Distinguidos representantes de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura,

Transcripción

1 Palabras pronunciadas por Janet Coto Moreno, jefa de la Sección de Cooperación de la Delegación de la Unión Europea en Cuba, en ocasión del acto de cierre del proyecto Rescate Patrimonial y Desarrollo Cultural en La Habana: Palacio del Segundo Cabo, La Habana, 12 de diciembre de Distinguido Dr. Eusebio Leal, Distinguidas autoridades del Gobierno cubano, Distinguidos representantes de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Estimados colegas de los Estados miembros de la Unión Europea y demás representantes del cuerpo diplomático, Estimados representantes de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana Estimados invitados que nos honran con su presencia. Los que llevamos algún tiempo implicados en este proyecto sentimos gran alegría por poder celebrar hoy la finalización de las obras de restauración del Palacio del Segundo Cabo. Como muchos de ustedes saben, este proyecto fue financiado con fondos de la UE (con aproximadamente un 90% del coste total) y su coordinación corrió a cargo de la UNESCO, sin dudas una institución de referencia para lo que se pretendía hacer, que conjuntamente con la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana aportaría la financiación restante. Mencionar también que la mayor parte de los recursos humanos necesarios para ejecutar la obra también fue dispuesta por la Oficina del Historiador. El proyecto comenzó en enero de 2010 y estaba previsto finalizara en diciembre de Sin embargo, varias dificultades e imprevistos, como el descubrimiento de una grieta importante en una de las fachadas y los distintos retos a los que se tuvo que enfrentar la Oficina del Historiador con la rehabilitación de edificios de gran complejidad como el Capitolio y el Teatro Martí, hicieron necesario extender la duración del proyecto en dos ocasiones.

2 A principios de este año, durante una reunión que yo calificaría como "crucial" entre la UE, la UNESCO y la Oficina del Historiador de la Ciudad, la UE recordó la imposibilidad de extender la duración del proyecto más allá de finales de octubre de este año como última fecha acordada. Pues bien, aunque el resultado de aquel encuentro fue el compromiso de todas las partes de hacer lo posible (y yo diría también que lo imposible) para cumplir con ese plazo final, creo no estar muy lejos de la realidad si digo que éramos pocos quienes con el paso de los meses creímos en la factibilidad de que las obras llegaran a su fin en el término fijado. Sin embargo, dicho objetivo se logró. Y se logró gracias al compromiso de cientos de personas que con gran profesionalidad obraron para llegar a la meta propuesta. Arquitectos, ingenieros, restauradores, museólogos, investigadores, electricistas, carpinteros, fontaneros, albañiles, no podría nombrar todas las categorías de trabajadores y trabajadoras que sumaron voluntades y esfuerzos para que esta obra llegara a buen puerto. Como sé que muchos de ellos están hoy presentes aquí, quisiera aprovechar esta oportunidad para expresarles una vez más nuestro agradecimiento. Es importante aclarar que si bien este primer proyecto se focalizó en la obra civil, es decir, en la rehabilitación física del edificio, en paralelo también se desarrolló una reflexión profunda y muy participativa por parte de expertos cubanos, del Caribe y europeos sobre el uso que se daría al Palacio. Así, fueron delineándose las distintas salas de la línea del tiempo, de viajeros, de cartografía, del libro como parte de una conceptualización integral de lo que sería el destino del edificio: un Centro de Interpretación de las Relaciones Culturales entre Cuba y Europa; un centro donde las tecnologías de la información y la comunicación tendrán un papel protagónico. Todo esto ha sido el resultado de múltiples investigaciones, de innumerables reuniones y, sin duda alguna, del excelente trabajo realizado de forma simultánea a los trabajos de rehabilitación del edificio. Así pues, tras este primer proyecto, faltaría por una lado finalizar lo que podemos denominar la parte "interna" del Palacio (por ejemplo el equipamiento de las salas para su posterior uso museográfico), y por otro lado, trabajar en el diseño de una Estrategia de Programación Cultural que promueva los intercambios científicos y culturales entre la isla y el Viejo Continente. Para todo ello existe un segundo proyecto, esta vez con la Oficina del Historiador como contraparte contractual, que también será financiado por la UE con unos euros y que contará asimismo con una contribución del Ayuntamiento de Barcelona de unos euros. Otros países europeos están implicados de una forma u otra en esta segunda fase, como es el caso del Reino de los Países Bajos, que se encuentra colaborando para la sala de cartografía.

3 El nuevo proyecto tendrá una duración de tres años. Pero que no desesperen los más impacientes! No habrá que aguardar tres años para que el Centro comience a funcionar. De hecho, por ejemplo, la sala polivalente está prácticamente lista para ser utilizada. Y poco a poco ese será el caso de las otras salas, de modo que no se esperará a que todas estén en funcionamiento para poder disfrutar de este maravilloso lugar. Podría hablarles del Palacio, de su historia, pero teniendo en cuenta que la UNESCO y la Oficina del Historiador tomarán la palabra después de mí, creo que lo más sensato es dejar que lo hagan los verdaderos expertos. Sí que me gustaría, Estimados invitados, aprovechar la ocasión para compartir con ustedes lo que la UE está haciendo en Cuba en términos de cooperación al desarrollo. Desde que a finales de 2008 se retomó la cooperación con Cuba, la UE ha estado financiando proyectos de cooperación por un valor superior a 85 millones de euro, con el propósito de contribuir al desarrollo sostenible del país y bienestar de su población. De los cerca de 80 proyectos aprobados entre 2008 y 2013, casi la mitad se encuentran aún en ejecución. Estos proyectos tratan temas de seguridad alimentaria (por ejemplo, el proyecto AGROCADENAS, financiado por la UE y por la Agencia Suiza de Cooperación para el Desarrollo (COSUDE) y coordinado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) o el proyecto sobre la cadena de valor del cacao en Oriente, financiado por la UE y coordinado por la Agencia Española de Cooperación, AECID); temas de medio ambiente y adaptación al cambio climático (como es el caso del proyecto BASAL, también financiado por la UE y COSUDE y gestionado por el PNUD); proyectos de respuesta a huracanes y preparación para situaciones de desastre (financiados en particular por la Agencia de Ayuda Humanitaria de la UE ECHO). Asimismo, estamos financiando un programa para apoyar el intercambio de expertos entre administraciones públicas de Cuba y la UE (coordinado por la fundación española FIIAPP y liderado de forma muy exitosa por el Ministerio de Economía y Planificación del país). También proyectos que apoyan temas culturales (como ha sido la restauración de este precioso edificio) y temas sociales (especialmente a través de iniciativas de trabajo con grupos vulnerables). Los proyectos culturales y sociales están siendo coordinados en su mayoría por ONGs europeas, de conjunto con contrapartes cubanas relevantes a cada tema, quienes están desarrollando una labor muy valiosa. También hay ONGs trabajando de forma muy eficiente en las otras temáticas mencionadas (seguridad alimentaria, medio ambiente, etc). Las listas de proyectos en curso y de aquellos recientemente finalizados están a su disposición en la página web de nuestra Delegación, que está siendo actualizada en estos

4 momentos para proporcionar información más detallada sobre todos estos emprendimientos. En esta jornada me complace también comunicarles que recientemente la UE ha puesto a disposición otros 55 millones de euro para proyectos a desarrollarse en Cuba, a ser identificados entre 2014 y Quería resaltar que estos 55 millones de euro no incluyen los montos que deban movilizarse para responder ante el posible paso de huracanes (crucemos los dedos), ni aquellos destinados a la preparación para situaciones de desastre, ya que estos proyectos se financiarán a través de la Agencia de Ayuda Humanitaria de la UE - ECHO. Tampoco esta suma incluye los fondos destinados a programas llamados regionales u horizontales como Erasmus + u Horizonte 2020, de los que Cuba puede igualmente beneficiarse y que son gestionados desde nuestra sede en Bruselas. De los 55 millones de euro que se gestionarán desde nuestra Delegación en La Habana, 4 millones de euro se canalizarán a través de convocatorias de propuestas dirigidas a organizaciones de la sociedad civil para proyectos culturales y sociales de hecho esperamos poder lanzar la primera convocatoria sobre estos temas a mediados de 2015 ; y 1 millón de euro está previsto se dedique a apoyar a autoridades locales. Los 50 M restantes irán destinados a proyectos que aborden temáticas muy similares a las del período anterior: 1) seguridad alimentaria; 2) medio ambiente y adaptación al cambio climático (con especial énfasis en temas de gestión integral del agua y en las energías renovables), y 3) apoyo a la modernización económica del país. Cómo se determinarán los nuevos proyectos? El proceso de identificación y formulación se realizará de conjunto con las autoridades cubanas, visto que se trata de los llamados fondos bilaterales. Durante el mismo serán también consultados otros actores relevantes como las organizaciones de la sociedad civil, organizaciones internacionales, otros donantes y, desde luego, los Estados miembros de la UE, para poder llegar a elaborar proyectos que sean prioritarios para el país, en los que la Unión Europea tenga un valor añadido. Los detalles sobre los sectores prioritarios y resultados que se prevén alcanzar están recogidos en el documento llamado "Programa Indicativo Multianual" (MIP, por siglas en inglés), que pueden encontrar en versión impresa a la salida y que también está disponible en nuestra página web. Para concluir, no quisiéramos dejar de expresar en este acto nuestra gratitud a todos aquellas instituciones y personas que han contribuido a que hoy podamos celebrar la terminación de esta obra colosal. En particular, deseamos agradecer muy especialmente a la Oficina Regional de Cultura para América Latina y el Caribe de la UNESCO y a la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, por su valioso acompañamiento durante este proyecto.

5 La historia, que es terca, que es sabia, ha querido que este magnífico palacio retome en el presente parte del significado que tuvo en sus orígenes cuando sirvió como Casa de Correos, asegurando entonces la comunicación entre el Viejo y el Nuevo Mundo. Hoy, más de dos siglos después, al verlo convertirse en un moderno Centro de Interpretación de las Relaciones Culturales entre Cuba y Europa, nos complace vaticinar que este palacio seguirá tendiendo puentes entre ambos lados del Atlántico. Muchas gracias.