VICERRECTORA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL, TRANSPARENCIA E IGUALDAD

Transcripción

1 Sr. Rector Magnífico de la Universidad de Murcia, Secretario General, Gerente, Vicerrectores y Vicerrectoras, autoridades, familiares, compañeros y compañeras, amigos y amigas: Asumo el cargo de VICERRECTORA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL, TRANSPARENCIA E IGUALDAD, con una gran ilusión y con un sentimiento de enorme responsabilidad, la misma que hace dos años me llevó a aceptar el nombramiento de Vicesecretaria General. No me enfrento a competencias completamente nuevas para mí. Estoy incorporada, de facto, al Equipo Rectoral desde que este inició su andadura, y he trabajado gustosamente con el Secretario General en muchas de estas materias, y así continuará siendo. Durante estos dos años, no exentos de dificultades, he disfrutado de algunas de las experiencias profesionales más intensas, fructíferas y gratificantes de mi vida: es, en verdad, una vivencia apasionante luchar por la universidad pública, por los principios y valores en los que se inspira, y por lo que esta significa tanto en cuanto generadora y transmisora de conocimientos, como en cuanto garantía del principio de igualdad de oportunidades que hace posible el necesario ascensor social : Por esta razón, no dudé ni un segundo en aceptar el encargo de mayor responsabilidad, que el Rector de la Universidad de Murcia ha tenido a bien encomendarme en el ecuador de su mandato. 1

2 Desde mi nombramiento como Vicesecretaria General, y por razón de mi especialización profesional, me fueron atribuidas competencias que podían verse favorecidas por mi experiencia como Profesora de Derecho del Trabajo. Así, he participado, de la mano del Vicerrector de profesorado, en la negociación del segundo convenio colectivo del PDI laboral, un gran convenio, que, dentro de las limitaciones que el Derecho establece, atiende razonablemente los intereses del personal docente laboral, injustamente castigado por el legislador; también, me ha correspondido analizar, con el apoyo de personal muy cualificado, la situación laboral de quienes prestan servicios para la Universidad de Murcia, así como realizar propuestas de mejora. Y, entre otras atribuciones, también he coordinado el grupo de trabajo de Protección de Datos, que obtuvo como fruto la aprobación del Documento de Seguridad de los ficheros con datos de carácter personal de la Universidad de Murcia, dirigido a la protección del derecho fundamental a la intimidad. En fin, durante estos dos años, desde la Secretaría General hemos realizado una labor silenciosa y así debe ser-, empeñada en impulsar, entre otras tareas, una de las líneas estratégicas transversales de este Equipo Rectoral: «Garantizar la legalidad, la eficacia y la transparencia de los procedimientos internos, con el fin de que sean reales y efectivos los principios constitucionales de igualdad, publicidad, seguridad jurídica e interdicción de la arbitrariedad, y resulten protegidos los derechos fundamentales de los miembros de la comunidad universitaria y de la ciudadanía en general.» 2

3 Pues bien, como decía anteriormente, llegado al ecuador de su mandato, el Rector de la Universidad de Murcia ha considerado que es el momento de dotar de autonomía, y situar en primera línea, el impulso de algunas de estas cuestiones, de gran transcendencia para la institución; como son, la responsabilidad social, la transparencia y la igualdad. El término responsabilidad social abarca un elenco muy variado de iniciativas, que comprenden, entre otros, aspectos relacionados con la mejora de las condiciones de trabajo, la igualdad de oportunidades, y el respeto de los derechos humanos. Aspectos, todos ellos, que se han venido impulsando desde la Secretaría General, y en los que continuaré trabajando desde este Vicerrectorado, en cumplimiento de varios objetivos transversales 1) la mejora de las condiciones laborales y de la situación laboral de quienes trabajan para la Universidad; 2º) el respeto de los principios constitucionales de igualdad, mérito, capacidad y publicidad, en el acceso a los puestos públicos; 3º) la garantía de los derechos fundamentales; 4) y, en definitiva, la defensa de la Universidad Pública, con el fin de que esta pueda constituir el mejor espejo en el que se refleje la sociedad en un momento enormemente complejo y difícil, en el que raro es el día en el que no nos despertamos con un nuevo caso de corrupción. Pero, el logro de todos estos objetivos no se puede alcanzar de forma unilateral. Tenemos que empeñarnos en su logro la comunidad universitaria en su conjunto; y ahí estamos todos: no sólo el PAS, el PDI y los estudiantes, sino también las 3

4 organizaciones sindicales, a las que les corresponde un relevante papel. En estos momentos difíciles y complejos, tendemos la mano y pedimos el apoyo de las organizaciones sindicales; el Equipo Rectoral y los sindicatos implantados en la UMU no tienen intereses contrapuestos, sino un objetivo superior común, en defensa de los principios y derechos constitucionales en general, y de la Universidad Pública en particular. Precisamente, para la tutela de los derechos y principios constitucionales, y para el logro de una verdadera sociedad democrática, es necesaria la TRANSPARENCIA, la segunda competencia que asumo. Así se pone muy claramente de manifiesto en un gran libro que recomiendo titulado Por qué la transparencia, del que es autor D. José Molina Molina, Presidente del Consejo de la Transparencia de la Región de Murcia. En esta materia, la Universidad de Murcia se encuentra de enhorabuena, tras la publicación de su portal de Transparencia, como lo demuestra su magnífica posición en el último Informe de transparencia voluntaria en la web de las universidades españolas. Ello se ha conseguido gracias a mucho esfuerzo, y a que la transparencia ha sido impulsada como una de las principales líneas estratégicas de la Universidad. Pero soy consciente de que todavía queda un camino que recorrer; y aseguro que pondré todo mi empeño en avanzar en este campo con la ayuda de la Comunidad Universitaria. 4

5 Por último, asumo, con gran ilusión, las competencias en materia de Igualdad entre mujeres y hombres, ámbito en el que, desde hace mucho tiempo vengo trabajando, y en el que contaré con la inestimable colaboración, desde la Unidad para la Igualdad, de Eva Rubio, su directora, y de Concha Pando, y con la ayuda que supone el magnífico legado que en este campo nos deja el Vicerrector que, hasta hoy, ha asumido brillantemente y, con enorme convicción, esta competencia, el Prof. Dr. D. Miguel Ángel Pérez. La Universidad, en cuanto transmisora de conocimiento y de valores sociales, debe contribuir de forma activa a la promoción de la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres. Y, es que, aunque es cierto que hemos alcanzado el reconocimiento de la igualdad formal y que las mujeres son mayoría en las aulas universitarias, todavía la sociedad española está lejos de lograr la igualdad real y efectiva: así, la tasa de paro femenina es mayor que la masculina; las mujeres siguen siendo mayoría en las actividades laborales más precarias; sus ingresos y sus pensiones son menores o inexistentes, a pesar de que trabajan más horas en total; y sus tasas de pobreza son superiores a las de los hombres. Las Universidades públicas han de ser impulsoras de las políticas de igualdad de género. En la Universidad de Murcia, tras la entrada en vigor de la LOI, se han dado pasos importantes para cumplir estos objetivos, principalmente a través de la Unidad para la Igualdad y de su Primer Plan de Igualdad. Sin embargo, todavía queda mucho camino por andar en este campo: tanto en 5

6 el PAS como en el PDI las categorías de mayor responsabilidad y prestigio social, y en consecuencia, con mayor remuneración, continúan estando ocupadas principalmente por varones; así, resulta significativo que las mujeres no alcancen el 20 % del total de las cátedras. No cabe duda de que el hecho de que, todavía la conciliación y la función de cuidados recaiga principalmente sobre las mujeres, incide negativamente en su acceso a los puestos de mayor responsabilidad. Por ello, tenemos que seguir avanzando en las medidas que se han ido adoptando desde la Unidad para la Igualdad, no sólo en materia de conciliación sino, principalmente, en concienciación en corresponsabilidad, y en la adopción de distintas medidas de acción positivas dirigidas a la superación de las desigualdades. A tal efecto, como objetivo inmediato, hemos de evaluar la implementación del primer Plan de Igualdad como paso previo a la negociación del II Plan de Igualdad de la Universidad de Murcia. Y en fin, doy las gracias al Rector de la Universidad de Murcia por la confianza depositada en mí, que me esforzaré en no defraudar; al gran Equipo del que me siento orgullosa de formar parte; a Manoli y Merche por su ayuda constante; a mi familia, el pilar que me sostiene, y a quien pido comprensión por mis ausencias; a mis amigos y amigas, que aún en la distancia, siempre han estado ahí; a mis queridos compañeros y compañeras de Departamento, en quienes siempre encuentro buenos consejos y apoyo; y a todos los compañeros y compañeros de la comunidad universitaria, por su comprensión y 6

7 amistad, a quienes pido colaboración en la ardua tarea que tenemos por delante. A todos y todas muchas gracias. 7