Emigración y remesas:

Transcripción

1 El Salvador, 16 de junio de 2006 / Asociación Emigración y remesas: alivio de los pobres, que la Las remesas aumentan, gente salga de pero eso la pobreza. no hace Los programas causan más económicos de ARENA emigración que la guerra Los más grandes con las empresarios se enriquecen remesas de los pobres La gente emigra porque en El Salvador no encuentra empleo y los salarios son de miseria Asociación El Salvador, C. A.

2 2 Los eternos indocumentados La gente se ha ido del país desde los años sesenta, pero por diversas causas: primero fue por la represión del Gobierno; luego, por la guerra. Y ahora, es por la pobreza fruto de las políticas aplicadas por los gobiernos de ARENA. Brevísima historia de la emigración El conocido Poema de amor, de Roque Dalton, nos habla de los eternos indocumentados, las miles y miles de salvadoreñas y salvadoreños que se van buscando lo que no encuentran aquí. Durante los años sesenta del siglo pasado, mucha gente se fue del país, sobre todo para Honduras. Principalmente se fueron las personas desalojadas de la zona costera a causa del cultivo de algodón. También emigró mucha gente que no tenía tierras ni trabajo. En esos años vivían en el exterior alrededor de 350,000 salvadoreñas y salvadoreños. En los años setenta la emigración continuó, sobre todo por la represión de los gobiernos militares de Armando Molina ( ) y Humberto Romero ( ), surgidos de fraudes electorales. La mayoría de la gente se fue para otros países de Centroamérica. También creció un poco la emigración hacia Estados Unidos. La emigración se disparó durante la guerra, sobre todo, en los años ochenta. Miles de personas salieron del país debido a la represión de los cuerpos militares, a la persecución, la inseguridad, la falta de empleo y las confrontaciones militares entre la Fuerza Armada y la guerrilla del FMLN. En los años ochenta se fueron del país 127,450 personas. Con respecto a la década anterior, la emigración creció en un 73%. A diferencia de los años setenta, durante la guerra la gente emigró más hacia fuera de Centroamérica. A partir de 1990, la emigración ha ido creciendo más. La cifra de emigrantes podría alcanzar hasta 185,000 al año, o sea, 493 personas al día. Para el año 2002, un total de 2,778,286 salvadoreñas y salvadoreños vivían en otros países. La mayoría (90%) residía en Estados Unidos y el 6% en Canadá. El resto vivía en Centroamérica y otros países.

3 3 La política de ARENA es echar a la gente del país Desde 1989 hasta hoy (es decir, durante los gobiernos de ARENA) ha habido más emigración que en los tiempos de la guerra. O sea, la gente se siente peor hoy que cuando el conflicto armado. Eso da una idea del daño que han causado las medidas económicas aplicadas por los gobiernos areneros. Quien se llevó el primer lugar en echar gente fue el Gobierno de Francisco Flores. Sin embargo, el Gobierno de Saca ya le disputa fuertemente el liderazgo. Solo veamos los siguientes datos: La mayor salida de personas hacia el exterior se dio en los años Se estima que en esos años se fue del país casi la misma cantidad de gente que se había ido entre los años O sea, que en los últimos siete años se fue del país la misma cantidad de gente que se había marchado en los 47 años anteriores. Esas cifras dicen que los gobiernos de ARENA solo han servido para hacer más rica a una minoría de la población y para echar del país a millones de personas que no encuentran cómo ganarse la vida. Hasta la gente de capas medias y con educación universitaria se quiere ir del país, pues no encuentra empleo ni se siente segura. Una encuesta realizada por la Universidad Tecnológica indica que entre 5 y 7 de cada 10 personas se irían del país si pudieran hacerlo 13. Para mucha de esa gente, vivir aquí es como estar en un infierno. Si toda esa gente que quiere irse pudiera hacerlo, saldrían al exterior casi 5 millones de personas. En poco tiempo, El Salvador quedaría despoblado. La principal causa de la emigración es la falta de empleo y los bajos ingresos, provocados por el daño al agro, el congelamiento de los salarios y la concentración de las riquezas, generada por las privatizaciones y la eliminación de impuestos a los ricos (patrimonio, exportación de café, etc.).

4 4 Las remesas familiares Dos millones y medio de salvadoreñas y salvadoreños viven en los Estados Unidos, donde realizan todo tipo de trabajos. La mayoría de estas personas envía a sus familias en El Salvador ciertas cantidades de dólares (remesas familiares) que se han convertido en el sostén principal de la economía salvadoreña. En los últimos años han aumentado las remesas Debido a la creciente emigración, en los últimos 15 años las remesas se multiplicaron por 9. En 1990 no llegaban ni a 350 millones de dólares y en diciembre de 2005 sumaron 2,830 millones. Se estima que el 65% de las personas que emigran envía remesas. De cada 100 dólares de remesas, 87 provienen de Estados Unidos, 10 de Canadá y 3 de otros países. En el año 2004 recibieron remesas 362,189 hogares, que representan al 22% del total de hogares del país. Las remesas llegaron al 22.7% de los hogares urbanos y al 21.65% de los rurales. En promedio, cada hogar recibe 157 dólares de remesas al mes. Y cada persona recibe 38 dólares. La mayoría de las remesas llegan a los departamentos más poblados del país, San Salvador, La Libertad, Santa Ana y San Miguel. El departamento con menos remesas es Cabañas. La mayoría de las remesas las reciben los hermanos y hermanas de las personas que emigran. También las recibe una buena cantidad de padres y madres y de hijos e hijas de la gente que las envía. Casi el 83% de las remesas se utiliza para gastos de consumo, es decir, para comprar alimentos. Si se agrega el pago de la vivienda, los gastos médicos y de educación, se llega al 92%. Con los bajos montos que reciben las personas, es muy difícil que puedan invertirlos en algún negocio o ahorrar dinero. Solo el 7% del dinero se usa para esos rubros. Las remesas solo ayudan a mantener la sobrevivencia de quienes las reciben. Sin embargo, si comparamos la cantidad total de hogares de cada departamento con los que reciben remesas, el que más capta es La Unión, seguido de Cabañas, Morazán y San Miguel.

5 5 No todo lo que reluce son remesas Queremos aquí señalar una contradicción. El gobierno informó que en el año 2004 entraron por remesas 2,547 millones de dólares. Al mismo tiempo, el gobierno, en la Encuesta de Hogares y Propósitos Múltiples de 2004, informó que 362,189 hogares recibieron un promedio de 157 dólares al mes, es decir, 1,884 dólares por familia al año. Pues bien, si tomamos una calculadora, veremos que estos números no nos cuadran. Si usted multiplica el promedio de dólares que recibe cada familia al año (1,884) por el número de hogares (362,189), el resultado es 682 millones de dólares. Esa cifra es muy inferior a los 2,547 millones que reporta el Banco Central. Aunque la encuesta sobre los hogares que reciben remesas tenga imprecisiones, la diferencia con el Banco Central no debería ser tan grande. Por eso, buena parte del dinero que se registra como remesa no lo es. Y cómo llega al país? No está claro. Puede ser un dinero que entre por medio de negocios ilegales, como lavado de dinero, narcotráfico, etcétera. Las remesas evitan que el país estalle en mil pedazos En 1990, de los dólares que entraban al país por remesas y exportaciones, las remesas aportaron el 35%. En el año 2005 aportaron el 46%. Tal como van las cosas, en pocos años las remesas superarán a las exportaciones. Eso da una buena idea del peso que tiene el envío de dólares de la gente emigrante. Sin esa cantidad de dinero, sería imposible que los grandes empresarios importaran, o sea, trajeran del exterior bienes de consumo para la población, materias primas y máquinas para sus empresas. En el 2005, las empresas del país compraron productos en el exterior por 6,712 millones de dólares. Esa cifra casi duplicó la entrada de dólares por exportaciones. Por lo tanto, sin los dólares de las remesas sería imposible traer del exterior tantos alimentos, maquinarias y otros bienes que no se producen en el país o que se producen en pequeña cantidad. En el año 1990, con el dinero de las remesas se podía financiar el 29% de las importaciones. En el año 2005, las remesas permitían financiar el 42%. Si las remesas disminuyeran o se estancaran, las importaciones no aumentarían y hasta podrían caer. De ocurrir eso, habría una gran crisis en el país. Quebrarían muchas empresas que no podrían comprar materias primas ni máquinas en el exterior y habría una gran escasez de bienes. El desempleo, la pobreza y la inseguridad hace que nuestro país sea como una olla a presión. Por el momento, las remesas familiares han evitado que la olla estalle en mil pedazos. En El Salvador, de cada cien hogares, 22 reciben un promedio de 157 dólares de remesas al mes. La mayoría de ese dinero se utiliza en consumo, es decir, para comprar alimentos. Con ese dinero, esas familias no salen de la pobreza, pero sostienen la economía del país.

6 6 El círculo vicioso de las remesas Quienes más se benefician de las remesas no son las personas pobres que las reciben, sino los grandes banqueros y comerciantes, que hacen un negocio millonario con ellas. En ese famoso círculo, las remesas llegan al país y regresan a Estados Unidos. Las familias que las reciben tienen beneficios, pero quienes más ganan son los empresarios de aquí y los de allá. La mayoría de la gente que recibe remesas vive en San Salvador y otras importantes ciudades; entonces, buena parte de ese dinero se mueve en centros comerciales, cuando la gente compra alimentos; o va a empresas de servicios que fueron privatizadas, cuando la gente paga las tarifas de energía eléctrica y teléfono. Las remesas, entonces, crean un mercado de consumo de casi millón y medio de personas. Para los banqueros que cobran comisiones en Estados Unidos y para los comerciantes se trata de un mercado muy atractivo. En Estados Unidos ganan los empresarios que emplean mano de obra barata salvadoreña y los empresarios que exportan para El Salvador. También ganan los dueños de las empresas telefónicas y las compañías de transporte aéreo, tanto de Estados Unidos como de aquí, que solo es una: TACA. El gobierno de El Salvador también se beneficia de la emigración, porque cuando la gente pobre se va, disminuye la presión social. Y si el que emigra es una persona líder, la organización comunitaria se ve afectada, lo cual le conviene al gobierno, que tendría menos reclamos en las comunidades. 9 Los dólares regresan a Estados Unidos, pero no a la cartera de Chepe Rosales, sino a las cuentas de las grandes empresas de Estados Unidos que exportan sus productos hacia El Salvador. 8 La Arrocera San Francisco o Almacenes Simán envían los dólares a Estados Unidos para traer alimentos, ropa y otros productos y seguir con su negocio. 1 Chepe Rosales no tiene empleo. Paga a un coyote y se va a los Estados Unidos. 7 El Banco Cuscatlán presta los dólares a empresas importadoras, como por ejemplo Arrocera San Francisco o Almacenes Simán, que también son empresas de los banqueros y comerciantes. 2 Chepe Rosales trabaja en Estados Unidos limpiando los vidrios de los grandes edificios. 3 Chepe Rosales acude a la sucursal del Banco Cuscatlán, en California, para enviar 50 dólares a su familia. Paga además una comisión al banco por enviarlos. 4 La familia de Chepe en El Salvador retira los 50 dólares del Banco Cuscatlán, en Soyapango. 5 La familia de Chepe va a la Despensa de Don Juan, donde compra leche, huevos, sal, azúcar, frijoles y otros productos para la casa. 6 La Despensa de Don Juan deposita los dólares en el Banco Cuscatlán. Hemos consultado: Los dólares de las remesas son producto del trabajo de miles de emigrantes, pero van a parar a los comercios y bancos de los grandes empresarios, que, sin sudar ni una sola gota, los invierten y sacan ganancia. Con las remesas, la gente pobre no sale de su pobreza, pero los ricos se hacen más ricos. 7 Andrade-Eekhoff, Katharine, Mitos y realidades: y el el impacto económico de de las migraciones en los hogares rurales. FLACSO, El Salvador, Banco Central de de Reserva, BCR BCR CEPAL, Series Series macroeconómicas del del Istmo Istmo centroamericano, centroamericano, , , Diciembre Diciembre de de Equipo, Maíz, Enredos Enredos y desenredos y desenredos del TLC, del TLC, El Salvador, El Salvador, Equipo Equipo Maíz, Maíz, Programa Programa de de Desajuste Desajuste Estructural, Estructural, El El Salvador Salvador Maguid, A., Gente en movimiento: dinámica y Maguid, A., Gente en movimiento: dinámica y características de las migraciones internacionales características de las migraciones internacionales en Centroamérica, en Centroamérica, Ministerio de Economía, Dirección General de Ministerio de Economía, Dirección General de Estadística Estadística y Censos, Encuesta de Hogares de Propósitos y Censos, Múltiples, Encuesta de Hogares El Salvador, de Propósitos abril de Múltiples, El Salvador, abril de Ministerio de de Relaciones Relaciones Exteriores, Exteriores, Orozco, Manuel, Remesas a América a América Latina Latina y El y Caribe, El Caribe, PNUD, Informe sobre sobre el Desarrollo el Humano, Humano, El Salvador El Salvador Universidad Tecnológica, Encuesta de de opinión. El El Salvador, febrero de de Villalona, César, La La dolarización en en El El Salvador, [4 [4 de de junio de 2002]. Winschuh, T., T., Por qué qué se se van? van? La La emigración de los de los salvadoreños a a Estados Unidos, 1977.