Qué noticia! Deletreando

Transcripción

1 Qué noticia! Deletreando 1

2 Qué noticia! Al redactar una noticia, pretendemos comunicar la esencia de un acontecimiento a un público heterogéneo. La noticia debe ser, pues, redactada de forma que sea comprensible para todos, tanto para aquellos que ya conocen algunos de los aspectos del acontecimiento del que se informa, como para aquellos que aún no saben nada. Como ya dijimos en teoría, en una noticia pretendemos informar y no opinar, así que debemos evitar todos aquellos términos o expresiones que puedan resultar equívocos o innecesarios, o bien que puedan dejar entrever la opinión y actitud del periodista con respecto al acontecimiento del que se informa. De todo ello se deducen los siguientes principios que hay que tener en cuenta a la hora de redactar una noticia: 1. La claridad: La claridad es la primera calidad del estilo. No hablamos sino para darnos a entender. El estilo es claro si lleva al instante al oyente a las cosas, sin detenerse en las palabras. Retengamos esa máxima fundamental: derechamente a las cosas Azorín, autor español ( ) Ya lo dice Azorín, hay que ir al grano, sin rodeos: ir directamente a las cosas. En una noticia, si queremos decir que dos personas resultaron heridas en un enfrentamiento, digámoslo así: dos personas resultaron heridas. No tenemos que buscar ni emplear eufemismos, como cuando en una guerra se habla de daños colaterales: daños colaterales? Qué daños colaterales? Las víctimas, los atentados, los bombardeos? Es cierto que a menudo nos vemos obligados a repetir conceptos en una noticia. En este caso, sí que está permitido - e incluso es necesario - parafrasear o emplear sinónimos con el fin de no resultar repetitivos. Así, en una información sobre la visita del presidente de un país a otro, para no repetir siempre la palabra presidente, ésta se puede ir alternando con otros sinónimos como mandatario o jefe de Estado. O en una noticia sobre Barcelona, para no estar siempre repitiendo Barcelona se puede hablar de la Ciudad Condal, que es uno de los atributos por los que se conoce esta ciudad. 2

3 La claridad tiene, pues, que estar presente en todos los niveles (semántico, sintáctico, etc.). Por ello, es recomendable: evitar el uso de jergas, tecnicismos, extranjerismos o neologismos, y cuando éstos sean necesarios, explicarlos: no abusar de siglas desconocidas. Siempre que se empleen, explicarlas por lo menos una vez al principio de la noticia: 3

4 evitar el uso de adverbios, especialmente de los adverbios acabados en mente: oposición P.e.: El ministro de Interior respondió rápidamente a las acusaciones de la usar adjetivos sólo cuando éstos sean necesarios e informativos: P.e.: La bella modelo inauguró la exposición dedicada al diseñador español Manuel Pertegaz. P.e.: El presunto asesino se declaró inocente e insistió en que era víctima de un maquiavélico complot. evitar adjetivos superlativos en ísimo: P.e.: La policía llegó tardísimo al lugar de los hechos según las acusaciones de la oposición. preferir frases simples o coordinadas, evitar frases subordinadas demasiado largas y atenerse en lo posible a la estructura SUJETO + VERBO + COMPLEMENTO 4

5 renunciar en lo posible a la voz pasiva, ya que ésta en español resulta a menudo algo forzada: P.e.: El curso de verano fue inaugurado por el rector mejor: El rector inauguró el curso del verano Claro que a veces, cuando está claro o cuando se desconoce el sujeto de la acción, es preferible utilizar la voz pasiva o bien algunas de las muchas formas con las que ésta se puede sustituir en español como, por ejemplo: -la pasiva refleja (se + tercera persona del singular o plural): P.e.: Se han aprobado los presupuestos generales del Estado para la tercera persona del plural: P.e.: Han aprobado los presupuestos generales del Estado para evitar comenzar una información con un adverbio: P.e.: Ayer el Gobierno aprobó la ley contra la violencia domética. mejor: El Gobierno aprobó ayer la ley contra la violencia doméstica. 2. La precisión: Cuando redactamos una noticia, queremos informar de un hecho, no pretendemos convencer, ni tampoco sugerir como, por ejemplo, cuando escribimos un poema. El mensaje de la noticia tiene que ser claro y definido, sin que corra peligro de ser malinterpretado o tergiversado. Así, el vocabulario empleado en una noticia debe ser lo más preciso posible: hay que emplear las palabras exactas, encontrar para cada situación, acción o significado el término más adecuado para su definición y comprensión. 5

6 Por ello, hay que evitar: el uso de palabras comodín, tales como bueno, interesante, hacer, tener, cosa o tema: P.e.: El alcalde dice que es una pena que no haya interés por el tema de los Juegos Mediterráneos en Almería. mejor: El alcalde se queja de la falta de interés por promocionar la celebración de los Juegos Mediterráneos en Almería expresiones o palabras que no aportan ninguna información nueva: P.e.: El Gobierno quiere reducir el gasto público sin tener que renunciar, por ello, a su programa social mejor: El Gobierno quiere reducir el gasto público sin renunciar a su programa social adjetivos indefinidos como algunos, numerosos, muchos: P.e.: Algunos diputados de Izquierda Unida han votado en contra del envío de tropas a Afganistán mejor: Siete diputados de Izquierda Unida han votado en contra del envío de tropas a Afganistán 3. La concisión: La concisión es el arte de combinar precisión y brevedad en la expresión de un concepto: emplear el número de palabras adecuadas, ni más ni menos. En cuanto a la extensión media de las oraciones se recomienda alternar frases breves - de unas 12 a 15 palabras - con frases más extensas - de 25 a 35. Así se garantiza el grado de comprensión - que ronda en torno a las 25 palabras por oración sin contar artículos ni conjunciones -, y se evita el ritmo monótono que provocaría la mera sucesión de frases breves. 6

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