Que haría Cristo en nuestro lugar. Semana de la Familia 2018

Transcripción

1 Que haría Cristo en nuestro lugar Semana de la Familia 2018

2 LA MESA FAMILIAR Lunes, 01 de octubre La familia se organiza para compartir la mesa. Todos participan poniendo la mesa. Agradecen y bendicen los alimentos. Reflexión Familiar La imagen de la Sagrada Familia alrededor de una mesa, compartiendo la comida y su fe, es imagen de nuestra familia en el día de hoy. Es en la mesa familiar donde se comparten las experiencias de cada día: los afectos, las alegrías, las penas, las esperanzas, las dificultades, la vida. Es en este espacio privilegiado donde los padres enseñan y transmiten a los hijos los valores y se comparte la Fe. Es también en esta mesa donde se puede reconocer el rol precioso e integrador de la mamá, del papá o de quien convoca a la mesa familiar, preparando la comida y la mesa para que nada falte en ella. Hoy la familia se reúne como muchas veces lo hace, teniendo a Jesús como invitado. Comencemos con una oración y la bendición de los alimentos, dando espacio para que Dios se comunique con nosotros y se quede en nuestra familia. 1. Compartimos y respondemos las preguntas: Qué emoción siento al reunirnos como familia alrededor de la mesa? Agradecemos por cada miembro de la familia, presente en esta mesa? Cómo nos hemos sentido respecto a lo que estamos viviendo en nuestra Iglesia? Si estuviera hoy Jesús en nuestra mesa, qué nos diría? Qué nos pediría?

3 LA CELEBRACION FAMILIAR Martes 02 de Octubre Tú, en cambio, has reservado el (vino) de mejor calidad hasta ahora (Jn 2,10) María ve la necesidad de la pareja como lo más importante. Confía en que Jesús puede hacer algo y le dice a los sirvientes Hagan lo que él les diga Jesús con su mano derecha, bendice el agua que es vertida en las jarras por los sirvientes en respuesta a su pedido. Algo insípido y sin gusto es llenado con sabor y alegría. Y Dios da con superabundancia, mas allá de toda expectativa De esta manera cuando la familia se reúne a celebrar, un cumpleaños, un matrimonio, un nacimiento, una despedida, la llegada de alguien querido, manifiesta la alegría con la fiesta invitando a chocar las copas y deseando salud! Dios nos brinda en su hijo el motivo de nuestra alegría, de la esperanza, del amor, de la misericordia y María esta siempre atenta a nuestras necesidades confiándoselas a su hijo. Agradezcamos el regalo de ser familia, que siempre tengamos un motivo para celebrar y dar testimonio de este regalo que Dios nos ha dado, que es nuestra propia familia, donde se vive ese amor que supera toda expectativa. Compartimos y respondemos las preguntas: 1. Cuáles son o han sido nuestras esperanzas como familia? 2. Cuáles son los motivos de nuestras vidas que Dios nos da para celebrar en nuestras familias? 3. Cuáles son las esperanzas que tenemos para nuestra iglesia?

4 COMO FAMILIA NOS PONE AL SERVICIO Miércoles 03 de octubre Mi niña está agonizando; ven a poner las manos sobre ella para que se sane y viva (Lc 5,23) En este pasaje del Evangelio podemos ver algo de la profunda compasión de Jesús por una familia cuando tiene un hijo enfermo. Jairo le suplica que vaya e imponga sus manos sobre su hija que está a punto de morir... Con el pergamino de la Palabra de Dios en la mano, Jesús toma a la niña. Noten como la sujeta de la muñeca, un agarre similar al que hace un socorrista que quiere rescatar a alguien. Jairo tiene sus manos extendidas hacia Jesús como poniendo a su hija completamente en manos de Jesús, su esposa levanta una mano hacia arriba, como si no supiera qué decir, la otra abrazando a su marido para recibir apoyo. En este Evangelio podemos ver también la preocupación de Jesús cuando les dice a los padres de la chica 'dadle algo para comer. El Señor reconoce y realmente valora los sacrificios de los días y la provisión que tiene lugar en nuestras familias. Jesús se acerca y se pone al servicio, no sólo para curar al enfermo, sino que entra en el hogar para reconstruir y reconfortar a toda la familia afectada por la muerte de un ser querido. Lo primero que hace es compartir su sufrimiento y la pena. Él quiere restaurar la vida familiar. Para que la restauración sea completa necesitamos de nuevo la paz y la alegría. El Señor que conoce todas nuestras necesidades, también reconoce y valora el trabajo que realizamos por nuestras familias. Jesús buscó llevar la salvación al hogar del enfermo y al igual que lo hace ahora, Él quiere nuestra salvación, nos viene a anunciar la Buena Noticia de Dios, que Él nos ama y somos sus hijos predilectos. Después de contemplar el servicio de Jesús a la familia de Jairo, mirando la realidad de dolor y enfermedad de tantas familias cercanas y teniendo presente la pregunta Qué haría Cristo en nuestro lugar?: Compartimos y respondemos las preguntas: Qué nos proponemos como familia para ir al encuentro de estas realidades dolorosas que conocemos? En la situación actual de nuestra Iglesia, confiamos en Cristo, al igual que Jairo, para restaurarla? Qué podemos hacer como familia para ayudarlo en esta tarea?

5 LA MESA EUCARÍSTICA Viernes 05 de octubre Sus padres iban cada año a Jerusalén, a la fiesta de pascua. Cuando el niño cumplió doce años, subieron a celebrar la fiesta según la costumbre (Lc 2, 41) Podemos ver la Sagrada Familia de Jesús, José y María, sentados en la mesa, compartiendo una comida. Como vemos el pan ácimo, las hierbas amargas, los rábanos y la copa de vino en la mesa ante ellos, podemos suponer que están celebrando la comida de la Pascua judía juntos... su fe era celebrada en su hogar. Su confianza en Dios era recordada en la mesa. La Sagrada Familia tiene un lugar en la mesa para nosotros, ellos nos invitan a acompañarles. No les son desconocidas las dificultades de la vida familiar, ellos mismos han sido refugiados, huyendo de la violencia de Herodes. Los rábanos y las hierbas amargas de la comida de la Pascua Judía, representan los sufrimientos y dificultades del Pueblo de Israel en su esclavitud, también representan para nosotros las dificultades y los sacrificios de paciencia y amor experimentados en cada familia. La presencia del pan ácimo y de la copa de vino en la mesa nos hace presente la Eucaristía. La presencia de Jesús en torno a la mesa, es la esperanza para cada familia, esperanza de alegría al tenerlo en medio de cada una de ellas, acompañándonos, sosteniéndonos, animándonos y regalándonos la plenitud de la vida. 1. Comentar los momentos buenos y malos vividos al interior de la familia. Agradecemos por ello. 2. Recordamos también a los que ya han partido al encuentro del Señor y agradecemos su paso por la vida de nuestra familia. 3. Motivémonos a regalarle al Señor un poco de nuestro tiempo familiar, compartiendo la Mesa Eucarística, llevando las intenciones familiares y agradeciendo por tanto bien recibido.