LA SALUD DEL BOSQUE EN LOS PARQUES NACIONALES DE ESPAÑA

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1 LA SALUD DEL BOSQUE EN LOS PARQUES NACIONALES DE ESPAÑA GERARDO SÁNCHEZ PEÑA * & FRANCISCO JAVIER FERNÁNDEZ PÉREZ** * DIR. GENERAL DE CONSERVACIÓN DE LA NATURALEZA. GRAN VÍA DE SAN FRANCISCO, MADRID. ** ARBOL TÉCNICOS S.L. C/CIUDAD DE ROMA, MEJORADA DEL CAMPO (MADRID). RESUMEN La salud de los sistemas forestales integrados en los Parques Nacionales de España y montes gestionados directamente por el Estado, así como la dinámica de los principales agentes dañinos, es estudiada de un modo continuo desde 1986 a través de redes de vigilancia. Se presenta el método de seguimiento y principales sucesos acaecidos entre 1986 y 1996, así como su evolución. P. C. : Parques Nacionales, estado de salud de los bosques, plagas, enfermedades, redes de seguimiento. SUMMARY Forest health in national parks and other reserves of Spain as well as dinamics of major damaging agents are monitored by advising networks from Monitoring methodology and most relevant events between 1986 and 1996 are showed, in adition to evolution trends. K.W.: Natinal Parks, Forest health, pests, diseases, monitoring networks. INTRODUCCIÓN En coincidencia con la instalación de la Redes Europeas de seguimiento de Daños en los Montes, se pusieron en marcha en España durante 1986 las Redes locales de Ecosistemas Singulares ("Red Parques"). Consisten en una malla cuadriculada de 4 x 4 km., donde se aplica la misma ficha de campo que en el Inventario Europeo de Daños Forestales (CE, 1987), con la particularidad de hacer un mayor hincapié en las plagas y enfermedades forestales clásicas. Actualmente esta Red se extiende por todos los Parques Nacionales y Montes gestionados directamente por el Estado, abarcando la mayoría de los ecosistemas forestales presentes en España. Su revisión es semestral, generándose cada año un informe que analiza en profundidad la evolución del estado de salud de las masas forestales objeto de seguimiento. MATERIAL Y MÉTODOS Por definición una Red Local sigue los plincipios de la Red Europea CE de Nivel 1, su fin es analizar el estado de salud del bosque mediante una serie de muestreos sistemáticos. No obstante el enfoque varía en dos aspectos: 443

2 - la intensidad de muestreo es mucho mayor (malla de 4 x 4 km en vez de 16 x 16 km), ubicándose la Red directamente sobre formaciones forestales específicas; - la ficha de campo añade nuevos datos a los parámetros habitualmente medidos y recoge observaciones específicas en función de la localidad y agentes que interaccionan. Aparte se mantienen los cuantificadores clásicos del estado de salud forestal (defoliación y decoloración). Los Parques Nacionales de Doñana, Cabañeros, Picos de Europa, Ordesa, Teide, Cabrera, Garajonay y Caldera de Taburiente, el espacio protegido de Aigüestortes y los montes de Valsaín, Quintos de Mora, Lugar Nuevo, Selladores-Contadero y La Almoraima constituyen la base física sobre la que se efectua el seguimiento, que consiste en dos visitas anuales: - Principal: en coincidencia con la época próxima a la máxima eclosión de agentes dañinos para el arbolado de la zona. Esta época varía en función de la vegetación y de las posibles dinámicas poblacionales. Durante el muestreo se revisan en profundidad los principales agentes dañinos existentes en los puntos que constituyen la Red. Cada punto está formado por 24 árboles representativos que son estudiados todos los años, al tiempo que se muestrea el entorno inmediato. Complementariamente se recorren una serie de transectos dentro de las zonas donde se toma nota del aspecto del arbolado y de la presencia e intensidad de los daños. - Complementaria: muestreo realizado justo después de las épocas de ataque de ciertos insectos o antes de la posible eclosión de nuevos daños. Tiene por objeto evaluar el impacto causado, la respuesta del arbolado, y prevenir posibles situaciones de desequilibrio. También suele utilizarse como predictor de la evolución de ciertos agentes el año siguiente. Durante este segundo muestreo son recorridos y muestreados transectos previamente selecionados. PRINCIPALES RESULTADOS * Parque Nacional de Doñana (zona litoral, Huelva).- El pinar de piñonero, los alcornoques y su monte bajo circundante, la vegetación de ribera y el sabinar son los sistemas objeto de un especial seguimiento mediante una red fonnada por 28 puntos de vigilancia y sus transectos. Los trabajos comenzaron en 1986, siendo las épocas usuales de muestreo el comienzo del verano y el final del otoño. Los principales acontecimientos sanitarios desde entonces han sido: -Pinar: ataques de procesionaria (Thaumetopoea pityocampa), endémica, presentando máximos durante ; defoliaciones por el hongo Thyriopsis halepensis (endémica, máxima en 1994 y 1995), daños agudos por el pulgón Paleococus fuscipennis (1992, 1993, nuevo incremento en 1996), mortandad por los escolítidos Orthotomicus erosus y - en menor medida - Tomicus destruens ( , sobre todo durante el último año tras la sequía sufrida). - Alcornocal: presencia endémica de Coraehus florentinus en ramas y del hongo Hypoxilum mediterranewn en madera decrépita. Muerte en rodales de arbolado joven por sequía con episodios de "muerte súbita" ( ), que también ha sido detectada en los álamos y otros árboles de la ribera. - Sabinar: fuerte defoliación interna, sin moltandad, por sequía y vientos de Levante (1995). * Finca de La Almoraima (Sierra de los Alcornocales, Cádiz).- El alcornocal constituye la vegetación arbórea predominante de este espacio, donde en 1989 se iniciaron los muestreos sobre 11 puntos y sus transectos. Desde entonces destaca, aparte de la presencia endémica de C. florentinus, Coraehus undatus eh. mediterranewn, la muerte súbita de rodales que se inició en 1991, y que desde 1993 continua produciendose hasta hoy. Se ha detectado un mayor nivel de mortandad en 1996, concentrándose con especial virulencia en zonas del monte donde además se detecta la presencia del escolítido Platypus cylindrus. Destacan los daños por sequía de Un fuerte ataque del defoliador Lymantria dispar ha sido detectado en 1994 y * Fincas de Lugar Nuevo y Selladores-Contadero (Sierra Morena, Jaén).- Junto al encinar como vegetación predominante, existen repoblaciones de pino piñonero y resinero, así como 444

3 alisedas, madroñeras y alcornocales como elementos más representativos. En 1989 se iniciaron las prospecciones en estas dos fincas contiguas, abarcando un total de 12 puntos y sus transectos. - Encinar: Los daños de C. florentinus y las "escobas de bruja" (Thaphrina kruckii) son endémicos; detectándose también fuertes ataques de pulgones con exudaciones e importantes defoliaciones asociadas (1991), defoliaciones por Tortrix viridana (1993 y 1994) Y altas mortandades por sequía, con frecuentes rodales con "muerte súbita" (1994, 1995 y en menor medida 1996). En 1996 se observa un incremento de los daños por perforadores en pequeños rodales (Selladores), sobre árboles ya debilitados por la sequía de En los alcornocales además es endémica la presencia de H. mediterraneum. - Pinar: En la zona de piñonero se han detectado muertes por T. destruens y o. erosus de forma esporádica hasta 1995, generalizandose los daños en A partir de 1992 se observan microfilias generalizadas y fuertes infestaciones de la cochinilla Leucaspis pini. El pino resinero sufre continuas m0l1andades por escolítidos desde 1992, presentando crecimientos ínfimos en La procesionaria, más concentrada en esta especie, presenta máximos en y Vegetación de ribera: puntisecados (1991, 1992 Y 1996). Mortandad por sequía (1996). - Madroñeras: mortandad de corros por sequía (1995, 1996). * Finca de los Quintos de Mora (Montes de Toledo, Toledo).- En 1989 se iniciaron los muestreos en 4 puntos y transectos, sobre la vegetación existente de quercíneas y pinar, con los siguientes resultados más relevantes: - Quercíneas (encina y rebollo): Es constante la presencia de C. florentinus en ramas. Los primeros síntomas de "seca" de quercíneas se detectan en 1991, observándose fuertes daños atribuibles a la sequía en 1994, y sobre todo en 1995, mejorando algo en Los ataques del defoliador T. viridana se incrementan entre 1992 y 1993, decayendo después. - Pinar: el piñonero presenta de forma generalizada defoliaciones por el hongo T. halepensis, así como por procesionaria que presenta máximos en 1990, y nuevos incrementos de población en La fuel1e presencia de escolítidos en 1989 decrece hasta Desde entonces el nivel de daños producidos por Ips sexdentatus, T. destruens y o. erosus se incrementa hasta 1995 en adición a los efectos de la sequía, que se han hecho notar con virulencia estos años, principalmente en el pino resinero. * Parque Nacional de Cabañeros (Montes de Toledo, Ciudad Real).- Se iniciaron los muestreos en 1996 sobre 15 puntos y sus transectos, en un Parque recientemente creado cuya vegetación principal es el monte mediterráneo de madroño y quercíneas, junto a algunas repoblaciones de pino resinero. Se aprecia en general una buena recuperación del arbolado tras los estragos de la sequía de los últimos años, aún visible en árboles muertos anteriormente. Solo se han detectado corros esporádicos de quercíneas secas, asi como niveles altos de procesionaria en el pinar. * Monte de Valsaín (Sierra de Guadarrama, Segovia).- La vegetación predominante es el pinar de silvestre y el rebollar. Desde 1989 se vienen evaluando 15 puntos de muestreo y sus transectos. - Pinar: Como daños endémicos han de citarse los hongos Fomes sp., Peridermium pini y el muérdago. Esta planta parásita constituye un importante factor de daños, notándose un incremento constante en sus niveles de daño desde También es constante la presencia de escolítidos, con periódicas explosiones poblacionales (1990 y 1991, 1994 Y 1995). Los daños provocados por las fuertes nevadas acaecidas a principio de 1996 supondrán nuevos incrementos en las infestaciones producidas por Tomicus piniperda e Ips acuminatus. - Rebollar: Es endémica la presencia de oidio, con fuertes ataques en 1990 y 1993, junto a daños producidos por T. viridana y otros defoliadores. Daños por heladas tardías en

4 - Espino de fuego y otras rosáceas: Sufre periodicas defoliaciones causadas por el lepidóptero Aglaope infausta ( 1990, 1993, 1996). Con carácter general han de citarse la sequía de los veranos de 1992 y 1995, las heladas tardías de la primavera de 1995 y los daños por nieves y vendavales del invierno , así como los continuos daños producidos por la sal vertida en la carretera que atraviesa este monte. * Parque Nacional de Picos de Europa (Picos de Europa, Asturias-Cantabria-Castilla León). El bosque de frondosas mixto atlántico junto a los hayedos conforman la mayor parte de la vegetación arbórea existente, que viene siendo muestreada desde 1986 mediante una red de 20 puntos y transectos. - Bosque atlántico: las alisedas han sufrido un fuerte "die-back", relacionado con la falta puntual de agua y un sustrato calizo entre 1987 y 1992, con una ligera mejoría a partir de Además sufren defoliaciones habituales por el coleóptero Agelastica alni. Localmente es relevante la presencia del hongo Armillariella mellea. En 1996 se detectó grafiosis agresiva en los olmos. - Hayedo: Sufre llamativas defoliaciones periodicamente (1987, 1992, repunte en 1996) por Erannis defoliaria. La presencia endémica de Rhynchaenus fagi incrementó su nivel de daños espectacularmente en 1992, y se mantuvo alto entre 1993 y 1995, en combinación con accidentes climáticos y, cada vez más, con pulgones (Phyllaphis fagi). Puntualmente se han detectado hongos (Nectria ditissima). - Nogaledas: Sufren una fuerte infestación crónica por el hongo Marssonina juglandis. * Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (Pirineo, Huesca).- Los 8 puntos de muestreo y transectos que cubren desde 1986 el Parque se concentran en las coníferas pino silvestre y negro, y el abeto, elementos arbóreos principales de la zona junto a los hayedos. - Pinar de silvestre y negro: La presencia habitual de los escolítidos T. piniperda e l. acuminatus presentó mayores daños en 1992 y un fuerte incremento en 1996 sobre el arbolado fuertemente dañado por los aludes. La procesionaria muestra grandes variaciones en dispersión e intensidad de daños en función de las temperaturas mínimas, incrementando sus ataques entre 1989 y 1993; en 1995 comienzan de nuevo a percibirse daños. - Abetar: la presencia del muérdago es habitual y localmente importante, con mayor incidencia que sobre el pino silvestre. Desde 1993 se aprecian graves defoliaciones que han aumentado su intensidad y extensión en los abetares de la comarca, causadas por el lepidóptero minador Epinotia subsequana. Es habitual la presencia de Hypodermella nervisequia. - Hayedo: Se han detectado fuertes ataques de pulgones (1990 y 1995) Y del minador R.fagi. * Aigüestortes y Lago Sant Maurici (Pirineo, Lérida).- Desde 1986 se realiza el seguimiento de 14 puntos y transectos en esta zona, sobre los abetares, pinares de silvestre y negro, hayedos y robledales. - Abetar: presenta daños endémicos de H. ne1visequia, y del hongo formador de tumores en tronco y ramas Melampsorella caryophyllacearum. El muérdago, los escolítidos y en zonas encharcadas el hongo A. mellea son agentes dañinos habituales. En 1988 se apreció un fuerte "dieback" relacionado con estreses hídricos puntuales que continuó hasta El episodio volvió a repetirse en Pinar de silvestre y negro: son endémicos los daños por escolítidos (con mayor incidencia entre 1993 y 1995), así como los hongos Cenangium ferruginosum, P. pini, y Herpotrichia juniperi en las zonas de mayor altitud. Los daños crónicos de procesionaria son más apreciables entre 1991 y Frondosas: las defoliaciones de Yponomeuta rorellus son periodicamente graves ( y 1995). Asimismo desde 1995 se nota un incremento de los daños procudidos en el haya por P. fagi y R. fagi. 446

5 * Parque Nacional del Teide (Tenerife).- Los 10 puntos de muestreo y los transectos se instalaron en 1993 abarcando los bosques de pino canario y las formaciones vegetales de matorral de altura (Spartocytisus supranubius). - Pinar: Se aprecian daños localmente llamativos producidos por el defoliador Macaronesia fortunata, junto a ataques crónicos de P. notatus y Brachideres rugatus, nunca fuertes. En 1994 se detectaron daños mecánicos importantes por aludes, y una pérdida de vitalidad general durante 1995 debido a la falta de agua. - Retama de altura: Soporta de forma crónica daños producidos por Acmaedora cisti (perforación y abortamiento de ramillos), así como la existencia de poblaciones importantes de chupadores. * Parque Nacional de Garajonay (La Gomera).- El dominio vegetal de la Laurisilva y el Monteverde son muestreados desde 1993 mediante una red de 6 puntos de muestreo y transectos. El daño más aparente es el producido por las roeduras de las ratas en los brotes terminales de los viñatigos, que llega a abortar el crecimiento de los mismos. Asimismo localmante se produce la mortandad de lauráceas: primero su tronco principal y a continuación los chirpiales resultantes. Es el fenómeno denominado "vareado" cuyo origen no es claro y se relaciona con la presencia de hongos. Desde 1995 se aprecian daños por déficit hídrico. * Parque Nacional de la Caldera de Taburiente (La Palma).- El pino canario es el elemento dominante en esta zona, que es seguida desde 1993 mediante 6 puntos y transectos. El defoliador M. fortunata está presente pero sin generar daños de importancia. Localmente se aprecian daños crónicos en las yemas terminales, producidos por Dioryctria nivalensis, así como alguna perforación esporádica debida a curculiónidos. En las zonas de laurisilva se observan los ataques en ramas producidos por roeduras de rata. * Parque Nacional de Cabrera (Islas Baleares).- Desde 1995 se viene realizando un seguimiento del estado general del arbolado, pino carrasco en su totalidad. La procesionaria del pino se constituye en el principal agente dañino, con niveles puntualmente altos, que en un futuro próximo se intentarán controlar mediante el uso de feromonas. CONCLUSIONES La "Red Parques" constituye por su propia definición un primer acercamiento al conocimiento de la problemática que puede darse en ecosistemas representativos de amplias zonas forestales, asi como su evolución. Además, debido a su carácter sistemático y continuo, se ha constituido en un elemento muy útil para la sanidad forestal en su sentido clásico: los datos aportados constituyen una auténtica "Red de A visos" fitosanitaria en el ámbito forestal, que es actualizada año tras año. El papel social y educativo, y el interés conservacionista que reunen los ecosistemas forestales objeto de seguimiento son elementos adicionales que refuerzan la importancia de este tipo de estudios. AGRADECIMIENTOS Los autores del presente trabajo quieren agradecer la colaboración prestada por el personal técnico y guardería de los Parques Nacionales y Fincas, que han facilitado la realización de los trabajos y han proporcionado información valiosísima sobre las anomalías observadas en el estado sanitario del arbolado, y sus posibles causas. REFERENCIAS BIBIOGRÁFICAS CEE, (1987): "Reglamento (CEE) n 1696/87". Diario Oficial de las Comunidades Europeas. L 161: