La Conquista de Jericó

Transcripción

1 La Conquista de Jericó Lección Escuela Bíblica Dominical para el 3 de mayo de 2015 Preparado por: Millie Vázquez Introducción a la Lección C uando usted oye la palabra conquistar, qué llega a su mente? Según el Diccionario Anaya de la Lengua, conquistar es: Apoderarse de algo por las armas. Conseguir. Ganarse, atraerse a uno. Invadir, asaltar, capturar, despojar, persuadir, seducir, camelar, arrastrar. Lo contrario a esto es perder. Son preguntas, que tal vez nos hacemos también nosotros cuando Dios nos pone una función en las manos. Nos sentimos acorralados, porque nos parece imposible lo que se nos ha encomendado. Sin embargo, Dios tiene todo bajo su control, y también nos dará las estrategias necesarias para que no fracasemos en las gestiones encomendadas. Vamos a la conquista. Desde Gilgal, luego del cruce del Jordán, Josué y el pueblo de Israel comienza las estrategias para conquistar la tierra de Canaán comenzando con Jericó. La primera victoria de Canaán no será una verdadera batalla. Dios nuevamente demostrará su poder entregándoles la ciudad de Jericó a los israelitas de una manera milagrosa. Los eventos de la caída de los muros de Jericó, nos llama a reflexionar en la fe, la obediencia a la palabra de Dios y a confiar en las estrategias divinas por sobre las humanas. Cuando nos lanzamos a la conquista de algo, podríamos preguntarnos: cómo vencer lo invencible? Cómo destruir lo que es indestructible? Cómo pasar por lo que nos cierra el paso? Tal vez fueron preguntas que pasaron por la mente de los israelitas, cuando estaban de frente a aquellas murallas, sin entender aún, que la victoria se la daría Dios. L ectura Bíblica: Josué 6: Al séptimo día se levantaron al despuntar el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces; solamente este día dieron vuelta alrededor de ella siete veces. 16 Y cuando los sacerdotes tocaron las bocinas la séptima vez, Josué dijo al pueblo: Gritad, porque Jehová os ha entregado la ciudad. 17 Y será la ciudad anatema a Jehová, con todas las cosas que están en ella; solamente Rahab la ramera vivirá, con todos los que estén en casa con ella, por cuanto escondió a los mensajeros que enviamos. 18 Pero vosotros guardaos del anatema; ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis. 19 Mas toda la plata y el oro, y los utensilios de bronce y de hierro, sean consagrados a Jehová, y entren en el tesoro de Jehová. 20 Entonces el pueblo gritó, y los sacerdotes tocaron las bocinas; y aconteció que cuando el pueblo hubo oído el sonido de la bocina, gritó con gran vocerío, y el muro se derrumbó. El pueblo subió luego a la ciudad, cada uno derecho hacia adelante, y la tomaron. 21 Y destruyeron a filo de espada todo lo que en la ciudad había; hombres y mujeres, jóvenes y viejos, hasta los bueyes, las ovejas, y los asnos. 22 Mas Josué dijo a los dos hombres que habían reconocido la tierra: Entrad en casa de la mujer ramera, y haced salir de allí a la mujer y a todo lo que fuere suyo, como lo jurasteis. 23 Y los espías entraron y sacaron a Rahab, a su padre, a su madre, a sus hermanos y todo lo que era suyo; y también sacaron a toda su parentela, y los pusieron fuera del campamento de Israel.

2 La estrategia para conquistar Jericó ( Josué 5:13-6:5) Estrategia: Plan general de acción para conseguir un objetivo, que se irá cumplimentando a través de una táctica aplicada a cada situación concreta. A. Josué y el varón con la espada desenvainada Josué 5: Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacía él, le dijo: Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? 14 El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: Qué dice mi Señor a su siervo? 15 Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo. B. La estrategia para la toma de Jericó -Josué 6:1-5 1 Ahora, Jericó estaba cerrada, bien cerrada, a causa de los hijos de Israel; nadie entraba ni salía. 2 Mas Jehová dijo a Josué: Mira, yo he entregado en tu mano a Jericó y a su rey, con sus varones de guerra. 3 Rodearéis, pues, la ciudad todos los hombres de guerra, yendo alrededor de la ciudad una vez; y esto haréis durante seis días. 4 Y siete sacerdotes llevarán siete bocinas de cuernos de carnero delante del arca; y al séptimo día daréis siete vueltas a la ciudad, y los sacerdotes tocarán las bocinas. 5 Y cuando toquen prolongadamente el cuerno de carnero, así que oigáis el sonido de la bocina, todo el pueblo gritará a gran voz, y el muro de la ciudad caerá, entonces subirá el pueblo, cada uno derecho hacia adelante. 1. Aparece el príncipe del ejército divino. a. Mientras Josué meditaba en la manera que atracaría a Jericó, el Ángel del Señor se le apareció y le aseguró la victoria. A esto se le llama teofanía, Dios se revela mediante elementos comprensibles para el ser humano. Ejemplos: Jacob y al ángel (Gé 32:22-32) Moisés con la zarza ardiendo (Éx 3:1-4:17) 2. El príncipe de los Ejércitos de Dios le pide a Josué que se quite sus sandalias indicándole que el lugar donde se encontraban era santo, porque la presencia misma de Jehová estaba allí en la forma de aquél Ángel. (V. 15) 3. El Ángel instruyó a Josué lo que debía hacer en la batalla que se avecinaba. También le aseguró que Dios, los guiaría y le daría la victoria. 4. Esto nos enseña a los creyentes que no están solos en sus luchas en esta tierra. Hay fuerzas espirituales luchando a su favor como también contra ellos. Los creyentes tienen el Espíritu Santo que permanece constantemente a su lado como su ayudador y defensor (Jn 14:16-23). Josué 6:1 La ciudad de Jericó abarcaba poco más de tres hectáreas. Era una ciudad cerrada no solo a causa de sus residentes, sino también de los pobladores de la campiña cercana. Los muros pudieron haber tenido hasta nueve metros de altura y seis metros de espesor. Se consideraba a Jericó como inconquistable, estando protegida por los dioses de los cananeos. La toma de Jericó fue la clave de toda la estrategia de guerra de Josué, porque demostraría que el Dios de Israel era superior a los dioses cananeos, por lo tanto era inevitable la derrota de los cananeos. 1. El Señor comienza sus instrucciones con una promesa firme. (Jos 6:2) 2. Las instrucciones de Dos eran simples pero a la vez novedosas e ilógicas desde la perspectiva militar. (6:3-5) 3. Dios no les pidió un ataque frontal con arietes u otras armas de ataque, sino rodear la ciudad por siete días y Él se haría cargo de eliminar lo que había entre Israel y la ciudad; el muro impenetrable. 4. Dios se hace cargo de lo imposible, lo posible es nuestra responsabilidad.

3 La conquista de Jericó Josué 6:6-27 Por la fe cayeron los muros de Jericó después de rodearlos siete días Hebreos 11:30 A. Instrucciones detalladas de la acción--josué 6: El plan implementado (6:6-11) a. En esta parte del relato se incluye la presencia del Arca del Pacto que iría cargada por sacerdotes al frente de la gran marcha (6:6). 2. Se llevarían las bocinas o cornetas. (v. 13) a. La bocinas o cornetas descritas en este pasaje son cuernos de carneros trabajados para crear lo que los israelitas llamaban shofar. El shofar es una trompeta de júbilo, se tocaba para llamar al pueblo a reunirse ante Dios frente al Tabernáculo o para llamarlo a la guerra. Estas trompetas se usaban en las fiestas solemnes para proclamar la presencia de Dios. (Núm 10:10). 3. La marcha alrededor de Jericó (vv ), a. Lo más curioso, sobrecogedor y extraño para los de Jericó era que esta marcha se daba en un momento del día y luego se volvían a su campamento y la acción se repitió durante seis días. 4. La conquista de Jericó no era exclusivamente un asunto militar, sino también religioso y las bocinas declaraban que el Dios del cielo y de la tierra estaba haciendo sentir su presencia invisible en esa ciudad ya condenada. En esta ocasión el toque sonoro del shofar anunciaba la victoria de Israel sobre los pueblos cananeos. Referencias: Leccionario Pentecostal 2015 Josué 6: Llamando, pues, Josué hijo de Nun a los sacerdotes, les dijo: Llevad el arca del pacto, y siete sacerdotes lleven bocinas de cuerno de carnero delante del arca de Jehová. 7 Y dijo al pueblo: pasad, y rodead la ciudad; y los que están armados pasarán delante del arca de Jehová. 8 Y así que Josué hubo hablado al pueblo, los siete sacerdotes, llevando las siete bocinas de cuerno de carnero, pasaron delante del arca de Jehová, y tocaron las bocinas; y el arca del pacto de Jehová los seguía. 9 Y los hombres armados iban delante de los sacerdotes que tocaban las bocinas, y la retaguardia iba tras el arca, mientras las bocinas sonaban continuamente. 10 Y Josué mandó al pueblo, diciendo: vosotros no gritaréis, ni se oirá vuestra voz, ni saldrá palabra de vuestra boca, hasta el día que yo os diga: Gritad; entonces gritaréis. 11 Así que él hizo que el arca de Jehová diera una vuelta alrededor de la ciudad, y volvieron luego al campamento, y allí pasaron la noche. 12 Y Josué se levantó de mañana, y los sacerdotes tomaron el arca de Jehová. 13 Y los siete sacerdotes, llevando las siete bocinas de cuerno de carnero, fueron delante del arca de Jehová, andando siempre y tocando las bocinas; y los hombres armados iban delante de ellos, y la retaguardia iba tras el arca de Jehová, mientras las bocinas tocaban continuamente. 14 Así dieron otra vuelta a la ciudad el segundo día, y volvieron al campamento; y de esta manera hicieron durante seis días.

4 La conquista de Jericó Josué 6:6-27 Por la fe cayeron los muros de Jericó después de rodearlos siete días Hebreos 11:30 B. La caída de los muros de Jericó -Jos 6: Instrucciones finales (6:15-19) a. Al llegar al séptimo día las instrucciones que Josué había dado anteriormente cambiaron (v. 15). 2. Josué da instrucciones claras y específicas sobre la casa de Rahab (v. 17) a. Aquí vemos el cumplimiento de la promesa hecha a Rahab por los exploradores del capítulo Las instrucciones sobre el anatema era muy claras y específicas. (V. 18) a. No podían tocar, ni tomar cosa alguna. 4. Se derrumban los muros de Jericó. (vv ) a. Al completar la séptima vuelta, el séptimo día Josué ordenó al pueblo gritar y el muro cayó. b. Fue un evento sobrenatural y esto puede verse claramente por el hecho de que todo el muro fue destruido, excepto la sección de la casa de Rahab. Referencias: La Biblia Cronológica Reina Valera 1960 Josué 6: Al séptimo día se levantaron al despuntar el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces; solamente este día dieron vuelta alrededor de ella siete veces. 16 Y cuando los sacerdotes tocaron las bocinas la séptima vez, Josué dijo al pueblo: Gritad, porque Jehová os ha entregado la ciudad. 17 Y será la ciudad anatema a Jehová, con todas las cosas que están en ella; solamente Rahab la ramera vivirá, con todos los que estén en casa con ella, por cuanto escondió a los mensajeros que enviamos. 18 Pero vosotros guardaos del anatema; ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel, y lo turbéis. 19 Mas toda la plata y el oro, y los utensilios de bronce y de hierro, sean consagrados a Jehová, y entren en el tesoro de Jehová. 20 Entonces el pueblo gritó, y los sacerdotes tocaron las bocinas; y aconteció que cuando el pueblo hubo oído el sonido de la bocina, gritó con gran vocerío, y el muro se derrumbó. El pueblo subió luego a la ciudad, cada uno derecho hacia adelante, y la tomaron. 21 Y destruyeron a filo de espada todo lo que en la ciudad había; hombres y mujeres, jóvenes y viejos, hasta los bueyes, las ovejas, y los asnos.

5 La conquista de Jericó Josué 6:6-27 Por la fe cayeron los muros de Jericó después de rodearlos siete días Hebreos 11:30 C. Salvación de Rahab y su familia -Jos 6: El rescate de Rahab (6:22-25) a. Josué envió a los dos hombres que habían ido a reconocer a Jericó, para que sacaran a Rahab y toda su familia de la casa. 2. La historia de Rahab es un ejemplo de la gracia de Dios obrando en la vida de un individuo y su familia. Sin importar su vida pasada fue salvada por su fe en Dios. D. La maldición sobre Jericó (vv ) 1. Jericó sería separada para destrucción y eso requería de una maldición para los años posteriores a este evento. 2. Tal maldición incluía la muerte sobre cualquiera que se atreviera a reedificar la ciudad o a reconstruir los cimientos y las puertas. Josué 6: Mas Josué dijo a los dos hombres que habían reconocido la tierra: Entrad en cada de la mujer ramera, y haced salir de allí a la mujer y a todo lo que fuere suyo, como lo jurasteis. 23 Y los espías entraron y sacaron a Rahab, a su padre, a su madre, a sus hermanos y todo lo que era suyo; y también sacaron a toda su parentela, y los pusieron fuera del campamento de Israel. 24 Y consumieron con fuego la ciudad, y todo lo que en ella había; solamente pusieron en el tesoro de la casa de Jehová la plata y el oro, y los utensilios de bronce y de hierro. 25 Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía; y habitó ella entre los israelitas hasta hoy, por cuanto escondió a los mensajeros que Josué había enviado a reconocer a Jericó. 26 En aquel tiempo hizo Josué un juramento, diciendo: Maldito delante de Jehová el hombre que se levantare y reedificare esta ciudad de Jericó. Sobre su primogénito eche los cimientos de ella, y sobre su hijo menor asiente sus puertas. 27 Estaba, pues, Jehová con Josué, y su nombre se divulgó por toda la tierra.

6 03. Morbi nisl eros, dignissim nec Desde Puerto Rico con amor. Cada uno de nosotros los creyentes, tiene un mandamiento específico de parte de Dios, la conquista. Qué vamos a conquistar? Tenemos que comenzar los preparativos por nosotros mismos. Cómo está mi vida para con Dios? Si el Ángel de Jehová, viniera a darme instrucciones, cómo actuaría? Josué inmediatamente le preguntó si era amigo, o enemigo. Qué sorpresa maravillosa cuando el Ángel le dijo que venía de parte del mismo Dios, como príncipe de su ejército! Es muy probable que ni a ti, ni a mí se nos haya revelado Dios, de esa manera, o que nos haya hablado de forma audible, o que hayamos visto una zarza ardiendo, pero si podemos estar seguros de la misión que nos dejó. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. (Mt. 28:19-20) Josué tenía la responsabilidad de conquistar la Tierra Prometida, y la primera ciudad que tenía en su camino fue Jericó. A la vista del hombre, inconquistable, pero no era Josué y el ejército israelí el que lucharía, era el mismo Dios. Su experiencia con el Ángel de Jehová le hizo ver a Josué que la victoria era de ellos. Jesús nos dejó el Espíritu Santo. Sus instrucciones fueron. Vayan a Jerusalén, y esperen allí ser investidos del poder de lo alto, cuando venga sobre ustedes, el Espíritu Santo, y me seréis testigos... La presencia de Jehová iba simbolizada en el arca, en aquel momento, hoy la presencia de Jehová está en cada creyente por el Espíritu Santo y la llenura del Espíritu Santo. No importa cuando impenetrable se vean las murallas que tenemos que asaltar para traer las almas a los pies de Cristo, con su poder lo lograremos. No importa cuantos problemas nos surjan en nuestro caminar en este mundo, recordemos Juan capítulo 17. Somos más que vencedores en Cristo Jesús, Señor Nuestro. Cuando Josué estuvo delante del Ángel de Jehová, su reacción fue poner su rostro en tierra, en señal de humildad y de adoración, esperando instrucciones para comenzar la conquista. Esto nos enseña que nosotros, antes de ir a conquistar el terreno señalado, tenemos que ser humildes a Dios, y esperar con reverencia y adoración que Él nos diga cómo y cuándo tomar acción. No te muevas para hacer nada, sin antes consultar con Dios. Obtenemos victoria sobre el enemigo cuando ponemos nuestra confianza en aquél que todo lo puede. Aquél que lo inconquistable, lo conquista. No podemos cambiar el corazón de la gente, sin embargo los de Jericó con tan solo haber escuchado sobre el Dios de aquel pueblo que venía a tropel a conquistar aquellas tierras, comenzó a temblar de terror. Cuando el creyente está lleno de la presencia de Dios, no hay nada ni nadie que le haga frente y quede de pie. Jesús nos prometió estar con nosotros hasta el fin del mundo, y luego vendría a llevarnos con él al reino de los cielos. Si has creído en esa promesa, y has echado mano de ella, atesorándola en tu corazón, vencerás. Conquistemos nuestro país para Cristo.