Mayte Martín voz y guitarra

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Adolfo Ponce Vargas
hace 6 años
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2 Mayte Martín voz y guitarra Quartet Qvixote Dani Cubero violín María Sanz violín Bernat Bofarull viola Amat Santacana violonchelo Ximo Clemente contrabajo Pau Figueres guitarra Arnau Figueres percusión Joan Albert Amargós arreglos de cuerda Tempo Rubato Soneto de amor (Rafael de León / Mayte Martín) Acaríciame por dentro (Mayte Martín) La mujer del pirata (Nuria Canal / Mayte Martín) Sus ojos se cerraron (Gardel / Lepera) Si te he visto no me acuerdo (Mayte Martín) Gacela del amor imprevisto (F. García Lorca / Mayte Martín) Me siento sin piel (Mayte Martín) Música de mi locura (Mayte Martín) No me maltrates la vida (Mayte Martín) Antes de ti (Mayte Martín) S.O.S. (Mayte Martín)

3 N EL VALOR DEL TIEMPO Miguel Ángel Berlanga acida en Barcelona en 1965, Mayte Martín es una artista difícilmente encasillable. Desde que en 1975 ganara su primer premio en un concurso de cante en su ciudad natal, su peculiar modo de hacer música (con el flamenco como principal inspiración) supone una filosofía muy peculiar y un concepto de la profesión absolutamente transgresores dentro del ámbito del flamenco. Por su estética artística y su discurso, es desde hace años pionera y puntal del denominado «flamenco catalán«y referente importante de la nueva hornada de jóvenes flamencos. Tras su primer disco de temas flamencos que grabó en 1994, su siguiente trabajo Free Boleros, grabado en directo en 1996 con el añorado Tete Montoliú, mostró ya que su personalidad era polifacética: cantaora personalísima, cantante de boleros, cantautora, compositora... En el año 2000, con la grabación de su disco Querencia, Mayte sorprendió a los aficionados con una obra de plena madurez. Querencia contiene temas sublimes, como su personalísima Vidalita (inspirada en una de Juanito Valderrama), cantada con una amplísima paleta de matices. Después le han seguido otras grabaciones igualmente personales, entre las que destacamos. De fuego y de agua (2008) con las hermanas Katia y Marielle Labèque, Al cantar a Manuel (2009), sobre poemas del poeta Manuel Alcántara, y Cosas de dos (2012), repertorio de boleros y canciones de amor. En este elegante y exquisito espectáculo de intensa carga emocional que es Tempo Rubato, Mayte Martín toma como acompañamiento su guitarra y un quinteto de cuerda clásico para mostrar su talento como cantautora. Casi todos los temas son de propia composición, con arreglos del maestro Joan Albert Amargós. Es un registro sonoro de emociones que se ha ido gestando durante veinte años, a golpe de vivencia. La artista catalana ha hilvanado una serie de temas, en esencia baladas y canciones de amor, que expresan mucho sentimiento pero todas con un matiz clásico, aportado por el tipo de acompañamiento. Lo que resulta es una música tremendamente original, que procede de esa mixtura de sonidos flamencos y clásicos.

4 Ha sido necesario un largo tiempo para que se fuera gestando el montaje musical del que hoy podemos disfrutar. De él la propia Mayte afirma que «no es un proyecto que haya nacido en un tiempo concreto, se trata de canciones que se han ido componiendo y arreglando a lo largo de veinte años». El propio nombre, Tempo Rubato, responde a la manera como ha ido surgiendo el espectáculo: con mucha flexibilidad, referida tanto al modo de interpretar cada pieza como a la manera en que se ha ido gestando el espectáculo: al hilo de sus vivencias personales y de los avatares y obligaciones de sus otros espectáculos. Cuando solo contaba con cuatro temas, Mayte se los pasó a Joan Albert Amargós para que una vez hechos los arreglos, los convirtiera en lo que hoy son. Luego, tiempo e inspiración mediantes, llegaron las otras piezas. Ella pretendía desde el principio que fueran acompañados por un quinteto de cuerda y «que fuera una cosa muy delicada y muy sutil y tuviera un sonido clarísimamente clásico, de música de cámara». Y las circunstancias se fueron dando. La primera y principal es que encontró a los compañeros ideales para llevar a cabo este trabajo: el Quartet Qvixote (Dani Cubero, violín; María Sanz, violín; Bernat Bufarull, viola y Amat Santacana, violonchelo), que se convirtió en quinteto cuando se añadió el contrabajo de Ximo Clemente. Completan la plantilla instrumental la guitarra de Pau Figueres y la de la propia Mayte Martín, además de la percusión de Arnau Figueres. El resultado de este largo proceso es esta obra de música de cámara primorosa, delicada, en la que el flamenco no es el principal ingrediente, si bien inevitablemente aparece, más en el modo de expresarse de Mayte que en los temas o en la forma: «Insistí mucho en que Amargós no buscase el color flamenco, ya que quería que éste estuviera solo y de manera inevitable en mi manera de expresar, frasear y comunicar, de forma natural». Además de las canciones de su propia autoría, completan el espectáculo el tango Sus ojos se cerraron, de Carlos Gardel, Soneto de Amor, de Rafael de León, y Gacela del amor imprevisto, de Federico García Lorca.

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