El Futuro del Sector Eléctrico

Transcripción

1 El Futuro del Sector Eléctrico Pablo Hernán Corredor Avella ABRIL DE 2012 PHC S.A.S El futuro del Sector eléctrico tiene que estar enmarcado en un propósito superior que busque el desarrollo sostenible enfocado en los siguientes elementos fundamentales: calidad de vida de la sociedad, medio ambiente, uso eficiente de los recursos naturales, tarifas competitivas, empresas e instituciones fuertes, internacionalización de las empresas, exportación de energía, exportación de servicios conexos y desarrollo de la infraestructura, la tecnología y el talento humano. Es decir lograr un sector de clase mundial. Los inductores para lograr este propósito superior son las políticas de Estado, las normas y regulaciones, la coordinación y eficiente funcionamiento de las instituciones, el apropiado desarrollo de la infraestructura, la adecuada implementación y apropiación de las tecnologías, el desarrollo y capacitación del talento humano y el avance en la instalación y funcionamiento de plataformas transaccionales inteligentes que permitan al consumidor de energía ser activo y verdadero participe en la toma de sus decisiones de consumo energético, donde tenga una canasta de energéticos competitivos que los pueda seleccionar en tiempo real mediante plataformas de internet o a través de un gran desarrollo de la comercialización tanto a nivel mayorista como minorista. Esto será el resultado de tener redes inteligentes funcionando para lograr así el propósito superior de tener un desarrollo sostenible. Lo anterior es el sueño que está avanzando a nivel mundial, en Colombia no es explícito que el Estado contemple dentro de sus políticas hacer realidad este sueño o no. Si bien se puede afirmar que el Sector Eléctrico ha tenido un gran avance en los últimos 18 años, después de la reforma originada en la expedición de las leyes 142 y 143 de 1994, y motivada por la liberalización de los mercados eléctricos a nivel mundial, dada la necesidad de promover la competencia en el Sector Eléctrico, incentivando la participación privada mediante la creación de instituciones sólidas, que planearan, regularan y vigilaran la prestación del servicio. Éxito que puede ser medido con indicadores como la calidad y confiabilidad del servicio, donde ha habido dos niños el de y el de

2 El Futuro del Sector Eléctrico Página , hidrológicamente tan severos como el del año 1992, bien recordado como el año del apagón, y no hubo ningún riesgo de racionamiento, mostrando avance tanto en las normas, como en el desarrollo de la infraestructura de generación, transmisión y distribución, así como en la parte técnica y comercial, siendo por esto hoy catalogado como el mercado eléctrico más avanzado en Latinoamérica. Sin embargo se revelaron algunas oportunidades de mejoramiento, que ahora vamos a describir que es fundamental solucionarlas para asegurar el propósito superior del Sector y así asegurar un futuro promisorio. Artículos La pregunta que surge es sí se ha avanzado tanto en estos años, porqué se observa con menor optimismo que el futuro no sea conducido por una senda de progreso tan importante como la de los últimos 18 años y las razones están en los siguientes aspectos: Aunque hay políticas escritas en documentos del gobierno o en el Plan de Desarrollo, la realidad es que en la práctica no hay una política energética integral de estado que se instrumente con la regulación, prueba de esto es que cuando observamos la actual canasta energética cuya composición es de 48% hidrocarburos, 22% gas, 13% hidroelectricidad, 8% carbón mineral, 6% leña, 2% bagazo y 1% otros, no se encuentra que la regulación sea clara en sus incentivos para lograr una canasta energética mas eficiente y limpia que busque un propósito superior, sino que es desarticulada para cada energético dejando el desarrollo de los subsectores del Sector Energético a las fuerzas del mercado o a los intereses puramente empresariales, por tanto el futuro se ve incierto en lograr una mejor composición de la canasta energética. La desarticulación de las políticas y la regulación de los sectores, ha llevado al Estado a intervenciones en los momentos de sequías o Niño que han hecho aumentar la percepción de riesgo de los inversionistas y a dudar si el cargo por confiabilidad es o no el instrumento para asegurar la confiabilidad en el corto plazo. No hay ninguna duda que el cargo por confiabilidad expedido en el año 2006, ha sido muy exitoso para atraer la inversión en generación para cubrir las expectativas de demanda en los próximos 10 años. Sin embargo, la experiencia del Niño dejó al descubierto además de la insuficiencia en la infraestructura del transporte de gas, dificultades en la coordinación entre el Ministerio de Minas y Energía y la CREG en temas relacionados con el gas y su impacto en la confiabilidad del Sector Eléctrico, desconfianza y diferencias de

3 El Futuro del Sector Eléctrico Página 3 percepción de riesgo entre la industria y el gobierno y viceversa, desventajas de la confidencialidad de la información del mercado de corto plazo, que generó aún mas asimetría en la información, incrementando la incertidumbre en un mercado donde la competencia es imperfecta, lo que finalmente logró fue precios ineficientes y mal uso de los recursos aunque en contrapartida se logró una confiabilidad del 100% en el suministro de energía eléctrica y un racionamiento en el suministro del gas principalmente al sector industrial y en menor escala al vehicular, se mostró también que no fue adecuado el Precio de escasez como señal, así mismo se demostró la inconveniencia de las reglas que el regulador estableció para incentivar el uso de combustibles líquidos, para generar energía eléctrica en tiempos de sequía, revelando también insuficiencia en la capacidad de transporte de dichos combustibles y dificultades técnicas y logísticas para que las plantas operaran con dichos combustibles. Todo lo anterior condujo a que el Ministerio y la CREG cambiaran varias veces la regulación durante el período de sequía. Lo más preocupante de estas debilidades es que en épocas normales los precios de las contrataciones de energía de largo plazo están influenciadas por el riesgo de la ocurrencia del Fenómeno del Niño, la intervención por parte del Estado y por la percepción con respecto al funcionamiento del parque generador con combustibles líquidos, llevando esta percepción de riesgo en últimas a tarifas menos competitivas, uso no eficiente de los recursos naturales del país y un posible gran deterioro del medio ambiente. Para tener un mejor futuro es necesario que la CREG sea asertiva con estas lecciones aprendidas y capitalice constructivamente la experiencia. Para lograr que en el largo plazo se tenga una buena confiabilidad independiente del clima, y considerando que Colombia tiene adecuadas reservas de gas natural, y que por tanto este energético debe jugar en el futuro un papel importante en la canasta colombiana, El Estado tiene que ver el Sector Energético en forma integral, para esto entre otras cosas el regulador debería diseñar los incentivos para que se cree un verdadero mercado del gas competitivo, que lleve a un desarrollo maduro de la producción y transporte del gas, con infraestructura que asegure su confiabilidad con la instalación de plantas de gasificación y / o infraestructura de almacenamiento de gas, entrada de nuevos actores a la cadena, fortalecimiento de su organización industrial que asegure competencia y reduzca el poder de mercado, transparencia en la información, la creación de un gestor técnico idóneo que aproveche las sinergias del operador eléctrico, en lugar de imponerle barreras a éste para que desarrolle este rol y dar oportunidad a que,

4 El Futuro del Sector Eléctrico Página 4 entonces, sean solo empresas multinacionales quienes desempeñen los roles de dicho gestor, desaprovechando las competencias del operador y administrador del mercado eléctrico colombiano. En definitiva es de gran importancia que las reglas aseguren confiabilidad y precios competitivos para toda la canasta energética, acción que es mucho más racional y benéfica para el futuro que replicar las reglas de intervención que se aplicaron durante el Niño. Si bien el Sector Eléctrico tiene un diseño Institucional de clase mundial, con instituciones consolidadas como la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) y la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios (SSPD), adolece de una gran debilidad en la Unidad de Planeación Minero Energético, y de una débil coordinación entre estas instituciones que hace que los intereses de la Sociedad Colombiana como un todo en el Sector Energético no sean manejados lo suficientemente eficiente. Adicionalmente existe una falla de coordinación interinstitucional con el Sector del Medio Ambiente a cargo de los Ministerios y Corporaciones Regionales, que hace que se materialicen los riesgos ambientales en los proyectos por la dificultad de que las empresas ejecutoras de los proyectos los puedan administrar adecuadamente. Así mismo, existen riesgos que se materializan por razones sociopolíticas y de orden público como el caso de Porce IV que Empresa Públicas de Medellín decidió no continuar con su ejecución. En síntesis la coordinación institucional a todo nivel en el Estado es de gran relevancia para asegurar la sostenibilidad del Sector Eléctrico. Es muy importante que el Gobierno y en especial la CREG se concientice de la importancia para Colombia de incentivar las Redes Inteligentes donde el consumidor sea activo en la toma de decisiones del uso de energéticos para así obtener más eficiencia, calidad y competitividad del mercado de energía eléctrica. La introducción en el mercado de vehículos eléctricos, que parece ser una realidad en el corto y mediano plazo, va a revolucionar el Sector eléctrico al poder almacenar energía y ser ésta susceptible de comercializar, más el efecto que tendrá en la canasta energética al reducir el consumo de combustibles líquidos altamente contaminables, por energía limpia como la electricidad. Paralelo a esto es conveniente se busque una verdadera convergencia con el Sector Financiero aprovechando su infraestructura jurídica, empresarial y tecnológica para administrar el riesgo de precios de mercado y de crédito, y revisar la regulación propuesta para crear un Mercado Organizado Regulado (MOR) cerrado para los Agentes del mercado eléctrico, que dado su esquema de manejar el riesgo de crédito, no tener liquidez, no corregir en el tiempo la administración de los riesgos, va a propiciar tener tarifas mayores debido a la

5 El Futuro del Sector Eléctrico Página 5 dificultad de formar precios eficientes en este mercado, desafortunadamente su diseño no tiene en cuenta la concentración de la propiedad y se acentúa con la imposibilidad que los compradores puedan actuar, ya que en el diseño es la CREG quién determina la cantidad de energía a comprar y su elasticidad o disponibilidad del consumidor a pagar por la energía y por tanto el precio resultante lo mas probable es que no sea eficiente con unos sobrecostos para la sociedad. Si bien la CREG ha mencionado parcialmente corregir las anteriores debilidades, permitiendo en forma complementaria participar voluntariamente en el mercado de derivados administrado por DERIVEX y compensado y liquidado por la Cámara de Riesgo Central de Contraparte de Colombia, todavía no hay la suficiente claridad lo cual genera incertidumbre para el futuro. A pesar de las debilidades anotadas, se tiene un conjunto importante de proyectos de generación en desarrollo, fruto de las subastas del cargo por confiabilidad: En el 2008 se asignaron 3022 MW de los cuales 150 MW fueron a carbón, 202 MW combustible líquidos y 2670 MW hidráulicos, en el 2011 se asignaron 575 MW, 410 MW a carbón y 165 MW hidráulicos y en el MW hidráulicos y 88 MW con combustibles líquidos, capacidad que garantiza el suministro de energía eléctrica con un gran índice de confiabilidad para los próximos diez años. Como se observa de esta canasta el 79% es hidráulico,14% carbón y 7% combustibles líquidos. Dada la incertidumbre en la disponibilidad del gas no hay nuevos desarrollos de plantas eléctricas a gas, confirmando la apreciación que mencionamos anteriormente sobre el mercado del gas. Es importante resaltar que se tiene un sistema de transmisión robusto, un mercado y una operación eficientemente administrada por XM que en sus seis años de funcionamiento se ha logrado ubicar dentro las diez mejores a nivel mundial con un excelente Gobierno Corporativo que ha garantizado la independencia y la neutralidad, y además ha incursionado en negocios que impulsan el desarrollo del mercado como son los derivados energéticos y los de movilidad que apuntan a una visión de redes y ciudades inteligentes. Para el futuro es de gran importancia seguir fortaleciendo a XM y evitar que los agentes activos en la compra y venta de energía participen de su Gobierno Corporativo, porque dados los conflictos de interés que aparecerían sería imposible garantizar la transparencia, la independencia, la neutralidad, la eficiencia empresarial y la promoción del desarrollo del mercado hacia un mercado inteligente. En el futuro se deben enfocar los esfuerzos del Gobierno a lograr corregir las debilidades en la fijación de políticas integrales para el sector energético, asegurar una regulación que instrumentalice dichas políticas, fortalecer la Unidad de

6 El Futuro del Sector Eléctrico Página 6 Planeamiento Minero Energético y lograr una excelente coordinación institucional y así si se vislumbraría sin lugar a dudas un futuro promisorio del Sector Eléctrico. Es importante que Colombia siga liderando la integración energética regional, fortaleciendo aún mas las exportaciones a Ecuador, las cuales desde el 2003 le han generado divisas por mas de 870 millones de US$, si bien Ecuador ha anunciado un plan agresivo de construcción de plantas hidroeléctricas para convertirse también en un exportador de energía, esto no debe verse como una amenaza sino se debe ver como una oportunidad, ya que esto fortalecería la viabilidad de exportar energía de Colombia y Ecuador a Perú y principalmente a Chile e incrementaría la competencia en el mercado de energía mayorista colombiano con la consecuente ventaja en la formación de precios y en la confiabilidad. Así mismo, es de gran importancia la materialización de la Interconexión Colombia Panamá para exportar energía a Centroamérica, convirtiendo a Colombia por sus ventajas competitivas de sus recursos y por su ubicación geográfica en un centro natural (HUB) de exportación de energía eléctrica. Así pudiera convertirse en un gran exportador de energéticos como son el petróleo, carbón, gas y electricidad que le agregaría valor al carbón y al gas que se utilice para generar dicha energía eléctrica. Finalmente, es de gran importancia que se empiece a plantear y definir los incentivos para fuentes renovables no convencionales, plantas solares, eólicas, biomasa, etc, tanto para las zonas no interconectadas como para el sistema interconectado, que serán muy promisorias para la década del 2020 o antes, pero tenemos que prepararnos desde ya.