Armonía de los Estándares de Westminster. Editado por: Marcelo Sánchez

Transcripción

1 Armonía de los Estándares de Westminster Editado por: Marcelo Sánchez

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3 INTRODUCCIÓN La Asamblea de Westminster se reunió entre 1643 y 1660 convocada por el parlamento inglés con el propósito de reestructurar la iglesia de Inglaterra. El resultado de esta asamblea fue la producción de algunos de los mejores documentos doctrinales de la historia de la iglesia. Tristemente esa reforma no se llevó a cabo, sin embargo estos documentos si fueron muy bien utilizados por parte de la iglesia. Los estándares de Westminster han sido el padrón doctrinal de las iglesias presbiterianas desde ese tiempo. Cuando escribo esta introducción llevo casi dos semanas de haber sido ordenado como un pastor de la Iglesia Presbiteriana Nacional de Chile. Ese día el presidente del presbiterio me hizo las preguntas que nuestra constitución exige que se hagan a todos los ministros. La tercera de ellas es relevante para entender la importancia de este libro. Esta pregunta es: Recibís y adoptáis la Confesión de Fe de esta Iglesia como que contiene el sistema de doctrina enseñado en la Biblia?. Para muchas personas esta pregunta es extraña. No bastaría que un pastor prometa ser fiel a la Biblia? Por qué prometer adoptar un documento escrito por hombres? La respuesta es que prometer fidelidad a la Biblia significa casi nada. Presbiterianos, bautistas, católico romanos, pentecostales, reformados, arminianos, pelagianos todos afirmamos ser fieles a la Biblia, sin embargo la forma de entender la Escritura es muy diferente entre una y otra denominación. Cuando un pastor presbiteriano promete fidelidad a la Confesión de Fe de Westminster está prometiendo fidelidad a una forma específica de entender la Escritura. Esta promesa no significa que nosotros añadimos algún contenido a la Palabra de Dios. Tampoco significa que tenemos otro estándar para nuestra fe y conducta. Esta promesa significa reconocer que la enseñanza de la Confesión es la misma enseñanza de la Escritura. Por esto no es posible cuestionar en algún momento si debemos ser fieles a la Escritura o ser fieles a la Confesión. Un pastor presbiteriano no crea que tal distinción sea posible. Como dice el gran teólogo presbiteriano James Henley Thornwell: Todo lo que la Biblia condena, nuestra Confesión de Fe también lo condena; y todo lo que nuestra Confesión de Fe condena, la Biblia también lo condena. Ellas tienen la misma autoridad; la Confesión no es nada más que la Biblia hablando en ella y por medio de ella. Cuando la adoptamos, hemos aceptado que ella es una interpretación honesta y fiel de la enseñanza de Dios. Si la Biblia y la Confesión fueran independientes entre sí, o si fueran inconsistentes entre sí, muchas dificultades surgirían. Ese es el gran valor de este libro: expone doctrinal y sistemáticamente lo que los presbiterianos creemos que es la enseñanza de Dios mismo. Y por esto, este libro no sólo es útil para los pastores o presbíteros, sino que es útil para todos los presbiterianos y para aquellos que quieren ser serios en el estudio de nuestro pensamiento. Este libro hace dos aportes al estudio de los Estándares: La Confesión de Fe, el Catecismo Mayor y el Catecismo Menor de Westminster. En primer lugar se presenta una armonía temática de estos documentos. La cual es una ligera adaptación de la armonía hecha por Mark E.Baldwin. El valor de este trabajo está determinado por su utilidad: Poder estudiar en su conjunto el trabajo de la asamblea acerca de

4 una doctrina específica. Los textos de los tres documentos han sido puestos en tres columnas, presentando lo que cada uno de ellos dice acerca de cada doctrina siguiendo el orden de la Confesión de Fe. Esto permite al estudiante tener un conocimiento más completo de las ideas expresadas en los estándares. El texto de los tres documentos corresponde a la traducción de los textos originales (sin enmiendas) publicada por la Iglesia Puritana Reformada en Argentina. En segundo lugar se presenta un índice de todos los textos bíblicos usados en los estándares como apoyo para sus afirmaciones doctrinales. Este trabajo tiene como base el índice realizado por Stephen Pribble. Su utilidad para el intérprete bíblico presbiteriano es poder conocer la interpretación que los miembros de la Asamblea de Westminster le dieron a cada pasaje bíblico que aquí se encuentra. Esto es de gran utilidad, pues la interpretación de la asamblea es la interpretación histórica y oficial del texto bíblico para las iglesias presbiterianas. Publico este trabajo confiando en que puede ser una excelente herramienta en el estudio de la fe presbiteriana histórica. Marcelo Sánchez Ávila. SOLI DEO GLORIA

5 ÍNDICE I. Armonía De Los Estándares De Westminster De Las Santas Escrituras De Dios Y La Santa Trinidad Del Decreto Eterno De Dios De La Creación De La Providencia De La Caída Del Hombre, Del Pecado Y Su Castigo Del Pacto De Dios Con El Hombre De Cristo El Mediador Del Libre Albedrío Del Llamamiento Eficaz De La Justificación De La Adopción De La Santificación De La Fe Salvadora Del Arrepentimiento Para La Vida Eterna De Las Buenas Obras De La Perseverancia De Los Santos De La Seguridad De La Gracia Y De La Salvación De La Ley De Dios De La Libertad Cristiana Y De La Libertad De Conciencia De La Adoración Religiosa Y Del Día De Reposo De Los Juramentos Y Votos Lícitos Del Magistrado Civil Del Matrimonio Y Del Divorcio De La Iglesia De La Comunión De Los Santos De [La Palabra Y] Los Sacramentos Del Bautismo De La Santa Cena De Las Censuras Eclesiásticas De Los Sínodos Y Concilios Del Estado De Los Seres Humanos Después De La Muerte Y La Resurrección De Los Muertos Del Juicio Final II. Índice De Textos Bíblicos Usados En Los Estándares De Westminster

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7 ARMONÍA DE LOS ESTÁNDARES DE WESTMINSTER 1

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9 1. DE LAS SANTAS ESCRITURAS Confesión de Fe Catecismo Mayor Catecismo Menor 1. Aunque la luz de la naturaleza y las obras de la creación y la providencia manifiestan la bondad, la sabiduría y el poder de Dios, de tal manera que deja al hombre inexcusable[1]; sin embargo no son suficientes para dar ese conocimiento de Dios y su voluntad que es necesario para la salvación[2]. Así pues le plació al Señor, en diversos tiempos y de diversas maneras, revelarse y declarar su voluntad a su Iglesia[3]; Y después, para el mejor mantenimiento y propagación de la verdad y para el mayor establecimiento y consuelo de la Iglesia contra la corrupción de la carne y de la malicia de Satanás y del mundo, le plació dejar totalmente esta revelación por escrito[4], lo cual hace que la Santa Escritura sea sumamente necesaria[5]; habiendo ya cesado esas maneras anteriores de Dios por las que revelaba su voluntad a su pueblo[6]. [1] Romanos 2:14-15; Romanos 1:19-20 ; Salmo 19:1-3; Romanos 1:32 con Romanos 2:1; [2] 1 Corintios 1:21; 1 Corintios 2:13-14; [3] Hebreos 1:1; [4] Proverbios 22:19-21; Lucas 1:3-4; Romanos 15:4; Mateo 4:4, 7, 10; Isaías 8:19-20; [5] 2 Timoteo 3:15; 2 Pedro 1:19. [6] Hebreos 1: Cuál es el fin principal y más alto del hombre? R. El fin principal y más alto del hombre es el de glorificar a Dios[1] y gozar de Él para siempre.[2] [1] Romanos 11:36; 1 Corintios 10:31; [2] Salmo 63:24-28; Juan 17: Cómo sabemos que existe un Dios? R. La mera luz de la naturaleza en el hombre y las obras de Dios manifiestan claramente que Él existe;[1] pero su Palabra y Espíritu son los únicos que suficiente y eficazmente lo revelan a los hombres para la salvación de ellos.[2] [1] Romanos 1:19, 20; Salmo 19:1-3; Hechos 27:28; [2] 1 Corintios 2:9,10; 2 Timoteo 3:15-17; Isaías 49: Cuál es el fin principal del hombre? R. El fin principal del hombre es el de glorificar a Dios, [1] y gozar de Él para siempre. [2] [1] Salmos 86; Isaías 60:21; Romanos 11:36; 1 Corintios 6:20; 1 Corintios 10:31; Apocalipsis 4:11. [2] Salmos 16:5-11; Salmos 144:15; Isaías 12:2; Lucas 2:10; Filipenses 4:4; Apocalipsis 21: Bajo el nombre de la Santa Escritura, o la Palabra de Dios escrita, son ahora contenidos todos los libros del Antiguo y Nuevo Testamento, que son estos: ANTIGUO TESTAMENTO Génesis Éxodo Levítico Números Deuteronomio Josué Jueces Rut I Samuel II Samuel I Reyes II Reyes 3. Qué es la Palabra de Dios? R. Las Santas Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento son la Palabra de Dios,[1] la única regla de fe y obediencia.[2] [1] 2 Timoteo 3:16; 2 Pedro 1:19-21; [2] Efesios 2:20; Apocalipsis 22:18,19; Isaías 8:20; Lucas 16:29,31; Gálatas 1:8,9; 2 Timoteo 3:15, Qué regla ha dado Dios para enseñarnos cómo hemos de glorificarlo y gozar de Él? R. La Palabra de Dios que se contiene en las Escrituras del Antiguo y del Nuevo Testamento, [1] es la única regla que ha dado Dios para enseñarnos cómo hemos de glorificarlo y gozar de Él. [2] [1] Mateo 19:4-5 con Génesis 2:24; Lucas 24:27,44; 1 Corintios 2:13; 1 Corintios 14:37; 2 Pedro 1:20-21; 2 Pedro 3:2,15-16; [2] Deuteronomio 4:2; Salmos 19:7-11; Isaías 8:20; Juan 15:11; Juan 20:30-31; Hechos 17:11; 2 Timoteo 3:15-17; 1 Juan 1:4. 3

10 I Crónicas II Crónicas Esdras Nehemías Ester Job Salmos Proverbios Eclesiastés Cantares Isaías Jeremías Lamentaciones Ezequiel Daniel Oseas Joel Amós Abdías Jonás Miqueas Nahúm Habacuc Sofonías Ageo Zacarías Malaquías NUEVO TESTAMENTO Mateo Marcos Lucas Juan Hechos Romanos I Corintios II Corintios Gálatas Efesios Filipenses Colosenses I Tesalonicenses II Tesalonicenses I Timoteo II Timoteo Tito Filemón Hebreos Santiago I Pedro II Pedro 1 Juan I1 Juan II1 Juan Judas Apocalipsis Todos los cuales son dados por inspiración de Dios para ser la regla de fe y conducta[7]. [7] Lucas 16:29, 31; Efesios 2:20; Apocalipsis 22:18-19; 2 Timoteo 3: Los libros comúnmente llamados apócrifos, no siendo de inspiración divina, no tienen parte en el canon de la Escritura; y así pues no tienen autoridad en la Iglesia de Dios, ni han ser aprobados, ni usados, sino de la misma manera que los otros libros humanos[8]. [8] Lucas 24:27, 44; Romanos 3:2; 2 Pedro 1: La autoridad de las Sagradas Escrituras, por la cual han de ser creídas y obedecidas, no depende del testimonio de hombre alguno o Iglesia; sino totalmente de Dios [quien es la verdad misma] el autor de ellas; y así pues han de ser recibidas porque son la Palabra de Dios[9]. [9] 2 Pedro 1:19, 21; 2 Timoteo 3:16; 1 Juan 5:9; 1 Tesalonicenses 2: Podemos ser movidos e inducidos por el testimonio de la Iglesia a tener una estimación alta y reverente de la Santa Escritura[10]. Y el carácter celestial del contenido, la eficacia de la doctrina, la majestad del estilo, el acuerdo de todas las partes, 4. Cómo sabemos que las Escrituras son la Palabra de Dios? R. Las Escrituras manifiestan en sí mismas que son la Palabra de Dios por su majestad[1] y pureza;[2] por el concordancia de todas sus partes,[3] y por el fin

11 el designio del conjunto [el cual es, de dar toda la gloria a Dios], el pleno descubrimiento que hace de la única manera de la salvación del hombre, las muchas otras incomparables excelencias y la entera perfección de la misma, son argumentos por los cuales abundantemente se muestra ella misma ser la Palabra de Dios; no obstante, nuestra plena persuasión y seguridad de la verdad infalible y autoridad divina de la misma, proviene de la obra interior del Espíritu Santo, dando testimonio por y con la Palabra en nuestros corazones[11]. [10] 1 Timoteo 3:15; [11] 1 Juan 2:20, 27; Juan 16:13, 14; 1 Corintios 2:10-12; Isaías 59:21. que se proponen en el todo, cual es dar toda gloria a Dios;[4] por su luz y poder para convencer a los pecadores, para consolar y edificar a los creyentes para la salvación;[5] pero el Espíritu de Dios, dando testimonio con las Escrituras y por medio de ellas al corazón del hombre, es el único que puede persuadir plenamente de que son la verdadera Palabra de Dios.[6] [1] Oseas 8:12; 1 Corintios 2:6, 7, 13; Salmo 119:18, 129; [2] Salmo 12:6; Salmo 119:140; [3] Hechos 10:43; Hechos 26:22; [4] Romanos 3:19, 27; [5] Hechos 28:28; Hebreos 4:12; Santiago 1:18; Salmo 19:7-9; Romanos 15:4; Hechos 15:4; Hechos 20:32; [6] Juan 16:13, 14; 1 Juan 2:20, 27; Juan 20: Todo el consejo de Dios tocante a todas la cosas necesarias para su propia gloria, la salvación del hombre, la fe y vida, está expresamente expuesto en la Escritura o por buena y necesaria consecuencia puede ser deducido de la Escritura; a la cual nada en tiempo alguno ha de ser añadido, sea por nuevas revelaciones del Espíritu o por las tradiciones de hombres[12]. Sin embargo, reconocemos que es necesaria la iluminación interior del Espíritu de Dios para el entendimiento salvador de tales cosas que son reveladas en la Palabra[13]; y que hay algunas circunstancias tocante a la adoración de Dios y el gobierno de la iglesia, comunes a las acciones y sociedades humanas, que han de ser ordenadas por la luz de la naturaleza y la prudencia cristiana, en acuerdo con las reglas generales de la Palabra, que siempre han de ser observadas[14]. [12] 2 Timoteo 3:15-17; Gálatas 1:8, 9; 2 Tesalonicenses 2:2; [13] Juan 6:45; 1 Corintios 2:9-12; [14] 1 Corintios 11:13, 14; 1 Corintios 14:26, Todas las cosas en las Escrituras no son igual de claras en sí mismas, ni igual de claras a todos[15]; sin embargo, aquellas cosas que son necesarias saber, creer y observar para la salvación, están tan claramente presentadas y abiertas en algún u otro lugar de la Escritura, que no tan sólo los eruditos, sino también los indoctos, con un debido uso de los 5

12 6 medios ordinarios, pueden alcanzar para un suficiente entendimiento de ello[16]. [15] 2 Pedro 3:16; [16] Salmo 119:105, El Antiguo Testamento en hebreo [que era el idioma nativo del pueblo de Dios de antaño] y el Nuevo Testamento en griego [el cual, en el tiempo en el que fue escrito, era el más conocido entre las naciones], siendo inspirados inmediatamente de Dios, y mantenidos puros por su cuidado singular y providencia en todas los edades, son pues auténticos[17]; de manera que, en todas las controversias de religión, la Iglesia ha de apelar finalmente a ellos[18]. Pero, puesto que estos idiomas originales no son conocidos de todo el pueblo de Dios, quien tiene el derecho a las Escrituras, e interés en las mismas, y que ellos son mandados, en el temor de Dios, a leerlas y escudriñarlas[19], así pues han de ser traducidos al idioma común de cada nación a la que vengan[20]; para que, morando en todos abundantemente la Palabra de Dios, ellos puedan adorarlo en una manera aceptable[21]; y, por la paciencia y el consuelo de las Escrituras, puedan tener esperanza[22]. [17] Mateo 5:18; [18] Isaías 8:20; Hechos 15:15; Juan 5:39, 46; [19] Juan 5:39; [20] 1 Corintios 14:6, 9, 11, 12, 24, 27, 28; [21] Colosenses 3:16; [22] Romanos 15:4. 9. La regla infalible para interpretar la Escritura es la Escritura misma; y así pues, cuando haya una cuestión sobre el verdadero y pleno sentido de cualquier Escritura [el cual no es múltiple, sino único] se debe buscar y ha de ser conocido por los otros lugares que hablan más claramente[23]. [23] 2 Pedro 1:20, 21; Hechos 15:15, El juez supremo por el cual todas las controversias de religión han de ser determinadas, y todos los decretos de concilios, opiniones de autores antiguos, doctrinas de hombres, y espíritus individuales, han de ser examinados; y en cuya

13 sentencia hemos de reposar, no puede ser otro, sino el Espíritu Santo hablando en la Escritura[24]. [24] Mateo 22:29, 31; Efesios 2:20 con Hechos 28: Qué es lo que principalmente enseñan las Escrituras? R. Lo que principalmente enseñan las Escrituras es lo que el hombre ha de creer con respecto a Dios y los deberes que Dios demanda del hombre.[1] [1] 2 Timoteo 1: Qué es lo que principalmente enseñan las Escrituras? R. Lo que principalmente enseñan las Escrituras es lo que el hombre ha de creer con respecto a Dios [1] y los deberes que Dios impone al hombre. [2] [1] Génesis 1:1; Juan 20:31; Romanos 10:17; 2 Timoteo 3:15; [2] Deuteronomio 10:12-13; Josué 1:8; Salmos 119:105; Miqueas 6:8; 2 Timoteo 3: Qué nos enseñan las Escrituras respecto a Dios? R. Las Escrituras nos enseñan lo que Dios es,[1] las personas que hay en la divinidad,[2] sus decretos[3] y la ejecución de estos.[4] [1] Hebreos 11:6; [2] 1 Juan 5:7; [3] Hechos 15:14, 15, 18; [4] Hechos 4:27, DE DIOS Y LA SANTA TRINIDAD Confesión de Fe Catecismo Mayor Catecismo Menor 1. No hay sino un solo Dios[1], vivo y verdadero [2]; quien es infinito en su ser y perfección[3], un espíritu sumamente puro[4], invisible[5], sin cuerpo, partes[6], o pasiones[7], inmutable[8], inmenso[9], eterno[10], incomprensible[11], todopoderoso[12], sumamente sabio[13], sumamente santo[14], sumamente libre[15], sumamente absoluto[16], obrando todas las cosas de acuerdo al consejo de Su inmutable y justísima voluntad[17], para Su propia gloria[18]; sumamente amoroso[19], clemente, misericordioso, paciente, abundante en bondad y verdad, que perdona la iniquidad, la trasgresión y el pecado[20]; galardonador de todos los que lo buscan con diligencia[21]; y sobre todo sumamente justo y terrible en sus juicios[22], que aborrece todo 7. Qué es Dios? R. Dios es un Espíritu,[1] en sí y por sí mismo infinito en su ser,[2] gloria,[3] bienaventuranza[4] y perfección;[5] absolutamente suficiente,[6] eterno,[7] inmutable,[8] incomprensible,[9] omnipresente,[10] todopoderoso,[11] omnisciente,[12] sumamente sabio,[13] sumamente santo,[14] sumamente justo,[15] sumamente clemente y misericordioso, paciente y abundante en bondad y verdad.[16] [1] Juan 4:24; [2] Éxodo 3:14; Job 11:7-9; [3] Hechos 7:2; [4] 1 Timoteo 6:15; [5] Mateo 5:48; [6] Génesis 17:1; [7] Salmo 90:2; [8] Malaquías 3:6; Santiago 1:17; [9] 1 Reyes 8:27; [10] Salmo 139:1-13; [11] Apocalipsis 4:8; [12] Hebreos 4:13; Salmo 147:5; [13] Romanos 16:27; [14] Isaías 6:3; [15] Deuteronomio 32:4; [16] Éxodo 34:6. P. 4. Qué es Dios? R. Dios es un Espíritu, [1] infinito, [2] eterno [3] e inmutable [4] en su ser, [5] sabiduría, [6] poder, [7] santidad, [8] justicia, [9] bondad [10] y verdad. [11] [1] Deuteronomio 4:15-19; Lucas 24:39; Juan 1:18; Juan 4:24; Hechos 17:29. [2] 1 Reyes 8:27; Salmos 139:7-10; Salmos 145:3; Salmos 147:5; Jeremías 23:24; Romanos 11:33-36; [3] Deuteronomio 33:27; Salmos 90:2; Salmos 102:12,24-27; Apocalipsis 1:4, 8; [4] Salmos 33:11; Malaquías 3:6; Hebreos 1:12; Hebreos 6:17-18; Hebreos 13:8; Santiago 1:17; [5] Éxodo 3:14; 1 Timoteo 1:17; 1 Timoteo 6:15-16; [6] Salmos 104:24; Romanos 11:33-34; Hebreos 4:13; 1 Juan 3:20; [7] Génesis 17:1; Salmos 62:11; Jeremías 32:17; Mateo 19:26; Apocalipsis 1:8; [8] Hebreos 1:13; 1 Pedro1:15-16; 1 Juan 3:3,5; Apocalipsis 15:4; [9] Génesis 18:25; Éxodo 34:6-7; Deuteronomio 32:4; Romanos 3:5, 26; [10] Salmos 103:5 ; Salmos 107:8; Mateo 19:7 ; Romanos 2:4; [11] Éxodo 34:6 ; Deuteronomio 32:4 ; Salmos 117:2 ; Hebreos 6:18. 7

14 pecado [23] y que de ninguna manera absolverá al culpable[24]. [1] Deuteronomio 6:4; 1 Corintios 8:4, 6; [2] 1 Tesalonicenses 1:9; Jeremías 10:10; [3] Job 11:7-9; Job 26:14; [4] Juan 4:24; [5] 1 Timoteo 1:17; [6] Deuteronomio 4:15, 16; Juan 4:24 con Lucas 24:39; [7] Hechos 14:11, 15; [8] Santiago 1:17; Malaquías 3:6; [9] 1 Reyes 8:27; Jeremías 23:23, 24; [10] Salmo 90:2; 1 Timoteo 1:17; [11] Salmo 145:3; [12] Génesis 17:1; Apocalipsis 4:8; [13] Romanos 16:27; [14] Isaías 6:3; Apocalipsis 4:8; [15] Salmo 115:3; [16] Éxodo 3:14; [17] Efesios 1:11; [18] Proverbios 16:4; Romanos 11:36; [19] 1 Juan 4:8, 16; [20] Éxodo 34:6, 7; [21] Hebreos 11:6; [22] Nehemías 9:32, 33; [23] Salmo 5:5, 6; [24] Nahum 1:2,3; Éxodo 34:7. P. 8. Hay más de un Dios? R. No hay sino uno solo, el Dios vivo y verdadero.[1] [1] Deuteronomio 6:4; 1 Corintios 8:4, 6; Jeremías 10: Hay más de un Dios? R. No hay sino uno solo,[18] el Dios vivo y verdadero.[19] [18] Deuteronomio 6:4. Isaías 44:6. Isaías 45: Corintios 8:4-6. [19] Jeremías 10:10. Juan 17:3. 1 Tesalonicenses1:9. 1 Juan 5: Dios tiene toda vida[25], gloria[26], bondad[27], bienaventuranza[28], en sí mismo y de Él mismo; y es solo [y] absolutamente suficiente en sí mismo y para Él mismo, no teniendo necesidad de criatura alguna que Él ha hecho[29], ni derivando gloria de ellas[30], sino solamente manifestando su propia gloria en ellas, por ellas, hacia ellas y sobre ellas; Él es el único manantial de todo ser, de quien, por medio de quien y para quien son todas las cosas[31]; y tiene el sumo soberano dominio sobre ellas, para hacer por ellas, para ellas, o sobre ellas cualquier cosa que le plazca[32]. Ante su vista todas las cosas están abiertas y manifiestas[33]; Su conocimiento es infinito, infalible e independiente de la criatura[34], de modo que nada es para Él contingente o inseguro[35]. Él es sobremanera santo en todos sus consejos, en todas sus obras y en todos sus mandamientos[36]. A Él son debidos, de los ángeles y del hombre y toda criatura, toda adoración, servicio u obediencia que le place requerir de ellos[37]. 8

15 [25] Juan 5:26; [26] Hechos 7:2; [27] Salmo 119:68; [28] 1 Timoteo 6:15; Romanos 9:5; [29] Hechos 17:24, 25; [30] Job 22:2, 135 3; [31] Romanos 11:36; [32] Apocalipsis 4:11; 1 Timoteo 6:15; Daniel 4:25, 35; [33] Hebreos 4:13: [34] Romanos 11:33, 34; [35] Hechos 15:18; Ezequiel 11:5; [36] Salmo 145:17; Romanos 7:12; [37] Apocalipsis 5: En la unidad de la Deidad hay tres personas, de una sustancia, poder y eternidad; Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo[38]. El Padre es de nadie, ni engendrado ni procede; el Hijo es eternamente engendrado del Padre[39]: el Espíritu Santo procede eternamente del Padre y del Hijo[40]. [38] 1 Juan 5:7; Mateo 3:16-17; Mateo 28:19; 2 Corintios 13:14; [39] Juan 1:14, 18; [40] Juan 15:26; Gálatas 4:6. 9. Cuántas personas hay en la divinidad? R. Hay tres personas en la divinidad, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; estas tres son un eterno y verdadero Dios, las mismas en sustancia, iguales en poder y en gloria; aun cuando se distinguen por sus propiedades personales.[1] [1] 1 Juan 5:7; Mateo 3:16, 17; Mateo 28:19; 2 Corintios 8:14; Juan 10: Cuáles son las propiedades personales de las tres personas de la Divinidad? R. Es propio del Padre haber engendrado al Hijo,[1] y del Hijo ser engendrado del Padre,[2] y del Espíritu Santo proceder del Padre y del Hijo ab eterno.[3] 6. Cuántas personas hay en la Divinidad? R. Hay tres personas en la Divinidad: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; [20] y estas tres personas son un solo Dios, las mismas en sustancia, e iguales en poder y gloria. [21] [20] Mateo 3:16-17; Mateo 28:19; 2 Corintios 13:14; 1 Pedro 1:2. [21] Salmos 45:6 ; Juan 1:1; Juan 17:5; Hechos 5:3-4; Romanos 9:5; Colosenses2:9; Judas 1: [1] Hebreos 1:5, 6, 8; [2] Juan 1:14, 18; [3] Juan 15:26; Gálatas 4: Cómo sabemos que el Hijo y el Espíritu Santo son Dios, iguales con el Padre? R. Las Escrituras manifiestan que el Hijo y el Espíritu Santo son Dios, iguales con el Padre, atribuyéndoles nombres,[1] atributos,[2] obras,[3] y adoración[4] que sólo son propios de Dios. [1] Isaías 6:3, 5, 8; Juan 12:41 con Hechos 28:25; 1 Juan 5:20; Hechos 5:3, 4; [2] Juan 1:1; Isaías 9:6; Juan 2:24, 25; 1 Corintios 2:10, 11; [3] Colosenses 1:16; Génesis 1:2; [4] Mateo 28:19; 2 Corintios 13:14. 9

16 ÍNDICE DE TEXTOS BÍBLICOS USADOS EN LOS ESTÁNDARES DE WESTMINSTER Abreviaciones CFW Confesión de Fe de Westminster CMA Catecismo Mayor de Westminster CME Catecismo Menor de Westminster Un número 2 entre paréntesis [2] indica una referencia bíblica que está citada dos veces en un mismo párrafo de los Estándares. GÉNESIS 1... CFW 4:1, CMA 15, CME 9 1:2... CFW 4:1, CMA 11 1:26... CFW 4:2 [2], CFW 9:2 1: CFW 19:1, CMA 92 1: CME 10 1: CMA 20 1:27... CFW 4:2, CMA 17 [2] 1: CFW 6:3 1:28... CFW 4:2, CMA 17, CMA 20 2: CFW 21:7, CMA 116, CMA 121, CME 59 2:3... CMA 20 2:7... CFW 4:2, CMA 17 [2] 2:8... CMA 20 2:9... CMA 20 2:15... CMA 141 2: CMA 20 2: CFW 6:3, CFW 9:2, CMA 22, CME 16 2:17... CFW 4:2, CFW 6:2, CFW 7:2, CFW 19:1, CMA 20, CMA 27, CMA 92, CMA 193, CME 12 2:18... CFW 24:2, CMA 20 2:22... CMA 17 2:24... CFW 24:1 3:5... CMA 145 3:6... CFW 4:2, CFW 9:2, CMA 17, CME 15 3: CFW 6:2, CMA 21, CME 13 3:8... CMA 20, CMA 27, CME 19 3: CFW 4:2 3:10... CMA 27, CME 19 3:12... CME 15 3: CMA 145 3:13... CFW 6:1, CMA 21, CME 13 3:15... CFW 7:3, CFW 8:6, CFW 25:2, CMA 32 3:17... CMA 28, CMA 193 3:19... CFW 32:1, CMA 141 3:23... CFW 4:2 3:24... CMA 27, CME 19 4:4... CFW 16:6 4:5... CFW 16:7 4:9... CMA 145 4:13... CMA 28, CMA 83, CMA 105 4: CMA 124 5:3... CFW 6:3 6:5... CFW 6:2, CFW 6:4, CMA 25, CMA 149, CME 82 8:21... CFW 6:4, CMA 149, CME 82 8:22... CFW 5:2 9:6... CMA 136, CME 69 9:21... CMA 130 9:22... CMA 145 9:23... CMA :1... CFW 2:1, CMA 7 17:7... CFW 25:2, CFW 27:1, CFW 28:4, CMA 62, CMA 101, CMA 162, CMA 166, CMA 177, CME 92 17:9... CMA 166, CMA : CFW 28:4 17:10... CFW 27:1, CFW 27:2, CMA 162, CME 92, CME 95 18:17... CMA :19... CMA 99, CMA :27... CFW 21:3, CMA :9... CMA : CFW 22:3 24: CFW 22:3 24: CFW 22:3 24: CFW 24:3 26:7... CMA :9... CMA :20... CMA 193, CME : CFW 22:6 30:30... CME 74 32:10... CMA 185, CMA :11... CMA :14... CFW 24:3, CFW 27:1, CMA : CMA :11... CMA :24... CMA :26... CMA 130, CMA : CMA :10... CMA : CMA :7... CFW 5:1, CMA 18 45:8... CMA :11... CMA :12... CMA :14... CMA 141, CME 74 47:20... CMA 141, CME 74 49:10... CFW 19:4, CMA 45 49:28... CMA :20... CFW 5:4 ÉXODO 1:14... CMA

17 3:14... CFW 2:1, CMA 7, CMA 101, CME 4 4: CMA 145 4: CFW 28:5, CMA 109 5:2... CMA 113 5: CMA 130 5:17... CMA 130 6:3... CMA 101 7:3... CFW 5:6 8:15... CFW 5:6 8:32... CFW 5: CMA 162, CME 92 12:15... CMA :48... CFW 27:1, CMA :31... CMA :22... CMA :23... CFW 21:8, CMA : CFW 21:8, CMA : CMA 117, CME 60 16:29... CMA : CFW 21:8 17:7... CMA :19... CMA :24... CMA : CMA :2... CMA 101, CME 43 20:3... CMA 103, CME 45 20: CFW 21:1, CMA 107, CME 49 20: CMA :7... CFW 22:1, CFW 22:2, CFW 22:3, CMA 99, CMA 111, CMA 114, CME 53 20:8... CFW 21:7 [2], CFW 21:8, CMA 117 [2], CMA 121, CME 60 20: CMA 115, CME 57 20: CMA :9... CME 62 20:10... CFW 21:7, CMA 99, CMA 117, CMA 118, CME 60 20: CFW 21:7 20:11... CME 62 20:12... CMA 99, CMA 123, CMA 133, CME 63 20:13... CMA 134, CME 67 20:14... CMA 137, CME 70 20:15... CFW 26:3, CMA 140, CME 73 20:16... CMA 143, CME 76 20:17... CMA 146, CME CFW 19:4 21:13... CFW 5:2 21:14... CMA :15... CMA : CMA : CFW 19:4 22: CMA : CFW 22:3 23:1... CMA : CMA 141, CME 74 23:12... CMA :1... CFW 19:2 24:7... CMA :8... CMA :38... CFW 16:6, CMA 78 31: CFW 21:8 32:5... CMA 109, CME 51 32:8... CMA 109, CME 51 34: CMA 98 34:6... CMA 7 34: CFW 2:1, CME 4 34:7... CFW 2:1 34: CMA 110, CME 52 34:16... CFW 24:3 34:21... CMA 121 LEVÍTICO 5:1... CMA 145 6: CMA :3... CMA 152, CMA : CMA 95, CMA CFW 24:4 18: CMA : CFW 24:4 18:30... CMA :3... CMA :11... CMA :12... CFW 22:1, CMA :15... CMA 144, CMA :16... CMA 145, CME 78 19:17... CMA 99, CMA 136, CMA :29... CMA :32... CMA :37... CMA :6... CMA : CMA 95 20: CMA : CFW 24:4 23:3... CMA :11... CMA :16... CFW 23:3 25:17... CMA :35... CMA 141, CME 74 26: CFW 19:6 26:25... CMA 151 NÚMEROS 5:19... CFW 22:3 5:21... CFW 22:3 11: CMA : CMA :29... CMA :2... CMA : CMA :2... CMA :22... CMA :30... CMA :39... CMA : CMA :11... CMA :5... CFW 22:7 30:8... CFW 22:7 30: CFW 22:7 35: CMA :21... CMA :31... CMA :33... CMA 136 DEUTERONOMIO 2:30... CFW 5:6 4:2... CMA 109 4: CMA 99 4: CFW 2:1 4: CMA 109, CME 51 4: CFW 21:1 5: CMA 93 5: CMA 116, CME 58 5: CMA 121 5:16... CMA 133, CME 66 5:21... CMA 148, CME 81 5:29... CMA 110 5:31... CMA 93 5:32... CFW 19:2 5:33... CMA 93 6:4... CFW 2:1, CMA 8, CME 5 6:5... CMA 99, CMA 104 6: CFW 21:6, CMA 99, CMA 129, CMA 160 6: CMA 156 6:13... CFW 21:5, CFW 22:2, CMA 99, CMA 108 7: CFW 24:3 7:5... CMA 108 8:3... CMA 193 8:17... CMA 105 8: CMA :4... CFW 19:2, CMA 98, CME 41 10:20... CFW 22:1 12: CMA : CME 51 12:32... CFW 21:1 13: CFW 23:3 13: CMA : CFW 20:4, CMA :8... CMA :12... CFW 23:3 17:10... CMA