RECOMENDACIONES PARA UNA RUTINA DE ORDEÑO ADECUADA

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1 RECOMENDACIONES PARA UNA RUTINA DE ORDEÑO ADECUADA Podemos definir la ordeña como el acto de extraer la leche luego de estimular adecuadamente al animal para que éste en forma espontánea, pueda liberarla desde los alvéolos del tejido mamario. En este proceso debe haber una participación conjunta entre la vaca, el equipo y el ordeñador. Para que el proceso de ordeño sea rápido y completo la vaca debe ser estimulada adecuadamente, una vez que el reflejo de liberación de leche, vía hormonas, es iniciado, la leche es empujada desde los alvéolos hacia el canal del pezón, luego la acción de succión de la máquina de ordeño o la mano del ordeñador, permiten canalizar y extraer la leche. La leche es producida por los alvéolos dentro del tejido mamario. Cerca del 60% de la leche se acumula en esta zona y el resto en los vasos lactíferos mayores y en la cisterna de la ubre. El reflejo de liberación de la leche está dado por estímulos externos como el contacto físico del ternero u ordeñador con la piel del pezón, el sonido de la máquina de ordeño y la visión del ternero en el caso de vacas tipo cebú. Una vez que la vaca está expuesta a los estímulos que permiten la bajada de la leche, una señal nerviosa es producida y dirigida al cerebro de la vaca, la cual es procesada por la glándula pituitaria para permitir la producción de la hormona oxitocina hacia el aparato circulatorio. Esta hormona es transportada hacia la ubre donde causa la contracción de las células musculares que envuelven el alvéolo. Estas contracciones producen la movilización de la leche desde los alvéolos hacia los vasos lactíferos mayores y la cisterna de la ubre, lugar donde la máquina de ordeño puede extraer la leche. La generación de esta hormona tiene un tiempo limitado, la concentración máxima se alcanza después de un minuto de iniciada la estimulación, luego de 1,5 a 2 minutos esta decae hasta un 50%, lo que disminuye la producción de leche. Este proceso implica que es de suma importancia la colocación de la unidad de ordeña no después de un minuto de iniciada la estimulación. Si este proceso se demora se reduce la cantidad de leche recolectada. Bajo ciertas situaciones se puede inhibir el proceso de bajada de la leche, en estos casos la leche no se libera del alvéolo y solamente una parte de esta puede ser recolectada. Cuando sometemos a la vaca a estímulos negativos como gritos, dolor, excitación, la hormona adrenalina puede comprimir los vasos sanguíneos y capilares de la ubre, lo que hace disminuir la presencia de oxitocina en la ubre. Por otro lado la adrenalina puede inhibir la contracción de las células musculares que rodean los alvéolos. En resumen, una vaca no podrá ser ordeñada rápida y completamente cuando: - Exista una preparación inadecuada - Demore la colocación de las unidades de ordeño - Mal ambiente en los corrales o en la sala de ordeño, como gritos, golpes - Deficiencias en el equipo de ordeña, el cual no extrae la leche o lo hace en forma que produzca dolor o incomodidad. El uso de una rutina de ordeño adecuada, un ambiente limpio y tranquilo, un equipo de ordeño en buenas condiciones y de un diseño adecuado, y por último una actitud positiva del ordeñador, son las claves para minimizar el riesgo de mastitis y maximizar la producción de leche de alta calidad. 1 de 6

2 Desde el punto de vista operativo es conveniente seguir las siguientes directrices: ORDEÑAR EN UN AMBIENTE LIMPIO Y NO SOMETER LAS VACAS A STRESS Las vacas son animales de hábitos, es importante mantener una rutina de ordeño consistente todos los días e independiente del ordeñador. Hay que tomar en cuenta los factores ambientales como que los accesos a la sala sean expeditos y los más limpios posible, el ingreso de una vaca con sus ubres embarradas o con estiércol, demoran el inicio de la ordeña y el tiempo que está presente la oxitocina se gasta en higienizar los pezones y no en ordeñar. La eliminación de pelos de las ubres reduce la cantidad de suciedad que puede contaminar la leche. Las ubres con pelos largos son más difíciles de limpiar y secar, y el ordeño con pezones húmedos o sucios aumenta el riesgo de contaminación de la leche y la probabilidad de infecciones intramamarias. Los ordeñadores deben utilizar guantes, en lo posible desechables. La bacteria Staphylococcus aureus se encuentra frecuentemente en las manos y fosas nasales y pueden ser focos de infecciones de mastitis. EXAMINAR LA LECHE Y LAS UBRES PARA DETECTAR INDICIOS DE MASTITIS El escurrir el pezón, aparte de estimular la bajada de la leche, es beneficioso porque ayuda a detectar alguna infección de mastitis, remueve aquella leche que podría tener un alto recuento bacteriano, puede servir como el principal estímulo para la bajada constante de la leche y contribuye a la reducción de mastitis. Durante el masajeo inicial del pezón, hay que primero limpiar cualquier residuo de tierra o barro del pezón con la mano. La mastitis puede detectarse a través del examen físico de la ubre, la presencia de dureza, calor, inflamación o ubre sensible al tacto, indicaría que estamos en presencia de un cuadro de mastitis, por lo cual el animal debe ser descartado. Esta actividad debe realizarse en cada vaca y ordeño, y la leche extraída debe recogerse en un jarro de fondo oscuro y examinarse para detectar la presencia de coágulos de leche, leche cortada, o con mal olor y otras alteraciones. Los jarros de recolección de esta leche deben limpiarse y desinfectarse entre cada ordeño para evitar la transmisión de mastitis entre animales. Nunca debe examinarse la leche en la mano del ordeñador, ya que supone un elevado riesgo de transmisión de mastitis entre vacas. LIMPIAR LOS PEZONES Un método común para la preparación de la ubre para el ordeño es el uso de las mangueras y las manos para eliminar la suciedad. Pero se recomienda mojar únicamente los pezones, ya que mojar toda la ubre dificulta el secado adecuado previo a la colocación de la unidad de ordeño. Es fundamental que este procedimiento se haga con agua bacteriológicamente apta. El ordeño con ubres o pezones mojados aumenta el riesgo de mastitis y el número de microorganismos en la leche. El tiempo de secado previo a la entrada en la sala de ordeño es crítico. Una vez, los animales ya han entrado en la sala de ordeño, deben utilizarse toallas de papel individuales para finalizar el secado de los pezones. Estas normas ayudan a minimizar el riesgo de nuevas infecciones, ayudan al proceso de estimulación de la ubre y mejoran la calidad de la leche ordeñada. Opcionalmente, el uso de un pre diping previo al ordeño es una alternativa atractiva que sólo debe usarse en aquellas explotaciones en las que la ubre llega a la sala del ordeño relativamente limpia. La solución limpiadora debe cubrir toda la longitud del pezón y la solución debe estar en contacto con el pezón durante un mínimo de 30 segundos antes de secarse y colocar las pezoneras. Este procedimiento es efectivo para reducir las neoinfeciones producto de contaminación ambiental. 2 de 6

3 SECAR COMPLETAMENTE LOS PEZONES Las pezoneras deben ser acopladas solo a pezones que estén limpios y secos. Los residuos de agua sobre la piel de la ubre, tienden a rodar hacia el esfínter del pezón y pueden traer consigo bacterias. Esta agua sucia puede ser infiltrada dentro de la pezonera e incrementar su recuento bacteriano. El ordeño con pezones y ubre mojada aumenta el riesgo de mastitis y disminuye la calidad bacteriológica de la leche. El ingreso excesivo de aire dentro de la pezonera causa que impactos de leche a gran velocidad penetran en la ubre. Esta situación también se verifica cuando las pezoneras son removidas sin cortar el vacío, o se sueltan y caen al piso. Cuando seque los pezones no deje residuos de agua, no utilice la misma toalla para secar distintas vacas porque puede causar el contagio de infecciones. Tampoco doble la toalla para usar la parte trasera en el lavado de otra vaca. Toallas de tela son mejores en lo que respecta al secado del pezón y hasta pueden ser más baratas, pero deben ser lavadas, con agua a mas de 80ºC, antes de ser utilizadas una segunda vez. COLOCACION DE LAS PEZONERAS Es fundamental realizar esta operación no después de un minuto luego del inicio de la preparación. La colocación debe hacerse con cuidado con el fin de reducir la cantidad de aire que entra dentro del sistema. El estímulo natural de eyección de leche causa la máxima presión intramamaria un minuto después del principio de la estimulación y dura aproximadamente 10 minutos. La mayor parte de las vacas se ordeñan entre 5 y 10 minutos. En consecuencia, conectar la unidad de ordeño entre 1 y 2 minutos después del inicio de la estimulación permite aprovechar al máximo el estímulo natural de la eyección de leche. Es importante que el protocolo de preparación de la ubre sea similar entre ordeños, y que se respeten los tiempos de preparación y espera para la colocación de la unidad de ordeño. Es necesario controlar que la unidad de ordeña esté correctamente alineada para prevenir la entrada de vacío. Un ordeño rápido y completo es posible solamente cuando la unidad de ordeño se encuentra alineada adecuadamente. Mantenga la pezonera doblada hacia abajo para minimizar la cantidad de aire que entra debido a la succión. Inserte el pezón dentro de la pezonera para no impedir la bajada de la leche. Si una de las pezoneras empieza a hacer ruido debido al ingreso de aire, trate de ajustarlo lo antes posible. La pérdida de succión hace que el flujo de la leche sea de regreso al interior de la ubre lo que permite la entrada de bacterias. Si sólo esta ordeñando tres pezones, cierre con un tapón la cuarta; asegúrese de que estos sean lavados y desinfectados después del ordeño. RETIRO DE LAS PEZONERAS Remueva toda la unidad de ordeño rápidamente después de que la vaca ha sido ordeñada, teniendo la precaución de hacerlo sin vacío, después de unos segundos la pezonera se desacoplará rápidamente. En general, es más importante la forma cómo se finaliza el ordeño que el momento en que se finaliza. La práctica de estirar las pezoneras con el vacío funcionando debe evitarse porque resulta en entradas de aire que aumentan el riesgo de mastitis. La retirada incorrecta de las pezoneras constituye una amenaza importante para la salud de la ubre. Los cuartos anteriores se ordeñan antes que los cuartos posteriores, los que producen más leche, por lo tanto, los cuartos delanteros tienden a sobre ordeñarse un poco. En general, esto no es un 3 de 6

4 problema; uno o dos minutos de sobre ordeño, con un adecuado funcionamiento de la máquina, no predispone a la mastitis. Aquellos cuartos que se ordeñan rápidamente pueden terminar con uno o dos minutos de anticipación en comparación con los otros. Si este es el caso, déjelos que continúen como estaban (no remueva las pezoneras) a menos que empiecen a hacer ruido por la entrada de aire o que las pezoneras se estén deslizando del pezón. En el pasado, era una práctica muy común la de masajear la ubre con la máquina de ordeño en el lugar para colectar la última fracción de leche (sobre ordeño). Esta práctica debe de ser completamente abandonada debido a un incremento del estrés en el tejido del pezón y el riesgo de entrada de aire en la unidad, lo que incrementa el riesgo de mastitis. DIPPING POST ORDEÑA En los últimos años la inmersión de pezones en una solución germicida (teat dip), ha sido una manera efectiva en la reducción de la incidencia de infecciones intramamarias (IMI); convirtiéndose en una práctica habitual en el manejo del ganado lechero. Para el desarrollo y establecimiento de una IMI es necesario la penetración, multiplicación y colonización de los microorganismos causantes de la mastitis a través del conducto del pezón. Hoy en día los teat-dips son considerados como una práctica simple, económica y efectiva para reducir la población bacteriana en la región mamaria. A pesar de la opinión generalizada de que los teat-dips constituyen un componente esencial en todo programa de control de mastitis, dicha práctica presenta restricciones y peligros asociados a su uso. Es importante recalcar que el teat-dip solo prevendrá las nuevas infecciones, pero la duración de las ya existentes no se acortará. La mayoría de las IMI perduran por meses o años y el teat-dip utilizado como única terapia requiere de varios meses antes de que el nivel de infección en un rebaño se reduzca significativamente. Se han obtenido excelentes resultados en el control y duración de las IMI utilizando teat-dips conjuntamente con otras prácticas como la terapia de secado, eliminación de ganado enfermo, etc. Staphylococcus Aureus y Streptococcus Agalactiae son contagiosos y son transmitidos durante el proceso de la ordeña desde cuartos infectados a los sin infectar y por ende de animal en animal, provocando de esta manera un problema de índole colectivo. Los teat-dip aplicados a pezones del animal después de cada ordeña, generalmente destruyen esas bacterias antes de la colonización de la piel del pezón o la penetración del conducto del mismo. Los pezones y cuartos del animal pueden sufrir una fuerte contaminación por microorganismos patógenos provenientes del medio. Cuando estas vacas entran en la lechería, puede ocurrir un intercambio de IMI si el numero de estos microorganismos no son reducidos antes de la ordeña (prediping). Otro factor importante involucrado en la transmisión de las IMI es el mal estado de las máquinas ordeñadoras, lo cual puede afectar de tres maneras distintas: Deteriorando la condición física y resistencia a la infección del pezón y el cuarto. Constituir un medio de transporte de microorganismos a través de la línea de leche. Comportándose como un hábitat adecuado para microorganismos ya existentes. En resumen, todo esto nos indica que un teat-dip puede ser potencialmente más útil en el control de la mastitis por patógenos ambientales que en otros casos. La aplicación de un sellador de pezones es una alternativa efectiva a la reducción de infecciones ambientales, ya que estos proporcionan una barrera física sobre el orificio del pezón Por último una limitación algunas veces relacionada con los teat-dips corresponde a la irritación. Algunos teat-dips son irritantes, debido a su alta acidez o alcalinidad de los productos utilizados. Tales 4 de 6

5 productos se deben a errores en fabricación, almacenamiento prolongado o al deterioro ya sea por congelamiento o calentamiento de éstos. Serios problemas pueden ocurrir cuando se ocupan germicidas de alto contenido de acidez en el lavado de ubres y cuando se ocupan como teat-dip. El uso continuado durante unas pocas ordeñas, puede causar severas lesiones en la punta del pezón, predisponiendo a un serio brote de mastitis en el ganado. Ocasionalmente la irritación aparece por causa de la interacción entre el teat-dip y/o factores ambientales. Los pezones expuestos a fríos extremos pueden agrietarse además, bajo estas condiciones climáticas, los productos pueden descomponerse. Para minimizar la irritación y el agrietamiento de la piel del pezón, se incorporan emolientes tales como glicerina y lanolina en sus formulaciones, teniendo presente que la concentración de estas no pueden pasar del 10-12% ya que la actividad germicida se reduce a dichas concentraciones. Los productos más utilizados como desinfectantes de pezones son los elaborados en base a yodo y clorhexidina. El yodo ejerce su acción antimicrobiana debido a sus características como oxidante, que modifican grupos funcionales de proteínas y ácidos nucleicos. Inactiva proteínas y enzimas por oxidación de los grupos -SH a S-S. El yodo actúa disminuyendo los requerimientos de oxígeno de los microorganismos aeróbicos, interfiriendo a nivel de la cadena respiratoria por bloqueo de transporte de electrones a través de reacciones electrofílicas con enzimas. La clorhexidina pertenece al grupo de las Biguanidas donde incluyen en este grupo la alexidina, clorhexidina y las biguaninas poliméricas. El lugar de acción primario de estos compuestos es la membrana citoplasmática, con el resultado de modificación en la permeabilidad. La destrucción esta ocasionada por la ruptura de la membrana y pérdida de la permeabilidad sin lisis de la pared celular. Los teat-dip basados en soluciones de clorhexidina tienen un control efectivo en las nuevas infecciones intramamarias, especialmente en aquellas originadas por Staphylococcus Aureus y Streptococcus Agalactiae, los dos principales causantes de mastitis, así como también Escherichia Coli. Tiene considerable persistencia sobre la piel (adherencia residual), bajo potencial de sensibilización y su actividad permanece 5-6 horas después de aplicada. Recomendaciones de uso 1) Adquiera productos que cuenten con el respaldo de entidades oficiales de Salud, no hay que olvidar que los desinfectantes para pezones son productos farmacéuticos de uso veterinario y su elaboración y control deben ser los mismos que se usan en productos para uso humano. No compre productos donde no se identifique el fabricante o importador, recuerde, la salud de sus animales dependerá de la efectividad de ese producto. 2) Cubra la totalidad del pezón con el desinfectante. No olvidar la parte trasera del pezón, especialmente si se usa el sistema de spray. 3) Los aplicadores de diping (dipineras) deben mantenerse limpios y en buenas condiciones. De preferencia utilizar diseños que no permitan el reflujo del producto. 4) Nunca debe devolverse el contenido del aplicador de diping al depósito original. 5) Si el desinfectante se llena de paja u otra suciedad contaminante, desechar su contenido, limpiar la botella y rellenarla con desinfectante nuevo. 6) No se aconseja el uso de productos para diluir en agua, porque en el caso que ésta estuviera contaminada, infecta a los pezones, que tienen el esfínter abierto después de la ordeña, y hace que la acción desinfectante del diping actúe sobre el agua y no los pezones. 7) En general, no se recomienda bajar los costos de producción lechera recortando los gastos de diping ya que la desinfección de pezones post ordeño, junto con la terapia de secado son la base de los programas de prevención y control de mastitis. LAVADO DE LAS UNIDADES DE ORDEÑA Como una forma de prevenir la diseminación de las infecciones entre las vacas, es cada vez más común el desinfectar las camisas de las pezoneras antes de utilizarlas para la próxima vaca. El procedimiento preferido es 5 de 6

6 el de sumergir las pezoneras en un balde lleno de agua limpia para enjuagar los residuos de leche. Luego, las pezoneras son sumergidas en un balde con agua y un desinfectante CONSIDERACIONES GENERALES Existen otros factores que pueden ayudar a reducir la incidencia de mastitis, como el orden en que se ordeñan las vacas, primero las vacas de primer parto, luego las vacas adultas con bajos conteos somáticos y al final las vacas con conteos somáticos mayores o con mastitis clínica. Una buena rutina de ordeño requiere, además, un estado de atención y vigilancia constante por parte del que ordeña para controlar aquellos factores que contribuyen al contagio de mastitis entre vacas. La corrección de las condiciones causantes de dicha contaminación contribuye a la producción de leche de calidad. 6 de 6