SUPLEMENTACIÓN ESTRATÉGICA

Transcripción

1 SUPLEMENTACIÓN ESTRATÉGICA Apunte talleres de suplementación estratégica para vacunos Parajes Calderón, Carrindanga y La Hormiga (Pdo Bahía Blanca) 16, 18 y 25 de junio 2009 Ing. Agr. Andrea Lauric 1, Angel Marinissen 1, Carlos Torres Carbonell 1 y María Coria 2. 1 AER Bahía Blanca (INTA EEA Bordenave) 2 Campo Experimental Cesáreo Naredo (INTA EEA Bordenave) Introducción. En un sistema pastoril como es en nuestra zona, debemos lograr un balance forrajero para equilibrar la demanda del rodeo con la oferta de pasto, asegurando un adecuado balance nutricional. Esto significa no solamente un buen equilibrio en los volúmenes de pasto, sino también en los nutrientes claves para la alimentación como la energía, la proteína y los minerales. Cada pasto posee un determinado potencial que puede o no cubrir las demandas del tipo de animal que pretendemos alimentar. Es importante disponer de diferentes especies de pastos como pasturas, verdeos de invierno, verdeos de verano y campo natural para lograr una cadena forrajera que permita evitar baches de forraje a lo largo del año. La suplementación estratégica a diferencia de la sistemática, que se utiliza como norma en un establecimiento, es aquella que se utiliza en momentos precisos y en cantidades controladas para corregir problemas específicos, como la escasez de algún nutriente en el forraje. A continuación se ilustra lo anterior, graficando para cada tipo animal o sistema (cría, invernada o producción de leche), las demandas de proteína y energía.

2 Cuanto mayor es el nivel de producción, mayor es la concentración de energía y proteína que requiere el animal por cada kilo de materia seca del alimento que consume. Por ejemplo se observa que el pasto llorón puede satisfacer la necesidades de una vaca de cría en cuánto a energía y proteína, pero es deficiente para sostener una invernada de buena ganancia de peso de por ejemplo 750g/día. Las categorías de mayores requerimientos energético-proteico son las vacas en el tercio medio y ùltimo de gestación, las vacas con ternero al pie y los animales en engorde. Un buen balance nutricional en pastoreo, se logra cuando la proteína y el suplemento energético se combinan de manera que ninguno predomine sobre el otro y afecte la producción. Ensayos experimentales indican que un buen equilibrio se logra cuando el animal consume una dieta que contiene alrededor de 50-60g de proteína bruta por cada megacaloría de energía metabolizable aportada. Por encima o por debajo de esa proporción, la producción tiende a decaer. El rumen necesita este balance entre proteína y energía para que los microorganismos del mismo puedan digerir la fibra que compone la dieta. Al ocurrir una deficiencia proteica, el animal se siente lleno y sin apetito, la fermentación ruminal es lenta y el rumen se mantiene con exceso de fibra, enviando señales de saciedad aunque el animal puede estar con déficit energético. En éste caso, el amoníaco generado por las bacterias del rumen es utilizado parcialmente y posteriormente transformado en urea que se pierde al ser eliminada en la orina. La suplementación con alimentos energéticos, mejora el aprovechamiento de nitrógeno excedente y permite reducir la toxicidad subclínica por amoníaco. En el caso de que la energía estuviera en exceso o se consume demasiado almidón (presente en los granos) en un período corto de tiempo, se produce la acidosis causada por una rápida producción y absorción de ácidos a través de las paredes del rumen.

3 Aunque el problema de los minerales no tiene una magnitud equivalente al de la energía y la proteína en los pastos, es conveniente considerar a grandes rasgos lo que sucede con los dos principales nutrientes: calcio y fósforo. Lo anterior significa que es necesario recomendar una suplementación mineral en los lotes con mayores ritmos de ganancia o producción o bien buscar para ellos, una combinación de pastoreos o reservas forrajeras en los que participen leguminosas. Dada la variabilidad de disponibilidad y digestibilidad de los recursos forrajeros sobre los que se implementa la suplementación, es poco prudente generalizar sobre el tipo, la forma, los momentos y la duración de la suplementación. Para obtener energía, la mayoría de los granos son buenos oferentes, salvo las oleaginosas. En el siguiente cuadro se presenta la composición química de ellos: Las fuentes proteicas más generalizadas en nuestra zona, son los verdeos de invierno, el pellet de girasol y la soja partida entre otros. Se considera que un alimento es concentrado proteico cuando el contenido de proteína supera el 20%. La hora para suplementar va a depender del objetivo de la misma y de la interacción del pasto disponible y el suplemento a utilizar. Si se busca no interferir con el pastoreo del animal, lo ideal es suplementar al mediodía o al atardecer. Es importante ofrecer al menos 40 cm de ancho de comedero. El mismo se puede construir como una lona con alambres laterales o también se puede depositar el suplemento sobre el suelo con un eléctrico a determinada altura para permitir su aprovechamiento (foto).

4 Es conveniente empezar con cantidades bajas por animal y aumentar hasta alcanzar el nivel deseado. Por ejemplo si se planea que el animal consuma 4 kg por cabeza, se debe empezar por ejemplo con kg/cabeza y a partir de allí, aumentar 1 kg/cabeza cada dos días, hasta la cantidad prevista. En algunos casos, cuando no se cuenta con forraje en pie, es conveniente mezclar el grano con heno desmenuzado o picado grueso, para permitir un mejor control de la suplementación, reducir la velocidad de consumo y los riesgos de sobreconsumo. También la participación del grano de avena en la mezcla en un 40-50% aumenta el contenido de fibra, contribuyendo de la misma forma que lo anterior. La velocidad de consumo, se puede controlar también, agregando 10-20% de sal común al grano dado en calidad de suplemento. En el caso de no contar con pasto, se deberá suplementar con rollos o fardos para aportar la fibra que el animal necesita (30% de la dieta). A continuación se presenta un cuadro con la composición química de algunas especies:

5 Anexo: Suplementos disponibles en la región y sus características: Fuente: Documento de Sequía INTA EEA Bordenave- Feb Con la finalidad de suministrar algunas herramientas para definir la mejor estrategia de alimentación, se describen brevemente los suplementos disponibles en la zona. Afrechillo de Trigo Proviene de la industria molinera luego de extraer la harina. Los afrechos y afrechillos de trigo tienen, en general, un porcentaje proteico que varía entre el 14 y 17%, con niveles medios de energía y de fibra bruta. Este suplemento es muy apto siempre que se complemente con algún grano de cereal, especialmente si se busca terminar animales.

6 Granos de cereales La composición energética de los diferentes granos es variable, siendo de mayor a menor: maíz, sorgo, cebada, trigo y avena. Sin embargo, en situaciones de crisis como la que se está viviendo se puede usar cualquiera de ellos, tanto para lograr un buen estado general de los animales, como para terminar adecuadamente novillos o vacas para la venta. Con la excepción del sorgo y la cebada de descarte por calibre, que se deben partir, el resto de los granos se puede suministrar entero. Tener en cuenta que el empacho por exceso de consumo de grano (acidosis) está considerado como el principal trastorno en estas condiciones. Para reducir este riesgo: - suministrarlos enteros - ofrecer a los animales un espacio de comedero que varía entre 40 a 50 cm/cabeza - utilizar sal como regulador del consumo - suministrar fibra (silo, rollo, rastrojo, etc.) Residuos de malteria Las malterias tienen subproductos llamados raicilla de cebada o brote de malta, y pellet de cebada. En ambos casos se trata del residuo posterior a la germinación de la cebada y la extracción de la malta. La raicilla o brote tiene alto contenido de proteína (20-26%), y proviene del despalillado de los granos germinados mezclado, en cierta proporción con granos. El pellet de cebada se confecciona con distintas proporciones de raicilla, grano y polvo de malta y tiene un nivel algo mayor de proteína (26-30%). Estos subproductos tienen características nutricionales muy interesantes para cualquiera de las diferentes categorías. Pellet de Girasol Es un excelente suplemento proteico, subproducto de la extracción de aceite en semillas de girasol. Se destaca su alto contenido en proteína bruta entre el 27 y el 32%. En la región se están obteniendo resultados productivos muy buenos cuando se lo combina con granos de cereal. Poroto de Soja crudo y Sojilla Se emplea tanto el poroto de soja crudo como la sojilla, que surge de la limpieza de la misma. En todos los casos se caracterizan por tener un alto contenido proteico (32 a 34%) y de minerales. Al igual que el pellet de Girasol se los puede emplear en todas las categorías de animales, siempre y cuando se lo acompañe con granos de cereal. No se debe suministrar en proporción mayor al 20% de la dieta total. Otros suplementos proteicos Existen otros suplementos proteicos como el pellet o harina de Soja (40-45% de proteína bruta), los copos de maíz (28 % proteína bruta), semillas de algodón (28-30% de proteína), etc. Estos normalmente están disponibles en otras regiones del país. Cualquiera de ellos resulta adecuado y se puede utilizar en las dietas, reemplazando en partes proporcionales, a los suplementos citados anteriormente.

7 A continuación se presentan tablas de requerimientos según la categoría animal:

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9 Bibliografía: -Documento sobre sequía INTA. EEA Bordenave Alimentación práctica de bovinos para pastoreo 1. Ing. Agr. Ernesto Viglizzo y Zinda Roberto Alimentación práctica de bovinos para pastoreo 2. Ing. Agr. Aníbal Pordomingo -Vademecum de campaña, Oscar Alloatti