Nomenclaturas, equivalencias y códigos en las estadísticas del comercio exterior de España, 1961 a 2001.

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1 63 COMERCIO EXTERIOR Nomenclaturas, equivalencias y códigos en las estadísticas del comercio exterior de España, 1961 a Julio G. Sequeiros Tizón Instituto de Estudios Económicos de Galicia Banco Pastor Fundación Pedro Barrié de la Maza

2 Instituto de Estudios Económicos de Galicia Pedro Barrié de la Maza El Instituto de Estudios Económicos de Galicia Pedro Barrié de la Maza (IEEG PBM) es una entidad privada, no lucrativa e independiente patrocinada por el Banco Pastor y la Fundación Pedro Barrié de la Maza, cuyo fin es el avance de la ciencia económica en Galicia, la mejora del conocimiento de su realidad socioeconómica y el desarrollo de su capital humano en esta disciplina. Instituto de Estudios Económicos de Galicia Pedro Barrié de la Maza Cantón Grande, A Coruña España Las ideas que se exponen en este documento son únicamente las de sus autores y no representan en modo alguno las del IEEG PBM ni las de sus patrocinadores. La finalidad de este documento es tan sólo la de poner a disposición de otros economistas y del público en general de forma anticipada los resultados de las investigaciones que el IEEG PBM realiza.

3 NOMENCLATURAS, EQUIVALENCIAS Y CÓDIGOS EN LAS ESTADÍSTICAS DEL COMERCIO EXTERIOR DE ESPAÑA, 1961 A Julio G. Sequeiros Tizón Índice Introducción I. El comercio exterior de España por país origen-destino. II. La provincialización de la balanza comercial de España. III. Las clasificaciones del comercio exterior por productos. III.1. La Nomenclatura de Bruselas (1961 a 1980). III.2. La Nimexe (1981 a 1987). III.3. La Taric (1988 a 2001). IV. Valores, pesos y unidades en los flujos de comercio. V. La base GASPAR del comercio exterior de España. Referencias Bibliográficas. Apéndice 1: Los conversores sintéticos. Apéndice 2: Algo más sobre Nomenclaturas. 1

4 Dios está en los detalles. Spinoza NOMENCLATURAS, EQUIVALENCIAS Y CÓDIGOS EN LAS ESTADISTICAS DEL COMERCIO EXTERIOR DE ESPAÑA, 1961 A Julio G. Sequeiros Tizón 1 Aunque construida con diferentes niveles de agregación y con criterios estadígrafos distintos, podemos rastrear la existencia de información sobre el Comercio Exterior de España hasta la segunda década del siglo XIX. Concretamente, disponemos de información estadística desde 1821 en adelante 2. Ahora bien, en las páginas que siguen vamos a introducir algunas restricciones al respecto de la información que nos interesa. En primer lugar estamos interesados en que la clasificación de las importaciones y de las exportaciones sea la misma y, además, que esta clasificación tenga un nivel de desagregación notable. En segundo lugar, estamos interesados en ejercicios completos, esto es, ejercicios que abarquen el año natural y durante el cual la clasificación arancelaria no se vea modificada. La primera restricción se explica en la necesidad de comparar el comercio exterior producto a producto (por ejemplo, para analizar el comercio intra industrial) entendiendo por producto un bien lo más desglosado posible (léase, un bien homogéneo). Una explicación más: el máximo nivel de desglose nos permite pasar de unas clasificaciones a otras, equivalencias que únicamente se expresan al mayor nivel de desagregación existente en cada momento. Y tanto un aspecto como el otro, requieren que la clasificación de los productos (la nomenclatura) sea la misma para las importaciones que para las exportaciones. La segunda restricción es necesaria, por ejemplo, para mantener la comparabilidad entre los distintos ejercicios anuales. 1 El autor es Docteur d Etat ès Sciences Economiques et Droit y Catedrático de Estructura Económica en la Universidade da Coruña. Agradezco cordialmente a la Xunta de Galicia la Ayuda a la Investigación PGIDT00PX110003PR que ha hecho financieramente posible este trabajo. Para cualquier comentario puede dirigirse el lector a gaspar@udc.es 2 Véase, por ejemplo, Varios; Estadísticas Históricas de España. Siglos XIX y XX. Ed. Fundación Banco Exterior. Madrid, Págs. 330 y ss. 2

5 La inclusión de estas dos restricciones acota el periodo de análisis de una forma muy notable. En primer lugar, hasta 1926 inclusive, las importaciones y las exportaciones estaban sometidas a clasificaciones diferentes: en los primeros años del Siglo XX las importaciones se clasificaban en 1540 Partidas y las exportaciones en 383. Tanto unas como otras se agregaban en 13 Clases en donde la comparabilidad entre unas y otras ya era directa 3. El R.D. de 08 de Marzo de 1924 en su apartado a) dispone la formación anual de las Tablas de Valores Oficiales de las mercancías con arreglo a la Nomenclatura y partidas del Arancel en vigor, divididas en dos partes importación y exportación- con igual clasificación por clases, grupos y partidas. 4. Los primeros resultados de la aplicación de la norma anterior son para el ejercicio de 1927, para el cual se aplica a las exportaciones, la misma clasificación que se venía aplicando a las importaciones, esto es, 1540 partidas diferentes, partidas que, ocasionalmente, se desglosan en subpartidas, dando como resultado una clasificación de alrededor de 1750 productos distintos. Esta homogeneidad en el tratamiento de las importaciones y exportaciones se inicia en 1927 y se conserva hasta la actualidad. Adicionalmente, la Dirección General de Aduanas (en adelante D.G.A.) al elaborar la Estadística del Comercio Exterior de España, Año 1927 (Ed. C.E.N. Madrid, 1928) introduce los resultados anuales (Comercio de España con el resto del mundo) para los ejercicios de 1925 y 1926 de acuerdo a la nueva clasificación de las exportaciones. En efecto, al unificar, por primera vez en este volumen, las partidas de Importación con las de Exportación, se han aplicado las cantidades y valores comparativos del comercio de Exportación de 1925 y 1926 (...) 5. En definitiva, aunque la clasificación de las importaciones y de las exportaciones empieza a ser la misma desde 1927 en adelante, disponemos de esta información, partida por partida, comercio España Resto del Mundo, también para 1925 y para La segunda restricción la homogeneidad al máximo nivel de desagregación posible dentro de los ejercicios anuales- anula el ejercicio de 1939 y el de El primero de ellos no lo podemos tener en cuenta porque solo existe información desde el mes de Abril y siguientes 6 y el segundo (1960) ya que la clasificación vigente 3 Véase, Consejo de Economía Nacional; Estadística del Comercio Exterior de España, Ed. C.E.N. Madrid, Y véanse también los ejemplares de los años anteriores. 4 Citado en Consejo de Economía Nacional; Estadística del Comercio Exterior de España, Enero a Marzo de Ed. C.E.N., Madrid, Pág.300. Nótese que todo lo que se refiere a Nomenclaturas, Códigos (de países, por ejemplo), Aranceles, etc. tiene su plasmación jurídica, desde Ordenanzas a Leyes, pasando por Ordenes Ministeriales y Decreto Ley. En este sentido, son normas de obligado cumplimiento por parte de los agentes involucrados. 5 Véase, Consejo de Economía Nacional, Estadística del Comercio Exterior de España, Enero a Marzo, Ed. C.E.N., Madrid, Pág.V. 6 Véase, Ministerio de Hacienda. D.G.A. Resumen Mensual de la Estadística del 3

6 hasta el 08 de Junio de ese año es diferente de la que se aplica desde esa fecha en adelante 7. Por supuesto, y por razones de sobra conocidas, no disponemos de información para los años 1936, 1937, y En definitiva, la aplicación de las cláusulas de homogeneidad anteriores (ejercicios completos y con la misma nomenclatura para las importaciones que para las exportaciones) nos deja los recursos estadísticos sobre el comercio exterior de España tal y como figuran en el Cuadro No.1. Como ahí podemos ver, desde 1927 en adelante se han usado cuatro nomenclaturas diferentes: la Clasificación Estadística Arancelaria de las Mercancías del Arancel de Aduanas, nomenclatura que ya se venía aplicando a las importaciones y que se extiende también a las exportaciones desde 1927 en adelante, y que deja de aplicarse a mediados de Esta clasificación desagrega los flujos comerciales en productos distintos y tiene la particularidad de ser una clasificación típicamente española, es decir, sin raíz de ningún tipo con alguna otra clasificación internacional y, al mismo tiempo, es una clasificación con una estructura interna muy peculiar. A mediados de 1960 se comienza a aplicar la Nomenclatura Arancelaria de Bruselas (también conocida por Nomenclatura de Bruselas). Esta clasificación es ya una nomenclatura moderna, en la cual los dos primeros dígitos representan los Capítulos y los cuatro primeros las Partidas Arancelarias. Hasta aquí todos los países adherentes a la Brussels Convention on Nomenclature for the classification of goods in customs tariffs (World Customs Organization, Bruselas, 1950) comparten la misma clasificación, de tal modo que los países firmantes quedan libres para incorporar los dígitos sucesivos que crean necesarios para desagregar las partidas en las posiciones arancelarias de su interés. En síntesis, esta es una nomenclatura con algo más de partidas y con un número de posiciones que, en el caso español, supera las en sus últimos años de vigencia. A partir del primero de Enero de 1981 se empieza a aplicar la NIMEXE, nomenclatura que, en términos generales, es la NAB en la cual el acuerdo de Bruselas no solo alcanza a los cuatro primeros dígitos sino que se extiende al conjunto de la nomenclatura, esto es, a siete dígitos: en este sentido, la comparabilidad internacional de las estadísticas es directa a nivel de posiciones y no como en la etapa anterior, en la cual esta comparabilidad se Comercio Exterior de España (Abril a Diciembre de Año de la Victoria). Ed. D.G.A., Madrid, Véase, Ministerio de Hacienda. D.G.A. Estadística del Comercio Exterior de España, 1960 (Enero a Junio). Ed. D.G.A. Madrid, Ministerio de Hacienda. D.G.A. Estadística del Comercio Exterior de España, 1960 (Julio a Diciembre). Ed. D.G.A. Madrid, La falta de homogeneidad interna en el ejercicio de 1960 se recoge también por el Instituto Nacional de Estadística en Anuario Estadístico de España, 1961 (I.N.E., Madrid 1963) en donde el comercio exterior de 1960 aparece desglosado en (dos) semestres y con nomenclaturas diferentes entre si (Véase Op. Cit. Pág.448 y ss.). 4

7 Cuadro No. 1 PERIODOS Y NOMENCLATURAS EN EL COMERCIO EXTERIOR ESPAÑOL, 1925 y ss. Periodo Nomenclatura Concordancia Soporte Información vigencia Arancelaria Directa Información Prod. Pais Prov. Valor Notas 1925 a 1926 C.E.A. b Papel A B B Ptas. Oro a 1927 a 1935 C.E.A. b Papel A C B Ptas. Oro b 1936 a 1939 B B B B B B B c 1940 a 1950 C.E.A. b Papel A C B Ptas. Oro b 1951 a 1959 C.E.A. C.U.C.I. Rev. 0 Papel A C B Ptas. Oro d 1960 C.E.A. / N.A.B. C.U.C.I. Rev. 0 Papel B C B Ptas. Año e 1961 a 1963 N.A.B. C.U.C.I. Rev. 1 Papel A C B Ptas. Año f 1964 a 1979 N.A.B. C.U.C.I. Rev. 1 Papel y Mag. A A B Ptas. Año g 1980 N.A.B. C.U.C.I. Rev. 2 Papel y Mag. A A A Ptas. Año h 1981 a 1987 NIMEXE C.U.C.I. Rev. 2 Papel y Mag. A A A Ptas. Año i 1988 a 1995 S.A TARIC C.U.C.I. Rev. 3 Papel y Mag. A A A Ptas. Año j 1996 a 2001 S.A TARIC C.U.C.I. Rev. 3 Papel y Mag. A A A Ptas. Año k 2002 a 2007 S.A TARIC C.U.C.I. Rev. 3 A: Disponible e incorporado en la Base de Datos (1925 a 1963 dactilografiado por nosotros mismos) B: No disponible C: Disponible y todavía no incorporado en la Base de Datos. a: Para 1925 y 1926 no existen datos del comercio pais a pais. La D.G.A. recalculó las exportaciones totales para cada posición de acuerdo a la C.E.A. y, asi, poder garantizar la comparabilidad de 1927 con los dos ejercicios anteriores. En consecuencia, el comercio por partida y pais, para estos dos años no está sometido a la misma nomenclatura. b: La C.E.A. (Clasificación Estadística Arancelaria de las Mercancías del Arancel de Aduanas) estuvo vigente desde principios del siglo XX hasta el día 08 de Junio de Los valores de importación y exportación vienen expresados en Pesetas Oro. Para 1936, 1937 y 1938 no se dispone de información. Para 1939 solo se dispone de información desde el mes de Abril en adelante. c: Para estos años no existe información. Véase las reflexiones incluidas en el texto. d: Desde 1951 a 1959 existe la concordancia entre la C.E.A. y la CUCI Rev.0 facilitada por la propia D.G.A. e: El ejercicio de 1960 es muy peculiar. Hasta el la Nomenclatura base es la C.E.A. y, a partir de esa fecha, pasa a ser la Nomenclatura Arancelaria de Bruselas (N.B.A.). La única clasificación homogénea que cubre el conjunto del ejercicio es en términos de la CUCI Rev.0 f: La Nomenclatura Arancelaria de Bruselas también recibe el nombre de Nomenclatura de Bruselas. g: Desde 1964 las Estadisticas del Comercio Exterior de España están disponibles en cintas magnéticas. h: El ejercicio de 1980 lo hemos tratado individualmente ya que tiene en común con el periodo anterior la Nomenclatura Arancelaria y con el periodo siguiente la concordancia directa. i: La NIMEXE es una versión de la N.A.B. Adoptada por los paises europeos a principios de los ochenta. j: En este periodo la Nomenclatura Arancelaria está basada en el Sistema Armonizado (Versión 1988), del cual arranca la Nomenclatura Combinada (Versión 1988) y la correspondiente Taric. k: En este periodo la Nomenclatura Arancelaria está basada en el Sistema Armonizado (Versión 1996), del cual arranca la Nomenclatura Combinada (Versión 1996) y la correspondiente Taric. Fuente: Elaboración propia según se expone en el texto. 5

8 limitaba a los cuatro primeros dígitos. En síntesis, esta nomenclatura sigue reteniendo algo más de partidas con un número de posiciones que oscila alrededor de los productos distintos. Desde el primero de Enero de 1988 la nomenclatura vigente es la Nomenclatura Combinada, basada en el Sistema Armonizado (en sus dos versiones, la de 1988 y la de 1996). Esta nomenclatura, inspirada en la NIMEXE, es de utilización prácticamente universal y clasifica el comercio en algo más de partidas diferentes (cuatro dígitos), sobre posiciones diferentes (ocho dígitos), y sobre subposiciones distintas (más de ocho dígitos). El cuadro anterior también nos informa como para estas clasificaciones existe la conversión directa (elaborada por la propia D.G.A.) con las sucesivas CUCI (léase, Clasificación Uniforme para el Comercio Internacional) al menos desde 1951 a la actualidad 8. La CUCI es una nomenclatura elaborada por la División de Estadística de la Organización Naciones Unidas para tratar de homogeneizar la información disponible sobre comercio internacional. La primera versión de la CUCI (SITC, en sus siglas en inglés) data de 1950 (también llamada CUCI, CUCI original o CUCI Rev.0), con unas reformulaciones y adaptaciones importantes en 1960 (CUCI Rev.1 o también CUCI Revisada), a principios de los setenta (CUCI Rev.2) y a mediados de los ochenta (CUCI Rev.3). La posibilidad de poder establecer las concordancias entre las nomenclaturas españolas y las CUCIs o, lo que es lo mismo, expresar el comercio español en nomenclaturas CUCI, nos permite, en primer lugar, establecer series largas y homogéneas en base a las equivalencias entre las sucesivas CUCIs y, en segundo lugar, acceder a todo el abanico de posibilidades que se abre en términos de concordancias entre las CUCIs y otras clasificaciones. En definitiva, las concordancias entre las clasificaciones españolas y la CUCI nos permiten abandonar las especificidades patrióticas y plantear los problemas ya con recursos a nivel internacional. El mismo cuadro anterior nos indica como la Estadística del Comercio Exterior de España, 1927 y ejemplares para los años sucesivos (D.G.A., Madrid, 1928 y ss.) están disponibles en soporte papel para todos los años hasta hoy en día y, además, en soporte magnético desde 1964 a la actualidad. Nuestra línea de trabajo ha sido dactilografiar el comercio de España con el resto del mundo, (posición a posición, valores y pesos de importación y exportación) desde 1925 hasta 1963 y, desde 1964 en adelante, utilizar la información en soporte magnético que nos ha facilitado la D.G.A. Esta eventualidad es la que nos explica como el comercio por productos está disponible desde 1925 a la actualidad (excepto 1960, por lo expresado más arriba 9 ) y, sin embargo, la balanza comercial 8 A partir de 1951 se viene publicando el comercio exterior de España según las sucesivas nomenclaturas CUCI. Véase Ministerio de Hacienda. Dirección General de Aduanas; España. Clasificación Uniforme para el Comercio Internacional, Ed. D.G.A., Madrid, 1952 y ss 9 El año de 1960 solamente está homogeneizado para todo el ejercicio en términos de la CUCI Rev.0. Véase Ministerio de Hacienda. Dirección General de Aduanas; España. 6

9 país a país solo lo está desde 1964 en adelante, como resultado de la explotación de las cintas magnéticas. Por último, señalar que el campo provincia sólo se empieza a contabilizar a partir de 1980 y sucesivos 10. En el cuadro anterior también figura una cuestión de importancia mayor. Hasta 1959 los valores de importación y exportación vienen expresados en Pesetas Oro y, desde 1960 en adelante (en este caso, el ejercicio completo) los valores vienen expresados en Pesetas Papel. La Peseta Oro era una unidad de cuenta específica para el comercio exterior que presenta problemas importantes a la hora de determinar su convertibilidad a Pesetas corrientes. En este caso, el problema de homogeneización no reside solamente en las nomenclaturas diferentes sino que, además, se añade el de la convertibilidad de las Pesetas Oro. Esta cuestión es la que nos lleva a plantearnos la conveniencia de dedicarnos, en primer lugar, al estudio del periodo 1961 y ss. y dejar el periodo 1925 a 1959 para otra ocasión. Este último periodo presenta una nomenclatura arancelaria muy particular, unas valoraciones de los flujos de importación y exportación también complejas (con cambios sustanciales entre 1930 y 1931, esto es, el paso de Valores Unitarios a Valores Declarados), una definición del territorio estadístico que solo engloba a Canarias desde 1953 en adelante y unas concordancias directas con la CUCI que, elaboradas por la D.G.A., solo abarcan el periodo 1951 a El periodo 1961 y ejercicios posteriores. Como hemos visto más arriba, para los ejercicios de 1961, 1962 y 1963 hemos dactilografiado el comercio de España con el resto del mundo, posición a posición 12. Desde 1964 en adelante hemos utilizado Clasificación Uniforme para el Comercio Internacional, Ed. D.G.A., Madrid, Fíjese el lector que la labor de dactilografía no es vanal. Informatizar las Balanzas Comerciales de España con el resto del mundo (producto a producto) para el periodo 1925 a 1963 ha significado mecanografiar alrededor de números, cada uno de ellos con sus dígitos pertinentes (es decir 31 ejercicios por 1750 posiciones por cinco columnas: valores y pesos de importación y exportación). Así, introducir a mayores los países comercio de España posición a posición y pais a paissignificaría repetir el trabajo anterior más de 100 veces (una por cada pais partenaire). 11 Para mayor detalle sobre estos problemas consúltese Sequeiros Tizón, J.; <Construcción, Desconstrucción y Reconstrucción: el comercio exterior de España, 1925 a 1960> en Papeles de Trabajo / Working Papers. Instituto de Estudios Economicos de Galicia. Fundación Barrié Concretamente hemos dactilografiado, posición por posición, el comercio de España con el resto del mundo, desde Ministerio de Hacienda, Dirección General de Aduanas; Estadística del Comercio Exterior de España, Madrid, Tomo I. Resúmenes Generales, Comercio Especial. 917 Págs. Ministerio de Hacienda, Dirección General de Aduanas; Estadística del Comercio Exterior de España, Madrid, Tomo I. Resúmenes Generales, Comercio Especial Págs. Ministerio de Hacienda, Dirección 7

10 la información en soporte magnético que nos ha facilitado la Dirección General de Aduanas (Ministerio de Economía). Como es sabido, en el caso español, la Dirección General de Aduanas (en adelante D.G.A.) tiene encomendada la tarea del registro sistemático de todas las transacciones comerciales que España lleva a cabo con cualquier país extranjero. Estos registros sistemáticos de las operaciones individuales se consolidan mensualmente, de tal modo que, mes a mes, vamos teniendo información puntual del comercio exterior de España. Con posterioridad, el conjunto de las balanzas mensuales forman las balanzas anuales del comercio exterior de España. Desde 1964 en adelante esta información se conserva en soporte magnético, de tal modo que existe una base de datos para cada ejercicio. El tamaño de estas últimas es gigantesco: varios millones de filas con 132 ó 125 caracteres alfanuméricos por línea (por ejemplo, registros de 125 caracteres en 1992) Las bases de datos de la D.G.A. reúnen una información valiosísima: aduana de tránsito; país de origen o destino del flujo comercial; tipo de producto al mayor nivel de desagregación posible; peso en Kgrs., valor en Ptas. y número de unidades de la mercancía exportada o importada; provincia española de origen o de destino del flujo comercial; domicilio fiscal del importador o exportador; divisas utlizadas en las transacciones; modalidad de transporte de las mercancías, etc. 13. La D.G.A. ha tenido la cortesía de facilitarnos estas bases de datos en soporte informático (cintas magnéticas), con el contenido del comercio exterior de España desde 1964 a la actualidad, de tal modo que uno de los objetivos de este trabajo es analizar estas bases y ampliarlas en aquello que, siendo factible, facilita el análisis económico del comercio exterior de España durante ese periodo. Sobre las bases de datos de la D.G.A. quisiéramos realizar otra reflexión. Estas bases, al menos hasta muy avanzada la década de los años ochenta, estaban orientadas hacia dos objetivos fundamentales. El primero era la gestión de la recaudación fiscal en frontera sobre las importaciones y el control de la desgravación fiscal a algunas exportaciones, léase, en ambos casos, el objetivo tributario. El segundo objetivo era, y en cierta medida sigue siendo, tener un control estadístico sobre el comercio exterior de España en su conjunto, como elemento básico para el diseño de la política comercial y arancelaria, para la confección de las Cuentas Nacionales y la Balanza de Pagos. En este sentido, nos ha parecido oportuno tomar las bases de datos, no como algo terminado y definitivo, sino como una materia prima susceptible de incrementarle su valor añadido. Y ésta ha sido la General de Aduanas; Estadística del Comercio Exterior de España, Madrid, Tomo I. Resúmenes Generales, Comercio Especial. 911 Págs. 13 A partir de Abril de 1994 la legislación española sobre la protección del secreto estadístico y de la intimidad de las epersonas impide a la D.G.A. facilitar la identidad del importador o exportador y, por lo tanto, esta información, empresa por empresa, ya no está disponible. En otros términos, el campo NIF o DNI no está disponible al aplicarse retroactivamente estos criterios. 8

11 actitud: analizar las bases año a año, dedicar a cada uno de los ejercicios el tiempo que requiera, identificar los problemas existentes, evaluarlos sosegadamente y, en algún caso concreto, tratar de poner remedio. El resultado, creemos, es una aproximación más valiosa y más útil al comercio exterior de España. Los objetivos a alcanzar como resultado de los ejercicios que haremos a continuación sobre las bases de datos originales de la D.G.A. nos deben permitir, al menos, el análisis de los siguientes puntos: a) Estudiar los distintos aspectos del comportamiento en el largo plazo de la balanza comercial española. Para ello es necesario tratar de homogeneizar los datos de base para un periodo largo (1961 a 2001), o incluso, muy largo (1925 a 2001) b) Estudiar el comercio intra e inter industriales, para lo cual necesitaremos información al nivel de máxima desagregación posible de acuerdo a cada nomenclatura. Al mismo tiempo, este comercio intra industrial debe poder ser desagregado en gamas de calidades, a través de los valores unitarios de importación y exportación. Este requisito implica el disponer, producto a producto, de sus valores y sus pesos (circunstancialmente también de sus unidades). c) Analizar el comercio exterior en términos del destino final de los bienes (Consumo, Capital e Intermedios) y ello durante el ciclo largo. d) Estudiar el perfil exterior de los distintos sectores productivos. Para ello es necesario poder agregar los datos de comercio exterior en sectores de la producción (CNAE, por ejemplo). e) Investigar el contenido tecnológico de las balanzas comerciales de los distintos espacios económicos y frente a cualquier espacio internacional. f) Analizar el comportamiento comercial de las provincias españolas. g) Estudiar los cruces entre los aspectos anteriores, es decir, contestar a preguntas del tipo: el comercio de bienes de capital es de carácter intra o inter industrial?. La apertura al exterior de la economía española se materializa a través del comercio de los bienes intermedios o de los finales?. El comercio de bienes tecnológicos cómo se distribuye por sectores productivos?. El comercio de los bienes de consumo final incluye productos tecnológicos?. El comercio de intermedios es mayormente intra o inter industrial?. Se concentra en Barcelona la exportación de productos intermedios tecnológicos?. Este tipo de cuestiones no se pueden contestar desde la base de datos original de la D.G.A. ya que no incluyen este tipo de información. Para poder contestar las preguntas anteriores necesitamos introducir, a partir de las bases originales, los conversores pertinentes (también llamados equivalencias, concordancias, etc.) que nos permiten saber, para un determinado producto, su destino final mayoritario (bien de consumo, de inversión o intermedio), a qué sector productivo pertenece, si tiene un contenido significativo en 9

12 tecnología, si su mercado internacional está organizado (por ejemplo, a través de una bolsa internacional o un mercado de futuros) o no lo está (el calzado, por ejemplo). En este sentido, las páginas que siguen están destinadas a examinar cómo podemos trabajar las bases de datos originales de la D.G.A. para establecer un mecanismo informático de consulta en tiempo real para tener información precisa sobre cada una de estas cuestiones (o sobre una combinación de estas cuestiones). Así, el contenido de este trabajo está ordenado en cinco partes distintas, cada una de ellas, coincidiendo con un paquete de problemas homogéneo: en primer lugar analizaremos el campo pais origen o destino del comercio exterior, en un segundo apartado estudiaremos la provincialización de la balanza comercial de España, en el tercero nos detendremos en la clasificación por productos. Finalmente, en un cuarto apartado analizaremos los valores, pesos y unidades del comercio exterior español para después, en un último apartado, presentar la base de datos GASPAR sobre el comercio exterior de España, 1961 a Aunque el trabajo está redactado siguiendo problemáticas verticales, ello no quiere decir que los planos horizontales estén exentos de problemas. Quizás el problema más importante (desde 1961 en adelante) en el plano horizontal (es decir, que afecta a los países, provincias, posiciones arancelarias, valores, pesos, etc.) lo constituyan los cambios metodológicos introducidos en la elaboración de las estadísticas de comercio exterior como consecuencia de la implantación del Mercado Unico Europeo, en En efecto, hasta el todas las operaciones de comercio exterior estaban recogidas en los Documento Unico Administrativo (D.U.A.) y, en consecuencia, las estadísticas de comercio exterior eran el resultado de un procedimiento censal de obligado y riguroso cumplimiento. A partir del los D.U.A. siguen siendo lo que eran para el comercio Extra U.E. pero, sin embargo, el comercio Intra U.E. queda sometido al régimen Intrastat (Reglamento CEE 3330/91). Este nuevo sistema, destinado a facilitar los intercambios intra comunitarios, establece la obligación de declarar, y únicamente a efectos estadísticos, a todo persona física o jurídica que intervenga en un intercambio de bienes entre países U.E., excluyendo, en general, aquellas personas que no son sujetos pasivos del Impuesto de Valor Añadido. Otra modificación importante, que no existía antes de 1993, es que la obligación de declarar no se extiende a todos los importadores o exportadores: la obligación de declarar, así como la periodicidad de la información a facilitar e, incluso, el detalle de esta información, se determina anualmente en función de unos umbrales mínimos establecidos a priori y expresados en valores (léase, Ptas.). A estos umbrales, que se fijan para un año en función del volumen del comercio Intra U.E. del año anterior, van asociados, al menos, cuatro tipos diferentes y alternativos de declaración: el Umbral de exclusión (operadores que no están sujetos a declarar ya que no superan un umbral mínimo en su comercio intra comunitario, por ejemplo, 1,3 millones Ptas. en 1993 y 1,6 en 1997); Umbral de asimilación (los que no superan este umbral cuatro millones en 1993 y nueve en pueden sustituir la declaración estadística 10

13 específica por la liquidación trimestral del I.V.A.); el Umbral de simplificación (si el valor de los tráficos está comprendido entre unos límites cuatro y catorce millones en 1993 o entre nueve y dieciseis en la obligación queda reducida a una declaración mensual y específica, pero simplificada en cuanto a los datos exigidos. Por último, el Umbral de declaración, sobrepasado el cual (14 millones Ptas. en 1993, 16 en 1997) el agente queda obligado a la presentación de una declaración estadística, detallada, completa y mensual. En resumen, estos umbrales pueden suponer una merma de información sobre los volúmenes de comercio intracomunitario. Además de los anteriores, conviene hacer mención a otros umbrales en vigor que suponen pérdidas de información, no tanto en el volumen, como en la calidad o en el detalle del registro de las operaciones. Nos referimos al Umbral de Valor Estadístico y al Umbral de Transacción. El primero (Reglamento (CE) No. 870/97 de la Comisión) limita la obligatoriedad de declarar el valor estadístico a los operadores que superen un importe facturado anual de introducciones o expediciones. Los operadores por debajo de este umbral (a fijar por cada país) deben consignar en su declaración Intrastat el importe facturado, y, optativamente, el valor estadístico. Para el ejercicio de 1998 una Orden del MECOH lo fijó en millones de pesetas. El Umbral de Transacción (Reglamento (CE) No. 2820/94) limita la declaración del tipo de mercancía. Se trata en este caso de facilitar la carga de trabajo a los operadores que realizan frecuentemente pequeñas operaciones con productos muy diversos, lo que les obligaría a confeccionar declaraciones con muchas partidas y con valores muy bajos. Cuando se autoriza, el obligado solo consignará los datos del estado miembro de procedencia o destino, el importe facturado, y un código genérico ( ), en el que quedarán agrupadas todas las mercancías. Naturalmente, estos umbrales han ido creciendo al ritmo de la integración comunitaria y, en lo que aquí nos interesa, parecen apuntalar la sospecha de que el comercio intra comunitario debiera estar infravalorado 14. Este hecho, que nos parece de difícil cuantificación, estimación y corrección, podría estar presente en las bases de datos de la D.G.A. desde la plena adhesión de España a la U.E. en 1993, a la actualidad. Aunque los cambios habidos en 1993 son los más importantes, con anterioridad ha habido también algunas modificaciones horizontales de un interés menor. En Abril de 1979 el cómputo de las exportaciones se modifica: hasta ese momento se computaban en el momento de su embarque (abandono del territorio nacional) y desde ese momento se contabilizan en el momento en el cual están a disposición de las aduanas. En consecuencia, este hecho motivó que en el año 1979 se 14 Además, estos umbrales, tal y como están definidos, son diferentes de un pais a otro, incluso en el mismo año. Esta circunstancia nos explica como el comercio bilateral entre paises miembros arroja un nivel de asimetrías comerciales que resulta inexplicable sin tener en cuenta el papel jugado por la diferencia entre los umbrales. Para el caso concreto del comercio entre España y Portugal véase Sequeiros Tizón, J.; Comércio Intracomunitário da Euro-regiao Galiza Norte de Portugal. Ed. I.N.E., Lisboa,

14 contabilizasen exportaciones de más, ya que en los meses posteriores a la entrada en vigor del decreto se contabilizaron las mercancías previamente almacenadas en los depósitos aduaneros, sin que se dispusiera de la información necesaria para realizar las correcciones oportunas 15. En 1980 se produjo una ruptura que afectó tanto a las importaciones como a las exportaciones: hasta ese año, se consideraba como un mes el periodo comprendido entre el día 25 de un mes y el día 26 del mes siguiente. A partir de Enero de 1980, y para adaptarse a las normativas internacionales (principalmente a la U.E.), un mes es el mes natural, de tal modo que Enero de 1980 (y por lo tanto el ejercicio de 1980 completo) se encuentran sobrevalorados en unos cuantos días. Por último debemos tener en cuenta que, para el periodo 1961 a 2001, los valores de importación y exportación vienen expresados en Ptas. Para ello se utiliza, durante todo el mes, la tasa de cambio diaria del último miércoles del mes anterior, o fecha siguiente más próxima. Quisiera manifestar mi agradecimiento al personal del Centro de Supercomputación de Galicia (Cesga), al Centro de Cálculo de la Universidad de Santiago y al Centro de Cálculo de la Consellería de Economía de la Xunta (Cistec) la colaboración y el apoyo que nos han prestado para la lectura de las cintas magnéticas originales. También queremos manifestar nuestro reconocimiento al personal del Laboratorio de Bases de Datos de la Universidad de A Coruña (principalmente a Nieves Rodríguez Brisaboa y Miguel Penabad), a la propia Dirección General de Aduanas y al Instituto Galego de Estatística. Sin la colaboración -y sin la paciencia de unos y otroseste trabajo no hubiera sido posible. Agradecer también la colaboración de los Prof. Nuñez Gamallo y López Martínez y su pulcritud en el tratamiento de las equivalencias entre los diferentes códigos. En la misma línea mi gratitud a José Otero Bonet, Marta Fernández Redondo e Inés Mezo Balaca. 15 Véase Buisán, A. Y Gordo, E.; El sector exterior en España. Ed. Banco de España. Madrid, Pág

15 I. El Comercio Exterior de España por país origen destino. Como hemos visto más arriba, disponemos del comercio exterior de España, posición a posición y país por país, desde 1964 en adelante, como resultado de la explotación de las cintas magnéticas proporcionadas por la D.G.A.. El periodo anterior, aunque solo fuera desde 1961 a 1963, habría que dactilografiarlo, lo cual significaría, para esos años, mecanografiar más de cinco millones de números, cada uno con sus dígitos correspondientes (años x posiciones x países x valores y pesos de importación y exportación). En las cintas de la D.G.A. existen dos campos que hacen referencia al país partenaire de cada flujo comercial: el denominado Pais de Procedencia y el Pais Origen Destino. El primero de ellos se corresponde con el origen/destino inmediato de la mercancía (léase, un país de tránsito, habitualmente el puerto de embarque hacia el destino final), refiriéndose el segundo País de Origen Destino- a lo que su nombre indica: el pais de destino final (último), es decir, el pais importador o exportador. Como suele ser recomendado, hemos prescindido del país de procedencia y hemos tenido en cuenta únicamente el país de origen destino de las mercancías. En un período de tiempo tan largo, e históricamente tan intenso, como el que manejamos aquí (1964 a 2001), se han dado modificaciones importantes en el mapa geopolítico mundial, sobre todo desde mediada la década de los años ochenta en adelante. Las bases de datos que estamos utilizando recogen fielmente este proceso: países que se desdoblan en dos o más (la antigua Checoslovaquia, la ex Yugoslavia o la antigua Unión Soviética); países independientes que se unen (la actual Alemania), e incluso países nuevos que aparecen como tales en el mapa tras lograr su independencia (hay bastantes ejemplos en Africa y en el Caribe) o, simplemente, países con los que antes no existía comercio y, a partir de un año particular, existe ya algún tráfico comercial. En lo que se refiere a este último aspecto, debemos tener presente que España comerciaba con 138 países distintos en 1964, número que alcanza ya los 225 a partir de 1997, tal y como tendremos ocasión de ver más adelante. Ante un panorama de este tipo, y teniendo en cuenta las dificultades de una siempre compleja homogeneización de códigos, hemos optado por mantener la base de datos tal cual está. Es decir, Checoslovaquia aparece como un país mientras está como tal en la base de datos y, como República Checa y/o Eslovaquia, cuando aparece así en la base. El caso contrario es el de Alemania. El comercio con la antigua R.D.A. desaparece, y se integra con el de la antigua R.F.A., en el comercio de la nueva Alemania. Estos tres países, mientras existen, se han conservado tal cual en la base de datos. En síntesis, nuestro trabajo en lo que se refiere al destino de las exportaciones y/o al origen de las importaciones por países, se ha limitado a mantener los códigos de las bases de datos tal y como estaban en las cintas magnéticas originales de la D.G.A. y, a mayores, crear una segunda columna en la cual se depuran los datos de 13

16 la columna anterior 16 y añadir una columna adicional (la tercera) que nos indica si el país pertenece (15) o no pertenece (48) a la Unión Europea. En consecuencia, consideramos la U.E. a seis hasta 1972, a nueve desde 1973 a 1980, a 10 desde 1981 a 1985, a doce desde 1986 a 1994, y a quince desde 1995 a Es de hacer notar que los códigos identificativos de los países de origen / destino (País O/D) del comercio español han sufrido modificaciones importantes a lo largo del periodo en análisis. En general, una primera etapa acaba en 1980 y una segunda empieza en 1981, etapas en las cuales los códigos son completamente diferentes, tal y como se puede observar en el anexo adjunto. De todas formas existen cambios más parciales y que afectan a la homogeneización de los códigos, sobre todo desde 1981 en adelante. Algunos de estos códigos cambian a lo largo del período. Un ejemplo es Portugal: hasta 1980 ese país tenía el código 151, que pasa a ser el 040 en 1981 para acabar siendo el 010 desde 1986 a la actualidad. Otro ejemplo es el de Bélgica y Luxemburgo: estos dos países aparecen consolidados con el código 002 desde 1981 a A partir de las bases de datos de 1999 y la adaptación del Código ISO (sustitución de tres números por dos letras), estos países pasan a tener el cógigo BE y LU (los anteriores y no utilizados 017 y 018 respectivamente). Otro ejemplo es Alemania. La antigua R.F.A. (código 004) absorbe a la antigua R.D.A. (código 058) en la actual Alemania (código 004), que pasa a tener el código I.S.O. DE. Un último ejemplo. Zaire tenía el código 206 desde 1961 a 1980, pasa a tener el código 322 hasta 1999 y el código I.S.O. ZR aunque el país ha cambiado su denominación por la de República Democrática del Congo a lo largo de este periodo. Todos estos cambios se incluyen en el anexo correspondiente. Queremos significar el hecho de que en los Países de la Unión Europea hemos incluido también algunos territorios que, a pesar de un volumen de comercio muy reducido, pueden tener su importancia en algún ejercicio en particular. Nos estamos refiriendo al código país 951 (Avituallamiento a buques y aeronaves de Estados Miembros); el código pais 959 (Mercancías con origen o destino indeterminado en el marco de intercambios intracomunitarios, incluidos avituallamientos); los cógigos 978 o 975 (países y territorios no precisados por razones comerciales o militares en el marco de los intercambios comunitarios); o 922 (pesca de altura con origen en otro estado miembro). En definitiva, GASPAR nos ofrece, desde 1964 a la actualidad, el país de origen de las importaciones y el país de destino de las exportaciones españolas tal y como figura en las cintas originales de la D.G.A. (PaisDGA), en una segunda columna se depuran los datos anteriores (PaisGeo) y en una tercera se asignan los países miembros a la Unión Europea (PaisZona). Por último recordar que los diferentes países se identifican a través un código de tres dígitos numéricos. 16 Los códigos identificativos de los países constan de tres dígitos numéricos. Como es ya habitual en este tipo de trabajos, hemos realizado una tarea de depuración que consiste en sustituir por el código 999 aquellos códigos que contenían caracteres no numéricos. Estos últimos (los que incluyen espacios en blanco y/o letras) son un caso muy poco frecuente y tienen asignados volúmenes comerciales insignificantes. 14

17 La equivalencia de estos códigos, y sus modificaciones a lo largo del tiempo, figuran en el Anexo correspondiente. II. La provincialización de la Balanza Comercial de España. Aunque hay algunos intentos de provincializar el comercio exterior de España para la década de los años setenta muy dignos de tener en cuenta, la posibilidad de territorializar la balanza comercial española desde las Estadística del Comercio Exterior de España, tanto en soporte papel como desde las bases de datos en cintas magnéticas de la D.G.A., arranca realmente desde 1980 en adelante 17. Veamos. Las cintas magnéticas proporcionadas por la D.G.A. se componen, para cada una de los varios millones de filas de los que consta cada año, de una serie de campos que recogen información sobre si el tráfico es importación o exportación, la aduana de tránsito, la posición arancelaria, el país de origen o de destino, etc. Todos estos campos existen desde 1964 a la actualidad en soporte magnético. A partir de 1980 existe, además de los campos anteriores, el campo provincia mercancía que, como su propio nombre indica, recoge la provincia de origen de las exportaciones o de destino de las importaciones. Existen tres campos que podrían permitir (genéricamente) la territorialización de la balanza comercial española: el campo aduana, el campo domicilio fiscal y el campo provincia mercancía. El campo aduana recoge la aduana de entrada o salida de las mercancías y, desde 1995 en adelante, recoge el lugar de presentación de la documentación administrativa relativa a los tráficos comerciales. La utilización del campo aduana para provincializar el comercio exterior de España plantea el problema de los tránsitos, problema que se nos presenta como irresoluble 18. El campo domicilio fiscal 17 Existen algunos datos aislados sobre importaciones y/o exportaciones, incluso distribuidos en capítulos, para algunos años particulares y para el conjunto de las provincias españolas. Este es el caso, por ejemplo, de las estimaciones que hace el Servicio de Estudios de Banesto sobre la desgravación fiscal a la exportación y en base a la recaudación del antiguo Impuesto de Compensación de Gravámenes Interiores (ICGI). Así territorializa la exportación española para los años 1972 y Véase Banesto; Anuario del Mercado Español, Madrid, Aquí figuran los datos de exportaciones de mercancías por capítulos y provincias para y, en la edición del año siguiente (1975), figuran los datos para La información sobre los tráficos comerciales exteriores se intentó averiguar también, para algunas provincias piloto, por el método de encuestas. Véase Arranz Esteban, A.; <La regionalización del comercio exterior de España> en Papeles de Economía Española. No.11. Madrid, Págs. 298 y ss. Otro intento, esta vez para Cataluña, es el que se lleva a cabo en Parellada, M.; <Metodología y análisis de las relaciones comerciales de Cataluña con el extranjero ( )> en Información Comercial Española. Madrid, Octubre Págs. 85 y ss. 18 Al menos desde 1927 en adelante, la Dirección General de Aduanas edita (en soporte papel) el comercio exterior de España desglosado por aduanas. Esta fuente no es útil para regionalizar el comercio exterior español principalmente por el problema de los tránsitos. En efecto, las aduanas con Francia -las provincias de Gerona y Guipúzcoa principalmente- concentran segmentos fundamentales del comercio exterior español, comercio que utiliza esas dos provincias solamente como lugar de paso y de control estadístico, y que, por lo tanto, sería un error imputarlo en el 15

18 recoge la provincia del domicilio fiscal de la persona (física o jurídica) que realiza el comercio. El problema reside en que, según este campo, sobre todo Madrid, pero también otras provincias, concentran un volumen de comercio exterior, y una composición interna de ese comercio, que se asemeja sencillamente increíble 19. El campo provincia mercancía 20. recoge la provincia de origen de las exportaciones o de destino de las importaciones, pero figura en las bases de datos de la D.G.A. solamente desde 1980 a la actualidad. Este campo puede ser utilizado para regionalizar el comercio exterior español con un resultado muy razonable 21. El problema es que la propia D.G.A. nos advierte que es un campo con carácter indicativo y que, sólo desde mediados de los ochenta en adelante, se puede considerar de una fiabilidad robusta 22. De esta forma -utilizando el País Vasco o en Cataluña cuando, de hecho, es una exportación o importación, por ejemplo, de Badajoz. Véase, desde 1960 en adelante, D.G.A.; Estadísticas del Comercio exterior de España. Comercio por aduanas. Ed. Dirección General de Aduanas. Madrid, anual. Es de hacer notar que en las cintas magnéticas de la D.G.A. correspondientes al período 1985 a 1987 (tres años) el campo aduana está empaquetado y en hexadecimal. Este hecho se explica debido a que los códigos de las aduanas cambian en estos años, pasando a tener cuatro dígitos. 19 Al igual que ocurría con las aduanas, el campo domicilio fiscal no es utilizable para regionalizar la balanza comercial española. Si así lo hiciéramos, nos encontraríamos como la exportación de buques está concentrada en Madrid (al tener en esa provincia el domicilio fiscal los grandes astilleros) o como la práctica totalidad de las importaciones de crudo de petróleo se concentran en Madrid (sede social de las principales empresas de refino españolas). 20 Téngase en cuenta que en la clasificación de provincias que figura en la información en cintas mágneticas, la "provincia" 51 es Cartagena, la 52 es Gijón, la 53 es Jerez de la Frontera, la 54 es Vigo y la 55 y 56 son Ceuta y Melilla. En este sentido, todos los códigos provincia mercancía que no están comprendidos entre el 01 y el 56 se consideran código 00, esto es, código a depurar o provincia indeterminada. 21 Los intentos de construir balanzas comerciales regionales en base a la información de la D.G.A. y, en concreto, en base a los campos citados que figuran el banco de datos, son numerosos para la primera mitad de la década de los ochenta. Para Castilla León, véase, por ejemplo, González García, J.; <La regionalización del comercio exterior: experiencias y posibilidades> en Información Comercial Española. Octubre, Págs. 97 y ss. También véase González García, J.; <Comercio intraindustrial e integración económica. El caso de Castilla León> en Información Comercial Española. No Mayo, Págs. 123 y ss. También, Azpiazu, P. y otros; <Panorámica reciente del comercio exterior de la Comunidad Autónoma del País Vasco> en Información Comercial Española. No.598. Junio Págs. 73 y ss. Para un planteamiento más reciente véase Sequeiros Tizón, J. (Dir); El comercio exterior de Galicia, 1980 a Ed. Fundación Barrié. A Coruña, Principalmente los Caps.I y II. Una provincialización del comercio exterior de España para el período 1985 a 1989 llevada a cabo con un método distinto del nuestro (se desprecian Ceuta, Melilla, y provincias desconocidas o indeterminadas) se encuentra en Morán Serrano, M. y Méndez Marín, M.; <La distribución provincial del comercio exterior en los últimos años de integración comunitaria> en Boletín Económico de Información Comercial Española. No Febrero, A partir de mediados de los ochenta los datos de la D.G.A. tampoco están exentos de matices. Nosotros estamos convencidos que la información disponible está afectada de lo que podríamos llamar "efecto sede" o, lo que es lo mismo, el sobrepeso de Madrid y algunas otras capitales en lo que se refiere al comercio de las empresas de distribución de bienes finales (tanto de consumo como de inversión) y tanto en importaciones como en exportaciones. Además de esto, habría que tener en cuenta las dificultades que se presentan a la hora de cumplimentar los documentos aduaneros o 16

19 campo provincia mercancía- se puede obtener un resultado fiable del comercio exterior de cualquier provincia y, por lo tanto, de cualquier región. Sin embargo, existen algunas limitaciones. Para 1980, 1981 y 1982 en el campo provincia mercancía, y para las exportaciones, figura siempre el código 00, esto es, provincia indeterminada. Dicho de otra forma, para esos tres años, ajustamos razonablemente las importaciones, pero las exportaciones no se provincializan. El criterio de los Institutos Regionales de Estadística. Al análisis del campo provincia mercancía hemos aplicado el criterio de algunos Institutos Regionales de Estadística (criterio I.R.E.) según el cual el comercio con código provincia mercancía indeterminado (léase 00) y domicilio fiscal en una provincia se considera comercio de esa provincia. El Cuadro No.2 recoge la importancia de la provincia 00 en las bases originales de la D.G.A. desde 1980 a Como ahí podemos comprobar, las importaciones presentan un residuo no provincializado muy reducido (no alcanzan nunca el 1,5 por ciento de las importaciones totales), mientras que las exportaciones de provincias indeterminadas pasan de ser casi un 10 por ciento de las exportaciones totales en 1983 y 1984, para disminuir posteriormente hasta alcanzar porcentajes también reducidos en la década de los noventa. El mismo Cuadro anterior nos está indicando como queda este residuo tras la aplicación del criterio de los Institutos Regiones de Estadística: los tráficos comerciales de la provincia indeterminada (código 00) quedan reducidos a una mínima expresión, tras asignarle la provincia del domicilio fiscal a los tráficos con provincia origen destino indeterminada. La aplicación del criterio I.R.E. a los tráficos de la provincia 00 es muy discutible. Es discutible porque 1) si el peso de la provincia 00 es muy pequeño (y constante en el tiempo, como ocurre con las importaciones, o con las exportaciones desde los noventa), para qué se va a provincializar un residuo de por sí ya reducido? y 2) si el residuo es considerable (como las exportaciones de 1983 y 1984) el hecho de provincializarlo utilizando el domicilio fiscal es enormemente discutible por errático. En efecto, el cuadro anterior los impresos estadísticos para el comercio intra comunitario. El importador puede desconocer la provincia de destino de sus importaciones y el exportador puede conocer el origen provincial de sus exportaciones pero desconocer el comercio inter provincial que origina esas exportaciones. Además de ello, y como ya planteamos antes, debemos tener en cuenta que, en lo que se refiere a la Unión Europea, el comercio a partir de podría estar infravalorado, es decir, al existir solamente el requisito de la información previa a efectos estadísticos para aquellos tráficos que superan un umbral mínimo predeterminado, podría haber un segmento de este comercio que se escape al control de las autoridades estadísticas, tanto españolas como de la U.E. 17

20 nos pone de manifiesto como el criterio I.R.E. asigna más de la mitad del residuo de las exportaciones de 1983 y 1984 a la provincia de Madrid (y un mínimo a la de Barcelona), de tal modo que la serie D.G.A. mantiene una estabilidad temporal que no se encuentra en la Cuadro No.2 COMPARACION DEL CRITERIO D.G.A. Y EL CRITERIO DE LOS I.R.E. Peso de la provincia indeterminada (00) Participación en las exportaciones totales Criterio D.G.A. Criterio I.R.E. Provincia de Madrid Provincia de Barcelona Import Export Import Export DGA IRE DGA IRE ,23 0, ,47 0, ,46 0, ,47 9,68 0,04 0,70 8,33 13,70 15,40 15, ,60 8,40 0,08 0,16 7,67 12,02 14,86 14, ,41 3,29 0,04 0,15 7,70 7,84 15,18 15, ,47 1,26 0,02 0,44 7,65 7,89 16,71 16, ,77 3,73 0,04 0,08 7,93 9,41 17,63 18, ,18 3,26 0,02 0,05 7,99 9,98 18,55 18, ,11 3,12 0,01 0,03 8,20 9,79 18,12 18, ,14 3,69 0,00 0,08 8,44 10,09 18,65 19, ,54 2,93 0,01 0,06 8,37 9,72 19,18 19, ,94 3,14 0,00 0,06 9,60 11,27 20,34 20, ,22 1,79 0,03 0,06 10,22 11,00 19,84 20, ,48 1,95 0,02 0,04 10,52 11,37 19,95 20, ,38 1,93 0,05 0,21 9,99 10,62 20,95 21, ,39 1,72 0,00 0,02 10,10 10,73 22,14 22, ,23 1,80 0,31 0,41 10,27 10,27 21,90 21, ,06 1,53 0,43 0,41 10,45 10,45 22,61 22, ,77 1,41 0,37 0,54 11,08 11,08 22,18 22, ,34 1,51 0,19 0,62 11,18 11,18 22,57 22, ,26 1,69 0,23 0,58 10,88 10,88 23,58 23,58 Fuente: Elaboración propia sobre cintas mágneticas proporcionadas por la D.G.A. 18