R-DCA CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA

Transcripción

1 R-DCA CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA. División de Contratación Administrativa. San José, a las nueve horas cincuenta y tres minutos del veinte de junio de dos mil dieciséis Recurso de apelación interpuesto por Compañías de Máquinas de Costa Rica CDM S.A., en contra del acto de adjudicación de la Licitación Pública 2015LN promovida por el Banco de Costa Rica para la adquisición por demanda de pantallas planas para el Banco de Costa Rica", acto recaído a favor de la empresa Central de Servicios P.C S.A. por un monto por pantalla de $339 (trescientos treinta y nueve dólares) y por cuantía inestimable RESULTANDO I. Que la empresa Compañías de Máquinas de Costa Rica CDM S.A., presentó recurso de apelación ante esta Contraloría General el día cinco de abril de dos mil dieciséis II. Que mediante auto de las nueve horas del veinticinco de abril de dos mil dieciséis, se confirió audiencia inicial a la Administración y a la empresa adjudicataria, la cual fue atendida mediante escritos agregados al expediente de apelación III. Que mediante auto de las diez horas cuarenta minutos del seis de junio de dos mil dieciséis, se confirió audiencia final a todas las partes, auto que fue contestado mediante escritos agregados al expediente de apelación IV. Que en la presente resolución se han observado las prescripciones constitucionales, legales y reglamentarias pertinentes CONSIDERANDO I. Hechos probados: Para la resolución del presente asunto se tienen por demostrados los siguientes hechos de interés: 1) Que en su plica la empresa Compañías de Máquinas de Costa Rica CDM S.A., aporta información sobre el producto ofertado en donde se aprecia, entre otra, la siguiente información: "(...) Reglamentaciones (...) EPEAT Silver (...)" (Folio 153 del expediente administrativo). 2) Que en el informe técnico de recomendación de adjudicación, el Banco de Costa Rica indicó, respecto a la oferta de la empresa apelante: "(...) En el caso de la oferta N 4 de CDM: a) El BCR dentro de lo que el mercado ofrece hace el esfuerzo por cumplir con regulaciones internacionales para proteger el planeta y se solicita que los equipos cumplan con la certificación EPEAT Gold, misma que el dispositivo ofrecido no cumple (...)" (Folio 237 del expediente administrativo). 3) Que la empresa apelante Compañía de Maquinas CDM S.A., ofertó un precio de $ (doscientos treinta y seis dólares con diecisiete centavos) (Folio 169 del expediente administrativo). 4) Que la adjudicataria Central de Servicios P.C S.A., ofreció un precio unitario de $339 (trescientos treinta y nueve dólares) (Folio 112 del expediente administrativo)

2 2 II. SOBRE EL FONDO DEL RECURSO. Sobre la exclusión de la apelante por no contar con certificación Epeat Gold. La apelante indica que el incumplimiento señalado por la Administración es en relación con la norma EPEAT GOLD, la cual no afecta el objeto propio de la contratación, que es buscar minimizar los riesgos de obsolescencia tecnológica sobre la plataforma implementada de pantallas planas en la oficina, y dicha norma en realidad es en relación con las compras verdes no sobre la tecnología propiamente. Argumenta también que dichas certificaciones no resultan obligatorias en la actualidad, y en consecuencia no es factible requerirlas como aspectos de admisibilidad de las ofertas, posición que ha sostenido el órgano contralor y que la solicitud de esta característica es inoperante e irrelevante si la Administración no dispone de los medios y recursos adecuados que ayuden al seguimiento de las diferentes fases del ciclo de los equipos que está adquiriendo. Considera que la Administración no justifica el interés público de contar con esa cláusula o bien la afectación de que la adjudicataria no cuente con esas normas, y también que la norma EPEAT SILVER ofrecida por su empresa cumple de igual manera con las necesidades de la Administración ya que la declaración de conformidad que ofrece el fabricante y el nivel de desempeño ambiental, lo cumplen todos los productos electrónicos con etiqueta EPEAT y todos están bajo los estándares IEEE 1680 de la evaluación ambiental. Finalmente indica que la norma EPEAT no es una marca, es una certificación de conformidad que en la actualidad no resulta obligatoria en Costa Rica. La Administración indica que externa su discrepancia ante el recurso ya que observa que la misma va dirigida a un punto específico del pliego de requerimientos, el cual tuvo plazo pertinente para las observaciones y modificaciones al cartel y solicita la nulidad de esta apelación. Indica que el Banco de Costa Rica es consciente de la forma en que trabaja la certificación EPEAT, ya que es una institución que vela por el ambiente y así lo hacer ver en las compras que ejecuta. Además indica que el fabricante AOC tiene monitores que cumplen con todos los requisitos especialmente el EPEAT GOLD y que por ende, el mejor proceder era que en el tiempo oportuno les realizaran la observación que podían ofrecer tanto en plata como en oro. Indica que tomando en cuenta todo el trabajo que el BCR ha realizado para colocar los criterios necesarios en el cartel y en ningún momento solicitar aspectos sin valor, más bien siendo rigurosos con las especificaciones, es que considera que la apelación no debe proceder. La adjudicataria indica que la exclusión de la oferta de la apelante se debió al incumplimiento en una especificación técnica del equipo requerido, tan importante como cualquier otra a la cual

3 3 debía someterse como a otras del cartel. Indica además que la actuación de la Administración es correcta, ya que descalificó a la empresa que no cumplió con el requisito de tener certificación EPEAT GOLD al solamente tener EPEAT SILVER. Señala que el argumento del recurso es propio de un recurso de objeción y que por ende, no puede ser aceptado para un recurso de apelación. Asimismo indica que la fabricante AOC cuenta con varios modelos que tienen la certificación EPEAT en categoría GOLD como pide el cartel, con lo cual estima que queda demostrado que CDM no tenían impedimento para ofertar un modelo de monitor que cumplía con la certificación solicitada y por ende, estima que es claro que se está en presencia de un intento de tomar ventaja indebida por parte del oferente. Criterio de la División: Antes de iniciar con el análisis del fondo del caso, esta Contraloría General de la República considera necesario traer a conocimiento de las partes, una serie de antecedentes respecto al tema de la certificación EPEAT Gold. Así las cosas, se tiene que mediante resolución R-DCA de las once horas del veinte de julio de dos mil once, se indicó: "(...) Específicamente el artículo 54 del Reglamento de Contratación Administrativa, se refiere a las condiciones obligatorias que se constituyen en requisitos de admisibilidad, e indica en su párrafo segundo: En el cartel se deberá exigir el cumplimiento obligatorio de aquellos requisitos, cuando corresponda Las condiciones invariables deben orientarse a la selección de la oferta más conveniente a los intereses de la Administración, entonces tomando en cuenta que las condiciones invariables fijadas en un cartel, tienen por objeto orientar a la Administración a elegir la mejor opción para lograr satisfacer su necesidad, vemos como respecto a la condición de que los equipos a ofertar deban encontrarse enlistados o certificados para Costa Rica, en la EPEAT, se trata de un asunto de mera conveniencia, que no precisamente cumple con el objetivo de orientar a la Administración a elegir la mejor opción, ya que ni siquiera Costa Rica se encuentra dentro de los países suscriptores a la EPEAT. Igualmente el artículo 52 del reglamento de cita indica en su párrafo diecinueve El cartel no podrá imponer restricciones, ni exigir el cumplimiento de requisitos que no sean indispensables o resulten convenientes al interés público si con ello limita las posibilidades de concurrencia a eventuales participantes., por lo cual, al no ser esta suscripción obligatoria para el país, no debe imponerse su cumplimiento por medio de un pliego cartelario, por lo que debe eliminarse como requisito de admisibilidad. (...)". Asimismo, mediante resolución R-DCA de las catorce horas del primero de agosto de 2012 se indicó: "(...)Se declara con lugar el recurso en este extremo. Se señala sobre el tema que esta Contraloría General no descarta que la Administración pueda plantear el requerimiento y lo considere como un factor de admisibilidad y por ende obligatorio de cumplimiento, pero ello en la medida que se tenga una justificación de que ese cumplimiento deviene en una condición

4 4 de importancia o relevancia con el bloque de legalidad y en este caso ese ejercicio no se hizo. Entonces, la declaratoria con lugar se basa en el hecho de que nos encontramos ante un oferente que en un buen esfuerzo, hace ver que hay empresas que podrían ser excluidas por no tener la certificación de referencia y que ello puede limitar la participación de oferentes, lo que bien podría ser el caso según lo expuesto y que la Administración no justifica su mantenimiento. No obstante lo anterior, la Administración puede valorar que el requerimiento sea un posible tema a puntuar en sistema de evaluación, más no requisito de admisibilidad por lo dicho. (...)". Por su parte, mediante resolución R-CA de las nueve horas cuarenta y dos minutos del quince de abril de dos mil quince, se manifestó lo siguiente: "(...) Al respecto debe hacerse la observación de que si bien es cierto resulta importante la introducción de variables ambientales y de compras sustentables en la materia de contratación administrativa, esto debe armonizarse con los requisitos que dispone el ordenamiento jurídico. Al respecto, debe considerarse que la certificación en cuestión no resulta obligatoria en la actualidad y en consecuencia no es factible requerirla como un aspecto de admisibilidad de las ofertas, posición que ya ha esgrimido anteriormente este órgano contralor (resolución R-DCA de la Contraloría General de la República, de las catorce horas del primero de agosto de dos mil doce). Desde luego. ello no obsta para que la Administración pueda valorar dicho aspecto en el sistema de evaluación en forma proporcionada. Por las razones enunciadas, la certificación Epeat debe requerirse como preferible y no como un aspecto de admisibilidad, por lo que de oficio se ordena que se modifique el cartel en ese sentido. (...)". De lo anteriormente dicho, puede llegarse a la conclusión que la exigencia de la certificación EPEAT si bien puede llegar a ser considerada como un factor deseable en las ofertas que reciba una determinada Administración, lo cierto es, que salvo la existencia de una justificación razonada para su exigencia, dicha certificación no puede ser utilizada como requisito de admisibilidad y por ende, limitar la participación de potenciales oferentes en un determinado concurso. Ahora bien, para el caso concreto, se tiene que en el pliego de condiciones, concretamente en las condiciones técnicas mínimas se requirió que los participantes debían presentar su pantalla, incluyendo certificación Epeat Gold (Folio 69 del expediente administrativo). Por su parte, la empresa apelante presentó sus pantallas con certificación Epeat, pero de grado silver (hecho probado 1), ante lo cual la Administración decidió excluir su oferta, solamente por el hecho de no contar con certificación Epeat de grado gold (hecho probado 2). Así pues, de lo dicho anteriormente puede concluirse que la única razón por la cual la oferta de la recurrente fue excluida, fue por no contar sus pantallas, con certificación Epeat de grado gold (hecho probado 2), sobre lo cual conviene referirse a la real trascendencia de este incumplimiento. Sobre este

5 5 tema, no desconoce este Despacho que la exigencia de esta certificación, si bien como ha sido indicado en los antecedentes expuestos, no debe ser requerida como requisito de admisibilidad, lo cierto es que en el presente caso se consolidó de esa forma, debiendo analizarse entonces la trascendencia de esta omisión del oferente que sí presente como se dijo certificación EPEAT, solo que en grado Silver y no Gold como lo requería el cartel. Al respecto, en la respuesta a la audiencia inicial concedida, la Administración se limitó a explicar en qué consiste la certificación Epeat y que además, la apelante no había objetado el cartel en su momento, por lo cual el tema se encontraba precluido, pero sin establecer con la claridad esperada por qué razón para la Administración resulta importante ya no solo la certificación EPEAT -de por sí reiterando la imposibilidad de requerirlo como requisito de admisibilidad- sino además que esta fuera en grado Gold. Entiende este Despacho que si bien este tipo de certificaciones están basadas en la observancia de criterios sustentables en el proceso de fabricación de los equipos, tampoco puede ser aceptable la incorporación y exigencia de un requisito - en este caso como admisibilidad- que más allá de los criterios anteriormente emitidos por este Despacho, algunos de los cuales ya han sido citados en la presente resolución, ni siquiera la Administración parece tiene claro la relevancia de este y sobre todo, cómo empata este tipo de certificaciones por ejemplo con políticas institucionales sobre el tema ambiental. Si bien no desconoce este órgano contralor la necesidad e importancia de adquirir productos amigables con el ambiente, lo cierto es que la Administración no ha logrado demostrar la trascendencia de la certificación de mérito, de forma tal que se concluya que una empresa por el solo hecho de no contar con la misma, pueda ser excluida del pliego de condiciones, así como tampoco ha logrado demostrar que para la funcionalidad del equipo sea necesaria dicha certificación y que por ende, sea un requisito indispensable a contar por parte de las pantallas ofertadas. Aunado a lo anterior, se tiene que la empresa apelante ostenta un precio menor al de la adjudicataria, en una diferencia de $102.5 (ciento dos dólares con cincuenta centavos) (hechos probados 3 y 4), lo que implicaría mejores condiciones para la Administración, de ser tomada en cuenta dicha oferta. De igual manera, observa esta Contraloría General de la República, que la empresa apelante sí cuenta con la certificación Epeat, solo que en grado silver (hecho probado 1), sin que tampoco esa Administración haya podido justificar qué nivel de relevancia, diferencia o inclusive características, existen entre ambos tipo de certificaciones que ameriten la exclusión de una oferta por no cumplir con una de ellas, es decir, en el rango definido por la Administración, por lo

6 6 cual si bien es cierto no cumple con tener Epeat Gold, sí cuenta con algún grado de certificación Epeat lo que implica, que cumple con toda una serie de criterios mínimos (23 criterios obligatorios), e inclusive con una cantidad determinada de criterios opcionales (50% de los 28 opcionales), según ha explicado la propia Administración al contestar la audiencia inicial. Por lo tanto, y de acuerdo a lo anteriormente expuesto, considera esta Contraloría General de la República que lleva razón la apelante en su argumento y lo procedente es la anulación del acto de adjudicación, debiendo la Administración valorar la oferta de la empresa apelante conforme el resto de reglas cartelarias POR TANTO De conformidad con lo expuesto y lo dispuesto en los artículos 182, 183 y 184 de la Constitución Política, 84 de la Ley de Contratación Administrativa, 174, 178, y 182 del Reglamento a la Ley de Contratación Administrativa, se resuelve: 1) Declarar con lugar el recurso de apelación interpuesto por Compañías de Máquinas de Costa Rica CDM S.A., en contra del acto de adjudicación de la Licitación Pública 2015LN promovida por el Banco de Costa Rica para la adquisición por demanda de pantallas planas para el Banco de Costa Rica", acto recaído a favor de la empresa Central de Servicios P.C S.A. por un monto por pantalla de $339 (trescientos treinta y nueve dólares), acto que se anula. 2) Se por agotada la vía administrativa. NOTIFÍQUESE Allan Ugalde Rojas Gerente de División Edgar Herrera Loaiza Gerente Asociado Elard Gonzalo Ortega Pérez Gerente Asociado Estudio y redacción: Marco Antonio Loáiciga Vargas MALV/pus NN: 7938 (DCA ) NI: G: