Momento supremo de la voluntad. Solo los más fuertes de carácter y los que durante el día han seguido una alimentación adecuada pueden superar.

Transcripción

1 Momento supremo de la voluntad. Solo los más fuertes de carácter y los que durante el día han seguido una alimentación adecuada pueden superar. El demonio de la gula se va a sentar a nuestro lado y nos va a tentar con mil razonamientos y diez mil excusas para que caigamos en la glotonería y el desenfreno alimenticio. O, por el contrario, dejaremos pasar esta estupenda oportunidad de nutrirnos bien, mordisqueando cualquier cosa o picoteando alguna porquería. No!. No dejéis que suceda todo esto. El final del día es la culminación de la obra nutricional que comenzamos por la mañana. De lo que comamos y como lo hagamos dependerá ese equilibrio que buscamos. Durante el día nos hemos movido, usado nuestro cuerpo y el organismo necesita renovarse y descansar. Por un lado tenemos que reponer los elementos necesarios para reconstruir esos tejidos que hemos roto durante la jornada. Y por otra, debemos darle también los elementos necesarios para llevar a cabo esa función. Pensad que después de la cena nos iremos a descansar y a dormir por lo que nuestro metabolismo bajará hasta el metabolismo basal ( mínimo gasto energético) y no nos hará falta la energía inmediata que nos proporcionan los carbohidratos.

2 Así que necesitaremos las proteínas para reparar los tejidos, y las vitaminas y minerales para que la función de transformación de esas proteínas se lleve a cabo de una manera eficaz. No tomaremos carbohidratos, ya que si los tomamos y no los utilizamos, el organismo, al cabo de un tiempo (unas cinco horas) los transforma, almacenando esa energía en forma de grasa, por sí la necesita otro día. Pensad que en todos los alimentos hay proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales. Lo que debemos desechar para la cena son aquellos alimentos que en su composición tienen un tanto por ciento muy elevado de carbohidratos. Por la noche no comeremos pasta, arroz, patatas, pan, fruta, etc. Tampoco debemos tomar aquellos que lleven grasa, como los embutidos, fritos, mantequillas, repostería industrial, etc. En la fauna de la cena, encontramos los que se ponen hasta las cejas de comida, los que parecen pajaritos comiendo y los que por no se que razonamientos comen de una manera extrañísima. Los que llegando la hora de la cena, no saben parar de comer, son aquellos que no han sabido repartir bien su alimentación durante el día y no deben haber merendado lo adecuado. No tienen medida, todo les cabe en el estómago. Luego vienen las digestiones pesadas, el insomnio y! el acumulo de grasas en las caderas, glúteos y abdomen!!.

3 - No como casi nada durante el día. Apenas una ensalada para comer y algún café - Ya. Y cuando llega la noche devoras como una posesa. - Hay que darle al cuerpo lo que te pida - Por supuesto. Y a Hacienda también. Seguro que procuras no pagar mas de lo que te corresponde. Verdad?. Pues a tu cuerpo tampoco debes darle mas de lo que necesita. Tenemos a los perezosos, que por no meterse en la cocina un rato, comen cualquier cosa y en poca cantidad. - Yo, un yoghurt y una frutita. Y a la cama - Puedes dormir sin escuchar a tus pobres células como se quejan por falta de material? - Pan con tomate y un poco de embutido para todos y a ver la tele - Muy bien. Así se hace. Más grasita para el cuerpo. Pronto conseguirás parecerte al muñeco Michelin. Y por último los felinos. Los asesinos de tejidos. Son aquellos que influenciados por las revistas, amigos o gurús de la nutrición, siguen unos consejos desafortunados.

4 - Sigo una dieta que me han dado que tengo que comer solo embutido. - Pero, tu estas tonto o que?. Como vas a adelgazar comiendo grasas, bobo. - Me tomo una sopa quemagrasas de una clínica famosa. Adelgazo una barbaridad. - Adelgazar?. Más que eso. En un esqueleto te convertirás si lo haces a menudo. De verdad crees que tu organismo está contento con ingerir solo liquido? - Pues Ana Rosa en su revista dice que cena solo fruta y está estupenda. - Estupienda?. Necesitas gafas y algo más. No seamos insensatos y degustemos unas buenas cenas que no son tan difíciles de elaborar. No nos quedaremos con hambre y tendremos contento a nuestro organismo. Dejad las fantasías dietéticas de los famosos, de las revistas, de las amigas, etc., y disfrutemos del final del día con una cena equilibrada y nutritiva.

5 Sabiendo que nuestra cena debe componerse en su mayoría de proteínas, vitaminas y minerales, vamos a confeccionar el patrón básico para elaborar nuestras cenas. El primer plato consistirá en alimentos que contengan las vitaminas y los minerales. Para ello utilizaremos las verduras, ya sean crudas, cocidas, asadas, etc. y los caldos, sopas o consomés. Para el segundo buscaremos alimentos que contengan un alto porcentaje de proteínas, como son las carnes, pescados, huevos, etc. También necesitas una pequeña parte de carbohidratos y de grasa, pero esa pequeña parte ya se encuentra en los alimentos hemos nombrado, por lo que no es necesario incorporar mas grasas y carbohidratos a la cena. A continuación vamos a dar una lista de primeros platos y una de segundos, para después poner unos ejemplos de cómo combinarlos.

6 Primeros platos: - Sopa de verduras, de pescado, de tomate, etc. - Gazpacho - Consomé - Crema de calabacín, de puerros, de espárragos, etc. (sin patata que es carbohidrato) - Verduras cocidas: Judías verdes, coliflor, col, zanahorias, acelgas, puerros, etc. - Verduras a la plancha (surtidas son mas nutritivas) - Todo tipo de ensaladas variadas. Segundos platos: - Pollo, conejo, ternera, cerdo, pavo, etc. hechos al horno, a la plancha, estofado, guisado (sí, guisado), en papillote, etc. - Pescado, gambas, calamares, mejillones, almejas, sepia, pulpo, etc. preparado de diferentes formas, siempre que no sean en fritura. - Huevos a la plancha, al plato, duros, pasados por agua, escalfados, guisados, etc. Los segundos platos los podemos acompañar con verduras tanto crudas como cocidas.

7 Ejemplos de cenas: A/ - Gazpacho - Pollo a la plancha con judías verdes salteadas. B/ - Ensalada de lechuga, pimiento, tomate, cebolla y pepino. - Filete de ternera a la plancha. C/ - Sopa de pescado. - Media docena de gambas al cava, con guarnición de lechuga y zanahoria rallada. D/ - Parrillada de verduras. - Huevos a la flamenca. E/ - Consomé. - Conejo estofado con zanahorias y judías verdes. F/ - Crema de calabacín. - Lenguado en papillote con verduritas. G/ - Sopa fría de tomate. - Calamarcitos en su jugo. Como podéis ver hay muchas maneras de preparar una buena cena y disfrutarla sin tener después cargos de conciencia. Se acabó el pasar hambre y el ponerse como un tocino. Solo es cuestión de ponerse a ello. Adelante comed.