9. La basura. Impacto

Transcripción

1 9. La basura La basura es la mezcla de desperdicios que provocan contaminación, así que se ha sugerido como solución NO generar basura, es decir, no revolver los desperdicios que generamos en nuestras actividades diarias. Tal vez parezca difícil pensar que el ser humano deje de generar basura, pero se ha propuesto como opción la creación de una cultura de protección a nuestro medio ambiente, conocida como la separación de los desperdicios. Con las demandas del desarrollo, el hombre empezó a utilizar las materias primas en una forma desordenada. Los productos no fueron diseñados para alcanzar su mayor durabilidad ni posterior reciclabilidad. Actualmente, el exceso de basura constituye uno de los problemas más graves que la sociedad tiene que afrontar, debido al acelerado crecimiento de la población, aumento de la producción y crecimiento en los hábitos de consumo, entre otros. A pesar de las grandes cantidades de basura, no es el deterioro de los recursos naturales ni la contaminación del entorno lo que más preocupa, sino las dificultades para encontrarles un destino final aceptable; es aquí donde se introduce el término de residuo. Los residuos sólidos urbanos son todo material que sea desechado por la población; pueden ser de origen doméstico, comercial, industrial y desechos de la vía pública. Estos residuos son los que mayor dificultad tienen en su tratamiento, debido a lo diverso de su origen. Impacto En la salud de la población los riesgos pueden ser directos e indirectos. Directos porque pueden producir enfermedades a las personas que están en contacto con la basura. Indirectos porque originan la proliferación de insectos y roedores, transmisores de enfermedades que pueden provocar la muerte. Sobre el medio ambiente Pueden ocasionar contaminación del suelo, las aguas, la atmósfera y el deterioro del paisaje. Es necesario conocer el ciclo de vida de los residuos sólidos urbanos y contar con datos de sus características. Considerar los residuos como recursos representa gran ventaja para el medio ambiente y la sociedad, así como el uso de tecnologías de tratamiento que sean económicas y una educación ambiental de la población. Debido a que existen muchos tipos de desperdicios, se ha optado por algunas clasificaciones; la más sencilla es la de desechos orgánicos e inorgánicos. En los orgánicos se encuentran los desechos animales, vegetales, restos de comida, telas de fibras naturales como el algodón, lino, etcétera. 1

2 Entre los inorgánicos se encuentran los metales, vidrio, plástico y materiales de origen sintético. Composición y tratamiento de la basura Materia orgánica: restos procedentes de la limpieza o la preparación de alimentos junto con la comida que sobra, ramas, paja, restos de animales y plantas. Papel y cartón: periódicos, revistas, cajas, empaques, etcétera. Plásticos: botellas, bolsas, platos, vasos, cubiertos desechables y otros. Vidrio: botellas, frascos diversos, vajilla rota, etcétera. Metales: latas, tapas, etcétera. Otros: barro, arena... Existen otros, como el papel y el cartón, que son orgánicos y manteniéndolos limpios y separados pueden reciclarse. Como actúa la naturaleza sobre la basura Todo lo que no sirve va a parar a la basura. Allí comienza el duro trabajo de bacterias y hongos de la naturaleza para transformarlos o degradarlos. 1 año. El papel, compuesto básicamente por celulosa, no le da mayores problemas a la naturaleza para integrar sus componentes al suelo. Si queda tirado sobre tierra y le toca un verano lluvioso, no tarda en degradarse. Lo ideal, de todos modos, es reciclarlo para evitar que se sigan talando árboles para su fabricación. 1 a 2 años. Bajo los rayos de sol, una colilla de cigarro con filtro puede demorar hasta dos años en desaparecer. El filtro es de acetato de celulosa y las bacterias del suelo, acostumbradas a consumir materia orgánica, no pueden atacarla de entrada. Si cae en el agua, la desintegración es más rápida, pero más contaminante. 5 años. Un trozo de chicle masticado se convierte en ese tiempo, por acción del oxígeno, en un material superduro que luego empieza a resquebrajarse hasta desaparecer. El chicle es una mezcla de gomas de resinas naturales, sintéticas, azúcar, aromatizantes y colorantes. Degradado casi no deja rastros. 10 años. Ese es el tiempo que tarda la naturaleza en trasformar una lata de refresco o cerveza al estado de óxido de hierro. Por lo general, con sus 210 micrones de espesor de 2

3 acero recubierto de barniz y de estaño. A la intemperie, hacen falta muchas lluvias y humedad para que el óxido la cubra totalmente. 30 años. Los envases de tetra-pak no son tan tóxicos como uno imagina. En realidad, el 75 % de su estructura es de cartulina (celulosa), el 20 % de polietileno puro de baja densidad y el 5 % de aluminio. La celulosa, si está libre, desaparece en poco más de 1 año. 30 años Un aerosol es uno de los elementos más polémicos de los desechos del hogar. Es un elemento contaminante por sus CFC (clorofluorocarbonos). Por lo demás, su estructura metálica lo hace resistente a la degradación natural. El primer paso es la oxidación. 30 años. La aleación metálica que forma las tapitas de botellas (corcholatas) puede parecer candidata a una degradación rápida porque tiene poco espesor. Pero no es así. Primero se oxidan y poco a poco su parte de acero va perdiendo resistencia hasta dispersarse. 100 años. De acero y plástico los encendedores desechables se toman su tiempo en convertirse en otra cosa. El acero, expuesto al aire libre, comienza a dañarse y enmohecerse levemente después de 10 años. El plástico, en ese tiempo, ni pierde el color. 150 años Las bolsas de plástico, por causa de su mínimo espesor, pueden transformarse más rápido que una botella de ese material. Las bolsitas, en realidad, están hechas de polietileno de baja densidad. La naturaleza suele entablar una batalla dura contra ese elemento. Y por lo general, pierde. 100 a 1000 años Las botellas de plástico son las más rebeldes a la hora de transformarse. Al aire libre pierden su flexibilidad, se fragmentan y se dispersan. Enterradas, duran más. La mayoría están hechas de tereftalato de polietileno (PETE), un material duro, los microorganismos no tienen mecanismos para atacarlos. 200 años Los zapatos están compuestos por cuero, tela, goma y en algunos casos, espumas sintéticas. Por eso tienen varias etapas de degradación. Lo primero que desaparece son las partes de tela o cuero. Su interior no puede ser degradado: sólo se reduce. 300 años La mayoría de las muñecas articuladas son de plástico, de los que más tardan en desintegrarse. Los rayos ultravioletas del sol sólo logran dividirlo en moléculas pequeñas. Ese proceso puede durar cientos de años, pero jamás desaparecen de la tierra años Los vasos desechables de polipropileno contaminan menos que los de poliestireno material de las cajas de huevo. Pero también tardan en transformarse. El plástico queda reducido a moléculas sintéticas; invisibles pero siempre presentes años Una botella de vidrio, en cualquiera de sus formas, es un objeto muy resistente. Aunque es frágil porque con una simple caída puede romperse, para los componentes naturales del suelo es una tarea muy difícil transformarla. Formada por arena y carbonatos de sodio y de calcio, es reciclable en un 100 %. 3

4 Papel Aunque son de fácil reciclaje, y de hecho se reciclan en buena parte, la demanda creciente de papel y cartón obliga a fabricar más pasta de celulosa, lo que provoca la tala de millones de árboles; además, las escasas campañas de reforestación y la utilización de árboles introducidos, como el eucalipto, especie de crecimiento rápido, impiden una recuperación adecuada de nuestros bosques y zonas verdes. No todo el papel puede ser reciclado; los plastificados, los adhesivos, los encerados y los de fax no son aptos para su posterior reciclaje. Plásticos Si se entierran en un vertedero ocupan mucho espacio y pueden tardar desde décadas hasta milenios en degradarse; si se opta por incinerarlos, originarán emisiones de bióxido de carbono que contribuirán al cambio climático, y otros contaminantes atmosféricos muy peligrosos para la salud y el medio ambiente. Uno de los plásticos de uso más generalizado, el PVC, genera una elevada contaminación en su fabricación. Si finalmente se incinera crea algunas de las sustancias más tóxicas que se conocen: las dioxinas y los furanos. Hay que tener en cuenta que todos los plásticos se fabrican a partir del petróleo. Por ello, al consumir plásticos, además de contribuir al agotamiento de un recurso no-renovable, generamos contaminación que origina la obtención y transporte del petróleo y su transformación en plástico. Los plásticos usados pueden ser aprovechados como combustible por su elevado poder calorífico; por ejemplo, un kilogramo de polietileno produce la misma energía que un kilogramo de gas natural. Se ha determinado que los residuos plásticos generados por una familia y que acaban en los vertederos en un año, contienen energía suficiente para calentar agua para quinientos baños o para que un televisor funcione durante cinco mil horas. Un ejemplo más: un envase de yogur de 0.3 litros contiene la energía necesaria para mantener una bombilla encendida durante una hora. Vidrio El problema es que se ha generalizado el uso de envases de vidrio no-retornables, lo que da lugar al disparate de tirar como basura envases que se podrían emplear hasta cuarenta o cincuenta veces. Los envases de vidrio se pueden reciclar al 100 %, pero no olvidemos que en su reciclaje también se gasta energía y se contamina, lo que significa un derroche tratándose de algo que perfectamente podría ser reutilizado una y otra vez, antes de reciclarlos. Metales 4

5 Por ejemplo, el aluminio se fabrica a partir de la bauxita, un recurso -enovable para cuya extracción se están destrozando miles de kilómetros cuadrados de selva amazónica y otros espacios importantes del planeta. Para obtener una sola tonelada se necesitan kwh, con los consiguientes impactos ambientales: se producen cinco toneladas de residuos minerales y se emite gran cantidad de dióxido de azufre, fluoramina y vapores de alquitrán, que contaminan la atmósfera y provocan lluvia ácida. Si son enterrados contaminan las aguas superficiales y residuales a causa de los aditivos y metales pesados que se incorporan al aluminio, y si son incinerados originan contaminación de la atmósfera. Cantidad de residuos En las zonas más desarrolladas del mundo, la cantidad de papel y cartón que se consume y se tira es más alta; esto constituye alrededor de un tercio de la basura, seguida por la materia orgánica y el resto. En cambio, si el país está menos desarrollado la cantidad de materia orgánica es mayor. En las zonas rurales se aprovechan mejor los residuos, mientras que en las ciudades se fomenta el consumismo y crece la producción de basura. En México la media es de más de dos kilogramos diarios por habitante. Tratamiento de los residuos Se denomina tratamiento de residuos sólidos urbanos al conjunto de operaciones encaminadas a la eliminación de estos residuos o al aprovechamiento de los materiales que contienen. Los residuos sólidos urbanos constituyen la biomasa residual más aprovechable, ya que está concentrada; es imprescindible su recolección y su transporte. Los sistemas de valoración de los residuos son: Reutilización: utilización de un residuo como producto final en su forma original, para el mismo o diferente uso (vidrio). Reciclaje: proceso que tiene por objeto la recuperación de forma directa o indirecta de los componentes que contienen los residuos (latas, papel y cartón). Regeneración: operación de valorización mediante la cual un residuo es devuelto a sus características originales de forma total o parcial, y que permite su uso en el mismo estado que tenía antes de transformarse en residuo (pet). Recuperación: operación de valorización mediante la cual se extraen los recursos del residuo. Los habitantes de los países desarrollados producen anualmente un enorme volumen de basura doméstica, motivado, entre otras razones, por el desenfreno consumista. Lo ideal sería recuperar y reutilizar la mayor parte de los residuos. 5

6 Los métodos de tratamiento más utilizados actualmente son: 1. Vertido controlado. 2. Incineración. 3. Reciclado. 4. Transformación o aprovechamiento por técnicas específicas. 5. Producción de composta. Vertedero controlado o relleno sanitario El relleno sanitario consiste en el enterramiento ordenado y sistemático de los residuos sólidos utilizando criterios de ingeniería que permitan su confinamiento en el menor volumen posible y cubriéndolos con una capa de tierra al concluir las operaciones diarias, o según se considere necesario. Incineración Quemar la basura tiene varias ventajas, pero también algunos inconvenientes. Entre las ventajas están que se reduce mucho el volumen de vertidos y se obtienen cantidades apreciables de energía. Entre las desventajas está que se producen gases contaminantes, algunos potencialmente peligrosos para la salud humana. Existen incineradores de avanzada tecnología que, si funcionan bien, reducen mucho los aspectos negativos, pero son costosos de construcción y manejo, y para que sean rentables deben tratar grandes cantidades de basura. Producción de composta Compostar no es más que imitar el proceso de fermentación que ocurre normalmente en el suelo de un bosque, pero de forma acelerada y dirigida. El compostaje es un proceso de descomposición biológica, en condiciones controladas, de la materia orgánica contenida en los residuos sólidos urbanos. Las bacterias que actúan son termófilas, desarrollándose el proceso a temperaturas comprendidas entre 50 y 70 C, lo que produce la eliminación de los gérmenes dañinos y la limpieza del producto. Con esta técnica se obtiene como producto final una especie de humus llamado composta, que se puede usar para abonar suelos, alimentar ganado, obtener combustibles, etcétera. En este proceso es fundamental que la materia orgánica no llegue contaminada con sustancias tóxicas, por lo que se separa la mayor parte de los metales, vidrios y plásticos que contiene la basura y que hacen inútil la composta para usos biológicos, al ser muy difícil y cara su eliminación. 6

7 Los problemas ambientales son principalmente de actitud. Por consiguiente, es necesario promover la educación ambiental de la población como un requisito básico para poder mejorar nuestra calidad de vida y tener equilibrio con la naturaleza. Finalmente, debe mencionarse el importante factor de la participación ciudadana, sin ella la gestión de los residuos no es posible. Bibliografía consultada Alba A El libro de texto y la cuestión escolar. Los contenidos ecológicos en el curriculum de primaria. Cesu/UNAM, México. Andrade, V y H Sánchez, Educación ambiental y ecología. Trillas, México. Beltrán M Mundo en peligro: curso de educación ambiental para tercer grado de secundaria. Fernández Editores, México. Bonfil, M La dosis hace el veneno. Contaminación por desechos tóxicos. Colección básica del Medio Ambiente. Somedicyt A.C.-Secretaría de Medio ambiente y Recursos Naturales, México. Gobierno del Estado de México, Secretaría de Educación, Cultura y Bienestar Social Guía de prácticas para mejorar el medio ambiente. Educación básica, tercer nivel. Imagen Editores. México. Gobierno del Estado de México, Secretaría de Educación, Cultura y Bienestar Social Guía de prácticas para mejorar el medio ambiente. Cómo resolver el problema de la basura. Educación básica, segundo nivel. Imagen Editores. México. Granados Sánchez, D Destrucción del planeta y educación ambiental. UACH, México. Gutiérrez, J La educación ambiental: Fundamentos teóricos, propuesta de transversalidad y orientaciones extracurriculares. La Muralla, Madrid. Instituto Nacional de Ecología/Secretaría de Desarrollo Social Prácticas de educación ambiental para la enseñanza secundaria: el agua. México. Leff, E Racionalidad ecotecnológica y manejo integrado de recursos: hacia una sociedad neguentrópica. Revista Interamericana de Planificación, Vol. XVIII, No. 69. México. pp Leff, E Cultura ecológica y racionalidad ambiental. Aguilar M.; Maihold G. (compiladores). Martínez-Alier, J La pobreza como causa de la degradación ambiental. Un comentario al Informe Bruntland, Documents d' Análisis Geográfica, No. 18, pp Palomino, B Medio ambiente humano, estilo de desarrollo, calidad de vida y salud, en Medio ambiente, desarrollo y calidad de vida, Cuaderno 1. México, PIMADI-IPN. Polanco, E El narrador de prodigios. Cultura y ecología. Cultura y ecología. Colección Básica del Medio Ambiente. Somedicyt, A.C.-Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, México. Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales Programa Nacional de Medio Ambiente y Recursos Naturales México. 7

8 Tamariz, L Educación ambiental en educación básica. Enep-Aragon/UNAM, México. 8