QUIÉN TE HA DICHO QUE EL AMOR ES ROSA? DE ESO NADA, EL AMOR ES DE TODOS LOS COLORES: AZUL CIELO, NEGRO CARBÓN, AMARILLO CHILLÓN, VERDE ESPERANZA

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María Mercedes Cabrera Tebar
hace 8 años
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1 Sentidas y Curiosas QUIÉN TE HA DICHO QUE EL AMOR ES ROSA? DE ESO NADA, EL AMOR ES DE TODOS LOS COLORES: AZUL CIELO, NEGRO CARBÓN, AMARILLO CHILLÓN, VERDE ESPERANZA Y QUIÉN TE IMPIDE ESCRIBIR UNA CARTA DE AMOR A TU VECINA, AL NOVIO DE TU PRIMA O A TU MÓVIL, A TUS PANTALONES VIEJOS, A TU ALMOHADA Y A TU CAMA? CABE TODO: CARTAS DE AMOR SERIAS, DIVERTIDAS, SENTIDAS, CURIOSAS Y HASTA DISPARATADAS.

ESPERANZA Y QUIÉN TE IMPIDE ESCRIBIR UNA CARTA DE AMOR A TU VECINA, AL NOVIO DE TU PRIMA O A TU

2 El departamento de Lengua y Literatura inicia este curso el Certamen de cartas de amor, sentidas y curiosas. Hemos recibido más de las esperadas, así que os animamos a que nunca dejéis de escribir también del amor, en sus múltiples facetas. Os dejamos aquí algunas, para que las disfrutéis. Como esto de abrir el corazón es un poco delicado, respetamos el deseo de anonimato de los autores. Amor a los que luchan, a los que abren los ojos ante las injusticias. Amor a los que protestan, a las barricadas, a aquellos que se rebelan todos a una por el bien de la mayoría del pueblo. Amor a los que salen ahí fuera para cambiar las cosas. Amor a los que están dispuestos a los que sea, a pelear. Amor a los que dan la cara. Amor a la revolución de las ideas. XT Echar de menos un sonido, un pistón, un carburador, un manillar y el ruido de un motor una pista, una vereda, un monte virgen, una caída, la primera calada, el tubo de escape y la marcha Las luces de cruce, el escape del aire, la berrea de octubre y los atardeceres en la chaparra el otoño, pisar hojas, el frío arroyo el punto muerto, la sexta marcha. Las rectas, los derrapes, el grave sonido de los cuatro tiempos el embrague, el freno, el acelerador, la sirga, los pueblos blancos el frío que paraliza las manos desnudas, el abrigo y el gorro, la llanura nocturna. Y la última gota que estuvo en tu depósito.

Como esto de abrir el corazón es un poco delicado, respetamos el deseo de anonimato de los autores. Amor a los que luchan, a los que abren los ojos ante las injusticias.

3 Querido Amor: Me conoces tanto que adivinas mis pensamientos con solo una mirada. Y hace nueve años que estamos juntos. Te acuerdas del día que nos conocimos? Aquella mirada hechizada, como un dardo envenenado, con un veneno que cada día crece. Te acuerdas de nuestro primer encuentro a solas? Yo muerta de miedo, temblorosa, pero al mismo tiempo eufórica e impaciente por hacerlo. Jamás olvidaré el primer roce de tu piel desnuda, suave y tersa. Cómo nos quedamos inmóviles, en silencio, simplemente contemplándonos, examinando nuestros cuerpos el uno al otro, pensando en lo que iba a ocurrir. En aquel momento empecé a comprender un vocabulario nuevo: amor, nosotros, magia esas estupideces que suenan ridículas pero en ese momento sabes que no, les encuentras sentido, un sentido especial. Y después de tantos años sigo sintiendo lo mismo que nuestro primer día. Te acuerdas de aquella tarde que marcó nuestras vidas? Nuestro amor secreto, enigmático, misterioso, lo mostramos al mundo. Lo compartimos con ellos. Y desde ese día lo seguimos haciendo. Cuántas páginas de nuestra historia han pasado ya, repletas de buenos recuerdos felices y a veces no tanto. Recordarás los días de enfado, separados, sin dirigirnos el uno al otro. A veces se podía intuir el final, o nuestro peor momento, aquel en el que te irritaste de tal modo que tuvimos que darnos un tiempo, creíste que ya no eras lo más importante de mi vida. Parece mentira, amor mío, que conociéndome tan bien no sepas que tú, siempre serás mi principal adicción. Gracias, mi clarinete, compañero de viaje, por todo este tiempo y por aquel que nos falta recorrer. Fdo: Clara Clarinete PD. Recuerda el ensayo de hoy a las cuatro. Y que de una vez me tienes que aclarar ese tatuaje que llevas en el cuello que dice Buffet Crapon a Paris. Made in France.

Yo muerta de miedo, temblorosa, pero al mismo tiempo eufórica e impaciente por hacerlo. Jamás olvidaré el primer roce de tu piel desnuda, suave y tersa.

4 El tiempo pasa, los años pesan, los amigos vienen y se van. Aférrate a tu familia, te salvará del fracaso. Esto lo digo para centrarme en ti. Aunque estés viejo y enfermo, el reflejo de tus años jóvenes sigue en tus fotos. Has sido con el que más he disfrutado del fútbol, pues sólo a ti le gusta y fuiste tú quien me hizo ser del Numancia y del Real Madrid. Hoy en día del Numancia ya no soy pero los partidos del Real Madrid no me los quita nadie. Meses antes tú veías los partidos en el bar y yo en casa. Ahora esto ha cambiado, no puedes, pues estás malito, la vida te está dando palos constantemente. En menos de un mes, tres veces en el hospital. Tristeza absoluta, el cielo está gris y eso tampoco ayuda. Lo has pagado caro. De joven estabas hecho un tarzán pero ese pulmón menos pasa factura, perdura ahí y fastidia, fastidia verte así. Has tenido buenos momentos con nosotros, una casa al lado en nuestro camping, y todos hemos disfrutado. Esto te lo escribo a ti, la abuela ya sabe que esta vez te toca a ti y me arrepiento de no haberlo hecho antes. Ten paciencia con la abuela, sólo quiere ayudarte, pues eres su pasado y su presente. Toda una vida juntos. No pudimos ver el derbi juntos, por lo menos ganó 3-0, pero no es lo mismo verlo yo solo en tu casa, sin ti, sin nadie con quien celebrarlo. Si vas, si vas, si vas a irte, hazlo por la puerta grande, como otras veces. Tienes mis respetos, tú te lo has ganado con creces, sé feliz, recupérate, te lo mereces. Con esto concluyo, abuelo. Si me mandas alguna carta, que no sea desde el cielo, que se corta.

Has sido con el que más he disfrutado del fútbol, pues sólo a ti le gusta y fuiste tú quien me hizo ser del Numancia y del Real Madrid.

5 Me debes algo Pensar que nuestra relación ha llegado al fin, nuestros momentos del presente son ahora solo recuerdos del pasado. Echaré de menos tu aroma al despertar, nuestras conversaciones que siempre acaban en un te quiero, nuestras tardes juntos de la mano, abrazándonos sin parar. Por qué? Por qué te vas? Te necesito aquí a mi lado. No me dejes así sin más. Me debes algo, un beso. No solo un beso, sino el último beso, nuestro último beso.. Silencio. Oscuridad. La luna blanca y redonda perfectamente encajada en el centro de mi ventana. Yo. Boca abajo. Tumbada en la cama. Con mis codos en la almohada. Mi cara reposando sobre mis manos. Y mi mirada perdida en la inmensidad y la blancura de esas estrellas y esa luna que me acompañan, como tantas otras noches, en mis más profundos pensamientos e insomnios de los cuales, como siempre, tú eres la razón. En estos momentos en los que todos duermen, yo, sola en el silencio de mi cuarto, pienso en ti. En tu olor. En tus ojos. En tu sonrisa. Porque eres el único dueño de mis pensamientos y de mis sueños, de mi alegría y mi tristeza, el dueño de mis suspiros y mis miradas perdidas. Eres tú, el dueño de mi alma y de mi ser. Cuando estamos juntos, entonces y sólo entonces, me siento completa. Es tu forma de mirarme, de hablarme, de cogerme la mano al caminar, de abrazarme son esos pequeños detalles los que me enamoran. Mi cabeza reposando sobre tu pecho y tus brazos rodeándome. Entre el calor de tus brazos es cuando me siento arropada y protegida. Noto tu respiración. Oigo tus latidos. El mundo se para y sólo existimos tú y yo. Dos corazones palpitando al unísono. Cuando hablamos me pierdo en tus oscuros ojos y tu mirada recorre cada rincón de mi ser. Cuando me acaricias con tanta suavidad y delicadeza mi corazón salta de alegría. Y es en esa infinidad de momentos, en los que me haces sentir única, en los que mi mayor deseo es que nuestros labios se unieran eternamente. Pero muy a mi pesar, eso no puede ser. Tú no me perteneces. Pero si el destino ha querido que nos conociéramos y nos ha puesto al uno en el camino del otro, es por algo. Y yo tan solo espero que todas estas plegarias y deseos se cumplan. Y que tú y yo podamos unirnos, algún día, en ese esperadísimo beso de amor. Que el mundo se pare, que sólo existamos tú y yo. Dos corazones palpitando al unísono.

Te necesito aquí a mi lado. No me dejes así sin más. Me debes algo, un beso. No solo un beso, sino el último beso, nuestro último beso.. Silencio. Oscuridad.

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