Productividad, Competencia e Innovación en la Banca Privada Española ( )

Transcripción

1 Producividad, Compeencia e Innovación en la Banca Privada Española ( ) Xavier Cuadras-Moraó, Universia Pompeu Fabra Angel S. Fernández Casro, Universidade de A Coruña Joan R. Rosés, Universidad Carlos III de Madrid* Resumen Ese esudio invesiga las diferencias en producividad en una muesra de bancos en los úlimos años del período liberal de la banca española ( ). Esos años se caracerizaron por una serie de cambios cualiaivos y cuaniaivos que afecaron a odo el sisema financiero. Empleando el méodo DEA para la medición de la producividad y el índice Malmquis para analizar la evolución de ésa, hemos descubiero que un incremeno generalizado de la eficiencia de los bancos menos producivos acompañó a esa serie de cambios en el secor. Además, ambién hemos observado que la crisis de la banca caalana puede perfecamene aribuirse a la baja producividad de sus enidades. A la luz de odo lo expueso, se puede concluir que el incremeno de la compeencia que se produjo durane el período fue beneficioso para el sisema ya que esimuló la supervivencia de las enidades más eficienes. Absrac This sudy invesigaes he produciviy differences and is sources across a se of banks during he las years of he liberal era of he Spanish banking sysem ( ). These years were characerised by major qualiaive and quaniaive changes in he banking indusry including a sharp increase in he size of he sysem, in he number of firms, and in is regional disribuion. Employing DEA produciviy analysis and he Malmquis index, we discover ha hese changes were accompanied by a generalised increase in he efficiency of leas producive banks. Also, we observe ha he crisis of some regional banking groups, like he Caalan, can be linked wih is low produciviy levels. In consequence, in he ligh of our produciviy evidence, we conclude ha he increase in compeiion was beneficial for he sysem because helped o he success of he mos efficien banks. *Dirección para correspondencia: Joan R. Rosés, Dpo. de Hisoria Económica e Insiuciones, Universidad Carlos III de Madrid, C/ Madrid 126, Geafe (Madrid). 1

2 1. Inroducción El sisema financiero desempeña un papel deerminane en el desarrollo económico de las naciones. Los bancos y oras enidades financieras ienen un lugar esencial ano en la provisión de liquidez como en la asignación de recursos y, por esa razón, la regulación bancaria iene un papel cenral en la políica económica de numerosos países. España no consiuye una excepción a esa regla. De hecho, desde la promulgación de la Ley de Ordenación bancaria en 1921 hasa iempos muy recienes, el sisema bancario español se caracerizó por un fuere inervencionismo esaal, la exisencia de numerosas barreras de enrada y odo ipo de rabas legales a la compeencia enre enidades [Pons (1999)]. Sin embargo, no siempre fue así, ya que desde 1856 hasa 1920, el marco legal que afecaba a la banca podría definirse como de liberalismo financiero moderado [Marín Aceña (1985), p. 127]. El objeivo de ese esudio es analizar los cambios en la producividad de la banca privada española al final de esa época de liberalismo. En concreo, durane los cruciales años para la consrucción del sisema bancario español que discurren enre la derroa en la guerra de Cuba y la primera guerra mundial. Exisen numerosos rabajos que se ocupan del desarrollo de la banca privada durane ese periodo y los aneriores. 1 Sin embargo, a pesar de la amplia bibliografía exisene, falan, a nuesro enender, esudios que aborden profundamene un ema muy imporane: los efecos que uvo el marco liberal sobre la evolución de la producividad de los bancos y si ésa uvo relación con los cambios en la esrucura y amaño del sisema bancario. Esa es la cuesión principal que vamos a considerar a lo largo de ese rabajo. En oras palabras, el objeivo principal de ese arículo es analizar si el incremeno de enidades, consecuencia del marco legal liberal y de la favorable siuación económica, que uvo lugar a principios del siglo XX significó ambién un crecimieno de la eficiencia del secor. 2 No es ése, sin embargo, el único asuno que se va a raar a lo largo de las siguienes páginas. También vamos a analizar las causas que generaron esos cambios en la producividad de la banca privada y, en concreo, vamos a raar de discernir si los incremenos en producividad fueron consecuencia de un proceso de innovación ecnológica o de un aumeno generalizado de eficiencia. También raaremos de averiguar si exisió una relación causa efeco enre los incremenos de producividad y el relaivo éxio de algunos bancos. En concreo, nos 2

3 preocupa especialmene la relación que pudiese exisir enre el éxio de la banca vasconavarra y el fracaso de la banca caalana y la evolución de la producividad de sus bancos. 2. Una época de grandes cambios en el sisema bancario español La masiva repariación de capiales inveridos en las colonias y la reforma de la hacienda pública del minisro Fernández Villaverde, que equilibró las cuenas del esado español e inauguró una nueva línea de la políica económica más orodoxa y esable, insuflaron nuevos bríos a la banca privada española a principios del siglo XX. 3 En 1892 había 35 bancos privados en España con un capial desembolsado de 210 millones de peseas mienras que en 1921 la cifra de bancos había alcanzado los 150 y el capial desembolsado llegaba a los 850 millones de peseas. 4 En el mismo periodo, los depósios bancarios crecieron desde 179 millones de peseas en 1880 a 515 millones de peseas en Ese crecimieno de los depósios hizo que por primera vez el sisema bancario español dispusiese de más recursos ajenos que propios. 6 Paralelamene a ese proceso de crecimieno, se produjo un proceso generalizado de reordenación y modernización del sisema bancario español, que en 1900 aun era basane primiivo. En ese año, el imperio del Banco de España sobre el mercado bancario era abrumador, ya esa enidad por sí sola que absorbía el 68 por cieno de los acivos oales del sisema. Asimismo, el sisema financiero se enconraba poco diversificado debido a la preponderancia absolua de la banca privada sobre oros ipos de enidades. Sin embargo, en reina años, el dominio del banco emisor se había resquebrajado y las cajas de ahorro y las sociedades oficiales de crédio habían sido capaces de conseguir una pare imporane del mercado en derimeno de los bancos privados. 7 Además, las mayores enidades daban los primeros pasos en pos de la consrucción de sus redes nacionales de sucursales, al como las conocemos hoy en día, siendo los pioneros en ese proceso el Banco Español de Crédio y el Banco Hispano Americano. 8 Hasa 1900, la conexión enre las diversas plazas se hacía por medio de corresponsalías y sólo el Banco de España, que disponía de la única red nacional de sucursales, y el Banco Hipoecario exendían sus negocios a odo el erriorio nacional. 9 El reparo del mercado bancario enre las diferenes plazas financieras y la organización de los negocios de los bancos ambién se aleró de forma susancial durane el período inmediaamene anerior a la Primera Guerra Mundial. Desde mediados del siglo XIX, Madrid y Barcelona comparían 3

4 la primacía denro del mercado financiero español. Después de la crisis de las sociedades de crédio enre 1864 y 1868 y de la concesión del monopolio de emisión al banco de España en 1874, los bancos comerciales, que manenían fueres lazos con las acividades de las bolsas locales, predominaron en ambas plazas. Sin embargo, a finales del siglo XIX, el fulgurane ascenso de los bancos del Nore modificó dramáicamene la anerior siuación. En primer lugar, porque los bancos vascos aumenaron su cuoa de mercado enre 1874 y 1913, ya que pasaron de gesionar el 6,62 por cieno de los acivos del secor al 43,65 por cieno enre esos dos años. Por ano, Bilbao pasó a ser el núcleo principal de la banca privada española. En segundo lugar, porque los bancos con sede en Bilbao acuaban en el mercado de manera diferene a como lo habían hecho, hasa enonces, los bancos caalanes y madrileños. En concreo, enían una noable preferencia por las acividades de la banca mixa ; es decir, combinaban las acividades comerciales y de inermediación con la paricipación direca en sociedades indusriales en las que sus direcivos ocupaban asienos en los consejos de adminisración. Ese proceder de los bancos vascos fue imiado por el reso de grandes enidades de al modo que, después de la Primera Guerra Mundial, prácicamene odos los grandes bancos raaban, en mayor o menor medida, de paricipar direcamene en la gesión de sus negocios indusriales. 10 Sin embargo, el hecho paricular de ese periodo que más ha llamado la aención de los hisoriadores económicos es la crisis de la banca caalana. La crisis de los bancos caalanes es especacular: mienras que en 1889 poseían nada menos que el 55,8 de los acivos de la banca privada, en 1913 su paricipación había descendido a sólo el 13,6 por cieno. El proceso de crisis de la banca caalana no se deuvo aquí, sino que coninuó hasa que el Banco de Barcelona quebró en 1920 y los negocios de la plaza fueron conrolados mayoriariamene por enidades con sede en Bilbao o Madrid. 11 Se han esgrimido varias hipóesis para explicar ese fracaso de la banca caalana. Por un lado, se encuenran aquellos que, como Graell, Tedde de Lorca, o Sudrià, achacan a la escasa demanda de servicios financieros el fracaso de la banca caalana. Graell y Sudrià insisen en la fala de maeria bancable en Caaluña; es decir, la fala de leras de cambio para desconar en las enidades caalanas. Según esos dos auores, debido a la debilidad y las enormes flucuaciones del mercado inerior, los comercianes españoles eran incapaces de acepar órdenes de pago por adelanado y, por ello, los indusriales caalanes enconraban enormes dificulades para desconar algún papel en los bancos locales. 12 En cambio, Tedde de Lorca insise que los principales deonanes de la crisis fueron la 4

5 propia esrucura indusrial de Caaluña, con empresas muy pequeñas y poco proclives a recurrir a la financiación bancaria, y la crisis colonial que hizo perder mercados a las empresas caalanas. 13 Por oro lado, Muñoz ha insisido en que fue la propia ineficacia de sus gesores la que llevó a su declive a la banca caalana. 14 Hay que resalar que odos los cambios que hemos mencionado con anerioridad se produjeron en un ambiene liberal con una regulación bancarias mínima y sin la inervención direca del esado. De hecho, la legislación bancaria que regía a principios de siglo XX era basane liberal en cuano a la creación de nuevas enidades, el permiso a enidades exranjeras para esablecerse en suelo español y la posibilidad de esablecer sucursales. 15 Sin embargo, concedía un enorme poder al Banco de España, que no sólo monopolizaba el derecho de emisión sino que ambién podía paricipar en odo ipo de negocios bancarios. 16 En oras palabras, exisía compeencia pero no en érminos de igualdad para odos los bancos. Ese enorno jurídico no fue modificado hasa la promulgación de la Ley de Ordenación bancaria de Francesc Cambó en Esa Ley, que surgió en respuesa a la crisis de las principales enidades bancarias caalanas en 1920, raaba de regular el sisema financiero esableciendo, enre oras medidas, unas condiciones mínimas para la consiución de nuevas enidades financieras. También concedía el carácer de organismo inspecor al Consejo Superior Bancario, formado por los mismos bancos privados, e imponía unos ipos de inerés mínimos. De hecho, esa nueva legislación rompía de manera definiiva con un período de relaiva liberalidad y hacía una clara apuesa por el inervencionismo esaal. 17 Además, al esablecer unos ipos de inerés mínimos y oras condiciones similares sobre la capación de recursos ajenos, resringió la compeencia enre las diferenes enidades. 3. Meodología y daos En la primera pare de esa sección vamos a presenar una explicación muy sucina, cenrada en su inerpreación económica, de los méodos que uilizaremos para medir la evolución de la eficiencia a lo largo del arículo. 18 El análisis de la producividad relaiva de los disinos bancos se ha realizado con índices de producividad calculados mediane el méodo conocido como DEA (Daa Envelopmen Analysis), mienras que su evolución se ha analizado recurriendo al índice de producividad de Malmquis. 19 5

6 El concepo de producividad o eficiencia hace referencia a la economía de medios para obener unos deerminados objeivos, eso es, a la relación enre produco e insumo. Por lo ano, la medida más naural de producividad es el cociene enre producción y recursos. Un problema clásico al elaborar ese cociene es cómo deben ser agregados los diversos producos e insumos. La solución adopada en el méodo DEA consise en medir la eficiencia de forma radial. 20 Es decir, se considera que la producividad se incremena en un ciero volumen sólo si se incremenan odos los producos simuláneamene en ese mismo volumen sin consumir más insumos, o, alernaivamene, que se produce un ahorro de una pare de los recursos sólo si odos los insumos se reducen en esa misma medida sin reducir la producción. 21 En la prácica, para comprobar si se han producido mejoras en producividad se compara cada unidad produciva con la fronera de producción formada por las unidades para las que se observa mejor comporamieno. La Figura 1 ilusra la aplicación del modelo CCR (la versión del méodo DEA que vamos a emplear en ese esudio) 22 al caso de un único insumo (X) y un único produco (Y), de modo que cada puno represena los valores correspondienes a una sola unidad produciva. Figura 1. El méodo DEA Y y 3 y 2 y 1 x 1 e x 2 x 3 e x 1 x 3 X En la Figura anerior, la unidad 2 (definida por la inersección de Y 2 y X 2 ) es la única eficiene, ya que presena la razón menor enre insumos y producos, definiendo, por ano, la fronera eficiene con la que se van a comparar las oras dos unidades. Así, si la producividad de las oras dos unidades fuese igual a la de la unidad 2, manendrían sus niveles de produco, y 1 e y 3, con unos 6

7 insumos respecivos de x e 1 y x e 3, menores que los observados (x 1 y x 3 ), por lo que los índices de eficiencia serán x e 1 /x 1 y x e 3 / x 3. El índice de eficiencia oma un valor uniario para las unidades eficienes (en el ejemplo, la unidad 2) y iende a cero a medida que ésas son menos eficienes. La información proporcionada por el méodo DEA es de carácer esáico y, obviamene, en los esudios hisóricos resula fundamenal ofrecer un análisis emporal. El índice de producividad de Malmquis, 23 que por oro lado ambién se basa en el méodo anerior, proporciona esa perspeciva dinámica. Para exponer sus fundamenos omaremos como puno de parida los resulados de aplicar el méodo DEA, por separado, a los daos de dos períodos, y +1. En la Figura 2 se ilusra esa siuación, coninuando con el ejemplo de un insumo y un produco, represenándose las froneras eficienes de los dos períodos y las observaciones de una misma unidad en cada uno de ellos. Figura 2. El índice de producividad de Malmquis Y +1 y +1 y x +1 x x +1 x +1 x +1 x +1 X periodo ( El Indice de Malmquis enre los períodos y +1, omando como referencia la ecnología del M 1, + ), es el cociene enre el índice de eficiencia de la observación correspondiene al úlimo período, evaluada respeco a la fronera eficiene del primer período ( E 1 + ), y el índice de eficiencia de la observación del primer período, comparada con la fronera de ese mismo momeno ( E ). Un índice superior a la unidad significa que la producividad ha mejorado del período al +1 mienras que valores menores a uno implican un reroceso en ese aspeco. En concreo, en el ejemplo 7

8 anerior exise una mejora de la producividad, pueso que la observación en +1 iene una mayor producividad que la de la fronera eficiene inicial. Es posible descomponer la variación de la producividad en dos érminos, de modo que el índice anerior sea igual al produco de ambos. 24 El primero recoge la variación debida al desplazamieno de la fronera eficiene, por lo que expresa el grado en que el secor (en la medida en que ése bien represenado por las unidades analizadas) ha experimenado un cambio écnico. De manera similar a los casos descrios con anerioridad, valores superiores a la unidad indicarían progreso ecnológico y valores inferiores reroceso ecnológico. El segundo (caching-up) expresa la variación achacable a la mejoría del rendimieno relaivo de la unidad respeco a las mejores de cada período, eso es, su acercamieno a la fronera eficiene, en caso de que el valor sea mayor que uno, o su alejamieno de la misma, en caso de que sea inferior a la unidad. Esos concepos pueden ilusrarse haciendo uso de la Figura 2. En ella se observa que la mejora en la producividad de la unidad analizada se debe a un imporane progreso écnico en el secor, como muesra el imporane incremeno en la pendiene de la fronera, y a pesar de que se produce un alejamieno respeco a la fronera eficiene, eso es, de que la unidad analizada empeora su comporamieno respeco a las mejores unidades de cada período. Los daos que hemos uilizados en ese esudio proceden de las memorias semesrales o anuales de los bancos privados, que en su mayoría se conservan en el archivo del Banco de España en Madrid. Las series de producos (présamos, carera, cuenas corrienes, depósios y cuenas de ahorro) fueron recogidas y esandarizados por Pedro Tedde de Lorca y Gabriel Torella y hemos decidido omarlas direcamene de su obra sin ninguna modificación. 25 En cambio, la serie de gasos generales, que han sido uilizados como insumos, ha sido obenida direcamene de las fuenes. La ausencia de daos de la parida de gasos generales en varios bancos ha limiado el amaño de la muesra a 16 bancos, enre los que se encuenran odas las enidades más imporanes. Concreamene, las enidades analizadas son: Tabla 1. La muesra de bancos y sus abreviauras Caalanes Madrileños Vasconavarros Oros B. de Casilla (BCAST) B. de Bilbao (BBILBAO) B. Español de Crédio B. del Comercio (BCOM) (BEC) B. Guipuzcoano (BGUI) B. Hispanoamericano B. de Vioria (BVIT) (BHA) B. de Vizcaya (BVIZ) Crédio Navarro (CNAV) B. de Barcelona (BBCN) B. de Sabadell (BSB) B. de Valls (BVALLS) Crédio y Docks (CDOC) B. Asuriano (BASTIC) B. de Sanander (BSAN) Crédio Balear (CBAL) 8

9 Fuenes: Véase exo. Por ano, la muesra comprende cuaro bancos caalanes, res bancos madrileños, seis bancos vasconavarros, y res radicados en oras regiones, respecivamene, Asurias, Canabria y las Islas Baleares. Seis de esos bancos fueron creados con anerioridad a 1874, cuaro enre dicha fecha y 1899 y, por úlimo, oros seis a parir de ese año. Un conocido problema en el análisis de empresas en el secor servicios, en general, y de los bancos, en paricular, es la definición de producos e insumos. Por ejemplo, deben considerarse los depósios y oros componenes del pasivo insumos o son, por el conrario, pare de los servicios que el banco presa a sus clienes? Desde el momeno que la gesión de los depósios y las cuenas corrienes genera un servicio a los clienes del banco, ya que los depósios se ienen que cusodiar y, lo que es más significaivo, se deben adminisrar, habrían de considerarse producos. 26 Así, ano paridas del acivo (présamos y carera) como del pasivo (cuenas corrienes, depósios y cuenas de ahorro) conforman el produco de los bancos. Debemos noar que la caegoría "présamos" agrupa diversas modalidades (hipoecarios, con garanía, en cuena corriene, ec.) y que la caegoría "carera" esá compuesa por el descueno de efecos (leras de cambio y pagarés) y valores (acciones, obligaciones y bonos). Además, al como es la norma en ese ipo de esudios, los daos correspondienes a los producos han sido deflacados por un índice del cose de la vida. 27 Como ya hemos mencionado con anerioridad, nuesra parida de insumos esá formada por la parida conocida como gasos generales, que incluye gasos de personal y de gesión. Esa parida ha sido deflacada por un índice de salarios reales. 28 Poseemos un desglose de los gasos de personal para un pequeño numero de bancos, lo que nos permiió comprobar la correlación enre la parida de gasos de personal y de gesión. Así, en odos los casos para los que enemos información, los gasos de personal suponen enre un 50 por cieno y un 70 por cieno de los gasos generales oales, sin que exisan desviaciones noables enre los diversos bancos. Por ano, no resula descabellado suponer que la imposibilidad de desglosar dicha parida genera una desviación de nuesros resulados basane pequeña. En un principio, al conrario de lo que es norma en ese ipo de esudios, 29 preendíamos incluir como insumo el acivo real (principalmene edificios y mobiliario de los mismos), pero las 9

10 series elaboradas al respeco presenaban imporanes anomalías que desaconsejaron su poserior uso. En primer lugar, carecíamos de series compleas para res de los dieciséis bancos analizados. De los rece resanes, en cuaro el acivo real decrecía fueremene a lo largo de los años analizados, sin que esa caída se correspondiera con una disminución de la acividad, según reflejan la evolución de los gasos generales y del produco, y en ocho el acivo real se enconraba negaivamene correlacionado con dos o más de sus producos. La abla 2 proporciona un resumen de los esadísicos básicos de las disinas variables en los diferenes períodos observados. Tabla 2. Esadísicos básicos de las variables uilizadas en el esudio Año Gasos Generales Présamos Carera Cuenas Corrienes Depósios Cuenas de Ahorro Desv. Desv. Desv. Desv. Desv. Desv. Obs Media Típica Media Típica Media Típica Media Típica Media Típica Media Típica ,1 0, ,6 1, ,7 1, ,7 1, ,8 1, ,8 1, , ,4 3, ,7 3, ,5 3, ,1 4, , ,3 5, ,4 6, ,3 5, Fuenes: Véase exo. 4. La evolución de la eficiencia de los bancos privados españoles A renglón seguido vamos a esudiar la evolución de la producividad de las enidades de la banca privada que componen nuesra muesra uilizando, en primer lugar, un índice esáico de eficiencia y, en segundo lugar, el índice de Malmquis. Así, la abla 3 presena un índice de eficiencia relaivo para los disinos bancos españoles en el año inicial y final de la muesra. El índice puede omar valores enre 0 y 1 (ese úlimo en el caso de las unidades eficienes). Como ya hemos viso, ese 10

11 índice mide la producividad relaiva de un banco respeco de los bancos eficienes que ienen una menor relación de insumos por unidad de produco. Tabla 3. Índices de eficiencia de la banca privada española Eficiencia Bancos Inicial Final BASTIC 0,549 0,661 BBCN 1,000 1,000 BBILBAO 0,923 0,989 BCAST 0,194 0,322 BCOM 1,000 1,000 BEC 0,864 1,000 BGUI 0,315 0,455 BHA 0,476 0,186 BSAN 0,724 1,000 BSB 0,080 0,444 BVALLS 0,274 0,689 BVIT 0,444 1,000 BVIZ 0,387 0,938 CBAL 1,000 1,000 CDOC 0,115 0,093 CNAV 1,000 1,000 Media geomérica 0,460 0,620 Noas: En odos los casos el año inicial es 1900 excepo en el caso de BBILBAO, BHA, BSB, BVIZ, CDOC que es 1901, en el caso de BVALLS es 1902, en el caso de BEC es 1903, y en el caso de BCAST que es Para las fuenes véase exo. De la abla 3 debemos desacar sobre odo el incremeno de la eficiencia media, que crece casi un 35 por cieno del año inicial al final. Ese incremeno de eficiencia no es exclusivo de unas pocas enidades, ya que odos los bancos que componen la muesra, excepo el Crédio y Docks de Barcelona y el Banco Hispanoamericano, lo experimenan. Además, mienras que en el año inicial sólo cuaro bancos, de dieciséis, se enconraban en la fronera de eficiencia, es decir, su eficiencia relaiva era de 1, en el año final ese número había crecido hasa siee. Por ano, no es difícil concluir, a parir de los resulados expuesos en la abla 3, que la producividad de la banca progresó de una forma más que noable en los años que van de la pérdida de Cuba a la I Guerra Mundial. Como ya hemos mencionado con anerioridad, los índices esáicos de eficiencia, como los que hemos presenado hasa ahora, no son demasiado eficaces cuando queremos analizar el comporamieno de las disinas empresas a lo largo del iempo. Eso se debe al hecho de que los índices relaivos comparan, para cada año, la producividad de los bancos con una fronera eficiene correspondiene a ese año, pero no nos dicen nada respeco de los cambios que sufre esa fronera eficiene. Lógicamene, esa fronera se desplazará si las condiciones ecnológicas del secor varían 11

12 (progreso o reroceso ecnológico). Podría suceder (y veremos algún caso significaivo en que fue así) que un banco fuera considerado más eficiene en el periodo final de la muesra que en el periodo inicial y, sin embargo, esuviera reduciendo su producividad debido al reroceso ecnológico, con el consiguiene desplazamieno de la fronera eficiene con la que es comparado para el cálculo del índice de eficiencia. El análisis de los índices de Malmquis, que consiuye la pare principal de ese rabajo, nos permiirá resolver ese problema y realizar un análisis dinámico de la eficiencia de la banca española durane el periodo analizado. La abla 4 recoge los valores de dicho índice para los disinos bancos que componen nuesra muesra. Valores por encima de la unidad reflejan una mejora de la producividad durane el periodo, mienras que, por el conrario, valores por debajo de la unidad significan un empeoramieno de la empresa en ese aspeco. De manera inuiiva, las mejoras en la producividad de los bancos pueden deberse a dos causas de disina nauraleza: por un lado, el banco puede esar mejorando su producividad relaiva respeco de la fronera eficiene con la que se compara (efeco caching-up) y por oro, el progreso écnico puede esar desplazando la fronera eficiene que represena la mejor ecnología exisene en cada momeno del iempo (efeco que denominaremos cambio écnico). Podemos calcular los índices de Malmquis de dos formas alernaivas. Primero, es posible comparar de forma direca la siuación del año inicial de la muesra con la siuación del año final (Modelo 1). La segunda posibilidad es comparar la evolución de la producividad para los años adyacenes de la muesra, omando como variable resumen del periodo la media geomérica de los índices para cada año (Modelo 2). Cualiaivamene, los resulados de ambos modelos son parecidos, aunque obviamene las diferencias de orden absoluo son noables. El problema del Modelo 1 es que, para un periodo como el esudiado que es relaivamene largo, los resulados que se obienen son muy sensibles a la paricular elección de los años inicial y final. 30 En ambos casos, procedemos ambién a la descomposición del índice de Malmquis para diferenciar enre los efecos del cambio écnico y el proceso de caching-up. Banco Tabla 4. Índices de producividad de Malmquis, Evolución de la Producividad Del año inicial a 1914 (Mod. 1) Caching -Up Cambio Técnico Índice de Malmquis Periodos Adyacenes: Promedios Anuales (Mod. 2) Caching -Up Cambio Técnico Índice de Malmquis 12

13 BASTIC 1,204 0,944 1,136 1,013 0,983 0,996 BBCN 1,000 0,574 0,574 1,000 0,950 0,950 BBILBAO 1,072 1,122 1,202 1,005 1,011 1,017 BCAST 1,660 0,998 1,656 1,075 0,986 1,066 BCOM 1,000 1,266 1,266 1,000 0,999 0,999 BEC 1,158 0,941 1,090 1,013 0,996 1,009 BGUI 1,443 0,798 1,152 1,027 1,000 1,027 BHA 0,391 0,838 0,328 0,930 0,997 0,927 BSAN 1,381 1,406 1,942 1,023 0,998 1,022 BSB 5,579 0,866 4,831 1,154 0,945 1,101 BVALLS 2,514 0,921 2,315 1,080 0,985 1,064 BVIT 2,252 1,604 3,613 1,064 1,030 1,093 BVIZ 2,426 1,335 3,238 1,071 0,990 1,060 CBAL 1,000 1,650 1,650 1,000 1,030 1,020 CDOC 0,810 0,941 0,762 0,984 0,983 0,967 CNAV 1,000 1,296 1,296 1,000 0,995 0,995 Media Geomérica 1,349 1,055 1,422 1,026 0,992 1,018 Noas: En el BBILBAO no hay daos disponibles para 1900, en el BCAST no hay daos disponibles para y 1908, en el BCOM no hay daos disponibles para 1910, en el BEC no hay daos disponibles para , en el BHA no hay daos disponibles para 1900, en el BSB no hay daos disponibles para 1901 y 1902, en el BVALLS no hay daos disponibles para 1900 y 1901, en el BVIT no hay daos disponibles para 1910, en el BVIZ no hay daos disponibles para 1900, en el CBAL no hay daos disponibles para 1907 y 1908 y, finalmene, en el CDOC no hay daos disponibles para Para las fuenes véase exo. Observando la abla 4 consaamos que únicamene res bancos ienen un índice de producividad de Malmquis claramene por debajo de la unidad. Dos de ésos son los bancos que vieron reducida su eficiencia en el periodo (Crédio y Docks y Banco Hispanoamericano) y el ercero, que merecerá un comenario más deallado más adelane, es el Banco de Barcelona. Por lo ano, podemos concluir que la mayor pare de los bancos presenes en nuesra muesra manienen o aumenan sus niveles de producividad durane el periodo esudiado, lo que, obviamene, vendría a refrendar gran pare de lo dicho con los índices esáicos de eficiencia de la abla 3. Además, si comparamos el índice de Malmquis del año final con el inicial (modelo 1), podemos observar como la eficiencia del secor creció en un noable 42 por cieno a lo largo del período esudiado. Esa impresión queda corroborada con el modelo 2, dónde se observa que la asa media de crecimieno de la producividad fue de casi el dos por cieno por año (exacamene el 1,8 por cieno anual). 5. Las causas de los incremenos de producividad La simple descomposición del índice de Malmquis que aparece en la abla 4 en caching-up y cambio écnico nos ofrece una primera aproximación a las causas de los incremenos de producividad. Parece, a odas luces, que el primer efeco fue mucho más imporane que el segundo. En oras 13

14 palabras, el incremeno de producividad del secor se debió a una mejora de la eficiencia relaiva de las enidades peor siuadas respeco a las más avanzadas. Por ano, el panorama presena un secor esable, sin grandes innovaciones en los méodos producivos, compueso por empresas cada vez más expuesas a presiones compeiivas, debido al incremeno del número de bancos más que a la exensión de las redes de sucursales, que aumenan sus niveles de eficiencia relaiva para poder compeir en el mercado. 31 Sin embargo, exise un proceso de innovación nada desdeñable en siee bancos, al como muesra el modelo 1. Además, odos esos bancos son vasconavarros (Banco de Bilbao, Banco del Comercio, Banco de Vioria, Banco de Vizcaya, Crédio Navarro) excepo dos, el Banco de Sanander y el Crédio Balear. Se podría avenurar la hipóesis que ese ligero, pero significaivo, cambio écnico fue debido a la adopción por pare de esos bancos de los méodos de gesión de la banca mixa. 32 Ahora vamos a ocuparnos de la relación enre el amaño de los bancos y el crecimieno de la producividad. En concreo, el Gráfico 1 ilusra la relación enre los valores del índice de Malmquis y el amaño de los bancos, medido por el valor medio del oal de los acivos durane el periodo. El coeficiene de correlación enre ambas variables es negaivo (-0,523), lo que nos indicaría que los bancos más grandes son los que menos han viso aumenar su producividad en el periodo. De hecho, la inspección del gráfico 1 nos revela que seis de los siee bancos más grandes presenan un índice de Malmquis que se siúa por debajo de la media (la única excepción la consiuye el Banco de Vizcaya). 14

15 Gráfico 1. La relación enre amaño y producividad 1,100 BVIT BSB 1,080 BVALLS 1,060 BCAST BVIZ Indice de Malmquis 1,040 1,020 1,000 0,980 BGUI BSAN BASTIC CBAL CNAV BCOM BEC BBILBAO 0,960 CDOC BBCN 0,940 BHA 0, Tamaño Noas y fuenes: Véase abla 4. Uilizamos los daos del modelo 2. Por ora pare, la inspección de los Gráficos 2 y 3 revela que los grandes bancos no esán muy por debajo de la media en cuano al cambio écnico (con la imporane excepción del Banco de Barcelona), pero en cambio sí que se observa que los grandes bancos presenan índices de caching-up muy por debajo de la media. En conclusión, el menor crecimieno de la producividad de los grandes bancos debe relacionarse con su insuficiene caching-up más que con el reroceso ecnológico relaivo. Ampliando alguna de nuesras aneriores conclusiones, podríamos afirmar que el panorama bancario que se recoge en nuesra muesra es el de un secor relaivamene esable en cuano a los méodos de producción, pero afecado por presiones compeiivas que influyen sobre odo en los bancos más pequeños y que conribuyen a mejorar sus índices de eficiencia relaiva. En ciera forma, se puede aseverar que los bancos más pequeños son responsables de la mejora de la producividad, gracias a sus progresos en los índices de eficiencia relaiva. 15

16 Gráfico 2. La relación enre amaño y cambio écnico 1,040 1,030 BVIT 1,020 CBAL 1,010 BBILBAO Cambio écnico 1,000 0,990 0,980 BVALLS CDOC BGUI BSAN BCAST BASTIC CNAV BCOM BVIZ BEC BHA 0,970 0,960 0,950 0,940 BSB BBCN Tamaño Noas y fuenes: Véase gráfico 2. Gráfico 3. La relación enre amaño y caching-up 1,200 1,150 BSB 1,100 BVALLS Caching-up 1,050 BCAST BVIT BGUI BASTIC BSAN BVIZ BEC BBILBAO 1,000 CDOC CBAL CNAV BCOM BBCN 0,950 BHA 0, Tamaño Noas y fuenes: Véase gráfico 2. 16

17 Finalmene, puede resular de gran inerés esudiar si el mayor o menor dinamismo producivo de los disinos bancos esá conecado con la fecha de inicio de sus acividades. Por ejemplo, podría pensarse que las nuevas enidades son más dinámicas que las aniguas o, al conrario, en las venajas de la repuación y el learning by doing acumulado por los más veeranos en el mercado. Para esudiar esa posibilidad, dividimos la muesra oal en res submuesras, siguiendo crierios emporales, 33 y calculamos la media geomérica del índice de Malmquis y su descomposición para las res, para comprobar si exisen diferencias significaivas enre las res. Los resulados de ese ejercicio se presenan en la Tabla 5. Tabla 5. La influencia de la anigüedad en la eficiencia Evolución de la Producividad Del año inicial a 1914 (Mod. 1) Periodos Adyacenes: Promedios Anuales (Mod. 2) Año de fundación Caching Cambio Índice de Caching Cambio Índice de -Up Técnico Malmquis -Up Técnico Malmquis Anes de ,162 1,116 1,296 1,017 0,993 1, ,836 0,987 1,812 1,052 0,978 1,029 Después de ,275 1,041 1,328 1,019 0,999 1,018 Noas y fuenes: los daos proceden de la abla 4. Los bancos creados anes de 1874 son: BBCN, BCAST, BBILBAO, CNAV, BSAN y CBAL. Los bancos creados enre 1874 y 1898 son: BSB, BVALLS, CDOC, y BCOM. Finalmene, fueron creados después de 1898 BEC, BHA, BGUI, BVIT, BVIZ, y BASTIC. Aunque significaivas, las diferencias no nos permien señalar una clara relación enre anigüedad y eficiencia (a la misma conclusión se podría llegar analizando de forma desagregada los resulados para los disinos bancos de cada generación). Los bancos que más progresan en érminos de eficiencia fueron aquellos creados en el período inermedio; es decir, enre 1874 y Las consecuencias de las mejoras de producividad Es ineresane observar cuáles pueden ser algunas de las consecuencias de los diferenciales de comporamieno (en érminos de mejora de producividad) de las disinas enidades bancarias sobre su crecimieno en el periodo. A eso se refieren los Gráficos 4, 5 y 6. El Gráfico 4 presena la relación exisene enre el crecimieno de las enidades, medido como la asa media a lo largo del período, y los índices de Malmquis. La inspección del Gráfico 4 revela algunos aspecos de inerés. En primer lugar, por ejemplo, cuaro de las cinco enidades con mayor crecimieno presenan índices de Malmquis claramene por encima de la media. En segundo lugar, de las cuaro enidades que presenan 17

18 crecimieno negaivo o prácicamene nulo, res ienen índices de Malmquis claramene inferiores a la media de nuesra muesra, mienras que la resane iene un valor muy cercano a esa media. Gráfico 4. La relación enre crecimieno y producividad 1,100 1,080 BSB BVIT 1,060 BVALLS BCAST BVIZ Indice de Malmquis 1,040 1,020 1,000 0,980 CBAL BBILBAO BCOM BSAN BASTIC BEC CNAV BGUI 0,960 CDOC BBCN 0,940 BHA 0, Crecimieno Noas y fuenes: Véase gráfico 2. Los Gráficos 5 y 6 esudian la relación enre crecimieno y la descomposición del índice de Malmquis enre las variaciones debidas al cambio écnico y las que se deben al proceso de cachingup. La observación del Gráfico 5 nos confirma que el cambio écnico fue casi inexisene para una gran pare de las enidades (que presenan valores muy cercanos a la unidad). De las dos enidades que presenan progreso écnico susancial, hay una que presena el mayor crecimieno del periodo (el Banco de Vioria) y ora que presena un comporamieno diameralmene opueso, incluso con disminución de su acividad (el Crédio Balear). Las enidades que presenan clara regresión écnica ampoco presenan un comporamieno homogéneo, aunque no an dispar como en el caso anerior. Una de ellas, el Banco de Barcelona, es la enidad que ve disminuir su acividad en mayor medida, mienras que la ora, el Banco de Sabadell, presena crecimieno posiivo, aunque moderado. La 18

19 regresión écnica del Banco de Barcelona, asociada a la disminución de sus acivos, es un anuncio de sus poseriores problemas, que acabaron con su liquidación en el año Gráfico 5. La relación enre crecimieno y cambio écnico 1,040 1,030 BVIT 1,020 CBAL 1,010 BBILBAO BGUI Cambio Técnico 1,000 0,990 0,980 CDOC BCOM BSAN BASTIC CNAV BVALLS BEC BCAST BVIZ BHA 0,970 0,960 0,950 BBCN BSB 0, Noas y fuenes: Véase gráfico 2. Crecimieno De los ocho bancos que crecen menos durane el periodo (incluidos aquellos que ven disminuir su amaño absoluo), siee ienen índices de caching-up claramene inferiores a la media (la única excepción la consiuye el Banco de Sabadell), mienras que de los cinco bancos que presenan una mayor expansión durane el periodo, únicamene uno (el Banco Hispano Americano) presena un índice muy claramene inferior a la media (Gráfico 6), oro iene un valor prácicamene igual a la media (el Banco Guipuzcoano), mienras que los oros res se encuenran claramene por encima. Parece, pues, que puede esablecerse una relación enre el proceso de caching-up de los bancos y su crecimieno durane el periodo. A modo de conclusión podríamos afirmar que parece que exise ciera relación enre el crecimieno de los bancos y su comporamieno en érminos de cambios en la producividad. Cambios que, en cualquier caso, se deben más a los disinos procesos de caching-up de las diversas enidades que al cambio écnico que no consiuyó un facor imporane durane ese periodo. 19

20 Gráfico 6. La relación enre crecimieno y caching-up 1,200 1,150 BSB 1,100 Caching-Up 1,050 1,000 BVALLS BCAST BSAN BGUI BBILBAO BASTIC BEC BBCN CBAL BCOM CNAV CDOC BVIZ BVIT 0,950 BHA 0, Noas y fuenes: Véase gráfico 2. Crecimieno 7. La producividad y la evolución de los grupos bancarios regionales en España Pasemos ahora a un análisis deallado de la evolución de la producividad de los diferenes grupos regionales en España. La siguiene abla 6 nos muesra una media geomérica del comporamieno, en érminos de eficiencia, de los diversos bancos que forman nuesras cuaro agrupaciones regionales. Tabla 6. La eficiencia de los grupos bancarios regionales Evolución de la Producividad Del año inicial a 1914 (Mod. 1) Periodos Adyacenes: Promedios Anuales (Mod. 2) Caching -Up Cambio Técnico Índice de Malmquis Caching -Up Cambio Técnico Índice de Malmquis Caalanes 1,836 0,810 1,487 1,052 0,968 1,019 Madrileños 0,909 0,923 0,840 1,004 0,995 0,999 Vasconavarros 1,427 1,210 1,728 1,027 1,004 1,031 Oros 1,185 1,299 1,538 1,012 1,000 1,013 Noas y fuenes: Véanse las ablas 1 y 4. El grupo más eficiene, en odos los indicadores, es el vasconavarro, seguido de los bancos caalanes, el grupo de oros y, en úlimo lugar, los bancos madrileños. Por lo ano, a primera visa podría parecer que el éxio de la banca vasconavarra es fácilmene achacable a sus mejoras en 20

21 eficiencia, incluyendo un noable progreso écnico, mienras que el fracaso de la banca caalana puede difícilmene ligarse a la evolución de su producividad. Sin embargo, un análisis deallado de las enidades caalanas nos muesra exacamene lo conrario. De las cuaro enidades caalanas analizadas, Banco de Barcelona, Banco de Sabadell, Banco de Valls y Crédio y Docks, res (odas excepo el Banco de Barcelona) figuran enre las cuaro enidades menos eficienes y lo que realizan a lo largo del período es un proceso de caching-up (al como precisamene muesra la abla 6) mienras que experimenan un noable reroceso écnico. Por ano, odo parece indicar que los problemas del secor financiero caalán ienen su puno de parida en algún momeno previo al periodo analizado. Obviamene, a primera visa, ese juicio no debería de ser apropiado para el Banco de Barcelona, que obiene un índice de eficiencia uniario (véase Tabla 3). Por oro lado, si aendemos a la evolución de la eficiencia a lo largo del periodo (véase abla 4), las rayecorias son bien diferenes: mienras Banco de Barcelona y Crédio y Docks figuran enre las res peores enidades, el Banco de Sabadell iene la mejor evolución y el Banco de Valls ocupa la cuara posición en ese aspeco. No obsane, debemos resalar que las posiciones de parida de esos dos úlimos bancos son an precarias que, a pesar de acercarse a la fronera eficiene, no pasan de ocupar, al final del periodo, las posiciones decimoercera y décima, respecivamene, enre los índices de eficiencia de las dieciséis empresas esudiadas. En esa clasificación, el Crédio y Docks, al sumar a su baja producividad inicial una negaiva evolución de ésa, ocupa la úlima posición, mienras que el Banco de Barcelona obiene, al igual que ocurría en el periodo inicial, la calificación de eficiene. El análisis deallado de la evolución del Banco de Barcelona muesra que, a pesar de que aparezca como eficiene ano en el primer año como en el úlimo, esa enidad sufre una fuere crisis durane el periodo, al como indica un caching-up que, acumulado, reduce la producividad a aproximadamene la miad de la inicial. La próxima abla 7 y el siguiene gráfico nos ayudarán a comprender ese resulado. 21

22 Tabla 7. Cociene enre el valor medio de cada componene del produco y el de los gasos generales Bancos Présamos Carera Cuenas Corrienes Depósios Cuenas de Ahorro BASTIC BBCN BBILBAO BCAST BCOM BEC BGUI BHA BSAN BSB BVALLS BVIT BVIZ CBAL CDOC CNAV Fuenes: véase exo. Como se observa en esa abla, el Banco de Barcelona obiene buenos resulados, en relación a los recursos uilizados, en sólo en una de las cinco variables analizadas, la correspondiene a cuenas corrienes, siendo su liderazgo en ese aspeco lo que permie alcanzar índices de eficiencia uniarios en los periodos inicial y final. En oras palabras, su liderazgo en eficiencia es sólo aparene y probablemene consecuencia de su capacidad para araer cuenacorrenisas. Esa exraordinaria capacidad del Banco de Barcelona sería resulado de dos facores: por un lado, su dilaada hisoria que le confería un grado de seguridad y pública confianza de la que no gozaban oras enidades financieras (debe de recordarse que fue fundado en 1844) y, por oro, su paricular posición de preeminencia denro del mercado financiero barcelonés

23 Gráfico 7. Evolución del cociene enre las cuenas corrienes y los gasos generales en el Banco de Barcelona, Noas y fuenes: Las fuenes son las memorias del Banco de Barcelona de los años correspondienes. El gráfico 7 muesra cómo el liderazgo final se consigue con una producividad que es aproximadamene la miad del inicial, fenómeno que se ocula en el modelo DEA aplicado al úlimo periodo por la ausencia de unidades comparables con rendimieno superior al Banco de Barcelona, pero que se explica perfecamene al descomponer los índices de Malmquis. En oras palabras, el Banco de Barcelona perdió a lo largo del periodo capacidad para araer cuenacorrenisas y no fue capaz de incremenar su producividad en las oras áreas de negocios. Obviamene, ese resulado da ciero sopore a las esis "endogenisas" que ven la crisis financiera caalana como resulado de la fala de dinamismo de las enidades locales El comporamieno de la banca madrileña es cieramene heerogéneo, pese a sus bajos niveles agregados de eficiencia. Mienras que el Banco Español de Crédio iene un comporamieno posiivo en odos los indicadores de producividad (por ejemplo, en nivel de eficiencia pasa del sexo al primer lugar), el Banco de Casilla y el Banco Hispano Americano ocupan en 1914 el anepenúlimo y penúlimo lugar, respecivamene, en niveles de eficiencia. El Banco Español de Crédio nació de la disolución del Crédio Mobiliario Español y gozaba de una fuere paricipación de capial francés. Su principal negocio durane ese periodo fueron la bolsa y los servicios financieros a diversas grandes 23

24 empresas 35 y, al como podemos observar, eso le dio basane buenos resulados al siuarse en el periodo enre la élie de los mejores bancos españoles. El Banco Hispano Americano era el mayor de los res bancos madrileños aquí esudiados. El Banco Hispano Americano se dedicaba a negocios con América Laina que le acarrearon una suspensión de pagos en En cambio, el Banco de Casilla llegó al siglo XX con una carera formada por negocios indusriales y una fuere vinculación con algunas de las sociedades de Barcelona. La muere de su fundador, Jaime Girona, en 1907 dio lugar a un reordenamieno de sus acividades 37 que como podemos observar en la Tabla 4 sirvió para incremenar su eficiencia absolua pero no para mejorar su posición relaiva enre los bancos españoles. El comporamieno de la banca vasco-navarra difiere, de manera imporane, del de los bancos caalanes y madrileños. Las seis enidades de esa zona consideradas en ese esudio experimenaron imporanes progresos en el índice de Malmquis durane ese periodo. Un caso especacular es el del Banco de Vioria que pasó del décimo pueso al primero en érminos de eficiencia. Hay diversos rasgos de la banca vasca que podrían explicar esa rápida mejora de la eficiencia, aunque a nosoros nos gusaría desacar dos. En primer lugar, la exisencia de numerosos nuevos enranes en el secor, lo que redundó en un aumeno generalizado de la compeencia que, sin duda, endría mucho que ver en los incremenos de producividad y en el fenómeno generalizado del caching-up (véase el Tabla 4). En segundo lugar, las fueres diferencias enre la banca vasca y el reso de los bancos españoles en la composición y gesión ano de acivos como pasivos. Así, los bancos vascos endían a paricipar direcamene en la gesión de sociedades indusriales, muchas de nueva ecnología como las nuevas compañías elécricas, y a recurrir al pequeño ahorro por medio de libreas de ahorro. 8. Conclusiones El presene esudio preende profundizar en el análisis de la evolución de la banca privada española en un período, los principios del siglo XX, en el que el sisema financiero se caracerizó por imporanes cambios cuaniaivos, con un gran crecimieno del número de enidades y del volumen de acividad, y cualiaivos, pues dicho crecimieno esuvo acompañado de la modernización de la esrucura del secor y de cambios en el peso relaivo de los disinos grupos regionales. 24

25 La meodología aplicada, el análisis de la producividad mediane el DEA (considerando la relación enre los gasos generales de las enidades y sus niveles de acividad, ano en operaciones de acivo como de pasivo), así como el esudio de la evolución de la misma mediane los índices de producividad de Malmquis, permien exraer ineresanes conclusiones que arrojan luz sobre lo acaecido en el referido período. En primer lugar, desaca el incremeno en los niveles de eficiencia en el conjuno del secor. No resula en absoluo avenurado relacionar esa mejora global con el incremeno de la compeencia derivado de la creación de numerosas enidades. No obsane, no quiere eso decir que las nuevas organizaciones incorporen una ecnología más eficiene o que su comporamieno sea especialmene dinámico, posibilidades ambas desmenidas por la evidencia empírica obenida, sino que la consecuencia de la compeencia es un acercamieno de las enidades ineficienes a las más eficienes, en un conexo de esancamieno de la producividad de ésas. Se observa que la mejoría es algo más pronunciada en los bancos de menor amaño y que generalmene va ligada a unas asas de crecimieno superiores a la media. En segundo lugar, el análisis pone de manifieso el comporamieno diferencial de los disinos grupos bancarios regionales, conrasando especialmene la evolución de la banca caalana y la de la vasconavarra, que explican, al menos parcialmene, el diferene peso que las mismas han venido eniendo desde enonces. Las enidades financieras caalanas paren ya en el período considerado de una posición desfavorable, que se ve agravada por la negaiva evolución que sufren a lo largo del mismo, y en especial por el reroceso sufrido por su enidad más emblemáica, el Banco de Barcelona (a pesar de que su alo nivel de especialización le sigue oorgando un engañoso carel de "eficiene" al final del período, que no expresa más que la peculiaridad de su orienación). Por su pare, los bancos vasconavarros experimenan imporanes progresos a lo largo de esos años, lo cual, a la visa de la gran canidad de nuevos enranes en su ámbio, consiuye un argumeno más en apoyo de las esis, aneriormene expuesa, de que la presión compeiiva derivada de la creación de nuevas enidades puede considerarse el moor de las mejoras regisradas en la producividad. Finalmene, nos gusaría indicar que ese esudio demuesra que el enorno compeiivo exisene anes de la promulgación de la Ley de ordenación bancaria de 1921 fue alamene beneficioso para el progreso de la indusria bancaria en España, pueso que el éxio y el fracaso de los 25