DELEGACIÓN INAH MORELOS. Zona Arqueológica de Piedra Grande, Cuautla, Morelos.

Transcripción

1 DELEGACIÓN INAH MORELOS Cuernavaca, Mor. a 7 de julio del Zona Arqueológica de Piedra Grande, Cuautla, Morelos. Arqlgo. Raúl Francisco González Quezada La zona arqueológica Piedra Grande se localiza en Cuautla, dentro de un predio ubicado en la esquina de la Carretera Cuautla-Izúcar y Avenida del Ferrocarril. Está comprendida fundamentalmente por un conjunto sígnico de petrograbados efectuado en momentos previos a la invasión española, colocados en la cara oriental de un fenómeno pétreo de basalto localmente conocido como Piedra Grande, en ausencia contextual inmediata de material cerámico o lítico sobre superficie. Debido a sus dimensiones consideramos que el soporte pétreo difícilmente ha sido trasladado de su lugar original desde el momento de realización del proyecto sígnico petrograbado. Solamente una de sus secciones fue utilizada para la elaboración de los petrograbados, esta observa al noreste, donde en la inmediatez se localiza el Río Cuautla y el horizonte se advierte el Popocatépetl. Los petrograbados fueron realizados por especialistas en la cosmovisión de su sociedad y tanto la elección de la piedra, de la sección específica y los signos elaborados fueron procesos sancionados por el sistema de valores de ese grupo social. Nuestro Delegado, Arqueólogo Mario Córdova Tello decidió que el elemento pétreo era factible de ser removido y nos instruyó a que asumiéramos un proceso de Rescate Arqueológico, ya que su experiencia en contextos similares ha derivado en el hallazgo de ofrendas directamente asociadas a petrograbados en la Zona de Monumentos Arqueológicos de Chalcatzingo. La razón fundamental del traslado del soporte pétreo deriva de la intención del particular de comercializar su terreno, y para la conservación de la misma éste asumió la responsabilidad de garantizar su conservación en el estado en el que actualmente se encuentra. Se planteó un proyecto general que consta de tres fases. La primera se ha realizado a finales de mayo y principios de junio y constó por un lado, del registro de las magnitudes y calidades del soporte pétreo, así como de los signos petrograbados en Piedra Grande; por otro lado se realizó un proceso de excavación arqueológica. Los hallazgos resultaron exiguos y nos mostraron la ausencia de prácticas rituales asociadas a la matriz directamente relacionada con los signos petrograbados. Ahora sabemos por deducción negativa, que no había

2 tales prácticas, que éstas se concentraban fundamentalmente en la superficie visible de la piedra. La segunda fase fue la remoción del soporte pétreo, su izamiento y traslado al sitio final al este de su punto actual, a no más de 200 metros, lo cual se realizó el día 6 de julio con impecables resultados de traslado. Se aseguró la conservación de los signos petrograbados en el soporte pétreo, así como su orientación general en el nuevo punto. La tercera fase consiste en la producción y colocación de una cédula de comunicación con el visitante que contenga los elementos básicos derivados de la investigación realizada con motivo del rescate arqueológico que está en proceso de realización. Cabe mencionar que se encuentra en construcción un elemento arquitectónico de planta circular que protegerá al soporte pétreo, le brindará un área de amortiguamiento para evitar que el visitante la toque, pero al mismo tiempo permitirá su observación clara e informada. En el estado de Morelos, este tipo de traslados ya se han realizado con anterioridad, los tres grandes petrograbados que se encuentran actualmente en la zona arqueológica Cuauhnáhuac, fueron trasladados desde parajes cercanos en que se veía en entredicho su integridad, y se reubicaron a un espacio de exposición permanente al público. También contamos con la experiencia de los cinco petrograbados que se localizan actualmente en el pórtico de la Ayudantía de Tejalpa, Municipio de Jiutepec, Morelos, que también fueron trasladados hasta el lugar que ahora se localizan desde parajes locales. La diferencia magnitudinal relevante es que el soporte pétreo en esta ocasión removido resulta el de mayor peso, su registro total fue de kg y el procedimiento transcurrió a lo largo de todo un día de movimientos y ajustes del proceso que requirió de maquinaria y equipo de trabajo altamente especializados. Entre los signos que hemos logrado registrar de los petrograbados de Piedra Grande de destacan el de una planta de maíz con mazorca, estigma, tallo y hojas, que se yergue sobre lo que seguramente representa un campo de cultivo elevado. Se localizan quizá también elementos asociados a Tláloc, signos geométricos, zoomorfos y antropomorfos. Es altamente probable que se trate de un campo práctico ritual asociado a la agricultura y a la petición de temporal. Es preciso indicar que de todas las caras posibles de grabado, se preparó y se desarrolló el conjunto de signos en la cara que se encuentra orientada hacia el Popocatépetl, lugar donde se originan las nubes que descargan la lluvia sobre el Valle de Cuautla. Es difícil establecer una cronología específica, la representación formal de este estilo se encuentra reportada desde el período conocido como Preclásico Medio hasta el Posclásico Tardío (desde 800 a.n.e. hasta 1521 d.n.e.). COORDINACIÓN DE DIFUSIÓN INAH MORELOS

3 REGISTRO FOTOGRÁFICO

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