PRECEDENTES A TOMÁS DE AQUINO. Después de Platón y Aristóteles acaba la etapa clásica en filosofía y comienza el periodo helenístico.

Transcripción

1 1 PRECEDENTES A TOMÁS DE AQUINO Después de Platón y Aristóteles acaba la etapa clásica en filosofía y comienza el periodo helenístico. Causas: Alejandro Magno hunde la organización de la polis con su designio de monarquía universal (cosmopolitismo imperialista). Queda así destruido el ideal de la Grecia clásica: la polis como espacio en el que la libertad es el sustrato en que se mueven los ciudadanos, que a partir de entonces degeneran en súbditos. Filosofía: Así como Platón y Aristóteles elaboraron modelos políticos que, aunque discutibles, ponían la ética y las virtudes cívicas como condiciones para vivir en la polis, ahora éstas no importan porque la vida de los nuevos estados se desarrolla al margen de la voluntad de los súbditos. No obstante, Alejandro Magno creyó en la capacidad de los bárbaros para asimilar la cultura griega y, de hecho, hizo instruir a miles de ellos. Recordemos que Aristóteles consideraba a los bárbaros (que significa extranjeros), incapaces de adquirir cultura y, por lo tanto, esclavos por naturaleza. Nueva realidad: Lo que hay son grandes estados con el poder en manos de unos pocos y sin la participación democrática propia de las asambleas de la polis. En esta nueva realidad el hombre pasa de la identidad de ciudadano que poseía, a la de individuo, y en tanto que individuo, lo más que puede hacer es juntarse con otros para preservar y fomentar esa libertad de pensamiento de la que antes gozaba. Así surgen las escuelas filosóficas del helenismo como maneras de entender la vida, una vida a contracorriente del ambiente general. Las principales escuelas helenísticas las formaron los: cínicos, cirenaicos, megáricos, epicúreos, estoicos, escépticos, eclécticos. Cada escuela tenía sus propios métodos e ideales, pero todas tenían en común el desprecio hacia la riqueza, considerada como una disposición del alma, no como un bien material que se pueda conservar como un objeto. Algunas fueron mixtas (cínicos y epicúreos). El helenismo ocupa pues, cinco siglos de pensamiento y forma de vida, junto al neoplatonismo y neopitagorismo. (Desde el s. IV a J.C. hasta el II de nuestra era) Aparece el cristianismo: El cristianismo no es filosofía, pero se implicaron mutuamente, pues tampoco fue enseñando por su fundador como una religión, sino como una revelación de debía ser aceptada por la fe. El cristianismo no surgió en un mundo nuevo, sino en un mundo con siete siglos de filosofías muy distintas; su expansión, apenas rebasó las fronteras de Galilea y se mezcló con el mundo greco-romano hizo inevitable el encuentro y confrontación con la filosofía, que es lo que estaba vigente, lo que poseía autoridad intelectual. No así las religiones paganas que estaban desacreditadas. (Encuentro de S. Pablo con estoicos y epicúreos en el Aerópago pidiéndoles que les explique la nueva doctrina). Durante un siglo no se conocen nuevas incursiones. A partir del siglo II, las comunidades cristianas han crecido y se han hecho fuertes: tienen apologistas, esto es, defensores de la doctrina frente a los poderes o las herejías. La Patrística: El cristianismo es doctrina de salvación, camino hacia Dios que tiene que ser seguido en la práctica, y no un sistema teórico o filosófico. Sin embargo provocó la hostilidad de algunos intelectuales no cristianos. Éstos hacían críticas racionales, lo cual exigía respuestas también racionales, basadas en argumentaciones filosóficas. La filosofía cristiana surge, pues, de la necesidad de defender la fe. Pero como en realidad, no tenían filosofía propia, echaron mano del neoplatonismo, que era la que estaba vigente en aquel momento.

2 2 La Patrística es el pensamiento de los filósofos cristianos desde el siglo I al V. Se llama así porque la configuraron los Padres de la Iglesia Católica. Defendieron el cristianismo utilizando elementos de la filosofía griega y adaptándolos a los dogmas de fe: la interiorización de la salvación, la antropología dualista, la introducción del concepto de eternidad en el tiempo lineal, son ejemplos del pensamiento griego adaptado. La figura principal es San Agustín, cuyo influjo filosófico perdurará durante toda la Edad Media. Pero la filosofía ya no será aquel saber que se busca, la ciencia libre de Aristóteles sino el esclarecimiento de las verdades sobre el ser humano y el mundo ya de antemano conocidas y aceptadas por la fe. En el siglo IV, el emperador Constantino se convierte al cristianismo, y con él todo el Imperio romano. En el siglo V, cae el imperio definitivamente y Roma y Bizancio se separan. Comienza este periodo llamado Edad Media que abarca 1000 años: desde la caída de Roma hasta, prácticamente, el Renacimiento. Del siglo V al IX no hay constancia de producción filosófica original; es la época de las invasiones bárbaras: los pueblos unidos del Imperio romano quedan disgregados en los estados bárbaros. Son pueblos aislados, inconexos, que tardarán en formar vínculos (francos, godos, suevos, vándalos), eso que más tarde se llamará Europa. Si comparamos este periodo con la época clásica griega, vemos que ésta es infinitamente más civilizada pese a haberse desarrollado trece siglos antes. La misión de los intelectuales de estos cuatro siglos será conservar la cultura dispersa, salvar lo que se vaya encontrando, pues los elementos culturales perdidos durante las invasiones van apareciendo. Es una misión recopiladora; se elaboran Enciclopedias del saber greco-latino en los diferentes países: En España: San Isidoro de Sevilla escribe las Etimologías (s. VI-VII) un compendio de historia, literatura, ciencia, medicina, técnica, etc. En Italia: Boecio, consejero del rey ostrogodo Teodorico. Tradujo los libros de Lógica de Aristóteles y la obra Isagoge del neoplatónico Porfirio.Cayó en desgracia y el rey lo mandó decapitar (s. VI). Escribió en prisión Sobre el consuelo de la filosofía. En Irlanda: Beda el Venerable escribió en el s. VIII Historia de Inglaterra Entre los siglos VIII y IX se produce el renacimiento carolingio, que supuso un importantísimo impulso a la cultura. Se fundan escuelas bajo la protección de Carlomagno. En Aquisgrán el emperador fundó una escuela palatina a la que él mismo acudía; creó bibliotecas y restableció el uso del latín. Atrajo a su corte a Alcuino de York, contribuyó a crear un occidente cristiano dotado de un mismo sistema institucional y de una misma civilización. MARCO FILOSÓFICO EN EL SIGLO XIII Dos hechos importantísimos se producen en este siglo: la fundación de la Universidad de París y el conocimiento de la filosofía árabe y del resto de la obra de Aristóteles. a) La universidad de París se constituyó como una corporación de maestros y alumnos, ratificada por el Papa y el rey de Francia en el año Desde entonces fue el centro

3 3 intelectual de la cristiandad. La carrera del universitario medieval parisino comprendía en la facultad de Artes (facultad de Filosofía): el Trivium (Gramática, Retórica y Dialéctica) y el Quadrivium (Aritmética, Geometría, Astronomía y Música). Artes era todo lo que se enseñaba en la universidad medieval que no fuera ni Teología ni Derecho ni Medicina. Los métodos de enseñanza eran: la lectio, consistente en la lectura de un texto (Aristóteles en las facultades de Artes (filosofía); la Biblia, Padres de la Iglesia o Libro de las Sentencias en las de Teología) y la disputatio, especie de certamen dialéctico en el que se proponía una cuestión y cada uno sostenía posiciones a favor o en contra. Después un maestro reunía los argumentos y determinaba la solución. Tomás de Aquino ha dejado importantes opúsculos de este tipo. b) El conocimiento de la filosofía árabe y del resto de obras de Aristóteles se produjo también en este siglo a través de las traducciones del árabe al latín iniciadas en Toledo y en Italia. La filosofía árabe se había adelantado a los cristianos en el planteamiento de problemas filosóficos que interesaban a ambos: la creación, la diferencia entre Dios y las criaturas, las relaciones fe-razón, etc. Además los árabes habían conocido la obra de Aristóteles un siglo antes, y el gran aristotélico Averroes era su comentador por excelencia. Ambas obras, la de Averroes y la de Aristóteles llegan a Europa en el siglo XIII y conmocionarán la vida intelectual en la universidad de París. A consecuencia de ello, se produce una corriente de pensamiento llamada averroísmo latino que será una de las filosofías más importantes del siglo XIII. Las principales corrientes filosóficas fueron: a) Agustinismo de la escuela franciscana. S. Buenaventura: Es la escuela más afín al platonismo a través de S. Agustín. Los rasgos más relevantes de su filosofía son: afirmación de la prioridad de la voluntad sobre el entendimiento, teoría de la iluminación para explicar el conocimiento y la continuidad entre las verdades de razón y las verdades de fe. b) Averroísmo latino. Siger de Brabante: En esta escuela se hace una interpretación averroísta de Aristóteles, en contradicción con algunas de las verdades de fe del cristianismo, debido a lo cual fue condenada por el Papa. Las tesis que chocaban con el cristianismo fueron principalmente tres: la doctrina del entendimiento agente único, con la consiguiente negación de la inmortalidad del alma; la doctrina de la eternidad de la materia, con la consiguiente posible negación de la creación del mundo a partir de la nada; la doctrina de la doble verdad, según la cual lo que es verdadero en teología puede no serlo en filosofía. c) Aristotelismo de Tomás de Aquino y escuela dominica: Tomás de Aquino es, en el ámbito cristiano, lo que Averroes en la cultura árabe: el gran asimilador de Aristóteles, pero Tomás asimila a Aristóteles adaptando sus teorías al dogma cristiano y conservando algunas influencias platónicas. De Aristóteles acepta: la teoría de la sustancia; la potencia y el acto, las cuatro causas, su concepción del conocimiento entendido como un proceso que parte de los sentidos y culmina en el saber universal y necesario que proporciona el entendimiento. Otras tesis aristotélicas son modificadas por Tomás para no entrar en contradicción con la fe; por ejemplo la de la mortalidad del alma y la de la eternidad de la materia. Qué es una Summa?

4 4 Las Summas son el género filosófico propio del siglo XIII y tienen su antecedente en los Libros de Sentencias. Estos eran colecciones de dichos de los Santos Padres que, con el tiempo, se fueron complicando por las interpretaciones que las acompañaron. Sentencia es: la explicación profunda y razonada del texto bíblico y término final de la lectura que contenía tres etapas: a) explicación literal de las palabras, b) sentido obvio e inmediato de la letra, c) sentido profundo de la doctrina contenida bajo la letra. De ahí que Sentencia vino a significar no ya el bloque de las autoridades de los Padres, sino las soluciones y explicaciones doctrinales de los Maestros. De esos libros surgieron las Summas. La exposición de la Summa Theologiae de Sto. Tomás tiene esta estructura: a) questio, el núcleo de lo que se va a comentar; b) disputatio, donde se exponen las dificultades y las diferentes respuestas al problema; c) la solución propuesta del autor. La Suma teológica estaba destinada a ser complemento de un curso bíblico elemental. LA FILOSOFÍA DE TOMÁS DE AQUINO Líneas principales de su pensamiento: Tomás de Aquino parte de la teoría aristotélica del conocimiento: el conocimiento no se encuentra en el interior de la mente, como había afirmado S. Agustín desde una orientación platónica. El conocimiento parte de los sentidos, tiene su origen en la los datos de la percepción y su objeto es, en primer lugar el ser de lo sensible. El edificio de la filosofía, que es una elaboración de la razón, se construye de abajo arriba, desde la experiencia. Pero el punto de partida de la fe es la revelación; el conocimiento que nos proporciona la fe es de arriba abajo. Por otra parte, el método de la filosofía es la demostración racional mientras que la fe exige la aceptación o asentimiento del intelecto. La razón proporciona verdades naturales, la fe verdades sobrenaturales. a) Relaciones entre fe y razón: una doble condición domina la filosofía de Tomás de Aquino: la distinción entre la razón y la fe, y la necesidad de su concordancia. El ámbito entero de la filosofía proviene de la razón; el filósofo no debe admitir nada más que lo que sea accesible a la luz natural y demostrable con sus solos recursos. La teología se basa en la revelación, en la autoridad de Dios; los artículos de la fe son conocimientos de origen sobrenatural, contenidos en fórmulas cuyo sentido no podemos penetrar del todo, pero que debemos aceptar por medio de la voluntad que cree. Delimitados así los dos dominios, se constata que tienen cosas en común. En primer lugar la armonía de derecho entre sus conclusiones últimas: ni la razón usada correctamente ni la revelación, puesto que procede de Dios, pueden engañarnos: tenemos el deber de llevar lo más lejos posible la interpretación racional de las verdades de la fe, de ascender por la razón hacia la revelación y de volver a descender de la revelación a la razón. Siempre que sea posible, es mejor entender que creer. Frente a la doctrina de la doble verdad de los averroístas latinos (lo que es verdad en teología puede no serlo en filosofía), Tomás sostiene que la verdad es única. Pero el punto de partida de la fe es la revelación, que exige aceptación o asentimiento del intelecto y proporciona verdades sobrenaturales. El método de la filosofía, por otra parte, es la demostración racional y proporciona verdades naturales.

5 5 No hay ni puede haber contradicción entre ambas verdades porque la Verdad es una y procede de Dios. Cuando haya conflicto entre razón y revelación, se deberá, evidentemente a errores en el uso de la razón, porque la revelación es una instancia superior. Entre la razón y la fe existe una relación de colaboración mutua: la razón ayuda a la fe a construir una teología como una ciencia partiendo de las verdades reveladas; así colabora en su esclarecimiento. La fe ayuda a la razón como criterio de verdad extrínseco, en el sentido de que si se llega a conclusiones incompatibles con la fe, es preciso revisar los razonamientos. Por otro lado, hay verdades comunes que se pueden alcanzar por la razón aparte de que sean reveladas por fe, como la existencia de Dios que, desde la perspectiva de Tomás de Aquino, puede ser demostrada racionalmente a partir de los datos de la experiencia. Este es el papel de la teología natural: el tratamiento racional del tema de Dios. Tomás de Aquino propone una demostración a posteriori que va del efecto (los seres del mundo) a la causa que los ha producido (Dios). Para ello utiliza cinco argumentos o vías, cuya estructura es la misma: - Parte de hechos sacados de la experiencia que reclaman una explicación - Aplica el principio de causalidad rechazando que pueda haber una serie infinita de causas - Es imposible proceder al infinito en una serie de causas actual y esencialmente subordinadas - Ha de existir pues, una causa primera, un ser originario que dé lugar a toda la serie: Dios. Las cinco vías para la demostración de la existencia de Dios son las siguientes: 1. Cambio físico o movimiento: la vía más manifiesta y fácil de captar es la del movimiento: en la experiencia se nos muestran seres que se mueven y cambian; todo movimiento tiene una causa, y esta causa ha de ser exterior al ser que está en movimiento, pues no se puede ser a la vez y bajo el mismo aspecto, el principio motor y la cosa movida. Pero el motor debe ser movido por otro, y éste por otro. O bien se admite una cadena infinita de seres que se mueven unos a otros, lo que implica renunciar a la explicación del movimiento, porque si no existe un primer motor tampoco existirían los siguientes, o bien se admite la existencia de un primer motor pues todo lo que se mueve es movido por otro, como afirmó Aristóteles. Ese primer motor es Dios. 2. Causalidad eficiente: las cosas no sólo se mueven, sino que antes de moverse existen y por qué existen? Nada puede ser causa eficiente de sí mismo; porque, para producirse, tendría que ser anterior en cuanto a causa- a sí mismo en cuanto a efecto. Dado que todo lo que existe tiene una causa, y que no hay nada que sea su propia causa, no es posible establecer una serie infinita de causas eficientes; hay que partir de las causas subordinadas hasta la primera causa incausada: Dios. 3. La contingencia: la generación y la corrupción muestran que hay entes que pueden ser o no ser; estos entes alguna vez no han sido; si fuesen necesarios habrían existido siempre. Debe haber un ser necesario en razón del cual los seres contingentes existen. Si no hubiera un ser necesario ahora no existiría nada. 4. Los grados de perfección: lo más o lo menos perfecto suponen un término de comparación e implican un grado óptimo supremo: Dios. Lo que es supremo en bondad ha de ser causa de

6 6 bondad en las cosas que la poseen. Este argumento es de ascendencia platónica: la causa última de perfección debe ser perfecta en sí misma, no puede recibir la perfección de otro. 5. La finalidad y el orden del mundo: observamos objetos inorgánicos que obran con un fin. Dicho fin no se debe al azar: es resultado de una intención. Puesto que esos objetos carecen de conocimiento, es preciso que alguien conozca por ellos; si tienden a un fin es porque son dirigidos por una primera inteligencia creadora. Por diferentes que parezcan estas vías, se comunican entre sí por un vínculo: al menos bajo uno de sus aspectos, algo de la realidad no contiene en sí la razón suficiente de su propia existencia. Dado que Dios es el existir mismo, en eso consiste su esencia, hay que tomar de Él todas las perspectivas exteriores que podamos sin pretender agotar su contenido, pues es infinito. Con estas argumentaciones, Tomás de Aquino quiso demostrar racionalmente que hay un ser cuya esencia consiste en su existencia. Ese ser es necesario y ha de tener plenitud de ser, es decir, ha de ser infinito y poseer todas las perfecciones. Estas vías han sido objeto de estudio a lo largo de la historia de la filosofía y las críticas que han recibido las podemos resumir así: -Aunque son argumentos lógicamente convincentes no gozan de la universalidad que permite su aceptación como prueba. Si fueran pruebas concluyentes habría que descalificar la inteligencia o la buena fe de los ateos. - Con qué derecho se excluye el proceso al infinito? Parece que se presupone lo que se quiere demostrar. -La razón humana es limitada; es arrogante pasar del mundo de los fenómenos para tratar de llegar al ser en sí. -Probando la existencia Dios no hay lugar para la fe, para la adhesión a esa posibilidad desde la libertad. b) Conocimiento de Dios (teología): Tomás de Aquino plantea que, aunque el conocimiento humano es limitado, podemos alcanzar cierta comprensión de la naturaleza de Dios a través de dos procedimientos: la teología negativa no podemos saber lo que es Dios, pero sí lo que no es, por la que negamos como propios de Dios los atributos que no le corresponden, como por ejemplo, el cambio, la finitud, la imperfección, la contingencia, etc., y la teología de la eminencia por la que aplicamos a Dios ciertos atributos en el máximo grado o perfección posible, como por ejemplo que Dios es inmutable, infinito, simple, necesario, eterno, perfecto, etc. c) La estructura de la realidad: ser necesario y contingente: Aquino distingue entre esencia y existencia. Todos los seres creados tienen una esencia (lo que son), pero su existencia depende de algo externo a ella, pueden existir o no, son contingentes, existen por creación

7 7 divina. Dios actualiza esa posibilidad por el acto de creación, y así los seres reciben la existencia de Dios porque participan de la perfección divina de la existencia o ser en acto. Participar no es ser una parte de aquello de lo que se participa; es tener su propio ser y recibirlo de otro ser, y el hecho de recibirlo de él es precisamente lo que prueba que no se es él. d) Antropología y teoría del conocimiento: siguiendo a Aristóteles, Aquino concibe al hombre como una única sustancia compuesta de alma y cuerpo (la materia y la forma aristotélicas), pero, en consonancia con la doctrina cristiana, afirma que ese alma es inmortal y puede existir sin el cuerpo. Sin embargo, aunque pueda subsistir en ese estado, el alma posee una inclinación natural a la unión con el cuerpo, y sólo en él alcanza su perfección natural y despliega todas sus capacidades. Sólo el compuesto de cuerpo y alma es la sustancia completa. La teoría del conocimiento tomista, basada también en Aristóteles, entiende que conocer intelectualmente es captar las formas mediante la abstracción. Sin embargo, igual que para Aristóteles, todo conocimiento comienza por lo sensible: nada hay en el entendimiento que no haya estado previamente en los sentidos. El proceso del conocimiento es el siguiente: Los sentidos captan los objetos particulares, especies sensibles impresas, que se registran en la imaginación dando origen a las imágenes o especies sensibles expresas. Estas imágenes, aunque despojadas de materia son individuales y lo universal, la forma, está fundida en ellas con lo individual. El entendimiento agente despoja a esas imágenes de las particularidades que contenían y extrae de ellas las formas mediante la abstracción. Se producen entonces las especies inteligibles impresas El entendimiento paciente recibe esas formas, conociendo entonces la esencia necesaria de todos los individuos de la especie: las especies inteligibles expresas, los conceptos, que le permiten formar juicios y razonamientos. Por último, el entendimiento vuelve su mirada a la imagen reconociendo en ella al individuo, al que puede aplicar el concepto universal. Al proyectar lo universal sobre lo individual éste es conocido de forma más perfecta. e) La creación: Tomás de Aquino se opuso a la tesis averroísta de la eternidad y de la necesidad del mundo, y afirmó que el mundo había sido creado por un acto libre de Dios; con todo, aceptaba que no era contrario a la razón el hecho de que el mundo hubiese sido eterno aunque creado. Al demostrar la existencia de Dios por el principio de causalidad se establece simultáneamente que Dios es el creador de mundo. Santo Tomás utiliza el concepto de participación de la tradición platónico-agustiniana: todos los seres que existen por la acción creadora de Dios son en tanto que participan de Dios. Pero ello no supone que el ser de Dios y el ser de las criaturas sean de idéntica naturaleza: cuando hablamos del ser de Dios y del ser de las criaturas, lo hacemos de manera analógica: el ser de Dios es simple y necesario, y el ser de las criaturas es compuesto (esencia y existencia; materia y forma) y contingente. d) Ética: ley natural, ley positiva y ley universal: coincide con Aristóteles en el planteamiento eudaimonista y teleológico de la acción humana: el fin último del ser humano es la felicidad e identifica la felicidad perfecta con el conocimiento intelectual. Pero para

8 8 Aquino, el conocimiento perfecto (del que se deriva la felicidad perfecta) es el conocimiento de Dios, bien a través de la revelación (fe), bien a través de la razón natural que nos lleva a conocer a Dios a partir de su obra (la creación). La ética se fundamenta, por tanto, en la naturaleza humana. La naturaleza humana es su entendimiento, el ser humano es el único ser natural capaz de conocer sus propias tendencias y deducir de ellas ciertas normas de conducta. Así, existe una ley moral natural, es decir, unos preceptos morales acordes con la naturaleza humana. Dicha ley se basa en un precepto único: El bien ha de hacerse y el mal ha de evitarse. Este precepto se relaciona con tres tipos de tendencias en el ser humano: 1º) Tendencia a conservar la propia existencia, de la que se deriva el deber natural de conservar la propia vida. 2º) Tendencia a reproducirse, de la que se deriva el deber moral de procrear hijos y cuidarlos. 3º) Tendencia a conocer la verdad y a vivir en sociedad, de la que se deriva el deber moral de buscar la verdad (Dios) y respetar la justicia como fundamento de la convivencia en la sociedad. La ley moral natural es evidente, universal e inmutable puesto que forma parte de la naturaleza humana, común a todos los seres humanos, al margen de sus diferencias culturales o personales. La ley natural se concreta en la ley positiva (el derecho o normas promulgadas como leyes que rigen la sociedad). Esa ley natural, es parte de la ley universal o eterna que Dios ha establecido como orden del universo. Esa ordenación del universo implica que todos los seres naturales creados se comportan de acuerdo con leyes físicas. El ser humano es el único ser libre de la creación, no está determinado por las leyes físicas, por eso puede hacer el bien y el mal, dependiendo de que voluntariamente respete la ley natural o, por el contrario, obre contra ella. En resumen: la ley moral natural es la parte de la ley eterna referida específicamente a la conducta humana.

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