EL PROFETISMO: Características del Profeta.

Transcripción

1 EL PROFETISMO: Características del Profeta. TEXTO BÍBLICO BASE: 2 Pedro 1:21 Y porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. OBJETIVOS: A. Analizar las características de los profetas. B. Identificar los periodos en los cuales vivieron los profetas tanto del Nuevo como del Antiguo Testamento. TEMÁTICAS. A.- Introducción y vocabulario. B.- Características del Profeta. C.- Tipos de Profetas. D.- El mensaje del profeta. INTRODUCCIÓN. En la lección anterior revisamos el vocabulario que contiene la Biblia para expresar la acción profética. La presente lección pretende comprender las características que tienen los profetas bíblicos, en qué se asemejan y en qué diferencian unos de otros. También estudiaremos los profetas bíblicos y la época en la que cada uno vivió. Es interesante darnos cuenta de que cada uno de ellos fue un instrumento de Dios para el pueblo. Fueron la voz de Dios en momentos de tranquilidad y tormenta. Algunos fueron tomados en cuentas por los reyes y el pueblo, otros fueron menospreciados. Animamos al estudiante a analizar los textos bíblicos y aprender de ellos, ya que es la fuente de revelación para nuestras vidas. Finalmente, deseamos que no solo sea un conocimiento intelectual-teórico, sino también que el profetismo pueda ser vivido por el lector, y de esta forma pueda transformarse en un hombre/mujer de Dios, que habla guiado por el Espíritu Santo la Palabra de Verdad, en el mundo de hoy.

2 CARACTERISTICAS DEL PROFETA 1.- La Inspiración Divina. Esta sería la principal característica del profeta, T.H. Robinson la describe de la siguiente manera: Podemos formar una imagen mental de la actividad pública del profeta. Quizás, lo encontremos mezclándose entre la gente, a veces en un día común y corriente y otras en ocasiones especiales. Repentinamente algo le sucede. Su mirada se fija en algo, convulsiones extrañas toman posesión de sus miembros, su manera de hablar cambia. Los hombres se dan cuenta de que el Espíritu ha descendido sobre él. El ataque pasa y luego él relata a los que se encuentran a su alrededor lo que había visto y escuchado". En ocasiones, un éxtasis repentino poseía a las personas. Cuando el Espíritu vino sobre Saúl, la gente preguntaba: Saúl también entre los profetas (1 Sam. 10:11). Ver Ezequiel 11: Hay muchos otros profetas que demuestran un comportamiento normal. W.R. Smith dijo que Dios habla a sus profetas no por procesos mágicos ni mediante visiones dadas a unos pobres frenéticos, sino por medio de la palabra clara e inteligible dirigida al intelecto y al corazón. La característica del verdadero profeta es que mantiene su conciencia y su dominio propio bajo revelación'. Este comentario resume hábilmente el retrato bíblico de un profeta. Ver Joel 1:1; Amós 7: El profeta es un hombre público. José Sicre dice al respecto: Su deber de transmitir la palabra de Dios lo pone en contacto con los demás. No puede retirarse a un lugar sosegado de estudio o reflexión, ni reducirse al limitado espacio del templo. Su lugar es la calle y la plaza pública, el sitio donde la gente se reúne, donde el mensaje es más necesario y la problemática más apremiante. Entonces el profeta está en contacto directo con el mundo que lo rodea: conoce las confabulaciones políticas, las intenciones del rey, el descontento de los pobres, el lujo de los poderosos, la despreocupación de muchos sacerdotes. Ningún sector le resulta indiferente, porque nada es indiferente para Dios.

3 4.- El profeta es un hombre amenazado. En ocasiones la amenaza sólo sería agotarse y defraudarse reiterando una y otra vez el mensaje; y no encontrar una buena respuesta en los oyentes. A veces enfrentan complejas situaciones. A Oseas lo llaman loco y necio ; a Jeremías lo acusaron de traidor a la patria. Y se llega incluso a la persecución, la cárcel y la muerte. Elías debe huir del rey en muchas ocasiones; Miqueas termina en la cárcel; Amós es expulsado del Reino Norte; Jeremías pasa en prisión varios meses de su vida (Jer. 37:21); igual le ocurre a Hananí. Zacarías es apedreado en los atrios del templo (2 Cr 24: 17-22); Urías es acuchillado y tirado a la fosa común (Jeremías 26: 20-23). Esta persecución no es sólo de los reyes y de los poderosos; también intervienen en ella los sacerdotes y los falsos profetas. E incluso el pueblo se vuelve contra ellos, los crítica, desprecia y persigue. En el destino de los profetas queda prefigurado el de Jesús de Nazaret. Silenciaríamos un detalle importante, si no dijésemos que la amenaza le viene también de Dios. Le cambia la orientación de su vida, lo arranca de su actividad normal, como le ocurre a Amós (7: 14s) o a Eliseo (1 Reyes 19: 19-21); le encomienda a veces un mensaje muy duro, casi inhumano, teniendo en cuenta la edad o las circunstancias en que se encuentra. 5.- La profecía es un carisma. Como tal, rompe todas las barreras: La barrera del sexo, porque en Israel existen profetisas, como Débora (Jue 4) o Hulda (2 Re 22). La barrera de la cultura, porque no hacen falta estudios especiales para transmitir la palabra del Señor. La barrera de las clases, porque personas vinculadas a la corte, como Isaías, pequeños propietarios, como Amós, o simples campesinos, como Miqueas, pueden ser llamados por Dios. Las barreras religiosas, porque no es preciso ser sacerdote para ser profeta; más aún, podemos afirmar que gran número de profetas eran seculares.

4 6.- El llamado. El profeta bíblico tiene la seguridad de que Dios lo ha llamado para comunicar su mensaje. A veces el llamado se describe con detalle, a veces no. Lo importante es destacar que cada relato contiene elementos singulares. El llamado es individual y un evento singular, no es una fórmula estereotipada, a continuación se presentan distintos tipos de llamados: Isaías parece haber aceptado su llamado sin mayores inconvenientes. Jeremías se mostró renuente y contendió con Yahvéh. Amos parece haber tenido un solo llamado. Ezequiel da el día, el mes y el año de varias ocasiones en las que el Señor lo llamó y le dio un mensaje. Dios utilizó situaciones históricas y sentimientos personales al comunicarse con los profetas. 7.- El carácter. Pedro dice, respecto a la profecía:...hombres movidos por el Espíritu Santo, han hablado de parte de Dios. 2 Pedro 1:21 Existen escasas referencias bíblicas que hablen de la santidad de los profetas, generalmente hay acuerdo en que Dios sólo usaría a personas santas como profetas. Es difícil creer que el profeta Natán habría podido amonestar efectivamente a David si él mismo hubiera sido un hombre de pasiones desenfrenadas. Aun así, responde a la información bíblica recalcar más la total dedicación del profeta a Dios que su excelencia moral.

5 CONCLUSIONES. Para ser profeta había que tener un claro llamado de Dios, pero esta vocación implicaba riesgos, salir de la comodidad e incluso se podría perder la vida por obedecer al Señor. Aún así, hubo muchos que fueron fieles a la misión que Dios les encomendaba y, aunque no siempre tenían una buena recepción por parte del pueblo, permanecían firmes. Algunos profetas entraban en trance o un éxtasis para entregar el mensaje del Señor, otros lo hacían de forma totalmente consciente. Lo importante era entregar el mensaje y así agradar al Señor. Eran hombres santos (2 Pedro 1:21) y con determinación. Podían estar frente a un rey, el pueblo o alguna persona poderosa y no tener miedo del qué dirán, del ridículo ni de su propia muerte. En la Biblia reconocemos variadas diferencias culturales, sociales o religiosas entre los profetas, pero lo que los une es su vocación o carisma dado por Dios mismo. Que Dios nos ayude a ser profetas de nuestro tiempo. No se pierda el próximo estudio. COMPROMISO CON DIOS: Bendito Señor, gracias por enseñarme sobre los profetas. Ayúdame a ser un profeta de mi tiempo, que hable tu verdad, que sea obediente hasta la muerte y que entregue constantemente el mensaje para tu pueblo y creación. Amén Estudio Bíblico elaborado por: Pastor Daniel Romero, Bachiller en Teología, Licenciado en Ingeniería. Bibliografía y referencias: Cátedras de Antiguo Testamento, dictadas por el Dr. Oscar Pereira G. Seminario Teológico Bautista, Coenen y otros. Diccionario Teológico del Nuevo Testamento. Editorial Sígueme. Volumen Edersheim, Alfred. Comentario Bíblico Histórico. Editorial Clie. España, Escuain, Vila, Nuevo diccionario bíblico ilustrado. Editorial Clie. España, Henry, Mathew. Comentario Bíblico. Editorial Clie. España, Sicré, José. Los profetas de Israel y su mensaje. Ediciones Cristiandad. Sociedades Bíblicas Unidas. Biblia de Estudio Nueva Versión Internacional. Editorial Vida Sociedad Bíblica Internacional. Biblia de Estudio Nueva Versión Internacional Arqueológica. Editorial Vida Strong, James. Nueva Concordancia Strong Exhaustiva. Editorial Caribe

6 ANEXO: SOPA DE LETRAS. Abajo encontrarán los nombres de 17 profetas que tienen libros en la Biblia. 16 son del Antiguo Testamento y 1 es del Nuevo Testamento. D A N I E L X J O S H V E T L N J K E O C I X E M Z A E G P Z O E Q U A D O E Q J P F H F X R E T X A Q Q U I T C H I L E D B U U I A K O R Q S L A L T Y I S S A I D B A B N E X S E W Q S L V L I L M I J P L E Z A B R M A O V U V A S H N E E P E S S O M A T I A O S S L A P P B H Z Z F B N O O S A I M E R E J H A A R N R M C I M V U I Z C I I L E O J Q J A J C C U B A N C S D U N K M O O C M S O A V Q E H I S U S V O Y E V C Q A N T E V A T L S G G X B S A A I N I S O X A W A Q Z H X T A N A P V H S K M Z V S K A O I A S A I U Q A L A M M F R C O Z R P Y M Y V Z E O A T P D L V H U L P Q N S c O H P L L M H P W T A Y A F F E J O N A S V W U X Z N Z M T X U N V X A J Z