Pero es necesario que el obispo sea... decoroso, hospedador (1 Ti. 3:2; Tit. 1:8) Decoroso

Transcripción

1 Lección 4: Decoroso y Hospedador Pero es necesario que el obispo sea... decoroso, hospedador (1 Ti. 3:2; Tit. 1:8) Decoroso Objetivo. El alumno comprenderá la importancia de ser un varón cuyo estilo de vida adorna la doctrina de Dios nuestro Salvador ganando así, el respeto y admiración de la grey del Señor. Introducción El griego kósmios, significa ordenado y es el que se comporta con educación, con decencia, y como lo dice la etimología, con orden.ya dice el antiguo proverbio latino: guarda el orden, y el orden te guardará. Sin orden, no se puede llevar bien la administración ni de una iglesia ni de una casa. También puede entenderse como de buen comportamiento, bien portado o respetable. El Señor Jesucristo utilizó el mismo vocablo para describir una casa barrida y adornada (Mt. 12:44), los sepulcros adornados (Mt. 23:29) y las lámparas arregladas (Mt. 25:7). Además, se refirió al templo adornado de hermosas piedras y ofrendas votivas (Lc. 21:5). Pero la forma más poderosa de la palabra aparece en la carta de Pablo a Tito, donde dice: Exhorta a los siervos a que se sujeten a sus amos, que agraden en todo, que no sean respondones; no defraudando, sino mostrándose fieles en todo, para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador (Tit. 2:9,10). Entonces, un hombre decoroso es alguien que vive de tal manera que su vida adorna las enseñanzas de la Biblia. Su vestido, su palabra, la apariencia de su casa, su oficina, y la forma de conducir sus negocios; todo armoniza con los principios y doctrina bíblicos. Debido a que Dios es un Dios de orden, un hombre de Dios también debe ser ordenado; debe ser un caballero cristiano en todas las áreas de su vida. El varón que es decoroso lo manifiesta en un andar digno (Ef. 4:1). Esto nos habla de un estilo de vida, de una manera de ser y actuar Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 1/7

2 Cómo debe ser el andar de un varón decoroso? Romanos 6:4 Romanos 13:13 2 Corintios 5:7 Gálatas 5:16 Efesios 5:2 Colosenses 1:10 Colosenses. 4:5 2 Pedro 3:11 1 Juan 2:6 2 Juan 6 3 Juan 4 Cómo es el andar de un varón que ofende a Dios? Efesios 4: Tesalonicenses 3:6 1 Pedro 4:3 Judas 18,19 Soy en verdad decoroso? Para hacer más personal este estudio participa en la siguiente evaluación y podrás tener una idea de tu estilo de vida y si este es agradable a Dios. Subraya las respuestas que consideres correspondan a cada pregunta y a la situación que estás viviendo: 1. Cómo es tu apariencia? Limpia Sucia Humilde Soberbia Pulcra 2. Cómo es tu vestido? Limpio Sucio Descuidado Exagerado Adecuado 3. Cómo está tu casa? 2003 Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 2/7

3 Descuidada Limpia Malos olores Sucia Ordenada 4. Cómo está tu carro? Descompuesto Sucio Sin tenencia Descuidado Funcional 5 Cómo es tu andar? (Responde Si o No) Dices siempre la verdad Hablas palabra para edificación y con gracia Tienes buen testimonio entre tus vecinos Miras a las mujeres sin malicia Manejas tus finanzas con transparencia y orden Llevas bien los asuntos de la iglesia Visitas en el momento oportuno a los necesitados Siempre llegas temprano a tu trabajo Anota las exhortaciones bíblicas dadas en cada pasaje y escribe una (O) en las áreas que consideres que eres fuerte y una (X) para marcar las que necesitas mejorar. Romanos 14:19 ( ) 1 Corintios 10:31-33 ( ) Filipenses 1:27 ( ) Filipenses 2:3,4 ( ) Colosenses 3:23,24 ( ) Colosenses 4:5,6 ( ) 1 Tesalonicenses 4:10-12 ( ) 1 Timoteo 6:2 ( ) Tito 2:1 ( ) 1 Pedro 2:12 ( ) 1 Pedro 2:13-15 ( ) Conclusión Un anciano decoroso habla bien de sí mismo, de su familia y de la iglesia que pastorea, no seamos negligentes y mejoremos aquello que está en desorden en nuestra vida Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 3/7

4 Hospedador Objetivo El alumno comprenderá la importancia de manifestar el amor cristiano abriendo su casa para recibir a salvos e inconversos y proveer para sus necesidades físicas, morales y espirituales. Introducción El griego philóxenos, traduce literalmente amigo de forasteros, esto significa que el que hospeda es amante de los forasteros, su hogar está abierto a salvos y a inconversos, y busca ser de bendición a todos los que acuden bajo su techo. La palabra hospitalidad es la virtud que se ejercita con peregrinos, menesterosos y desvalidos recogiéndolos y prestándoles la debida asistencia a sus necesidades. Es por eso que los centros médicos se llaman hospitales, porque son lugares que ayudan a la gente que padece física y emocionalmente. La iglesia, entonces, debe ser un hospital, no solo un lugar donde se cure el espíritu, sino también donde los cristianos compartan entre sí lo que tienen, de tal manera que provean para las necesidades físicas de los demás (1 P. 4:9). Un anciano ha de ser hospedador, su hogar debería estar siempre dispuesto a recibir a extraños, a los que tienen problemas personales, a los descorazonados y a los oprimidos. Debería ser el hogar de una feliz comunión cristiana, donde cada invitado es recibido, como si fuese el Señor mismo. El anciano, más que cualquier otra persona, debe ser hospitalario porque esto se considera una señal de madurez, debe ser un acto de auténtico amor cristiano. Esta clase de amor nos proporciona la motivación fundamental para alcanzar a otros (Ro. 12:13). La cualidad de hospedador fue muy estimada en la primitiva iglesia (He. 13:2). Como dice D. Guthrie, sin la voluntaria hospitalidad de los cristianos, la expansión de la iglesia se habría visto seriamente retrasada Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 4/7

5 Textos bíblicos que nos enseñan que debemos practicar la hospitalidad: Anota la enseñanza sobre la hospitalidad dada en cada cita bíblica: Romanos 12:13 1 Tesalonicenses 5:9,10 1 Timoteo 3:2 1 Pedro 4:9 3 Juan 8 Los primeros cristianos siempre se refirieron a sí mismos como hermanos y hermanas. En la iglesia local del Nuevo Testamento se manifiestan de muchas maneras prácticas la hermandad cristiana en el vínculo del amor fraternal ( He. 13:1): 1. Los cristianos se saludaban unos a otros (Ro. 16:16; 1 Co. 16:20; 2 Co. 13:12; 1 Ts. 5:26; 1 P. 5:14). 2. Compartían sus posesiones materiales (Hch. 2:44,45; 4:32; 11:29; Ro.12:13,20; 15:26; 1 Co. 16:1; Gá. 2:10; 6:10; He. 13:16; Stg. 2:15,16; 1 Jn. 3:17). 3. Se reunían en casas (Ro. 16:5; 1 Co. 16:19; Col. 4:15; Flm.2). 4. Comían juntos (Hch. 2:46; 20:11; 1 Co. 11:20; Jud. 12). 5. Cuidaban de las viudas (Hch. 6:1-6; 9:39; 1 Ti. 5:1-16). 6. La hermandad entre ellos era el principio básico que regía la conducta de sus miembros (Ro.14:15,21; 1 Co. 6:8; 8:11-13; 2 Ts. 3:14,15; Flm. 16; Stg. 4:11). 7. Practicaban la hospitalidad (Hch.16:15; 21:8,16; Ro.12:13; 1Ti. 3:2; 5:9,10; He. 13:2; 1 P. 4:9; 3 Jn. 5-8). Entonces, podemos decir que nuestra hermandad proviene de Cristo, así también el amor que debemos tener como hermanos. Su infinito amor por nosotros, es la fuente y estímulo para amarnos unos a otros (Jn. 13:34,35; Ro. 12:10; 1 P. 4:8; 1 Jn. 3:14; 4:21). Así que, la práctica cristiana de la hospitalidad no es solamente resolver el problema de una persona que tiene necesidad de pasar la noche o ser alimentada, sino que debemos de considerarla como una expresión concreta de amor cristiano Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 5/7

6 A través de la hospitalidad, compartimos nuestras más preciadas posesiones, así como también nuestra familia, casa, recursos, alimentos, compañía y tiempo. Por medio de este ministerio proveemos amistad, aceptación, compañerismo, consuelo, amor en la forma más sencilla, cálida y profunda. Una iglesia fría, descuidada y poca amistosa, contradice la imagen bíblica de una iglesia amorosa. La falta de amistad es una de las críticas más severas y más comunes que la gente hace a las iglesias locales. No le toma mucho tiempo a la gente darse cuenta del amor fingido que se practica entre los cristianos y que termina en la puerta del templo y mucho menos quiere hospedar al necesitado. El verdadero amor requiere de una relación íntima, así como de mutuo cuidado, conocimiento, sentido de pertenencia y deseo de compartir lo propio. No podemos conocer a nuestros hermanos o crecer juntamente con ellos si nos reunimos por una hora y quince minutos a la semana y además en una congregación grande. La casa es el lugar ideal donde se pueden formar las relaciones y amistades con otros. Punto de partida para la hospitalidad. Inicie invitando a gente a orar juntos. Puede alcanzar a personas nuevas de la iglesia o vecindario al invitarlas a un estudio bíblico. Puede mostrar aprecio invitando a maestros y líderes juveniles a tomar un café. Puede invitar a la mesa a viudas, huérfanos, discapacitados, ancianitos para consolarlos y compartirles del amor de Cristo. También puede recibir a niños y niñas de familias pobres a que disfruten de unos días con su familia. Puede hospedar a cristianos, siervos y predicadores de otros lugares. Resumen de los distintivos de la hospitalidad cristiana 1. Dios exige que cada cristiano procure la hospitalidad. La hospitalidad es un mandato, no una opción (Ro. 12:13; He. 13:1,2). 2. La hospitalidad cristiana es un requisito para los ancianos (1 Ti. 3:2). 3. La hospitalidad es un requisito bíblico para las viudas que sostiene la iglesia (1 Ti. 5:10). 4. Los cristianos deben de practicar la hospitalidad con corazones alegres (1 P. 4:9). 5. La hospitalidad es un medio efectivo para compartir el mensaje del evangelio con parientes, amigos y vecinos (Hch. 5:42; 20:20; Lc. 5:29). 6. La hospitalidad ayuda al avance del evangelio porque provee un servicio indispensable a favor de los mensajeros de Dios (Lc. 10:7,8; 3 Jn. 5-8) Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 6/7

7 7. El ministerio de la hospitalidad procura recibir al pobre, al desconocido y a la gente necesitada de la sociedad (Lc. 14:12-14). 8. La hospitalidad es una manera práctica de ejercitar nuestros dones espirituales (1 P. 4:9,10). 9. La hospitalidad produce recompensas y bendiciones inesperadas (He. 13:2). Conclusión Como ancianos no desechemos nosotros las bendiciones que se reciben de parte de Dios al ser hospitalarios. Abramos nuestra casa a las personas necesitadas y siervos de Dios Iglesia Evangélica de Hermanos Congregados en el Nombre del Señor Jesús, A.R. Lección 4. Página 7/7