COMISIÓN DE CIENCIA E INNOVACIÓN

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1 Año 2010 IX Legislatura Comisiones. Núm. 282 COMISIÓN DE CIENCIA E INNOVACIÓN PRESIDENCIA DEL EXCMO. SR. D. CRISTÓBAL JOSÉ LÓPEZ CARVAJAL celebrada el jueves, 25 de febrero de 2010 ORDEN DEL DÍA: Comparecencia de la Ministra de Ciencia e Innovción, D.ª Cristina Garmendia Mendizábal, a petición del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, para informar sobre los objetivos del Gobierno en materia de ciencia e innovación durante la Presidencia española de la Unión Europea. (Número de expediente 711/000324). Se abre la sesión a las dieciséis horas y cinco minutos. El señor PRESIDENTE: Señorías, buenas tardes. Se abre la sesión. Damos comienzo a la sesión de hoy, día 25 de febrero, con un único punto del orden del día: la comparecencia de la ministra de Ciencia e Innovación, doña Cristina Garmendia, para informar sobre los objetivos del Gobierno en materia de ciencia e innovación durante la Presidencia española de la Unión Europea. Esta petición de comparecencia ha sido solicitada por el Grupo Parlamentario Popular. En primer lugar, tiene la palabra la señora ministra. La señora MINISTRA DE CIENCA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Muchas gracias, señor presidente. Señorías, comparezco ante la Comisión de Ciencia e Innovación del Senado para exponer en esta ocasión los objetivos y prioridades que desde el Ministerio de Ciencia e Innovación, que dirijo, nos hemos marcado durante la Presidencia española de la Unión. Nuestra Presidencia coincide con una nueva etapa clave para la Unión Europea, tras la entrada en vigor del nuevo Tratado de Lisboa, el 1 de diciembre. Al mismo tiempo, hemos asistido recientemente a la ratificación en el Parlamento Europeo de la nueva Comisión Europea, un Ejecutivo comunitario que ejercerá su mandato durante cinco años y que ha recibido un amplísimo respaldo de la Cámara. Este año se cierra además un ciclo que se inició en el Consejo Europeo celebrado en el año 2000, con la puesta en marcha de la Estrategia de Lisboa, un compromiso de los Estados miembros para hacer de Europa en 2010 la economía basada en el conocimiento más dinámica y competitiva del mundo, respetando la cohesión social y el medio ambiente.

2 2 Diez años después, y pese a que Europa sigue teniendo importantes retos pendientes, la Estrategia de Lisboa nos ha permitido consensuar una visión política, marcar un rumbo y compartir los fundamentos sobre los que sustentar nuestro progreso. Abrimos ahora una nueva etapa que estará marcada por la Estrategia Unión Europea 2020, una estrategia que nace en el contexto de una crisis económica y financiera que ha provocado a nivel global la reflexión política más profunda de las últimas décadas. En este contexto, Europa tiene la obligación de establecer una hoja de ruta, quizá más realista que su antecesora, pero con un objetivo irrenunciable, ya formulado en Lisboa: el desarrollo definitivo de la sociedad y la economía del conocimiento. Y el reto es tan importante, que el propio presidente Barrroso en sus orientaciones para la próxima Comisión subrayó la necesidad de que Europa apueste por una transformación radical decía él hacia una sociedad basada en el conocimiento. Considero importante destacar también que la recién nombrada Comisión Europea incorpora como novedad una cartera que suma las competencias de ciencia e innovación, un modelo similar al de nuestro propio ministerio, con un mensaje de integración que compartimos plenamente. Hablamos de un tema verdaderamente estratégico para Europa, y es que sin más ciencia y sin más innovación, y sin la integración verdadera de ambas actividades Europa no podrá conservar su actual liderazgo y mucho menos aspirar a mejorar su posición en el concierto internacional. En este sentido, los datos aportados por el estudio El mundo en 2025, presentado por la Comisión Europea el pasado mes de septiembre, son muy representativos. Permítanme que les señale algunos de los que están allí reflejados. Dicho estudio muestra que el 61% de la población mundial en 2025 estará en Asia y que la Unión Europea representará tan solo un 6,5% y contará con la mayor proporción de población mayor de 65 años, un 30% de nuestra ciudadanía. Además, la triada Unión Europea-Estados Unidos-Japón perderá su liderazgo en el comercio y la producción mundial, una previsión que ya comienza a hacerse realidad, como lo demuestra el hecho de que China acabe de anunciar que se ha convertido en la segunda economía mundial, por delante de Japón. Particularmente, en el ámbito de la investigación y el desarrollo estas previsiones apuntan a que, si no tomamos medidas para evitarlo, la mayoría de la ciencia se producirá en 2025 fuera de los países que hasta ahora han sido considerados líderes, muchos de ellos europeos, y perderemos nuestra actual posición en el ranking global al ser superados por Asia. Solo dos países, China e India, representarán un 20% aproximadamente de la I+D mundial, es decir, el doble que su cuota actual. En este contexto, que es el más probable, en poco más de una década Europa solo podrá asegurar su protagonismo en la escena internacional si actúa en materia de ciencia e innovación de una manera más unida y más enfocada en sus retos. Lograr esta unidad de acción es, sin duda, un desafío, pero la Unión Europea ha superado desde sus orígenes barreras que parecían infranqueables. Hemos hecho realidad cuatro libertades muy importantes: la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas, en una Europa de casi 500 millones de habitantes, con 27 países, y una moneda única para 16 de ellos que ya es utilizada por más de 300 millones de personas. Es el momento, por tanto, de avanzar en lo que llamamos la quinta libertad, una nueva dimensión de la Unión Europea que habla de la libre circulación del conocimiento y el talento, porque solamente con un espacio común para el conocimiento, el Espacio Europeo de Investigación, en el que los científicos y las ideas circulen libremente, podremos garantizar esa sociedad y esa economía del conocimiento que deseamos para Europa. Al recoger el testigo de las anteriores Presidencias, especialmente la de Suecia, España ha asumido esta nueva etapa con responsabilidad y también con mucha ambición. Junto con los países de nuestro trío, Bélgica y Hungría, continuaremos trabajando para que esa Europa del conocimiento a la que aspiramos sea cada día más real. Y precisamente porque creemos que esta apuesta por la suma de esfuerzos en materia de I+D+ i es la única apuesta ganadora para Europa, hemos estructurado las prioridades de nuestra Presidencia para el impulso a las tres dimensiones del Espacio Europeo de Investigación, el ERA, por sus siglas en inglés: European Research Area, tres prioridades que son fundamentales: el eje de la integración, el eje de la implicación y el eje de la inclusión. Cuando hablamos de integración nos referimos a la necesidad de situar las políticas de investigación y desarrollo y de innovación en el centro del proyecto europeo. Hemos de conseguir que el ERA funcione como un espacio único e integrado, dotándolo de un peso institucional que no implique la generación de nuevas estructuras burocráticas pero sí de mecanismos que nos ayuden a alinear las prioridades de los países miembros y a evitar la duplicidad de esfuerzos. En paralelo, daremos un impulso a aspectos concretos que harán visible ese espacio único, esa quinta libertad. Entre ellos destacan las propuestas para eliminar las barreras que existen actualmente a la movilidad de los investigadores en el seno de la Unión. En este ámbito, puedo avanzarles que en el próximo Consejo de Competitividad formal, que se celebrará el 2 de marzo, adoptaremos unas conclusiones relativas a la movilidad y carrera de investigadores europeos. Se trata de un conjunto de medidas concretas que hemos desarrollado de acuerdo con los ministros de Empleo, que son, en último término, los responsables de desarrollar un marco de Seguridad Social y pensiones más armonizado para los investigadores dentro de la Unión y, por tanto, más proclive a la movilidad. De hecho, una delegación de ministros de Ciencia, presidida por España, trasladará estas conclusiones al seno del Consejo formal de Ministros de Empleo, Epsco, el día 8 de marzo, para que estas sean debatidas, apostando por un trabajo conjunto entre configuraciones de Consejos, Consejo de Ministros de Ciencia y Consejo de Ministros de Empleo, que ha sido muy bien recibido. Por otro lado, también avanzaremos hacia una mayor integración del ERA mediante el impulso a una verdadera

3 3 red de infraestructuras de interés paneuropeo, como las incluidas en la hoja de ruta de grandes infraestructuras científicas, o consolidando el Consejo Europeo de Investigación como un instrumento clave para garantizar e incentivar la excelencia de nuestra ciencia. Pero nuestra visión del Espacio Europeo deinvestigación integrado, señorías, traspasa las fronteras de la investigación y busca reforzar las muchas sinergias y conexiones entre la ciencia y la innovación, de acuerdo con las previsiones que tenemos para el futuro plan europeo de innovación. Queremos que en los debates sobre ambas cuestiones interactúen el sector científico y el industrial, como ya lo está haciendo España gracias al Ministerio de Ciencia e Innovación. Desde la Presidencia española esperamos poder aportar nuestra experiencia en la elaboración de la nueva estrategia española, la nueva Estrategia Estatal de Innovación, de forma que el futuro plan europeo de innovación pueda incorporar y abordar aspectos tan esenciales para la innovación como lo son el entorno financiero, la compra pública como instrumento tractor de la innovación desde la demanda, la internacionalización, la difusión a escala regional y local o la incorporación de talento y creatividad al tejido productivo. Por otra parte, y también a favor de una mayor integración, queremos contribuir a la consolidación del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología, el EIIT, apoyando durante nuestra Presidencia el lanzamiento de las comunidades del conocimiento e innovación, seleccionadas ya en la primera convocatoria del EIIT. Para finalizar este primer eje de integración, conviene tener presente que todas estas actuaciones solo pueden adquirir pleno sentido si logramos que el ERA sea una pieza central en la futura Estrategia para la Unión Europea Desde luego, este es uno de nuestros objetivos. En la parte final de mi intervención completaré estas ideas dando una explicación detallada de los avances que hemos conseguido en el Consejo informal de Ministros celebrado en San Sebastián. Al segundo eje, la segunda de las dimensiones del ERA que queremos desarrollar duarante nuestra Presidencia, lo hemos llamado el eje de la implicación. En pocas palabras, se trata, señorías, de pasar de la reflexión a la acción, de poner de manifiesto el papel que la ciencia puede jugar en nuestros retos más visibles, en nuestras inquietudes diarias, y de manera particular en aquello que ahora mismo nos ocupa y nos preocupa especialmente, que es la recuperación y el crecimiento económico. De hecho, la celebración de nuestro Consejo informal de Competitividad, el pasado 8 de febrero en San Sebastián, ha permitido que los ministros de Ciencia e Innovación europeos, reunidos por primera vez bajo el nuevo tratado, hayamos respaldado la llamada «Declaración de Donostia-San Sebastián. Ciencia para la recuperación y el crecimiento económico: aquí y ahora, una posición común», suscrita unánimemente, sobre el papel que la ciencia tiene en la recuperación y el crecimiento económico y una señal inequívoca de la ciudadanía europea, que reivindica el protagonismo de la ciencia en la sociedad y en la economía precisamente ahora, en tiempos de crisis. Pero este eje de implicación no ha de referirse solo al corto plazo. Los programas europeos de ciencia e innovación han de implicarse, además, de una forma más inmediata y decidida en la respuesta a los grandes retos sociales y económicos que afrontamos a medio y largo plazo, retos como las nuevas fuentes de energía y el cambio climático, la presión sobre los recursos naturales, el envejecimiento de la población y sus enfermedades asociadas o la creciente competitividad internacional como resultado de la globalización. No podemos esperar a consolidar el ERA para abordar estas cuestiones. Tenemos instrumentos suficientes para avanzar, y hemos de optimizar sus resultados. En este sentido, y como iniciativa concreta, estamos impulsando la simplificación de la participación en el programa marco para que las cargas administrativas no supongan un freno específicamente para los grupos de investigación, y muy particularmente para las pequeñas y medianas empresas. Esta reflexión ha de servir también para involucrar más a estas pequeñas y medianas empresas en actividades de I+D. Las pymes constituyen la principal fuente de empleo de Europa y están muy conectadas con las demandas y expectativas de los ciudadanos. Necesitamos más pymes de base tecnológica y, al mismo tiempo, hemos de incorporar la innovación como ventaja competitiva principal de nuestras pymes de sectores tradicionales, que son actualmente los más castigados por la crisis. Además, en el Consejo de Competitividad e Investigación nos proponemos impulsar iniciativas que respondan a este espíritu de implicación, como es el caso de las asociaciones público-privadas definidas en el Plan de recuperación económica coche verde, construcción sostenible, fábricas del futuro e Internet de futuro o la puesta en marcha de distintas actuaciones en el marco de la programación conjunta. Por último, quiero señalar que la Presidencia española está trabajando en dos propuestas legislativas, GMES y BONUS, que son codecisión del Parlamento y del Consejo. Para terminar con la descripción de nuestras prioridades, la tercera dimensión del ERA que pretendemos abordar en la Presidencia se corresponde con el eje de la inclusión. Eje de la inclusión, porque un número significativo de ciudadanos y ciudadanas europeos y la mayoría de la población mundial extracomunitaria sufren importantes carencias que no se atienden y para las que la ciencia y la innovación tienen ya respuesta o pueden tenerla en un futuro cercano. La Presidencia española cree firmemente que la Europa del conocimiento debe trabajar por una ciencia más comprometida y de mayor sensibilidad, una ciencia que incorpore entre sus desafíos la difusión universal del conocimiento con iniciativas específicamente dirigidas a los colectivos y países con más dificultades para acceder a ese conocimiento. Debe incorporar también entre sus desafíos el impacto social y el enfoque de cooperación al desarrollo en sus procedimientos de diseño, de

4 4 planificación y de evaluación. Y debe ser una ciencia preocupada por la transferencia de tecnología a las regiones del mundo más desfavorecidas, un reto con múltiples facetas, algunas tan urgentes como el acceso global a medicamentos y a tecnologías sanitarias innovadoras o la lucha contra la brecha digital. Para todo ello, hemos organizado una conferencia internacional sobre ciencia contra la pobreza, que celebraremos durante el mes de abril, parte de cuyas conclusiones esperamos que puedan ser adoptadas como conclusiones formales en el Consejo de Competitividad, de mayo. Sin duda, otra forma de exclusión social contra la que podemos luchar con la ciencia y que, además, afecta a las instituciones científicas europeas, es la brecha de género. En el ámbito académico, por citar un ejemplo, esta desigualdad se traduce en que, a pesar de que la mayoría de los universitarios y doctores europeos son mujeres, estas solo ocupan un 18% de los puestos de alta responsabilidad. El enfoque de género debe ser incorporado asimismo a la planificación y evaluación de las políticas científicas como una dimensión con entidad propia en el impacto social de dichas políticas. Señorías, una vez definidas estas tres prioridades de la Presidencia española en materia de ciencia e innovación y las expectativas que tenemos al respecto, permítanme que me centre a continuación en los avances que hemos conseguido en la única reunión de ministros de Investigación celebrada hasta la fecha, el Consejo informal de Ministros, del 8 de febrero, celebrado en San Sebastián. Es destacable que, a pesar de tratarse de una reunión informal, una reunión en la que no es posible extraer conclusiones vinculantes, los ministros alcanzamos un alto grado de consenso sobre una serie de aspectos muy importantes, que harán posible que puedan materializarse, previsiblemente, en los próximos consejos formales. En primer lugar, en relación con el eje de la integración, y singularmente con la integración de las políticas de ciencia e innovación, hemos decidido impulsar conferencias ministeriales ad hoc, conferencias temáticas y capaces de integrar a nuevos agentes, así como trabajar conjuntamente con otras configuraciones del Consejo, tal y como lo vamos a hacer con el Consejo de Empleo. Es decir, nos planteamos lo siguiente: si la ciencia tiene que abordar y quiere desarrollar el aspecto de ciencia para la cooperación al desarrollo, una delegación de los ministros de Ciencia tiene que poder participar necesariamente en una configuración de ministros competentes en cooperación al desarrollo. Si no, no podremos llevar al centro del debate la necesaria implicación y la necesaria acción que puede desarrollar la ciencia. Hemos decidido también avanzar en materia de indicadores, porque, como muchos grandes intelectuales dicen, lo que no se mide no avanza. Nosotros lo suscribimos, y sé que muchos representantes de esta Cámara lo suscriben también. Ya saben ustedes que somos firmes defensores de los indicadores. Por una parte, consideramos que es necesario contar, desde luego, con indicadores de input toda Europa ha trabajado con la inversión en I+D+i en relación con el producto interior bruto, pero necesitamos avanzar en los indicadores de output para poder medir precisamente el progreso hacia una economía basada en el conocimiento y que realmente nos sirvan para dar cuenta a la ciudadanía de cuál es la rentabilidad social y económica de nuestra inversión en materia de investigación y desarrollo. Asimismo, se ha gestado un consenso unánime acerca de la necesidad de dotarnos de lo que podríamos llamar indicadores del ERA, indicadores del Espacio Europeo de Investigación, que nos permitan medir nuestros propios compromisos y progresos conjuntos en esta materia. Concretamente, apuntamos a dos, que esperamos poder acordar en el Consejo formal de marzo. Uno está relacionado con la inversión que la Unión dedica en su conjunto; es decir, la suma de la contribución de los países y de los fondos comunitarios que los Estados miembros destinan a cooperación en I+D. La idea es la siguiente: si queremos construir entre todos ese Espacio Europeo de Investigación, lo primero que tenemos que saber es dónde estamos, de dónde partimos en 2010, para poder tener una ambición, unos objetivos para 2020 y poder irlos midiendo en términos de progreso. Como sabemos, el programa marco, el programa comunitario, significa solamente el 5% de los fondos europeos, de momento. Otro 10% son fondos de cooperación internacional, y el resto está en manos de los países miembros. Y una verdadera vocación de construir Europa estará vinculada en alguna medida a la voluntad que tengan los países miembros de alinear sus recursos con los de otros países de la Unión. Ahora mismo tenemos que saber cuál es esa posición, no solo el programa marco, sino qué parte de nuestros presupuestos está ya trabajando en ese contexto internacional europeo, con el fin de poder marcarnos objetivos para Otro indicador sobre el que hemos llegado a un acuerdo es el relacionado con la movilidad de los investigadores, un indicador que dé cuenta de la eficacia con la que avanzamos en la quinta libertad, la libertad de circulación del talento y del conocimiento. Por último, y en lo que se refiere a este eje de integración, los ministros consideramos muy conveniente y oportuno el énfasis que ha puesto la Presidencia española en el Plan europeo de innovación y en la Estrategia 2020, como oportunidades de materializar esta cultura integrada de ciencia e innovación para colocar a ambas en el centro del proyecto europeo. En el segundo de nuestros ejes, el de la implicación, los ministros acordamos avanzar decididamente hacia un programa marco europeo de I+D más implicado y más simple. En concreto, en el Consejo hemos forjado acuerdos potentes sobre las siguientes cuestiones: la conveniencia de que el futuro programa marco esté más enfocado hacia los grandes retos a los que se enfrenta Europa; la necesidad de reforzar en dicho programa el eje de los recursos humanos, precisamente para evitar la pérdida de capacidad competitiva frente a Estados Unidos, cuya capacidad de atracción de talento sigue siendo superior a la europea; la importancia de avanzar hacia una mayor confianza de la Administración europea en el trabajo de los investigadores y empresas, reforzando al mismo tiempo la rendición de

5 5 cuentas; se trata, en definitiva, de pasar de la cultura del control a la cultura de la confianza, basada en la responsabilidad; y, finalmente, se acordó que la simplificación administrativa, de la que he hablado en la primera parte de esta intervención, debe estar acompañada, en la medida de lo posible, de una simplificación de los instrumentos del programa marco. Así, como principio general, consideramos que la creación de nuevos instrumentos mejorados que podemos proponer debería llevar aparejada siempre la eliminación o extinción de aquellos otros instrumentos que estén en vigor y hayan sido diseñados con fines semejantes, de manera que no entremos en la dinámica de crear nuevos instrumentos que aumenten la complejidad de los existentes. Si pensamos que un instrumento no funciona, hay que redefinirlo y lanzarlo con el compromiso de extinguir el que se ha visto que no está siendo operativo o que no está cumpliendo esa misión. También en el eje de la implicación, la Presidencia española ha querido visualizar un reto europeo concreto: el coche eléctrico, como caso de estudio de una implicación que en estos momentos se plantea Europa, que es el desarrollo del coche ecológico. Como digo, hemos querido traducirlo en un ejemplo concreto, que es el coche eléctrico, y tuvo una muy buena acogida por parte del Consejo. En concreto, este reto europeo que, como saben, es de particular interés para España, será explorado en la PPP, Public-Private Partnership Green Car, es decir, el coche verde, que es una iniciativa lanzada en el Programa de recuperación económica europea, con el compromiso de la Comisión Europea de avanzar en aspectos concretos, por ejemplo, en forma de convocatorias de programa marco en los próximos meses. Se trata de un desafío tecnológico que requiere un abordaje multidisciplinar por la ciencia. Su viabilidad depende de la resolución de múltiples incógnitas desde la perspectiva energética, logística y medioambiental, e incluso supondría una modificación de conductas y de usos culturales. Y todas estas cuestiones lo hacen, en nuestra opinión, especialmente interesante como gran proyecto común de la investigación y el desarrollo tecnológico europeos. Avanzar hacia una cultura y unos mejores instrumentos que permitan asumir más riesgos ha sido otro de los objetivos de la cumbre. La aversión al riesgo es probablemente uno de los factores limitantes que más dificultan el avance de la innovación en Europa. Es una cuestión que en el mercado financiero se traduce en una baja actividad e interés por el capital riesgo y que, sobre todo, afecta a las empresas más jóvenes. En el ámbito de las administraciones supone la infrautilización de las posibilidades de compra pública como instrumento tractor de la innovación, y en la sociedad europea en su conjunto inhibe la actividad emprendedora y también el consumo de productos y servicios innovadores. Para finalizar, quiero referirme a los acuerdos alcanzados en el tercer eje, el de la inclusión. En este punto hemos acordado explorar las posibilidades que la investigación europea ofrece de cara a nuestras políticas de cooperación para el desarrollo, con un enfoque que se puede materializar considerando la pobreza y la exclusión como un gran reto social, un gran reto europeo, de acuerdo con la definición de grandes retos que propuso la Presidencia sueca. Por otra parte, hemos acordado también con la Comisión Europea el estudio inmediato de las capacidades de ayuda por parte de la ciencia europea a Haití, analizando particularmente la posibilidad de acoger temporalmente a todos los investigadores haitianos, a todos aquellos que quieran integrarse en las instituciones de investigación europeas, para que puedan seguir sus trabajos, y ayudarles así realmente a reconstruir las capacidades científicas en Haití. Quiero finalizar, señorías, manifestando que nuestra Presidencia trabaja para que el proyecto europeo avance integrando a la ciencia y a la innovación, y que lo haga implicando a la ciencia en la resolución de los grandes retos sociales y económicos que afrontamos, incluyendo las necesidades de todos aquellos que están excluidos. Como bien conocen sus señorías, el lema de la Presidencia española de la Unión Europea es innovación e igualdad, dos políticas que han estado muy presentes en la acción del Gobierno del presidente Zapatero, y que constituyen los dos principales ejes de actuación de nuestra Presidencia durante este semestre. Tal y como señalaba en mi primera comparecencia sobre la Presidencia europea en la Comisión Mixta para la Unión Europea, celebrada el pasado mes de noviembre, España tiene todos los elementos para ser reconocida en Europa como un país de ciencia, que está sabiendo transformarse gracias a una decidida apuesta por la investigación y el desarrollo, que cuenta con un sistema científico maduro y un tejido empresarial con un creciente compromiso por la innovación, una fortaleza de país que, aquí y ahora, hemos de poner también al servicio de la construcción europea. Es nuestro turno, es nuestra oportunidad de impulsar y liderar este gran proyecto común y compartido que es Europa, y hacerlo especialmente desde las políticas de ciencia e innovación. El reto de recuperar la senda del crecimiento económico y llevarlo a cabo desde una perspectiva incluyente e igualitaria es un objetivo que comparten muchos países, pero en España lo estamos abordando con particular intensidad. El Gobierno en pleno está implicado en este reto mediante la estrategia de economía sostenible, que incluye el proyecto de la nueva ley de ciencia, tecnología e innovación, porque consideramos que la salida de la crisis en nuestro país es una oportunidad para construir una realidad económica diferente a la que hemos vivido en los últimos años, una realidad más sólida y solidaria, gracias en gran medida al conocimiento y la innovación. El ministerio está trasladando con éxito, de momento, este conjunto de aproximaciones a la Unión Europea, y yo espero que mediante su apoyo y compromiso, señorías, sigamos reforzando esta acción de la Presidencia española de la Unión Europea. Muchas gracias.

6 6 El señor PRESIDENTE: Gracias, señora ministra. A continuación, en nombre del grupo parlamentario proponente de la comparecencia, tiene la palabra el senador Alarcó. El señor ALARCÓ HERNÁNDEZ: Muchas gracias, señor presidente. Muchas gracias, señora ministra, una vez más. Esta es la tercera vez que tengo la oportunidad de interpelarla en esta comisión como portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Senado. Debo decirle que las relaciones que he mantenido con usted como representante del Grupo Parlamentario Popular han sido exquisitas, y eso ha facilitado mucho se lo agradezco públicamente y quiero que figure en el Diario de Sesiones del Senado la posibilidad de intercambiar y crecer en positivo tanto en lo que se refiere al Partido Popular como a la ley de la ciencia y al tema al que hoy nos estamos refiriendo, es decir, a Europa. Efectivamente, pedimos esta comparecencia en nombre del Grupo Parlamentario Popular para hablar de Europa. Pero debo decir, de entrada, que lo que está hoy sobre la mesa en cuanto a ciencia e innovación es el borrador de la ley, por lo que me va a permitir usted que lo relacione con el tema de Europa ya que, aunque no la hemos citado para hablar de ello, a pesar de que tendremos muchas oportunidades, la inmediatez es importante y España necesita esa ley. Ya hemos comentado alguna vez que el consenso es necesario; pero si hablamos de ciencia e innovación el consenso es un sistema de feedback, un sistema de lealtad que se retroalimenta, de forma que cuanto más leal es uno más leal es el otro, y además ese consenso nunca se puede confundir con la propaganda. Son dos principios básicos que el Partido Popular respeta escrupulosamente y que estoy convencido de que usted, como representante del Gobierno, también va a respetar. Porque al final lo que nos mueve a todos es ese clima de consenso, que empezamos en esta Cámara con la primera moción que se presentó en esta legislatura, aprobada por mayoría absoluta, para buscar un consenso para la ley de la ciencia. Es algo que considero imprescindible. Debo decirle también que, en honor a ese consenso estamos en la actividad política y yo represento a mi grupo parlamentario, incluida la Estrategia de Europa, hubiera sido mucho mejor que esa ley hubiera estado ya consensuada y aprobada. Es verdad que las cosas son como son, que los tiempos no solo los marca uno sino también las circunstancias, y además es cierto que estamos en momentos dificilísimos desde el punto de vista social y económico para que eso salga adelante. En cualquier caso, todo lo que ha dicho usted sobre la Estrategia de Europa me alegro mucho de su enfoque tendrá que estar plasmado en esa ley, algo que precisamente nos condiciona, porque si se hubiera aprobado en diciembre, cumpliendo con el calendario previsto, habría sido mucho mejor. En fin, fruto de nuestra inquietud y de ese espíritu de consenso que siempre ha existido en esta comisión, nosotros formulamos tres preguntas importantes y tres mociones que, como digo, fueron aprobadas por unanimidad. Y paso a hacerle dos comentarios. Aunque repito que no la hemos citado para hablar de la ley, no me resisto como portavoz a aprovechar su presencia para decirle que el actual anteproyecto de ley mejora ostensiblemente el anterior luego usted me contestará lo que considere oportuno, porque se han incluido sugerencias de todos los partidos, incluido el Partido Popular, que considero importantes. Es verdad que se han establecido, con un cuidado exquisito para no aumentar el gasto en un momento de restricción, y espero y deseo que eso no condicione el desarrollo de una ley que va a cambiar otra gran ley, la de 1986, porque no estamos hablando solamente de las circunstancias de este año ni de la Presidencia europea compartida durante seis meses sino de una ley que debe tener vocación de futuro. Con respecto a la movilidad, como usted acaba de decir, las OPI, la universidad y la institución sanitaria suponen algo muy importante en la estrategia europea. No tenía pensado hacerlo así, pero sí quiero decirle que me duele profundamente que, dentro de la estrategia europea, el Gobierno español no tenga como una línea prioritaria el gran telescopio europeo, que debe hacer el Gobierno hará lo que estime oportuno, pero se aprobó en una moción por unanimidad en este Senado dos cosas: una, crear una comisión interministerial el 30 de octubre de 2009, y dos, poner como algo prioritario entre las líneas de actuación de este Gobierno en Europa la instalación del Telescopio Europeo Extremadamente Grande es una mala traducción del inglés, pero se llama así en la isla de La Palma, isla europea, isla española, isla imprescindible, que está demostrado que tiene el mejor cielo astronómico el mundo, que cuenta con las mejores condiciones, y que es la inversión científica más importante, o de las más importantes, de la historia. Como usted bien sabe, han sido 1000 millones de euros en siete años, puestos de trabajo definitivos directos, indirectos, y podría representar para la industria y para la ciencia española el cambio de modelo económico del que estamos hablando. Puesto que la ESO no se ha reunido creo que va a ampliarlo a marzo, usted tendrá más información, le pido que me la dé, y espero que se pueda introducir en esa agenda, porque es precisa una actuación diplomática profunda, no solo económica, sino diplomática profunda, repito le sugiero, casi le suplico, ya que estamos a tiempo, que convoque a los ministros de Ciencia e Innovación para hablar de este asunto. En España tenemos el presupuesto hecho. Esto, económicamente, no representa mucho, y sería un error difícilmente corregible en veinte años que ese gran telescopio, esa gran infraestructura científico-tecnológica, con un valor añadido importantísimo, no sea instalado en Europa, no sea instalado en la isla de La Palma. Aún estamos a tiempo; le pido más información en esta comisión para que esto se pueda subsanar. Respecto a la información que nos ha dado, en el Grupo Popular coincidimos claramente con los tres ejes. No en vano esos tres ejes son una representación muy clara de lo

7 7 que está en la ley de la ciencia: movilidad, etcétera. Me alegra profundamente su convicción yo se lo expresé en su primera comparecencia sobre la público-privado, sobre la compra pública, concepto fundamental que tiene un papel clave para salir de esta crisis económica profunda y de esa disminución del presupuesto, que es evidente que ha ocurrido. No quiero entrar en esa discusión para no desviarme de lo que es importante en estos momentos, pero tengo la obligación de decirlo. Es fundamental, y por eso uno lo que usted ha dicho respecto a los tres grandes ejes de la Presidencia compartida Europea, que son difícilmente no compartibles. Es muy difícil relacionarlo con la cooperación, y la divulgación es definitiva. Le pido se lo he dicho casi de forma privada que intentemos corregir la divulgación y el principio científico en el proyecto de ley que, en el fondo, acaba de decir usted que es uno de los ejes. La libertad de conocimientos es clave, y no sé si aquí se han dado los pasos correctos para que sea así. Los localismos tienen muy poca cabida dentro de la ciencia y la innovación no deberían tener casi ninguna, y eso no quiere decir que no quepamos todos, pero los localismos tienen poco espacio. Usted ha hablado indirectamente de un fomento claro de la ley, porque lo público-privado y la compra pública se llama responsabilidad social cooperativa, que es un concepto que también le pedí en aquella comparecencia. Es un concepto clave, y no está del todo introducido en la ley. Sería bueno hacerlo. Estamos en un momento de consenso, y el consenso es que nos escuchemos y aportemos ideas. Por cierto, todo lo que le estoy contando no tiene ideología política y no va a tenerla, porque la ciencia no tiene ideología política, o no debe tenerla, y ese criterio es el que debe imperar entre nosotros. Para terminar usted también lo ha dicho, aunque no de esa manera, en la creación de ese Espacio Europeo de Innovación e Investigación es clave el fomento del mecenazgo y las reformas fiscales adecuadas para fomentar que la sociedad privada se pueda introducir con atractivo porque si no la ciencia no tendría mucho sentido para llevar a buen puerto, primero, la estrategia europea y, segundo, algo que a mí me preocupa mucho más: la definitiva ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación. Muchas gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senador Alarcó. Dado que el senador Quintero ha debido ausentarse, tiene la palabra la senadora Leanizbarrutia en nombre del Grupo de Senadores Nacionalistas. La señora LEANIZBARRUTIA DE BIZKARRALEGO- RRA: Muchísimas gracias, señora ministra, por su exposición, que ha sido breve, concisa y muy estructurada. Nos ha dejado bien claros estos tres ejes. Me ha gustado mucho que intenten simplificar la participación de la sociedad en ese eje que se llama «de la implicación». Me parece vital y acertada esa asociación del sector público con el privado y, en mi opinión, es clave para la consecución de los objetivos que se marcan en el Tratado de Lisboa. Estamos pasando de una economía de la especialidad a una economía de la globalidad. Hay que ser innovadores en la forma de optimizar los recursos. Creo que eso es vital, y me parecen muy acertados los tres ejes. En lo relativo al eje de la integración para impulsar las grandes áreas científicas, me gustaría saber qué tratamiento se les da a los proyectos emergentes, porque muchas veces da la impresión de que los grandes proyectos científicos son el objetivo prioritario, pero yo soy de la opinión de que las grandes investigaciones consumen recursos, pero las innovaciones generan muchos recursos. En el aspecto de la innovación, cómo entienden la investigación para la innovación que no es para los grandes centros tecnológicos? Creo que en la investigación hay dos equipos: uno de primera división y otro de segunda división lo uno no quita lo otro, pero el que realmente genera puestos de trabajo en Europa es el que llamamos de segunda división; es el que genera recursos, empleo y el que está cambiando el mundo poco a poco, día a día. Estoy muy contenta de ver la gran tradición de solidaridad y derechos humanos de los que nos han precedido en la política de Europa y de los Estados europeos. No lo olviden, y que todos los retos tecnológicos y científicos sirvan para que la ciencia también pueda ser un elemento de solidaridad. Estoy de acuerdo con el americano Parag Khanna, que dice que el gran protagonismo de Europa será ser solidarios, ayudar a los países emergentes, no crear nuestro poder sobre el poder económico, sino compartiendo la ciencia con ellos. Quien de aquí en adelante se base solamente en el poder económico lo va a tener bastante mal. Ese es el gran reto de Europa a diferencia de Estados Unidos: no plantearse los retos a nivel económico o militar, sino en términos de solidaridad, compartir la ciencia para mejorar la calidad de vida de todo el mundo. En cuanto a la inclusión, estoy observando que en el mundo de la ciencia la mujer, como usted ha comentado, desempeña un rol especial, pero también es cierto que la mujer es como el Guadiana: aparecemos en el mundo y luego desaparecemos en la época de la maternidad. Qué ocurre? que en el mundo de la investigación es difícil compatibilizar el trabajo y el rol de la mujer procreadora. En muchas ocasiones oigo decir a muchas mujeres investigadoras que este es el gran problema al que se enfrentan. No sé si esto lo tienen previsto o no, y si les van a facilitar esa compatibilidad. Centrándome en Euskadi, quiero preguntarle cuáles son los retos que usted entiende que se pueden llevar desde nuestro país para apoyar las estrategias europeas de ciencia e investigación. Le preguntaría muchísimas más cosas, señora ministra, pero con esto ya es suficiente. Muchas gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senadora Leanizbarrutia. A continuación, tiene la palabra la senadora Aleixandre.

8 8 La señora ALEIXANDRE I CERAROLS: Gracias, señor presidente. Bienvenida de nuevo, ministra Garmendia, a esta comisión. Me he perdido sus primeras palabras, y lo siento. Pero cuando la he empezado a oír estaba usted diciendo que China y la India supondrán dentro de poco el 20% de la I+D mundial, y Europa no solamente tendrá que competir con Estados Unidos y con Japón, sino también con los grandes países emergentes, que serán la China y la India, especialmente China. Por lo tanto, además de competir entre nosotros, deberemos competir con los de fuera y quizás, tarde o temprano, tendríamos que unirnos para competir todos juntos fuera, pero esta sería una segunda parte, primero unámonos a Europa. Garantizar la circulación de científicos y de ideas siempre me ha parecido muy bien, y el impulso a través de la European Research Area me parece perfecto. Pero hay un punto donde la movilidad y la fidelización deberían tenerse en cuenta. Movilidad versus fidelización es importante, de lo contrario acabaremos movilizando a los nuestros para que se vayan fuera y aquí vendrán los de otros países, lo cual es peligroso. Evidentemente, uno de los aspectos más importantes es eliminar la burocracia. Menos burocracia o al menos que las nuevas estructuras no supongan más burocracia es algo vital para todos. Conexión entre ciencia e innovación. La conexión entre el sector científico y el sector industrial cómo se puede hacer si no ponemos gestores intermedios? Es una de las preguntas que supongo que tendrá que desarrollar la futura ley de la ciencia, en la que quizás una de las sugerencias que le propondríamos a usted sería la potenciación de estos gestores intermedios, al menos de momento. Quizás más adelante no los necesitemos, pero en estos momentos no los tenemos. Ha hablado usted del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología, pero no nos lo ha desarrollado. Tal vez no sea el momento de hacerlo, pero en el momento en el que ese instituto se cree, nos gustaría que nos viniese a explicar dónde, cuándo y cómo. El Consejo de Ministros decidió una fase, que creo que es importantísima, de implantación en nuestra sociedad de la ciencia para la recuperación del crecimiento económico en Europa y la ciencia aplicada a lo de cada día, a las nuevas formas de energía o al envejecimiento de la población y esto sí lo entienden todos nuestros conciudadanos. La simplificación en el programa marco es importante. Sobre esto me gustaría preguntarle lo siguiente. Vamos a dedicarnos exclusivamente al programa marco? Porque a mí me llega información de que en programas como el Artemis, la plataforma Artemisia o el ITEA 2, que son programas muy tecnológicos, en España solo se han puesto este año 4 millones de euros, lo cual supone que hemos disminuido la aportación. Esto significa que Europa está apostando solamente por el programa marco y va a dejar estos programas en un segundo plano? En cuanto a la inclusión, usted ha dicho que hay un gran número de ciudadanos del mundo que sufren carencias y que la ciencia y la innovación pueden solucionarlo. Yo le diría que, en este momento, la lucha contra la pobreza a veces la tenemos en nuestro país y no la vemos de cerca, pero 4 millones de inmigrantes en los últimos 10 años han hecho que en España tengamos en estos momentos bolsas de pobreza importantes y retos dentro de nuestro país que no debemos olvidar. Esto no quiere decir que la solidaridad no sea importante, pero a veces la solidaridad empieza por los que tenemos más cerca, a veces en el rellano de la escalera. Eso es lo que les digo muchas veces a los jóvenes que nos escuchan. En cuanto al enfoque de género, señora ministra, estoy cansada de decir que mientras en este país una mujer cobre distinto salario al de un hombre por hacer el mismo trabajo, no hay nada que hacer. La primera igualdad es cobrar lo mismo, porque la primera independencia se adquiere cuando una mujer es independiente económicamente; así pues, mientras haya un solo hombre en este país que cobre un solo euro más que una mujer haciendo lo mismo, no hay nada que hacer, la igualdad será imposible, y el problema no es la maternidad, porque con maternidad o sin maternidad siempre estamos discriminadas, y no hablo de esta Casa ni de la universidad, donde por suerte no la hay. Incluso creo que muchas de nosotras no la hemos sufrido en carne propia, pero sabemos que está ocurriendo y ocurre en grandes empresas, empresas a las que quizás algún día habrá que decirles: si ustedes no hacen esto, a lo mejor no tendrán acceso a según qué. Tal vez sea una forma de hacerlo no lo sé en innovación e investigación, por ejemplo. Ha hablado usted de una reunión de ministros de Cooperación y Desarrollo. No sé que relación puede tener con el tema de la ciencia, pero es ciencia incorporada a la cooperación y al desarrollo. A veces, la cooperación y el desarrollo no solamente son ciencia, son otras cosas. La evaluación de los programas, los indicadores, creo que son algo vital. Deberíamos evaluar cualquier programa que hagamos, no solamente en ciencia y tecnología, sino también en salud, en cualquier otro programa, después de la implantación, y hacerlo con agentes o comisiones independientes. En este país se aceptan un montón de proyectos que al final nadie evalúa, nadie sabe adónde ha ido a parar el último que se ha hecho, y se elabora uno nuevo. Me parece que es importante tener indicadores y formas de evaluar cualquier programa. Respecto a la simplificación administrativa, estamos totalmente de acuerdo. Nuevos instrumentos mejorados, con extinción de los antiguos, pero cuidado, no sea que los cambiemos de nombre solamente. Esto es importantísimo. Cómo vamos a hacerlo? Si solo se cambian de nombre, serán los mismos perros con distintos collares, y esto es muy peligroso. La aversión al riesgo es importante, pero quizás por desconocimiento. En estos momentos, el investigador, incluso los centros de investigación, desconocen un poco lo que es el capital riesgo. Creo que esta es una de las cuestiones que deberían estudiarse en formación.

9 9 Usted habla de acoger a los investigadores de Haití, pero debemos devolverlos, de lo contrario vamos a desertizar a ese país de científicos. Esto es malo; lo estamos haciendo con los médicos. Nos llegan médicos de Suramérica, y estamos desertizando de médicos unos países que los necesitan, y eso no es bueno. Estamos de acuerdo con el apoyo que dimos todos los grupos parlamentarios del Senado al telescopio de Canarias. Por último, está el asunto del desconocimiento de la transferencia por parte de las mismas universidades. Todo el mundo habla de transferencia, pero el investigador que está investigando actualmente en según qué centros, desconoce qué es la transferencia. De nuevo están los gestores de transferencia, los gestores que hay en universidades de otros países, y quizá ahora sea el momento de potenciarlos, no sé si más adelante, pero ahora sí. Sin más que decir, solamente deseo que continúe por este camino por el que creo que vamos bien, pero hay mucho que hacer. Muchas gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senadora Aleixandre. Por el Grupo Parlamentario Socialista, tiene la palabra el senador Salvador. El señor SALVADOR GARCÍA: Gracias, señor presidente. Estimada ministra, en primer lugar quisiera agradecerle, aunque también forme parte de sus obligaciones, su presencia en esta Comisión de Ciencia e Innovación dada su apretada agenda con el desarrollo de la Presidencia española de la Unión Europea; Presidencia que se produce en un momento complicado de la historia de la Unión Europea, del mundo y de España: un contexto de crisis económica mundial que ha puesto de manifiesto lo que determinadas prácticas del capitalismo más salvaje pueden significar para la economía global en el tablero de ajedrez que representa el sistema financiero mundial en el que la figura del Rey recibió la amenaza de jaque mate, haciendo tambalearse a todo el sistema. La ambición desmedida, la irresponsabilidad, la especulación, la falta de regulación de los mercados financieros han provocado que la seguridad de la economía mundial se cayese como un castillo de naipes, arrastrando unas economías nacionales a otras. Momento complicado también para España porque, a lo dicho anteriormente, se añade el pinchazo de la burbuja inmobiliaria que ha provocado que nuestro nivel de desempleo se dispare alarmantemente. Vivimos momentos convulsos también en la política, donde lo fácil es tirarse los trastos a la cabeza, utilizar el populismo, la demagogia. Es un momento de oportunismos para intentar desgastar al adversario y recuperar posiciones en la carrera que conduce al desarrollo del poder, no por el mérito propio sino por intentar hacer caer en el descrédito al adversario, pero cuando esto se hace, cuando el poder se antepone al uso noble que ha de hacerse de él, lo único que cae en el descrédito es la propia política, nuestra capacidad para resolver los problemas de la ciudadanía y para ser capaces de encontrar la salida del negro túnel de la crisis. Por eso quiero reconocer el trabajo de mis compañeros y compañeras en esta comisión, quiero reconocer su positivismo, su falta de oportunismo, su arrimar el hombro en aras del interés general, y no me cabe ninguna duda de que mantendrán esas nobles virtudes en el trabajo parlamentario sobre el nuevo proyecto de la ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación que en breve entrará en estas Cortes Generales. No lo manifiesto como un deseo, sino como la constatación de un trabajo, de su trabajo desde el primer día dentro de esta comisión, desde esa primera moción que aprobamos en la que decidimos de forma conjunta considerar la ciencia y la innovación desde el contexto del pacto de Estado. Son tiempos complicados, sí, pero son también tiempos de oportunidades. Para ello, hemos de ser capaces de analizar sin apriorismos los errores cometidos, y al decir esto me refiero a los colectivos, a los que afectan al conjunto de la economía y al empleo y no a los personales, grupales o de tal o cual Gobierno. Los grandes retos generales se definen bien por el documento programa de la Presidencia española del Consejo de la Unión Europea al que se le ha puesto, con acierto, el título de Innovando Europa. En este documento se cita textualmente: España ejercerá su Presidencia con la firme voluntad de reforzamiento y de transformación de la Unión. Se trata de innovar Europa, marcándose como claro objetivo impulsar la reactivación económica desde la senda de un crecimiento sostenible y generador de empleo. Para ello, la ciencia y la innovación están llamadas a ocupar un papel destacado de ese nuevo modelo productivo; ciencia e innovación que como siempre he oído en boca de esta ministra deben formar un tándem interrelacionado y ganador; un modelo productivo donde la ciencia y la innovación, junto a la tecnología, penetren transversalmente en todos los sectores tradicionales para fortalecerlos y actualizarlos en los nuevos paradigmas económicos del siglo XXI. Señora ministra, como miembro también de la Comisión Mixta para la Unión Europea, ya tuve el privilegio y la oportunidad de escuchar su intervención previa a la Presidencia española, de compartir su diagnóstico sobre los enormes cambios que se estaban produciendo en los liderazgos entre Estados en la economía mundial y sobre el desplazamiento previsible de los centros económicos mundiales si la Unión Europea no reaccionaba a tiempo. Y reaccionar a tiempo no es hacerlo solos y de manera desigual ya oímos voces que incluso se permiten criticar la existencia del euro. Es la credibilidad de toda la Unión Europea la que está en juego, la de todos, y por ello las respuestas deben ser globales, de los 27 países que formamos la Unión Europea. Es bueno para España que la nueva Comisión Europea haya adoptado el modelo español de integración de la ciencia y la innovación que se ejemplariza en su ministerio; y digo que haya adoptado el modelo español porque la citada comisión se ha creado casi dos años más tarde que su ministerio.

10 10 En la Comisión de la Unión Europea ya habló usted de esa quinta libertad basada en la libertad de circulación del conocimiento y del talento, y debo manifestarle que mi grupo está absolutamente de acuerdo con esa apreciación que se concreta en el ERA, el Espacio Europeo de Investigación, lo mismo que estuvo de acuerdo en que fuese una propuesta española en el Foro de Estoril la que instara a los países latinoamericanos a crear también el Espacio Latinoamericano de Investigación. El Grupo Socialista considera que, además de fomentar estas políticas en el seno de la Unión, tenemos también la responsabilidad moral que además determinará nuestro papel de liderazgo en el mundo de exportarlas a países en vías de desarrollo en una forma indirecta de fomentar la globalización de nuestro Estado del bienestar. Sí a la Europa del conocimiento, pero sí también a ser el motor del cambio en el mundo impulsando esta cultura del conocimiento. Como grupo político que apoya y sustenta al Gobierno, estamos totalmente de acuerdo con los ejes que marca desde su ministerio de integración, implicación e inclusión, que ya manifestó en la pasada comisión que he citado anteriormente. Sí a integrar políticas y estructuras globales en la Unión Europea que consoliden, dinamicen e incrementen el potencial científico de nuestro espacio común. Sí a la integración que supone ese Plan Europeo de Innovación, que se ve claramente reflejado en la nueva Estrategia de Innovación, con los 5 elementos que lo definen y que usted ya trasladó también a esta comisión con anterioridad. Sí a que usted fije esa Estrategia Común Europea para 2020; sí a la implicación colectiva de Estados y otros actores, entre los que quiero destacar la importancia que deben tener las pymes en este modelo, con la incorporación de la I+D+i a su actividad y el papel que debe desempeñar la ciudadanía europea, cada vez más conocedora y motivada con el papel que la ciencia debe representar en nuestras sociedades. Y hablando de ciudadanía, no puedo por menos que felicitar a la ministra por la magnífica iniciativa Agenda Ciudadana de Ciencia e Innovación, que acometerá el importante reto de recoger las aportaciones en materia de ciencia e innovación de millones de ciudadanos europeos, en el probablemente mayor ejercicio de práctica de innovación abierta realizado hasta el día de hoy en el mundo, y que nos acerca un poco más al concepto de open government que, más pronto que tarde, deben aplicar España y la Unión Europea. Sí, también, señora ministra, a esa implicación que supone pasar de las teorías científicas a la praxis, de la recuperación económica a la creación de empleo, y sí a construir un modelo económico que utilice la ciencia y la innovación como uno de sus pilares fundamentales. Sí a que este modelo económico tenga alma, y sí a las palabras que he recogido de la página web del Micinn, en las que usted manifiesta que la ciencia puede servir como instrumento en la lucha contra la pobreza y la exclusión social. Sí también a su intención, como máxima representante del Gobierno de España en esta materia, de que España trabaje y luche para ser reconocida en Europa como un país de ciencia. Sí a usted, señora ministra, por mantener siempre, en tiempos difíciles, el timón de este barco fletado por el Gobierno, cargado de ciencia e innovación en sus bodegas, y con usted como la mejor capitana posible para llevarlo a buen puerto. Para entonces, la tormenta perfecta por la que estamos atravesando solo será un mal recuerdo que no habrá servido nada más que para sacar lecciones que nos harán más fuertes con vistas al futuro prometedor que espera a nuestro país. Cuando despeje el germen de la ciencia y la innovación en nuestra economía, harán de España un país mucho más radiante. Gracias, señora ministra. El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, senador Salvador. Para contestar a las diferentes preguntas y observaciones que se han hecho por los portavoces, tiene la palabra la señora ministra. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Muchas gracias, señor presidente. Voy a ir contestando por turnos de intervención. Empiezo por el senador Alarcó. Yo también quiero agradecer su tono, y lo que intuyo es su verdadera intención, que es poder construir entre todos, junto a su grupo y al resto de los grupos parlamentarios, un auténtico sistema de ciencia e innovación que nos ayude en el futuro, pero que también nos ayude en el presente; y coincido con usted en la prioridad que supone esta ley de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación. Bien es verdad que hoy no es el día de hablar de la ley tendremos días para debatirla, pero sí me va a permitir que aproveche la ocasión que usted ha planteado de conectar la aproximación de la ley con la aproximación europea. De hecho, en nuestras propias reflexiones sobre las medidas que se deben impulsar con motivo de la Presidencia española de la Unión hemos querido guardar precisamente una alineación completa en nuestras propuestas en Europa y en nuestras propuestas en España, que será la mejor garantía de que funcione el sistema a posteriori, después de nuestra Presidencia, con una línea que nos haga progresar en ese Espacio Europeo de Investigación. Me voy a referir en concreto a algunas de estas líneas que recoge la ley y en las que estamos trabajando en Europa. La primera de ellas es la carrera para los investigadores, como lo reconoce la Carta Europea del Investigador, que se estableció unánimemente entre los países, según la cual las naciones que nos turnamos en la Presidencia de la Unión estamos obligados, responsablemente, a impulsar, y nos ha parecido que una medida concreta que deberíamos abordar es la necesaria movilidad de los investigadores en Europa, necesidad que también estamos atendiendo en España y que también está prevista en la ley. Una carrera donde estamos definiendo por ley espero que después del debate parlamentario sea uno de los consensos a los que lleguemos la mejora de la carrera investigadora a través de nuevos contratos, el reconocimiento laboral de los jóvenes investigadores con todos sus derechos sociales.

11 11 Es un debate que estamos llevando a cabo consensuándolo bien con Europa. Algunos países del norte han avanzado en este sentido, Francia también está impulsando este debate, y creemos que España puede liderar este debate en Europa con la legitimidad que le da el estar planteándolo en una nueva ley. Como sabe su señoría, la movilidad es una de las cuestiones que trata la ley, y una de las barreras a las que se enfrenta actualmente nuestro sistema es la movilidad dentro del sistema público, es decir, entre los organismos públicos de investigación y las universidades. La ley provee de pasarelas casi automáticas para este tipo de movilidad. Luego está la movilidad del sector público con el sector privado, que incidirá también en esa necesaria transferencia del conocimiento. También se habla de simplificación y de agilidad. Proponemos en la ley la creación de una nueva agencia estatal de investigación que precisamente persiga ese objetivo: un sistema de financiación más ágil y menos burocrático, que es exactamente en lo que estamos trabajando en Europa: en la simplificación del programa marco. También se persigue la integración de la ciencia y la innovación y en este punto voy a contestar a la senadora del Grupo Parlamentario de Senadores Nacionalistas, que es un debate que podemos liderar legítimamente en Europa por experiencia propia. Como usted ha señalado en esta materia, ni toda la ciencia se tiene que volcar en la innovación ni toda la innovación está basada en la ciencia; esto es lo primero que hay que entender. Por eso son dos debates distintos, pero hay muchos instrumentos comunes y una reflexión conjunta que necesariamente se tiene que acometer de la misma forma. Puesto que Europa ha avanzado en los últimos años en esa construcción del Espacio Europeo de Investigación, lo que le proponemos es que, ahora que uno de los retos es desarrollar la Estrategia Europea de Innovación, esta estrategia no empiece de cero. Ya hemos avanzado mucho con el Espacio Europeo de Investigación; tómense en cuenta estos avances avanzar en Europa tiene una complejidad que a nadie se nos escapa e identifiquemos las pasarelas que existen entre la investigación y la innovación. Senador Alarcó, sé que este es un eje que no solo le preocupa sino que le ocupa, y yo comparto esa ocupación y ese entusiasmo. Se trata de la divulgación y el acercamiento a la ciudadanía. Además, son medidas que tenemos que impulsar de forma bilateral, desde la ciencia a la ciudadanía, e implicar a la ciudadanía en las actividades científicas. Este también es un eje que estamos desarrollando en la ley. La ley amplía el concepto de mérito; vamos a pasar de un concepto de mérito investigador, que solamente prevé la publicación científica, a un concepto de mérito ampliado, donde también se tienen en cuenta las patentes, la implicación en actividades de cooperación al desarrollo, y se tiene en cuenta, de manera curricular, la implicación en actividades de divulgación de la ciencia y la innovación. Nos parece que esta es una necesidad del sistema. Respecto al telescopio, aunque este no es el ámbito porque no es una decisión comunitaria, sí me parece relevante y sé lo que le preocupa a usted y a todos porque, efectivamente, esta no es una cuestión de Canarias, sino que es de todo el país. Vamos a empezar por lo más importante, que es la implicación del Gobierno y su compromiso total para traer la infraestructura a España. Esto lo hemos hablado con el Gobierno de Canarias y hemos llegado a un acuerdo. Entendemos la dificultad por la que atraviesa la economía canaria. Aunque habitualmente siempre establecemos con las comunidades autónomas una aproximación financiera del 50% de la propuesta que se haga, comprendemos la situación de Canarias. Ustedes hacen una propuesta y nosotros la complementaremos hasta que sea una propuesta ganadora desde el punto de vista financiero. Cuáles son los pasos? En primer lugar, la presentación del proyecto científico-técnico y la defensa de las bonanzas de La Palma como ubicación para ese gran telescopio. En manos de quién está esto? No está en manos de los gobiernos, está en manos de los científicos y los técnicos, y yo quiero pensar que, puesto que uno de nuestros grandes organismos públicos de investigación es precisamente el Instituto Astrofísico de Canarias, con un gran astrónomo al frente, que es Francisco Sánchez Paco Sánchez, él es la mejor persona para defender, a nivel científico y técnico y ante la comunidad internacional, las bonanzas del cielo canario. Estoy convencida de que contamos con un gran activo, que es Paco Sánchez. Chile prevé no solo una ubicación, sino cinco, y en España la ubicación es La Palma Cuáles son los parámetros que determinarán esa valoración? Los parámetros son muy técnicos: el número de noches para poder observar y su calidad, la sismicidad del territorio, etcétera, es decir, aspectos relacionados con las condiciones geofísicas del territorio. Otra parte muy importante tiene que ver con el coste de mantenimiento, porque no nos olvidemos de que en una gran infraestructura de ciencia no solo hay que tener en cuenta la inversión sino el mantenimiento anual, y, según nos han dicho, también están valorando cuál es el coste anual del mantenimiento de esta gran infraestructura en una ubicación y en otra. También depende del acceso, y en este punto, que sé que es importante, el Gobierno de Canarias se compromete a construir buenos accesos para llegar. Lo que sí le puedo garantizar es que si con esas consideraciones La Palma tiene una buena calificación, la propuesta financiera va a ser una propuesta ganadora, y este es el compromiso que puede asumir el Gobierno de España, porque entendemos que es una gran infraestructura que ayudará a un desarrollo tecnológico. Es más, nosotros intentaremos que esa propuesta de candidatura sirva, además, para la implicación de nuestra industria en esa gran construcción, que es una de las misiones fundamentales de las grandes infraestructuras de la ciencia: la implicación de nuestro propio tejido industrial en la construcción de la infraestructura. Otra cuestión que quería resaltar es la de los proyectos emergentes, que es muy interesante. Me ha parecido entenderle que los proyectos emergentes se refieren a proyectos de investigación impulsados por investigadores no

12 12 tan consolidados, sino más jóvenes. Evidentemente, aquí, tanto para ellos como para las pequeñas y medianas empresas, la dificultad es la misma: la gran complejidad burocrática del programa marco, y en este punto la simplificación es clave. Tenemos la oportunidad de que la comisaria venga del Tribunal de Cuentas; no tiene gran experiencia en ciencia, pero lo que sí posee es una gran experiencia en cuentas y, por tanto, en lo que sea factible cambiará y simplificará, y su gran compromiso es que esta sea una de sus prioridades en los próximos meses. También es importante para los jóvenes investigadores que se les ayude a tener una voz no solo en la comunidad autónoma y en el Estado, sino directamente en Europa, y para eso estamos consolidando el Consejo Europeo de Investigación, que es una institución que únicamente financia la excelencia científica europea, y ahí tenemos un buen dato: por primera vez, en la convocatoria de jóvenes investigadores hemos sido el cuarto país de Europa en recibir talento internacional. Quiero decir que estamos impulsando que haya para los jóvenes las mismas oportunidades que para los seniors sobre la base a su capacidad, ayudándolos también a eliminar esas trabas. En lo que respecta a Euskadi, y a cualquier otra comunidad autónoma, cómo podemos trabajar en el plano territorial, en el plano estatal y en el plano europeo? En primer lugar, es algo que la ley prevé: la mayor implicación de las comunidades autónomas precisamente en esa estrategia estatal de ciencia. La innovación es una competencia de las comunidades autónomas, y la vocación del Gobierno y de este ministerio, que está plasmado en la ley es: cómo podemos ayudar a las comunidades autónomas a desplegar de una forma más eficiente e internacional sus propias estrategias de innovación? En este plano es muy importante la relación bilateral con las comunidades autónomas, pero también lo es que el Estado asuma esa potencial coordinación de acción internacional. Pongo un ejemplo: el coche eléctrico, algo en lo que estamos actualmente. Se desarrollarán sus capacidades científicas y tecnológicas, pero existe un tejido industrial especialmente implicado e interesado en el coche eléctrico en varias comunidades autónomas. La acción del Gobierno, no solo a nivel industrial sino al nivel de la ciencia, es saber cómo coordinar esa acción entre las comunidades autónomas para poder defender esa voz en Europa. Mi intención en el Consejo de Ministros de San Sebastián de desarrollar esa ciencia más implicada, y poniendo como ejemplo el coche eléctrico, me llevó a la siguiente reflexión. Si Europa decide que el coche ecológico forma parte del Plan Europeo de Recuperación Económica, esta decisión ya está tomada, por tanto, pasa a ser un proyecto estratégico europeo. Yo les planteaba a mis colegas: si la ciencia europea no se implica en los grandes retos industriales, siendo este un ejemplo, estos retos industriales se van a acometer igualmente, pero se van a acometer sin ciencia europea. O sea, estamos abriendo la puerta a una ciencia, pero la ciencia se está desarrollando en Asia y en Estados Unidos. Luego el conocimiento se desarrollará, pero es responsabilidad de los ministros de Ciencia organizar los programas y orientarlos hacia los grandes retos industriales. Hemos querido poner un ejemplo, y sabemos como usted ha indicado que algunos programas son complejos y difíciles de implementar, pero antes de cuestionar la dificultad pongámoslos en marcha, vamos a ver la experiencia andando, vamos a ver dónde están las dificultades y vamos a intentar solucionarlas o vamos a proponer modificaciones, pero no cuestionemos la complejidad antes de probarla que es algo a lo que tendemos en Europa, y siempre con el compromiso de eliminar los instrumentos que no funcionen antes de proveerlos de alguno nuevo. Y la senadora Aleixandre? La señora LEANIZBARRUTIA DE BIZKARRALEGO- RRA: Se ha tenido que excusar porque tiene gente esperándola y ha ido a atenderla. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): En ese caso, la contesto después, en la segunda intervención. El señor PRESIDENTE: Sí, si aparece. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Si no aparece, haré algunas consideraciones en relación con su intervención. Gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, señora ministra. Vamos a abrir un segundo turno de portavoces, siguiendo el mismo orden del primero. Tiene la palabra el senador Alarcó. El señor ALARCÓ HERNÁNDEZ: Muchas gracias, señor presidente. Muchas gracias, señora ministra. Esta tarde se ha abierto un debate muy interesante, y me siento muy feliz de que se desarrolle en estos términos. Me gustaría hacer algunos comentarios breves, que no simples, respecto a la ley, respecto a la relación con Europa y respecto al gran telescopio de Europa, que sí es Europa en estos momentos porque España ocupa la Presidencia europea y depende, no de los Gobiernos, sino de la ESO, que es una organización técnica que elabora un informe técnico. Pero le voy a explicar por qué se lo digo. Creo que usted lo sabe, pero no es lo mismo decirlo en una comisión que en un pasillo, como usted tan amablemente nos ha permitido hacer tantas veces con toda normalidad. Creo que ha llegado el momento de relacionar la investigación con la ética no con la religión y esa ley debe transmitirlo así. Puede haber investigación sin ética y a la inversa. Lo digo con rotundidad, porque detrás del PIB de un país emergente como China, que casi está duplicando al de España, hay 300 millones de pobres. Por tanto, hay que crear factores correctores respecto de qué significa PIB-investigación. Habrá que preguntarse cómo está la sociedad en ese país emergente, independientemente de que se investigue mucho. Lo digo muy convencido. No

13 13 estoy hablando de religión sino de ética y creo que es el momento de hacerlo, porque en esos países emergentes, detrás de la investigación, se están cometiendo atrocidades sociales, no por la ciencia, sino por el olvido de la pobreza. Y no hago nada de demagogia, no la he hecho nunca y no tengo ya edad para hacerla en este tema. Por eso, estoy muy feliz de que se haya suscitado. El PIB tiene que corregirse. No es un índice absoluto y cada vez es menos indicativo, y, respecto a la investigación, sin duda. El senador Luis Salvador la ha nombrado a usted capitana. (Risas.) Creo que ministra es mucho más que capitana, pero usted sabrá la carrera que quiere hacer dentro de su partido. Calculo que la ministra no lo necesita, pero lo digo porque el Senado también es compatible con el buen humor y con la normalidad de la gente. Yo me expreso como soy y eso no le quita ningún valor o le minimiza. Si somos capaces de llegar a un consenso y consenso significa lealtad, creo que podemos conseguir un gran texto transformador. Si bien todavía no lo es, señora ministra. Debo decirle que lo he estudiado de verdad no es muy difícil, creo que es un buen texto y el Partido Popular lo puedo decir con autoridad porque en estos momentos lo estoy representando y he hablado con quien tengo que hablar, con quien sabe de ciencia en mi partido está dispuesto a apoyarlo, siempre y cuando logremos conseguir en los trámites parlamentarios esa lealtad que se necesita, separarlo de la propaganda y llevar a cabo unos cambios que merecen la pena y que, por cierto, generalmente suponen coste cero y son más conceptuales que otra cosa pero que implican compromiso. Esto es importante, señora ministra, porque vamos a sustituir la Ley de 1986 que no la hizo el Partido Popular pero no tenemos ningún problema en reconocerlo, por esta nueva ley que, se aprueba si por consenso, va a perdurar en el tiempo y va a estar por encima de las ciscunstancias, de que tengamos la Presidencia europea, etcétera. Respecto al gran telescopio europeo, lo relaciono con Europa directamente, primero, porque se aprobó por unanimidad. Tenemos una oportunidad histórica, como dije ya en octubre. Sé que usted como ministra y como científica tiene entusiasmo por la cuestión, de hecho cambió de tono al referirse a él, que era un poco monocorde. Estoy hablando de su Gobierno y no quiero criticarlo pero sí le exijo, con mucho respeto, que se implique, que el señor Zapatero diga en público que queremos el gran telescopio en Europa; y no digo que tenga que ser en La Palma, aunque vaya por delante que me siento orgulloso de ser canario, pero en estos momentos no lo defiendo por ser canario, sino por ser investigador, por ser científico, por ser político y por ser ciudadano de Europa. Conozco el compromiso existente, porque estoy siguiendo muy de cerca esta cuestión. El profesor Sánchez somos de disciplinas distintas pero le conozco muy bien es un gran interlocutor. Estoy refiriéndome a una ofensiva diplomática, que no tiene que ver con ciencia e innovación. Usted hace muy bien la ofensiva diplomática. Siendo un representante del Partido Popular, le reconozco públicamente que la hace bien. Lo que le estoy diciendo como senador es que me gustaría poderle exigir, con todo el respeto, una implicación diplomática como la que está llevando a cabo Chile. Chile está a o kilómetros de Europa y ya se sabe que allí los proyectos vitales de los investigadores resultan dificultosos. Y para investigar hay que tener proyectos vitales importantes: hijos, pareja, etcétera, y a Europa le cuesta tenerlos en aquel país. Chile está muy lejos científicamente de nuestro cielo. Ni España ni los canarios hemos hecho nada por tener este cielo. Nos tocó, aunque tuvimos una tragedia desde el punto de vista climático, pero tenemos el mejor cielo astronómico. Tenemos una seguridad desde el punto de vista de clima científico, que ya está ganado. Esto es lo que pido y por eso lo traté respecto de Europa. Me extrañó que usted no lo tuviera en la agenda, aunque tampoco es quien marca la agenda europea. Le digo que estamos a tiempo, usted sabe que se está haciendo ese informe de la ESO. Recuerdo que me dijo una vez que hay que tener prudencia diplomática, me lo dijo en octubre tengo buena memoria, y se lo acepté, pero creo que ese tiempo ya ha pasado. Chile está haciendo una ofensiva diplomática terrible. Ya no se trata solo de los 300 millones de euros que se pueden poner sobre la mesa, de los que Canarias, aunque tenga dificultades, también ha puesto una parte. Desde el punto de vista del acceso, nuestras infraestructuras usted las conoce, yo la he visto allí, en comparación con las de Chile no las conozco directamente pero las he estudiado con profundidad, son mejores. El observatorio del Roque de los Muchachos es mejor en todos los sentidos. Por cierto, estratégicamente sería un punto definitivo para España y para Europa que fuera en Canarias. Y creo que eso hay que aprovecharlo. Lo digo también porque tenemos la triste experiencia de haber perdido el acelerador de partículas, que pudo haber sido instalado en Barcelona pero se fue a Suiza, por muchos motivos que no voy a echar en cara a nadie. Que no nos ocurra ahora igual, porque nos vamos a quedar 20 años atrás. El Grantecan supone una industria española muy buena, pionera, desarrollo de I+D, creación de muchos puestos de trabajo, etcétera. Por tanto, a Europa, a España, a Canarias le viene muy bien y por eso lo digo. Y lo que le estoy pidiendo no es que usted aplique la ciencia y la innovación sino su ciencia e innovación para que la diplomacia se mueva. Usted es la primera espada, pero, más aún, hay que reunir a todos los ministros del ramo, llevarlos a donde haya que llevarlos, reunirse 10 veces y desarrollar una estrategia diplomática profunda, porque estoy convencido de que, tristemente, la estrategia diplomática va a pesar mucho al final sobre la estrategia científica y, sin duda, la mejor elección es el Roque de los Muchachos, en Canarias. Muchas gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senador Alarcó. Tiene la palabra la senadora Leanizbarrutia.

14 14 La señora LEANIZBARRUTIA DE BIZKARRALEGO- RRA: Muchas gracias, señor presidente. Vaya por delante que voy a apoyar a los canarios, senador Alarcó. Señora ministra, en un foro de economía y empresa, un ilustre abogado del Estado comentaba que, generalmente, el Estado no suele estar entre las mejores empresas del mundo, no ocupa los mejores rankings, pero que el Estado tiene que saber venderse porque hay que tener amigos que a la hora de la votación puedan creer en uno. Por tanto, hemos de esmerarnos en llegar a esos foros, y no es que otros sean mejores que nosotros, sino que han sabido llegar a esos sitios para luego aparecer en los rankings. En ese juego de quién es el mejor también hay mucho marketing y mucho saber llegar. Cuando visitamos el Grantecan, di mi palabra tanto a Paco Sánchez como a Pedro Álvarez de que nosotros defenderíamos la instalación de ese observatorio astrofísico en Canarias. Pero, primero, que no se vaya a pensar el senador Alarcó que es por interés, porque cuando estuve en Canarias, observé que había muchas empresas de Vitoria, de Guipúzcoa, etcétera. Por tanto, señora ministra, entiendo que el que se instale en Canarias resulta vital para toda la industria del Estado, porque seremos promotores en la construcción de unas instalaciones pioneras en el mundo. En cuanto a infraestructuras, en la era de la información lo mejor es la banda ancha y tener buenos satélites. En ese aspecto, no creo que lo físico sea lo más importante. Por eso, mi grupo parlamentario cree que el Instituto Astrofísico de Canarias es fundamental porque muchas empresas del Estado han demostrado un saber hacer, un saberse adaptar, ser innovadoras y generar un impacto económico y en la industria impresionante. El Instituto Astrofísico no es solo para ver las estrellas, sino que tiene un impacto real en nuestra economía. Yo quisiera que el señor Alarcó dijese a Paco Sánchez y a Pedro Álvarez que los he defendido aquí, y que les pido expresamente que lo defiendan porque ahí también están las txanponas de nuestra empresa y de los vascos. Señora ministra, le he preguntado por los grandes parques científicos en Euskadi. Quisiera saber expresamente a cuál quieren dar ustedes más fuerza desde el Estado y, también, desde la Comunidad Autónoma del País Vasco, ya que los Gobiernos de ambos coinciden. Y me va a perdonar pero me tengo que ausentar; si me da tiempo la escucharé y, si no, ya leeré su respuesta. Eskerrik asko. El señor PRESIDENTE: Gracias, senadora Leanizbarrutia. No está presente la senadora Aleixandre. Por tanto, decae el turno de la portavocía del Grupo Parlamentario de Convergència i Unió. Tiene la palabra el senador Luis Salvador. El señor SALVADOR GARCÍA: Muchas gracias. Como sabe mi estimado compañero y portavoz del Grupo Popular en la comisión, el señor Alarcó, yo la he hecho capitana del barco de la recuperación económica, con bodegas cargadas de ciencia e innovación, y donde manda patrón, no manda marinero ni ministro. (Risas.) Dicho esto, y estando de acuerdo en que ocupa un papel importante, yo quisiera decir algo en relación con la apuesta del Gobierno de España por el Telescopio Europeo Extremadamente Grande y, también, de todos los grupos parlamentarios en el Senado, porque hicimos una visita donde manifestamos nuestro apoyo con declaraciones, ruedas de prensa, etcétera. Y aquí está el presidente de la comisión que allí mismo habló sobre este asunto. También me gustaría resaltar, porque es oportuno, que cada vez que tenemos un gran objetivo parece ser que borramos de golpe todo lo que ya se ha hecho y no lo ponemos en valor. Y luego si la cuestión no sale adelante, en ocasiones caemos en la frustración. Sería bueno que el Partido Popular, Coalición Canaria, las personas que están dirigiendo políticamente la isla manifestaran claramente la apuesta que el Gobierno de España ha hecho desde hace mucho tiempo por ese espacio, por La Palma, por Tenerife, y por la astronomía para que, precisamente, haya empresas que desarrollen productos que puedan generar empleo porque, de otra forma, simplemente estaremos en cualquier materia a la última, y dependiendo de que salga o no salga, podremos ser incluso hasta fracasados. Por tanto, el Gobierno de España ya ha hecho algo muy importante y se trata simplemente de continuar con el compromiso, coger la bandera de la reivindicación que ya existe en La Palma, en Canarias, en España y, también, en esta Cámara y en esta comisión, e intentar sacarlo adelante con la mayor de las fortalezas posible. Y ojalá que consigamos cumplir el objetivo, pero también es justo reconocer lo anterior. Con respecto al borrador de la ley de la ciencia que ya tenemos en nuestras manos, no iba a entrar en ello de hecho, es la primera vez que traigo una intervención escrita favorecido por haber escuchado su intervención sobre la Unión Europea y los objetivos no podían variar mucho, en todo caso alguna información nueva y añadida pero podemos opinar. Creo que la nueva ley de la ciencia está siguiendo los pasos adecuados. Primero, porque desde el comienzo de su elaboración se abrió a un grupo de personas que tenían que realizar aportaciones y construir ese esqueleto. Me consta que el borrador de los borradores del proyecto de ley que ahora ya tenemos en nuestras manos ha pasado por muchísima gente que tenía algo importante que aportar y con lo que enriquecer dicha ley. Y aunque nos hubiese gustado que hubiera venido antes, creo que ha llegado en el momento político oportuno porque probablemente ahora seamos capaces de hacer una ley mejor. Por tanto, sintámonos contentos porque, como digo, llega en el momento adecuado. En este sentido se nos dijo y estoy de acuerdo con el señor Alarcó que hay que huir del autobombo, pero hay que dar a esta ley la importancia que merece y que le debemos dar todos porque va a ser patrimonio del Gobierno, evidentemente, pero también de todos los partidos. Y ha venido en el momento justo porque tenemos la oportunidad de presentar propuestas antes de su discusión en el Consejo de Ministros que, según anunció el presidente del Gobierno, será en torno al 12 de marzo,

15 15 sin olvidar que después entrará en las Cortes Generales para su tramitación. Aquí desarrollaremos nuestra labor de interlocutores con la ciudadanía, con los agentes económicos, sociales, con los investigadores, siendo inicialmente sus oídos y luego su voz en la tramitación del proyecto de ley. Es una ley que debe aprobarse con el mayor de los consensos. Me encanta la voluntad de los partidos y resalto la del Grupo Popular. Todo el mundo puede entender por qué; porque esta es una ley que nos va a tocar gobernar y gestionar a todos. El ejemplo lo tenemos en que la anterior ley era de Como se suele decir, tonterías las justas, es algo muy importante lo que nos estamos jugando. En esta comisión siempre ha imperado la sensatez y el Gobierno está dando los pasos adecuados para que todo se haga razonablemente bien. Aquí va a contar con nuestro apoyo, siempre que las reglas del juego sean las que se están manteniendo. Y felicito de nuevo al Grupo Popular y al resto de los grupos parlamentarios porque están demostrando sensatez política. Si los ciudadanos vieran que también con la política se puede alcanzar el consenso, seguramente valorarían más nuestro trabajo y seríamos menos vituperados entre la población. Gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senador Salvador. Para responder a las diferentes observaciones, tiene la palabra la señora ministra. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Muchas gracias, señor presidente. Senador Alarcó, voy a centrarme en las dos cuestiones que ha mencionado. Respecto a relacionar la investigación con la ética, es un aspecto absolutamente clave, tan clave que, como sabe, la ley recoge un nuevo comité de ética que debe tratar no solamente la dimensión ética de la investigación, sino las prácticas de la investigación que necesariamente tienen que ser éticas y todos los aspectos que tienen que ver con buenas prácticas, fraude, etcétera. Aspectos tan amplios, todos ellos éticos y que, como muy bien ha señalado usted, no tienen nada que ver con la religión. La ética en sí es una consideración necesaria para el avance de la ciencia y para la integración en esa internacionalización que necesitamos todos. Creo que los aspectos éticos tienen que tratarse desde España hacia Europa y desde Europa al resto del mundo por el bien del progreso científico y, por lo tanto, de la humanidad. Respecto al gran telescopio, la estrategia diplomática es importante, pero lo que no debemos saltarnos nunca por respeto, ni en esta ni en cualquier otra infraestructura, son los criterios científicos y técnicos. Estos son los primeros, esa es la clave. De hecho conozco alguna experiencia, cuando hay una sobreactuación diplomática y hay una percepción de que se empieza a actuar por encima de los criterios científicos y tecnológicos, es contraproducente. Es importante que mantengamos esa dimensión de esperar a la valoración científico-tecnológica y de ubicación como tal ubicación. Y ahí, créanme que tenemos preparada la mejor de las percepciones porque España es una potencia científica en astronomía; somos la octava potencia mundial en astronomía. Creo que la apuesta es indiscutible. Acabamos de inaugurar en el mes de julio el mayor telescopio óptico del mundo. Y eso es una clara apuesta del Gobierno de España por la astronomía y, concretamente, con esa ubicación privilegiada que tenemos en La Palma. Y ese compromiso seguirá existiendo, o sea, independientemente de cuál sea el resultado final que esperemos sea positivo, ese compromiso seguirá existiendo porque es una singularidad, una capacidad específica de nuestra ciencia y, desde luego, la defenderemos siempre, con independencia del resultado. Por último, voy a finalizar con lo que usted ha empezado: la lealtad. Desde luego, tiene mi absoluto compromiso, el mío y el de todos los miembros de mi ministerio, de que vamos a trabajar con absoluta lealtad y con un objetivo de consenso, porque si esta ley consigue los objetivos que ambicionamos todos, necesariamente tiene que nacer desde el consenso. Por eso estamos dedicando esfuerzo y tiempo para integrar todas las reflexiones y aportaciones no solamente de las asociaciones científicas, de los jóvenes investigadores, de los agentes sociales y económicos, que es clave, sino que de forma previa hemos querido incorporar las aportaciones de los grupos parlamentarios y se lo agradezco en sede parlamentaria a todos los grupos políticos porque queremos que sea una ley de todos. Una ley donde esté incluida la visión del Parlamento, que nos parece que es el mejor compromiso que podemos demostrar a nuestra sociedad por la ciencia. La senadora Leanizbarrutia se ha ido pero como ha tratado este tema a colación del telescopio, sí me gustaría hablar de lo que ella ha señalado y simbolizado con el Grantecan, que es la industria de la ciencia, la oportunidad que tiene nuestro país en desarrollar la industria de la ciencia detrás de esta gran apuesta que tenemos por el mapa de instalaciones científico-técnicas singulares, un mapa que ha comprometido una inversión en nuestro país de 3800 millones de euros en colaboración con las comunidades autónomas. Además, no solamente es una oportunidad tecnológica para desarrollar una industria de la ciencia, sino que estamos convencidos de que van a ser unos nuevos agentes también se contemplan como nuevos agentes de la ley de la ciencia que van a ser en sí un modelo de cooperación público-privada, porque tienen que tener un plan estratégico viable, de servicio a la sociedad y con implicación de la industria, y pensamos que en sí es un modelo que va a funcionar en esta nueva economía que estamos dimensionando. Y desde luego el Grantecan, que junto al sincrotrón Alba de Barcelona y a la Fuente de Neutrones por Espalación son las tres infraestructuras más grandes que está desplegando ahora mismo nuestro país, y es una verdadera oportunidad para la industria y ya lo estamos demostrando: empresas que han participado en la construcción del Grantecan o en la construcción del sincrotrón Alba de Barcelona están ganando concursos a nivel internacional en la construcción de infraestructuras europeas, porque Europa ha comprometido de euros para la construcción de 44 infraestructuras en Europa. Y esta es una oportunidad para nuestra industria, nuestras

16 16 empresas de construcción y nuestras empresas de ingeniería. O sea, que ahí debe haber un máximo compromiso con el desarrollo de esta industria de la ciencia. Antes de contestar a la senadora Aleixandre aunque me gustaría escucharla para contestarla definitivamente, quiero agradecer al senador Salvador, primero, su apoyo al proyecto del Gobierno, su apoyo al proyecto del ministerio y a la forma de interactuar con el ministerio. Nos ayuda mucho, senador y yo se lo quiero agradecer, esa labor y esa misión que realiza de consenso parlamentario a la interlocución con el ministerio porque es muy activo en promover foros, comidas, encuentros, debate, diálogo, y esto siempre es por el beneficio del sistema y, desde luego, nos ayuda en la discusión y espero que se refleje en el consenso. Así que muchísimas gracias. Si le parece, presidente, escuchamos a la senadora Aleixandre y, luego, ya le contesto. O le contesto primero? El señor PRESIDENTE: Creo que cuando respondió usted en la primera intervención, no estaba la senadora. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INNOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Es verdad, tiene razón. Por lo tanto, voy a responder a las preguntas de la senadora Aleixandre. En primer lugar, respecto a algunos de los aspectos que ha tratado, como el tema de la movilidad versus fidelización, yo creo que es importante entender todo lo que necesitamos. Necesitamos más vocaciones entre nuestros jóvenes; más jóvenes que se dediquen a la investigación, esto es, más vocaciones. Necesitamos más movilidad, porque movilidad significa, primero, la necesaria formación para los investigadores, que sin movilidad no pueden formarse. La movilidad es obligatoria en el mundo de la investigación. Además, movilidad significa también conexión internacional, porque allí donde se desplazan nuestros investigadores son nuevas conexiones con otros grupos de investigación, y su regreso o el regreso de otros investigadores con los que han conectado significa de nuevo esa necesaria red por la que tenemos que trabajar. Y, desde luego, atracción y retención del talento. Por tanto, las cuatro incógnitas de la ecuación que tienen que llegar a una buena resolución son: más vocaciones, movilidad, atracción y retención del talento. Creo que están bien desarrolladas en la ley y esta es una máxima para el sistema de ciencia. Respecto al tema de los gestores, yo suscribo absolutamente sus palabras y la necesidad y el impacto que pueden tener en el sistema. En cuanto a la gestión del conocimiento, en España estamos trabajando en dos planos: en primer lugar, en la profesionalización de las oficinas o unidades de transferencia de tecnología, con programas específicos y programas que los lleven a una acreditación profesional estándar donde podamos pedir una serie de requisitos que también nos ayude al reconocimiento internacional. Pero también hemos querido poner en marcha una medida de corto plazo y que además nos sirva de prueba, que es la incorporación de gestores en los grandes grupos de investigación, y como tenemos un programa que, digamos, intenta identificar la excelencia en nuestra ciencia, el Programa Consolider, hemos convocado una ayuda donde financiamos perfiles de gestores con formación científica, pero con experiencia en gestión de la cartera de propiedad intelectual y en acuerdos con la industria. Tenemos que evaluar el resultado, pero la iniciativa está en marcha. O sea, yo creo que esto es una necesidad del sistema y veremos cómo funciona, pero, en principio, es una buena iniciativa. Respecto a Europa, esta consideración de gestión de la ciencia, que también es una clave identificada en Europa, se podrá abordar en esta decisión que ya hemos tomado esperamos que sea una decisión formal de reforzar la acción de los recursos humanos en Europa. Y entre los diferentes perfiles de recursos humanos estarán los gestores del conocimiento. Y brevemente, en relación con la igualdad, evidentemente los países no podemos desperdiciar el 50% del talento. Esto es una obviedad, primero, porque no es justo y, segundo, porque no es rentable económicamente. O sea que por los dos motivos cada uno como quiera analizarlo tenemos que trabajar por una igualdad real, porque la igualdad o es real o no es igualdad. Y tenemos que garantizar la igualdad de oportunidades en todos los sentidos y valorar y evaluar el progreso de las políticas. Y en esto tiene mi absoluto compromiso con que actuaremos a nivel nacional y a nivel europeo. Y ahora tiene usted la palabra, con el permiso del presidente, que espero se la dará a continuación. El señor PRESIDENTE: El presidente se la va a dar de forma excepcional porque usted debe comprender que no es normal que el curso de una sesión parlamentaria se supedite a ese cacharrito que se llama teléfono móvil que no sé por qué razón se ha convertido en un factor prioritario, o sea, ha roto todas las jerarquías en la conducta cívica de las personas. Tiene usted la palabra. La señora ALEIXANDRE I CERAROLS: Muchas gracias, señor presidente. Sé que es una excepción. Le doy las gracias personalmente y también a todos los grupos por habérmelo permitido. Más que por el teléfono móvil, el motivo ha sido que como somos representantes de una población determinada, me estaban esperando 60 personas entre 17 y 18 años de mi zona que han venido a ver el Senado, y he querido aprovechar para decirles con quién estaba, que estamos haciendo una ley de ciencia y qué es lo que hacíamos. Era importantísimo comentarlo. (Risas.) Lo dicho no quiero que sirva de excusa porque no la hay pero a veces las circunstancias son las que son. De nuevo muchísimas gracias a todos. Señora ministra, yo estoy de acuerdo con todo lo que usted ha dicho. Ya sabe que normalmente estamos en casi todo de acuerdo. No me ha respondido a la pregunta que le formulé sobre el Programa Artemis y la Plataforma Artemisia y, al igual que el ITA 2, me gustaría saber si ustedes van a dejar estos programas tecnológicos en segundo lugar o no.

17 17 Nos gustaría tener más información sobre los programas Consolider ya que, como le he expresado, una de las asignaturas pendientes que queda es la transferencia tecnológica y es importante la gestión de esa transferencia, y en algunos sitios, las grandes universidades y los grandes grupos lo tienen más o menos solucionado, pero en las pequeñas ciudades como la que yo represento, que es la de Girona, esta asignatura está todavía pendiente. Por lo tanto, es uno de los temas en los que me gustaría que se incidiera, si no ahora, más adelante de una forma o de otra. De nuevo, quiero darle las gracias por su atención y por su presencia en esta Casa. Ya sabe que siempre no solo es bien recibida sino que esperamos tenerla más veces por aquí porque la ley de la ciencia es muy importante para todos: los que estamos aquí, los que tienen que venir y los que vendrán de uno y otro grupo pues son los que van a gestionar este país, y este país no se podrá gestionar si no es con ciencia e innovación. Gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias, senadora Aleixandre. Para cerrar este turno de intervenciones, tiene la palabra la señora ministra. La señora MINISTRA DE CIENCIA E INOVACIÓN (Garmendia Mendizábal): Gracias, señor presidente. Brevemente. Concretamente Artemis es una JTI una Joint Technology Initiative donde interviene el programa marco, pero en este aspecto interviene directamente el ministerio con sus fondos. La idea es seguir apoyando las JTI, pero ese es un ejemplo de programa que tiene una complejidad gestora extrema, diría yo. Ahora mismo estamos volcados en el estudio de esa burocracia innecesaria, aunque en este caso ni siquiera es un exceso de burocracia, es una complejidad que no hace posible avanzar con el objetivo de la iniciativa. O sea, estamos enfocándonos ahora en la evaluación para poder hacer las modificaciones pertinentes a fin de mejorar la propia iniciativa. Pero el compromiso con las iniciativas en marcha es total. Y respecto al Consolider, es un buen ejemplo de cómo queremos avanzar en España y en Europa, de qué es lo que estamos impulsando, que es pasar de un sistema que a priori es muy intervencionista quiere decirse que pedimos muchos papeles al inicio, en el medio y al final a un sistema de confianza, donde hemos identificado grupos excelentes, con unos presupuestos muy importantes, pero necesariamente ahora en lo que sí vamos a avanzar es en la rendición de cuentas. Para esto, como para cualquier iniciativa potente en investigación, todas en general, pero con más motivo aquellas que son muy potentes desde el punto de vista presupuestario, porque es nuestra responsabilidad como administradores públicos, vamos a avanzar en la rendición de cuentas y evaluaremos todos los Consolider, los Ciber, las grandes iniciativas de ciencia. Queremos avanzar, no de forma inmediata, pero sí avanzar con el propio sistema científico en esa reflexión de cómo acompasamos los buenos resultados con una adicionalidad en los fondos o con una reestructuración de los fondos, porque lo que no podemos permitir es que la evaluación no tenga impacto. Si creemos que la evaluación es clave, la evaluación tiene que tener un impacto en el siguiente paso a la construcción de nuestro sistema científico. Es en esta reflexión en la que estamos avanzando por la parte de la consolidación de la excelencia científica, y por la parte de la transferencia de los resultados, el poder incorporar perfiles gestores de confianza de los grupos de investigación, porque es muy importante: son ellos a los que les hemos dado la oportunidad de elegir a esos gestores, son personas que hemos sugerido que participen en sus propias reuniones semanales de ciencia para que identifiquen las posibilidades que puede haber de proteger adecuadamente los resultados en el campo de las patentes, pero a la vez poder iniciar conversaciones para transferir ese conocimiento al sector productivo. Muchísimas gracias, presidente. Muchas gracias de verdad, de corazón, a todos por el tono y por cómo se desarrollan estas sesiones, que espero que sean por el bien de nuestro sistema de ciencia e innovación. Muchas gracias. El señor PRESIDENTE: Gracias. Se levanta la sesión. Eran las diecisiete horas y cincuenta y cinco minutos.

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