EL DESAFIO DE COMPARTIR EL BIENESTAR Y LA FELICIDAD EN ELTRABAJO

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1 DECLARACIÓN DÍA MUNDIAL DE LA FELICIDAD 20 de Marzo del 2015 EL DESAFIO DE COMPARTIR EL BIENESTAR Y LA FELICIDAD EN ELTRABAJO Trabajadores, Empresarios y Comunidad unidos en la co-construcción de un Mundo mejor El Instituto del Bienestar (IBE) es una organización interdisciplinaria que promueve el bienestar y la felicidad en las personas y las organizaciones en Chile y el Mundo. Desde el año 2012 y a partir de la primera celebración del día internacional de la Felicidad, ha realizado anualmente una declaración pública para promover iniciativas que fomenten el bienestar y felicidad en el país, focalizándose en temas como salud mental y educación. Este año 2014, ha decidido junto a la Asociación de Empresas Familiares y la Universidad Adolfo Ibáñez, convocar a diferentes instituciones para realizar esta declaración sobre el "Desafío de compartir el Bienestar y de la Felicidad en el Trabajo". La Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez con sus más de 60 años de tradición en Chile trabaja para dar fuerza a todos los conceptos que hoy se requieren para desarrollar negocios más transparentes, sustentables, éticos, que den oportunidades y creen líderes. De esta forma, para nuestra Escuela, resulta de suma importancia apoyar todas las instancias que colaboren en el crecimiento del país, pues está demostrado que los trabajadores más felices rinden mejor en sus puestos de trabajo, y con ello se obtienen mejores resultados para sus organizaciones. Las Empresas Familiares cumplen una importante labor como fuentes generadoras de crecimiento económico y trabajo en Chile. Es por eso que para la Asociación de Empresas Familiares, AEF, la creación y mantención de empleos de calidad es una preocupación fundamental. En este objetivo es clave la estabilidad de la empresa, considerada tanto desde el punto de vista de la salud y felicidad de todos sus empleados, así como desde sus perspectivas de crecimiento y productividad. Estamos convencidos de que ambientes laborales que promueven el bienestar de todos los integrantes de la empresa contribuyen a clima más favorable y positivo en el país, a un mayor compromiso social y a mejores perspectivas económicas para todos, ya que la buena salud de la 1

2 Empresa Familiar se traduce en crecimiento y competitividad, beneficios directos para la economía y desarrollo de nuestro país. Por todo lo anterior, hoy queremos invitar a todos y a todas a participar en la coconstrucción de un Chile que se atreve a mirar el presente y el futuro desde el bienestar y la felicidad. Adherimos a la declaración de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que aprobó el 19 de Julio del 2011 una resolución que reconoce la búsqueda de la felicidad como un objetivo humano fundamental, convocando a los Estados Miembros a promover políticas públicas que incluyan la elaboración de medidas que reflejen la importancia de la búsqueda de la Felicidad y el Bienestar en sus propuestas de desarrollo. Junto con ello, valoramos el aporte y trabajo de Bután y su grupo mundial de expertos que ha presentado recientemente a ONU propuestas concretas de nuevos modelos de desarrollo que permitan incorporar estos principios en la co-construcción de un mundo mejor. Adherimos también a la propuesta de Naciones Unidas sobre los Objetivos de Desarrollo Sustentable (SDGs) para el periodo que incorpora nuevas medidas para el desarrollo de la felicidad y la calidad de vida en el mundo. Nos sentimos plenamente representados por los objetivos que se refieren a la promoción de estilos de vidas saludables, bienestar y salud mental en todas las edades, como en la promoción de un crecimiento económico sostenible e inclusivo, que incorpore trabajos dignos para las personas. Al analizar la realidad laboral Chilena, encontramos que estudios recientes (Gallup, 2013; Unanue & Gómez, 2014; Zoom al Trabajo UAI-Visión Humana 2014) nos muestran que consistentemente, menos de la mitad de los trabajadores se sienten satisfecho(as) con el tipo de trabajo o cargo que desempeñan y con la empresa o el lugar en que trabajan. Más aun, casi un 80% de los trabajadores refieren que se sienten estresados o tensionados por lo menos en algunos momentos del día, y que las principales causas que de esto se encontrarían asociadas a su realidad laboral. A estos resultados, se suman recientes estadísticas nacionales de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) que muestran que durante el año 2014, el 48 % de las licencias médicas laborales correspondieron a problemas de salud mental de los trabajadores, cifra que se incrementó en 23 puntos porcentuales desde el año 2011 (25%, ACHS). 2

3 Considerando la importancia del trabajo para el desarrollo de las personas y del país, se nos presenta una preocupante realidad de la cual todos somos parte. Develar, asumir y buscar mejores respuestas a esta realidad, es una tarea de cada uno de nosotros y de toda la sociedad. Frente a esta realidad, surgen preguntas claves: Podemos ser felices en el trabajo? Puede el trabajo ser un motor de florecimiento humano y social? Pueden las organizaciones ayudar al Bienestar y a la Felicidad de los Trabajadores, de los Empresarios, de la Comunidad y del País? La respuesta definitivamente es Sí! Hoy en día existen organizaciones, tanto en Chile como en el mundo, que cuentan con trabajadores que viven positivamente su experiencia laboral, que ven en ella una fuente de crecimiento y bienestar permanente, y donde existe una alta sintonía y compromiso entre todos los actores organizacionales. En estas organizaciones, los trabajadores florecen a través del trabajo, incrementando el bienestar en sus vidas y también el de las organizaciones a las cuales pertenecen. Diversas investigaciones avalan estas prácticas, demostrando que trabajadores con mejores niveles de salud mental y bienestar están más satisfechos y se encuentran más comprometidos con sus organizaciones; poseen mejores indicadores de vitalidad en sus funciones labores; poseen niveles significativamente menores de estrés; e incluso son más productivos (Unanue & Gómez, 2014). Además la literatura científica (Diener & tay, 2012; Seligman, 2011; Unanue, Maercovich, Olguín, y Weldt, 2012) y las experiencias mundiales, destacan que: Los Trabajadores que experimentan mayores niveles de emociones positivas presentan menor ausentismo laboral, al mejorar sus niveles de bienestar y salud física y mental, lo que a su vez disminuye sustancialmente los costos organizacionales asociados a enfermedades y reemplazos. 3

4 Los lugares de trabajo que generan condiciones de mayor bienestar y felicidad en sus trabajadores, producen mayores niveles de confianza y satisfacción, menor rotación y ausentismo, mayor creatividad y, por lo tanto, más altos niveles de productividad y de calidad de vida. El Bienestar y la Felicidad en las organizaciones mejora las relaciones sociales, lo que incrementa la cooperación, la confianza y la honestidad entre los trabajadores y la comunidad, apareciendo una mejor ciudadanía organizacional. En resumen, el trabajo puede y debe aportar al bienestar y la felicidad de todos sus actores, ya sean trabajadores, emprendedores, empresarios y a la comunidad de la que son parte. Si dedicamos más de la mitad de las horas de nuestra vida adulta activa al trabajo, estamos convencidos (as) de que este espacio debe ser un lugar de gratificación, que brinde sentido a nuestras vidas y que aporte a nuestro bienestar personal y social. Hoy existe el desafío de ser felices en el trabajo, para lo cual es necesario romper el paradigma de la divergencia de intereses entre trabajadores y empresarios. De buenos y malos. Todos los (as) actores debemos apuntar a un fin común: el bienestar y la felicidad en las organizaciones y en la comunidad. La consigna y la realidad deben proclamar que Los Trabajadores, los Empresarios y la Comunidad unidos, jamás serán vencidos! No hay mayor fortaleza que la que se produce cuando trabajamos por una motivación en común, generando una justa gratificación compartida. Para lograr estos objetivos, es necesario crear organizaciones y normativas laborales que promuevan espacios físicos y humanos de bienestar. En este contexto, celebramos la aparición del Protocolo de Vigilancia de Riesgos Psicosociales en el Trabajo 1, que busca identificar, prevenir y solucionar factores de riesgo al interior de las organizaciones, para enfrentar problemáticas tan recurrentes en los tiempos actuales como el estrés y el malestar. Las empresas modernas y con visión de futuro sustentable han entendido que los factores del éxito organizacional radican en gran parte en reducir el estrés, la desmotivación y 1 4

5 la inseguridad, enfocándose en permitir y fomentar el involucramiento, la confianza, el sentido de vida, el bienestar y la felicidad de sus trabajadores. Las organizaciones visionarias deben modificar sus estructuras, sus dinámicas y sus visiones tradicionales, buscando incrementar no sólo su crecimiento y éxito comercial, sino también aportando al bienestar y al florecimiento de sus trabajadores y de la comunidad de la cual son parte. Nuestra principal riqueza como país son las personas, quienes tienen la capacidad de descubrirse y reinventarse para desarrollar la mejor versión de sí mismos. Démonos la oportunidad de florecer colectivamente para así ser parte de mejores organizaciones y comunidades. Con urgencia necesitamos generar trabajos y organizaciones que dignifiquen a las personas, que les permitan satisfacer sus necesidades, cumplir sus sueños, y desarrollar sus talentos y potencialidades. La ciencia de la felicidad ha demostrado que esto es beneficioso para todos y para todas. Por eso hoy podemos hablar de la alta rentabilidad humana y económica de la felicidad. Por esto, necesitamos generar nuevas formulas de organización que incentiven formas de trabajo que hagan sintonía con el sentido de nuestras vidas. Debe haber oportunidades de un buen trabajo para los jóvenes, los adultos mayores, las mujeres, los grupos vulnerables y las diferentes minorías. El buen trabajo puede y debe alcanzar para todos. Necesitamos además, lograr un balance entre la vida personal y la vida laboral. El trabajo tiene que ayudarnos a ser felices también fuera de él. El tiempo no sólo es dinero. El tiempo es, por sobre todo, vida. Necesitamos también reconocer que la necesidad de un cambio no implica dejar de valorar y agradecer lo bueno. En este sentido, debemos ser capaces de reconocer a nuestras(as) trabajadores(as) y empresarios(as). Tanto por sus esfuerzos diarios como por sus aportes al bienestar de nuestras comunidades. El reconocimiento honesto y la gratitud nos hace bien humanamente. Necesitamos urgentemente que La felicidad de unos, no sea la infelicidad de otros, por lo cual convocamos a Trabajadores, Empresarios, Autoridades Políticas y a la Comunidad, a reencontrarnos y sintonizarnos, asumiendo cada uno sus derechos y deberes, en busca de un bienestar felizmente compartido. 5

6 Es necesario y posible un Chile mejor: uno más justo, solidario y feliz. Por eso hoy declaramos, Que el futuro del país necesita un presente inmediato donde florezcan la calidad de vida y la felicidad en el trabajo! 6