Real Sitio y Monasterio de. San Lorenzo de El Escorial. -Patrimonio Cultural: Historia del Arte. Yace en el alto monte Carpetano

Transcripción

1 Real Sitio y Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. -Patrimonio Cultural: Historia del Arte. Yace en el alto monte Carpetano en la falda que cae al medio día, Límite del gran reino toledano, en un puesto que Dios favorecía, con grandes arboledas, muy lozano, y fuentes que la tierra producía, de todos los del orbe mas dichoso, pues tiene un edificio tan famoso. Grado en Turismo, 1º Rodríguez Tornos Juan 30/05/2013

2 COMENTARIODEUNAOBRADE ARTE IDENTIFICACIÓN: Monasterio del Escorial: El Monasterio de San Lorenzo de El Escorial es un complejo de palacio, basílica y monasterio construido entre 1563 y 1584 en el madrileño municipio de San Lorenzo del Escorial. Esta obra de tal importancia fue ordenada construir por el Monarca Felipe II y llevada a cabo porel arquitecto Juan Bautista de Toledo hasta su muerte en Que supuso la dirección del resto del proyecto por parte de Juan de Herrera. Arquitecto que impuso todas sus líneas de pensamiento en la construcción y la doto de un estilo propio herreriano qué la caracteriza. Fue en este monasterio donde el monarca Felipe II llevó con firmeza el gobierno del imperio español. ANALISIS HISTÓRICO Tras el flamante reinado de Carlos I de España y V de Alemania, el 16 de enero de 1565 este se dispuso a ceder el trono de los reinos de Hispania, Sicilia y Las Indias a Felipe II, rey que impulsó la construcción del Real Sitio, monasterio y panteón familiar. El reinado de Felipe estuvo sin duda marcado por la defensa del Catolicismo, las fuertes disputas por la hegemonía europea con Inglaterra sobre todo en los mares o con Francia. Además, este reinado inteligente y admirado mundialmente es recordado por su gran extensión. Y es que, valiéndose de las herencias paterna (Carlos I) y Materna (Isabel de Portugal) Felipe II logró ser el Monarca de un gran imperio a nivel colonial en América y Oceanía en el que aún hoy recuerdan la frase nunca se ponía el sol. Con todo, sus actuaciones certeras y la austeridad de su reinado le sirvieron el sobrenombre de el rey sabio y prudente. Uno de los grandes cambios en el reino Español que acontecieron a lo largo del reinado de Felipe II fue el traslado de la corte definitivamente y de forma permanente en Madrid. para ello, Felipe II tuvo la idea de construir un inmenso edificio que sirviese como corte y en el que pudiese retirarse a administrar los asuntos del estado mientras que una gran comunidad de frailes rezaba por su salvación espiritual. Este edificio además sería símbolo de su monarquía. Sobrio y austero además de volcado por la defensa del catolicismo. Según la leyenda, la decisión de la construcción de este monasterio se debe a la acción de gracias que Felipe II dirigió a San Lorenzo tras la Batalla de San Quintín en el norte de Francia, en Esta batalla tuvo lugar el día 10 de agosto, festividad de San Lorenzo y ese día,las tropas españolas vencieron al ejército francés, razón por la cual este edificio se dedicó a este santo. Sin embargo, también se investiga con mucha fuerza la posibilidad de que la construcción de este monasterio se deba a la presión que Felipe II sintió toda su vida por dar enterramiento a su padre, el emperador Carlos I en un mausoleo digno de su grandeza según él habría dictado en su testamento. Aceptando cualquiera de las teorías acerca de sus orígenes, las obras de este impresionante

3 edificio comenzaron en 1563 y concluyeron 21 años más tarde, cuando se colocó la última piedra del monasterio, el 13 de septiembre de El lugar elegido para tal obra también es de gran importancia. Se trata de una llanura a los pies del Guadarrama. Una zona con un clima suave en verano y no muy extremo en invierno. Además se trata de una zona muy protegida de los vientos fríos de la sierra y que por su característica, el abastecimiento de aguas es relativamente sencillo. Pensando en la obra, el lugar elegido para la construcción tiene notable importancia ya que se trata de una construcción hecha fundamentalmente en granito. Piedra que se encuentra en abundancia en los alrededores. También la proximidad de grandes bosques facilitaron la obtención de maderas que se trabajaron en la construcción y adornado del monasterio. La autoría de la obra del Real sitio se suele atribuir a Juan de Herrera. Sin embargo, la historia de la construcción de esta gran obra es interesante. Y es que, una vez decidida la construcción de El Escorial y elegido el lugar, Felipe II procedió a la elección del arquitecto que dirigiría la obra. En ese momento, optó por llamar a un arquitecto español que había sido formado en Italia, Juan Bautista de Toledo (Toledo o Madrid El Escorial 1567) experto arquitecto español que además se había especializado en obras de ingeniería militar e hidráulica. Este afamado arquitecto que no figuraba ni muchísimo menos entre los favoritos para construir esta gran obra fue elegido probablemente por la relación que ambos tuvieron a partir de su conocimiento en uno de los viajes a Flandes que el monarca hizo. Experimentado y capacitado para esta obra, se dice incluso llegó a trabajar con Miguel Ángel en el Vaticano y en Nápoles. La muerte de Juan Bautista de Toledo en 1567 supuso un varapalo para el proyecto pero no en demasía pues ya había dejado escritas las líneas generales que él quería para su proyecto. Además, como sucesor de Juan Bautista, se eligió a uno de sus más directos colaboradores. El cántabro Juan de Herrera (Cantabria 1930-Madrid 1597). Con el tiempo, considerado uno de los mayores exponentes de la arquitectura renacentista hispánica a la que dotó de su particular toque distintivo en un estilo que gracias a él se conoce como herreriano. Totalmente vinculado al Escorial desde sus inicios e incluso ayudó a la realización de los planos. Fue el quién materializó tan grandiosa obra y la imprimió su estilo tan característico. La obra por tanto, tubo como promotor y destinatario la por entonces corona del reino de España en la figura del monarca Felipe II. Quien el 22 de abril de 1567, firmó la Carta de Fundación de este monasterio en la que confirmaba cuales habían sido sus intenciones a la hora de construir este edificio. Muchos de estos motivos ya han sido analizados con anterioridad como es el caso de en agradecimiento por los muchos y grandes beneficios que Nos hemos recibido y recibimos diariamente de Nuestro Señor y porque El Nos ha guiado ( ) y ha conservado Nuestros imperios en su santa fe y en la religión por el instaurada. En esta misma carta, Felipe II señala cuales debían ser a partir de ahora las funciones a desempeñar por el nuevo edificio que serviría como: Monasterio, panteón real, colegio, hospital y aunque no se dijese nada en la carta, se sobreentendía que al igual que había sucedido con sus antecesores (Reyes Católicos en Santo Tomás de Ávila o Carlos V en el Monasterio de Yuste) este edificio serviría también como aposentos reales y lugar donde se podría establecer la Corte del rey en Madrid y lugar de gobierno del reino. Con el paso de los años, este edificio ha servido como panteón de toda la casa real tanto de los Austrias como los Borbones.

4 ANÁLISIS TÉCNICO: El edificio es un espacio rectangular de 206 metros de fachada por 161 de fondo. Cuenta con cuatro torres situadas en cada esquina coronadas con capiteles que sirven como contrapunto vertical para un edificio que por su inmensidad necesitaba de algún elemento que contrarrestase su horizontalidad. Como ya se ha comentado, la elección del lugar para la construcción de este monumento no es algo aleatorio. Sino que responde a determinadas necesidades que a la hora de construirse fueron necesarias. Una de ellas, la necesidad de localizar el material con el que se construiría el Real sitio, fue solucionada gracias a la cercanía de esta gran extensión donde se asienta el edificio de la sierra de Madrid y la pedriza. Contando con esas facilidades, el edificio se levantó utilizando fundamentalmente piedra de granito en forma de sillares para su construcción y planchas de pizarra que sirviesen como acabado en determinadas superficies. Como se puede observar en su planta, la planificación de esta monumental obra tiene diversos significados que se han atribuido a lo largo de la historia. Así, una de las más comunes interpretaciones sobre esta planta se basa en la forma de la misma. Y es que, la forma similar a la de una parrilla podría haber sido elegida como homenaje a san Lorenzo. Patrón de la localidad y homenajeado por la construcción. Y es que según dicen los escritos, este santo de origen oscense y uno de los siete diáconos de roma, moriría en el año 258 d.c a causa de un martirio que se produjo en una parrilla.

5 Dividido por cuatro grandes patios, Juan de Herrera fue capaz de levantar con una gran exactitud aquello que Felipe II deseaba. Una edificación de carácter sobria y austera cuyas únicas representaciones estéticas consistían en las ya comentadas torres de las esquinas y sus pináculos con bolas superiores quedando el resto de la edificación reducido al simple juego que el arquitecto hizo con los elementos constructivos y tan característicos de su estilo. ANÁLISIS TEMÁTICO E ICONOGRÁFICO: Como punto de partida para el análisis de la organización del escorial vamos a tomar su fachada principal. Que es la occidental. En ella, se pueden observar tres puertas que señalan la triple división interior que se va a seguir para el análisis. Entre las tres puertas, la principal es la central cuya fachada es la más monumental de todas ellas. Una puerta adintelada Soportada con columnas de estilo dórico y rematada por un frontón triangular da acceso a través del famoso patio de los reyes a la iglesia que es el centro y la parte más importante de la construcción. Esta puerta, como ya hemos dicho da entrada a lo que se conoce como el patio de los reyes. Este patio, recibe este nombre ya que desde su interior se pueden ver las seis grandes estatuas que representan a los reyes de Israel. Estas estatuas de cerca de 5 metros de altura se sitúan en la fachada de la basílica. Obra del escultor Juan Bautista Monegro, estas estatuas se realizaron entre 1580 y 1583 y fueron instaladas en la fachada de la basílica a lo largo de Sin embargo, no fue hasta 1600 cuando estas estatuas se colocaron sobre la base en la que hoy en día se encuentran. En esta base está escrito el nombre de cada uno de los reyes así como sus principales atributos. Como no podía ser de otra manera, estas bases están hechas de granito. Las inscripciones que se pueden leer en cada una de las estatuas son: Patio de los reyes Iosaphad con cetro y un hacha, a su lado un cordero. Inscripción: Lucisablatislegempropagavit (Destruidos los bosques idolátricos, propagó la Ley). Ezechias con cetro y una nave, a su lado un macho cabrio. Inscripción: Mundato domo phasecelebravit (Habiendose restaurado y limpiado el Templo, celebró la Pascua). David, con cetro, arpa y espada. Inscripción: Operisexemplar a domino recepit (Recibió del señor el modelo del templo). Salomón con cetro y un libro. Inscripción: Templumdñoaedificatumdedicavit (Dedicó al Señor el Templo que le edificara).

6 Iosias con cetro y el libro de la ley. Inscripción: Volumen legisdominiinvenit (Encontró el libro de la Ley del Señor). Manasses con cetro, escuadra y compás. Inscripción: ContritusaltareD.instauravit (Arrepentido, restauró el altar del Señor). Según algunas teorías, en un ambiente tan solemne y cargado en tal medida de la contrarreforma de la que el reinado de Felipe II es fiel representante, este patio de los reyes que no se caracteriza por ser espectacular en cuanto a su extensión, pudo haber servido como antesala y lugar donde por primera vez la corte recibía a los invitados. En este patio es donde el visitante se daba cuenta de la magnitud real del edificio. Como curiosidad última sobre este patio, entre la octava y novena ventana a la altura de la cornisa, en la pared izquierda del patio, se puede observar con dificultad una de las piedras que tiene una cruz negra grabada en su interior. Esta piedra que es muy difícil de ver a simple vista, es la última piedra del proyecto de la que ya se ha hablado con anterioridad en este trabajo. Basílica del Escorial: Esta iglesia es el espacio más importante de todoe l conjunto de El Escorial, y el que más inquietó y trabajo dio tanto a Juan de Herrera como a Felipe II. Quién dicen los escritos supervisó con la máxima atención el devenir de esta zona del recinto. Comenzada a construir en junio de 1575, su consagración tuvo lugar 11 años después el 9 de agosto de La fachada de esta basílica se divide en 4 partes: En primer lugar, dos cuerpos horizontales que se diferencian perfectamente en altura. El cuerpo bajo en el que se encuentran los cinco arcos que dan acceso a las puertas que acceden al interior del edificio y el cuerpo superior, En el que se pueden ver las seis estatuas de los reyes. Sobre el cuerpo superior de la fachada principal de la basílica, a cada uno de los lados se alzan dos torres que alcanzan 72 metros de altura. Ambos lados idénticos salvo por la existencia en el lado derecho de un reloj. La torre izquierda, carente de este reloj tiene un óculo que tiene el mismo tamaño que el hueco del reloj. Una vez subidos los 7 peldaños que dividen el patio de los reyes y la fachada del edificio, la entrada a la edificación se puede hacer desde varias puertas. Las centrales, dan acceso a la basílica mientras que las laterales, acceden a otras dependencias. Como ya se ha dicho, esta edificación es lo más importante de todo el conjunto. Y es que este templo es la Casa de Dios, pero también es el lugar desde el que Felipe II asiste a las celebraciones litúrgicas. Esta basílica está situada en pleno centro del complejo y todos los elementos se sitúan a su alrededor y tienen un acceso sencillo al interior. Juan de Herrera en esta basílica crea un proyecto trazando una planta que tiene mucho que ver al proyecto de San Pedro del Vaticano de Miguel Ángel. No solo por su perfección arquitectónica, sino por estar plenamente cargada de simbolismo como cabeza visible de la cristiandad. Además, similitudes como el carácter funerario de ambas edificaciones hacen que buena parte de ambos complejos este estrechamente relacionada. Según Vila Jato, María Dolores et ál.,(panteones reales de las monarquías hispánicas: Madrid, Paradores de Turismo de España S.A., 2000.), la elección del arquitecto consistió en un espacio central integrado por una cruz griega inscrita en un cuadrado, con cúpula en el crucero, y brazos de la cruz bon bóvedas de cañón y remate

7 recto. El brazo correspondiente al presbiterio se alarga mediante dos tramos sobre elevados con escalones, para poder colocar debajo el previsto Panteón Real Esta iglesia además cuenta en su interior con muchas evidencias de que en su construcción se estableció un claro orden jerárquico. Y es que a día de hoy no se observa pero, siglos atrás, una reja separaba los lugares reservados para la familia real y sus oficiales. Para el pueblo se reservaba el espacio del sotacoro que tenía sus propios altares y que era una representación de lo que se podía ver en el altar principal. Como curiosidad principal de la bóveda del presbiterio de la iglesia, cabe comentar que esta es la primera bóveda renacentista que se construyó en España. Lo que supuso un gran avance arquitectónico. Interior de la Basílica de El Escorial Aparte de la estética y arquitectura del interior de la basílica, Felipe II pensó inmediatamente en llenar este enorme espacio religioso con cuadros y esculturas que contribuyesen a explicar y recordar los grandes misterios de la Fe Católica. Y es que, ante un pueblo generalmente analfabeto todavía en el siglo XVI, la representación de estas imágenes hacía mucho más fácil su acercamiento al pueblo llano. El retablo mayor, trazado por Juan de Herrera en una arquitectura sobria fue trabajado por artistas italianos que expresaron el mensaje devocionales enseñanzas que los mártires representados trataban enseñar a los fieles. Este retablo mayor también cuenta con distintas representaciones esculturales en bronce que el broncista Pompeo Leoni esculpió antes de centrarse en la tarea que se le encomendó como diseñador de los sepulcros reales del presbiterio. Las bóvedas también fueron trabajadas por fresquistas italianos. Así, en la bóveda del presbiterio está representado en un fresco el tema de la coronación de la Virgen y los cuatro profetas. En la bóveda del coro, el tema es la Gloria y distintas escenas de la vida de san Lorenzo. Un lugar privilegiado en esta capilla es el que ocupan Carlos V y su esposa la emperatriz Isabel junto con su Hija doña María. Todos ellos enterrados a un lado del presbiterio en sendos sepulcros situados en el lado del presbiterio. Al otro lado del presbiterio, el hijo del emperador y responsable de la obra, Felipe II está enterrado acompañado de sus esposas Ana de Austria, Isabel de Valois y María de Portugal. Así como el malogrado príncipe don Carlos, hijo de Felipe II. En ese lugar se encuentra la familia real, al cobijo de una arquitectura carada de una gran monumentalidad que fue realizada por Juan de Herrera y que está perfectamente combinada con la imagen del retablo hacia el que los grupos arrodillados se dirigen en plena oración. Otro gran logro en la construcción de este elemento funerario fue la perfecta conjunción entre los materiales utilizados con la

8 tradicional en la edad media de la representación del difunto orante. Por último, como gran curiosidad de este enterramiento de dos monarcas tan importantes de la historia de nuestro país destaca como en cada uno de las dos alas donde están enterrados hay dos grandes espacios vacíos. Estos, como dice la inscripción sobre mármol negro, sobre el sepulcro de Carlos V viene a decir que estos espacios están reservados para si alguno de los descendientes de Carlos V sobrepujara las glorias de sus hazañas, ocupe este lugar primero, los demás absténganse con reverencia. En el caso del hueco al lado del sepulcro de Felipe II se indica Este lugar que aquí queda vacío lo guardo quien lo dejo de su grado para el que de sus descendientes fuere mejor en virtud; de otra suerte ninguno lo ocupe. La zona trasera de la iglesia y con acceso directo a ella es otra de las más importantes zonas de la edificación. Se trata de las dependencias más intimas y personales de Felipe II quién pidió estuvieran lo más cerca de la basílica interior y está comunicada con la misma. Esta parte de la construcción es lo que se conoce como El Escorial de los Austrias una sucesión de estancias que abrazan la cabecera de la iglesia y se organizan en dos pisos que se encuentran alrededor del llamado patio de los mascarones esta área destinada a alojar a Felipe II y los suyos estuvo también perfectamente medida y planificada. Así, su entrada se hace por el hall principal por el que se recibía a la visita. A esta sala le seguía una sala de audiencias más personales que el rey hacía con los invitados más importantes. Más adelante una sala de estar que comunicaba con el comedor. Finalmente se encuentra el dormitorio del monarca. Este perfectamente orientado hacia el sur como era capricho del rey y en cuyas dependencias se podía observar un oratorio personal con vistas y orientado al presbiterio de la iglesia. Y es que, en determinadas ocasiones era allí donde Felipe II escuchaba y participaba de sus oficios. Este Escorial de los Austrias es totalmente simétrico y en frente de las dependencias de Felipe II pero orientadas al Norte se encuentran las dependencias que en principio estarían destinadas a la reina. Sin embargo, finalmente fueron llamadas dependencias de Isabel Clara Eugenia. Ya que esta hija del rey fue quien las ocupo finalmente. Biblioteca de El Escorial: En este caso, Juan de Herrera no solo trazó la arquitectura sino que también diseño todo el cuerpo de estanterías y armarios estanterías que guardan una de las mayores colecciones bibliográficas del mundo. Entre sus principales pertenencias podríamos citar algunas joyas bibliográficas como son las Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio, el Códice Escurialense de Leonardo o la Civitas Dei de San Agustín. Además de la maravillosa colección bibliográfica esta estancia de la edificación es también sumamente vistosa y hermosa gracias a toda una serie de pinturas al fresco que decoran las paredes de la biblioteca y que son obra de Pellegrino Tibaldi y Bartolomé Carducho. Quienes bajo la influencia de la capilla Sixtina representaron la filosofía teogonía y las artes liberales en lo alto de la bóveda y una serie de escenas bíblicas en los muros laterales. En mitad de la sala, de gran valor son las mesas de mármol así como la Esfera Armilar que se construyó en Florencia en 1585.

9 Biblioteca de El Escorial Volviendo de nuevo a la puerta principal del complejo, pero atravesando esta vez la puerta de la derecha, nos adentramos en la zona del DomusSacerdotum es decir, el monasterio. Que ocupa toda la parte sur del edificio. Tras atravesar el claustro de la portería llegamos a otra gran zona de interés notable de este complejo. Se trata del patio de los evangelistas. Patio que comunica el monasterio con la iglesia. Este patio recibe ese nombre por el templete central de Herrera que es una reinterpretación del Timpietto de Bramante en San Petro in Montorio. Panteón Real de El Escorial: Se trata esta dependencia del final de nuestra visita por todas las estancias y dependencias del complejo del escorial. Ya se sabe desde el principio de este trabajo que una de las grandes inquietudes y finalidades del nuevo edificio era la de servir como panteón Real para su padre, el mismo y sus descendientes. De esta forma, convierte El Escorial en un Panteón y la iglesia en un recinto que tiene un marcado sentido funerario como se ha podido observar. Para ello, Felipe II ordenó el panteón debiera situarse en el subsuelo como una auténtica casa de los muertos oscura y fría y que se encontrase bajo las gradas del presbiterio. A pesar de estas órdenes, Felipe II no llego en vida ni siquiera a ver comenzadas las obras del panteón sino simplemente las principales. El cronista de las obras del Monasterio, el Padre Sigüenza, acaba su crónica lamentándose de que Felipe III no se hubiese molestado en impulsar la terminación del Panteón Real pero lo cierto es que años más tarde del final de esta crónica, en 1618 el monarca emprende la vuelta a estas obras cuyo lugar ya se había decidido. Sobre estas obras, se sabe los detalles en bronce se deben al broncista Juan Bautista Crescenzi. Por lo que se le ha atribuido también la estancia en determinados momentos. Sin embargo, también se cree pudo tratarse del arquitecto real Juan Gómez de Mora quién dirigiese la construcción. En todo caso, la construcción de este panteón fue majestuosa y llena de materiales impresionantes que muestran como, estos reyes católicos eran tenidos en cuenta como vicedioses en la tierra y este panteón como su casa de los muertos que debía ser acorde a ello. La majestuosidad de las paredes y los detalles así como la brillantez en cada rincón marcan absolutamente toda la obra que es uno de los tesoros de nuestra historia.

10 Panteón Real En este panteón desde su inauguración fueron recibiendo sepultura todos los reyes de España y todas las reinas madres del rey, colocándose en el lado del Evangelio las urnas de los reyes y en el de la Epístola los de las reinas. Todos salvo las excepciones de Felipe V enterrado en la granja y Fernando VI enterrado en la iglesia del Monasterio de las Salesas Reales. ANÁLISIS FORMAL Y ESTILÍSTICO: Esta obra de arte que incluso ha llegado a ser calificada como la 8ª maravilla del mundo se encuentra enmarcada dentro del renacimiento Español. Este renacimiento es un movimiento mucho más tardío que en Italia ya que como vemos, se trata de una de las primeras obras y data de la segunda mitad del siglo XVI. Sin embargo, este estilo no es el más característico en este edificio. Y es que como ya se ha comentado, Juan de Herrera otorgó su toque distintivo a un estilo rígido y formal como es el renacimiento en España. Este estilo que recibirá el nombre de Herreriano o plateresco es el claro ejemplo de cómo los estilos no se sobreponen uno por encima del siguiente sino que acontece un cambio lento y a veces (como en esta ocasión) interesante y espectacular. Este estilo no rompe del todo con el gótico. En España como hemos dicho, viene de la mano de estos dos grandes personajes de la Historia del Siglo XVI tanto Juan de Herrera como el gran Felipe II mecenas de casi todas las obras concebidas en este estilo. Un estilo recto, sin florituras y con materiales nobles que sin embargo, se ve roto por determinados elementos que ofrecen algo de dinamismo y esteticismo. Como es el caso de las torres de las esquinas del monasterio de El Escorial. Otros grandes edificios similares a este y que pueden ser estudiados en conjunto son: -Palacio del Ducal de Lerma Construida por Francisco de Mora, uno de los principales discípulos de Juan de Herrera. Catedral de Nuestra Señora de la Asunción (Valladolid) Puente de Segovia (Madrid)

11 USOS A LO LARGO DE LA HISTORIA: Este monumento ya fue concebido como un gran espacio multidisciplinar en el que se llevasen a cabo diversas actividades de todos los tipos. Y es que a su uso como Palacio Real y sede de la corte, le han acompañado desde siempre otros igual de significativos como ya se ha comentado tales como Panteón Real, Iglesia, colegio o monasterio. En la actualidad, este lugar se encuentra dentro de la red de bienes que forman parte de Patrimonio Nacional. Entre los que se encuentran todos los bienes de la Familia Real. Además de ser un símbolo de la realeza y estar a su disposición cuando fuese necesario, este gran monumento tiene una relevancia a nivel patrimonial impresionante y es que en 1984 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por el comité de patrimonio mundial de la UNESCO. Máxima distinción y régimen de protección al que aspira un bien patrimonial. La protección incluye además de los jardines y huertas de los frailes, las casas de Oficios y de la Compaña, donde se albergaban los servicios del Monasterio y la Corte. La declaración incluye también las casas de Ministerios, Infantes y Reina que completaron en el XVIII la Lonja que rodea el edificio, así como la Casita del Príncipe y Casita del Infante. Probablemente esta declaración de El Escorial como patrimonio de la humanidad se hiciese en base al criterio número IV. Ofrecer un ejemplo eminente de un tipo de edificio, conjunto arquitectónico o tecnológico o paisaje, que ilustre una etapa significativa de la historia humana. Caso que sin lugar a dudas fue. Y es que para concluir, se podría decir que El Escorial es a día de hoy museo no solo de la grandeza y majestuosidad de su edificio u originalidad de sus grandes obras que todavía se mantienen en el edificio sino también de la grandeza del hombre encarnado en el Rey Felipe II y de la historia de nuestro país. BIBLIOGRAFÍA: Vila Jato, María Dolores et ál., Panteones reales de las monarquías hispánicas: Madrid, Paradores de Turismo de Esapaña S.A., P Navascués Palacio (1994) La idea del rey prudente