Caminando hacia un nuevo Paradigma. Los puentes entre neurociencia y educación. Natalia Valderrama, Licenciada y pedagoga en educación General Básica,

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1 Caminando hacia un nuevo Paradigma Los puentes entre neurociencia y educación Natalia Valderrama, Licenciada y pedagoga en educación General Básica, mención Matemáticas. Neurociencia y Educación El gran tema en toda nuestra Educación es convertir al sistema nervioso En nuestro aliado y no en nuestro enemigo. William James Nuestro sistema nervioso lo podemos dividir en tres grandes bloques, sistema nervioso central, sistema nervioso periférico y sistema nervioso autónomo o vegetativo. El primero procesa millones de datos por segundo evaluando y memorizando y dando respuestas a las condiciones y cambios internos y estímulos externos. Mientras que el sistema nervioso periférico, apunta específicamente a la formación sensorial y motora. Sin embargo, el sistema nervioso autónomo es el encargado de mantener un equilibrio fisiológico en el organismo. Estos tres bloques con funciones específicas se encuentran interconectados para su eficaz funcionamiento, la separación de ellos es solo una forma más lúdica de comprenderlos funcionalmente. A partir de los avances de la ciencia, hemos podido apreciar una década dedicada a los estudios de esta máquina del saber, el cerebro, como eje protagonista en relación al área del aprendizaje, no es extraño preguntarse Cómo aprende este cerebro? o nuestra educación precisa de estas investigaciones en pos de un mejor desarrollo de ambas, Por qué no es posible vincular la ciencia con la educación?,

2 desde una perspectiva más amplia, necesitamos afrontar este cambio de paradigma. Neurociencia y educación son términos quizás estudiados de maneras disjuntas, pero podemos apreciar una necesidad intrínseca de mezclarlos de tal forma que podamos hablar de una Neuroeducación, necesaria para cada docente. Si pensamos que es la neurociencia podríamos hablar de campos científicos y áreas de conocimientos diversos, que bajo distintos enfoques abordan los niveles de conocimiento sobre el sistema nervioso, con un particular interés en cómo este afecta la conducta y el aprendizaje, por lo cual entramos en un campo de estudio fascinante donde involucramos el desarrollo neuronal bajo ciertas perspectivas educacionales. Por otra parte, se puede inferir que esa brecha que parecía insalvable entre lo orgánico y lo mental se está acortando fuertemente y ahí comienza lo interesante de analizar y profundizar. La educación proporciona variadas teoría de aprendizajes en las cuales se desenvuelve nuestro sistema educacional chileno, muchas de estas son prácticas actuales en variados establecimientos, lo impresionante es que muchas apuntan a un aprendizaje constructivista, sin darnos cuenta que es lo menos presente en las aulas. Las funciones ejecutivas predominantes en cada individuo hacen que los docentes tengan mayores desafíos al planificar sus clases y mucho más a la hora de desarrollarlas. la función ejecutiva es la función mental o cognitiva por excelencia. De nada serviría tener una excelente habilidad lingüística, de memoria, de capacidad visuoperceptual y habilidades motoras si no hubiera un gerente que coordine y oriente todas estas habilidades. No basta con tener una inteligencia normal y buenas habilidades cognitivas en percepción, memoria y lenguaje. Además, es necesario tener una adecuada función ejecutiva que controle y coordine la acción conjunta de todas estas habilidades. 1 1 Francisco Lopera Restrepo Coordinador del Grupo de Neurociencias de Antioquia, Universidad de Antioquia. Medellín, Colombia.

3 Como mencionaba la cita anterior podemos inferir que no es menor el trabajo de nuestras funciones ejecutivas, estas anotómicamente se pueden abordar desde una perspectiva cognitiva relacionada con la corteza frontal dorsolateral y desde la perspectiva emocional dependiente de la corteza orbitrofrontal, como se indica en la figura1. Las funciones ejecutivas comienzan a desarrollarse a partir del año de vida y se desarrollan más ampliamente a partir de los 2 a 5 años. Cualquier dificultad que se presente en el desarrollo de estas funciones puede relacionarse con algunas lesiones en algunas de estas áreas mencionadas. 1 Áreas de los lóbulos prefrontales Hasta acá hemos realizado un pequeño análisis de cómo Podemos relacionar las neurociencias con la educación, sin olvidar que Los estudios neurobiológicos de la conducta, que se llevan a cabo en nuestros días, cubren la distancia entre las neuronas y la mente. Existe una llana preocupación por cómo se relacionan las moléculas responsables de la actividad de las células nerviosas con la complejidad de los procesos mentales. 2 Cómo aprende esta máquina del saber?, es lo que las investigaciones cada día comienzan a dilucidar, para ellos no podemos desconocer la urgencia que comprender cada proceso mental, para un óptimo aprendizaje. Cuando el docente apunta a desarrollar todas las funciones tanto las cognitivas y las ejecutivas, podríamos estar en presencia de verdaderos avances neuroeducacionales. 2 Carnine (1995),

4 Las estrategias presentes aún no son las suficientes necesitamos conocer a nuestros alumnos desde una perspectiva biológica y pedagógica, para lograr que ellos desarrollen habilidades cognitivas superiores, y que sus aprendizajes sean realmente significativos. Para ello se deben proponer nuevas metodologías y nuevas organizaciones en función de una nueva educación desde las perspectivas de las neurociencias. las revoluciones científicas más importantes incluyen, como único elemento común, el destronamiento de la arrogancia humana de un pedestal tras otro, cuyas convicciones previas eran nuestra centralidad en el cosmos. 3 3 Stephens Jay Gould

5 BIBLIOGRAFÍA Haines. D. (2003). Principios de Neurociencia. Madrid: grafos HART, L. (1999). Cerebro Humano y Aprendizaje Humano. Libros para educadores. Salas Silva, Raúl Estudios Pedagógicos La Educación Necesita Realmente de la Neurociencia? Nº 29, 2003, pp