Asma bronquial inducida por el ejercicio físico

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1 Asma bronquial inducida por el ejercicio físico Autor: Lic. Victor Michel Hernández Gómez Profesional de la Universidad de las Ciencias Informáticas, Cuba. Portaldeportivo La Revista Año 3 Nº16 Enero Febrero 2010 ISSN

2 RESUMEN: Los temas relacionados a la salud y la realización de ejercicios físicos son una de las principales problemáticas que ocupa a investigadores y científicos de todo el mundo. En particular los tópicos que se ocupan de los avances de la ciencia con relación a la enfermedad del Asma Bronquial adquieren cada día más relevancia por la importancia que se le atribuye a la misma en el campo de la Cultura Física, el deporte, la recreación y la mejora de la calidad de vida en el mundo y especialmente en Cuba. Cada vez son más las evidencias científicas de que una dosis diaria de ejercicio físico aumenta la calidad de vida. Y no sólo porque ayuda a mantener una buena forma muscular y el corazón activo. Además, estudios recientes revelan que la práctica de ejercicio reduce el riesgo de hipertensión, mejora el funcionamiento del aparato cardiovascular, refuerza el sistema inmune ayudando a combatir infecciones virales y bacterianas. El presente trabajo refleja algunos de los aspectos que evidencian esta relación, pero de manera específica aborda el Asma Inducida por el Ejercicio Físico (AIE), sus conceptos fundamentales, principales manifestaciones y causas que la originan así como algunos de los principales avances de la ciencia en este sentido. Refleja además los beneficios que aporta a niños, jóvenes, y atletas en los que se manifiesta este tipo de Asma Bronquial. INTRODUCCIÓN El asma bronquial es tan antigua como la propia humanidad y constituye un problema de salud de extraordinaria importancia en gran parte del planeta. En la mayoría de los casos el asma es la más común de las afecciones crónicas respiratorias entre los adultos y niños en el mundo desarrollado. En estudios realizados se ha comprobado que en nuestro país por cada 100 personas 10 son asmáticas, siendo catalogada Cuba por la Organización Mundial de la Salud (OMS) entre los países con una elevada frecuencia de esta patología, teniendo gran incidencia en los niños. El Asma es una enfermedad crónica de origen multifactorial que se caracteriza por la hiperreactividad bronquial. Dicha enfermedad causa episodios recurrentes de sibilancias, disneas, opresión torácica y tos, especialmente durante la noche. Estos [2]

3 síntomas se asocian habitualmente a un grado variable de obstrucción de las vías aéreas, que con frecuencia es reversible, bien sea de forma espontánea o mediante tratamiento. El asma inducida por el ejercicio físico se puede prevenir en niños y jóvenes. Cuando se conocen los síntomas es mucho más fácil, se consulta al médico y se toman todas las medidas de precaución para evitar que ocurra el asma durante el ejercicio. Muchos atletas asmáticos han ganado medallas olímpicas. Por eso pretendemos que este trabajo sirva como una herramienta más al practicante de la actividad física para que aprenda no solo como manejar su padecimiento y continuar con su vida normal sino también para que pueda ayudar a otra persona con su misma dolencia en el momento que sea necesario pudiendo ser antes, durante, o una vez concluida la práctica de ejercicios físicos. Según un estudio publicado en la revista Proceedings of the Nacional Academy of Sciences (PNAS), el ejercicio físico mejora la salud mental al generar nuevas neuronas en una región cerebral relacionada con la memoria y su pérdida. Incluso se ha demostrado que hacer deporte disipa el mal humor debido a la activación de la endorfina, además de reducir los niveles sanguíneos del Cortisol, que es la hormona responsable del binomio estrés-depresión. En términos generales el Ejercicio Físico asociado a los temas de salud abarca en la actualidad diversos puntos de vista en los que los beneficios asociados son cada vez mayores fundamentalmente para aquellos que practican deportes con regularidad y para los que comienzan a practicarlo como un cambio en su estilo de vida. DESARROLLO Cuando somos capaces de controlar el asma, se podrá hacer prácticamente cualquier actividad física o de otra índole que traiga consigo un esfuerzo físico. Las personas que practican deportes deben hablar con su médico acerca de un plan de tratamiento más adecuado para satisfacer sus necesidades y así mantener su buen estado de salud. [3]

4 Muchas personas diagnosticadas con asma experimentan síntomas propios de la enfermedad cuando realizan ejercicios físicos y otras que no están diagnosticadas los experimentan solo cuando llevan a cabo esta práctica, presentando lo que se llama Asma Inducida por Ejercicio Físico, la cual es diferente del Asma típica, desencadenada por alérgenos, irritantes o ambos. Algunas personas presentan ambos tipos de asma. Internacionalmente se ha llegado a la conclusión que el Asma Inducida por el Ejercicio es una obstrucción bronquial aguda, reversible, usualmente auto limitada, que se produce después de la práctica de ejercicios físicos en individuos que padecen de Asma Bronquial. Tanto la fase inmediata como la tardía en el Asma Inducida por Ejercicio pueden estar relacionadas con la inflamación de las vías aéreas, la elevación de los niveles séricos de histamina y del factor quimio táctico para los neutrófilos. Estas son evidencias que apuntan en este sentido y en las que también se ha podido evaluar la participación de leucotrienos en la aparición de la misma. Síntomas y factores desencadenantes del asma inducida por el ejercicio físico Si tiene asma inducida por el ejercicio, puede experimentar dificultades para respirar en un período de 5 a 20 minutos después del ejercicio. Los síntomas pueden ser: respiración sibilante, pecho apretado, tos y dolor en el pecho. Otro síntoma del asma inducida por el ejercicio es la falta de aire prolongada, comenzando frecuentemente de 5 a 10 minutos después de un ejercicio breve. Los pacientes con este tipo de asma tienen vías respiratorias que son sumamente sensibles a los cambios repentinos de temperatura y humedad, especialmente cuando respiran aire más frío y seco. Durante la actividad extenuante, las personas tienden a respirar por la boca, lo que hace que el aire frío y seco llegue a las vías respiratorias inferiores sin pasar por el efecto cálido y humectador de la nariz. Con la respiración por la boca - también común en los pacientes con resfriados, sinusitis y rinitis alérgica ("fiebre [4]

5 del heno")- el aire sólo adquiere de un 60 a un 70% de humedad relativa, mientras que la respiración por la nariz entibia y satura el aire a un nivel de humedad del 80 al 90% de humedad antes de que llegue a los pulmones. Además de la respiración por la boca, los contaminantes presentes en el aire, el alto nivel de polen y las infecciones virales de las vías respiratorias pueden incrementar la gravedad de la respiración sibilante al hacer ejercicios. Estos alérgenos pueden ser muy numerosos y pueden ponerse en contacto con nosotros a través de diversos medios como: El aire que respiramos: pólenes de plantas, polvo de la casa, hongos, pelo de animales... Los alimentos: pescados, huevos, frutos secos Medicamentos: penicilina, aspirina. Picaduras de insectos, mordeduras. Contacto con la piel: cosméticos, productos industriales. Todos estamos expuestos a muchas de estas sustancias y, sin embargo, la mayoría de nosotros convivimos con ellas sin problemas: podemos comer cacahuetes y huevos, podemos ser tratados con penicilina si lo necesitamos... La reacción inmune que nuestro organismo produce frente a estas sustancias es de baja intensidad y no la percibimos. Por el contrario, la persona alérgica a una sustancia desencadenará una respuesta exagerada cada vez que entre en contacto con ella. Para que tenga lugar esta reacción alérgica son suficientes cantidades ínfimas del alérgeno. En definitiva, la causa de una alergia no debe atribuirse a una sustancia en concreto, sino al individuo, que está predispuesto genéticamente a desarrollar una respuesta exagerada tras el contacto repetido con las materias potencialmente capaces de inducir a una reacción defensiva en el organismo. Más del 15% de la población es alérgica a alguna sustancia. Afortunadamente la mayoría de las reacciones alérgicas tienen escasa importancia y no ocasionan grandes molestias. Sin embargo, en ocasiones pueden ser extraordinariamente graves y precisar de intervención médica urgente. [5]

6 Puesto que el sistema inmunitario se encuentra ampliamente distribuido en nuestro organismo, no es de extrañar que las reacciones alérgicas sean capaces de desencadenar trastornos muy diversos, según el lugar donde se produzca la reacción. Cuándo se debe ver a un especialista en alergias y asma Los pacientes deben ver a un alergista/inmunólogo si: Tienen síntomas inducidos por el ejercicio que son inusuales o no responden bien al tratamiento con albuterol, nedocromil o cromoglicato. Han tenido anafilaxis inducida por el ejercicio y dependiente de los alimentos. Quieren bucear y tiene un historial de asma. Algunos aportes de la ciencia aplicada a la actividad física y el deporte: influencia en el tema del Asma Inducida por el ejercicio físico Con el advenimiento de técnicas inmunológicas laboratoriales, todavía conseguimos una mayor exactitud diagnóstica y con menos padecimientos y riesgos para el paciente, ya que con apenas algunos mililitros de sangre se pueden determinar sensibilidad a decenas de alérgenos. Dicha técnica denominada RAST (Radio Allergo Sorbent Test). Pero lo más importante de estos avances inmuno alérgicos, es la determinación de una Inmunoglobulina Sérica (Inmunoglobulina E) que nos informa sobre la Intensidad del padecimiento del paciente. Lo anteriormente expuesto se deriva de los constantes estudios que se realizan a partir del conocimiento de las zonas geográficas, donde se implementan diversos sistemas de entrenamiento a los atletas para lograr un mayor rendimiento y calidad de vida. (Sistema de entrenamiento). De ello se derivan algunos Tests novedosos: Los test de provocación con ejercicio en población general Test de campo/competición en deportistas de alto nivel Estudio espirométrico (valor basal de referencia en reposo) que incluye los siguientes parámetros de las pruebas de función pulmonar: capacidad vital [6]

7 forzada (FVC), volumen espiratorio forzado en un segundo (FEV1), flujo espiratorio pico (PEFR) y flujo máximo medio (MME). Algunas de las actividades que puede realizar un asmático para mantener un buen estado de salud Existen muchas maneras de mantenerse activo: La actividad aeróbica (como correr, nadar, montar en bicicleta o caminar) es un tipo de ejercicio que obliga al corazón y a los pulmones a trabajar más y producir más oxigeno. Su plan de ejercicio deberá incluir al menos una de estas actividades aeróbica. En el gimnasio con las pesas y un plan de entrenamiento bien dosificado, favorece al fortalecimiento muscular utilizando siempre pesos o resistencia para aumentar la masa muscular. La natación puede ser un ejercicio muy adecuado, ya que el aire suele estar caliente y húmedo, y hay menos probabilidades de que se produzca un ataque de asma. Sin embargo, tenga en cuenta que el olor del cloro de las piscinas actúa como desencadenante para algunas personas por lo que se le aconseja hacer esta actividad en la playa. El ejercicio en el interior es aconsejable cuando las condiciones climáticas en el exterior podrían desencadenar síntomas. Intente hacer ejercicio en un gimnasio o en casa. El yoga estira y fortalece los músculos, relaja la respiración y ayuda a aliviar el estrés. Actividades recomendables para las personas que padecen de asma inducida por el ejercicio Si bien el tipo y la duración de la actividad recomendada varían según cada persona, algunas actividades son mejores para las personas que padecen de asma inducida por el ejercicio. La natación a menudo es considerada como el mejor deporte para los asmáticos y para quienes tienen tendencia al bronco espasmo debido a sus muchos factores positivos: [7]

8 una atmósfera cálida, húmeda, se puede practicar todo el año, tonificación de los músculos de la parte superior del cuerpo, y por el modo en que la posición horizontal ayuda a movilizar la mucosidad desde la parte inferior de los pulmones. Las caminatas, el ciclismo recreativo, el excursionismo y el esquí alpino son también actividades que menos probabilidades tienen de desencadenar el EIA. En clima frío, utilizar una bufanda o máscara quirúrgica sobre nariz y boca puede disminuir los síntomas al calentarse el aire inhalado. Los deportes de equipo que requieren explosiones cortas de energía, como el béisbol, el fútbol americano, la lucha libre, el golf, la gimnasia, el atletismo de pista y de campo, o el surf tienen mucha menos probabilidad de provocar asma que los deportes que requieren actividad continua como el fútbol, el baloncesto, el hockey sobre césped o las carreras de larga distancia. Las actividades en clima frío, como esquí a campo traviesa y el hockey sobre hielo tienen, también, más posibilidad de irritar las vías respiratorias. Sin embargo, muchos asmáticos han descubierto que, con el adecuado entrenamiento y con tratamiento médico, pueden destacarse como corredores e incluso como jugadores de baloncesto. Actividades aconsejables para niños con asma inducida por ejercicio Hacer ejercicio es bueno para todo el mundo, incluso para niños con asma inducida por el ejercicio. Trate de fomentar que su hijo sea una persona activa, y que al mismo tiempo mantenga su asma bajo control siguiendo las instrucciones del médico. Además de mantener el estado físico y un peso saludable, el ejercicio puede mejorar la función pulmonar al fortalecer los músculos respiratorios de la caja torácica que intervienen en la respiración. Pregunte al médico sobre el ejercicio y qué tipo de precauciones debe tomar su hijo. Por supuesto, algunos deportes ocasionan menos problemas a los niños con asma inducida por ejercicio: caminar trotar escalar [8]

9 golf natación recreativa béisbol fútbol americano gimnasia atletismo distancias cortas Los deportes de resistencia, como las carreras y el ciclismo de fondo, y aquéllos que requieren un rendimiento energético continuado, como el fútbol y el baloncesto, pueden suponer un mayor reto para los niños con asma inducida por el ejercicio. Sobre todo si se practican deportes de resistencia en un ambiente frío, como el esquí de fondo o el hockey sobre hielo. Pero eso no significa que su hijo no pueda participar en esos deportes si realmente le gustan. De hecho, muchos atletas asmáticos han comprobado que con entrenamiento y medicación adecuados pueden participar en cualquier deporte que elijan. Consejos útiles para la práctica del ejercicio físico Se debe comenzar con actividades que le gusten, con o sin compañía, siempre y cuando se sienta lo mejor posible, para ello puede utilizar auriculares y regalarse una hora consigo mismo. En cualquier caso, los siguientes consejos le ayudarán a obtener el mayor beneficio del ejercicio que hace. Haga un precalentamiento de 5 a 10 minutos con ejercicios ligeros. Esto ayuda al corazón y a los músculos a prepararse y reduce las probabilidades de que tenga síntomas y lesiones. Beba abundante agua cuando haga ejercicio para evitar que su cuerpo pierda demasiado líquido y así le brinde la energía que usted necesita. Reduzca la intensidad del ejercicio si tiene catarro. Después del ejercicio, muévase más despacio durante 5 minutos para enfriarse gradualmente. Muévase a un ritmo más lento y termine la sesión haciendo algunos ejercicios de estiramiento para evitar dolores musculares muy desagradables que le imposibiliten realizar los ejercicios el siguiente día. [9]

10 Tenga cuidado cuando hace frío. Es posible que deba aumentar la duración de su precalentamiento. Para mayor seguridad, haga ejercicio en el interior cuando hace frío. CONCLUSIONES El asma inducida por ejercicio se puede prevenir en niños y jóvenes. Cuando se conocen los síntomas es mucho más fácil, se consulta al médico y se toman todas las medidas de precaución para evitar que ocurra el asma durante el ejercicio. En cuanto a los aspectos más afines al tema del AIE, debe señalarse que la persona con asma debe estar sin síntomas antes de realizar ejercicio. Si ya en reposo muestra dificultad respiratoria o se aprecian "pitos" en el pecho, la realización de esfuerzo físico no hará más que aumentar esos síntomas. Aún estando bien, en los pacientes asmáticos la práctica de algunos deportes (unos más que otros) puede desencadenar síntomas de tos, o dificultad respiratoria. Para evitar esto se debe hacer un tratamiento general, y algunos de estos pacientes puede necesitar además el uso de medicación previa a la realización de ejercicio (clases de gimnasia, práctica de algún deporte...). RECOMENDACIONES Se recomienda profundizar en el estudio del tema del Asma Inducida por el Ejercicio físico, con la finalidad de brindar nuevos aportes prácticos y teóricos que contribuyan a relacionar la práctica del ejercicio físico con el estado de salud de las personas que padecen la enfermedad. Estudiar y analizar los últimos avances de la ciencia y el deporte relacionados con el tratamiento del Asma Bronquial y la práctica del Ejercicio Físico. [10]

11 BIBLIOGRAFÍA 1. Sly RM. Asma. En : Berhman Re, Kliegman RM, Arwin AN. Neslon. Tratado de Pediatría. 15a. ed. Habana : Ciencias Médicas; Álvarez Sintes R. Afecciones respiratorias más frecuentes. En : Alvarez Sintes R. temas de Medicina General e Integral. VOl. 3. Habana: Ciencias Médicas Asma, LELW [en línea] Disponible en: 4. West JB. Fisiopatología Pulmonar. 5a Ed. Buenos Aires: Médica Panamericana; Patier de la Peña JL. Asma Bronquial. Patogenia. EMIDES [en línea] 2001.Disponible en: Medynet.com/rlmrdico/aula/tema4/asma3.htm. 6. Drazen JM. Asma. En: Bennett JC, Plum F. Cecil. Tratado de Medicina Interna. 20 a ed. México DF: Mc Graw-Hill. Interamericana; Muñoz X. Guerra J. Estudio de la reactividad bronquial. Prueba Broncodilatadora. Prueba de la metacolina. EPOCNET. [en línea] Disponible en: area-m/mettdiagn/prueba_04.htm 8. Hamid QA. Minshaed EM. Molecular pathology of allergy disease. J. Allergic Clin Inmunol Solé D, Sano, Emrich de Melo R. Asma Inducida por el ejercicio en el niño, AVO. [en línea] 2003, disponible en 10.El asma y el ejercicio, MMHSHLAZ [en línea] 2002, disponible en : 11.Wooley M, Anderson SD, Quigley BM. Duration of protective effect of terbutaline sulfate and Cromolyn Sodium and combination on excersices induced asthma. Chest Unden BJ. Liechtenstein LM. Fármacos utilizados en el tratamiento del asma bronquial. En : Hardman JG. Limbord LE. Goodman y Gilman. Las Bases farmacológicas de la terapéutica. 10ª ed. México DF. Mc Graw-Hill. Interamericana; Matecki S, Parvit C, Chaussain M et al. test de esfuerzos en niños asmáticos de 6 a 12 años. Rev. Mal Respir [11]