El Exilio Republicano Español en México; Una Emigración Subvencionada ( )

Transcripción

1 Aurelio Velázquez Hernández Universidad de Salamanca El Exilio Republicano Español en México; Una Emigración Subvencionada ( ) El éxodo republicano acaecido tras la derrota en la Guerra Civil Española ( ) tuvo unas características muy diferenciadas de otros exilios de la larga y azarosa historia de las persecuciones políticas en nuestro país. En primer lugar por su cuantía, se trata del éxodo más masivo de la historia de España con alrededor de medio millón de evacuados 1. Pero también le diferencia de otros procesos su carácter institucionalizado. El hecho de producirse la salida del país de todas las instituciones del Estado republicano en bloque y el mantenimiento, o al menos el intento de mantener, su funcionamiento en el exilio supone un fenómeno novedoso en los exilios hispánicos. Sin lugar a dudas, estas instituciones no habrían podido siquiera pretender sobrevivir en el exilio de no ser por la existencia de relativamente cuantiosos fondos económicos que lograron mantener bajo su control tras su salida del país. Gracias a esos fondos, el exilio republicano español se caracterizará, también, por ser un exilio organizado. El mantenimiento de recursos en manos de las instituciones republicanas permitirá el establecimiento de planes de reemigración y alojamiento en terceros países caracterizando al exilio republicano como una emigración organizada y subvencionada. Especialmente interesante, en este sentido, será el caso mexicano. En este país americano, el segundo en importancia en cuanto a número de refugiados acogidos 2, se mostrará con singular claridad la actividad organizativa llevada a cabo por las instituciones del Estado y las grandes diferencias y disputas entre los diferentes grupos políticos del exilio. El mayor exponente de esta situación será la actuación de los llamados «Organismos de Ayuda a los Republicanos», que tendrán en el país azteca su 1 Las cifras sobre el número de refugiados arribados a Francia varia según los autores, las más fiables son las ofrecidas por Javier Rubio que señala una cantidad de refugiados en febrero de Que sumados a los llegados en otras fases de la guerra establecería el número total de los refugiados pasados por Francia cerca de los tres cuartos de millón. Javier RUBIO, La emigración de la guerra civil de , Madrid: Editorial San Martín, 1977, Vol. 1, p Dolores Pla establece un total de españoles llegados a México entre 1936 y 1950 basándose en los datos de la Dirección General de Estadística. Dolores PLA BRUGAT, Els exiliats catalans: un estudio de la emigración republicana española en México, México: INAH - Orfeó Català de Mexic, Libros del Umbral, 1999, Clara Lida, investigando el Registro Nacional de Extranjeros señala la cifra de registros de españoles mayores de 15 años entre 1936 y Clara E. LIDA, con la colaboración de Leonor GARCÍA MILLÉ, «Los españoles en México: de la Guerra Civil al Franquismo, » en LIDA, Clara E. (coord.). México y España durante el primer Franquismo, rupturas formales, relaciones oficiosas, , México: El colegio de México, pp

2 principal marco de actuación. La existencia del negrinista SERE (Servicio de Evacuación de los Republicanos Españoles) que desarrollará sus actividades en México a través de su filial CTARE (Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos Españoles) y de su rival, la prietista JARE (Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles) marcaron los primeros años del exilio mexicano 3. El exilio republicano español en México será, como reconocidos autores han puesto de relieve, una emigración privilegiada 4. Privilegiada, entre otras causas, porque contó con el apoyo económico de varios organismos de ayuda que facilitaron su establecimiento. En el presente artículo analizaremos esta labor de solidaridad, centrándonos en las ayudas directas ofrecidas por estos organismos en México durante la década de Ofreciendo novedosos datos cuantitativos, estudiaremos lo aportado en asistencia social, no solamente por los polémicos SERE y JARE, sino también por sus continuadores CAFARE y el Gobierno Republicano en el Exilio. Estableceremos un estudio comparativo que nos permita obtener relevantes conclusiones sobre su funcionamiento. 1. El SERE-CTARE y sus albergues en México ( ) El primer organismo en entrar en funcionamiento fue el Servicio de Emigración de Refugiados Españoles (SERE). Tuvo su origen en Francia, justo tras la caída de Cataluña en manos de las tropas nacionales, en febrero de El ejecutivo de Juan Negrín pretendía mantener su legitimidad, como gobierno democráticamente elegido, en la nueva etapa que avecinaba el exilio 5. Para procurar dar remedio a la desesperada situación de miles de refugiados, el Gobierno de Negrín creó el SERE, como un organismo autónomo delegado del Gobierno 6. La principal labor que llevará a cabo el SERE fue la de organizar una serie de expediciones colectivas con las que se pretendía 3 Sobre los organismos de ayuda es necesario consultar la obra de Abdón MATEOS, La Batalla de México. Final de la Guerra Civil y ayuda a los refugiados, , Madrid: Alianza Editorial, Véase también la de Ángel HERRERÍN, El dinero del exilio. Indalecio Prieto y las pugnas de posguerra, Madrid: Siglo XXI, Parafraseamos el título de Clara E. LIDA, Una Inmigración Privilegiada: Comerciantes Empresarios y profesionales Españoles En México En Los Siglos XIX Y XX, Alianza América 34, Madrid: Alianza, Respecto a la etapa de Negrín en el exilio puede consultarse su última y más completa biografía: Enrique MORADIELLOS, Don Juan Negrín, Barcelona: Ediciones Península, 2006, pp Sobre los pleitos entre éste e Indalecio Prieto y otros líderes republicanos puede consultarse José Carlos GIBAJA VELÁZQUEZ, Indalecio Prieto y el socialismo español, Madrid: Editorial Pablo Iglesias, 1995, pp así como el más reciente A. MATEOS, La batalla. 6 La definición es de E. MORADIELLOS, Don Juan, p

3 trasladar a grandes contingentes de refugiados a algunos países americanos. De entre estos el mayor contingente, con mucha diferencia, recaló en México. En este país se organizará, a su vez, un nuevo organismo, dependiente del anterior, el Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos Españoles (CTARE) 7. Este nuevo organismo, bajo la dirección del Dr. José Puche 8, debía encargarse de las labores de acogida de los contingentes enviados por el SERE a México y de procurarles mantenimiento y colocación. Para ello desplegó todo un programa de inversiones en múltiples iniciativas empresariales agrícolas, industriales, culturales y educativas. Las actividades del Comité Técnico se iniciaron con la recepción de los refugiados de las tres grandes expediciones organizadas por el SERE; Sinaia, Ipanema y Mexique. Arribadas a Veracruz, se organizarán en este puerto una serie albergues para alojar al personal recién desembarcado, hasta que llegara el momento de trasladarlos a sus respectivos destinos. En total, se instalaron tres comedores y ocho albergues que funcionaron entre junio y septiembre de 1939 y tenían capacidad para alojar a unas dos mil quinientas personas 9. Una vez pasado el trance de la recepción de los grandes embarques, los albergues veracruzanos comienzan a vaciarse, siendo sus inquilinos trasladados a diferentes estados del país. Finalmente, los alberges de Veracruz se cerrarán el día 22 de septiembre de 1939, comenzando así la actividad cotidiana del CTARE. El plan de ayudas diseñado por José Puche y sus colaboradores comprendía la dispersión de los refugiados españoles por todo el territorio mexicano. Para ello se establecieron toda una serie de «agentes coordinadores» por los diferentes Estados de la república mexicana que, a modo de representantes del CTARE, debían encargarse de proporcionar medios de subsistencia y alojamiento al mayor número de refugiados posible, según las posibilidades del territorio. De esta forma, se fue trasladando a los refugiados desde Veracruz a los diferentes Estados en los que se habían encontrado medios de colocación. El Comité Técnico era consciente de que el mayor contingente de refugiados recalaría en el Distrito Federal y, por tanto, sería en la capital dónde debían centrar sus actividades. En este sentido, estaba prevista la instalación de una serie de 7 Véase María Magdalena ORDÓÑEZ ALONSO, El Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos Españoles: historia y documentos, , México: INAH, Véase J. L. BARONA, y M. F. MACEBO, José Puche Álvarez ( ): Historia de un compromiso. Estudio bibliográfico y científico de un republicano español, Valencia: Generalitat Valenciana, Patricio G. QUINTANILLA, CTAEM, Memoria de las actividades desarrolladas por la Delegación de Veracruz, sin edición, sin fecha, Fondo Histórico del Ateneo Español de México. 3

4 albergues y comedores que dieran alojamiento, de forma temporal, a aquellos refugiados a los que les costara encontrar una ocupación. Se crearon doce albergues y ocho comedores en el Distrito Federal así como otros ocho albergues diseminados por toda la República Mexicana 10. Para septiembre de 1939, recibían la ayuda proporcionada por el Comité unas dos mil quinientas personas aproximadamente. Un 20% de las cuales se encontraban alojadas en alguno de sus albergues, donde recibían cama y, en algunos casos, también comida, mientras que el resto cobraba un auxilio en metálico para su manutención 11. Este problema se agravará con la concentración de los refugiados en la ciudad de México. A pesar de la dispersión inicial, los expatriados se dan cuenta de que en el Distrito Federal tienen más posibilidades de encontrar trabajo 12, además allí contaban con el apoyo directo de las organizaciones de ayuda y de las redes de refugiados que comenzaban a tejerse por la capital. De esta forma, la capacidad de los albergues instalados por el CTARE en la Ciudad de México se verá totalmente rebasada, teniendo que recurrirse cada vez más a entregas de auxilios en metálico. Éste tipo de auxilios resultaba mucho más onerosos para el Comité que el sistema de albergue y comedor, de manera que al dispararse el gasto en auxilios, este empezará a ser una seria amenaza para la continuidad del Comité y la viabilidad de los proyectos empresariales que estaba iniciando, necesitados de fuertes inversiones 13. Paralelamente, la entrega de auxilios en metálico tuvo un efecto desmoralizador pues, en muchas ocasiones, los salarios usuales en el país eran realmente bajos, en comparación con los auxilios fijados por el Comité, 10 No todos estos establecimientos funcionaron al mismo tiempo. Para abril de 1940 los albergues del CTARE en el Distrito Federal tenían capacidad para alojar a 450 personas. Consultar Capacidades de los Albergues, México D.F., 23 de abril de 1940, BNAH/CTARE, exp mientras que para junio de 1940, una vez suprimidas las ayudas en metálico los comedores alimentaban a unas Según Liquidación comedores al 15 de junio de 1940, México D.F., 15 de Junio de 1940, BNAH/CTARE, exp Informe general sobre el problema del Auxilio, México, 30 de Septiembre de 1939, BNAH/CTARE, exp Muchos de los trasladados a diferentes estados no tuvieron un trabajo estable al llegar a su destino, en otros muchos casos el trabajo no se correspondía para nada con su capacitación profesional y en otros, especialmente en el caso de los empleados en la agricultura, el salario ofrecido apenas permitía la supervivencia. 13 El presidente del CTARE, José Puche calificaría la decisión de entregar auxilios en metálico como «Uno de los mayores errores en los que ha tenido que incurrir el Comité, pues este sistema ha consumido una cantidad importante con un control menos cierto que el que hubiera podido llevarse otorgando el auxilio en forma de albergue y comedor», En «Informe del Dr. José Puche ante la Conferencia Panamericana de Ayuda a los Refugiados Españoles», Trascrito en Boletín al servicio de la emigración española, nº 26, México D.F., 22 de febrero de

5 de modo que, realmente, no les compensaba encontrar un trabajo. Esto, a la postre, hizo aparecer la picaresca 14. Por todas estas causas, el gasto que el Comité Técnico debía realizar para satisfacer el capítulo de ayudas era cada vez mayor, hasta el punto de llegar a ser auténticamente insoportable. Así, a finales de 1939 se decidió la supresión de todas las ayudas en metálico, pasando a ofrecerse solamente ayudas en la forma de «albergue y comedor» 15. Sin embargo, la enorme oposición por parte de los beneficiarios así como las protestas de varias asociaciones de refugiados lograron que esta supresión se fuera aplazando y finalmente imponiendo de forma muy progresiva. También influirá en el alargamiento de este proceso la competencia con el órgano de ayuda prietista, la JARE, que comienza a funcionar en esos momentos en México, repartiendo ayudas en metálico. Finalmente, la supresión de los auxilios en metálico acabará transformándose en un proceso largo y complejo que no llegará a culminar hasta mayo de Estos procesos de recortes de ayudas coincidirán con el agotamiento de los fondos del Comité Técnico en la primavera de La incapacidad para mantener las iniciativas creadas, les obligaron a tener que ir limitando sus actuaciones y finalmente a suspender todas sus actividades de ayuda. Así se comunicará al gobierno mexicano la necesidad de cerrar todos los albergues y comedores. El gobierno obligará entonces a la JARE a encargarse de los refugiados allí instalados. El resumen de los gastos erogados en ayudas en México por el CTARE podemos estudiarlo en el cuadro adjunto: Tabla 1: Gastos erogados en México en concepto de auxilios por el CTARE Conceptos TOTAL Alojamiento y alimentación , ,48 0, ,27 Auxilios Generales , ,73 0, ,76 Subsidios , , , ,02 Auxilios Chihuahua 0, ,33 0, ,33 Castillo de Perote , ,46 0, ,89 Instituciones Educativas , , , ,32 TOTAL (Pesos Mexicanos) , , , ,59 Fuente: elaboración propia a partir de datos extraídos de Estados de situación del Comité, , BNAH/CTARE, exp Observamos que en 1941, una vez agotados los fondos del Comité Técnico, se suspenden todas las ayudas del CTARE, quedando solamente algunos gastos para el 14 Era frecuente que cuando un exiliado encontraba trabajo, no se lo comunicaba al Comité de modo que seguía cobrando las ayudas, al tiempo que recibía su salario. Informe general sobre el problema del Auxilio, México D.F., 30 de Septiembre de 1939, BNAH/CTARE, exp Borradores de las actas del Consejo del CTARE, Acta nº 56, 16 de octubre de BNAH/CTARE, caja 232, exp

6 mantenimiento de los centros escolares creados. Analizando las cifras generales observamos que aproximadamente un 56% del total invertido se fue en el capítulo de auxilios generales, en el que se incluyen los auxilios en metálico que venimos comentando así como los gastos médicos pagados por el Comité. Podemos corroborar por lo elevado de las cifras arrojadas en este aspecto en 1939 y 1940 cómo, efectivamente, era especialmente ruinoso y comprendemos los esfuerzos realizados por el CTARE para suspender este tipo de ayudas. Menos cuantiosos, pero también significativos, son los gastos en alojamiento y manutención, en el que se engloban básicamente los albergues y comedores, y que suponen un 14,5 % del gasto. También digno de mención es el capítulo de subsidios, en el que se engloban aquellas ayudas permanentes que se otorgaban a modo de pensión determinadas personalidades y refugiados en situaciones especialmente penosas. Es interesante comprobar que estas serán las únicas ayudas directas que continúen en 1941, una vez desaparecido oficialmente el Comité Técnico. Finalmente, un 9% del gasto se empleará en la creación y mantenimiento de centros educativos que permitirán la escolarización de los hijos de los refugiados. 2. Los Auxilios de la Delegación de la JARE en México ( ) La Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles (JARE) fue el otro gran organismo español que se encargó de la asistencia de los refugiados en México. Su origen es fruto de la división política en el seno del exilio. La fundación de este organismo estuvo ligada a la historia del «yate Vita» 16 y el tesoro que transportaba. Baste decir que pese a ir dirigido por Negrín para José Puche, éste acabó cayendo en manos de Indalecio Prieto, que vio en el tesoro una poderosa arma para reforzar sus posiciones políticas y debilitar al rival en que se habían convertido Juan Negrín y sus partidarios. Prieto, en un inteligente movimiento ofrecerá el tesoro a la Diputación Permanente de las Cortes, único órgano al que consideraba competente y en el que sabía podía obtener una mayoría favorable. Finalmente, la Diputación, desconociendo al gobierno de Negrín, decide crear un organismo para administrar estos fondos: La JARE. La recién creada Junta decidió elevar una Delegación a México, lugar donde se 16 Véase Amaro del Rosal, El oro del Banco de España y la Historia del Vita, México: Grijalbo, 1976 y José FUENTES MARES, Historia de un Conflicto, (el tesoro del "Vita"), Madrid: CVS ediciones, Así como Virgilio BOTELLA PASTOR, y Alicia Alted (ed. e introducción), Entre Memorias, Las finanzas del Gobierno Republicano español en el exilio, Sevilla: Editorial Renacimiento, 2002, pp

7 encontraban todos sus recursos, presidida por Indalecio Prieto. De esta forma logrará Prieto mantener bajo su control los recursos del Vita. La política de ayuda que planteará la Delegación de la JARE, será, en gran medida, muy diferente de la de Comité Técnico, a pesar de lo cual tendrá puntos en común. Ambos defendían la idea de evitar la entrega de subsidios en metálico, si bien, finalmente, cayeron en la paradoja de tener que repartirlos. La Delegación de la JARE basaba su política asistencial en México en el reparto de lo que ellos llamaban «socorros». Consistía en la entrega de cantidades en efectivo, por una sola vez a los refugiados para solucionar problemas económicos concretos, y partiendo de una investigación sobre las necesidades reales del peticionario. Independientemente, la Delegación también concedió pensiones a un grupo reducido de personas, básicamente altas personalidades de la República 17. En la primavera de 1940, el CTARE comenzaba a suprimir sus auxilios y a reducir drásticamente las ayudas que hasta entonces otorgaba. Consecuentemente, se incrementó el número de solicitudes de ayuda para la JARE. En estos momentos, los miembros de la Delegación decidieron crear una «Comisión de Socorros» que se encargara del reparto de ayudas. A fin de evitar las suspicacias políticas, se designaron para esta comisión representantes de cada uno de los partidos que habían participado en la JARE. Se trataba de revestirla de la misma legalidad que tenía la propia Junta 18. Sin embargo, las discrepancias entre esta Comisión y la Delegación no tardarán en aparecer pues la primera solía exceder su presupuesto creando serios problemas financieros a la Delegación 19. En agosto de 1940, el CTARE se declara ante el Gobierno Mexicano incapaz de continuar sosteniendo el costo de las ayudas que ofrecía a los refugiados. La Secretaría de Gobernación llegará a un acuerdo con la JARE para que esta última se hiciera cargo del mantenimiento de los más desamparados. Sin embargo, ni a la Delegación ni a Gobernación le interesaba la continuidad de todo el aparato de albergues y comedores creados por el CTARE. Para la JARE era un enorme expendio y 17 Fueron receptores de estas ayudas personajes como Diego Martínez Barrio, el General Miaja, el General Pozas y las viudas de Azaña, Cruz Salido y Zugazagoitia, por poner algunos ejemplos. Según Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 60, 25 de abril de 1940, Libro 1, Fondo Carlos Esplá, Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca (En adelante CDMH). 18 La Comisión estaría presidida por el Coronel Gaspar Morales Carrasco, con el Teniente Coronel Daniel García Plaza como secretario y como vocales Juan Ruiz Olazarán (PSOE), Fermín Solozábal (IR), Manuel Mateos Silva (UR), Dalmau Costa Vilanova (ERC), Félix Echevarría Albéniz (PNV), Emilio Galán González (UGT) y Miguel Yoldi Beroiz (CNT). Véase Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 65, 6 de mayo de 1940, Libro 1, CDMH/Esplá. 19 En Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 70, 19 de mayo de 1940, Libro 1, CDMH/Esplá. 7

8 una humillación política tener que mantener una de las creaciones del CTARE. Y para la secretaría mexicana estos albergues eran un foco de conflictividad social y fomentaban la concentración de la mayor parte de los refugiados en la capital, agravando sus problemas de integración y el disgusto de ciertos sectores de la sociedad azteca. Por todo esto se decidió su clausura 20. Ante la preocupación del gobierno por la concentración de refugiados en la capital, la solución ofrecida por la Delegación de la JARE fue la de costear socorros fuera del Distrito Federal. Los refugiados para cobrar el auxilio debían residir fuera del Distrito Federal. Por otra parte, también se obligará a la Delegación a ofrecer por primera vez subsidios de forma continuada durante seis meses, punto éste al que siempre se habían negado sus miembros por considerarlo inmoral y susceptible de crear clientelismos. Otro asunto para el que la Delegación tuvo que prestar sus servicios fue el de la recepción de los refugiados recién llegados en los embarques colectivos organizados desde Francia y el Norte de África. El primero de esos embarques fue el del vapor «Cuba». Esta expedición, la última de las organizadas por el SERE desde Francia, llegó a América cuando el CTARE ya había agotado sus fondos por lo que fue la Delegación de la JARE la que por mediación del gobierno mexicano tuvo que hacerse cargo de las labores y gastos de recepción 21. No fue, sin embargo, el único embarque que debieron atender los miembros de la Delegación de la JARE. Tras un largo período de gestiones infructuosas, la JARE inauguró sus embarques colectivos desde Francia y norte de África con el del Quanza, en septiembre de 1941, destinado a rescatar a los pasajeros del barco Alsina que se encontraban retenidos en Dakar. A éste le seguirían nuevos embarques colectivos durante la primavera y verano de En total, en todas estas expediciones, se calcula que la JARE trasladó a México a aproximadamente cinco mil refugiados 22. Por otra parte, también se acordó conceder las mismas ayudas a los 20 «Nota informativa de Indalecio Prieto a la Prensa», Transcrita en Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 118, 24 de agosto de 1940, Libro 1, CDMH/Esplá. 21 La JARE se encargará de la recepción de los embarcados en el Cuba y les ofrecerá el mismo tipo de subsidio que se ofrecía a todos los residentes en México a cambio de abandonar el Distrito Federal, con las mismas condiciones aunque con una duración de ocho meses. Ver Memoria que la Delegación de la JARE en México presenta a la CAFARE, México D.F., 13 de diciembre de 1942, CDMH/Esplá, exp. 4.3/ Según las cifras arrojadas por Abdón MATEOS, De la Guerra Civil al exilio: Los republicanos españoles y México, Indalecio Prieto y Lázaro Cárdenas, Madrid: Biblioteca Nueva, Fundación Indalecio Prieto, 2005, p

9 españoles que llegaban desde la República Dominicana con sus pasajes pagados a cuenta de la Delegación 23. En resumen, podemos calificar, en cierto modo, la política de ayudas de la Delegación de la JARE como errática. No tuvo unos principios básicos establecidos. Hemos podido comprobar cómo se encontraba a merced de los acontecimientos. La idea original era la de no establecer subsidios pero las circunstancias del momento le obligarán dilapidar grandes cantidades en este aspecto. Podemos contemplar un resumen de las cantidades empleadas por la JARE en ayudas en México en el cuadro: Tabla 2: Gastos erogados en México en concepto de auxilios por la JARE JARE TOTAL Socorros , , , ,99 Subsidios 8.000, , , ,86 Servicio Médico , , , ,48 Comité Femenino 3.000, , , ,95 Educación , , , ,34 TOTAL (Pesos Mex.) , , , ,62 Fuente: Elaboración propia a partir de datos obtenidos en Libro de Gastos de la JARE, en Fundación Indalecio Prieto, Fondo Víctor Salazar y Álbum de Estadística de la JARE, Fondo JARE, AMAE, Caja M Hay que señalar el espectacular aumento del gasto en subsidios durante 1941, se corresponde esta cifra con el pago de subsidios por residir fuera de la capital a que obligó el gobierno Mexicano. También se incrementa enormemente el gasto en socorros. Esto se explica por las cantidades que, durante ese año, se entregarán a modo de pequeños préstamos para la creación de pequeñas industrias y comercios 25. El aumento del gasto en educación a partir de 1941, se debe a la creación por la Delegación de la JARE de su propio centro educativo: el Colegio Madrid. Por último, hay que comentar que el Comité Femenino era una sección de la Delegación creado en el verano de 1940, cuando ante la supresión de las ayudas del CTARE, la JARE hubo de expandir enormemente su estructura para ayudas en México. Este comité, estaba compuesto en su mayor parte por viudas de destacados republicanos y tuvo una labor 23 Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 180, 9 de febrero de 1942, Libro 3, CDMH/Esplá. 24 Exponemos aquí estas cifras de forma provisional. Los gastos en ayudas de la JARE deben aún ser puestos en revisión, pues las fuentes encontradas son en muchos casos contradictorias entre sí. 25 En este capítulo de préstamos para pequeñas industrias y comercios así como para la adquisición de útiles de trabajo la JARE empleó $ ,99. En enero de 1942 un decreto del gobierno de Ávila Camacho obligaba a la JARE a constituirse en un organismo acorde a las leyes mexicanas. La JARE creó a finales de 1941 la Financiera Hispano-Mexicana S.A. a partir de entonces este tipo de créditos ya no aparecen en la cuentas de la JARE sino de la Financiera. Puede consultarse el decreto de 21 de enero de 1941 en MATESANZ, José Antonio (coomp.) México y la República Española: Antología De Documentos, , México: Centro Republicano Español de México, pp

10 muy activa durante los primeros meses. Se encargaba de establecer una especie de tutela sobre los niños exiliados, afrontando sus necesidades, concediendo becas para enseñanza y tutelando la instalación y mantenimiento de un comedor infantil para los niños becados 26. Por último, el servicio médico será un auténtico quebradero de cabeza para la Delegación, principalmente por lo elevado de su costo. Echará a andar a finales de 1940, anteriormente simplemente se pagaban las facturas de sanatorios mexicanos. Contaban con una serie de médicos, también refugiados, en plantilla que se encargaban de la atención de sus compatriotas. El servicio fue considerado ruinoso por la JARE, pero era muy valorado entre sus usuarios por lo que los intentos de la Delegación por limitarlo levantaron airadas protestas. Finalmente, en junio de 1942 deciden la supresión del servicio médico que se acabará privatizando en manos de sus propios médicos que fundarán la Benéfica Hispana La intervención del Gobierno Mexicano y la CAFARE ( ) Son relativamente bien conocidas las circunstancias que llevaron, a finales de 1942, al gobierno mexicano a intervenir la JARE 28. El endurecimiento de la política con respecto a los refugiados españoles fue evidente con el cambio de sexenio de Cárdenas a Ávila Camacho. El gobierno Mexicano había adquirido importantes compromisos internacionales en la protección de los refugiados españoles que debían ser respaldados con los fondos de la JARE 29. Por tanto, era necesario que el ejecutivo azteca tuviera datos exactos acerca de las cantidades manejadas por Prieto y sus colaboradores. Sin embargo, estos nunca se avinieron a facilitarlos. El decreto de 21 de enero de 1941, por el que se instaba a la JARE a conformarse en un organismo mixto con representantes del gobierno y de acuerdo a las leyes mexicanas, iba en ese mismo sentido. No obstante, 26 Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 65, 6 de mayo de 1940, Libro 1, CDMH/Esplá. 27 Esta supresión de los servicios Médicos decretada a partir de julio de 1942 se hará de forma progresiva para disminuir las protestas de los afectados. Ver Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 236, 29 de junio de 1942, Libro 4, CDMH/Esplá. 28 Pueden consultarse al respecto las obras de A. MATEOS, De La Guerra, pp ampliada y mejorada en su último A. MATEOS, La batalla, pp Debe consultarse también Á. HERRERÍN, El Dinero, pp Nos referimos concretamente al convenio Franco-Mexicano de agosto de 1940 por el que el gobierno mexicano se comprometía ante el gobierno de Vichy a aceptar y transportar a México a cuantos exiliados españoles en territorio francés lo deseasen. Véase Luis I. Luis Rodriǵuez, Misioń de Luis I. Rodriǵuez en Francia: la proteccioń de los refugiados españoles: julio a diciembre de 1940, 1º ed., Me xico D.F.: Colegio de Me xico; Secretaría de Relaciones Exteriores; Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologiá, 2000, pp

11 los miembros de la Delegación hicieron todo lo posible para retrasar su aplicación y obstaculizarla. Finalmente, en noviembre de 1942 un nuevo decreto impondrá la desaparición de la JARE y su substitución por un organismo mixto con representantes españoles y mexicanos. En la toma de tan drástica medida influirán, no solamente, las trabas y dilaciones que a la participación mexicana interponía Prieto, sino también, las enormes discrepancias en el seno de la emigración española. Continuamente se interponían denuncias ante el gobierno mexicano por parte de organizaciones de exiliados por la gestión de los fondos y la actuación de la JARE. Junto a esto, la polémica, suscitada en la prensa, por una denuncia por contrabando al introducir bienes en el país sin pagar impuestos acabó determinando la intervención gubernamental 30. Finalmente, se constituyó una Comisión Administradora del Fondo de Auxilio a los Republicanos (conocida por sus siglas CAFARE), encargada del control, custodia administración de los bienes que, hasta entonces, había manejado la Delegación de la JARE 31. Dicha comisión estaba compuesta por un representante de la Secretaría de Gobernación, Félix F. Palavicini, otro de la Secretaria de Relaciones Exteriores, Luis Sánchez Pontón y un tercero como representante de la JARE, para el que fue designado José Andréu. Andréu, sin embargo, sólo permanecería en esta comisión escasos meses, dimitiendo en abril y dejando los fondos en ayuda de los republicanos españoles solamente en manos mexicanas 32. En cuanto al funcionamiento de esta CAFARE hay que comentar que al comienzo de su actuación contaba con un capital líquido de $ ,42 heredados de la JARE, a lo que habría que sumar algunas fincas urbanas, correspondientes a los inmuebles del Colegio Madrid, oficinas y un rancho en Michoacán 33. Al comenzar sus trabajos, la Comisión era consciente de que los fondos con que contaba no eran muy cuantiosos y de que no podrían obtener nuevos ingresos por lo que aplicaron una política tendente a lograr la mayor economía posible en la administración. Se simplificó al máximo la estructura administrativa reduciendo las oficinas y el 30 Estos aspectos han sido bien estudiados en A. HERRERÍN, El Dinero, pp CAFARE, Informe durante su gestión en año de , En CDMH/Esplá, Exp. 4.2/ Las diferencias entre Andréu y los representantes mexicanos fueron patentes desde los primeros momentos de funcionamiento de la CAFARE. La ruptura definitiva se produce cuando, en marzo de 1943, la CAFARE decida expulsar del consejo de administración de la Financiera Hispano-Mexicana a los antiguos miembros de la JARE: Indalecio Prieto y Carlos Esplá. Andréu como protesta presentará su dimisión que será aceptada, quedando la CAFARE exclusivamente en manos mexicanas. 33 El Rancho Manga de Clavo en Zitácuaro (Mich.) fue adquirido por la JARE pensando en dedicarlo para la instalación de un asilo de ancianos. Véase Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 139, 27 de septiembre de 1940, Libro I, CDMH/Esplá. 11

12 número de empleados de la Comisión, se eliminó el Comité de Socorros pasando a convertir esta sección en una oficina más dentro de la propia administración de la CAFARE. Para procurar obtener la mayor productividad de los fondos disponibles se procuró su inversión en valores y bonos de empresas mexicanas sólidas 34 y la eliminación de todas aquellas inversiones de la JARE que no resultaran productivas. Por último, se aplicará una reducción en el número de ayudas que se otorgaban a los refugiados, limitándolas prácticamente a los refugiados ubicados en territorio azteca. Se empleará una regla invariable: «No dar auxilio de ninguna clase a los refugiados que disfrutan de salud para evitar fomentar ociosidades o vicios», por tanto, sólo se ofrecían ayudas para enfermos, ancianos y viudas de guerra 35. Podemos analizar la política de ayudas de la CAFARE a partir del siguiente cuadro. Tabla 3: Gastos erogados por la CAFARE en México en concepto de Auxilios Total Subsidios indeterminados , , , ,25 Subsidios temporales 5.120, , , ,72 Socorros Extraordinarios , , , ,78 Delegación en Veracruz 6.769, , , ,81 Colegio Madrid y becas , , , ,47 Casas-Hogar , , , ,88 TOTAL (Pesos Mex.) , , , ,91 Fuente: Elaboración propia a partir de varios Balances y Anexos de la CAFARE, en Fondo JARE, AMAE, Caja M-301. Observamos, en primer lugar, que el capítulo de subsidios aparece dividido en dos, entre los indeterminados y los temporales, los temporales eran aquellas ayudas que se ofrecían por un tiempo determinado, normalmente unos meses aunque podía variar y que se ofrecían por causas concretas, como una enfermedad una hospitalización, un período de especial necesidad, etc. En cambio los indeterminados eran los ofrecidos a aquellas personas en necesidad crónica, tales como mutilados, ancianos, enfermos crónicos, etc. Este capítulo de subsidios comprendiendo las dos categorías se llevan el 40,2% de la inversión de esta entidad. Un 10% compone el gasto en socorros extraordinarios, es decir, todas aquellas ayudas que se otorgan por una sola vez de forma puntual. En el capitulo de ayudas directas también cabe señalar lo invertido en la Delegación en Veracruz que heredada de la JARE mantiene esta Comisión y que supone solamente un 0,7%. Más interesante es el gasto en educación y becas, el mantenimiento 34 Según A. HERRERÍN, El Dinero, pp CAFARE, Informe de su gestión durante el año , México DF, 1 de diciembre de 1943, CDMH/Esplá, exp. 4.2/

13 del Colegio Madrid continúa siendo tan oneroso como en la etapa de la JARE y se invertirán grandes cantidades en su funcionamiento, queda patente al ver cómo lo gastado en este apartado supone el 34,2% del total. Con el nombre de «Casas-Hogar» se designó a una serie de albergues que la CAFARE creó con el fin de albergar a algunos de los niños llegados en 1937 y que se alojaron en lo que se llamó la Escuela España-México ubicada en Morelia (Michoacán) pasando a ser conocidos como los niños de Morelia 36. Las múltiples carencias de esta escuela, unidas a que algunos de los niños iban haciéndose mayores y no deseaban seguir estudiando ni permanecer en Morelia, hizo necesario ofrecerles alguna salida. Por iniciativa del General Lázaro Cárdenas, que desde su llegada había ejercido un papel de padrinazgo entre estos niños, y con el apoyo del presidente Ávila Camacho, se conformó un «Patronato de Ayuda a los Niños Españoles» que mediante la creación de estas Casas-Hogar velara por su bienestar. Se permitió a los niños trasladarse a la ciudad de México e instalarse en varias de estas Casas-Hogar cuya finalidad era «[ ] dirigir bajo tutela y en régimen de vida familiar a base del estudio y del trabajo a los alumnos [ ] hasta su emancipación» 37. Al final del período administrado por la CAFARE se habían creado seis Casas-Hogar que daban alojamiento a unos 150 residentes, dos casas para niñas alojaban unas 52 niñas y cuatro para niños que daban hogar a 98 chicos El Comité Técnico del Fideicomiso de Ayuda a los Republicanos Españoles en México (CTFARE) ( ) Tras la reinstauración del Gobierno Republicano Español por las cortes reunidas en México, en agosto de 1945, se llegó a un acuerdo con el Gobierno Mexicano para la administración de los fondos que en beneficio de la emigración española se encontraban en poder de éste último. Un Decreto del ejecutivo federal mexicano a 5 de septiembre 36 Sobre la historia de estos niños pueden consultarse, entre otros, Agustín SÁNCHEZ y Mateo GAMBARTE (Comp.), Un capítulo de la memoria oral del exilio: los niños de Morelia, Morelia (Mich.)- Madrid: Universidad Michoacana San Nicolás de Hidalgo - Comunidad de Madrid, 2002, También Dolores PLA BRUGAT, Los niños de Morelia: un estudio sobre los primeros refugiados espanõles en Me xico, México: INAH, 1980; Víctor Hugo RASCOŃ BANDA, Los Ninõs de Morelia, Me xico: Universidad Autońoma Metropolitana - Casa Juan Pablos - Centro Cultural, 2007; Vera FOULKES, Los "ninõs de Morelia" y la escuela "Espanã-Me xico"; consideraciones anali ticas sobre un experimento social. Me xico: 1953 y Emeterio PAYA VALERA, Los ninõs espanõles de Morelia: el exilio infantil en Me xico, Lleida: Editorial Milenio, Orden del Ministerio de Instrucción Pública que dota de un reglamento a las Casas-Hogar, en Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores (En adelante AMAE), Fondo de la JARE, Caja M Según datos de AMAE/JARE, Cajas M-303 y M

14 de 1945, ordenaba entregar los bienes que restaban de la gestión de la CAFARE traspasándose en fideicomiso a una institución financiera 39. Según un nuevo Decreto de 25 de noviembre de 1945, del Gobierno Republicano Español en el Exilio, aparecido el día 30 en la Gaceta Oficial «[ ] se constituye en México un Comité Técnico encargado de administrar los fondos del Fideicomiso establecido por el Gobierno Republicano Español con objeto de auxiliar a los emigrados españoles» 40. Este organismo debía encargarse de continuar la labor realizada por sus predecesores en México. Continuando el reparto de ayudas a los emigrados necesitados así como el mantenimiento del Colegio Madrid, buque insignia de las creaciones de la JARE y de las Casas-Hogar la más característica de las creaciones de la CAFARE. El Comité estaba constituido por un Presidente, un Secretario y un Contable, que eran libremente nombrados por el Gobierno y podían ser revocados a su voluntad 41. Para dirigir este organismo se contó con personas que ya conocían bien el cometido pues lo habían desarrollado en la época de la JARE. De ésta forma, la presidencia de este organismo fue confiada a Roberto Castrovido Gil que había trabajado en la Comisión de Socorros de la JARE desde , como Secretario se colocará a Ramón Ruiz Rebollo, ex-diputado y también ex-funcionario de la JARE, y Arturo Candela Marquestaut como contable 43. En cuanto a los fondos con los que contaba el fideicomiso para ayudas, según la escritura de su formación, se elevaban a $ ,01 a lo que habría que añadir otros bienes muebles que estaban en posesión de CAFARE y que son entregados al fideicomiso por valor de $ ,53. Y los bienes inmuebles que forman el Colegio Madrid y las Casas-Hogar, entre otros, valorados en $ ,99. Todo ello suma el capital neto de $ ,53 con que contaría el Comité técnico para comenzar su labor Todos estos decretos aparecen transcritos en la obra de José Antonio MATESANZ (Comp.), México y la República Española. Antología de Documentos , México: Centro Republicano Español de México, pp , y Decreto de la Presidencia del Consejo de Ministros, 25 de noviembre de 1945, En Archivo del Gobierno de la República Española en el Exilio (en adelante AGREE), Fondo París, Ministerio de Hacienda, Caja 18, Expediente 1, Fundación Universitaria Española (FUE). 41 Decreto del Presidente del Consejo de Ministros, México, noviembre de 1945, En AGREE/París, Ministerio de Hacienda, Caja 8, Expediente 4, FUE. 42 Actas de la Delegación de la JARE en México, Acta nº 26 del 10 de octubre de 1940, libro 3, CDMH/Esplá. 43 Nómina del personal que presta sus servicios en este Comité Técnico, México, 31 de mayo de 1946, AMAE/JARE, Caja M Copia simple del contrato de fideicomiso. México, 24 de diciembre de 1945, AMAE/JARE, Caja M

15 La cuantía de las ayudas ofrecidas por el Comité Técnico en México durante el período de su funcionamiento puede resumirse según el cuadro adjunto: Tabla 4: Gastos erogados por el CTFARE en México en concepto de Auxilios CTFARE Total Subsidios , , , ,65 Gastos Casas-Hogar , , , ,41 Gastos Colegio Madrid , , , ,76 Atenciones Extraordinarias , , , ,37 Becas , , , ,85 TOTAL (Pesos Mex.) , , , ,04 Fuente: elaboración propia a partir de diversos datos de AMAE, Fondo JARE, M-324 y FUE, Fondo París, Ministerio de Hacienda, Caja 8, expediente 5. Podemos observar en la tabla como se repartieron, en estos años, por el Comité Técnico en México algo menos de un millón y medio de pesos en ayudas directas como subsidios, lo que supone un 46,5% del gasto total. Este capítulo incluye todas las ayudas económicas ofrecidas a emigrados españoles en México en situación de necesidad tales como: inválidos, enfermos crónicos y temporales, viudas y ancianos; así como las personalidades republicanas españolas que venían siendo subsidiadas por la JARE. En cuanto a las «atenciones extraordinarias», en este capítulo se incluyen gastos como los de los socorros extraordinarios, que se ofrecen por una sola vez, así como medicamentos, intervenciones quirúrgicas e ingresos clínicos, gastos de entierros, becas para la Universidad, etc. Una serie de partidas que se llevan un 14,3% del total del gasto. Como se puede suponer, es un gasto difícil de controlar y calcular. Por ello, las cifras que nos ofrece esta partida oscilan tanto de unos años a otros pasando de ciento cuarenta mil a doscientos mil en 1947 y bajando de nuevo hasta los cien mil en Un descenso tan abrupto nos da idea de que se impone una política de contención del gasto. En cuanto a las Casas-Hogar, al hacerse cargo de su administración, el Ministerio de Instrucción Pública pretendía evitar producirles cualquier tipo de trastorno. No obstante, era necesario ajustar los gastos de estas instituciones al ajustado presupuesto con que contaba el Ministerio por lo que se autorizó a cuantos residentes lo desearan a abandonar las casas a cambio de un pequeño subsidio temporal. Se destinó para las Casas-Hogar un presupuesto trimestral de $ lo que suponía una reducción sobre lo que venía presupuestándose por la CAFARE 45. El proceso de desaparición de estas 45 Según Informe del comienzo de actuación del Comité Técnico para Archivo, México, 16 de mayo de 1946, AMAE/JARE, caja M

16 Casas-Hogar será progresivo a lo largo de los tres años de funcionamiento del Comité Técnico del Fideicomiso, para abril de 1948 solamente quedarán ya dos casas, una para chicos y otra para chicas que finalmente acabarán desapareciendo con el final del Comité Técnico a finales de ese mismo Por lo que respecta a los muy cuantiosos gastos realizados por el Comité para el mantenimiento del Colegio Madrid, suponen un 17,9 % del gasto total, siendo la segunda partida de mayor cuantía después de los subsidios. Esto se explica por la importancia moral que alcanzó el Colegio Madrid para la emigración española en México. El Madrid era el buque insignia de las creaciones de la JARE, y prácticamente la única de sus creaciones que funcionaba exitosamente. El Fideicomiso para auxiliar a los Republicanos Españoles verá agotados sus fondos hacia 1949, teniendo que invertir sus últimos esfuerzos en asegurar la supervivencia del Colegio Madrid. Para ello se creará un nuevo fondo en Fideicomiso que toma bajo su control «el inmueble del Colegio Madrid y todos los muebles» 47. De esta forma se puso fin a las actividades de ayuda del Gobierno Republicano en México dejando como legado la pervivencia del Colegio Madrid. Finalizaba así casi una década de emigración subvencionada finalizando toda intervención con fondos procedentes del estado español. 5. Conclusiones A modo de recapitulación final, podemos afirmar que el total de lo invertido en ayudas en México, por todos los organismos estudiados, durante el período de 1939 a 1949 se eleva a la cantidad de $ ,16. De esta cantidad, un 39,5%, unos cinco millones trescientos mil pesos, se gastaron en socorros, es decir, en ayudas extraordinarias ofrecidas normalmente por una sola vez. Un 33,9%, cuatro millones y medio de pesos, se invirtió en subsidios, aquellas ayudas ofrecidas de una forma más prolongada y en algunos casos con carácter permanente. Por último, un 27,3%, algo más de tres millones setecientos mil pesos, se emplearon en ayudas a la educación, en este apartado la mayor cuantía se utilizó en el mantenimiento del Colegio Madrid, pero también en otras instituciones educativas, las Casas-Hogar para los niños de Morelia y un sistema de 46 Según Orden por la cual se reducen a una sola las dos Casas-Hogar existentes para varones, México D.F., 30 de marzo de 1948, en AGREE/ París, Ministerio de Hacienda, Caja 8, expediente 5, FUE. 47 Contrato de fideicomiso, México, 17 de marzo de 1949, en AGREE/París, Ministerio de Hacienda, Caja 8, expediente 2, FUE. 16

17 becas que se mantendrá activo durante todo el período. La evolución del gasto puede seguirse más gráficamente en la siguiente representación: Gráfico 1: Evolución de las Ayudas en México Pesos Mex Auxilios Subsidios Educación Fuente: elaboración propia a partir de diversas fuentes. El gráfico nos muestra la evolución de la inversión a lo largo de la década estudiada. Para una mejor comprensión hemos englobado las cifras de gastos en tres únicas categorías: Auxilios, subsidios y educación. Llama la atención el enorme gasto en auxilios durante los primeros años, en 1939 tenemos un millón de pesos que pasan a millón y medio en Son estos años los de funcionamiento del CTARE y sus albergues a los que se suma en 1940 la labor de la JARE. Podemos observar que a partir de la intervención de la JARE, en 1943, el gasto en este capítulo se reduce drásticamente y permanece en niveles muy bajos hasta el final del período. El caso contrario lo hallamos en la evolución de los subsidios. Comenzará en niveles muy moderados, recordemos que tanto SERE como JARE repudiaban este sistema de ayudas. Sin embargo, encontramos una espectacular subida en 1941, esto es debido a los subsidios, que por acuerdo con el gobierno azteca, se vio obligada a pagar la JARE a los refugiados por salir del Distrito Federal. Para el año 1942 el gasto volverá a los niveles anteriores y posteriormente en los períodos de la CAFARE y CTFARE irá aumentando progresivamente. En cuanto a la educación, apreciamos también un fuerte aumento de la inversión en 1941, resultado de la fundación de Colegio Madrid. A partir 17

18 de ese momento el gasto educativo se mantendrá en niveles muy elevados reduciéndose progresivamente por los recortes presupuestarios que deberán imponerse según vayan agotándose los fondos. Es interesante establecer una perspectiva comparada. El total del gasto en ayudas, contrariamente a lo que pudiera parecer, se reparte de manera casi equitativa entre los diferentes organismos estudiados. El mayor porcentaje, sin embargo es para la JARE cuya inversión algo por encima de los cuatro millones supone casi un 30% del total. CAFARE y CTAFARE a pesar de no ser más que meros organismos gestores de un fondo de ayudas mantuvieron muy elevado el gasto igualándose prácticamente con el de los otros dos organismos estudiados. Gráfico 2. Reparto de la Inversión en Ayudas CTFARE 24% CAFARE 25% CTARE 21% Fuente: Elaboración propia a partir de diversas fuentes. JARE 30% Tras este breve análisis de la actuación de los organismos de ayuda en México cabe preguntarse de nuevo si el exilio español en este país fue realmente una emigración privilegiada. Desde luego contaron con amplios recursos traídos de España que permitieron paliar la situación de los más desfavorecidos. Pero en gran parte esos recursos también se utilizaron como un arma en las luchas políticas entre diferentes sectores del exilio. Por tanto es difícil aclarar si fue esta una emigración privilegiada frente a otras, pero, como hemos comprobado en este estudio, sí que fue, en gran parte, una emigración subvencionada. 18