El sentido de la decoración en el arte islámico.

Transcripción

1 El sentido de la decoración en el arte islámico. Natalia González Zaragoza DNI: K TELF:

2 Introducción El arte islámico aportó al arte cristiano una riqueza decorativa proveniente de civilizaciones muy antiguas, como la bizantina o la persa. El exotismo y refinamiento, presentes en la decoración de sus edificios, contrastaron desde un principio con la estética austera del románico, donde predomina más la pesadez de sus muros y una decoración más limitada que la islámica, concentrada sobre todo en las portadas de sus iglesias. En este artículo, presento las bases de la estética de la arquitectura hispanomusulmana y sus influencias en el arte cristiano y en la arquitectura más moderna, como la de Gaudí. El sentido de la decoración en el arte islámico El arte islámico resume mejor que nadie, el arte que está destinado al disfrute de todos los sentidos. En sus palacios, como la Alhambra, la mirada recorre un poco pérdida el itinerario que tiene que seguir, pues parece que se pierde el sentido de la orientación, bien por, la sensación que dan los espacios de estar desarticulados o bien porque uno queda absorto ante la fusión de agua, vegetación, arquitectura y luz. No es de extrañar que la reina Isabel la Católica apreciase tanto este palacio, lugar de luz y color características poco explotadas en el arte románico. Los reyes católicos al recibir en sus manos la propiedad de la Alhambra, por su último rey, adecuaron cada una de las estancias a sus necesidades y recuperaron su anterior esplendor, pues según los historiadores, ésta se encontraba en un estado de abandono debido quizá, al asedió a la ciudad por los cristianos. Los reyes católicos respetaron en parte la estética árabe, pues, es cierto que realizaron algunos cambios y remodelaciones; pero se volvieron a contratar a los artesanos granadinos que trabajaron durante el periodo nazarí para realizar ciertas remodelaciones. Según explica el historiador, Juan Antonio Avilar cuando los artesanos musulmanes terminaban de hacer sus yeserías y artesonados, llegaban los cristianos y los redecoraban con símbolos cristianos. También los Reyes Católicos, se preocuparon de recuperar el sistema hidráulico de la Alhambra, por lo que contaron nuevamente con los mismos maestros de acequias y aljibes que habían estado con el anterior rey, al objeto de rehacer el sistema. Es cierto, que muchas obras artísticas fueron destruidas por los reyes para incorporar otras propias del nuevo estado moderno. Carlos V, puso su Palacio en el centro de la Alhambra de Granada, de estilo totalmente renacentista. Aun así es innegable que Granada y la Alhambra marcaron profundamente a la vida de Isabel la católica; ella se encargó de armonizar el exótico mundo islámico con el nuevo estado moderno, respetando en lo máximo posible, las reliquias islámicas. La decoración ha tenido un papel esencial en el arte islámico. Una de sus principales funciones, que le han dan tanto protagonismo, es la de enmascarar

3 los materiales y estructuras arquitectónicas de sus edificios como muestran la mayoría de sus bóvedas y cúpulas decoradas, con formas estrelladas, yeserías y mocárabes. En occidente en cambio lo decorativo es un complemento que refuerza la estructura del edificio, que es lo más importante, como por ejemplo, los tímpanos decorados de los templos románicos y góticos con escenas de la biblia, obteniendo como resultado un aspecto más austero. La historia de España a lo largo de la Edad Media, muestra una riqueza estética diferente a la del resto de Europa, debido a la invasión de la península por los musulmanes en el año 711. A través de este artículo no pretendo mostrar las diferencias de este arte con el cristiano, sino presentar sus recursos estéticos y la esencia de su decoración, basada en una geometría refinada que a veces, muy pocas veces, deja mostrar a la figura humana. Como sabemos el territorio sometido por el islam recibió el nombre de Al- Ándalus. Desde el norte de España los reinos cristianos inician un periodo de reconquistas que concluye con la caída del último reino de taifas: el reino de Granada en A diferencia de los núcleos cristianos donde predominaba el ruralismo y la autarquía, Al-Ándalus, posee ciudades prósperas, artesanía floreciente y, una importante actividad comercial. Para profundizar en el arte hispanomusulmán es necesario conocer sus principios religiosos. El dios del Islam se encuentra fuera de este mundo y no está sujeto a leyes del espacio y del tiempo. Su religión significa sumisión y entrega incondicional a Dios. El Corán es el libro sagrado, donde se refleja, como a Mahoma le fue revelado los principios religiosos que debían unir a todos los musulmanes. Mientras que en el islam Dios se hace palabra y está es oída, escrita y dicha por Mahoma, en el cristianismo Dios se hace carne. Por eso el lenguaje es el protagonista en la vida del creyente y aparece tanto tallado en las piedras de sus templos y mezquitas. La doctrina musulmana prohibió la representación de la figura animal y humana. Pero sin embargo, está aparece en algunos elementos decorativos y edificios pues, debemos diferenciar la decoración del arte sagrado y el arte profano, la decoración de los edificios de culto y la decoración aplicada en objetos como medallas o tejidos. Encontramos representaciones figuradas en telas, manuscritos, frescos, fuentes como la del Patio de los leones de Granada (Alhambra), incluso hay miniaturas que reproducen rasgos biográficos de Mahoma. El origen del arte islámico es en realidad la suma de varios estilos orientales como los de Persia o Siria. Parece ser que, el pasado de Arabia estuvo en realidad formado por pequeñas tribus paganas las cuales no habían creado dioses. El imperio musulmán fue adoptando estilos artísticos de las distintas ciudades que fue conquistando y, con ello, creó una ruptura en el arte

4 occidental, pero también una continuación de un arte que suponía la esencia de varias culturas. Otro elemento de la decoración musulmana es la estilización de las formas representadas. Esto supone el representar la desnaturalización de la naturaleza. La prohibición de imágenes, aunque teórica, influyó en el espíritu de los artistas musulmanes. Esto les llevó a huir de la imitación de la naturaleza, de modo que al asumir la geometría un mayor protagonismo también alcanzó un tratamiento renovado y dotado de virtuosismo, pues se llevó a exagerar su trazado anguloso, con formas vegetales y poligonales. Este estilo de arte situaba a los artistas musulmanes no como observadores minuciosos de la realidad sino, como creadores de una abstracción decorativa sin igual. Dentro de su decoración destaca el orden repetitivo a la hora de distribuir la decoración llegando al horror vacui, característica propia del arte románico. En un principio los patrones decorativos repetían elementos simples entrelazados o superpuestos basados en combinaciones pentagonales u octagonales. Esta decoración se fue exagerando cada vez más, pero siempre dispuesta bajo la supervisión de la simetría. La armonía obtenida por la simetría y la profusión de elementos permite que no haya tensión visual entre los ornamentos, solo equilibrio. La repetición infinita de los temas geométricos sirve de metáfora de la eternidad que lo llena todo y es una forma también de plasmar la mutabilidad del universo. La caligrafía sigue siendo una de las manifestaciones artísticas más importante, ya que escribir, es dar forma a la palabra de Dios. La escritura tallada o pintada en los templos representa lo mismo que en el cristianismo las imágenes de carácter didáctico de episodios bíblicos, son el medio a través del cual transmiten el mensaje de Dios a sus fieles. De modo que se expresan versículos del Corán junto a otros textos como poéticos o piadosos, a través de, una caligrafía que se confunde con la decoración geométrica. Dentro de los motivos decorativos destacan los florales y vegetales tomados de la cultura bizantina, que a su vez tomaron de la cultura clásica. El arte islámico los recrea en otros movimientos y composiciones. Destacan las palmetas, las hojas de acanto, las de vid y las rosetas. Es curioso observar como los mismos elementos decorativos utilizados en la arquitectura se repiten en telas, objetos, metales, madera o cerámica como si la decoración fuera en sí misma un elemento unificador. En general, el arte islámico tanto en decoración, como a nivel espacial en la arquitectura, no forma nunca una síntesis, de modo que para apreciarla hay que analizar sus articulaciones, rincones o recodos.

5 No podemos olvidar a la importancia del agua y la luz, elementos que aunque no son decorativos realzan el dinamismo de la decoración. La luz tamiza los ambientes y crea juegos geométricos con la sombra. El agua es un elemento de fusión con la arquitectura y con la vegetación pero, también se puede interpretar como un elemento unificador entre la arquitectura y el jardín. De hecho encontramos agua de distintas formas: estancada, fluyendo por canales, agua en forma de chorro que mana de una fuente Todas las estancias de las mezquitas árabes representan en cierto modo la idea del paraíso, pues en ellas reina la penumbra, los juegos de luz y el frescor. De hecho en el Corán (XIII, 35), el Paraíso se describe como: los ríos corren por él, sus frutos y sus sombras son permanentes. El arte musulmán ha inspirado a muchos artistas futuros, como al escritor Washington Irving, con libros como Cuentos de la Alhambra o, a pintores como Mariano Fortuny, que pinto varias perspectivas del palacio de la Alhambra, en especial, El salón dorado. En la moderna arquitectura de finales del s.xix y principios del s. XX encontramos artistas como Gaudí, que recobraron algunos elementos, materiales y motivos de la esencia de la geometría árabe, como son sus elementos arabizantes, donde predominan las líneas curvas, el uso de la cerámica y, el horror vacui de su decoración, más tendiente a la fantasía y la experimentación de materiales nuevos, como el hierro. Bibliografía: El arte y el hombre, René Huygue. Editorial planeta,s.a. Artículo Ornamento y decoración del arte islámico. R.H Shamsuddin Elia. Profesor del Instituto argentino de la cultura islámica. Arquitectura islámica, página web Arquitectuba.com.AR.