Lección 3 Den gracias al Señor

Transcripción

1 Lección 3 Den gracias al Señor 2 Crónicas «Cuando vieron todos los hijos de Israel descender el fuego y la gloria de Jehová sobre la Casa, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y adoraron, y alabaron a Jehová, diciendo: «Porque él es bueno, y su misericordia es para siempre». 2 Crónicas 7.3

2 Propósito Aprender que a Dios hay que alabarlo y darle gracias en todo tiempo y lugar. Que esta alabanza y agradecimiento deben ser alegres y festivos y nos sirven para reconocer el poder y grandeza divinos. Convencernos de que el principal ministerio y oficio de la iglesia es alabar a Dios y reunir en el templo o fuera del templo al pueblo de Dios para ensalzar su nombre y reconocer sus bondades.

3 Bosquejo de la lección I. Salomón ora durante la dedicación del templo. II. Se hace una gran ofrenda y la gloria de Dios llena el templo. III. El pueblo y los sacerdotes caen de rodillas y adoran a Dios. IV. La celebración se prolonga por quince días y al octavo día se celebra una asamblea.

4 Vocabulario bíblico «NUBE SOBRE EL TEMPLO»: Muestra de aceptación de parte de Dios del lugar como su morada. Esta nube aparece también en Sinaí, con igual significado (véase Ex 20.21). «PAVIMENTO»: En griego dice «lithostros». Palabra usada por Juan 19.13: «empedrado» o lugar desde donde dictó su sentencia sobre Jesús.

5 2 Crónicas RVR 1 Cuando Salomón acabó de orar, descendió fuego de los cielos y consumió el holocausto y los sacrificios; y la gloria de Jehová llenó la Casa. 2 Y no podían entrar los sacerdotes en la casa de Jehová, porque la gloria de Jehová la había llenado. VP 1 Cuando Salomón terminó esta oración, cayó fuego del cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria del Señor llenó el templo, 2 de modo que por eso los sacerdotes no podían entrar en él.

6 2 Crónicas 7.3 RVR 3 Cuando vieron todos los hijos de Israel descender el fuego y la gloria de Jehová sobre la Casa, se postraron sobre sus rostros en el pavimento y adoraron, y alabaron a Jehová, diciendo: «Porque él es bueno, y su misericordia es para siempre.» VP 3 Al ver todos los israelitas el fuego y la gloria del Señor que bajaban sobre el templo, se arrodillaron e inclinaron hasta tocar el suelo del enlosado con la frente, y adoraron y dieron gracias al Señor, repitiendo: «Porque él es bueno, porque su amor es eterno.»

7 2 Crónicas RVR 4 Entonces el rey y todo el pueblo sacrificaron víctimas delante de Jehová. 5 Y ofreció el rey Salomón en sacrificio veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas. Así, el rey y todo el pueblo dedicaron la casa de Dios. VP 4 Después de esto, el rey y todo el pueblo ofrecieron sacrificios al Señor. 5 Y el rey Salomón ofreció en sacrificio veintidós mil toros y ciento veinte mil ovejas. Así fue como el rey y todo Israel consagraron el templo de Dios.

8 2 Crónicas 7.6 RVR 6 Los sacerdotes desempeñaban su ministerio, mientras los levitas alababan a Jehová con los instrumentos de música que el rey David había hecho para acompañar los cánticos a Jehová, «porque su misericordia es para siempre», entonando los cánticos compuestos por David. Los sacerdotes tocaban las trompetas delante de ellos, y todo Israel se mantenía en pie. VP 6 Los sacerdotes se mantenían en sus puestos, y también los levitas, con los instrumentos de música sagrada que el rey había hecho para acompañar el canto que dice: «Porque su amor es eterno», cuando David cantaba con ellos. Y los sacerdotes tocaban frente a ellos las trompetas, mientras todo Israel estaba de pie.

9 2 Crónicas 7.7 RVR VP 7 También Salomón consagró la parte central del atrio que estaba delante de la casa de Jehová, por cuanto había ofrecido allí los holocaustos, y lo mejor de las ofrendas de paz; porque en el altar de bronce que Salomón había hecho no cabían los holocaustos, las ofrendas y las grasas. 7 Salomón consagró también el centro del atrio que está frente al templo del Señor, pues allí ofreció los holocaustos y la grasa de los sacrificios de reconciliación, porque en el altar de bronce que él había construido no cabían los holocaustos, las ofrendas de cereales y la grasa.

10 2 Crónicas RVR 8 Entonces hizo Salomón fiesta siete días, y con él todo Israel, una gran congregación, desde la entrada de Hamat hasta el arroyo de Egipto. 9 Al octavo día hicieron solemne asamblea, porque habían hecho la dedicación del altar en siete días, y habían celebrado la fiesta solemne por siete días. VP 8 En dicha ocasión, Salomón y todo Israel, una gran muchedumbre que había venido desde la entrada de Hamat hasta el arroyo de Egipto, celebraron la fiesta de las Enramadas. 9 Al día siguiente tuvieron una fiesta solemne, porque durante siete días habían celebrado la consagración del altar y durante otros siete días la fiesta de las Enramadas.

11 Resumen El pasaje de 2 Crónicas corresponde a 1 Reyes Describe el relato de la dedicación del templo, que termina en el versículo 3. La fiesta dura catorce días. El cronista dice que el día octavo celebran una asamblea solemne, o sea, la clausura. La fiesta de las chozas se celebra inmediatamente después y recuerda la experiencia del pueblo en el desierto, muy presente en la memoria de este. (véanse Sal 91.10; Jue 19.9; 1 S 13.2). Parte importante de la fiesta de la dedicación del templo es la oración del rey Salomón, que culminó con la apertura de los cielos y el descenso de una nube de fuego que consume todas las ofrendas y los holocaustos, la casa del Señor se llenó de su presencia. Los sacerdotes y levitas dieron realce a la fiesta ejerciendo sus funciones sacerdotales y entonando himnos y salmos davídicos, acompañándose de instrumentos musicales de varias clases. El día veintitrés del mes séptimo Salomón despidió al pueblo, que regresó a sus casas. De manera que según el libro de Crónicas los hechos sucedieron así: del día 8 al 14 del séptimo mes se celebró la fiesta de los tabernáculos. El día 22 se dio la clausura.

12 Oración Padre y Señor nuestro, que cuidas de tu iglesia como cuidaste a tu pueblo por muchos años y en muchas circunstancias. Que con tu sabiduría dirigiste los destinos de este pueblo a través de su historia, eligiendo a tus siervos David y Salomón para realizar tus planes y propósitos. Acompañaste a tu siervo Salomón para que te construyera una casa en la santa ciudad de Jerusalén. Hoy, Padre, queremos celebrar, como tu pueblo de antaño, el ingreso de tu presencia a nuestros templos. Queremos reconocerte como el Dios grande y magnífico que eres y rendirte nuestro tributo de adoración y reconocimiento. Entregarte nuestra plegaria de alabanza y acción de gracias, en el nombre de Jesús nuestro Redentor y Salvador. Amén.