Partido Político Por Un Mundo Más Justo LÍNEA ESTRATÉGICA: GESTIÓN DE LOS IMPUESTOS A LAS TRANSACCIONES FINANCIERAS

Transcripción

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2 1. INTRODUCCIÓN El establecimiento de un Impuesto Global a las Transacciones financieras plantea la disyuntiva de decidir cuál es el destino más adecuado para los fondos recaudados por este impuesto, así como la dificultad técnica del modo en que se puede realizar la recaudación y la transferencia Para plantear una estrategia adecuada es necesario establecer un objetivo global que justifique la implantación de este impuesto y cuáles son las necesidades que con mayor urgencia se deben atender y que precisan de inversiones. El presente documento es una propuesta en relación sistema para la mejor gestión de los fondos recaudados en un posible Impuesto a las Transacciones Financieras. 2. ESTABLECER LAS PRIORIDADES EN LA FINANCIACIÓN En el objetivo de la erradicación de la pobreza y la defensa de los derechos humanos el marco aceptado de referencia para objetivos parciales son los Objetivos de Desarrollo del Milenio, los cuales establecen las 8 objetivos principales que permitan cuantificar la erradicación de la pobreza en un plazo que termina en el año El pasado mes de junio se ha presentado el informe 2012 sobre los ODM, en el cual se da cuenta de los logros conseguidos hasta la fecha. Apunta el informe que tres de los objetivos planteados para el 2015 ya se han cumplido. Sin embargo el mismo informe preliminar reconoce que el número de personas que no disponen de alimentos necesarios para sobrevivir es incluso superior al que existían en el año 2000, fecha en la que se establecieron los ODM. Esta circunstancia pone de manifiesto la escasa relevancia que está teniendo el plan de ODM en la reducción de la pobreza, así como la dificultad de el PNUD para justificar la escasez de resultados positivos. Es necesario poner de manifiesto que los ODM constituyen un modo de plantear la erradicación de la pobreza éticamente inaceptable, ya que establece objetivos absolutamente insuficientes en relación a la alimentación mundial, sobre todo si se tiene en cuenta que la misma PNUD estima que la cantidad de alimentos producidos en el planeta son más que suficientes para el abastecimiento de la población mundial. Por lo tanto no puede entenderse que los ODM sean el marco adecuado para la lucha contra la pobreza y la defensa de los Derechos Humanos. Sin embargo, al ser el instrumento con el que cuenta Naciones Unidas, es necesario tener en cuenta la financiación de este programa. A día de hoy es importante constatar el fracaso del planteamiento de los ODM, y al mismo tiempo la necesidad de mantener la atención hacia la erradicación de la pobreza. Para entender de un modo integrado los motivos por los que no se consiguen los ODM es necesario prestar atención a otras cuestiones que han quedado al margen del planteamiento de los ODM. 2

3 En este contexto, toman una importancia capital el control y la supervisión por parte de la ONU hacia actividades que violan claramente los Derechos Humanos y que se llevan a cabo con total impunidad a menudo como parte de la actividad de empresas transnacionales que realizan prácticas nocivas como la extracción y comercialización de recursos naturales, la contaminación de suelos y de agua potable, la especulación en los mercados financieros, el comercio descontrolado de armas, etc. Un planteamiento efectivo para la erradicación de la pobreza ha de buscar necesariamente un modo de exigir la protección de los derechos humanos en cualquier parte del mundo al margen de las distintas legislaciones de cada país. Las necesidades de financiación para la erradicación de la pobreza van mucho más allá de la financiación de los recursos de la ONU para el cumplimiento de los ODM, y deberían de tener en cuenta los siguientes factores: Programas de disminución del comercio y la producción de armas Programas de protección del medio ambiente Programas de producción de energías renovables que disminuyan paulatinamente la dependencia sobre combustibles fósiles, y con ellos la explotación y transporte de recursos naturales Programas de fortalecimiento de una legislación internacional y de los tribunales internacionales, que eviten la impunidad Programas de potenciación de la soberanía alimentaria 3. SITUACIÓN ACTUAL EN LA FINANCIACIÓN DE PROGRAMAS DE PROGRAMAS PARA EL DESARROLLO La financiación de los ODM es un objetivo compartido por todos los países firmantes de la declaración del milenio, sin embargo nunca se ha alcanzado un nivel de financiación suficiente. El contexto actual de estancamiento del crecimiento económico plantea serias dificultades para la financiación de todos los programas de ayuda al desarrollo, que en muchos casos se verán cancelados. Esta es la conclusión a que llega el Departamento de Estudios Económicos y Sociales en su informe del año 2012 recientemente publicado 1. Según el autor principal del estudio, Rob Vos, "los países donantes han estado muy por debajo de la ayuda con la que se habían comprometido, por lo que la asistencia para el desarrollo disminuyó el año pasado debido a recortes presupuestarios que incrementaron el déficit en 167 mil millones de dólares. Aunque los donantes cumplieran sus compromisos, se volvió necesario buscar nuevas vías para hallar recursos con que financiar las necesidades de desarrollo y hacer frente a los crecientes problemas mundiales, como la lucha contra el cambio climático." 1 3

4 Los mecanismos que se proponen en dicho informe para alcanzar una cifra de financiación de 400 mil millones de euros son los siguientes: un impuesto a las emisiones de dióxido de carbono en los países desarrollados: un impuesto de 25 dólares por tonelada le permitiría a las autoridades nacionales recaudar aproximadamente 250 mil millones de dólares anuales, que se asignarían a la cooperación internacional Un pequeño impuesto a las transacciones de monedas de media centésima de punto porcentual (0,005%), que incluya a las principales cuatro divisas (dólar, euro, yen y libra esterlina), proporcionaría unos 40 mil millones de dólares anuales para la cooperación internacional la asignación de una parte del impuesto propuesto a las transacciones financieras en la Unión Europea (que se espera recaude hasta 55 mil millones de euros o 71 mil millones de dólares anuales) para la cooperación internacional; las asignaciones periódicas de derechos especiales de giro (DEG) del FMI y el uso de los DEG "ociosos" podrían aportar unos 100 mil millones de dólares anuales para la adquisición de activos de largo plazo que se utilizarían entonces como financiación para el desarrollo. Es importante destacar que en esta propuesta de la ONU se pretende establecer un pequeñísimo impuesto que no resulte una gran carga para las operaciones en el mercado de divisas, de modo que se pueda asegurar una financiación por este medio. Sin embargo esta propuesta no pretende en ningún momento la modificación del sistema financiero actual que está en el origen de los problemas de financiación y en muchos de los problemas de desigualdades existentes hoy en día. La propuesta desde el Partido Por Un Mundo Más Justo es precisamente la de evitar la especulación en los mercados, por lo que el impuesto que se establezca debe ser suficientemente cuantioso para desestimular este tipo de prácticas. No se trata de conseguir financiación sino de evitar una práctica que es perjudicial. Por otra parte, poca utilidad tendrá la recaudación de un ITF si se utiliza para tapar los mismos agujeros que el propio sistema ha generado en las prácticas especulativas. Por lo tanto la propuesta del Partido Por Un Mundo Más Justo ha de ir por la linea de transferir íntegramente la cantidad recaudada por este impuesto hacia la financiación para el desarrollo. Desde el pasado 6 de Junio existe en la ONU una plataforma para una mejor gestión de la financiación de los ODM 2 El planteamiento de utilizar los fondos de un Impuesto a las Transacciones Financieras para programas de erradicación de la pobreza se remonta al año 1996, año en el que se abrió el debaten en el PNUD 3. Esta propuesta siempre ha sido muy cuestionada por los poderes financieros ya que limita su capacidad de actividad y por este motivo no se ha podido llevar a cabo

5 Para establecer un sistema de financiación acorde a las necesidades de los ODM se realizó en 2004 el INFORME LANDAU, solicitado por Jacques Chirac, entonces presidente de Francia, que sirvió para que la ONU para plantear un sistema de Impuestos Internacionales que sirviese para la financiación de los ODM. Esta propuesta no tuvo buena acogida en los países más influyentes, especialmente EEUU que sistemáticamente rechaza cualquier posibilidad de establecimiento de impuestos internacionales. En el 2006 se establece en Francia un impuesto a los pasajeros aéreos, destinado íntegramente a la prevención de enfermedades como la malaria, el sida y la tuberculosis. Esta iniciativa es seguida por un grupo de países comprometidos con los ODM, y supone el primera paso hacia la implantación de un Impuesto Internacional. La propuesta se presenta en la conferencia internacional Fuentes innovadoras de financiamiento para el desarrollo realizada en París (28/2 1º/3/2006). En este caso, este impuesto se estableció como un impuesto nacional, pero ha tenido la particularidad de ser recaudado en varios países simultáneamente y de destinarse a un mismo fin. Es necesario evaluar sin embargo que la recaudación que se ha conseguido por este medio ha sido escasa y se ha destinado mayoritariamente a la financiación de vacunas y productos farmacéuticos producidos en Europa. Una vez más se constata que los sistemas de cooperación habitualmente utilizados por las administraciones, incluido los programas del PNUD son extremadamente similares a sistemas de apoyo para el comercio exterior. Se siguen supeditando los objetivos de cooperación a las estrategias del mercado. Por este motivo no parece muy alentador que se planteen sistemas similares para conseguir la financiación necesaria que a día de hoy está solicitando la ONU. 4. OBJETIVO DEL ITF El planteamiento de un Impuesto a las Transacciones Financieras fue una propuesta que lanzó John Maynard KDeynes en los años 30, después de la crisis especulativa que afectó que tuve alcance mundial. Desde entonces la propuesta ha sido defendida por muchos economistas, y no ha llegado a implementarse de un modo universal debido a que es una medida contraria al planteamiento neoliberal dominante hoy en día, el cual no puede aceptar el establecimiento de impuestos ni la limitación de ciertas actividades económicas. Es necesario entender que el beneficio social que supone la implantación de un ITF va más allá de las posibilidades recaudatorias. Esta medida no debe tener un afán recaudatorio, sino disuasorio, de modo que evite la actividad financiera especulativa, y se facilite con ello la actividad financiera productiva. El objetivo no debe ser transferir fondos a un organismo internacional como la ONU, el cual está sujeto a todos los problemas de las administraciones alejadas de los ciudadanos, sino evitar en la medida de lo posible las prácticas económicas socialmente nocivas, en la línea de la responsabilidad corporativa. Al igual que establecer impuestos sobre la contaminación debe servir para disuadir a los agentes económicos y contaminar menos, así mismo un impuesto sobre las transacciones financieras debe evitar la especulación financiera. 5

6 5. PROPUESTA DE REACUDACIÓN Y GESTIÓN DE UN ITF La dificultad de la Gestión de un Impuesto Internacional se plantea en el momento en el que la implantación de este impuesto no se da de forma universal. Parece aceptado que el organismo adecuado para realizar la gestión es la ONU, sin embargo esto puede poner en manos de esta organización la financiación que provenga únicamente de aquellos países que acepten la recaudación de este impuesto. En el caso de Europa, esto representaría que las aportaciones de la UE a la ONU se verían aumentadas significativamente. La recaudación de un Impuesto a las Transacciones Financieras puede hacerse a través de los Bancos Centrales. En la Unión Europea debería realizarse la recaudación a través del BCE, el cual podría transferir los fondos a un organismo creado a tal efecto en la ONU. Es importante tener en cuenta que el establecimiento de este impuesto debe ir acompañado de un cambio en la política frente a los paraísos fiscales, ya que de otro modo estos supondrán un obstáculo para la transparencia y el control de los intercambios financieros. Concretamente se podría plantear la siguiente propuesta: 1. Solicitar a la ONU la creación de un órgano específico para la gestión del ITF 2. Potenciar los ODM 3. Potenciar programas específicos de control de la producción y comercio de armas 4. Potenciar los programas de protección de derechos humanos de obligado cumplimiento para los países de la ONU 5. Establecer sistemas de inspección de actividades de empresas transnacionales 6. Potenciar los programas de soberanía alimentaria 7. Potenciar los programas de producción de energía renovable BIBLIOGRAFÍA Panel de observación de la financiación para los ODM. Objetivos de Desarrollo del Milenio. Informe 2012 Estudio Económico y Social Mundial En Busca de nueva financiación para el Desarrollo Propuesta de moción a las Administraciones Públicas a favor de un ITF. Attac España. Sobre el Estado del Debate en torno a los Impuestos Internacionales. Peter Wahll. RESUMEN El Impuesto Sobre Transacciones Financieras es un instrumento imprescindible para regular el funcionamiento de los mercados financieros. Su implantación a nivel global tiene repercusiones fundamentalmente en los siguientes ámbitos: 6

7 1. Es un instrumento fundamental para evitar la posibilidad de especulación sobre el mercado de divisas, especialmente en operaciones cortas, lo que protege a las monedas de bruscas fluctuaciones en este mercado. Así se posibilita que los estados puedan mantener la soberanía sobre sus monedas. 2. Es fundamental para evitar la especulación sobre todo tipo de productos financieros, lo cual evita fluctuaciones dramáticas en productos que pueden ser esenciales como la deuda soberana, materias primas esenciales, alimentos, etc. 3. Es el modo adecuado de conseguir que el comercio y el mercado esté al servicio de las necesidades de la sociedad y no al revés. 4. Es el modo adecuado de limitar las operaciones especulativas que es el modo en que se ha producido la crisis económica actual 5. Es un modo de conseguir financiación para la redistribución de la riqueza a escala global que posibilite el desarrollo de los lugares más pobres del planeta. Los ingresos que puedan generar este impuesto deben gestionarse de forma global por medio de una agencia creada a tal efecto en la ONU. Estos ingresos no deben limitarse a financiar los programas contemplados en los Objetivos de Desarrollo del Milenio, sino que han de servir para un planteamiento más ambicioso en los objetivos de desarrollo que tenga en cuenta los problemas mundiales más graves, como son: La especulación sobre productos alimentarios básicos La destrucción de los sistemas tradicionales de producción de alimentos La producción y comercialización de armas de todo tipo que posibilitan La destrucción del medio ambiente La expoliación de recursos naturales esenciales para la industria y la energía El desamparo de millones de personas frente a abusos sistemáticos de los derechos humanos a menudo perpetrados por gobiernos o por grandes corporaciones La limitada capacidad de actuación de los tribunales internacionales Desde el Partido Por Un Mundo Más Justo se propone la formulación de un nuevo paradigma de lucha contra la pobreza y la defensa de los Derechos Humanos que parta de la base de la existencia de recursos suficientes para una vida digna y que cuente con los fondos generados por el Impuesto a las Transacciones Financieras. 7