Esta proporción corresponde a los habitantes entre 15 y 64 años, expresó.

Transcripción

1 La población venezolana se encuentra actualmente en una fase importante para la economía venezolana, pues la proporción de personas en edad productiva es mayor a la dependiente, lo que representa un bono demográfico para la nación, aseguró el gerente de Estrategias Demográficas del Instituto Nacional de Estadística (INE), Néstor Cegarra. Esta proporción corresponde a los habitantes entre 15 y 64 años, expresó. De acuerdo con el censo del INE, la edad media de los venezolanos es de 27 años, edad que se considera activa. Esta proporción de la población es responsable de los aportes en trabajo y producción de bienes y servicios. En este sentido el crecimiento de la población joven disminuye la tasa de personas dependientes, o bien alimenta el sistema contributivo. En el último censo del INE, en 2011, se refleja que 27% de la población tiene menos de 15 años, y 67% de los habitantes están agrupados en las edades de 15 a 64 años, mientras 6% tiene más de 64 años. 1 / 7

2 Mercado laboral Cegarra plantea que mientras exista más personas trabajando en empleos formales se aprovecha ese bono demográfico. Esta ventaja económica tiene relación con el nivel de educación; a mayor nivel de educación, mayor será el motor productivo. En este sentido para el desarrollo de la economía es conveniente que se incorporen al mercado laboral personas preparadas y que hayan recibido una educación pertinente y de la mayor calidad posible. Misiones educativas Las misiones educativas impulsadas por el Gobierno Nacional contribuyen al aprovechamiento del bono puesto que son parte de la formación que se requiere para engranar luego con el campo laboral. En cuanto a los programas educativos Venezuela tiene las misiones: Ribas, Sucre, Alma Mater y Cultura Corazón Adentro. Igualmente, la Misión Saber y Trabajo, que hasta el 2013 ha beneficiado a 122 mil personas generando importantes aportes al país. 2 / 7

3 Población activa vs dependiente Los indicadores básicos de fuerza de trabajo del INE, de abril de 2014, reflejan que 64,9% de la población es activa (productiva); 92,9% está ocupada y 7,1% desocupada. Mientras que 35,1% está inactiva (comprende a los estudiantes, incapacitados y quienes ejercen labores en el hogar). Hay que trabajar para reducir ese porcentaje de desocupación. El país debería entonces aprovechar el recurso humano para su inclusión en la fuerza laboral en las industrias y universidades, expresó Cegarra. Indicó que el éxito del bono demográfico depende de la adopción de políticas que incentiven la inversión productiva, la inversión en salud y educación, y así se aumenta la oportunidad de empleo, señala. Agrega que al existir esa población en edad de ahorrar, invertir, trabajar y producir, se reduce el número de personas que requieren de inversiones en educación y salud, además de disminuir los índices de pobreza. Los estudiantes forman parte de la población inactiva y actualmente hay 2 millones 715 mil 237 personas que a partir de los 15 años están estudiando. En este sentido, el bono se puede usar dentro del mismo sector joven para aumentar los beneficios, ya sea mediante la aplicación de la cobertura o la prestación de los mismos beneficios, es decir, que se retribuye. Propuesta empleo juvenil 3 / 7

4 El Gobierno Nacional, a través del Ministerio de la Juventud, propuso la Ley para el Empleo y Emprendimiento Productivo con el objetivo de impulsar los mecanismos de desarrollo de los jóvenes del país. El instrumento que aporta métodos para que los jóvenes menores de 30 años (que conforman 43% de la población según el INE) tengan garantizadas las condiciones para incorporarse al campo laboral sin la experiencia previa que actualmente exigen en el país. De esta manera se da cumplimiento al artículo 79 de la Constitución Nacional que dice que los jóvenes y las jóvenes tienen el derecho y el deber de ser sujetos activos del proceso de desarrollo. El Estado, con la participación solidaria de las familias y la sociedad, creará oportunidades para estimular su tránsito productivo hacia la vida adulta y, en particular, para la capacitación y el acceso al primer empleo, de conformidad con la Ley. La propuesta de Ley está siendo actualmente debatida por la población para luego elevarla a la Asamblea Nacional y que esta le dé el carácter legal. En el artículo 49 del proyecto se describe que el Estado en sus distintos niveles y ramas creará, desarrollará y apoyará mediante políticas públicas, los planes y programas sectoriales para incentivar al sector juvenil rural ( ), con el fin de lograr su desarrollo, integración y apego a los espacios rurales, fortaleciendo las materias y actividades propias de naturaleza socioproductiva pertinentes a cada región, expresó Cegarra. Fecundidad Por otra parte, la mujer, como elemento fundamental en la fecundidad, juega un papel importante para mantener el bono demográfico, puesto que de no tener hijos no continuará con la contribución del mercado laboral. 4 / 7

5 El boletín demográfico de mayo de 2013 del INE explica que el histórico de fecundidad del siglo pasado respecto a este, refleja que esta ha disminuido de 6,7 hijos por mujer durante el quinquenio a 2,6 hijos por mujer para el lustro Mientras pasen los años la cantidad de habitantes jóvenes va decreciendo y llegará un momento en que la población no crezca más, así como ocurre en algunos países europeos, apuntó Cegarra. Según las proyecciones, comentó, se espera un descenso en la tasa bruta de natalidad (número de nacidos por cada mil habitantes), así como el aumento de la tasa de mortalidad, debido al envejecimiento de la población. Latinoamérica En Latinoamérica también se presenta el escenario del bono demográfico. Según el panorama social de 2008, capítulo III de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), reseña que en promedio, la población de América Latina se encuentra en la segunda fase del bono demográfico, es decir, que es la más favorable, ya que la relación de dependencia alcanza niveles relativamente bajos y se mantiene en descenso. La fase uno se refiere a que la población joven es proporcional a la vieja, pero debido a los sistemas de gobierno esta no es aprovechable, pues en ocasiones los niveles de educación llegaban a pocas personas. Mientras que la tercera fase corresponde al descenso de la población joven y aumento de la dependiente y se prevé que se extienda hasta los años / 7

6 Según el informe, Cuba entró en la tercera fase desde principios de la década de 1990; Brasil a partir de 2007, y Chile en En este sentido, el informe refleja que los siguientes países entraron a la segunda fase del bono: Argentina, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Perú y la República Bolivariana de Venezuela (Ver gráfico en la página anterior). El documento explica que Uruguay no presenta bono demográfico por la intensa migración de población en edades activas que podría ser uno de los factores relacionados con esta situación. Explica además que debido a que los cambios demográficos no ocurren de manera uniforme en toda América Latina, sus efectos sobre la población en edad escolar secundaria también suelen variar de un país a otro. Edad escolar secundaria En Suramérica la población en edad escolar secundaria se incrementó de manera significativa siendo Argentina, Brasil y Chile los países con niveles altos de jóvenes estudiando secundaria. Por otra parte, el informe titulado Juventud y Bono en Iberoamérica, explica que tanto España como Portugal mantienen un bono demográfico bajo y la relación de dependencia en esos dos países está por debajo de la de América Latina, debido básicamente a la proporción más baja de niños en esas naciones. En España, tras alcanzar un valor máximo a comienzos de los años 90, el número de jóvenes es actualmente cerca de 10% mayor de lo que era en 1950, y aproximadamente 20% más alto de lo que se anuncia para el año / 7

7 Aunque exista un bono demográfico mayor o menor, cada país impulsa políticas para aprovechar el desarrollo de su economía, capacitando a los jóvenes. 7 / 7