Fronteras de la Historia ISSN: Instituto Colombiano de Antropología e Historia.

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1 Fronteras de la Hstora ISSN: Insttuto Colombano de Antropología e Hstora Colomba Pérez Pérez, María Crstna Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada Fronteras de la Hstora, vol. 17, núm. 2, 2012, pp Insttuto Colombano de Antropología e Hstora Bogotá, Colomba Dsponble en: Cómo ctar el artículo Número completo Más nformacón del artículo Págna de la revsta en redalyc.org Sstema de Informacón Centífca Red de Revstas Centífcas de Amérca Latna, el Carbe, España y Portugal Proyecto académco sn fnes de lucro, desarrollado bajo la ncatva de acceso aberto

2 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada Olga Isabel Acosta Luna. Fráncfort; Madrd: Iberoamercana-Vervuert, pp. María Crstna Pérez Pérez Unversdad de los Andes, Colomba La magen vsual, que durante décadas había sdo objeto exclusvo de la hstora del arte, en la actualdad se aproxma a otras áreas del conocmento: la pscología, la antropología, la etnología, la polítca, la socología, la economía y, prncpalmente, la hstora. Al gual que los textos escrtos, estas fuentes se han convertdo en nstrumentos fundamentales para los hstoradores que pretenden reconstrur las experencas culturales del pasado colonal. Se ha dcho, con razón, que las mágenes han sdo utlzadas en determnadas épocas como objetos de culto, como medos de adoctrnamento, como estímulos para la medtacón, como armas en los debates, como nstrumentos de conocmento, como herramentas de enseñanza y como medos prvlegados de persuasón. Para la Iglesa católca, por ejemplo, la magen desempeñó un papel prmordal en la produccón, crculacón y transmsón de la experenca de lo sagrado, puesto que la representacón vsual relgosa expresaba en una socedad dstntas deas de lo sobrenatural, dfundía el conocmento eclesástco, daba a conocer las doctrnas de la Iglesa y proporconaba dversos testmonos de la relgosdad popular, los mlagros y la devocón ndvdual (Burke; Gombrch). De ahí la mportanca de la magen como fuente hstórca en el campo académco de las cencas humanas y el esfuerzo de dstntos estudosos por reflexonar en torno a procesos que no se lmtan a los connotados por el térmno, el cual se vncula más comúnmente a valores estétcos. Las nvestgacones elaboradas en los últmos años nvtan a reflexonar sobre cuestones asocadas al soporte, los materales, la creacón, la dfusón, la crculacón y la relacón con el espectador de aquellas mágenes vsuales que proporconan múltples herramentas de conocmento para comprender a los grupos humanos.

3 Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 224 María Crstna Pérez Pérez Es en este contexto, que se relacona drectamente con la denomnada hstora cultural, en el que la edtoral Iberoamercana-Vervuert publca la obra de Olga Isabel Acosta Luna. Este lbro, resultado de la tess doctoral realzada por la autora en la Facultad de Flosofía de la Unversdad Técnca de Dresde, tene como propósto fundamental estudar el sgnfcado y el funconamento de las mágenes relgosas en el Nuevo Reno Granada, al gual que analzar el entorno arqutectónco y plástco en el que estos objetos crcularon debdo a la veneracón que recberon durante los sglos XVI, XVII, XVIII y XIX. El estudo de la magen le plantea de entrada un problema a esta hstoradora del arte, por el abanco tan amplo y dverso de mágenes que se le abre, pero tambén por cuestones relaconadas con la propa conceptualzacón de este objeto de estudo. Más aún cuando se hace referenca a la cultura vsual colonal, que abarca múltples elementos asocados al ámbto devoconal: relquas, grabados, altares portátles, pnturas, estampas, esculturas, retablos, papeles de medallas, cruces o cajones con santos. En este caso partcular, y como una manera de acotar el campo de análss, Acosta Luna se ocupa úncamente de las representacones denomnadas por los cronstas como mlagrosas mágenes, esto es, un tpo de mágenes de Crsto, de la Vrgen y de los santos, a las que se les atrbuyó poderes taumatúrgcos. De modo especal, el estudo abarca dversas pnturas y esculturas maranas que alcanzaron el estatus de hacedoras de mlagros, después de haber sdo trasladadas en el equpaje de los prmeros conqustadores, de arrbar a los poblados con el auxlo de las dstntas órdenes relgosas o de haber sdo elaboradas en el propo terrtoro neogranadno. En tal sentdo, las vírgenes de la Conqusta, del Rosaro, de Chqunqurá, del Campo, del Topo, de los Reyes, de Monserrate y de Monguí son algunos de los ejemplos utlzados en este lbro para hacer referenca a este tpo partcular de objeto devoconal. Esta nvestgacón se realzó a través de tres ejes de análss: uno hstórco, uno conográfco y, por últmo, uno arqutectónco y plástco. En el prmero, la autora se ocupa de reflexonar sobre la ntroduccón y el establecmento de las mágenes mlagrosas en el Nuevo Reno de Granada. Para ello hace un recorrdo hstórco por los antecedentes españoles de

4 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada la produccón, aparcón y culto de este tpo de representacón vsual. En especal, se detene en las leyendas narradas por varos autores sobre la Vrgen de la Antgua y la de la Reconqusta, las cuales relatan la manera en que estas mágenes maranas fueron esconddas, tapadas o desterradas de las cudades españolas que staban los musulmanes. Los estudos muestran que tras la Reconqusta española, por ejemplo en las cudades de Sevlla, Toledo y Granada, dchas vírgenes empezaron a reaparecer y este hecho, a consderarse mlagroso. En un segundo momento, en relacón con este eje se explca la entrada de objetos devoconales a las terras recén conqustadas, el enfrentamento con las creencas relgosas ndígenas, los camnos de conversón segudos tras los encuentros y los usos dados a tales benes por la socedad neogranadna. A partr de esa contextualzacón, la autora se ntroduce en el estudo de una de las mágenes mlagrosas más analzadas por la hstorografía local, que comenzó a manfestar su poder tras haber recobrado su forma pctórca en el sglo XVI: la Vrgen de Chqunqurá. Esto la lleva a preguntarse por el surgmento de su leyenda, por lo que se entendía en la época como un hecho mlagroso, por las formas de consagracón de las mágenes y por el papel de clérgos y conqustadores en el patrocno de su culto. En cuanto al eje conográfco, que ocupa gran parte de esta exploracón, se observa un nterés por descrbr e nterpretar aspectos asocados a las fguras, los símbolos y las temátcas de las mágenes mlagrosas. Por su clara formacón en hstora del arte, Acosta Luna realza un amplo recorrdo por los íconos relgosos de Orente y Occdente, con el objeto de determnar los cmentos de la conografía marana en el Nuevo Mundo. S ben este punto resulta nteresante para conocer el tpo de magen que crculó por el orbe católco, la autora no se aleja de lo ya planteado desde medados del sglo XX por dstntos hstoradores como Francsco Gl Tovar, Santago Sebastán, Gabrel Graldo Jaramllo y Martha Fajardo de Rueda. En el texto contnúa presente la dscusón sobre la nfluenca de la pntura devoconal europea en las mágenes neogranadnas, lo que lleva a ubcar la produccón local dentro de las prncpales correntes artístcas occdentales, como la talana, la flamenca o la morsca. Al msmo tempo, Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 225

5 Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 226 María Crstna Pérez Pérez se retoma el estudo de grabados y estampas, que Sebastán había desarrollado con ampltud, a fn de subrayar la funcón pedagógca que los objetos relgosos locales cumpleron para los artífces neogranadnos del sglo XVII. Al centrarse en estos aspectos, la nvestgacón olvda que las gentes no tenen una acttud pasva frente a las mágenes y que, por ende, pueden establecer dversas y complejas relacones con estas. Además, tambén pasa por alto que la magen sufre múltples procesos de cambo en relacón con el sgnfcado que se le da y en su propa representacón pctórca, según contextos dferentes de localzacón, momentos hstórcos de funconamento y formas de apropacón por dversos actores colectvos e ndvduales. De otro lado, la autora se adentra en un problema poco trabajado por la hstorografía que se ocupa de este tema: la crculacón de benes relgosos desde los puertos españoles de Sevlla y Cádz haca los de las Indas occdentales. Tenendo en cuenta los límtes de esta nvestgacón, se descrbe úncamente el traslado de mágenes maranas en el equpaje de los prmeros conqustadores, el envío de grabados desde los puertos españoles menconados y el papel desempeñado por los artífces de magnería en este tpo de negoco transatlántco. La fnaldad de tal recuento es ntroducrse en el tema de las mágenes mlagrosas españolas que arrbaron a los terrtoros recén conqustados por la monarquía católca. La Vrgen extremeña de Guadalupe, la madrleña de la Soledad y la de la Antgua de Sevlla no solo llegaron en los navíos que traían a conqustadores, frales, famlas y aventureros, sno que además fueron reproducdas por pntores locales, ubcadas en altares y reconocdas por obrar mlagros. En conclusón, se plantea que el tránsto transatlántco de estos objetos maranos posee dos característcas dferentes. Por un lado, la crculacón en la Nueva Granada de dversas pnturas y esculturas realzadas en España (prncpalmente en Sevlla). Y por otro, la reproduccón local de mágenes españolas y europeas a partr de los modelos pctórcos, escultórcos y gráfcos que llegaron desde los prmeros años de la Conqusta. Los aspectos esbozados aportan elementos nteresantes a la dscusón de un tema que en las últmas décadas ha ocupado la atencón de

6 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada los estudosos de la cultura vsual en Hspanoamérca. Pero no se logra mostrar la complejdad del problema cuando se reduce a estas dos úncas característcas. Para comprender la crculacón de los objetos relgosos que pasaron de un lado del Atlántco al otro es necesaro, además, segurle la psta a las múltples etapas de ese tránsto, a los actores socales que facltaron su movmento (la corona, los comercantes, las órdenes relgosas, los artífces y los partculares) y a los lugares europeos en los que se produjeron las mágenes y desde los cuales se realzó su traslado (Flandes, Ámsterdam, Veneca o Roma). Se trata de dversos agentes y espacos que, como protagonstas o smples partcpantes, ntegraron e ntentaron capturar el comerco de estos benes en el Nuevo Mundo. Sn duda, esto fue facltado por la reduccón de las dstancas que el poderío comercal alcanzado por la monarquía católca permtó. En vrtud de esa reduccón, lo desconocdo se volvó famlar, lo naccesble un poco más dsponble y lo lejano se aproxmó cada vez más por las nterconexones que generó la carrera de Indas (Gruznsk 345). Por esta razón, no es extraño que los pntores neogranadnos apoyaran la elaboracón de sus pnturas en los grabados de los hermanos Werx o del taller de Pedro Pablo Rubens; que llegaran a los poblados de la provnca de Santafé crstos de marfl elaborados en Flpnas y trasportados desde Nueva España; que centos de estampas de la cudad francesa de Lyon nundaran los templos del Vrrenato del Perú; que pnturas del florentno Vcente Carducho vajaran en galeones a la cudad de Portobelo, o que pequeñas relquas de las catacumbas romanas hceran parte del equpaje de los jesutas que se drgían a las provncas de Quto. Fnalmente, en lo referente a la edfcacón de espacos y a la reproduccón de la magen, este texto se ocupa de un tema fundamental para comprender la relacón entre las representacones y sus creyentes: los entornos arqutectóncos que se gestaron y estuveron a su dsposcón. Dos aspectos son señalados en relacón con la construccón de estos lugares. Por un lado, las glesas se fundaron en honor a una advocacón, procedente en la mayoría de los casos de un taller español, que posterormente sería reconocda como mlagrosa, y, por el otro, cuando una magen se manfestó Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 227

7 Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 228 María Crstna Pérez Pérez como receptáculo de poderes taumatúrgcos, las autordades veron la necesdad de establecer santuaros para su veneracón. Al margen de estas consderacones, se hace evdente que en torno a estos lugares se nstauró un mcromundo al servco del culto de una magen marana, lo que permtó que las nsttucones relgosas y la poblacón se veran benefcadas económcamente por la construccón de recntos sacros. Pero esta forma de devocón no se quedaba en la organzacón exteror de templos, sno que trascendía a aspectos nterores como la construccón de retablos, la ereccón de camarnes y la elaboracón de ndumentara postza (vestdos, telas, cabellos, joyas). En cuanto a la reproduccón de la magen mlagrosa, tema del últmo capítulo de este eje de análss, la autora efectúa nteresantes reflexones sobre las copas de las representacones maranas más veneradas, realzadas por pntores santafereños; sobre la nclusón de la magen en el ámbto de la devocón prvada de la socedad neogranadna; sobre los elementos que al ser tocados por estas obras mlagrosas adqurían el carácter de relquas, y sobre la elaboracón de mágenes votvas como una forma de agradecmento por algún favor conceddo a una advocacón marana. Desde estos tres frentes, que pueden multplcarse en muchos más, la autora establece contnuas relacones hstórcas, culturales, relgosas y socales con otros epcentros de elaboracón de mágenes católcas. Aunque no ocupa la atencón de esta nvestgacón, se alude en algunas págnas a la produccón de estos objetos en las provncas de Quto, el Vrrenato del Perú y el de Nueva España. Evdentemente, y como ha sdo analzado por otros hstoradores del arte, en estos espacos se deron una sgnfcatva fabrcacón y un mportante mercado de benes relgosos facltados, en gran parte, por los talleres que las órdenes relgosas, las autordades reales y los artífces españoles y crollos estableceron tempranamente. Tambén ncdó en esto la consderable demanda de obrajes de magnería relgosa hecha por clentes de los centros urbanos y de los espacos más alejados. Así, y no solo en vrtud del traslado de mágenes devoconales europeas, el Nuevo Reno de Granada se fue poblando de símbolos, representacones y edfcacones devoconales desde el sglo XVI: templos,

8 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada cruces en lo alto de la montaña, ermtas, mágenes en madera y yeso de santos y de vírgenes, pnturas murales y lámnas mpresas pegadas en las paredes, al punto que el decorado local y de los aposentos prvados parece haber estado consttudo prncpalmente por las mágenes crstanas en todas sus varantes. Para que esta hstoradora hubera llegado a este tpo análss no bastó con la recoleccón de fuentes vsuales, trabajo que por lo demás requere un conocmento amplo de la conografía marana, sno que debó apoyarse en un jucoso estudo de fuentes escrtas. Segur el rastro del envío de mágenes relgosas, de la veneracón que recberon en dstntos poblados y de la edfcacón de santuaros en su honor es posble cuando se da un acercamento a aquellos documentos elaborados por dversos ndvduos en la época de estudo. En prmer lugar, fueron esencales los documentos eclesástcos custodados en archvos y bblotecas, como textos conclares, escrtos snodales, nventaros, testamentos, documentos judcales, censos, devoconaros, novenas e hstoras edtadas de mlagrosas mágenes. Pero, sn duda, las protagonstas de esta reflexón son las cróncas que sobre la conqusta y la colonzacón del Nuevo Reno de Granada elaboraron relgosos y lacos españoles y neogranadnos. A pesar de la dfcultad que entraña la necesdad de estudar estas fuentes, tenendo en cuenta los lugares de produccón de los escrtos, las nsttucones culturales que nfluyeron en su redaccón, la funcón socal que cumplía el relato y la recepcón del testmono propamente dcho, no dejan de ser relevantes para el trabajo de aquellos hstoradores que buscan conocer aspectos de una época a través de los ojos de uno de sus protagonstas. Entre esas fuentes están las obras de un Juan de Castellanos, Pedro de Aguado, Pedro Smón, Lucas Fernández de Pedrahta, Pedro Tobar y Buendía, Alonso Zamora y Rafael Serna, ctados por Acosta a lo largo de este escrto. En síntess, el texto reseñado en estas págnas, Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada, representa un aporte valoso a las dscusones que en la actualdad se están dando en Colomba sobre la mportanca de la magen como fuente hstórca. S ben el tema de la representacón relgosa ha estado presente en las reflexones de hstoradores Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 229

9 Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 230 María Crstna Pérez Pérez del arte y de dstntos estudosos de las cencas humanas en el país, muy pocos han pretenddo r más allá de la smple descrpcón de los prncpales artífces y sus obras más destacadas o del análss de las mágenes colonales concebdas como benes culturales y patrmonales. Aún faltan trabajos que ayuden a comprender tanto el papel desarrollado por los autores de magnería relgosa y las estrechas relacones que establecían con sus contemporáneos, como el uso, el sgnfcado y la apropacón de las mágenes devoconales en una determnada socedad. En este sentdo, Olga Isabel Acosta Luna abre nuevos camnos para posterores nvestgacones que no solo se ocupen de las mágenes maranas más reconocdas en el ámbto hstorográfco, sno que además se adentren en la socedad colonal para estudar aquellas representacones de santos, crstos y mártres que tambén alcanzaron el estatus de mlagrosas en el Nuevo Reno de Granada y que son desconocdas completamente. ra propósto de la reseña de María Crstna Pérez Pérez sobre Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada Olga Isabel Acosta Luna Museo Colonal, Bogotá, Colomba Quero prmero agradecer la jucosa lectura realzada por María Crstna Pérez, que arroja una sere de elementos que permten establecer algunas nquetudes y crítcas nteresantes en torno a m recente publcacón, Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada. Deseo referrme a ellas brevemente. La reseña presenta una prmera dscusón llamatva y en boga. Se trata de la utlzacón de la magen como fuente hstórca. En el caso de la obra comentada, s ben la magen consttuye la fuente más mportante, es

10 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada sobre todo el prncpal problema que se pretende estudar; de ahí que un tema como el amplo análss conográfco propuesto en la segunda parte del lbro pueda resultar un tanto desconcertante. Según Pérez, esa seccón no se aleja de lo ya planteado desde medados del sglo XX por dstntos hstoradores como Francsco Gl Tovar, Santago Sebastán, Gabrel Graldo Jaramllo y Martha Fajardo de Rueda. Dsento en este punto. En la actualdad, en círculos académcos locales ocupados de temas relaconados con la magen colonal exste un certo desdén haca lo que se suele denomnar la hstora del arte tradconal, sn que sea claro a qué se refere esto. Y más en un país como Colomba, que solo desde este año cuenta con un programa de pregrado en hstora del arte. En el grupo de los que practcan la hstora del arte podemos nclur a autores como Santago Sebastán, quen desde la década de 1960 trazó certas drectrces sobre lo que podía ser un método conográfco e conológco aplcado en el campo del arte colonal neogranadno. Sn embargo, él no soluconó el problema y no nos legó una conografía (como sí lo vene hacendo desde hace varos años Héctor Schenone 1 ), la cual habría sdo de gran utldad. De esta manera, la segunda parte de Mlagrosas mágenes maranas la conográfca trata de responder sobre todo a una carenca local, dada la nexstenca de estudos rgurosos que establezcan las bases para comprender qué representan las mágenes colonales exstentes en coleccones públcas y prvadas. Lo msmo podríamos decr de problemas como los de la datacón, la autoría, las técncas y las procedencas, por ctar solo algunas problemátcas báscas, quzá no tan atractvas, que pueden ser planteadas a la hora de abordar la magen como objeto de estudo y no solo como fuente hstórca. Soy una convencda de que para estructurar un sóldo conocmento de la magen colonal en el Nuevo Reno de Granada (y en general) es necesaro tratar tambén problemátcas báscas que nos r 1 Héctor Schenone publcó en el 2008, un año después de la fnalzacón de m tess doctoral, un lbro dedcado a la conografía marana colonal en Amérca Latna. Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 231

11 Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 232 María Crstna Pérez Pérez srvan de cmento para entender con mayor frmeza problemas dversos en torno a su concepcón, elaboracón, consumo y recepcón. Pérez anota además, sobre la segunda parte del lbro, que olvda [ ] que las gentes no tenen una acttud pasva frente a las mágenes y que, por ende, pueden establecer dversas y complejas relacones con estas. Además, tambén pasa por alto que la magen sufre múltples procesos de cambo en relacón con el sgnfcado que se le da y en su propa representacón pctórca, según contextos dferentes de localzacón, momentos hstórcos de funconamento y formas de apropacón por dversos actores colectvos e ndvduales. A m favor, debo decr que la recepcón de las mágenes no era la preocupacón prncpal en esta segunda parte, cosa que sí ocurre en la tercera. Sn embargo, acá se analza el fenómeno conográfco de la magen mlagrosa marana en cuanto fenómeno local que s ben sgue modelos mportados, los adapta conográfcamente en cada lugar, como es el caso de las vírgenes de Chqunqurá, de la Candelara, de las Neves y partcularmente de los retratos pntados a partr de esculturas veneradas en España y en el Nuevo Reno. Sobre la comercalzacón de las mágenes, estoy de acuerdo con Pérez. Lo hecho en Mlagrosas mágenes maranas es tan solo un bosquejo de la stuacón y no logra mostrar la complejdad del problema de la crculacón de los objetos relgosos, pero, sobre todo, darles la dmensón de fenómeno comercal que tenían. De esto se han preocupado recentemente especalstas que abordan la cultura materal (Rvas). Espero que trabajos futuros enfocados en este tpo de problemátcas permtan comprender mejor este y otros fenómenos, no solo en el caso de las mlagrosas mágenes, sno de la magen colonal en general.

12 Mlagrosas mágenes maranas en el Nuevo Reno de Granada rb blografía Burke, Peter. Vsto y no vsto: uso de la magen como documento hstórco. Barcelona: Crítca, Impreso. Gombrch, Ernst. Los usos de las mágenes: estudos sobre la funcón socal del arte y la comuncacón vsual Méxco D. F.: Fondo de Cultura Económca, Impreso. Gruznsk, Serge. Las cuatro partes del mundo. Hstora de una mundalzacón. Méxco D. F.: Fondo de Cultura Económca, Impreso. Rvas, Jorge. El moblaro enconchado en el Vrrenato del Perú. Memoras de las VI Jornadas de Arte, Hstora y Cultura Colonal: Asa en Amérca. CD-ROM. Bogotá: Museo Colonal; Museo Iglesa Santa Clara, Schenone, Héctor. Iconografía del arte colonal: Santa María. Buenos Ares: Educa, Impreso. Vol / 2012 r pp r Fronteras de la Hstora 233