuela y observar su reacción. Los niños aprendieron de buen agrado y con gran entusiasmo creyendo que las canciones y juegos eran algo novedoso y moderno. Sin embargo, la reacción de incredulidad no se hizo esperar cuando, al llegar a sus casas compartieron la experiencia con sus padres y abuelos. Para sorpresa de los niños, ellos no solo conocían las canciones, sino que estaban familiarizados con los juegos o conocían otras versiones de los mismos. Para complementar el estudio se llevó a cabo una encuesta en la que participaron los mismos niños (ver cuestionario en Power Point). De los resultados obtenidos destaca la siguiente información: De los 70 niños encuestados, los abuelitos de 67 niños hablaban español como primera lengua, los abuelitos de 2 niños eran bilingües y solo 1 hablaba inglés de manera preferente en el hogar. 5

6 Los papás de 54 niños hablaban preferentemente español en casa, solo 9 hablaban inglés y 7 alternaban entre los dos idiomas. 40 niños hablaban principalmente el español en casa, 18 inglés y 12 alternaban entre ambos idiomas. 47 niños manifestaron que sus padres les cantaban canciones cuando eran niños, 12 que no, 6 algunas veces y 5 no recordaban. Los niños que manifestaron haber oído a sus padres cantándoles canciones infantiles durante su infancia temprana o cantándoles a sus hermanitos recordaban canciones tales como: Pin Pon, Papas y Papas, Los Elefantes, El Chorrito, y otras más. Después de haber llevado a cabo el estudio podemos concluir lo siguiente: Primero, los resultados de la encuesta coinciden con la información publicada en las páginas web de los distintos distritos escolares del Valle de Texas en cuanto al alto porcentaje de la población estudiantil de origen Mexicano que habla predominantemente español. Segundo, hasta el día de hoy, la mayoría de los padres de origen mexicano en el área de la escuela secundaria Riverside siguen cantando canciones tradicionales infantiles a sus hijos. Sabemos que esta experiencia contribuye a motivar a los niños a amar la música y a continuar cantando. Tercero, algunos niños comentaron que sus padres preferirían asistir a conciertos de coro en los que sus hijos cantaran canciones en español para poder entenderlas y disfrutar más. Esto ha venido a cambiar mi perspectiva en cuanto a la selección del repertorio a interpretar por mis alumnos en los conciertos de coro. Ahora trato de incluir 6

7 canciones que de algún modo cumplan con el objetivo de sensibilizar a mis alumnos y que papás y familiares puedan entender y disfrutar. Cuarto, podríamos aventurarnos a decir que los resultados de la encuesta realizada en los 70 niños de la escuela Riverside, de San Benito, TX., así como el resultado de entrevistas y conversaciones con colegas de otros distritos escolares podrían ser representativos de muchas otras escuelas del Valle de Texas, pues las condiciones geográficas y socioeconómicas son muy similares. Finalmente, muchos de los niños manifestaron incredulidad y sorpresa al saber que las canciones así como los juegos enseñados en coro eran tradicionales en México y que sus padres y abuelitos ya los conocían. Algunos niños narraron en clase como al conversar con sus padres y abuelos aprendieron acerca de la vida y experiencia de estos en escuelas mexicanas. Así, creo que la enseñanza de canciones tradicionales y juegos mexicanos infantiles dentro del contexto de la enseñanza musical americana podría promover la interacción de los niños con sus padres e incluso con sus abuelitos respecto a este tema, establecer más lazos culturales y, creo yo, contribuir a definir más su identidad, ya que la canción infantil, aparte del contenido educativo y cultural que podría poseer en sí misma, sensibiliza a un nivel más profundo y conecta al niño con la experiencia, tradición y cultura de sus ancestros. Creo que los maestros de música debemos asumir la responsabilidad de fomentar el aprendizaje de canciones y juegos tradicionales y contribuir de este modo a la preservación de la cultura del niño y al desarrollo de su identidad. 7

8 BIBLIOGRAFIA Martínez Julio A. y Francisco A. Lomelí. Chicano Literature: A Reference Guide (Westport, Conn.: Greenwood Press), Leal, Luis. "Américo Paredes and Modern Mexican American Scholarship." Ethnic Affairs 1 (Fall 1987); Cida S. Chase, Americo Paredes, Mexican American Folklorist, Teacher, Writer, Poet and Musician. Oklahoma State University. Accesado Abril 20, Chicano! History of the Mexican American Civil Rights Movement, 8