Una versión cinematográfica del Quijote: Bolívar soy yo, de Jorge Alí Triana -En tomo a su mecanismo antilusionista quijotesco-

Transcripción

1 Una versión cinematográfica del Quijote: Bolívar soy yo, de Jorge Alí Triana -En tomo a su mecanismo antilusionista quijotesco- Hojoon Yim Univ. Nacional de Seúl Si todo arte se ha desarrollado en la tensión perenne entre la reflexividad y el ilusionismo, 1 el punto de partida del arte modernista y vanguardista es rechazar el segundo. En este sentido no es sorprendente que los cineastas y dramaturgos vanguardistas, como Luis Buñuel, Jean Luc Godard y Bertolt Brecht, se refieran al Quijote como precursor de su trabajo artístico. En realidad el Quijote, a través de la estructura auto-reflexiva y varias 'técnicas de interrupción', muestra muy precozmente el esceptismo por la representación transparente de la realidad, la preocupación más fundamental del cine antilusionista. Bolívar soy yo(2002), de Jorge Alí Triana, es un ejemplo interesante del cine renovador del tercer mundo que adopta las técnicas antilusionistas del Quijote. La obra de Alí Triana, una de las pocas películas colombianas que han triunfado nacional e internacionalmente, puede ser un culto al Quijote, al imitar la estructura fundamental, la narrativa desmitifícadora y los personajes contradictorios de la obra maestra de Cervantes. 2 Nuestro estudio, en primer lugar, se ocupa de las técnicas antilusionistas del Quijote que se sirven como una fuente inspiradora para los cineastas vanguardistas. Luego, examinaremos algunos ejemplos de su adaptación en el cine vanguardista y, por último, averiguaremos su uso en la película, Bolívar soy yo. I. Alegorías de la colaboración del lector/público El arte produce la ilusión siempre con la colaboración del lector/público. En otras palabras, la ilusión solo se mantiene cuando exita una colaboración activa del lector/público porque el arte es siempre incompleto y diferente de la realidad. Si el lector/público ve la obra con alguna distancia crítica, el arte no tiene otro remedio que revelar su estructura cruda y artificial. Cervantes ya se daba cuenta de este mecanismo simple. El criado del maese Pedro dice así a su público sobre el retablo; "Vuelvan

2 vuesas mercedes los ojos a aquella torre que allí parece, que se presupone que es una de las torres del alcázar de Zaragoza (II. XXVI)." Don Quijote colabora activamente en esta presuposición y efectivamente se sumerge en la ilusión producida por el retablo de Pedro. Así pues, el episodio de maese Pedro es una alegoría a la colaboración del público. Desde luego, el episodio de Alonso Quijano que se enquista completamente en el mundo de Libros de Caballerías también es semejante alegoría. El público siempre vascila entre la realidad e ilusión y no tiende a colaborar conscientemente. Sin embargo, una vez capturado por la ilusión no es fácil de escapar de ella misma como si estuviera en el sueño. No es extraño que muchos teóricos del cine sigan averiguando la relación entre la película y el sueño. Christian Metz, por ejemplo, señala que "la impresión de la realidad" conseguida por la película se deriva de la situación cinematográfica que estimula la auto-sumergencia como el sueño. 3 La confusión entre la realidad y el sueño es el tema fundamental del Quijote. Don Quijote, por ejemplo, no sabe si lo que ha visto en la cueva de Montesino es la realidad o el sueño(ii.xxv). El trama de Bolívar, soy yo también es una alegoría del papel de lector/público en la ilusión artística. El protagonista de la película, Santiago Miranda, llega a creerse a sí mismo como Simón Bolívar en el proceso de filmar la telenovela sobre el amor del libertador y sale a la calle cabalgando con el vestido militar del siglo pasado. Como Alonso Quijano, el actor Santiago Miranda se identifica con la figura de la obra artística. Dado que Miranda es el actor de la telenovela, se supone que se de cuenta muy bien del mecanismo de la ilusión artística. Naturalmente el actor colabora mucho más activamente que el público en la producción de la ilusión. En fin, tanto el Quijote como Bolívar pueden verse como el arte antilusionista puesto que demuestran que toda ilusión artítica necesita la participación del lector/público. II. Revelación del proceso de la producción de la ilusión La revelación del proceso de la producción de la obra artística es, de verdad, la estrategia frecuentemente empleada por los artistas antilusionistas. Si encontramos tres niveles de ficción en el Quijote, el argumento central de dicha obra no es otra que la revelación sucesiva de la estructura artificial del nivel inferior. Con la parodia grotesca de don Quijote, el mundo fantástico del Libros de Caballerías llega a revelarse su vanidad. La aventura de Don Quijote, al mismo tiempo, no puede quedarse como una ilusión intacta, ya que el protagonista mismo se da cuenta de la falsedad de su mundo. En la segunda parte del Quijote, el protagonista va a Barcelona y visita una imprenta. Don Quijote muestra gran interés por el proceso de la producción del

3 libro y finalmente encuentra impreso el Quijote de Avellaneda. El protagonista ya es consciente de que él mismo es un personaje de la novela, lo cual significa que Cervantes advierte al lector que la historia de don Quijote es una ficción. En el cine vanguardista, suelen existir varios niveles de ficción y de consciente como lo hacen el Quijote y el teatro épico de Brecht. Es decir, una narrativa abarca otras narrativas en su interior y éstas se confunden. Revelar el proceso de la producción es una de las técnicas más frecuentemente empleadas. Por ejemplo, El desprecio, de Jean Luc Godard, 8 1/2, de Federico Fellini, Hasta cierto punto, de Gutiérrez Alea, podrían entenderse como la película sobre la producción de la película. La lista de este tipo de películas es innumerable. Bolívar también es la película que revela el mecanismo de la propia construcción. La película empieza con la escena de grabación de la telenovela, Bolívar y sus amores. Así pues, la película revela el proceso de la producción de la narrativa interior. La revelación tiene lugar sucesivamente. Cuando se escapa el protagonista del lugar de grabación, todo el equipo de la telenovela le persigue hasta el final de la película. El tumulto causado por la persecución y el secuestro llegan a ser el trama central de la película. La obra no esconde el mecanismo de la producción en el nivel superior y en la escena final cuando Bolívar ensangrentado pide "corte", aparece la pizarra cinematográfica que indica una de las escenas de la película, Bolívar, soy yo. Así, se revela la artificiosidad de la narrativa de Bolívar, soy yo. En la película, existen dos niveles de producción; la telenovela, Bolívar y sus amores y la película, Bolívar, soy yo. A lo largo del trama, se revela la artificiosidad tanto de la telenovela como de la película misma. El protagonista se niega a filmar la última escena de la telenovela ya que no le gusta el final dramático de Bolívar. Pensando que el libertador no puede morir en el pelotón de fusilamiento escapa del lugar de grabación y vuelve a la capital colombiana. A petición del presidente del país, participa en el desfile militar que celebra la independencia nacional y se convierte en el símbolo de la cumbre de los países bolivarianos. En la cumbre Santiago Miranda, como Bolívar, reclama la reintegración de la Gran Colombia para superar los problemas socio-económicos del presente. Al interrumpir su discurso en la cumbre, Santiago retiene al presidente de Colombia como rehén y pide un barco a la autoridad. Así pues, empieza a navegar a lo largo del río Magdalena con el presidente secuestrado. Esto, para Santiago, es la verdadera historia de Simón Bolívar y, al mismo tiempo, la corrección de la telenovela. 4 El pueblo colombiano lo considera la resurrección del héroe y colabora en la ilusión del actor, Santiago Miranda. Así, como en el Quijote, el esqueleto estructural del primer nivel de ficción -telenovelaes descubierto por la ficción del segundo nivel. Sin embargo, éste no se queda intacto en ambas obras, puesto que los propios protagonistas revelan la artificiosidad de su mundo. He aquí el esquema de los niveles conscientes de las dos obras.

4 3er 2o ler nivel nivel nivel Público/Santiago Miranda Lector/Alonso Quijano Mundo de Bolívar Mundo de don Quijote Telenovela Libros de Caballerías Bolívar, soy yo El Quijote III. Cruce entre realidad e ilusión Otra técnica antilusionista empleada en el Quijote es la yuxtaposición de la locura y la sanidad, en otras palabras, la ilusión y la realidad. Como es bien sabido, la pareja, Sancho Panza y Don Quijote, es la oposición entre dos mundos. Sin embargo, Don Quijote no se queda siempre en el mundo de locura. Muchas veces, Alonso Quijano menciona que sabe quién es y dice, "Sé quién soy"(i, IV) Así pues, el cruce entre realidad e ilusión es el juego principal del Quijote. En realidad, la preocupación por la reflexión y la ilusión ha sido uno de los temas centrales de la filosofía occidental tras Platón. En la metafísica occidental ha prevalecido lo textual sobre lo visual. El psicoanálisis de Lacan está dentro de esta tradición y prefiere el orden simbológico a lo imaginario. Los críticos cinematográficos influidos por Lacan alarman que no sea hechizado por la imagen de espejo. Para el público no es fácil escaparse de la ilusión del cine. Metz compara el estado del público con la 'fase de espejo' de Lacan. Al igual que el niño con la escasa actividad del cuerpo es hechizado por su propia imagen en el espejo, el público también con el mínimo movimiento corporal se identifica con los personajes de la película. Durante el estreno de la película, los individuos aislados desprovistos de la afiliación o la comunicación con otros individuos, se caen en la auto-absorción narcisista. Así pues, el estado de ver la película suele considerarse como un sueño. Sin embargo, el lector/público no siempre se queda sumergido en la ilusión. Ya que la representación artística es siempre incompleta, el lector/público intermitentemente se da cuenta de la realidad. Así pues a lo largo del estreno de la película el público continuamente hace vaivenes entre la ilusión y la realidad. Como el Quijote, los cines vanguardistas suelen formar su narrativa en torno al choque entre realidad e ilusión. Bolívar, también, prepara varios dispositivos para mostrar este encruzamiento siguiendo los ejemplos del Quijote. En primer lugar, el estado de Alonso Quijano que transcurre entre la locura y la sanidad también es el de Santiago Miranda. De verdad, el estado mental de protagonista de Bolívar es curioso. Leyendo el Quijote, el actor se enloquece creyéndose a sí mismo como Bolívar y se niega a actuar en la escena de la telenovela que muestra la muerte final del

5 héroe. Sin embargo, cuando se encierra en el manicomio, dice al psiquiatra, "Yo siempre soy actor." Esta actitud se cambia completamente cuando participa en la cumbre como símbolo; imaginándose a sí mismo como Bolívar secuestra al presidente. Con el objeto de persuadir a Santiago, la autoridad colombiana ordena a la actriz Alejandra, pareja de Santiago en la telenovela, vestirse como Manuelita, la amante de Bolívar. La autoridad, creyendo que Santiago está loco, manda Manuelita al barco para persuadir a Bolívar. Desde luego, Manuelita se da cuenta de que ella está fingiendo y actuando en el nivel de Bolívar. Esta situación es muy idéntica a la del Quijote, dado que Sancho 'actúa' en el nivel consciente de su patrón. Alonso Quijano y Santiago Miranda parecen locos en su propio trama pero ambos dicen saber quiénes son. En Bolívar, cuando la actriz se acerca a Miranda con el vestido de Manuelita, Miranda le dice a ella: "Tú crees que yo me creo Bolívar? Ese caballero murió en 1830." Así Miranda se ríe de todos los que creen la locura del actor. El público no puede tener confianza en la sanidad o la locura del actor porque se cruzan continumente. La ilusión dramática, pues, es fuertemente dañada porque el estado consciente del protagonista es siempre dudoso. IV. Técnicas de interrupción En realidad, muchas técnicas antilusionistas empleadas en el cine vanguardista se encuentran en el Quijote. Siguiendo la tradición de Brecht, el cine antilusionista suele abarcar varias formas híbridas de representación en su entidad y, debido a ello, interrumpe el hilo narrativo. Como es bien sabido, Brecht interrumpe la acción a través de la canción, la explicación directa al público, el 'freeze frame', etc. Cervantes también interrumpe la acción por medio de los cuentos y poesías intercalados, parodias, etc. Como el asistente del Maese Pedro, Cervantes constantemente vagabundea en torno al hilo narrativo. Así pues, no es exagerado decir que el arte de interrupción es el carácter principal del Quijote. En este sentido, el 'freeze frame' sobre el hilo narrativo en que Don Quijote y el vizcaíno se congelan con la espada en alto, Robert Stam la ve como emblema de todo proceso del Quijote 5. Siguiendo la estrategia quijotesca del cine vanguardista, Bolívar abarca varias formas de representación. A parte de la telenovela que es una parte importante de la película, el documentarlo, las fotos se incluyen en la narrativa y impiden el desarrollo fluido de la trama. Desde luego, el documentario y las fotos intercalados añaden la dimensión histórica y política a la obra como los sonetos y cuentos intercalados en el Quijote que añaden un sentido profundo al trama de Don Quijote. El freeze frame de la escena final de Bolívar es también una técnica importante de la interrupción. En el último momento donde se tirotean la tensión dramática alcanza

6 al máximo nivel. El protagonista finalmente grita, "Adiós Colombia, Adiós libertad!". El público llega a ser conmovido. Sin embargo, aparece de repente la pizarra cinematográfica y la imagen se congela. Así, el público se despierta de la ilusión dramática de manera brusca. V. Conclusión Nuestro estudio ha examinado las técnicas antilusionistas del Quijote que han sido una fuente inspiradora en el cine vanguardista enfocándose en la película, Bolívar, soy yo. La influencia del Quijote en Bolívar es evidente desde la primera escena donde el protagonista lee la obra maestra de Cervantes. El protagonista mismo dice, "Don Quijote, el hombre como debería ser". Efectivamente el Quijote ha sido una causa importante del enloquecimiento del actor, quien dice, "Los tres grandes majaderos de la humanidad: Jesucristo, Don Quijote y yo". No es justo relacionar la actitud antilusionista del Quijote con el rechazo a la narrativa misma. Toda la obra del Quijote está llena de cuentos. Por lo que Cervantes se preocupa es la ilusión que aisla al público del mundo real. Uno de los teóricos más prestigiosos del posmodernismo, Fredric Jameson, presagia la aparición de la cultura posmoderna que trascende la dicotomía estéril del realismo y modernismo. Esto significa que el vanguardismo estético y el político puede y debe conectarse. No es muy exagerado decir que el Quijote sea un antecedente lejano de este arte posmoderno. El hecho de que, como hemos visto en Bolívar, el Quijote es continuamente referido e imitado por los cineastas vanguardiastas evidencia nuestro argumento. NOTAS 1 Robert Stam, Reflexivity in Film and Literature: From Don Quixote to Jean-Luc Godard (New York: Columbia, 1992) p.l. 2 En realidad, en la primera escena el protagonista de la telenovela, Santiago Miranda estaba leyendo el Quijote esperando su actuación y dice "Don Quijote, el hombre cómo debería ser". 3 Christian Metz, "The Imaginary Signifier", Screen, Vol XVI (Summer 1975) p En efecto, en la película Santiago Miranda empieza a escribir otro final de la telenovela. La final de la película muestra que la escena final de la película es la ficción escrita por el protagonista mismo. 5 Robert Stam, Reflexivity in Film and Literature: From Don Quixote to Jean-Luc Godard (New York: Columbia UP, 1992) p.5.