Una casa. en el Bosque UNIFAMILIARES

Transcripción

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2 UNIFAMILIARES Pedro Hernández Una casa Entrada principal de la casa, en la que se aprecian las dos cubiertas a diferente altura separadas por un muro de pizarra, confiriendo modernidad a la composición de la misma. en el Bosque Evocando la calidez de las casas de montaña pero con un decidido diseño moderno que acentúan los dos planos de la cubierta, se alza esta vivienda situada junto a un campo de golf. 50 vlcdiseñoseptiembre2010#01

3 Texto: Tendencias Diseño Fotos: Mayte Piera En la urbanización que circunda el campo de golf del Bosque (entre Godelleta y Chiva), formalizó Pedro Hernández este proyecto integral de arquitectura e interiorismo que compendia muchos y buenos valores. Se trata, para empezar, de una vivienda unifamiliar exenta que se levanta sobre dos planos con cubiertas a dos aguas pero con proporciones diferentes. De ese modo, se evoca por un lado el bienestar de las tradicionales casas de montaña centroeuropeas pero, al mismo tiempo, se consigue un efecto de modernidad gracias a los dos planos disímiles, idea que todavía se agudiza más con la incorporación de una tercera estructura a modo de templete que une y desarrolla las dos grandes cubiertas en la zona de la piscina y genera un agradable porche. Un muro longitudinal revestido de pizarra atraviesa y divide toda la vivienda, actuando tanto de separador interior como exterior. Este material presenta grandes ventajas en cuanto a la durabilidad, impermeabilidad, resistencia al fuego o limpieza, además de ser ecológico e imprimir una personalidad singular que se ve enfatizada por la contundencia del muro, el cual caracteriza con un toque contemporáneo los espacios que viste. Se va creando un juego de vanomacizo debido a las perforaciones acometidas por puertas, ventanales o rasgaduras. Adosada a él, se ha diseñado una escalera de tramo recto. El proyecto se desarrolla en torno a ella y actúa como distribuidora y articuladora del espacio desde el corazón de la vivienda, creando óptimos recorridos. Lo que en el exterior es un juego de contraplanos y cubiertas, da paso en el interior a una disposición de estancias que van desde las amplias zonas de estar en la planta baja, con dobles alturas en generosas proporciones, a las más recovecas áreas de recogimiento, los dormitorios de la planta superior, que ganan en calidez gracias a los techos abuhardillados. El complemento fundamental a todo ello son grandes vanos de cristal que confieren una extraordinaria luminosidad a la casa, protagonista indiscutible de una vivienda que, en lo tocante a la decoración, opta por la discreción y el rigor. En efecto, el mobiliario, moderno, no introduce estridencia alguna. Sobrio y funcional, jugando al contraste natural entre lo blanco y lo oscuro, en un conjunto que tiende al equilibrio. Izquierda: La terraza y el porche que dan abrigo a la zona de la piscina, mientras las estancias de día se relacionan generosamente con el exterior por medio de los amplios frentes acristalados. Las vigas de la cubierta se han dejado vistas y de su color natural, y en el interior se tiñen de blanco dejando adivinar veteados. Su secuencia crea un ritmo constante muy interesante. Debajo: Buena parte de los muros son sustituidos por grandes superficies acristaladas, confiriendo mucha luminosidad a todas las estancias y creando divertidos juegos de reflejos con el salón. 51

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5 1 La piedra en el piso y la pizarra en las paredes confieren sobriedad a la zona de baños. La pizarra es la del muro divisor de la vivienda. El lavamanos es el modelo Progetto de Inda al igual que todos los accesorios; el sanitario es de Galassia. Todo ello adquirido en El Picaporte. 2 Un elegante murete forrado en madera de arce sirve para separar las zonas del comedor y el salón de estar. 3 La cocina en blanco, sencilla y funcional, de Santos. 4 En el sobrio dormitorio se repite la apuesta por una de las lámparas del salón: una moderna araña (1958) de Gino Sarfatti para Fos. 5 El juego de alturas, planos, vacíos y luz, caracteriza el interior de la casa. 53