Red Hidroponía, Boletín No Lima-Perú

Transcripción

1 MANEJO DEL CULTIVO DE TOMATE DE INVERNADEDO John White Introducción El objetivo de dirigir el manejo de la planta es producir un balance en ella, es decir, un balance entre el crecimiento vegetativo y reproductivo, lo que generará un alto rendimiento del fruto sobre el tiempo de vida deseado de la planta. Los productores tienen una considerable influencia sobre este balance, dependiendo de cómo manejan el crecimiento de la planta. Las plantas pueden crecer fuertemente en forma vegetativa, dirigiendo su energía al crecimiento de hojas, tallos y raíces o fuertemente en forma reproductiva usando la mayor parte de su energía en el crecimiento del fruto. Estos productores obtienen rendimientos más altos manejando sus plantas para una máxima producción de energía y dirigir al crecimiento reproductivo (fruto) y vegetativo (hojas, tallos y raíces). Lo que resulta en altos rendimientos con un crecimiento sostenido durante toda la temporada. La energía de la planta es el resultado de la fotosíntesis y maximizando la fotosíntesis por medio de la temperatura, luz y concentraciones de CO 2 óptimas es el objetivo básico. Los fotosintatos o asimilados son el producto de la fotosíntesis y proveen energía a toda la planta, pero también es material básico que es usado para un nuevo crecimiento. Los fisiólogos vegetales describen la distribución de asimilados en términos de: fuente, sumidero y fuerza. Las fuentes son las hojas, la fuerza es la tasa de producción de asimilados, mientras que los sumideros son los órganos importadores que utilizan los fotosintatos, con la fuerza de conducir los asimilados desde las fuentes. Los principales sumideros son los brotes, los frutos y las raíces, siendo el fruto el más fuerte y las raíces los más débiles. Más del 70% de la materia seca acumulada en el cultivo de tomate de alto rendimiento en invernadero está en el fruto, pero esto puede estar influenciado por las prácticas de manejo. Las fuerzas de las fuentes y sumideros son extremadamente dinámicas y están interrelacionadas, así como, en continuo cambio durante la vida del cultivo. Maximizar el rendimiento requiere un continuo manejo para manipular las fuentes y sumideros, de modo que, la máxima cantidad de asimilados es dirigido al fruto, mientras que, que se provee suficientes asimilados para mantener el crecimiento de tallos y raíces a largo plazo. Productores experimentados tendrán que aprenderlo por experiencia, muchas veces sin comprender la base científica, pero considerando los efectos del manejo en términos de efecto fuente-sumidero, resultará en decisiones más efectivas. El crecimiento de la hoja y la fisiología Las hojas nuevas que se forman en el brote de la planta son sumideros débiles, los cuales tienen que importar asimilados, los que proveen la energía y materiales que necesitan para su crecimiento. Conforme la nueva hoja se expande, se vuelve capaz de fotosintetizar, inicialmente a bajas tasas y todos los asimilados son utilizados en el crecimiento de la hoja. La cantidad de fotosintatos se incrementa con el incremento del área foliar, y si la nueva hoja es expuesta a una alta fuerza de sumidero por lo que comienza a exportar asimilados. Si la fuerza de sumidero es muy alta, el crecimiento de la nueva hoja debe ser revisado, pero si la fuerza es baja, pequeña o si no hay exportación de asimilados, éstos son usados para el continuo crecimiento de la hoja. Este efecto es bastante obvio en plantas jóvenes bajo condiciones de alta intensidad luminosa antes de la fructificación. La fuerza de la fuente es alta y la de sumidero es baja, por lo que las plantas tienen hojas grandes y carnosas. Las plantas con poca fuerza de sumidero pueden seguir produciendo hojas grandes incluso cuando algunos frutos han cuajado. Cuando esto ocurre la relación de las fuerzas fuente-sumidero la relación de las 4

2 fuerzas fuente-sumidero puede ser cambiada, removiendo las hojas jóvenes entre 100 a 150 mm. Por lo general, se elimina la hoja central de tres hojas. Esto incrementa la fuerza sumidero de las hojas superiores a la que fue eliminada, por lo que exportarán asimilados y sólo crecerán a un tamaño moderado. El cultivo de la izquierda ha perdido su energía en el crecimiento de grandes y pesadas hojas, ocultando completamente los frutos; mientras que en cultivo de la derecha tiene una gran carga de frutos pero con una cubierta ligera de hojas. A menudo, se puede eliminar una hoja entre varios racimos con un efecto beneficioso sobre el balance de la planta. Las hojas cercanas a un racimo de frutos proveerán la mayor cantidad de asimilados para el crecimiento del fruto. Las hojas en la parte media del tallo proporcionan energía para la mayor parte de carga de frutos en la planta, pero su eficiencia depende de la cantidad de luz que reciben. La penetración de la luz a través del follaje decrece por la absorción de la luz y por la sombra del dosel, por lo que las hojas inferiores pueden aportar un poco al total de la producción de asimilados si están a la sombra de las hojas más gruesas del dosel. Por lo tanto, manteniendo el crecimiento de la hoja a tamaños moderados puede mejorar la producción de asimilados, mejorando la penetración de la luz en el follaje. Las hojas que están a la mitad de tallo y que crecen entre hileras dobles de tomate, puede con frecuencia, formar mucha sombra para ser eficiente, la eliminación de estas hojas puede mejorar la penetración de la luz y el movimiento del aire y por consiguiente mejorar la fuerza de sumidero. La luz reflejada del suelo con cobertura blanca puede mejorar la fotosíntesis en un 18%, esto paga la limpieza del piso, las podas, etc. La importación de asimilados disminuye conforme el fruto madura y cesa cuando el fruto está maduro. Esto reduce la fuerza de sumidero de las hojas adyacentes a los racimos de frutos maduros; mientras todavía sean capaces de hacer fotosíntesis y exportar asimilados a otros sumideros como a las raíces y brotes. Baja fuerza de sumidero puede resultar en la acumulación de almidón en las hojas, la hoja se vuelve gruesa y se enrolla hacia arriba. A lo largo de sus vidas, las hojas usan asimilados para la respiración y conseguir energía para su demanda interna, pero cuando las hojas envejecen, alcanzan un punto en el cual la fotosíntesis no provee suficientes asimilados para la respiración y la hoja vieja se convierte en sumidero 5

3 consiguiendo asimilados del resto de la planta. Por lo tanto, la eliminación de hojas enrolladas y senescentes mejora el balance de energía de la planta. Brotes lateral Estos brotes se eliminan cuando son pequeños, generalmente durante el manejo semanal. La remoción de los brotes elimina a un sumidero débil, ahorrando energía para otros propósitos. Brotes débiles o delgados y/o racimos con pobre desarrollo puede ser un síntoma de una demanda del sumidero no satisfecha y dejando un brote bandera, es decir, un brote lateral al que se le permite desarrollar tres o cuatro hojas pero sin flores, puede incrementar la fuerza de la fuente y mejorar el balance sumidero-fuente. Por el contrario, hay momentos en los cuales la fuerza de sumidero puede ser menor al máximo de salida de la fuente y esto puede ser contrarrestado incrementando la densidad de tallos. Los brotes adicionales incrementan los sumideros como la fructificación, la fuerza extra de sumidero promueve el incremento de la fuerza de la fuentes a partir del incremento del área foliar. Típicamente, eso puede requerir el aumento de la densidad de tallo cuando la radiación diaria aumenta en la primavera y la reducción de la densidad conforme disminuye la radiación en otoño. Racimos, flores y frutos Los racimos de flores son buenos indicadores del balance reproductivo-vegetativo de la planta. Plantas fuertes vegetativas frecuentemente tienen racimos fuertes; mientras que, plantas reproductivas fuertes pueden tener racimos muy débiles indicando el balance fuente-sumidero. La mayoría de productores podan sus racimos a cierto número de frutos, racimos fuertes y una fuente fuerte permite que el número de frutos por racimo se incremente; mientras que, racimos débiles debido a una fuerza sumidero mayor a la de la fuente puede reducir el número de frutos por racimo, o incluso la remoción de un racimo completo puede ser un gran efecto correctivo. Si bien la eliminación del racimo y la eventual pérdida del rendimiento puede ser que parezca drástica, el no remover racimos cuando es necesario frecuentemente resulta en bajos rendimientos en racimos sucesivos; mientras que la eliminación de un único racimo puede restaurar el vigor vegetativo e incrementar el rendimiento en racimos posteriores. Si no se retira un racimo en el momento adecuado puede ser necesaria la remoción de dos o más racimos posteriores. Las flores son sumideros muy débiles, pero la fuerza del sumidero aumenta conforme el fruto se establece y más rápidamente conforme el fruto va incrementando de volumen. Los frutos compiten entre sí dentro de cada racimo por los asimilados, el fruto más cercano al tallo compite con más fuerza que el fruto que está al final del racimo. La primera flor fructifica un día antes o más a las siguientes flores del racimo de modo que el fruto adquiere la fuerza de sumidero antes que los otros frutos del racimo. La remoción de esta flor resulta en una distribución más uniforme de la fuerza de sumidero entre los frutos del racimo, resultando en frutos de tamaño más uniforme. La fructificación temprana de la primera flor resulta en la maduración del fruto antes que los otros, lo cual no es deseable cuando se venden los tomates en racimo. La extracción de flores por debajo del número requerido en el racimo, en lugar de remover el fruto pequeño de la parte inferior del racimo, concentrará la fuerza de sumidero en el fruto que lo requiera, evitando el desperdicio de asimilados. Algunas variedades de tomate son propensas a producir flores rey que forman grandes frutos multiloculares, la incidencia de flores rey es incrementada en plantas que son vigorosas vegetativamente y con racimos vigorosos. Las flores rey son por lo general la primera flor del racimo y debe ser eliminada en cualquier caso. Los racimos se producen en un intervalo de tiempo establecido con poco efecto del suministro de asimilados o la temperatura sobre la tasa de producción del racimo. Cualquier incremento estacional de la intensidad luminosa y, por lo tanto, del suministro de asimilados, no resultará en un incremento en el rendimiento si los racimos no han sido podados a un número determinado de frutos. El incremento del número de frutos por racimo como el incremento del suministro de asimilados no proporcionará suficiente 6

4 fuerza de sumidero y hará a la planta más vegetativa. En esta situación, un incremento en la densidad de tallos provoca una mayor densidad de racimos (racimos/m 2 ), el aumento de la fuerza de sumidero y de la fuente a partir de hojas adicionales, resulta en una planta con mayor balance y un mayor incremento en la tasa de rendimiento. (Izquierda) Vegetativo racimo fuerte con tallo grueso y erguido y muchas flores; (centro) racimo normal racimo con casi 90 con respecto al tallo de la planta; (derecha) Racimo débil cercano al ápice tallo delgado, pocas flores y difícil fructificación. Raíces El sistema radicular de la planta se comporta como un sumidero débil comparado con los tallos y frutos, pero es esencial que siempre haya suficiente fuerza de la fuente para suministrar asimilados a la raíz. Es fácil observar el crecimiento de las raíces en sistemas NFT, pero también es esencial revisar periódicamente las raíces de los medios hidropónicos. La falta de puntas blancas en las raíces puede indicar una baja fuerza de la fuente con insuficiente suministro de asimilados hacia las raíces. Si es así, entonces se necesita una acción urgente para mejorar la fuerza de la fuente. Sólo las puntas en crecimiento activo absorben calcio y magnesio, por lo que la falta de puntas nuevas se traducirá rápidamente en una deficiencia en el tallo y producirá pudrición apical en el fruto. La muerte radicular es común en plantas completamente cargadas de frutos, justo antes que los frutos de la parte inferior comiencen a madurar. Esto probablemente se atribuye a una alta fuerza de sumidero por la alta carga de frutos, impidiendo un adecuado suministro de asimilados al sistema radicular. En este caso, la descarga de la planta por cosecha de frutos maduros, resulta en la reanudación de un nuevo crecimiento en las raíces; pero esta situación puede evitarse limitando el número de frutos en los primeros seis o siete racimos. Cuando no se encuentren puntas blancas en las raíces, es necesario tomar medidas urgentes para que la fuerza de la fuente aumente. Teniendo brotes bandera, se cree que puede que sus puntas producen hormonas que inducen al crecimiento. La poda de un racimo o por la parte superior del racimo inferior para acelerar la maduración y descargar a la planta, reducirá la fuerza de sumidero y liberará más asimilados para el crecimiento radicular. 7

5 Resumen de las acciones de manejo de la planta y sus efectos Acciones Acciones normales Eliminación de brotes laterales Eliminación de la primera flor de cada racimo Efectos sobre el suministro de asimilados o distribución Evita el desperdicio de asimilados Reduce la competencia entre los frutos, resultando en un tamaño y maduración más uniforme Poda de las flores del racimo a un número requerido Evita el desperdicio e impiden el establecimiento de nuevos sumideros, mediante el establecimiento de frutos deseados Eliminación de hojas viejas Elimina sumideros débiles Mantenga limpio el piso blanco reflectante Incrementa la producción de asimilados en un 18% Revisar la condición de la raíz semanalmente Para asegurar que hay un nuevo crecimiento radicular Acciones para cambiar el balance Cuando el balance es muy.. Acciones Efectos sobre el suministro de asimilados o distribución Vegetativo Poda de hojas Incrementa la exportación de asimilados, evita la producción de hojas de mayor tamaño Reproductivo Deshoje selectivo Incrementa la producción de asimilados totales Reproductivo Deshoje sobre el racimo en Acelera la maduración y la maduración descarga de la planta Reproductivo Dejar un brote bandera Incrementa el suministro de Vegetativo Reproductivo Vegetativo Incrementar la densidad de tallos y racimos Disminuir la densidad de tallos y racimos Incremento del número de frutos por racimo asimilados Incrementa los sumideros y las fuentes cuando el suministro de asimilados es alto Cuando el suministro de asimilados es limitado Cuando el suministro de asimilados tiende a un balance vegetativo Reproductivo Disminución del número de Cuando el suministro de frutos por racimo asimilados es limitado Reproductivo Remover los racimos en floración Reduce la demanda de asimilados 8