Marzo 12, 2000 Título del sermón: Morando bajo la sombra del Omnipotente Versículo de la Biblia: Salmos 91:1-13

Transcripción

1 Marzo 12, 2000 Título del sermón: Morando bajo la sombra del Omnipotente Versículo de la Biblia: Salmos 91:1-13 El Salmo 91 es una palabra de Dios que infunde aliento y consuelo a los que padecen de pruebas difíciles y tribulaciones. Así nosotros aprendemos mediante Salmos cómo debemos adorar y servir a Dios. Asimismo nos indica una clara diferencia entre el crédulo e incrédulo. Primero, el salmista declara que el que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente. Hay un camino secreto para llegar delante del grandioso, precioso y glorioso Dios, y para morar bajo la sombra del Omnipotente, deberá pasar por esta puerta. Ese camino y lugar misterioso es nuestro Señor Jesús. Sin Jesús no podrá morar bajo la sombra del Omnipotente. Porque él es el camino y lugar misterioso. En Colosenses 1:27 dice A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria. Este misterio es nuestro Señor Jesús. Por tanto, morar bajo la sombra del Omnipotente es habitar bajo la sombra de Jesús. En Juan 14:6 dice Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Al recibir a Jesús, habitará bajo la sombra del Omnipotente. Cuán grande bendición es morar bajo la sombra del Omnipotente! Cuando una persona está bajo el cuidado de un hombre poderoso, descansa sin temor. Si está bajo el cuidado de un rico, no temerá la necesidad material; si está bajo el cuidado de un país fuerte, no temerá la invasión. Si esto sucede en el mundo de los hombres; de cuánta bendición no gozará el que more bajo la sombra del Omnipotente! Porque él desea derramar sus bendiciones a los que esté bajo su sombra, derrama prosperidad en todas las cosas, salud y prosperidad del alma. Si estamos viviendo bajo la sombra del Omnipotente, cuál debe ser nuestra confesión de fe?. Nuestra confesión debe ser igual que la del salmista: Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; mi Dios en quien confiaré. Él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. Si conocemos a Dios, debemos tenerle fe y confesarlo con nuestros labios. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Nuestra confesión de fe tiene gran poder; asimismo dijo en su palabra Y todo lo que atares en la

2 tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. Cuando nuestra confesión de labios está correcta, podremos asimismo experimentar el poder y la gloria de Dios. Si confesamos diciendo que él es nuestra esperanza, nuestro castillo, nuestro Dios en quien confiamos; siguiendo a nuestra confesión, Dios manifestará sus prodigios. Cómo? Primeramente nos librará del lazo del cazador. Cuando era niño, cazábamos pájaros para comer en el invierno. Los pájaros llegaban al barrio en el invierno en busca de alimentos; entonces tomábamos un cucharón de calaza y sobre ella colocábamos de piedras, lo sosteníamos con un palo, y los extremos lo atábamos con un hilo que llegaba a nuestro cuarto. Debajo de la calaza colocábamos granos para llamar la atención de los pájaros. Llegaban entonces los pájaros hambrientos y curiosos que se alimentaban de estos granos, al instante jalábamos el hilo y los pájaros quedaban atrapados dentro de la calaza. Esto era buen aliento en esa época de pobreza. Así lanza el cazador sus lazos para cazar. Esto es el diablo que lanza sus lazos para atrapar el alma de las personas. Lanza tentaciones por medio de pasiones de la carne, de comida, de vestimenta, de lascivia, de deleites. Nos lanza sus lazos por medio de deseos de los ojos, de lujos, de suntuosidad, de derroche. Algunas mujeres derrochan sus dineros en cosas insignificantes, nosotros al escuchar esta noticia nos sentimos ofendidos y decimos pobre los esposos de esas mujeres. Una mujer sabia sabrá ahorrar el dinero que le entregue su esposo, cuando atraviese situaciones difíciles económicamente, le entregará su ahorro para que pueda sobre salirse de la situación. No así las imprudentes que gastan todo lo que le entregue el esposo, y cuando llegue la crisis en su negocio, el esposo no podrá recibir ayuda económica de su esposa. Sabemos que la economía de nuestro país está sufriendo mucho por las mujeres de alta sociedad. Esto es el lazo del cazador, del diablo. Asimismo el diablo lanza lazos de poder política, del deseo de ser millonario en un instante. Queriendo alcanzar este sueño, cometen corrupción e injusticia. Pero si nosotros confesamos que Jehová es nuestra esperanza, nuestro castillo y nuestro Dios en quien confiamos, él nos sacará de todas estos lazos de tentaciones que lanza el cazador. No sólo eso, él nos sacará de la peste destructora. Saben lo que sucede cuando padece de la peste? Cuando era niño llamábamos a la fiebre tifoidea, la peste. Entonces no contábamos con agua potable, tomábamos aguas del pozo, pero estas aguas muchas veces estaban contaminadas; en

3 consecuencia muchos terminaban con la fiebre tifoidea. Era tan alta la fiebre que uno terminaba calva. Así utilizamos expresiones como el negocio padece de la peste, el hogar padece de la peste, padezco de la peste cuando estamos atravesando grandes tribulaciones. Pero dice la palabra de Dios que él nos librará de la peste destructora. II Corintios 4:8-9 dice Que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos. Esto es posible con una correcta confesión de nuestra fe ante Dios. Así como dijo el salmista, también nosotros debemos confesar que Jehová es nuestra esperanza, nuestro castillo, nuestro Dios en quien confiaremos. Hagamos esta confesión diariamente. Al realizar estas confesiones, él nos librará del lazo del cazador y de la peste destructora. Tercero, cuando nosotros dependamos de Dios, podremos morar bajo su sombra. En Salmos 91:4-6 dice Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y adarga es su verdad. No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya. Hermanos, Jesús dijo a los israelitas!jerusalén, Jerusalén! Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus polluelos debajo de sus alas, y no quisiste!. Si tenemos fe en Jesús, nuestro Señor, estaremos habitando bajo el abrigo del Altísimo, y él nos cubrirá con sus alas. Nos cubrirá con las alas del Espíritu Santo. Podemos aprender mucho de las gallinas, ellas reúnen sus polluelos bajo sus alas, cuando llueva, o cuando se presente peligro de ataque de algunos animales salvajes. Hubo fuego en un gallinero, todas las aves murieron, pero cuando alzaron a las gallinas, se dieron cuenta que debajo de las alas de las gallinas estaban los polluelos sanos y salvos. Ellas para salvar a sus polluelos, se sacrificaron. Así también Dios protege al que confía el Señor y confiesa su fe. Si diariamente busca al Señor y ora, el Espíritu Santo cubrirá con sus alas, y el amor y el poder de nuestro Dios nos cuidará, entonces no temeremos el terror nocturno. Qué son los terrores nocturnos? Son sustos que llegan cuando usted está durmiendo en la noche. Son catástrofes que llegan sin previos avisos, robos, inundaciones, incendio, guerra, terremotos; pero dice Dios que de todos ellos nos cubriría. Actualmente en Africa, Mozambique está atravezando la más dura prueba; son cuatro semanas de desbordamientos e inundaciones, dejando a más de millones de personas damnificados; como si esto fuera poco, hay

4 epidemia que muchos padecen y están muriendo de cólera, y de malaria. Estos son los terrores nocturnos que llegan sin previo aviso. El año pasado en el mes de diciembre en Venezuela por el desbordamiento murieron más de 50 mil personas; y en Taipei por el terremoto ocurrido en el mes de setiembre murieron más de 4000 mil personas. Dice Salmos 32:6 Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; ciertamente en la inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él. Pero si nosotros mantenemos una buena relación con Dios y estamos siempre despiertos en la oración, dice él que nos librará de estos terrores nocturnos. También dice que no temerá la saeta que vuele de día. Podemos ver que hay mucha gente mala que quiere hacernos daños, aun planifica y lo hace en público. Estamos viviendo en un mundo de competencia, por tanto el que compite siempre está expuesto al ataque de su enemigo. En Salmos 37:32-33 dice Acecha el impío al justo, y procura matarlo. Jehová no lo dejará en sus manos, ni lo condenará cuando le juzgaren. Si nosotros estamos bajo las alas del Señor, aunque el enemigo planifique detenidamente para destruirnos, Dios nos protegerá y no nos dejará en sus manos. Él abrirá un camino para sus hijos, él nos socorrerá. Dice también que no temerá la pestilencia que ante en oscuridad. Esto significa el ataque del enemigo improvisado. Si en la oscuridad llegare el enemigo y nos atacare, no hay camino de escape. Pero dice la palabra que él nos cubrirá con sus alas. Para nosotros la crisis económica fue como pestilencia que nos atacó en la oscuridad. Quién se imaginó esta situación? Estábamos viviendo en paz y con esperanza, cuando está crisis llegó a nosotros como pestilencia. Muchos perdieron trabajo, muchas empresas sufrieron bancarrota, muchos hogares fueron divididos, y muchos quedaron en la calle. Pero si nosotros hubiéramos permanecidos firmes en el Señor, él nos hubiera protegido; pero estábamos soberbios, codiciosos, y aún nosotros los cristianos estábamos lejos del Señor. En Miqueas 7:7-8 dice Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación; el Dios mío me oirá. Tú, enemiga mía, no te alegres de mí, porque aunque caí, me levantaré; aunque more en tinieblas, Jehová será mi luz. Si el Señor está con nosotros, aún caídos nos levantaremos, y si estamos en la oscuridad, él será nuestra luz. De modo que cuando estábamos atravezando esta crisis económica, todas las iglesias se levantaron en arrepentimiento y el pueblo entero se unió en solidaridad; pues, aunque caímos Dios nos levantó otra vez. Asimismo la Biblia dice que no temeremos mortandad que en

5 medio del día destruya. Esta destrucción se refiere a las destrucciones que se presentan al hombre por error humano. Sabemos que el mal actual traerá destrucción venidera, pero no podemos detenerlo. Vean lo que sucedió, el derrumbe del puente Sung Su; o el derrumbe departamento Sampoong. Explosión de gas en DaeGu, incendio en un retiro, incendio en una taberna, todo esto son mortandad que en medio del día destruye al hombre. Lo vemos, pero no podemos detenerlo. En Salmos 121:7 dice Jehová te guardará de todo mal; Él guardará tu alma. Sólo Dios nos puede proteger de la mortandad que en medio del día destruye. Los esfuerzos del hombre serán infructuosos ante esta situación, pero si tiene a Jehová como su morada, y confiesa que él es su castillo, el Dios en quien confía, entonces él extenderá sus alas para protegerle. De modo que podrá estar a salvo de las pestilencias y de la mortandad. Hay una clara diferencia entre el que está bajo las alas del Altísimo y el que no lo está. En Salmos 91:7-8 dice Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará. Ciertamente con tus ojos mirarás y verás la recompensa de los impíos. Esto es una gran tragedia, cuando caigan mil a su lado y diez mil a su diestra. Pero dice Dios que si él está con nosotros, él nos sostendrá para que estemos protegidos ante estas calamidades. En Salmos 37:38-39 dice Mas los transgresores serán todos a una destruidos; la posteridad de los impíos será extinguida. Pero la salvación de los justos es de Jehová, y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia. La salvación de los justos está en Jehová, no en el gobierno, ni en las personas. Porque él prometió que nos cuidará cuando estemos pasando tribulaciones, él será nuestro castillo y acampará alrededor nuestro para cuidarnos. Cuarto, nos señala cuál debe ser nuestra morada y cómo debemos confesar. En Salmos 91:9 dice Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación Qué podrá pasar? Ya tenemos a Jehová como nuestra esperanza, nuestro castillo y Dios en quien confiamos; entonces dice que él nos cuidará de toda tribulación y pruebas difíciles, impedirá que las diferentes calamidades nos alcance. Confesando que Dios es mi esperanza, mi castillo, Dios en quien confío, y morando bajo el abrigo del Altísimo, verá caer mil a su lado y diez mil a su diestra, mas a usted no le alcanzará el mal. Si desea que el Dios fuerte y poderoso esté siempre a su lado haga confesión de su fe con sus labios. En I Juan 5:19-20 dice Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno. Pero sabemos que el Hijo

6 de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna. Si permanece en Jesús, habitará al abrigo del Altísimo y morará bajo la sombra del Omnipotente. De manera que al aceptar a Jesús como su salvador personal y está bajo la sombra del Omnipotente, deberá hacer una correcta confesión de fe, porque esta es la manera de abrirle la puerta a Dios, para que entre y habite en nosotros con su poder y potestad. Así dice la palabra que la muerte y la vida están en poder de la lengua, de manera que nuestra confesión de fe ocupa un lugar muy importante. En Salmos 91:10 dice No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada. Qué significa esto; impedir que llegue mal a nuestra vida, significa que él derramará bendiciones. Cuando Dios está lejos de nuestra vida, llega temor en lugar de paz, tristeza antes que gozo, enfermedad en lugar de salud, fracaso en vez de éxito, pobreza en vez de bendición, todo esto es mal. Pero dice Dios, si nosotros confesamos quién es Dios para nosotros, él nos protegerá, de modo que el mal no nos pueda tocar. Asimismo dice que la plaga no tocará nuestra morada. Plaga es castigo, maldición y juicio. Vean lo que sucedió con Job. Él perdió toda su posesión, sus hijos, sus ganados, y él estaba padeciendo de una sarna maligna y tomaba él tiesto para rascarse con él. Al momento llegó su esposa y le maldijo y ordenó que maldijera a Dios y muriera; llegaron los amigos y le atacaron sin piedad. Cuán grande es esta tragedia! Sin embargo, si nosotros guardamos correctamente la palabra de Dios y hacemos una verdadera confesión de fe, él nos cuidará para que el mal no nos alcance. Quinto, dice la palabra que Dios enviará a un a sus ángeles para que nos cuide. En Salmos 91:11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. Qué son los ángeles? Son los enviados de Dios para que nos ayude. De manera que él a través de nuestras oraciones nos cuida y nos protege. Cuando Daniel fue elegido como gobernador, aun el rey de Persia pensaba poner a Daniel como gobernador sobre todo el reino; pero los gobernadores y sátrapas envenenado de celos y envidia quisieron hacerle daños a Daniel, hasta que lograron echarlo en el foso de los leones. Sin embargo, el ángel de Dios estuvo con él y lo protegió; salió ileso y se convirtió en gobernador. También vemos otro ejemplo en la vida de Pedro, cuando él fue sentenciado a muerte, un día anterior a al ejecución llegó un ángel y lo sacó de allí. Hoy los ángeles de Dios están para proteger a los hijos de Dios, a quienes tienen a

7 Jesús como su salvador personal. Él dice que no nos dejará solos, ni huérfanos, mas enviará a sus ángeles para que esté siempre con nosotros. Enviará a sus ángeles para que nos guarden en todos nuestros caminos y para que nuestros pies no tropiecen en piedra. Cuando caemos en piedra, sabemos que terminaremos ensangrentados, pero para que nosotros no pasemos estas vergüenzas, él enviará a sus ángeles para que nos guarden. En Proverbios 3:25-26 dice No tendrás temor de pavor repentino, ni de la ruina de los impíos cuando viniere, porque Jehová será tu confianza, y él preservará tu pie de quedar preso. Sepa que Dios no es un Dios que existe en una mera práctica de religión, ni de ritos; Dios es un Dios que desea estar con nosotros en nuestro diario vivir por medio de nuestra confesión de fe. Sexto, Dios nos da potestad. En Salmos 91:13 dice Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón. El león y el áspid significan el diablo y a los espíritus inmundos. En Mateo 16:17-18 dice Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán. Su palabra nos dice claramente que tendremos victoria sobre el diablo y los espíritus inmundos. En Lucas 10:19-20 dice He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará. Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujeten, sino regocijes de que vuestros nombres están escritos en los cielos. El mundo sin Dios está lleno de diablos y áspides; está llenos de espíritus inmundos, espíritus malos, espíritus de mentira, espíritu de adivinanza, espíritu de debilidad, espíritu de libertinaje, espíritu de enfermedad, y espíritus que roba, mata y destruye al individuo y al hogar. Pero si nosotros en Cristo Jesús tenemos una correcta confesión de nuestra fe, él nos dará poder y potestad sobre los leones y áspides para hollarlos y pisotearlos, y en el nombre de Jesús tendremos la victoria. Estamos ciertamente viviendo en un mundo incierto, sujeto a cambios, y sin saber lo que vendrá. Por tanto necesitamos de Dios, y necesitamos tener conocimiento de Dios. El Salmo 91 llena estas necesidades que nosotros sentimos. El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo

8 mío; mi Dios, en quien confiaré. Él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora. Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro. Escudo y adarga es su verdad. No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya. Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; mas a ti no llegará. Cuán maravillosa gracia del Señor! Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra. Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón. Esta es la promesa de Dios para el que le reciba como salvador y confiese con sus labios su fe. Oración Dios santo y glorioso, ayúdenos a tener una correcta confesión de fe, porque la confesión de nuestros labios, muestra la veracidad de nuestra fe, y sabemos que tú obra mediante nuestra confesión. Pero aun hay muchas personas que utilizan negativamente su boca, dando lugar al diablo que llega para hurtar, matar y destruir. Oh Jehová pedimos confesar que tú eres nuestro castillo, nuestra esperanza, y Dios en quien confiamos, con nuestras confesiones líbranos del lazo del cazador y de la peste. Oh Señor que todos mis hermanos estén llenos de tu gracia. Oramos en el nombre de Jesús Amén.