TÍTULO: Fertirrigación AUTOR: María Jiménez. Introducción

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1 TÍTULO: Fertirrigación AUTOR: María Jiménez Introducción La fertirrigación consiste en suministrar el abono disuelto en el agua de riego, distribuyéndolo uniformemente, de tal forma que cada gota de agua contenga la misma cantidad de fertilizante. Con esta forma de abonado se consigue dar el alimento en óptimas condiciones para que la planta lo pueda aprovechar inmediatamente, y no tiene que pasar un tiempo disolviéndose y alcanzando la profundidad de las raíces. Hasta hace poco el único abono era el estiércol, más tarde se empezaron a utilizar los abonos nitrogenados y últimamente se ha iniciado una fertilización más equilibrada teniendo en cuenta los rendimientos de cosecha previstos pues el suelo se iba empobreciendo. El equipo de abonado para la fertirrigación se monta en el sistema de riego por goteo. Ventajas de este sistema de abonado La fertirrigación permite altos rendimientos en los cultivos, una mejor utilización del agua y de los nutrientes, menores pérdidas por lixiviación y aplicaciones controladas durante el desarrollo de los cultivos. El abono se distribuye con mayor uniformidad que si se abona en seco. En el caso del cultivo del tomate se incrementa su rendimiento entre un 16 y un 35% respecto al abonado tradicional. Con la fertirrigación el abono se pone a disposición inmediata de las raíces y con su fraccionamiento en 10 veces o más al mes evitamos que se pierdan los excesos. En el abonado clásico al echar los abonos si quedan en la superficie, pueden descomponerse y perderse en forma de gas amoniaco debido a la acción del sol. El que mayormente se pierde es el sulfato amónico. En el caso del nitrógeno amoniacal la planta lo tomará poco a poco gracias a que queda retenido, pero en el caso del nitrógeno nítrico, que no es retenido, se pierde por

2 drenaje cuando la planta no lo utiliza. Al echar el abono en seco, éste queda retenido en los primeros centímetros de la superficie, con lo que hay que enterrarlo mediante labores preparatorias. En la aplicación de abonos fosforados y potásicos <<en seco>> el fósforo y el potasio quedan retenidos en los primeros centímetros de la superficie, lo que obliga a enterrarlo en las labores preparatorias, pudiéndose presentar problemas de retrogradación (transformación en compuestos calizos insolubles que las plantas tienen dificultades para absorber). La fertirrigación: con este método no es necesario marcar diferencias físicas entre los distintos elementos. El abono se pone al alcance inmediato de las raíces, y con su fraccionamiento en 10 veces o más al mes, evitamos que se pierdan los excesos. Con respecto al fósforo, si se aplica en fertirrigación al ir disuelto se facilita la penetración y asimilación, además se retrasa el fenómeno de la retrogradación, por lo que se pueden alcanzar profundidades superiores a los 20 cm. Con el empleo de esta técnica ya no es tan necesario el abono de fondo de los fertilizantes químicos. Al suponer un ahorro en fertilizante conlleva una gran mejora en el medio ambiente. Evita la contaminación de aguas subterráneas, y con el tiempo es posible que se eliminen o al menos se reduzcan los excesos de nitritos y nitratos en las aguas potables. Inconvenientes de esta técnica La mezcla formada por el agua y los fertilizantes no debe superar los 3 milimhos/ cm de conductividad, pues sino se pueden tener problemas de salinidad (ósmosis). La acumulación de sales procedentes de los abonos y del agua, en la periferia del bulbo, en climas desérticos, sin lluvias copiosas y prolongadas (como en Murcia), puede llegar a formar un cascarón irrompible por las raíces por lo que es necesario solapar esas bolsas. Fundamentos Los principios en los que se fundamenta esta técnica son: El agua es el principal medio de transporte de sustancias fuera y dentro de la planta. En cada riego hay que incorporar fertilizantes, para equilibrar la dosis hídrica y restituir lo consumido, por lo que la formulación variará (salvo en terrenos muy ricos en materia orgánica).

3 Según el estado vegetativo de la planta sus exigencias son diferentes, y sus exigencias variarán de la forma en la que se lleve el programa, que debe contemplar las necesidades anuales o del ciclo vegetativo. Es necesario realizar análisis foliares periódicamente, para ir introduciendo las correcciones en el programa Suele ser importante los análisis tanto de agua como de suelo para controlar la salinidad. Planning de abonado Al igual que el riego la fertilización tiene que ser programada previamente, y según evolucione el cultivo se irán introduciendo las variaciones necesarias. Para cada tipo de parcela o tipo de suelo/ cultivo/ agua se debería hacer un planning distinto, que dependiendo de si es cultivo de temporada o permanente abarcaría 6-9 ó 12 meses. Durante los últimos años se tiende a acortar la duración del programa confeccionándose para casi todos los meses en los primeros años. Pero advirtiendo de que durante otoño-invierno puede presentarse necesidad de riegos de socorro en distintas variedades de fruto pendiente, para mantener un grado de turgencia y evitar la caída del fruto. El abono tiene que estar disuelto perfectamente y no tiene que haber ningún problema de solubilidad. La uniformidad tiene que ser buena para evitar excesos y defectos, llegando una parte de fertilizante allá donde el agua llegue. La fertirrigación puede esperar hasta el inicio de la brotación pues son las hojas las que tiran de la savia bruta. (el sol aumenta la evaporación del agua a través de los estomas de las hojas, lo que provoca la ascensión de la savia bruta). Cuando las plantas tengan dos tercios de su tamaño normal, ya se pueden realizar los abonados foliares, para completar así el abonado del suelo. Una vez iniciado el programa de abonado y riego, ya no se parará hasta el final del ciclo anual de tal forma que se fertilice cada vez que se riegue. La fertirrigación no cesará hasta que se empiece a caer la hoja de (forma natural), si son plantas de hoja perenne cesará en la última brotación. Durante el ciclo vegetativo se podrán usar complejos enriquecidos con los elementos que más necesite el vegetal. Nitrógeno: en brotación, crecimiento y engorde. Fósforo: en prefloral, floral y final de maduración. Potasio: en engorde y maduración. Magnesio: en brotación. Calcio: en brotación, crecimiento y engorde.

4 Es importante tener en cuenta el equilibrio y la proporción de cada elemento dentro del fertilizante. En variedades hortícolas mientras está el cultivo, se administrará el alimento hidro-mineral, extremando las precauciones por las limitaciones climáticas. Con este sistema de abonado se aumenta la salinidad del agua hasta niveles que pueden resultar perjudiciales. Para evitar esta situación: Aumentar la cantidad de agua de riego. Incorporar estiércol o humus en el abonado anual para mejorar el complejo arcillo-húmico. El ph, al igual que el agua, también se modifica, para evitar este problema existen abonos ácidos en el comercio que mejoran la reacción del suelo facilitando la solubilidad de los fertilizantes y además disminuyen la precipitación del CaCO 3. Los abonos en fertirrigación Abonos sólidos: Son distintos a los utilizados para el abonado en seco. Tienen que ser solubles y no llevar materias extrañas. Debe llevar especificado en el envase que su aplicación es mediante fertirrigación. En el comercio se encuentran los siguientes: Sulfato amónico Nitrato amónico Urea Fosfato monoamónico Fosfato de urea Nitrato potásico Sulfato potásico Nitrato de cal Nitrato de magnesio Otros abonos simples y complejos Todos estos abonos tienen el inconveniente de que hay que preparar la solución madre, que es una disolución lo más concentrada posible, para lo que hay que tener un depósito con agitador. La cantidad a disolver no es fija, depende de la calidad del agua y la temperatura. Hay que conocer la reacción de estos productos, al disolverlos, pues los que contienen nitrógeno suelen enfriar al agua disminuyendo la solubilidad. Los que más enfriamiento producen son el nitrato potásico y la urea. Para elegir el tipo de abono hay que tener en cuenta sus características referentes a:

5 Solubilidad y solución madre. Salinidad y concentración máxima aconsejable para el agua de riego, para no sobrepasar 1 milimhos/ cm. Reacción o ph. Sulfato amónico <<S>> (21% N) Kg Poco soluble 12 Kg./ 100 l - Saliniza más que ninguno (0.25 g/ l) - Reacción ácida Nitrato amónico (33.5% N) 50 Kg Muy soluble (50 Kg./ 100 l) - Poco salinizante (1 g./ l) - Reacción ácida

6 Urea cristalina (46% N) Kg Muy soluble (50 Kg./ 100 l) - No saliniza (2 g./ l) - Reacción ácida a pequeñas concentraciones Fosfato-urea ( ) 25 Kg Medianamente soluble (25 Kg./ 100 l) - Salinizante (0.50 g./ l) - Reacción muy ácida

7 Fosfato monoamónico ( ) Kg Medianamente soluble (20 Kg./ 100 l) - Salinizante (1 g./ l) - Reacción muy ácida Nitrato potásico ( ) Kg Poco soluble (13 Kg./ 100 l) - Salinizante (0.50 g./ l) - Reacción neutra

8 Nitrato potásico ( ) 7-12 Kg Poco soluble (7 Kg./ 100 l) - Salinizante, aporta sulfatos (0.50 g./ l) - Reacción neutra Sulfato potásico ácido (5% K 2 O) 10 Kg Poco soluble (10 Kg./ 100 l) - Salinizante, aporta sulfatos (0.50 g./ l) - Reacción ácida

9 Nitrato de magnesio (11% N % MgO) Kg Poco soluble (10 Kg./ 100 l) - Salinizante, aporta sulfatos (0.50 g./ l) - Reacción ácida Abonos líquidos: No hay que preparar solución madre. Tienen que transportarse y guardarse en depósitos especiales. Tienen una reacción ácida, o ligeramente ácida. Esto es beneficioso para el mantenimiento de tuberías y emisores (el CaCo 3 sólo se deposita cuando la concentración es superior a 2 g/ l y el ph es alcalino). En el comercio se pueden encontrar los siguientes abonos: Solución N-32: mezcla de urea y nitrato amónico de tal forma que el N tiene la formulación: N. ureico: 16% N. amoniacal: 8% N. nítrico: 8% Solución N-20: N. Nítrico: 10% N. Amoniacal: 10% Nitrato magnésico Nitrato de cal Ácido nítrico: Líquido agresivo y muy peligroso. Los locales donde se almacene deben de estar ventilados y sin sustancias inflamables cerca del líquido. Su aplicación principal no es como abono, pero como es muy rico en N hay que tener en cuenta el N aportado.

10 La dosificación depende de la dureza del agua ya que se tiene que conseguir un ph ligeramente ácido (6-6.5) Ácido fosfórico: A la venta hay dos formulaciones con concentraciones diferentes. Una con 70-75% de riqueza en ácido (50% de P 2 O 5 ) y otra del 55-65% de ácido y una riqueza del 40% de P 2 O 5. Polifosfatos amónicos Solución potásica ácida Abonos complejos: Hay dos grupos según cual sea su reacción: neutros o ligeramente ácidos y los muy ácidos (ph 1-2) Si el agua de riego no es alcalina y contiene poca sal se usan los neutros, pero como no suele darse esta situación se utilizan más los ácidos. La riqueza en fertilizantes es la misma para los 2 tipos, y se expresa en (UF unidades fertilizantes) Teóricamente es igual emplear complejos que abonos simples, pero resultan más cómodos los complejos y suelen ser más eficaces. Las combinaciones más frecuentes en el mercado son: Características más importantes: Poco salinizantes (1 g/ l) Reacción muy ácida. Peligroso transporte Microelementos Solución N-32 (32% N) Conductividad eléctrica ph Salinidad media o poca (0.75 g./ l) - Reacción neutra o ligeramente ácida

11 Solución N-20 (20% N) Conductividad eléctrica ph Salinidad media (0.75 g./ l) - Reacción neutra o ligeramente ácida Nitrato magnésico (6.6% N + 9.5% MgO) Conductividad eléctrica ph Muy poco salinizante (2 g./ l) - Reacción neutra o ácida, según aumente la concentración. - Se puede mezclar y almacenar con N-20 y N-32.

12 Nitrato de cal (7% N + 9.5% CaO) Conductividad eléctrica ph Poco salinizante (1 g./ l) - Reacción ligeramente ácida. Ácido fosfórico Conductividad eléctrica ph Salinizante (0.50 g./ l) - Reacción muy ácida. - Preparar solución madre al 50% - Incompatible con abonos de Calcio, Magnesio y Hierro.

13 Solución ácida de potasio (10% K 2 O) Conductividad eléctrica ph Poco salinizante (1 g./ l) - Reacción muy ácida. - Solución madre al 50% Bibliografía y páginas web de interés. Riego localizado y fertirrigación J. A. Moya Talens Edit. M.P. (1994) Abonos para la fertirrigación de algunos cultivos. : Fertirrigación en algunos cultivos. equipos de riego para la fertirrigación : Más enlaces para la aplicación de este método a gran variedad de cultivos, sobretodo cítricos, vid... forma de realizar la fertirrigación, hoja técnica EF?OpenDocument programa de fertirrigación ventajas e inconvenientes de este método