POLÍTICA DE PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE ALCOHOL, TABACO Y OTRAS DROGAS

Transcripción

1 POLÍTICA DE PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE ALCOHOL, TABACO Y OTRAS DROGAS COLEGIO SANTA CRUZ DE CHICUREO

2 Índice I. Palabras previas Página 2 II. Fundamentación Página 4 III. Nuestra Política en el tema Página 6 La política Página 7 IV. Normativas acerca de la posesión, consumo o distribución de alcohol, tabaco y otras drogas. Página 9 V. 2

3 I. PALABRAS PREVIAS En el documento de La Escuela Católica en los umbrales del tercer milenio (1997, Congregación para la Educación Católica), se nos plantea: Además, la escuela católica, a pesar de las dificultades, ha querido seguir siendo corresponsable del desarrollo social y cultural de las diferentes comunidades y pueblos, de los que forma parte, compartiendo los éxitos y las esperanzas, los sufrimientos, las dificultades y el esfuerzo para un auténtico progreso humano y comunitario. La escuela es, indudablemente, encrucijada sensible de las problemáticas que agitan este inquieto tramo final del milenio. La escuela católica, de este modo, se ve obligada a relacionarse con adolescentes y jóvenes que viven las dificultades de los tiempos actuales. La escuela católica se configura como escuela para la persona y de las personas. «La persona de cada uno, en sus necesidades materiales y espirituales, es el centro del magisterio de Jesús: por esto el fin de la escuela católica es la promoción de la persona humana».(6) Tal afirmación, poniendo en evidencia la relación del hombre con Cristo, recuerda que en su persona se encuentra la plenitud de la verdad sobre el hombre. Por esto, la escuela católica, empeñándose en promover al hombre integral, lo hace, obedeciendo a la solicitud de la Iglesia, consciente de que todos los valores humanos encuentran su plena realización y, también su unidad, en Cristo.(7) Este conocimiento manifiesta que la persona ocupa el centro en el proyecto educativo de la escuela católica, refuerza su compromiso educativo y la hace idónea para formar personalidades fuertes. En la comunidad educativa, los padres, primeros y naturales responsables de la educación de los hijos, tienen un rol de especial importancia. Tomando en cuenta este mandato de nuestra iglesia y que es asumido por nuestro Proyecto Educativo, que como Colegio Santa Cruz de Chicureo se hace imprescindible asumir las problemáticas de nuestra sociedad y que afectan a nuestros jóvenes. El consumo de drogas, alcohol y otras sustancias, es una realidad que no podemos eludir y que más bien debemos enfrentar con políticas y actitudes concretas. Esta es una temática, cuya labor fundamental es de los padres, y el colegio tiene una labor subsidiaria, de apoyo y guía, pero siempre en un trabajo mancomunado. Asumiendo responsabilidad educativa, que nos cabe como institución, durante estos años se realizaron distintas actividades con los alumnos, sin embargo, en un momento natural de crecimiento del colegio y específicamente de nuestros alumnos, es que surgió la necesidad de generar Políticas y Programas más estructurados en este sentido. A mediados del año 2009, el departamento de Orientación lideró la generación de estas Políticas que nos ayudasen a tener claridad del cómo proceder ante esta problemática. No bastan las intenciones, no bastan los buenos propósitos, hoy en día se hace necesario un actuar proactivo y conjunto como comunidad educativa. 3

4 Desde esa fecha, se ha desarrollado un itinerario de trabajo que ha implicado una etapa primera de sensibilización, con la presencia del Psicólogo Pablo Egenau. Posteriormente se elaboró un borrador, el cual fue trabajado en distintas instancia para finalmente ser confrontado en grupos de apoderados, alumnos y profesores. Es la comunidad en su totalidad, la que de una u otra forma ha estado presente en este documento final. Documento que desea contener los lineamientos generales en primer lugar de la prevención y cuando sea necesario de los criterios y normas para la acción concreta. Nuestra mirada, como colegio católico, es desde el evangelio y específicamente desde la mirada de la educación, sabiendo que nuestra labor solo tendrá real efectividad con el apoyo de los padres, de todos los padres. Es la familia, la primera educadora de sus hijos, la que debe velar por la creación de un clima que permita no solo la claridad de actitudes positivas, sino de la vivencia plena de ellos. Debemos entonces, entender la familia como aquel grupo de personas que viven y están juntos, unidos por lazos de afecto; es el lugar en el cual las personas se expresan y se muestran tal cual son; donde se recibe el apoyo, el cariño, y es desde donde se construye la historia de cada uno de sus miembros. La familia es el lugar donde los niños(as) aprenden las normas, los valores, las formas de comportarse y de relacionarse con el mundo, aprenden a quererse y a cuidarse, aprenden lo que está bien y lo que está mal. Aún cuando el colegio y la sociedad también educan, la familia es determinante en la formación de los niños(as), porque la relación que se establece con los padres es un vínculo intensamente significativo, basado en el cariño y respeto. Nuestra misión como colegio, busca acompañar en la formación de personas cristianas, que desde su vocación personal y social, aprendan con alegría y paz a vivir y ser felices. Queremos también apoyar la formación de persona abiertas a los problemas de la realidad, entregándoles herramientas comunicativas de calidad, tecnológicas, humanistas, científicas, artísticas y de visión ética, que les permitan a nuestros alumnos (as) dar respuestas creativas, realistas, de cuidado del medio ambiente y de respeto a las personas. Gracias a todos los apoderados, profesores, alumnos y profesionales externos e internos que nos han ayudado a generar este documento, que periódicamente deberemos ir actualizándolo porque desea ser un servicio eficaz a nuestros jóvenes y a las familias del colegio. II. FUNDAMENTACIÓN Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), droga es toda sustancia que introducida en un organismo vivo por cualquier vía (inhalación, ingestión, 4

5 intramuscular, endovenosa), es capaz de actuar sobre el sistema nervioso central, provocando una alteración física y/o psicológica, la experimentación de nuevas sensaciones o la modificación de un estado psíquico. Es decir, es capaz de cambiar el comportamiento de la persona y posee la capacidad de generar dependencia y tolerancia en sus consumidores. Ahora, según esta definición, no sólo la marihuana, cocaína, pasta base, éxtasis o heroína son drogas, sino también lo son el alcohol, el tabaco, la cafeína y algunos fármacos. El concepto de droga entonces se refiere a, que la modificación puede ser perjudicial o beneficiosa para el ser vivo, y que depende del tiempo de administración, de la dosis y de las características del propio ser. Desde esta mirada, para que una droga sea considerada como tal, deben cumplirse las siguientes condiciones: Ser sustancias que introducidas en un organismo vivo son capaces de alterar o modificar una o varias funciones psíquicas de éste (carácter psicótropo o psicoactivo). Inducen a las personas que las toman a repetir su autoadministración por el placer que generan. El cese en su consumo puede dar lugar a un gran malestar somático o psíquico (dependencia física o psicológica). No tienen ninguna aplicación médica y si la tienen, pueden utilizarse con fines no terapéuticos. Específicamente, respecto al consumo de drogas en jóvenes, el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas y el eventual abuso de las mismas, suele iniciarse en la pre-adolescencia y adolescencia, debido a características evolutivas propias de esta etapa del desarrollo. Los jóvenes utilizan drogas por varias razones que están relacionadas con cómo se sienten consigo mismos, cómo se llevan con los demás, o cómo viven. No hay un solo factor que determine quiénes consumirán drogas y quiénes no lo harán, pero existen algunas situaciones de riesgo que van desde la situación familiar a su realidad personal. En el último estudio del CONACE a nivel nacional (2008), la prevalencia del consumo de alcohol entre escolares de 12 a 18 años, es de alrededor de un 46.2%, que es la proporción que declara haber injerido alcohol alguna vez en el último año, con una cifra que alcanza el 70% en cuarto medio. Respecto al consumo de tabaco, 35.9% de los escolares de 12 a 18 años, reconoce haber fumado alguna vez durante el último año y 16.4% declara haber consumido marihuana. En los mismos estudios, el 25% de los escolares reconoce que llegan a tomar 5 o más tragos en una salida de sábado por la noche y un 20% declara haber 5

6 tomado más de la cuenta y haberse emborrachado al menos una vez en los últimos 30 días. Frente a este escenario, es importante recordar la asociación que existe entre el abuso de alcohol y el uso de marihuana, entendiendo que el alcohol suele ser la puerta de entrada al consumo de sustancias ilícitas. Este nivel de consumo declarado, el cual probablemente sea menor que el consumo real existente entre los escolares, nos lleva ante la necesidad de intensificar los programas y crear políticas que aborden de manera específica la prevención del consumo de sustancia, especialmente en esta etapa de transición y alta vulnerabilidad por parte de los jóvenes. En este sentido, destacados investigadores Ugarte, Fraguela, etc. han mostrando en diversos estudios que existen ciertos factores protectores que son claves en la prevención del consumo de sustancia. Dentro de estos factores están: un adecuado autoconcepto, la gestación temprana de un proyecto de vida, la capacidad de mentalización, la postergación de la gratificación, el mantener un vínculo emocional cercano con los padres y profesores, la inteligencia emocional, la asertividad, la resolución de conflictos, la aceptación del grupo de pares, entre otros, temáticas que se abordan a nivel escolar a través de nuestro Programa de Orientación, que fomenta un adecuado desarrollo socio-emocional, desde los niveles pre-escolares hasta la educación media. De este modo, el Departamento de Orientación tiene como desafío lograr forjar en los alumnos un desarrollo integral, más allá de lo académico, por medio de tres importantes áreas o pilares, como lo son: la identidad y desarrollo emocional, la convivencia y el proyecto de vida. Sin embargo, es necesario complementar dicho Programa con acciones que busquen definir de manera directa la política escolar frente al consumo de sustancia, así como también intervenciones que permitan sensibilizar a la comunidad escolar y crear un proyecto que organice e integre las diversas acciones a realizar frente a la prevención del consumo de sustancia. Aunque muchos niños y jóvenes pueden tener un consumo experimental, algunos de ellos incurrirán en un consumo ocasional, frecuente o abusivo, de acuerdo a la relación entre variables individuales y contextuales. En esta interacción de factores, el contexto escolar en general y la comunidad educativa en particular, tienen un rol preventivo y de modelaje muy relevante, debido a que los niños y jóvenes en edad escolar se encuentran expuestos a una diversidad de condiciones que incrementan de manera significativa la probabilidad de inicio del consumo de alcohol, tabaco y otras drogas. III. NUESTRA POLÍTICA EN EL TEMA El Colegio Santa Cruz de Chicureo asume un compromiso profundo de formación para la vida de nuestros niños y jóvenes, aspecto que se evidencia 6

7 en el Proyecto Educativo. Éste soporta las bases de un ambiente educativo que hace, de la perspectiva cristiana, el motor del proceso de desarrollo. Esta visión supone que los ámbitos físico, social, emocional, cognitivo y espiritual se interrelacionen y se influyan entre sí, irradiando su sentido al proceso de enseñanza -aprendizaje. Por otra parte, nuestro Curriculum HighScope y Pedagogía de los Vínculos (como expresión de nuestra Pedagogía Cruceña), apuntan a generar un clima afectivo cercano, que fortalecerá las bases para la formación de una personalidad armónica. A la vez, procura que los procesos de cambio reales, se cimenten en la asunción consciente de un discernimiento de lo que le ayuda o no, a desarrollarse como persona. El Colegio Santa Cruz de Chicureo comprende que la familia es el primer e irreemplazable ámbito educativo. Por ello, busca establecer una especial alianza entre el colegio, la familia y el alumno (a), con el objetivo de fortalecer un triángulo de contención y consistencia por parte de quienes lo forman. Por lo anterior y, dentro de la propuesta de nuestro Colegio, pensamos que es irrenunciable trabajar en la formación de personas capaces de discernir con responsabilidad, a través de un proceso de promoción de la autonomía y la autodisciplina progresiva, que ejercite la voluntad y toma de conciencia frente a las propias decisiones y conductas, orientados dentro de su proyecto de vida. Creemos en la posibilidad de generar acuerdos claros y consistentes, que se vinculen con los actos y sus correspondientes consecuencias. Por lo tanto, nuestro Colegio estima que el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas en nuestros alumnos, producen daños en la persona y su entorno que atentan contra el normal desarrollo de los objetivos propios de esta comunidad escolar. Por lo anterior y, desde nuestra visión educativa, generamos una postura que se basa en educar para la vida sana y el desarrollo de una capacidad de discernimiento, conociendo las consecuencias del consumo de drogas que producen dependencia y daños personales. Es así, que se busca promover el cuidado del cuerpo y el respeto por sí mismo y los demás. La Política La política corresponde a la postura desde la cual abordamos como colegio el tema de la prevención de consumo de alcohol, tabaco y otras drogas. Esta se resume en las siguientes afirmaciones: 1. Estimamos que la prevención del consumo de alcohol, tabaco y otras drogas es una responsabilidad prioritaria de la familia, respecto de la cual el colegio colabora activamente. Por ello, se promueve la participación de ésta en las iniciativas que emprendamos con relación a este tema. 7

8 2. Consideramos fundamental promover valores y actitudes que favorezcan el desarrollo personal de nuestros alumnos(as), en un contexto alejado del consumo de alcohol, tabaco y otras drogas. 3. Tenemos el convencimiento que las actitudes hacia el autocuidado, se generan desde los primeros años de vida de la persona, por lo que se desarrollarán acciones de prevención primaria desde Jardín hasta IV Medio. 4. Las acciones de prevención que se implementen con los estudiantes de segundo y tercer ciclo, además de incorporar estrategias de prevención primaria 1 considerarán, con un criterio de realidad, estrategias de prevención secundaria 2 que incorporen los principios de gestión de riesgo y reducción de daños respecto al uso de sustancias. 5. Esperamos un compromiso personal de cada alumno(a) y de todos los miembros de nuestra comunidad educativa, para realizar los esfuerzos necesarios en la mantención de un ambiente protector frente al consumo de alcohol, tabaco y otras drogas. 6. Nuestra comunidad educativa hace propia la visión de que el problema de dependencia a drogas, tabaco y/o alcohol es una circunstancia factible de ser revertida, en la medida que el o la joven asuma un compromiso personal de cambio de esa situación y reciba el apoyo de su familia y del colegio. 7. El colegio colaborará en su ámbito de competencia, con las sugerencias de los tratamientos médicos y psicológicos externos que estén desarrollando los estudiantes que se encuentren en situación de consumo de drogas y que, junto a su familia, estén en proceso de superar esta condición. De este modo, se busca lograr un apoyo coordinado entre el colegio y los profesionales externos. 8. La Dirección del Colegio se reserva el derecho de solicitar evaluaciones profesionales por parte de profesionales externos, cuando un estudiante evidencie signos de consumo de drogas. En dichos casos, se informará a la familia acerca de la red de derivación de profesionales expertos en esta temática. 1 Estrategias dirigidas a aquellos estudiantes que no consumen tabaco, alcohol y/o drogas ilegales y orientadas a fortalecer su conducía de abstinencia. 2 Estrategias dirigidas a aquellos estudiantes que se han iniciado en el consumo de substancias o que se encuentran en alto riesgo de hacerlo. 8

9 9. Estamos dispuestos a asumir una situación de un consumo dependiente, en la medida que exista el compromiso personal de cambio del alumno o alumna, el apoyo de la familia y el aporte profesional especializado si es necesario. Cuando exista esta voluntad, el colegio colaborará en este proceso. 10. Se prohíbe el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas en las dependencias del colegio y en actividades patrocinadas por éste. Excepcionalmente, en ciertas actividades autorizadas fuera del horario escolar y sin presencia de alumnos, se permitirá el consumo responsable de alcohol en los apoderados (previa autorización de la Dirección del colegio). 11. Se prohíbe la comercialización de estas sustancias en sus instalaciones. En relación al alcohol, será necesaria la aprobación de la Dirección del colegio, para la venta en actividades de apoderados. 12. El colegio tomará las medidas disciplinarias pertinentes con los estudiantes que transgredan las normativas establecidas por esta Política, o que se alejen del espíritu que la anima. IV. NORMATIVAS ACERCA DE LA POSESIÓN, CONSUMO O DISTRIBUCIÓN DE ALCOHOL, TABACO Y OTRAS DROGAS. Como se desprende de lo previamente expuesto, el colegio considera que el consumo de alcohol, tabaco y otras drogas por parte de los alumnos (as), tiene un importante impacto en su vida integral, interfiriendo o limitando su desarrollo. La labor de la comunidad educativa y, en especial del profesor jefe, es de gran importancia. Es este último quien dentro de su rol, acompaña al alumno (a) en su proceso de formación en todas las dimensiones de su personalidad y le brinda un apoyo constante desde su función como formador y educador. De este modo, a partir de la Misión y Visión expresadas en el Proyecto Educativo, asumimos el concepto operativo de Orientación Educadora, entendido como un proceso educativo personalizado de ayuda al educando en su progresiva realización personal. Frente a esto, el profesor jefe actúa como un facilitador que tiene la intención de promover en el otro un mayor crecimiento, desarrollo, madurez y capacidad para enfrentar la vida. Esta ayuda es presencia, acompañamiento, estar atento para reorientar tareas que puedan desviar al alumno (a) a planos no convenientes para la realización personal. Desde esta mirada, el acompañamiento a nuestros alumnos (as) es un pilar fundamental, apoyo que se complementa con ciertas medidas disciplinarias, 9

10 que buscan fortalecer en ellos el discernimiento y hacerse responsable de las consecuencias de sus decisiones, incentivándolos a desarrollar ciertas actitudes o comportamientos que como grupo queremos lograr. Basado en tales consideraciones, el colegio define las siguientes normativas generales frente a la posesión, consumo o distribución de alcohol, tabaco y drogas ilícitas. Tabaco Respecto a la posesión de tabaco: 1. Como colegio queremos promover la salud y vida sana de nuestros alumnos, motivo por el cual no está permitido traer cigarrillos al colegio. 2. Los alumnos que tengan en su poder cigarrillos, deberán entregarlos al Profesor Jefe o Director de Ciclo respectivo. 3. De reincidir el alumno(a) en esta conducta, el Profesor Jefe lo registrará en el Libro de Clases como anotación negativa comunicando al apoderado de esta situación. 4. El Director de Ciclo guardará los cigarrillos hasta que el Apoderado (a) personalmente los solicite, si así lo requiere. Respecto al consumo de tabaco: 1. Según la Ley de Tabaco Nº20.105, se prohíbe fumar al interior de establecimientos educacionales de pre-básica, básica y media. 2. El alumno (a) que fume dentro del establecimiento, en actividades desarrolladas por el colegio o donde se participe institucionalmente, será suspendido al ser una conducta grave de falta de respeto a sí mismo y sus compañeros. 3. Como colegio queremos promover que los alumnos cruceños sean un ejemplo de vida sana para toda la comunidad escolar, motivo por el cual no está permitido que los alumnos (as) fumen con uniforme. En este caso, se le comunicará la situación al Profesor Jefe, quien dejará una anotación negativa en el Libro de Clases, la cual será informada a los apoderados. 4. Con el fin de promover un mayor discernimiento en estos alumnos (as), se les solicitará realizar un trabajo de investigación acerca de los efectos negativos del tabaco en la salud. Respecto a la distribución de tabaco: 1. Según la Ley de Tabaco Nº20.105, se prohíbe la comercialización, ofrecimiento, distribución o entrega gratuita de productos hechos con tabaco a menores de edad. Esta Ley exige que la venta a mayores de edad debe ser a más de 100 metros de los establecimientos educacionales. 2. El colegio se ajusta a la Ley Nº20.105, no permitiendo la distribución de cigarrillos. El alumno (a) que distribuya esta sustancia, será suspendido al ser una conducta grave que transgrede a la Ley de Tabaco. 3. El Profesor Jefe dejará una anotación negativa en el Libro de Clases, la cual será informada a los apoderados. 10

11 Alcohol Respecto a la posesión de alcohol: 1. La posesión de alcohol dentro del establecimiento, en actividades desarrolladas por el colegio o donde se participe institucionalmente, atentan contra el normal desarrollo de los objetivos propios de esta comunidad escolar. 2. El alumno (a) que esté en posesión de alcohol estará cometiendo una falta muy grave, motivo por el cual se aplicará una sanción y Precondicionalidad. 3. Con el fin de orientar y acompañar al alumno (a), se pedirá el apoyo del Departamento de Orientación, quien evaluará la necesidad de una derivación externa. 4. Para promover un mayor discernimiento en estos alumnos (as), se les solicitará realizar un trabajo de investigación acerca de los efectos negativos del consumo excesivo de alcohol en la salud. Junto con esto, el alumno (a) recibirá una carta formativa. Respecto al consumo de alcohol: 1. A partir de nuestra visión educativa, generamos una postura que se basa en educar para la vida sana y el desarrollo de una capacidad de discernimiento, conociendo las consecuencias del consumo drogas que producen dependencia y daños personales. 2. Frente a esto, no está permitido el consumo de alcohol dentro del establecimiento, en actividades desarrolladas por el colegio o donde se participe institucionalmente. Esta conducta constituye una falta muy grave, motivo por el cual se aplicará una suspensión y Condicionalidad. 3. Si algún integrante de la comunidad escolar observa alguna conducta de consumo de alcohol en un alumno (a) cruceño (a), en actividades que no sean organizadas por el colegio, se les invita a conversar de dicha situación con el Departamento de Orientación. Respecto a la distribución de alcohol: 1. La ley prohíbe la venta, obsequio o suministro de bebidas alcohólicas a menores de edad. 2. El alumno (a) que venda o suministre alcohol dentro del establecimiento, en actividades desarrolladas por el colegio o donde se participe institucionalmente, será suspendido y se aplicará una Condicionalidad. Drogas ilícitas Respecto a la posesión de drogas ilícitas: 1. Como colegio buscamos promover el autocuidado y salud de nuestros alumnos, es por eso que se considera una falta gravísima, la posesión de cualquier sustancia ilícita dentro del colegio o en cualquier otro lugar cuando se trate de una actividad desarrollada por el colegio o donde el establecimiento participe institucionalmente. 11

12 2. El alumno (a) que esté en posesión de sustancias ilícitas, será derivado al Departamento de Orientación desde donde se le acompañará y se realizará en conjunto con la familia, una derivación a un especialista externo. 3. Al ser una falta gravísima, se aplica en este caso una suspensión y condicionalidad. Respecto al consumo de drogas ilícitas: 1. Según la Ley de Drogas Nº20.000, el consumo de drogas no es un delito, pero si una falta grave que tiene distintas sanciones. 2. El colegio se ajusta a la Ley Nº considerando una falta gravísima, el consumo de cualquier droga ilícita dentro del colegio o en cualquier otro lugar cuando se trate de una actividad desarrollada por el colegio o donde el establecimiento participe institucionalmente. 3. El alumno (a) que consuma sustancias ilícitas, será derivado al Departamento de Orientación desde donde se le acompañará y se realizará en conjunto con la familia, una derivación a un especialista externo. 4. Al ser una falta gravísima, se aplica en este caso una suspensión y condicionalidad. 5. Como enmienda se coordinará con el alumno(a) visitar un Centro de Rehabilitación, donde brinde una mañana ayuda comunitaria. Respecto a la distribución de drogas ilícitas: 1. Según la Ley de Drogas Nª20.000, el tráfico de drogas ilícitas (importe, exporte, distribución y transporte) es un delito que tiene penas privativas de libertad y multas monetarias. 2. El colegio se ajusta a la Ley Nº considerando una falta de extrema gravedad, la distribución de cualquier droga ilícita dentro del colegio o en cualquier otro lugar cuando se trate de una actividad desarrollada por el colegio o donde el establecimiento participe institucionalmente. 3. Esta conducta atenta gravemente contra la dignidad, valores y principios de nuestra comunidad educativa, motivo por el cual se le cancelará la matrícula al alumno (a) implicado (a). Medidas Disciplinarias Sin perjuicio de lo señalado en los puntos precedentes, respecto de las acciones de prevención secundaria y de apoyo a la prevención terciaria, se establecen las medidas disciplinarias acordes con nuestro Reglamento de Normas de Convivencia. La aplicación de una u otra medida será analizada caso a caso, en virtud de las circunstancias específicas en que un hecho de este tipo ocurra, la gravedad que el hecho revista, el historial escolar del implicado y de si se trata de una acción aislada o recurrente. En todo caso, se establece como normativa general, que ante un evento de esta naturaleza, es política del Colegio informar a los padres de tal situación. 12

13 V. ACCIONES PREVENTIVAS Metodología de Evaluación del Consumo Con el propósito de evaluar el impacto y la efectividad del Programa de Prevención que se está desarrollando 3, así como de poder orientar acciones específicas a grupos de mayor riesgo, se realizará una encuesta del consumo entre los alumnos. Esta permitirá, además, tener un diagnóstico de la situación de consumo de Alcohol, tabaco y otras drogas, entre los estudiantes de Segundo Ciclo. Los resultados que entreguen este diagnóstico y sucesivas evaluaciones se darán a conocer a la comunidad escolar oportuna y periódicamente, de acuerdo a los criterios que establezca el colegio. Acciones para la Prevención Primaria El mayor esfuerzo que realizará el colegio estará centrado en el desarrollo de un completo programa de educación para los alumnos y sus padres, dirigido al fortalecimiento de los valores y actitudes que actúan como recursos protectores de! consumo de alcohol, tabaco y otras drogas, y a la entrega de información respecto de los efectos globales que sobre la vida integral de una persona producen estas sustancias. El colegio, adoptará las medidas necesarias para lograr la activa participación de todos sus integrantes en los programas específicos de educación diseñados con tal propósito. Este nivel de intervención contempla las siguientes acciones: Curso de capacitación general para profesores, auxiliares y administrativos. Desarrollo de estrategias preventivo-educativas especificas por nivel: Intracurricular Extracurriular Estrategias educativas con los padres. Acciones para la Prevención Secundaria Asumiendo que el consumo de tabaco, alcohol y drogas entre algunos de nuestros jóvenes puede ser una realidad, es necesario abordar el tema de la detección temprana del consumo y/o de aquellos jóvenes que aún cuando no se hayan iniciado en éste, se encuentran en una situación de alto riesgo. Se trata de jóvenes que presentan una alta propensión 4 o vulnerabilidad al consumo. 3 Programa de acompañamiento del adolescente 4 Hablamos de propensión en jóvenes que no han consumido drogas; pero declaran no percibir riesgo en el uso de ellas y que les sería fácil conseguirlas, por Lo que se presume están propensos a consumir. La vulnerabilidad se refiere a jóvenes que no han consumido pero que reconocen tener amigos o personas cercanas que sí lo hacen y que les han ofrecido drogas en el último año. 13

14 Del mismo modo, se abordará el problema de jóvenes que, sin presentar cuadros de dependencia, presenten conductas de consumo de alcohol o tabaco de manera social o habitual. En este ámbito se desarrolla una fuerte iniciativa en la implementación de un programa de Capacitación para profesores, orientado a prevenir que jóvenes en alto riesgo se inicien en el consumo de alcohol y a desincentivar el consumo en aquellos que ya lo han hecho y que están en sus etapas iniciales y, de ese modo, prevenir mayores daños en alumnos que tengan consumo de alcohol sin presentar dependencia a esta sustancia. Este nivel de intervención contempla las siguientes acciones: Capacitación a profesores en identificación de factores tempranos de riesgo del consumo de drogas y abuso de alcohol; Estrategias de Consejería para alumnos que presenten problemas de consumo; Prevención, tanto desde las unidades de orientación como en el trabajo coordinado con las temáticas presentadas por los distintos sectores de aprendizaje; Capacitación a los apoderados en identificación de factores tempranos de riesgo del consumo de drogas y abuso de alcohol; Intervenciones en los cursos, en caso de algún alumno que presente conductas de consumo de drogas y abuso de alcohol. Acciones de Apoyo para la Prevención Terciaria o Tratamiento El Colegio establecerá un procedimiento especial para brindar el apoyo necesario, a quienes, encontrándose en situación de consumo de drogas o de abuso de alcohol, soliciten la ayuda correspondiente o estén dispuestos a recibirla a proposición del colegio. Es importante señalar que en caso de que un alumno/a transgreda las normativas generales acerca del consumo de drogas y abuso de alcohol - independiente de las medidas disciplinarias que se puedan aplicar -, el Colegio con el fin de brindar la mejor ayuda y orientación que el caso amerite, podrá solicitar a la familia una evaluación por parte de un especialista y, en caso de ser necesario, la concurrencia a un programa de tratamiento. El colegio, a través de la Dirección de Ciclo y Departamento de Orientación o de las personas que la Dirección designe, arbitrará las medidas necesarias para orientar al alumno/a y a su familia en la búsqueda de los profesionales o tratamiento externos apropiados que los puedan ayudar para salir de este problema. Adicionalmente, el Colegio mantendrá una relación de colaboración con el alumno/a, su familia y el tratamiento que esté realizando, para permitir la mantención y el mejor desarrollo de sus responsabilidades académicas. Del mismo modo, se implementarán las medidas necesarias para 14

15 permitir la reinserción del alumno/a a sus actividades escolares normales, en caso de que su tratamiento requiera de un período de internación o ausentismo del Colegio. Se velará por mantener las mejores condiciones de reserva y privacidad respecto del tratamiento que se resuelva efectuar por parte de la familia. VI. CONSIDERACIONES FINALES Estamos enfrentando una realidad que presenta riesgos permanentes a la salud física y mental, esto exige a quienes educamos fortalecer factores protectores, crear instancias de desarrollo de habilidades sociales y formar valores profundamente enraizados en la mente y el corazón de los educando. Todos los aspectos mencionados previamente, no son fruto exclusivo de un Programa de Prevención, sino de la vivencia cotidiana, del quehacer constante que encierra la vida escolar y familiar. Si el colegio y la familia otorgan los cimientos, confiamos en que tendremos un terreno fértil en el cual echen raíces los valores más profundos del comportamiento humano sano. 15