HECHOS DE LOS APÓSTOLES

Transcripción

1 PROGRAMA No HECHOS DE LOS APÓSTOLES Cap. 9:17-43 Continuamos estudiando hoy el capítulo 9 de los Hechos de los Apóstoles. Y en nuestro programa anterior, estábamos reflexionando sobre la conversión extraordinaria de Saulo de Tarso. Y usted recordará que habíamos dicho que la conversión, requiere que el Espíritu Santo obre por la Palabra de Dios y por medio de un hombre de Dios. Y en cuanto a la conversión de Saulo de Tarso, dijimos que el agente humano había sido Esteban. Más tarde, el Señor Jesús apareció personalmente a Saulo. Ahora, recordemos que el Señor Jesús, antes de dejar a sus discípulos, les dijo que iba a enviar a Su Espíritu Santo. Y les explicó lo que el Espíritu haría. Dijo Jesús allá en el capítulo 16 del evangelio según San Juan, versículos 14 y 15, con respecto al Espíritu Santo:... El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os hará saber las cosas que habrán de venir. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber. Ahora, creemos que cuando el Señor Jesucristo apareció personalmente a Saulo, el Espíritu de Dios, abrió sus ojos espiritualmente y los cerró físicamente, a fin de que Saulo pudiera ver al Señor Jesús. De modo que podemos decir, que ciertamente el Espíritu Santo estaba obrando. Ahora, qué en cuanto a la Palabra de Dios? Cómo fue usada en la conversión de Saulo? Saulo de Tarso era fariseo. Sabía muchísimo en cuanto a la Palabra de Dios. El hecho es que si había alguien que estuviera saturado de la Palabra de Dios, ese TTB Página 1 de Programa No. 0365

2 era Saulo de Tarso. Más tarde, cuando escribió sus epístolas, fue obvio que conocía bien el antiguo testamento. Por lo tanto, es muy claro aquí que el Espíritu Santo y la Palabra de Dios, operaron en su conversión. Además, como dijimos, es muy claro que Esteban actuó como el instrumento humano para alcanzar a Pablo. Y como lo veremos más adelante, creemos que además de Esteban, el Señor usó también a Ananías como otro agente humano para alcanzar a Saulo. Creemos pues que Dios usa un instrumento humano en la conversión de todo individuo. Ahora, es posible que ese individuo no esté presente precisamente en la hora de la conversión. Pues, la influencia de nuestro testimonio por medio de nuestra vida y por medio de nuestras palabras, llega más allá del momento mismo del testimonio. Es por eso que usted y yo, amigo oyente, debemos siempre dejar un buen testimonio para el Señor Jesucristo. Permítanos contarle ahora algunos incidentes para demostrar que esto es cierto. El Dr. McGee, autor de esos estudios bíblicos, recibió en una ocasión una carta de un barbero. Y este barbero le contaba que tenía cierto cliente que había venido regularmente a su barbería ya por 20 años. Un día cuando este cliente salió de la silla para pagar por su corte de cabello, le preguntó al barbero: Ha escuchado usted alguna vez el programa A Través de la Biblia? El barbero dijo que no, que nunca lo había escuchado. Entonces, sin esperar más, este cliente se dirigió donde estaba el radio y le indicó al barbero donde se podía sintonizar el programa. Luego, le dijo al barbero: Lo pasan por esa emisora todos los días a las ocho de la mañana. Escúchelo! Esa fue la última vez que estos dos hombres se vieron. Pues, el cliente murió repentinamente muy pronto después de este incidente. Usted amigo oyente, quizá ya puede imaginarse cómo termina esta historia. El barbero empezó a escuchar el programa. Y después de dos años, escribió. Y lo más maravilloso es que por medio del programa llegó a conocer a Jesucristo como su Salvador personal. TTB Página 2 de Programa No. 0365

3 Ahora, otro incidente. El Dr. C.I. Scofield es el hombre que dirigió el trabajo relacionado con la Biblia anotada que lleva su nombre, y que es muy valiosa para el estudio bíblico. Pues bien, antes de su conversión él era un abogado internacional sobresaliente, pero tenía un problema y éste era que solía tomar mucho. Tenía una madre piadosa y devota, quien oraba continuamente por él. Pero ella murió antes de que el Dr. Scofield fuera convertido. Cierta vez el Dr. Chafer, otro hombre de Dios, estaba orando junto con el Dr. Scofield. Más tarde dijo que había oído al Dr. Scofield decir: Señor, si mi madre no sabe que me he convertido, favor de decírselo. Dios, amigo oyente, sí usa un instrumento humano en la conversión de toda persona. Es posible, repetimos, que aquella persona no esté presente en el momento de la conversión, pero es por medio de un instrumento humano que Jesucristo entra en la presencia de un individuo. Dios obra en la conversión por medio de un hombre de Dios que usa la Palabra de Dios y que es guiado por el Espíritu de Dios. Volviendo ahora al capítulo 9 de los Hechos de los Apóstoles, leamos el versículo 17: Hechos 9:17... para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. Qué cambio! Todavía es Saulo de Tarso, pero ahora es hermano Saulo. Ya no es enemigo. Es hermano. Y amigo oyente, cualquiera que ame al Señor Jesucristo llega a ser hermano de todos los hermanos. Todos somos hermanos en El. Lamentablemente, tenemos que añadir aquí, que los hermanos no siempre se portan como hermanos. En fin, Saulo va a recibir ahora su vista física. También va a ser lleno del Espíritu Santo. Será lleno del Espíritu para servicio. Esta es la experiencia que se manifiesta en la vida del creyente. Saulo había sido bautizado ya con el Espíritu Santo en el camino a TTB Página 3 de Programa No. 0365

4 Damasco, porque fue salvado en ese camino. Pero, no fue sino hasta cuando este hombre Ananías vino a él, cuando fue lleno del Espíritu Santo. Por medio de esta plenitud del Espíritu llegará entonces a ser testigo para el Señor Jesús, y recibirá su vista física y espiritual. Leamos ahora el versículo 18 de este capítulo 9 de los Hechos: Hechos 9:18... y levantándose, fue bautizado. Notamos ahora que Saulo es bautizado con agua. Ya había recibido el bautismo del Espíritu Santo al experimentar la salvación en el camino a Damasco. Pero ahora, es bautizado con agua como señal y sello de su conversión. El agua no tenía nada que ver con su salvación. Ya había sido salvado y bautizado con el Espíritu Santo allá en el camino a Damasco. Cuando Ananías puso sus manos sobre él, fue lleno del Espíritu Santo para servicio. Ahora, el versículo 19: Hechos 9:19... con los discípulos que estaban en Damasco. Veamos ahora cómo Saulo empieza a testificar en Damasco. Leamos el versículo 20: Hechos 9:20... diciendo que éste era el Hijo de Dios. Notemos que Saulo de Tarso empieza a testificar en seguida. Por qué? Porque es lleno del Espíritu Santo. Empezó a predicar en la sinagoga y a decir que Cristo es el Hijo de Dios. Amigo oyente, es necesario que usted sepa quién es Cristo, antes de que pueda creer en lo que hizo. El murió por sus pecados. Es precisamente porque El es el Hijo de Dios que le fue posible morir por sus pecados. No me fue posible a mi morir por sus pecados. No le es posible a usted morir por los míos. Ni tampoco puedo morir yo por los TTB Página 4 de Programa No. 0365

5 míos. Ningún ser humano puede hacer eso. Fue Cristo Jesús, el Hijo de Dios, quien tuvo que morir por sus pecados y los míos. Por tanto, Saulo empezó a predicar que Cristo es el Hijo de Dios. Eso es lo primero que es necesario saber. Continuemos ahora leyendo los versículos 21 y 22 de este capítulo 9 de los Hechos: Hechos 9: Damasco, demostrando que Jesús era el Cristo. Ahora, la palabra Cristo significa el Mesías. Y parece que Saulo confundió a los judíos al predicar tal cosa. Saulo de Tarso es el número uno, o sea la primicia en muchos departamentos. Es el número uno en sufrir, y el número uno como misionero. Y creemos que también es número uno en cuanto a su cociente intelectual. Pues, estamos convencidos que era un hombre muy inteligente. Esto lo demuestra el hecho que pudo confundir a aquellos que trataron de atacarle intelectualmente. Ahora los versículos 23 al 25 dicen: Hechos 9: le bajaron por el muro, descolgándole en una canasta. Cuando los judíos no pudieron ganar por medio de argumentos, hicieron entonces uso de otra táctica y esa fue la simple eliminación del enemigo. Estamos seguros de que debe haber sido una experiencia muy espeluznante haber sido bajado por el muro, colgando en una canasta. Sin embargo, nunca leemos en ninguna parte del nuevo testamento que Pablo diera alguna conferencia titulada: Por el muro, colgando en una canasta. No hay ningún registro de tal cosa y eso debe servir de lección para muchísimos hoy en día, que negocian en lo sensacional. Aquí está un hombre que ha tenido una experiencia extraordinaria, pero no va a todas partes del Imperio Romano hablando de cómo se escapó por el muro en una canasta. Bien pudo haberlo hecho, pero, tiene algo mucho más importante que presentar. TTB Página 5 de Programa No. 0365

6 Necesitamos amigo oyente, aprender a nunca dejar que nuestra experiencia impida que Cristo sea presentado. Nunca debemos dejar que nuestra persona impida que Cristo se vea. A veces oímos una oración que se supone muy piadosa. Dicen: Esconde al predicador tras la cruz. Amigo oyente, esa no es la oración que se debe elevar. Debemos orar así: Ayuda al predicador a presentar a Cristo de tal manera que el Espíritu de Dios pueda tomar las cosas de Cristo y revelárnoslas. Ayúdale a presentar a Cristo! Eso fue lo importante para Saulo. Ha sido lo importante por dos milenios. Y es todavía hoy lo más importante. Veamos ahora cómo Saulo es perseguido en Jerusalén. Leamos el versículo 26 de este capítulo 9 de los Hechos: Hechos 9:26... le tenían miedo, no creyendo que fuese discípulo. Creían que esto era una decepción por parte de Saulo de Tarso. Se imaginaban que Saulo quería sólo infiltrarse entre ellos, como un gusano traidor. Después de todo, les había perseguido, y ellos tenían experiencia con los que trataban de introducirse en las asambleas de esta manera. Probablemente habían oído acerca de Simón el mago y de las tácticas que él empleaba en Samaria. Ahora, el versículo 27 continúa: Hechos 9:27... Damasco había hablado valerosamente en el nombre de Jesús. Cuán buen hermano era Bernabé, hijo de consolación y solaz! Ahora, Bernabé se hace responsable de Saulo. Se le acerca y le favorece. Qué bendición fue Bernabé para Saulo! Y aquí vemos un ministerio que todavía es necesario hoy en día. Qué bendición ha sido esto a muchos cristianos! Cuánto necesitamos favorecer a algún nuevo convertido y ayudarle en la fe. Ahora, el versículo 28 dice: TTB Página 6 de Programa No. 0365

7 Hechos 9:28 Y estaba con ellos en Jerusalén; y entraba y salía. Notamos aquí que por fin aceptan a Saulo en la asamblea en Jerusalén y él se asocia allí con los discípulos. Leamos el versículo 29: Hechos 9:29... y disputaba con los griegos; pero éstos procuraban matarle. Ahora, estos no eran realmente griegos, sino israelitas que habían sido criados fuera de Israel, en alguna parte del mundo griego. El testimonio de Saulo fue tan poderoso que ellos concluyeron que la única manera de acabar con él era matándolo. Ahora, versículos 30 y 31 de los Hechos capítulo 9: Hechos 9: Señor, y se acrecentaban fortalecidas por el Espíritu Santo. Aquí vemos a Saulo volviendo a su pueblo natal. Probablemente volvió a su casa y nos imaginamos que contó a su padre, a su madre, a sus hermanos y hermanas, y otros parientes acerca del Señor Jesucristo. Pero en realidad no sabemos nada en cuanto a ellos, porque Saulo nunca habla acerca de ellos. Mientras tanto, la Iglesia seguía creciendo. El evangelio llegó a Judea, a Galilea, y a Samaria. Y dentro de poco, comenzará a ir hasta lo último de la tierra. Permítanos volver atrás por un momento. Para ser exactos, mejor es que no digamos que no sabemos nada en cuanto a los parientes de Pablo, porque en la carta a los Romanos, capítulo 16, versículo 7 él escribe: Saludad a Andrónico y a Junias, mis parientes... Y en la misma carta a los Romanos, capítulo 16, el mismo versículo 7 dice: Saludad a Herodión, mi pariente. Esto nos dice que algunos de sus parientes también llegaron a ser creyentes TTB Página 7 de Programa No. 0365

8 en Cristo Jesús. Además es muy posible que el versículo 13 del capítulo 16 de la misma carta a los Romanos, se refiera a su madre y a su hermano al decir: Saludad a Rufo, escogido en el Señor, y a su madre y mía. Pasemos ahora a un pasaje que describe el ministerio de Pedro en Lida y en Jope. Leamos los versículos 32 al 35 de este capítulo 9 de los Hechos: Hechos 9: Sarón, los cuales se convirtieron al Señor. Pedro era un apóstol y tenía los dones de un apóstol. Ahora, el versículo 36 dice: Hechos 9:36... esta abundaba en buenas obras y en limosnas que hacía. Esta mujer prestaba un servicio social. Este era su don. Este era uno de los dones del Espíritu Santo. Es decir, tenía el don de costura. Ahora, algunos dirán: quiere usted decir que la costura es un don del Espíritu Santo? Sí. Así lo era para esta mujer. Muchos hoy en día buscan algún don excitante como el de hablar en lenguas, por ejemplo. Permítanos sugerirle un don que es práctico. Le digo bondadosamente y con mucho cuidado: Mi querida hermana, aprenda a coser. La costura era el don de esta mujer. Dudamos que jamás se parara para hablar en una convención de damas, ni enseñara en la clase de las damas. No creemos que jamás tuviera la oportunidad porque ella era una de las primeras santas. Pero, sí se ocupaba en hacer muchas cosas maravillosas. Y fíjese usted lo que ocurre aquí en el versículo 37: TTB Página 8 de Programa No. 0365

9 Hechos 9:37... después de lavada, la pusieron en una sala. Fíjese cómo los cristianos preparaban el cuerpo para el entierro en aquel entonces. Ahora, versículo 38: Hechos 9:38... no tardes en venir a nosotros. Enviaron palabra de Jope a Lida de que una maravillosa mujer en la Iglesia en Jope había muerto. Al parecer, creyeron que Simón Pedro la podría levantar de los muertos. Por lo menos, le mandaron a decir que viniera. Ahora, el versículo 39 de este capítulo 9 de los Hechos dice: Hechos 9:39... Dorcas hacía cuando estaba con ellas. Notará usted que fueron las viudas, las que participaron en esta exhibición de modas. Todas sacaron a lucir los vestidos que ella les había hecho. Ahora, Por qué hicieron esto las viudas? Simplemente porque eran pobres. No podrían haber tenido ningún vestido si no fuera porque Dorcas se los hacía. Ella había cosido ropa para ellas. En esto consistía su ministerio. Este fue su don del Espíritu Santo. Continuemos con los versículo 40 y 41 de este capítulo 9 de los Hechos: Hechos 9: llamando a los santos y a las viudas, la presentó viva. Aquí tiene usted un ejemplo del ejercicio de un don de un apóstol, un don que fue acompañado por una señal. El libro de los Hechos de los Apóstoles es el libro histórico de TTB Página 9 de Programa No. 0365

10 la Iglesia. Relata el ministerio de Simón Pedro, quien era apóstol; y de Pablo, quien también era apóstol. Simón Pedro era ministro en su propio pueblo, y sin embargo es el que abrirá la puerta para los gentiles. Saulo de Tarso, por otra parte, llegó a ser el apóstol Pablo y el apóstol a los gentiles. Ambos levantaron a los muertos. Es muy posible que levantaran a otros, pero el registro declara que los dos levantaron por lo menos a una persona de los muertos. Estos hombres tenían los dones de un apóstol, es decir, dones que fueron acompañados por señales. Les fue posible hacer milagros. Les fue posible sanar a los enfermos. Les fue posible levantar a los muertos. Estas eran las señales, las evidencias de un apóstol. Eran dones apostólicos. El apóstol Pablo dice que los apóstoles son el fundamento de la Iglesia, en el sentido de que la Iglesia es edificada sobre ellos. Ellos son los que dieron el Nuevo Testamento sobre el cual la Iglesia realmente está edificada. Hoy en día, no tenemos necesidad de los dones apostólicos, los dones junto con señales para demostrar que alguien es apóstol. La cuestión hoy en día es la doctrina. Al fin de la época de las Escrituras Novotestamentarias, el apóstol Juan escribió sus epístolas. Escuche usted sus instrucciones para descubrir a los que engañan. Dice el apóstol Juan en su segunda carta universal, versículos 10 y 11: Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no le recibáis en casa, ni le digáis: Bienvenido! Porque el que le dice: Bienvenido! participa en sus malas obras. Hacia el fin del ministerio del apóstol Pablo, la Escritura indica con toda claridad, que Pablo no ejerció el don de sanar cuando estaba con los que se encontraban enfermos. El énfasis cayó más y más sobre la Palabra de Dios, la que nos guía a la persona de Jesucristo. Ahora, esto no quiere decir que Dios ya no sana las enfermedades. Quiere decir en cambio, que los dones con señales ya no son necesarios para poder autenticar el evangelio, ni para autenticar un apostolado. Leamos ahora los versículos 42 y 43, versículos finales de este capítulo 9 de los Hechos: TTB Página 10 de Programa No. 0365

11 Hechos 9: Jope en casa de un cierto Simón, curtidor. Un curtidor toma pieles y las abreva en ácido. Y realmente lo que resulta es que el aire en tal parte se vuelve muy pestilente. Ahora, aquellos que han tenido la oportunidad de ir a Israel, a la tierra santa y han podido visitar a Jope, han podido ver el lugar donde Simón Pedro se quedó. Y es posible que sea hasta el mismo cuarto. Nos dicen que Jope es un pueblo algo pintoresco a la orilla del agua y esta casa está en la ribera. La casa parece ser lo suficientemente vieja como para haber estado allí por mucho tiempo. Este, pues, es el lugar donde Simón Pedro se quedó por muchos días. Y así concluye el capítulo 9 de los Hechos de los Apóstoles. Llegamos ahora al capítulo 10. Y en este capítulo tenemos la conversión de Cornelio, el centurión romano. El capítulo 10 continúa el relato iniciado en el capítulo anterior acerca del ministerio de Simón Pedro. Mas tarde la historia continuará con el ministerio del apóstol Pablo. Ahora, aunque Pablo es llamado el apóstol a los gentiles, no debemos olvidar que fue Pedro quien abrió la puerta para los gentiles. Veamos pues el primer versículo de este capítulo 10 de los Hechos: Hechos 10:1... Cornelio, centurión de la compañía llamada la Italiana. Recuerde usted que Pablo había estado en Cesarea, como vimos allá en el capítulo 9, versículo 30 y que probablemente alguno de los otros apóstoles habían estado predicando el evangelio por la costa. Tel-Aviv realmente es parte de la vieja ciudad de Jope. Al viajar uno por la costa desde Jope, el próximo lugar de algún tamaño sería la ciudad de Cesarea. Esta en verdad era una ciudad romana y era el lugar donde vivía Pilato. Esta ciudad era la residencia oficial del gobernador y de los que gobernaban la tierra. Por tanto, esta es la TTB Página 11 de Programa No. 0365

12 ciudad donde estaba apostado Cornelio. El era centurión de una compañía de soldados romanos llamada la Italiana. Bien, amigo oyente, hablaremos más con respecto a Cornelio, en nuestro próximo programa, Dios mediante. Por hoy, tenemos que detenernos aquí porque nuestro tiempo ha llegado a su fin. Será entonces hasta nuestro próximo programa, que Dios continúe bendiciéndole en gran manera. TTB Página 12 de Programa No. 0365