Consejos para reducir el impacto de los vehículos en el medio ambiente

Transcripción

1 y Consejos para reducir el impacto de los vehículos en el medio ambiente

2 Hoy en día hay 551 millones de automóviles en el mundo. Esto hace que la contribución de nuestros automóviles a los diversos problemas ambientales (cambio climático, ruido, contaminación del aire, generación de residuos tóxicos,...) sea muy alta y que por lo tanto también tengamos una gran responsabilidad en su solución. En España, el transporte participa en el consumo final de energía en un 41%, y el que se realiza por carretera es responsable de tres cuartas partes de ese consumo. La mitad de las emisiones de CO2 relacionadas con los transportes en la Unión Europea están producidas por los turismos. La contaminación del aire produce casi muertes anuales en Europa, en España. España es el segundo país más ruidoso del mundo. Además, debido al continuo aumento de su número (cada año compramos otros 44 millones) se espera que su contribución aumente considerablemente pese a las mejoras en el consumo que prevén introducir los fabricantes (ver gráfica). 2

3 Todos estos datos harán que debamos replantearnos nuestro actual modelo de transporte centrado en el automóvil particular. Como la energía que menos contamina es la que no se consume, es seguro que nuestra mejor contribución a la solución de esos problemas sería la sustitución del automóvil en nuestro transporte por medios alternativos como el transporte público, la bicicleta o incluso compartir nuestro propio coche. Esta sustitución sería especialmente interesante en trayectos cortos, pues es en estos recorridos en los que más consumo y contaminantes emiten los vehículos. Sin embargo, es posible que no podamos hacerlo. En este caso, y dada la importancia de las cifras antes comentadas, deberemos plantearnos el uso de nuestro automóvil de una forma más eficiente y racional. La conducción eficiente es un nuevo modo de conducir el vehículo que tiene como objeto lograr: Un bajo consumo de carburante. Una reducción de la contaminación ambiental. Un mayor bienestar en la conducción. Una disminución de riesgos en la carretera. Respecto a los modos convencionales de conducción, esta nueva conducción se rige por una serie de reglas sencillas y eficaces, que tratan de aprovechar las posibilidades que ofrecen las tecnologías de los motores de los coches actuales. Como todo proceso de aprendizaje de habilidades, la experiencia es necesaria para alcanzar los objetivos deseados. Por ello, este folleto es sólo el inicio de algo que después el conductor deberá ir asimilando y adaptando con su práctica diaria a sus recorridos, su vehículo en concreto, etc. 3

4 Bajo consumo Sabías que la presión que nosotros ejercemos sobre el acelerador es el factor principal para determinar el consumo de combustible y la cantidad de CO2 y otros contaminantes que emiten nuestros vehículos? Según los datos facilitados por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) los españoles ahorrarían un 15% anual en combustible con una conducción más económica y sin disminuir la velocidad media. Y es que si todos los usuarios aplicasen las técnicas de conducción económica en nuestro país ahorrarían millones de litros de combustible y millones de euros cada año (una media de 136 por conductor). Km Coste anual gasóleo (en euros) Ahorro 15% (en euros) Coste anual gasolina (en euros) Ahorro 15% (en euros) Fuente: RACC Supuestos: Diesel (6,5 l/ 100 km. Coste del Diesel: 0,80 euros/l); Gasolina (8 l/100 km. Coste gasolina sin plomo: 0,86 euros/l). A este importante ahorro para nuestra economía hay que sumar los enormes beneficios medioambientales que puede suponer realizar una conducción eficiente. Con ello se lograría una reducción de las emisiones de CO2 de 6,3 millones de toneladas, lo que equivale a plantar 48 millones de árboles en España. 4

5 Reducción de la contaminación También se reducen, y en forma más importante todavía, las emisiones de otros contaminantes como óxidos de carbono y de nitrógeno, hidrocarburos y partículas. Estos contaminantes se asocian a enfermedades como las dificultades respiratorias, los problemas oculares, las enfermedades cardiovasculares y las jaquecas (recuerda el numero de víctimas que nombramos en la primera página). También corroen materiales y atacan a todo tipo de vegetación. Otro contaminante que se reduciría enormemente en nuestras ciudades sería el ruido. Piensa que el ruido que emite un solo coche a r.p.m. equivale al de 32 vehículos a r.p.m. Además, la disminución de este junto a la de aceleraciones y frenazos bruscos contribuye al aumento del bienestar. La conducción eficiente es un estilo de conducción impregnado de tranquilidad y que evita el estado de estrés producido por el tráfico al que están sometidos los conductores, sobre todo en ciudad. 5

6 Uso de los vehículos Para conseguir todos los beneficios descritos anteriormente para nosotros y para el medio ambiente deberemos intentar seguir estos consejos a la hora de conducir: En los motores de gasolina inicie la marcha inmediatamente después del arranque. En los motores diesel, espere unos tres segundos antes de comenzar la marcha. Esperar parado con el motor en marcha consume energía y no aporta ninguna ventaja. Recuerda que la primera marcha sólo se usa para arrancar el coche. Cambia a la segunda velocidad a los dos segundos o una vez recorridos seis metros aproximadamente. La forma más eficiente de conducir es hacerlo en las marchas más largas y a bajas revoluciones. También en ciudad, aunque respetando siempre los límites de velocidad. En los motores de gasolina la aceleración y el cambio de marcha se debe realizar cuando se han alcanzado las r.p.m. En los motores diesel cuando se está entre las y r.p.m. Según la velocidad cambiaremos de 2ª a 3ª a partir de los 30 Km/h; de 3ª a 4ª a partir de los 40 Km/h y a 5ª cuando circulemos por encima de los 50 Km/h. Después de cambiar es importante acelerar ligeramente. Mantener la velocidad de circulación lo más uniforme posible y evitar frenazos, aceleraciones y cambios de marcha innecesarios ahorra energía. 6

7 Para desacelerar, levante el pie del acelerador y deje rodar el vehículo con la marcha engranada en este instante. Si fuera necesario, frene de forma suave y progresiva con el pedal del freno, reduciendo la marcha lo más tarde posible. Siempre que la velocidad y el espacio lo permitan, detenga el coche sin reducir previamente la marcha. En paradas prolongadas, es decir, de más de 60 segundos, es recomendable parar el motor. Conducir siempre con una adecuada distancia de seguridad y un amplio campo de visión que permita ver 2 ó 3 coches por delante, además de aportar seguridad vial, le permite anticiparse a las posibles frenadas, que serán más suaves. En el momento que detecte un obstáculo o una reducción de la velocidad de circulación en la vía (por ejemplo, una curva), levante el pie del acelerador para anticipar las siguientes maniobras. Circulando a más de 20 Km/h con una marcha engranada, si no pisa el acelerador, el consumo de carburante es nulo. En cambio, al ralentí, el coche consume entre 0,4 y 0,9 litros/hora. (Para bajar un puerto engranaremos una marcha larga y dejaremos descender el coche por su inercia corrigiendo con el freno cuando sea necesario). Utilizaremos el aire acondicionado del vehículo sólo cuando sea necesario ya que su uso provoca un aumento del consumo de entre un 10 y un 20%. Circular con las ventanas del coche abiertas representa, a su vez, un aumento del 5%. También transportar objetos en la baca aumenta considerablemente el consumo (hasta un 39% a 120 km/h). 7

8 Elección de la marcha de conducción Uno de los parámetros fundamentales dentro de la conducción eficiente es la forma de realizar los cambios de marchas, es decir, cuándo y cómo realizar el cambio. Una vez se está circulando en la 2ª marcha, y cuando en el proceso de aceleración del vehículo se entra en el intervalo de revoluciones indicado para el cambio de marchas, se procederá a realizar el cambio de formas distintas según las condiciones de la vía que se puedan encontrar: Si la vía en la que se va a circular posee una elevada velocidad media de circulación y se encuentra con el tráfico fluido o despejado, se cambiará a la 3ª marcha, en la cual se mantendrá la aceleración del vehículo hasta alcanzar la velocidad adecuada a la circulación existente, para cambiar posteriormente a la 5ª marcha. Se ha de recordar que en todos los cambios realizados no se ha de exceder de las revoluciones y que, inmediatamente después de cambiar, han de adecuarse las revoluciones a las que se necesitan para circular en la marcha a la que se cambia. 8

9 Si el vehículo se encuentra circulando en 2ª marcha con el motor ya revolucionado al régimen de cambio y con una velocidad similar a la de las condiciones de circulación, se cambiará a la 4ª marcha directamente. Este caso se puede dar cuando la velocidad media de circulación en la vía es relativamente baja, o si se encuentra un tráfico denso que reduce dicha velocidad media. Si posteriormente la vía gana en velocidad media y vemos que se puede cambiar a la 5ª marcha, realizaremos el cambio correspondiente. (Se podrá circular en la 5ª marcha además sin ningún tipo de problema siempre que se vaya por encima de las r.p.m., este límite inferior es de r.p.m. para el resto de las marchas). Si las condiciones del tráfico no permiten progresar con las marchas, debido a una elevada congestión del tráfico o a determinadas causas que hagan que se circule a una velocidad excesivamente lenta, se continuará circulando en la 2ª marcha, y en cuanto se rebasen las revoluciones (y sin llegar a superar las 2.500), se podrá cambiar a la 3ª marcha, en la que se podrá circular consumiendo menos carburante que en la 2ª marcha. Una diferencia fácilmente distinguible entre los conductores que realizan la conducción eficiente y los que no lo hacen es la utilización bastante más importante de las marchas altas (4ª y 5ª). A la hora de hacer los cambios tendremos que tener en cuenta que en tramos con pendiente adelantaremos el cambio de marcha si la pendiente es descendente y lo retrasaremos si es ascendente. Influencia de la velocidad Además si a estos consejos que te proponemos añades una disminución de la velocidad puedes llegar a ahorrar hasta un 40% de combustible ya que a partir de los 90 Km/h el consumo de carburante aumenta de manera espectacular. Pasar de 100 Km/h a 120 Km/h supone incrementar el consumo un 35%. Piensa que cada litro de combustible que ahorres representa, aproximadamente, 2,5 Kg de CO2 menos emitidos a la atmósfera. 9

10 Mantenimiento de los vehículos. En el mantenimiento de los vehículos en los talleres tendremos en cuenta dos aspectos fundamentales. El primero prestar también atención a elementos que, aunque no nos demos cuenta, influyen en el consumo: - Si circulamos por zonas polvorientas y pensamos que el filtro del aire ha podido obstruirse antes de cumplir los kilómetros para su sustitución lo revisaremos pues si esta obstruido puede provocar un sobreconsumo de hasta 2 litros por cada 100 kilómetros. - Comprobaremos con frecuencia que la presión de los neumáticos es la correcta. Si no lo es, los neumáticos se desgastan antes y pueden aumentar el consumo hasta un 5%. Falta de presión Presión correcta Exceso de presión - El segundo, intentar reducir y dar una gestión correcta a todos los residuos (especialmente los peligrosos) que se generen durante las operaciones de mantenimiento (cartones, aceites, anticongelantes, baterías,...). Debemos darnos cuenta de que, por ejemplo, un solo litro de aceite puede contaminar litros de agua (algunas fuentes hablan de hasta un millón). Para esta gestión deberemos intentar aplicar la regla de las tres R : reducir, reutilizar, reciclar. Reducir: Esta claro que lo mejor sería no producir residuos tóxicos y peligrosos, por esto lo primero que debemos hacer es reducir la cantidad que generemos (sobre todo si no disponemos de medios para darles luego un tratamiento adecuado). Ejemplos pueden ser: 10

11 - Emplear en la limpieza de piezas o suelos la cantidad mínima necesaria de disolventes o gasolina, papel, serrín, etc. Recuerda que cuando los usamos para limpiar un producto tóxico estos mismos limpiadores se convierten en residuos tóxicos y peligrosos. - Engrasar o lubricar lo justo la partes del vehículo que tengamos que engrasar. No se trata de escatimar, pero tampoco de que pongamos tanta que mucha se quede fuera y se caiga. Reutilizar: El hecho de utilizar una segunda vez algunos elementos podría reducir en mucho su consumo. - Si empleamos un papel para secarnos las manos y queda suficientemente limpio, podremos guardarlos y usarlos luego para limpiar bancos, piezas, etc. - Una gasolina que hallamos usado para limpiar y no este muy sucia puede servir para dar una primera limpieza a otra pieza. (Para poder hacer esto deberemos evitar que se evapore). Reciclar: Aquí deberemos distinguir entre materiales no tóxicos (por ejemplo papel y cartón, que intentaremos separar y reciclar en la mayor cantidad posible) y los tóxicos (aceite, anticongelantes,...) que se reciclan o se les da el tratamiento adecuado fuera del taller y con los que nuestra labor deberá ser su separación y almacenamiento adecuado para su retirada posterior. Por ejemplo, debemos evitar en todo lo posible la mezcla de aceites usados con agua u otros residuos no oleaginosos como manda la Orden de 28 de febrero de 1989, del MOPU, sobre gestión de aceites usados (BOE de 8 de marzo de 1989). 11

12 Objetivos Uno de los fenómenos más peligrosos y que más cambios producirá en nuestra sociedad en los próximos años es el cambio climático. Con este folleto hemos querido ayudar a divulgar una forma de conducción ya conocida en Europa con la que se disminuye considerablemente el consumo de combustible de los vehículos, algo muy importante en nuestro país donde el sector del transporte es el primero por emisiones de CO 2, por delante incluso de la industria. De esta forma podemos ayudar a frenar el cambio climático y realizar también un ahorro económico importante. Otras ventajas de este tipo de conducción son un aumento del bienestar para el conductor y una disminución de riesgos en la carretera, algo también muy importante dado el nivel de siniestros que tenemos en nuestro país. Documento elaborado por nuestro afiliado J.G.B. 12