HISTORIA DEL ARTE. EL BARROCO. ARQUITECTURA Y ESCULTURA ESPAÑOLA

Transcripción

1 Tema 12. (II) LA ARQUITECTURA BARROCA EN ESPAÑA RELIGIOSA Y CIVIL. LA IMAGINERÍA : ESCUELAS Y PRINCIPALES ARTISTAS INTRODUCCIÓN: EL CONTEXTO HISTÓRICO El siglo XVII en España es un siglo de crisis, política y económica y de declive del Imperio. La pérdida de la hegemonía en Europa y la defensa de los postulados de la Contrarreforma, son dos características del Barroco español. A lo largo del siglo XVII y de la primera mitad del siglo XVIII, el arte refleja la decadencia vivida en España bajo los Austrias menores. Los problemas se agravan con el problema sucesorio de Carlos II, que se saldó con la Guerra de Sucesión ( ) y el relevo de la dinastía Habsburgo por la dinastía Borbón. Este cambio europeizó a España en cierta medida, al hacerla partícipe de formas, lenguajes y elementos artísticos propios de Francia: el rococó y el academicismo. A los conflictos políticos se pueden unir los problemas económicos: inflación, bancarrotas, mala gestión de los recursos procedentes de América, las epidemias, hambrunas y descenso demográfico. Todo ello nos da una imagen de una España pobre, abatida y derrotada. Por ello no es de extrañar que la Monarquía promulgase edictos a favor de la austeridad y en contra del lujo. Los retratos regios de Velázquez son una muestra de ello. La crisis económica y política influyó de manera directa y clara en el arte. El barroco español tuvo un especial desarrollo en la pintura, mayor que en la escultura y la arquitectura y se puede explicar por dos razones: Por un lado, era más barata la pintura y por otro, la Iglesia era el principal cliente de los artistas. La Iglesia antepuso la divulgación de la doctrina entre las clases populares con claridad e intención de conmover y convencer. Para ello, la pintura ofrecía condiciones superiores incluso que el grupo escultórico. Junto a la Iglesia, otros clientes fueron la Monarquía y la nobleza, pues en España no existía una sólida burguesía. El arte barroco, ilusionista y teatral, permite a la Monarquía mostrar al pueblo edificios en apariencia solemnes y grandiosos, para acrecentar su autoridad y poder y a la vez ocultar su debilidad, pobreza y obligada austeridad La Iglesia impuso imágenes realistas y teatrales, que buscaban reflejar ciertos sentimientos mediante actitudes, gestos y técnicas, todo encaminado a provocar en los fieles una sincera y profunda devoción. Proliferaron las tallas de madera, las imágenes de vestir y se crearon los pasos procesionales de Semana Santa. Estos grupos escultóricos los encargaban las hermandades y cofradías, lo que supondrán la popularización del sentido y significado de la imagen religiosa. Las manifestaciones artísticas del Barroco, son como todas, reflejo de la sociedad en la que se desarrollaron y de la religiosidad que formaba parte de la vida cotidiana de la misma. ARQUITECTURA: RASGOS GENERALES Inicialmente, pesó mucho la influencia del Escorial y del estilo herreriano; pero poco a poco fue sustituyéndose por una tendencia decorativa que terminaría imponiéndose, sobre todo en Hispanoamérica. Predominó la construcción de edificios religiosos como respuesta al poder de órdenes religiosas como los jesuitas. En el ámbito civil, destacan ayuntamientos, plazas mayores, que son concebidas no como plazas reales al servicio del poder de la Monarquía, sino como institución municipal. En cuanto al urbanismo, será la dinastía Borbón la que diseñe planes globales. La corte, afincada desde principio de siglo en Madrid, tuvo sus exponentes constructivos en la remodelación del oscuro Alcázar de los Austrias y en la construcción del conjunto palaciego del Buen Retiro. Los edificios del barroco español se caracterizan por la pobreza de los materiales: ladrillo, yeso; dejando la piedra para portadas, esquinas y ventanas. Únicamente Galicia generaliza el uso de granito. Pero en todos los edificios se aprecia el deseo de ostentación y de ocultar la escasez de Página 1

2 recursos. Con este objetivo se desarrollan los efectos de riqueza : retablos y frescos, policromía de materiales pobres para aparentar riqueza; contraste de claroscuros.. Se generalizan estructuras falsas, como las cúpulas encamonadas, en realidad cubiertas de yeso y sostenidas por armazón de madera. Las construcciones eran simples, más herrerianas que borrominescas en planta; predominan los chapiteles de pizarra, pirámides y bolas. Hubo gran libertad a la hora de combinar los órdenes clásicos, a los que se une la columna salomónica. La arquitectura es escenográfica y teatral. Se ha criticado mucho al Barroco español, identificado con churrigueresco y exceso de ornamentación, pero esta crítica es totalmente simplista y está equivocada. AUTORES DEL SIGLO XVII JUAN GÓMEZ DE MORA: Arquitecto oficial de Madrid en la primera mitad del siglo XVII, crea un estilo en el que se mezcla el postulado herreriano con la elegancia barroca, aunque sin mucho movimiento en sus obras y gran sencillez. Obras: el Panteón de El Escorial con planta centralizada, acoge los cuerpos de los monarcas de España a partir de Carlos V, la decoración de mármol, bronce y dorados es obra de Crescenzi; la Iglesia de la Encarnación, donde Gómez de Mora realiza la sobria fachada en piedra, con decoración clásica; frontones, arco de medio punto, etc. y decoración herreriana (bolas y chapiteles de pizarra) y elegancia barroca; la Plaza Mayor de Madrid, plaza porticada, rectangular, con un cierto desnivel salvado con escalinatas de acceso bajo bóvedas de cañón. Es un espacio uniforme, con soportales adintelados y edificios de tres pisos con vanos rectangulares que tienen balcones corridos. Los edificios se rematan con chapiteles de pizarra y tejados a dos aguas, también de pizarra. Las construcciones son de ladrillo, con piedra en los ángulos y bordes de puertas y ventanas, a excepción de la Casa de la Panadería, que es toda de piedra. ALONSO CARBONELL: Arquitecto madrileño, construyó el Palacio del Buen Retiro bajo el reinado de Felipe IV. Este Palacio destaca por su sobriedad exterior, fachada de ladrillo y piedra en ángulos y rodeando ventanas; chapiteles y tejados de pizarra e interiores ricos en decoración de pinturas y esculturas. Sólo han llegado hasta nuestros días los jardines del Palacio. ALONSO CANO: Arquitecto, pintor y escultor andaluz realizó la fachada de la Catedral de Granada. Tiene triple arcada a modo de arco de triunfo, con decoración clásica y vegetal. AUTORES DE LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XVIII PEDRO DE RIBERA: Arquitecto madrileño del siglo XVIII, proyecta edificios civiles como el Hospicio de San Fernando, de fachada de ladrillo sencilla, que contrasta con una gran portada recargada en piedra, que se caracteriza por los estípites o soportes Página 2

3 piramidales, el recogido de los dos extremos, a modo de escena teatral, los vanos ovalados (cinco), el nicho con esculturas, el remate en frontón partido y el Puente de Toledo. LA FAMILIA CHURRIGUERA: Los Churriguera acapararon buena parte de la producción arquitectónica que se desarrolló especialmente en Madrid y Salamanca. Hasta nueve miembros de la familia se dedicaron a la arquitectura. Crean un estilo recargado y propio, al que se denomina churrigueresco. JOSÉ BENITO, uno de ellos, sentó las bases de una arquitectura en la que primaba lo ornamental sobre lo estructural. Retablos como el del convento de San Esteban en Salamanca, y fachadas de iglesias y conventos se cubrían de una profusa ornamentación al servicio de la ostentación y la apariencia. Los efectos de riqueza consistían en columnas salomónicas, estípites, haces luminosos, hojas de parra o racimos de uvas, que se disponían de manera abigarrada configurando un espacio marcado por el dorado. ALBERTO CHURRIGUERA es el autor de la Plaza Mayor de Salamanca. Es una plaza porticada, de planta rectangular, uniforme. El pórtico arquitrabado se dispone bajo los tres pisos de los edificios de la plaza, realizados en piedra de Salamanca, con ventanas rectangulares, balcón corrido y balaustrada en la parte superior. LEONARDO DE FIGUEROA: Arquitecto andaluz, es autor del Colegio de San Telmo de Sevilla. Tiene planta centralizada, cúpula decorada, columnas salomónicas, estípites y fachada de piedra blanca, que destaca por su gran monumentalidad y decoración escultórica. NARCISO TOMÉ: Transparente de la catedral de Toledo. Es una fusión perfecta de arquitectura, escultura y pintura. Tomé se preocupa en su obra por la acción de la luz. CASAS NOVOA: Arquitecto gallego, es el autor de la Fachada del Obradoiro de la Catedral de Santiago de Compostela. Muestra dos grandes torres y cuerpo central al que se accede por una escalinata, ocultando la portada románica. Tiene una profusa ornamentación, con balaustres, estilo de placas y el material usado es de granito. Pertenece a la corriente decorativista, al igual que Ignacio Vergara (Fachada del Palacio del Marqués de Dos Aguas) y Coronado Rudolfo, autor de la fachada de la catedral de Valencia Otro autor, no español, sino italiano, es SACHETTI. Será el arquitecto al que Felipe V encarga las obras del Palacio de La Granja de San Ildefonso, con diseño de JUVARA. Su estructura es tradicional, pero en la fachada usa el orden gigante que abarca toda la altura del muro, en este caso, dos pisos con pilastras y columnas en el centro de orden corintio, este orden produce efectos de claroscuros en la fachada. Las ventanas rectangulares se rematan en el piso superior con frontones alternantes y balaustrada, tejados y chapiteles de pizarra. Los jardines y fuentes escultóricas son obra Página 3

4 de arquitectos franceses. El exterior es sobrio y elegante, en piedra y el interior es recargado y lujoso; con porcelanas, cristal, tapices y cuadros. También realiza el Palacio Real de Madrid. El nuevo palacio se levantó sobre el antiguo Alcázar de los Austrias. Las obras las inició Juvara, y las continúa Sachetti.. Está inspirado claramente en el Palacio de Versalles. El edificio tiene planta cerrada con cuatro cuerpos reforzados en las esquinas y abiertos en un patio interior. En la fachada usa de nuevo el orden gigante, con dos pisos. El desnivel permite unas grandiosas vistas sobre los jardines. En el interior destaca la ostentación y el lujo barrocos, con rica decoración, pictórica y escultórica, mobiliario, cristales, cerámicas y tapices. Los jardines, geométricos, unen urbanismo y naturaleza LA ESCULTURA BARROCA INTRODUCCIÓN La Iglesia impuso imágenes realistas y teatrales, que buscaban reflejar ciertos sentimientos mediante actitudes, gestos y técnicas, todo encaminado a provocar en los fieles una sincera y profunda devoción. Proliferaron las tallas de madera, las imágenes de vestir y se crearon los pasos procesionales de Semana Santa. Estos grupos escultóricos los encargaban las hermandades y cofradías, lo que supondrán la popularización del sentido y significado de la imagen religiosa. Las manifestaciones artísticas del Barroco, son como todas, reflejo de la sociedad en la que se desarrollaron y de la religiosidad que formaba parte de la vida cotidiana de la misma. CARACTERÍSTICAS DE LA ESCULTURA BARROCA Posiblemente, la escultura sea la manifestación artística que posee mayor unidad en cuanto a material, temática y finalidad de todo el arte barroco en España. La escultura barroca española tiene escasa relación con la europea: la influencia de Bernini se aprecia a partir de la segunda mitad del siglo XVII. Su principal cliente era la Iglesia, que pedía transmitir el mensaje de la Contrarreforma católica: -Contenidos claros -Fuerte sentimentalismo -Contenido devocional y popular. Temas: Es predominantemente religiosa, erigiéndose en la mejor intérprete de las ideas del Concilio de Trento: -Quiere acercar la religión al pueblo -Se consolida la iconografía religiosa, destacando los siguientes: -Cristo yacente -Inmaculada Concepción -Y, como exponentes de la penitencia y el arrepentimiento, la Magdalena penitente y San Jerónimo. Todos alcanzan gran popularidad -Desaparece la escultura funeraria. -Escasa presencia de otros géneros escultóricos: Retratos, básicamente regios, fueron pocos y encargados a artistas italianos, tales como el de Felipe III de Juan de Bolonia y el de Felipe IV, de Pietro Tacca. Menor presencia aún de obras de tema mitológico o alegórico. Los escultores buscaron formas de abaratar costes y lograr naturalismo, lo que influye en el material utilizado: madera policromada, frente al bronce y al mármol usado en Italia. Página 4

5 Las representaciones más habituales eran: -Imágenes para el culto. -Retablos, que se decoran con imágenes de bulto redondo, para que puedan ser sacadas en procesión. A partir de finales del siglo XVII desaparece la división y compartimentación de los retablos; éstos se hacen más unitarios, tienen menos esculturas y las escenas son más grandes. -Pasos procesionales. Se componen de figuras individuales o en grupo, pensadas para llevarse por las calles. La palabra paso proviene del latín passus que significa sufrimiento; algo totalmente unido al ritual de la Semana Santa, donde aquéllas se porteaban en compañía de las cofradías penitenciales, que desfilaban flagelándose con cilicios. Para estas cofradías o para los gremios, los escultores trabajaban tallando las imágenes de sus patronos; tanto es así que a esta modalidad escultórica se la denomina imaginería. Por lo que respecta a la técnica, hay que señalar que se basa en la talla de madera, policromada después con estofados y encarnados. La policromía llega a cambiar mucho el acabado final de la obra. Las esculturas las realizan varias personas: primero los aprendices del taller, después los entalladores y tracistas que esculpen la imagen; por último el policromador o estofador. El color le da el realismo deseado por la gente, no son figuras blancas en mármol, sino figuras con el color natural de la piel y de los tejidos. Además, para lograr mayor realismo en la imagen se incorporan elementos postizos: pelo natural, uñas, dientes de asta, ojos y lágrimas de cristal, piel animal para simular heridas abiertas, cuerdas, brazos articulados...el naturalismo se reforzaba con gestos, actitudes y rostros muy expresivos. La cumbre de esta teatralidad se logra con el género de imágenes de vestir, en las que se tallan sólo aquéllas partes que se ven (rostro, cuello, manos), y el resto se cubre con telas reales. El estilo de la escultura se hace eco del sentir popular, consiguiendo imágenes de gran fervor religioso. Es un arte nacional, desarrollado por artistas españoles que no viajaron, como otros, a Italia; por lo que el sustrato hispano es patente en ellos. La imaginería española, ya desde el Renacimiento había continuado una línea de realismo extremo, penetrada de un expresionismo producto de muchos artistas europeos que aquí dejaron su impronta. Partiendo de estos supuestos, unos autores se inclinan por el dramatismo de gestos, mientras otros se decantan por una serenidad que conduce a la exaltación mística. Es un arte en el que la teatralidad preside su concepción. Las imágenes son el centro de atención en las procesiones, la multiplicidad de puntos de vista obliga a realizar profundos estudios del contrapposto, que desde mediados de siglo imita a Bernini. La teatralidad, la expresividad violenta, el drama o el misticismo, persiguen conmover al pueblo para atraerlo a la fe. Estas imágenes son la viva expresión de las ideas de Trento, que proponían que Jesús, a María y los santos parecieran reales. ESCUELAS ESCULTÓRICAS En España estudiaremos la escultura por escuelas, ya que comparten similares características: Las distintas escuelas son: -ESCUELA CASTELLANA, con centro en Valladolid y cuyo principal artífice fue Gregorio Hernández o Fernández. - ESCUELA MADRILEÑA, con centro en Madrid, donde destaca Pietro Tacca. -ESCUELA ANDALUZA, con dos grandes centros escultóricos: Sevilla, donde destacan Martínez Montañés y Juan de Mesa y Granada, con dos grandes autores: Alonso Cano y Pedro de Mena. -ESCUELA MURCIANA, cuyo centro es Murcia, donde destaca Francisco Salzillo. Página 5

6 ESCUELA CASTELLANA Su centro fue Valladolid y su principal escultor fue Gregorio Fernández. Características de la escuela son: duro realismo, mayor preocupación por la anatomía y escasa presencia del dorado. GREGORIO FERNÁNDEZ ( ) es el escultor más importante; destaca por sus figuras de rostros muy expresivos, dolientes y agónicos, con pliegues muy angulosos y fuertes efectos de claroscuro. En sus inicios estuvo influido por el manierismo, en concreto, por Juan de Juni y los modelos hispano-flamencos del siglo XV, de quienes hereda la angulosidad de los paños.. Creó tipos escultóricos acordes con la religiosidad popular, como el Cristo yacente, Cristo atado a la columna y la Dolorosa. El retablo de la catedral de Plasencia forma parte de su obra. OBRAS -Cristo yacente, que podemos encontrar en el Museo de Escultura de Valladolid y en El Pardo, de talla completa en madera policromada, muestra una gran perfección, con naturalismo en el giro de la cabeza y la disposición de las piernas, afectando a la devoción del fiel, ya que partiendo del naturalismo concreto, llega a lo místico. -Ecce Homo, es un alarde de virtuosismo técnico en el tratamiento del cuerpo y en la expresión resignada de dolor; las varas y las cuerdas, de materiales reales añaden verismo a una representación que impacta por sí misma. -La Piedad, conjunto escultórico en el que se integran los dos ladrones crucificados, con Jesús. La Virgen en el centro, envuelta en telas plegadas sostiene en su regazo el cuerpo exánime de Cristo. Muestra un gran dramatismo en el rostro. -El descendimiento es un grupo escultórico con figuras a escala humana. Muestra una concepción teatral. Representa el momento en el que Cristo es bajado de la cruz. -Cristo atado a la columna. Pertenece al grupo escultórico de la Flagelación de Cristo. Representa el momento en el que Cristo va ser azotado, con la cabeza mirando al espectador; el cuerpo se dispone en un giro, con las piernas y los brazos en direcciones opuestas. La policromía es muy realista, con heridas con sangre y ojos de cristal; el paño de pureza es acartonado y anguloso. -El bautismo de Cristo, relieve que forma parte del retablo del Convento de las Carmelitas Descalzas de Valladolid. Las figuras de Jesús y de San Juan son prácticamente de bulto redondo, consiguiendo integrarlas en una escenografía compuesta por un fondo pintado y semitallado, y un primer plano de rocas, donde se sitúan los protagonistas. En los pliegues persiste el tratamiento anguloso o plegado metálico ESCUELA MADRILEÑA Su centro fue Madrid, y su máximo representante fue Pietro Tacca. Sus obras muestran influencia italiana. Su obra principal es la estatua ecuestre de Felipe IV. Obra en bronce, diseñada por Velázquez representa al rey Felipe IV. El caballo en corveta, (levanta las patas delanteras), exigió un uso medido de materiales para equilibrar la figura. ESCUELA ANDALUZA Podemos señalar, como diferencias entre la escuela castellana y la andaluza: La andaluza prefiere imágenes más serenas y dulces. Página 6

7 Prescinde de la tragedia y del dramatismo. Sustituye la sangre y el dolor por los dorados del Renacimiento Busca conmover a través de la dulzura. Suavidad en las formas. Influye en la América española. La escuela andaluza tiene dos grandes centros escultóricos: Sevilla y Granada. ESCUELA DE SEVILLA: tiene dos grandes autores: Juan Martínez Montañés y Juan de Mesa. JUAN MARTÍNEZ MONTAÑÉS ( ), de influencia manierista, es más sereno y equilibrado que Gregorio Fernández. Pacheco, mentor de Velázquez, es el responsable de la policromía de sus obras. OBRAS: -Jesús Niño, imagen infantil que incide en la piedad y la ternura. -El Cristo de la Clemencia, crucificado con gran serenidad en la composición y amabilidad en la dolorosa situación, muy expresiva; la anatomía es dulce e idealizada y el paño de pureza se pliega de forma compleja, logrando dinamismo. Es un Cristo que se acerca al creyente, pues mira a quien le reza, constituyendo un claro ejemplo de los ideales del Barroco plasmados en el arte. -San Jerónimo, talla de bulto redondo, perteneciente al retablo de Santiponce, es un hombre de edad avanzada con gran fuerza física, mostrando serenidad en la expresión y arrepentimiento en su actitud. Toma como modelo el San Jerónimo de Torrigiani, es un relieve donde sabe dar cohesión a la perspectiva del santo; de carnes secas e insuperable misticismo. El santo aparece meditando ante un crucifijo. Logra una gran perfección anatómica, con los músculos y venas marcados, perfección en el rostro, barba y cabello; manifiesta dolor contenido. La túnica muestra plegados realistas. La policromía presenta diferentes texturas. -Inmaculada de la catedral de Sevilla: Exquisita belleza, manto de pliegues ampulosos, flotando sobre querubines. JUAN DE MESA, discípulo de Martínez Montañés, realiza escultura procesional muy expresiva. Obra suya es Jesús del Gran Poder. Es una talla procesional y devocional, muestra expresividad en el rostro de Jesús con la cruz a hombros. ESCUELA DE GRANADA también presenta dos grandes escultores: Alonso Cano y Pedro de Mena ALONSO CANO ( ): Es un artista polifacético: arquitecto, escultor y pintor. Estudió con Pacheco, preceptor de Velázquez: Conoció a éste y a Juan Martínez Montañés, del que adopta elementos.. A la severidad de Montañés añade gracia y dulzura, reflejada en sus esculturas femeninas. OBRAS Página 7

8 -Virgen de la Oliva: (Lebrija, Sevilla). Lleva al Niño en sus brazos con gran suavidad y ternura. Gran detallismo y policromía, cuidado tratamiento de paños, enormes pliegues profusamente decorados en las vestiduras. Tendencia a la idealización en el rostro de la Virgen -Inmaculada del Facistol de la Catedral de Granada. Es una escultura de bulto redondo de pequeño tamaño. La Virgen niña, apoyada sobre una nube de querubines, muestra su rostro idealizado de extrema dulzura, sencillez y espiritualidad. Las manos son finas y delicadas; cuida la policromía y presenta abultados ropajes, concepción geométrica de la figura, en forma de huso. La vestidura lisa, evita la decoración, trabajada a grandes capas, su severidad contrasta con la inmaculada belleza de manos y rostros. Se colocó en el facistol para que pudiera ser observada desde todos los puntos de vista. PEDRO DE MENA ( ), discípulo de Alonso Cano, de quien hereda el gusto por la sublimación de las imágenes, si bien les confiere mayor expresividad y una interpretación más sensual, como la Dolorosa de las Descalzas Reales de Madrid, figura de medio cuerpo donde sabe aunar belleza femenina con un alto grado de concentración mística. OBRAS Las principales obras de Pedro de Mena son San Francisco y la Magdalena Penitente. San Francisco de Asís, con capucha y las manos escondidas en las mangas de la túnica, muestra un elevado misticismo y expresividad: sus ojos, profundos y de gran sentimiento, miran a lo alto. Magdalena penitente, escultura de bulto redondo, expresa ascetismo, expresividad y patetismo. La madera refleja el trenzado auténtico de una tosca túnica de arpillera. El rostro es doliente y sentido, los cabellos lacios y las manos expresivas, sostienen un crucifijo. Es una escultura simple, que muestra dinamismo y movimiento. ESCUELA MURCIANA Su centro es Murcia y su representante más característico fue Francisco Salzillo, que realiza obras procesionales (pasos), en los que establece grupos de gran unidad psicológica, cohesionados por la acción. El tratamiento de los rostros, excesivamente dulces, se ve compensado por el excepcional tratamiento técnico en el trabajo de la madera, que le permite un exhaustivo estudio de posturas y anatomía. Sus composiciones se caracterizan por la composición. Destaca la Oración en el Huerto, que es un grupo escultórico de gran profundidad mística; dinámico, elaborado, sentimental y adornado excesivamente. Pero lo más característico de Salzillo son los Nacimientos o Belenes, conjunto de figuras de barro policromado al estilo napolitano. Las figuras son reales y espontáneas; las escenas son tanto religiosas como populares, el estilo es natural, fresco y real. Página 8