ÉÉÉ É Luci. y los animales del bosque

Transcripción

1 ÉÉÉ É El bebe Luci y los animales del bosque

2 eérase una vez un bosque muy bonito, repleto de altos árboles, de flores de todos los colores, y de pequeños riachuelos con aguas limpias y frescas. En ese bosque vivían cuatro amiguitos, que siempre estaban jugando. Cruz era una ovejita blanca, de largas y suaves orejas. Eva era una osita de preciosa piel marrón,, y siempre llevaba un lazo rosa en su cabeza. Elsa era una pequeña gallinita, de plumas blancas y brillantes. Y finalmente estaba Álvaro, que era un precioso ejemplar de luciérnaga de alas rosadas. Jugando estaban los cuatro amigos en el bosque cuando un ruido las sorprendió. - Qué será ese ruido? preguntaron todos. Siguiendo el sonido que llegaba hasta ellas se fueron acercando por un camino de flores y musgo suave hasta llegar a lo que parecía una casa. - El ruido viene de la casa dijeron acerquémonos. Y así lo hicieron. Con cuidado abrieron la puerta, y vieron, en el suelo, sobre una alfombra, a un pequeño bebé que no tendría más de un año. - Pobrecito dijeron todas, acercándose a él. - Buaaaa, Buaaaaa lloraba el pequeño.

3 - Qué podemos hacer para que deje de llorar? - Podría darle un poquito de mi leche dijo Cruz a lo mejor tiene sed - buena idea, Cruz! dijeron las demás Y así Cruz le ofreció un vasito lleno de leche fresquita que el bebé se bebió de un tirón - Qué bien! dijeron todos ya ha dejado de llorar. Pero - Buaaaaa, buaaaaaa! el bebé empezó a llorar otra vez, con más fuerza aún - no es sed lo que tiene. Yo sé lo que le pasa dijo Marival, la cierva maestra, asomándose por la ventana. Pero los chicos, algo traviesos, no le hacían caso. - Yo creo que tendrá hambre dijo Elsa a lo mejor le podemos dar de comer una tortillita con uno de mis huevos - estupenda idea! dijeron todos, y le prepararon una sabrosa tortilla con un huevo recién puesto. El bebé se comió toda la tortilla en un santiamén, y dejó de llorar. - Bravo, bravo! gritaron ha dejado de llorar.

4 Pero - Buaaaaa, buaaaaa! volvió a llorar, con más fuerza si cabe - no es hambre lo que tiene. Yo sé lo que le pasa dijo Marival otra vez, pero las chicas siguieron sin hacerle caso.. - Chicas, a lo mejor tiene frío. Qué os parece si le tapamos con mi piel? dijo Eva, y así lo hizo. El bebé, acurrucadito entre la suave piel de la osita, cesó en su llanto. - Bravo, bravo ha dejado de llorar! Pero - Buaaaaa, buaaaaa! volvió a llorar, con más fuerza si cabe - no es frío lo que tiene. Yo sé lo que le pasa dijo Marival otra vez, pero los chicos seguían sin hacerle caso porque querían solucionarlo ellos solos.. - Chicas, a lo mejor quiere jugar dijo Álvaro - qué os parece si vuelo sobre ella con mi luz y la entretengo un poquito?. Y así lo hizo. - Bravo, bravo! gritaron ha dejado de llorar.

5 Pero - Buaaaaa, buaaaaa! volvió a llorar, con más fuerza si cabe - no es aburrimiento lo que tiene. Yo sé lo que le pasa dijo Marival otra vez - ah sí? preguntaron todos - y qué es, seño? - pues lo que os pasaría a todos vosotros No notáis que en esta casa falta algo muy importante? - no sé dijeron todos mirando alrededor hay juguetes, hay sillas, hay camas qué falta? - pensad en lo que mejor os hace sentir cuando llegáis a casa lo sabéis ya? - pues no sabemos dijeron todos - esperad aquí. Ahora mismo lo traigo dijo la cierva maestra brincando por entre los árboles. Los cuatro amiguitos intentaron que el bebé dejara de llorar, pero no había manera de consolarlo. Por fin llegó Marival, se apoyó en la ventana, y les dijo a las chicas que todo estaba solucionado - qué es lo que has traído, seño? El bebé no deja de llorar - pues he traído lo único que el bebé necesita para ser feliz. Mirad a la puerta.

6 Los cuatro amigos, mientras el bebé seguía llorando, vieron como la puerta se iba abriendo lentamente. Asustados, abrazados entre sí, vieron a una hermosa mujer, cargada con una cesta de frutas, que les sonreía cariñosamente. - Luci, cariño ya he vuelto de recoger la fruta! Fue entonces cuando el bebé dejó de llorar y empezó a reír balbuciendo sus primeras palabras - MA MÁ MA MÁ! - Es su mamá! dijeron todas, viendo como la guapa mujer cogía a su hijo y lo abrazaba Claro! Lo que le pasaba es que echaba de menos a su mamá dijo la seño - Yo también echo de menos a la mía dijo Cruz así que me voy a casa - y yo, y yo dijeron las demás, despidiéndose del bebé y de su mamá, y agradeciendo a Marival su ayuda, y pidiéndole perdón por no haberle hecho caso.. Al llegar a sus casas se abrazaron a sus mamás, le dieron un beso muy fuerte, y les dijeron unas palabras mágicas que siempre ponen contentas a las mamás. - Sabes cuáles son? - TE QUIERO MAMÁ! Dedicado a mi sobrina Lucía y a su mamá