> Al niño judío se le daba su nombre a los ocho días de nacido, en la ceremonia de su circuncisión.

Transcripción

1 Mt 1,18-24 Nota: Acaba Mateo de decirnos que Jesús es verdadero hombre, pues nació de María la esposa de José, se insertó en la historia y en la genealogía del pueblo de Israel y formó parte de él. Ahora nos va anunciar que Jesús también es verdadero Dios pues nace por intervención directa del Espíritu Santo. Este texto se suele meditar en el cuarto domingo de Adviento. Historia: El anuncio a José del nacimiento de Jesús. Lugar: La casa y el lugar en donde dormía José, probablemente en la aldea de Nazaret. Gracia: Pedir conocimiento interno del Señor, que por mí se ha hecho hombre, para que más lo ame y le siga. 18 La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo Jesús nació en el seno de una familia campesina conformada por su madre, María, y por José, su esposo. Ambos vivían en Nazaret, una pequeña y desconocida aldea enclavada en las colinas de Galilea. Mateo nos dice que su concepción tuvo lugar mientras ellos estaban aún desposados, y antes de empezar a estar juntos. Los desposorios eran una celebración religiosa-social en donde la pareja se comprometía formalmente a casarse en un futuro cercano. Para todos los efectos, luego de los desposorios se consideraba a la pareja casada y con todas las obligaciones inherentes al matrimonio. > Por eso en el verso que sigue Mateo considera a José el "marido" de María, y luego a ella, como "su mujer". Sin embargo, los desposados no podían vivir juntos sino hasta después que el matrimonio se realice. El serio problema de José es que descubre que su prometida, antes de vivir juntos, había quedado encinta, y él no era el Padre. Mateo aclara que María quedó encinta por obra de Dios, subrayando así que la criatura engendrada en ella es divina. La Iglesia después afirmará que la concepción de Jesús por obra del Espíritu Santo nos indica que Jesús es Dios. 19 Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Era tan grave lo que había sucedido con María que lo normal en esta situación hubiese sido denunciarla y disolver el compromiso matrimonial.

2 José debió haberle dado a María un acta de repudio y desconocerla como esposa, pues a simple vista le había sido infiel. El acta de repudio era un documento en donde se establecían formalmente los hechos y se anulaba el acuerdo matrimonial. El problema es que si José hacía esto, la supuesta infidelidad de María quedaba en evidencia y se la podía acusar de adulterio. Según la Ley de Moisés, la pena para el delito de adulterio era la muerte a pedradas (por lapidación). Por tanto, si José denunciaba a María, la matarían a pedradas. De otro lado, Mateo nos dice que José era justo. Ser "justo", en términos religiosos, significa ser un hombre de Dios y un hombre de Dios no hace daño, ni siquiera a quien le hace daño. Además, seguramente José estaba muy enamorado de María y probablemente no quería ponerla en evidencia para que no la matasen. Debió haber sido una situación muy difícil para José y debió haber pensado mucho qué hacer. José conocía el corazón de María y seguramente le costaba mucho creer que ella lo había engañado > No podía entender lo que había pasado. > El hecho es que ella estaba encinta y que él no era el padre. No podía seguir adelante con sus planes de casarse con María pues a todas vistas ella lo había engañado; Pero tampoco quería denunciarla, porque si lo hacía la mataban. Su solución fue "repudiarla en secreto"; una solución que significaba un enorme sacrificio para él. Pues ante la Ley y el pueblo (a la vista de todos), se casaría con María. Pero una vez casados no viviría con ella; no serían marido y mujer. Además, esto significaba considerar al hijo de María como suyo. 20 Así lo tenía planeado, cuando el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. José ya había tomado la decisión de rechazarla en privado, y "así lo tenía planeado", cuando interviene Dios y lo invita a repensar su decisión. Sueños: usualmente cuando en la Escritura se habla de sueños y de ángeles nos está queriendo decir que la persona está viviendo

3 una "profunda experiencia espiritual", y que las palabras del lenguaje cotidiano se quedan cortas al querer explicar lo que está sucediendo. > Podemos pensar que José se encontraba en profunda oración, viviendo una indescriptible experiencia de Dios. Consultamos nuestras decisiones en oración y a la luz de los deseos de Dios? Ángel del Señor: es un término que indica a Dios mismo; Dios mismo se hace presente en la oración de José. Dios es providente y siempre interviene en la historia para mostrarnos su voluntad y para ayudar y proteger a quienes deciden cumplirla a cualquier precio (como fue el caso de María). Si nosotros nos arriesgamos totalmente por él, él siempre nos cuidará y ayudará (nos salvará) con soluciones que jamás hubiésemos imaginado. No temas: siempre que Dios quiere transmitirnos algo suyo, aleja de nosotros el temor y nos llena de consolación y de paz. Pues en el temor no está Dios. Por eso Jesús, en repetidas ocasiones, cuando sus discípulos están asustados, lo primero que hace es transmitirles su paz. Hijo de David: en su mensaje Dios reconoce a José como miembro del pueblo de Israel y descendiente de David. Las profecías del Antiguo Testamento anunciaban que el Mesías vendría de la familia de David. Aquí Mateo, con delicadeza, empieza a demostrarnos que Jesús es el Mesías esperado. De esta manera, en la intimidad de la oración, Dios le hace entender a José que lo engendrado en María es obra del Espíritu Santo, y es su voluntad. 21 Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. En esta experiencia espiritual Dios le anuncia a José lo que sucederá. Le nacerá un hijo, un varón. Y le dice lo que tendrá que hacer: Lo llevarás al Templo para circuncidarlo, y en esa ceremonia le pondrás por nombre Jesús > Al niño judío se le daba su nombre a los ocho días de nacido, en la ceremonia de su circuncisión.

4 La imposición del nombre tenía mucho significado para el pueblo de Israel, pues en él se transmitían los deseos de los padres para el niño y se revelaba la misión que iba a caracterizar su vida. Mateo explica por qué le pusieron el nombre de Jesús. Jesús significa Dios salva, pues, como dice Mateo, él salvará a su pueblo de sus pecados. > La misión de Jesús será salvar; devolvernos a todos la posibilidad de vivir para siempre. 22 Todo esto sucedió para que se cumpliese el oráculo del Señor por medio del profeta: Cuando Mateo escribió su evangelio, la Iglesia se batía en la defensa de que Jesús es el Mesías esperado. Para probarlo, la Iglesia recurrirá al Antiguo Testamento y buscará en él todos los textos (citas) que demuestren que efectivamente Jesús es el esperado. 23 Vean que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel, que traducido significa: Dios con nosotros. El texto que Mateo usa para demostrar que nos está hablando del Mesías es el de Isaías 7,14: El Señor mismo va a darles una señal: He aquí que una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. Aquí parece haber una contradicción, pues la cita de Isaías dice que el nombre será Emmanuel, y sin embargo el nombre que le ponen al niño es Jesús. Ni la Iglesia ni Mateo vieron contradicción en estos nombres distintos. Y para aclararnos que no hay contradicción, Mateo traduce el nombre Emmanuel diciéndonos que ese nombre significa Dios-con-nosotros. Al decirnos eso nos indica que Jesús y Emmanuel son dos nombres equivalentes. Pues Dios-salva (Jesús) porque está con nosotros, y él es Dioscon-nosotros (Emmanuel) porque salva. Por eso la profecía de Isaías se cumple en Jesús. 24 Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado, y tomó consigo a su mujer. José, el justo, siempre está pronto a hacer la voluntad de Dios. Y así, después de esa profunda experiencia espiritual y terminada su oración, José dio marcha atrás en su decisión inicial.

5 Aunque todas las señales externas indicaban que no debía hacerlo. Lo voluntad de Dios, aunque a veces parezca desconcertante, siempre lleva a buen fin. Y llevarla adelante es lo mejor que podemos hacer si queremos ser felices. En consecuencia, queriendo hacer la voluntad de Dios, llevó a María consigo, a su casa, y formó su familia. En el seno de esa familia profundamente religiosa y dispuesta a hacer siempre la voluntad de Dios, nació y se crio Jesús. Jesús se formó en una familia que siempre buscó cumplir los deseos de Dios. Esto fue lo que aprendió y eso fue lo que hizo a lo largo de su vida. Y nosotros, con qué criterios formamos nuestras familias? Les enseñamos que lo único que importa en la vida es hacer la voluntad de Dios? Somos capaces de cambiar las decisiones tomadas luego de consultarlas en la oración?