Trabajo Práctico Nº1 Orígenes del Arte Valeria Jones.

Transcripción

1 Consigna Trabajo Práctico 1: Orígenes del arte Consigna: Analizar teóricamente la incidencia de las concepciones mágico-religiosas del Paleolítico y el Neolítico en sus configuraciones formales, a través del estudio comparativo de dos obras pertenecientes a cada uno de los períodos. Se realizara un diseño incorporando en el mismo los temas tratados en clase. Forma de presentación: Trabajo práctico monográfico. Se presentará un informe de mínimo 4 (cuatro) páginas tamaño A4, numeradas, tipografía Arial, cuerpo 11, espaciado 1 1/2, con carátula según las normas de la facultad. En el trabajo se incluirán las imágenes analizadas. 1

2 Orígenes del Arte Las primeras manifestaciones artísticas corresponden al año a.c. Las mismas son las llamadas pinturas rupestres y resultan los hallazgos más antiguos. Es necesario sumergirse en el ámbito socioeconómico y cultural de los pueblos primitivos para comprender su concepto de arte. Para estas primeras civilizaciones el arte tenía un fin práctico determinado, de carácter proficiatorio, y el rol del artista era de suma importancia, ya que era considerado el proveedor. No hay nada que pueda justificar la presunción de que el arte sirviera para otro fin que para procurar directamente el alimento. Todos los indicios aluden a que este arte servía de medio a una técnica mágica y, como tal, tenía una función por entero pragmática, dirigida totalmente a inmediatos objetivos económicos. (A. Hauser 1951.) Paleolítico 1) Bisonte. Cueva de Altamira, España. ( a a.c.) 2

3 2) Cueva de Lascaux, Francia. ( a a.c.) Ambas imágenes del período paleolítico son pinturas en cuevas, unas al norte de España, y otras al sur de Francia. Las mismas están realizadas con una sumatoria de carbón y pigmentos mezclados con grasa animal. Resulta curioso como siendo en regiones apartadas, corresponden al mismo concepto. Así mismo, llama la atención el carácter real de las imágenes representadas en ambas cuevas y la veracidad de sus formas. Sin embargo, como afirma Gombrich, es posible que la fiel representación se deba al hecho de conocer realmente muy bien a estos animales. Poco a poco, las rudas herramientas de piedra y hueso que se hallaron en estas regiones fueron dejando en claro que aquellas pinturas de bisontes, mamuts y renos, sí habían sido pintadas por hombres que cazaban a estos animales, y que por eso los conocían tan bien. (E. Gombrich, 1997.) Ambas pinturas corresponden al concepto de lo mágico- religioso, y tal como explica Hauser, las pinturas correspondían a una parte del funcionamiento técnico de esa magia: 3

4 Las representaciones plásticas eran la trampa en la que la caza tenía que caer; o mejor, eran la trama con el animal capturado ya, pues la pintura era al mismo tiempo la representación y la cosa representada, era el deseo y la satisfacción del deseo a la vez. El pintor y cazador paleolítico, pensaba que con la pintura poseía ya la cosa misma, pensaba que con el retrato del objeto había adquirido poder sobre el objeto; creía que el animal de la realidad sufría la misma muerte que se ejecutaba sobre el animal retratado. (A. Hauser, 1951.) Es por esto mismo que se mencionó anteriormente, que el arte era de carácter proficiatorio, el anticipo del hecho deseado, en este caso el alimento. El hombre paleolítico estaba convencido de que pintaba un animal verdadero, no una representación del mismo, sino uno real. Es posible observar que las pinturas se enciman unas sobre otras, esto apoya la idea de que no eran pinturas decorativas, sino que estaban dispuestas en sectores más propicios a la magia que otros dentro de la misma cueva. En una misma cueva se pueden encontrar pinturas de distintas épocas o distintos grupos. Las mismas no podrían haber sido conservadas si no hubieran estado realizadas en el interior de las cuevas de difícil acceso alejadas de la luz y otros factores que pueden resultar corrosivos. Neolítico Este período abarca del al a.c. El hombre ya es consciente de que puede modificar el medio, y construye las primeras sociedades agrícolas. Para esto la piedra cumplió un rol nuevamente fundamental. Ya que no solo eran utilizadas como instrumentos, o lienzos, sino que ahora ayudaban a marcar el paso del tiempo y las estaciones, siendo esto fundamental para la siembra y la cosecha. El hombre, en vez de alimentarse parasitariamente de los dones de la naturaleza, en vez de recolectar o capturar su alimento, se lo produce. Con la domesticación de animales, y el cultivo de plantas, con la ganadería y la agricultura,el hombre comienza su marcha triunfal sobre la naturaleza y se independiza más o menos de la veleidad del destino, del azar y de la casualidad. Comienza la era de la previsión organizada de la vida. (A. Hauser 1951.) 4

5 Los menhires eran monumentos de piedra parada colocados en lugares especiales con energía geofísica particular. Servían para medir el tiempo. El dolmen o el stonehenge, eran monumentos constituidos por varias piedras en posición vertical, formando un círculo, que marcaban el comienzo de las estaciones, lo que resultaba fundamental para esta nueva sociedad agrícola. Estos monumentos estaban estratégicamente ubicados en lugares con propiedades energéticas curativas o de sanación. 1) Menhir. 2) Stonehenge. Arte megalítico. 5

6 Así mismo, Hauser explica que los ritos y cultos sustituyen a la magia y a la hechicería. con la conciencia del depender del tiempo favorable o desfavorable, de la lluvia y de la luz del sol, del rayo y el granizo, de la peste y la sequía, de la prosperidad y la esterilidad de la tierra, de la abundancia y la escasez de los animales cazados en las redes, surge la idea de toda clase de demonios y espíritus benéficos y maléficos que reparten bendiciones y maldiciones, surge la idea de lo desconocido y lo misterioso, de los poderes sobrehumanos ( ) (A. Hauser, 1951.) Además del arte megalítico, es conveniente mencionar que el arte del neolítico deja atrás el naturalismo del paleolítico, para ser un arte más idealizado y estilizado. Se buscaba generar un ideal. Se produce un proceso de abstracción, cuanto más antiguas son las representaciones, más detalle tienen y más reales son. Cuanto más nuevas, más idealizadas se representan: Antofagasta de la sierra, Catamarca, Argentina. ( a.c.) A su vez, el arte se vuelve más geométrico. Es un estilo formalista geométrico-ornamental. Quizás este orden geométrico corresponda de alguna manera al nuevo orden estructural que adquiría la sociedad. 6

7 Cerámica encontrada al norte de Irak, correspondería al a.c. Para concluir es posible afirmar, que tal como se ha mencionado anteriormente, el arte fue cambiando a lo largo del tiempo, y estos cambios están íntimamente relacionados a los movimientos socioculturales que se fueron produciendo. Sobre las condiciones sociales y económicas de estos estilos no se podrá afirmar concretamente apenas otra cosa que lo siguiente: el naturalismo está en relación con formas de vida individualistas, anárquicas, ( ) y con una idea del cosmos puramente mundana; el geometrismo, por el contrario, está en conexión con una tendencia a la organización unitaria, con instituciones permanentes y con una visión del mundo orientada, en líneas generales, al más allá. (A. Hauser, 1951.) 7

8 Bibliografía Gombrich, E., La historia del arte. Hauser, A., Historia social de la literatura y del arte. 8