El MGAP y la huella de carbono de productos de exportación: una estrategia en defensa de la competitividad.

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1 El MGAP y la huella de carbono de productos de exportación: una estrategia en defensa de la competitividad. Ing. Agr. Walter Oyhantçabal 1 El comercio internacional de bienes de origen agropecuario hacia mercados de países desarrollados se está viendo crecientemente relacionado con exigencias en materia de impactos ambientales, sustentabilidad y mitigación del cambio climático. En este sentido, intereses comerciales y proteccionistas pueden estar enmascarados detrás de las consideraciones ambientales. Al mismo tiempo, trabajar para destacar el valor agregado ambiental de productos uruguayos puede ser una oportunidad de diferenciación para acceder a mercados más exigentes. Desde junio de 2010 un grupo interinstitucional, liderado por el MGAP (con INIA, LATU y Facultad de Agronomía) lleva adelante estudios sobre huella de carbono de las principales cadenas agro-exportadoras. Los principales hallazgos se resumen en este artículo. 1. INTRODUCCIÓN El reconocimiento de las amenazas del cambio climático y de sus relaciones con actividades y comportamientos humanos es ya generalizado. Es frecuente la presencia en los medios masivos de comunicación de los países más desarrollados, de información sobre la contribución que hacen los alimentos al problema del cambio climático. En los hechos, aunque el petróleo y el carbón son los principales responsables del cambio climático, se han agregado recientemente, la deforestación, el metano y el óxido nitroso de la producción de ciertos alimentos, entre los que destacan las carnes rojas (vacuna y ovina) los lácteos y el arroz: estos tres muy importantes rubros de exportación del Uruguay. Un controvertido informe de FAO de 2006, llamado La larga sombra del ganado, señaló que las actividades pecuarias tienen un impacto significativo en todas las esferas del ambiente, incluido el cambio climático. El informe estimó que a nivel global el sector pecuario es responsable por 9 por ciento de todo el CO 2, 37 por ciento del metano y 65 por ciento del óxido nitroso, los tres principales gases de efecto invernadero. 1 Director de la Unidad Agropecuaria de Cambio Climático, OPYPA-MGAP

2 Un antecedente directo de la asociación comercio-cambio climático, nació en el Reino Unido y se le conoció como food-miles, o sea las millas por transporte de cada producto, buscando asociar en la mente del consumidor largas distancias de transporte de productos importados con las consiguientes emisiones de gases de efecto invernadero. Por un lado, la huella de carbono está siendo progresivamente incorporada por grandes cadenas de supermercados de Europa (Tesco, Casino) y de Estados Unidos (Wal-Mart). Por otro lado Francia adoptó la Ley Grennelle que comenzó a aplicarse a escala piloto en julio de 2011, regulando la información sobre la intensidad de emisiones de carbono de un conjunto de productos, y Alemania está implementando su programa piloto de consumo responsable climáticamente. De esta forma, lo que nació como normas privadas parece estar pasando progresivamente a ámbitos de regulación gubernamental. Por el momento los productos de exportación de Uruguay no están siendo afectados por la huella de carbono. No obstante, es esperable que los productos que más se asocian con la intensidad de emisiones (como carnes y arroz) y otros dirigidos a nichos de mercado (frutas de calidad, vinos) podrían enfrentar requisitos de acceso a mercados o segmentos de mercado capaces de diferenciar productos por este atributo. 2. QUÉ ES LA HUELLA DE CARBONO? La huella de carbono puede definirse como la medida de la cantidad de emisiones totales de gases de efecto invernadero (GEI) producidas directa o indirectamente por personas, organizaciones, productos, eventos o Estados. Calcula, utilizando aproximaciones de ciclo de vida, todas las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de un producto o servicio, a lo largo de toda su cadena de valor. Como existen varios gases de efecto invernadero y tienen diferente poder de calentamiento global, se suele convertir todos los gases en una unidad llamada CO 2 equivalente (CO 2 -e). De esta manera la huella de carbono se expresa habitualmente como kilos de CO 2 -e por unidad de producto (por ejemplo kilos de carne o de arroz). La huella de carbono contabiliza emisiones directas e indirectas. Las emisiones directas son aquellas que se generan en fuentes de propiedad de la empresa o son controladas por ella; por ejemplo: las emisiones de metano que resultan de inundar una chacra de arroz o las de CO 2 que resultan del uso de gasoil en la maquinaria para tareas manejo de suelos y cultivos. Las emisiones indirectas son aquellas que la empresa no controla directamente; por ejemplo las emisiones por contratación de servicios de trasporte.

3 Los análisis de ciclo de vida permiten la identificación de los puntos críticos para reducir los impactos ambientales, tanto en las cadenas de proveedores, como en los procesos internos para las distintas fases del proceso productivo: abastecimiento, producción, industrialización, empaque, transporte, distribución y disposición de residuos. Asimismo, permiten visualizar las implicancias de distintas tecnologías en términos de intensidad de carbono y los balances ambientales. Cuando el análisis de la huella de carbono se extiende a la huella del agua y a otros impactos ambientales se posibilita un potente análisis holístico de la performance ambiental de una cadena, de las posibilidades de minimizar impactos negativos y de resaltar el valor agregado ambiental. El cálculo de la huella de carbono requiere por un lado utilizar métodos de cálculo (como los provistos por las guías para inventariar emisiones de gases de efecto invernadero elaboradas por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC)) y, por otro lado, requiere normas que indiquen formas de medición y de reporte. La norma más usada hasta ahora es la conocida como PAS 2050, elaborada por el Instituto de Normalización Británico. Sin embargo se espera que se adopte a la brevedad una norma ISO específica, la , aun en plena discusión internacional. 3. ACCIONES EN URUGUAY Y PRINCIPALES RESULTADOS ALCANZADOS El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca convocó en 2010 la instalación de mesas institucionales público-privadas y a grupos de trabajo técnico, encargados de realizar la primera estimación de la huella de carbono de las principales cadenas agroexportadoras. Los grupos de trabajo se integraron con técnicos de INIA, LATU y Facultad de Agronomía 2, y concluyeron una primera etapa de trabajo en el pasado mes de agosto. Los principales resultados del trabajo realizado hasta el momento se pueden resumir de la siguiente forma: a) Se ha consolidado un grupo técnico de trabajo interinstitucional e interdisciplinario liderado por el MGAP, para avanzar en el tema. b) Se comprobó que la huella de carbono, estimada hasta puerto de desembarque en Europa, tiene su componente más significativo en las emisiones de metano y óxido nitroso que se producen en los predios agropecuarios. Del orden del 90% de todas las emisiones hasta puerto de 2 Los equipos de INIA estuvieron encabezados por Álvaro Roel y Jorge Sawchik, los del LATU por Carlos Saizar, los de Facultad de Agronomía por Laura Astigarraga y los del MGAP por Gonzalo Becoña y Walter Oyhantcabal.

4 destino son explicadas por actividades prediales. Para las tres cadenas estudiadas, la industrialización, y el trasporte nacional e internacional, realizan aportes relativamente reducidos a las emisiones por kilo producido. Se destaca que las emisiones desde el puerto de destino hasta el consumidor final en los hogares y la posterior disposición de los residuos (que es importante) no fue considerada en este estudio, pero es parte del ciclo de vida que interesa al consumidor. Este enfoque adoptado en este estudio es lo que se llama "Negocio a Negocio" y no "Negocio a Consumidor". c) Dado el alto peso relativo de las emisiones en la fase primaria, la huella de carbono resulta muy dependiente de la eficiencia de los procesos y de las tecnologías aplicadas a nivel predial. Cualquier esfuerzo por reducir la intensidad de emisiones requerirá obtener resultados en ese eslabón. d) El metano es el principal gas de efecto invernadero en las tres cadenas. En los vacunos de carne y leche la principal fuente es la fermentación entérica, en el arroz es la condición de inundación (anaerobiosis). El óxido nitroso es el segundo gas en importancia. La principal fuente es el estiércol vacuno (heces y orina). e) En los rubros estudiados, y en particular en la carne vacuna, coexisten sistemas de producción de muy diferente eficiencia y por tanto de diferente huella de carbono. Por ello carece de sentido práctico hablar de una huella de carbono promedio del país, asociando estáticamente los productos de exportación a un solo valor. En la práctica si un importador exige la huella de carbono, lo hará para las partidas específicas que importe y no para un promedio estándar. f) Para el caso de la carne vacuna, los estudios realizados indican que la calidad de la dieta (digestibilidad) y la duración de ciclo de producción de un animal terminado tienen una influencia notable en la huella de carbono. Nuestro país cuenta considerando la trazabilidad- con posibilidades de satisfacer demandas de mercados que pidan carne con una huella de carbono baja, seleccionando la que proviene de animales más jóvenes, alimentados con forrajes y suplementos de alta calidad. Asimismo, la heterogeneidad constatada en la huella de carbono de diferentes sistemas productivos, señala que existe un amplio campo para avanzar. En el caso del arroz, por su parte, la situación internacional se insinúa como favorable por dos razones: (i) el manejo de cultivo con inundación parcial produce menos metano que la inundación total, y (ii) los elevados rendimientos permiten reducir las emisiones totales por kilo producido. g) El aumento de la productividad se asocia positivamente con la reducción de la huella de carbono. La gestión futura del aporte a la huella de carbono en los casos de la carne vacuna y la lechería en la fase primaria necesita analizarse en tres niveles:

5 a. Animal: considerando efectos como manejo de la dieta y digestibilidad, observando posibles desarrollos tecnológicos (aditivos, etc.). b. Rodeo: considerando la eficiencia de los procesos como clave la reducción de la intensidad de las emisiones. c. Paisaje: desarrollando enfoques de sistemas que involucren los usos de la tierra, la reducción de las emisiones, la gestión de residuos y el potencial de secuestro en suelos y biomasa forestal. La consideración del secuestro de carbono podría tener un impacto significativo en la reducción de la huella de carbono. h) Se ha identificado una agenda de investigación que permitirá resolver en colaboración las principales incertidumbres que tienen las estimaciones actuales. En ese sentido, las prioridades principales para la investigación pasan por: (i) el desarrollo de factores de emisión nacionales para óxido nitroso y metano en ganadería, lechería y arroz; (ii) la mejora de la comprensión de las maneras de influir sobre el metano de origen ruminal, manejando la dieta y la eficiencia de los procesos; y (iii) la mejora de la capacidad para estimar el impacto de distintas prácticas sobre el contenido de carbono orgánico en los suelos. i) Se concluyó que el desarrollo y aplicación de técnicas de medición y monitoreo de emisiones y capturas parece una prioridad, tanto para reducir las incertidumbres asociadas a las estimaciones como para trabajar en mejora continua y poder reportar los avances. Las incertidumbres en las estimaciones asociadas al uso de algunos factores de emisión importantes son muy relevantes. j) Se valora que la participación de Uruguay (a través del MGAP y el INIA) en la recientemente creada Alianza Global para la Investigación de los Gases de Efecto Invernadero en el Sector Agropecuario 3, representa una oportunidad de gran relevancia para mejorar los logros de la investigación nacional mediante el acceso a información y el desarrollo de la cooperación internacional para programas de investigación y desarrollo de capacidades. En los próximos meses se espera revisar y mejorar los estudios ya realizados, fortalecer las líneas de investigación en curso, analizar como incluir estos temas 3 La Alianza Global reúne a 33 países desarrollados y en desarrollo. Tiene por objetivo reducir la intensidad de emisiones en la agropecuaria y construir sistemas productivos más resilientes. Incluye cinco grupos de trabajo: Producción animal, Cultivos, Arroz, Ciclo del C y el N, e Inventarios y monitoreo.

6 en las agendas de extensión hacia los productores, y agregar nuevos rubros al estudio de la huella de carbono (por ejemplo carne ovina y fruta de exportación).